01.caballo 29-3es
01.caballo 29-3es
01.caballo 29-3es
net/publication/357164782
CITATIONS READS
0 126
15 authors, including:
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
Evaluation and intervention programs based on CBT principles for people with social anxiety View project
All content following this page was uploaded by Vicente E Caballo on 19 December 2021.
Resumen
El trastorno de ansiedad social (TAS) es uno de los trastornos más frecuentes
a nivel mundial. El objetivo de este estudio fue comprobar la eficacia del nuevo
programa “Intervención multidimensional para la ansiedad social” (IMAS) para el
tratamiento del TAS. Participaron 67 personas diagnosticadas con TAS, según el
DSM-5, evaluadas mediante una entrevista semiestructurada (Salazar y Caballo,
2018) y dos medidas de autoinforme para la ansiedad social, el CASO (Caballo,
Salazar, Arias, et al., 2010) y la LSAS-SR (Liebowitz, 1987). Diferentes terapeutas
llevaron a cabo el tratamiento en Ecuador, España, Paraguay y Puerto Rico. Los
resultados mostraron importantes mejoras del pretratamiento al postratamiento,
que se mantenían a los seis meses. El tamaño del efecto estaba entre 1 y 2 y, en
muchas ocasiones, fue superior a 2. Aunque se comparó con un grupo de terapia
cognitivo conductual y otro de tratamiento farmacológico, con resultados
favorables para el programa IMAS, el bajo número de sujetos de estos últimos
grupos no permite llegar a deducciones claras. En conclusión, este nuevo programa
para el tratamiento de la ansiedad social parece altamente eficaz a corto y medio
plazo y sus resultados positivos parecen generalizables a diferentes países.
PALABRAS CLAVE: trastorno de ansiedad social, fobia social, tratamiento cognitivo
conductual, programa IMAS, terapia, eficacia, tamaño del efecto.
Este estudio es parte del proyecto I+D+i con referencia RTI2018-093916-B-I00, financiado por MCIN/
AEI/10.13039/501100011033/ y FEDER “Una manera de hacer Europa”. Se reconoce también la ayuda
de la Fundación para el Avance de la Psicología Clínica Conductual (FUNVECA).
El Equipo de investigación IMAS, coautor de este estudio, está compuesto por los siguientes
investigadores: Susana del Moral Bernal, Paula Herrera Giner y Ángel Royuela del Servicio de Psiquiatría
de Palencia, SACYL (España).
Correspondencia: Isabel C. Salazar, Dpto. de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico,
Facultad de Psicología, Universidad de Granada, Granada (España). E-mail: salazar_isabel@hotmail.com
518 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
Abstract
Social anxiety disorder (SAD) is one of the most prevalent disorders
worldwide. The goal of this study was to test the effectiveness of the new program
"Multidimensional Intervention for Social Anxiety" (MISA) for the treatment of
SAD. Sixty-seven people diagnosed with SAD, according to the DSM-5, participated
in this study, and they were assessed by means of a semi-structured interview
(Salazar & Caballo, 2018) and two self-report measures for social anxiety, the SAQ
(Caballo, Salazar, Arias, et al., 2010) and the LSAS-SR (Liebowitz, 1987). Different
therapists delivered the treatment in Ecuador, Spain, Paraguay, and Puerto Rico.
The results showed significant improvements from pre-treatment to post-
treatment, which were maintained at six months. The effect size was between 1
and 2 and, on many occasions, was greater than 2. Although it was compared with
a cognitive behavioral therapy group and a pharmacological treatment group, with
favorable results for the MISA program, the low number of subjects in the latter
groups does not allow clear deductions to be made. In conclusion, this new
program for the treatment of social anxiety seems highly effective in the short and
medium term and its positive results seem generalizable to different countries.
KEY WORDS: social anxiety disorder, social phobia, cognitive-behavioral treatment,
MISA program, therapy, effectiveness, effect size.
Introducción
En los últimos años se han venido acumulando pruebas sobre las denominadas
“terapias de tercera generación” o “de nueva ola” para el TAS, especialmente las
intervenciones basadas en la atención plena y la aceptación, tales como la terapia
de reducción del estrés basada en la atención plena (Mindfulness-based stress
reduction, MBSR; Kabat-Zinn, 1990), la terapia cognitiva basada en la atención plena
(Mindfulness-based cognitive therapy, MBCT; Segal, Williams y Teasdale, 2002), la
terapia de aceptación y compromiso (Acceptance and commitment therapy, ACT;
Hayes, Strosahl y Wilson, 1999) y la terapia de grupo basada en la atención plena y
la aceptación (Mindfulness and acceptance-based group therapy, MAGT; Kocovski,
Fleming y Rector, 2009). Los estudios que han evaluado la eficacia de estas terapias
han mostrado resultados prometedores, aunque parece que aún hay un largo
camino para llegar a ser consideradas como terapias bien establecidas.
Norton et al. (2015) realizaron una revisión que incluía nueve estudios sobre las
terapias basadas en la atención plena y observaron una reducción de los síntomas,
pero vieron que el beneficio obtenido era similar a, y algunas veces menor que, la
TCC. En concreto, la MBSR (tres estudios) mostró mejoras significativas en el postest
(con tamaños del efecto d= 0,59, η2= 0,41-0,75 y d= 0,66-1,54, respectivamente);
sólo en el segundo estudio se informó de las mejoras que se mantenían en el
seguimiento (η2= 0,58-0,68); y únicamente en el tercer estudio se comparó con otro
tratamiento (TCCG) y se informó que la MBSR fue significativamente menos eficaz
que la TCCG (d= 0,28-0,84). La MBCT (dos estudios) mostró mejoras significativas
con tamaños del efecto de pequeños a grandes en el postratamiento (d= 0,32-0,85
y d= 0,77, respectivamente) y de medios a grandes en el seguimiento (d= 0,65-1,30
y d= 1,42, respectivamente). El segundo de los estudios, que comparaba esta
intervención con la TCCG, informó que no había diferencias significativas entre
ambos grupos. La ACT (dos estudios) mostró resultados significativos en cuanto a la
reducción de los síntomas de ansiedad social en el postratamiento, con tamaños del
efecto grandes y medios (d= 0,72-1,24 y d= 0,57, respectivamente) y grandes y
pequeños en el seguimiento (d= 1,22-1,61 y d= 0,19, respectivamente), Sin
embargo, no tenían otras condiciones con las qué comparar los resultados. La MAGT
(dos estudios) mostró mejoras significativas en la ansiedad social, con tamaños del
efecto medios en el postratamiento (d= 0,65-0,75 y d= 0,62, respectivamente) y
grandes y pequeños en el seguimiento (d= 1,00-1,19 y d= 0,37, respectivamente).
En este segundo trabajo, se compararon los resultados con la TCCG sin hallar
diferencias significativas.
Liu et al. (2021) publicaron un metaanálisis con 11 ensayos aleatorizados y
cuatro estudios sobre las intervenciones basadas en atención plena para el TAS.
Utilizaron la g de Hedges para calcular el tamaño del efecto, considerando para su
interpretación los valores mencionados en la revisión anterior para la d de Cohen.
Los resultados muestran un cambio significativo con un tamaño del efecto grande
en la sintomatología del TAS después de las intervenciones basadas en atención
plena (g= 1,20; IC 95% [0,92-1,48]), pero el análisis entre grupos muestra que es
equivalente a las condiciones de control (que incluía TCCG, lista de espera o ejercicio
aeróbico) (g= 0,00; IC 95% [-0,31-0,30]). En concreto, el análisis de subgrupos
reveló que las intervenciones basadas en atención plena (MBI) eran superiores al
compararlas con la condición de grupo sin tratamiento (g= 0,89; IC del 95% [0,53-
522 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
1,26]) (5 ensayos), mientras que dos ensayos mostraron que las MBI eran
equivalentes a otras condiciones de tratamiento activo (g= 0,19; IC 95% [0,67 a
1,04]). Seis ensayos mostraron que las MBI eran significativamente más débiles que
la TCC (g= 0,29; IC del 95% [0,10 a 0,48). Para terminar con este trabajo de
metaanálisis, señalar que la forma en que los autores han comunicado sus resultados
parece un tanto confusa y poco sistemática.
García-Pérez y Valdivia-Salas (2018) hicieron una revisión sobre la eficacia de la
ACT en el TAS incluyendo ocho estudios, de los cuales tres mostraron que la ACT
reducía los síntomas de la ansiedad social y en cinco ensayos controlados la ACT se
mostraba igual de eficaz que la TCC en el postratamiento y el seguimiento.
Los programas basados en la atención plena y la aceptación se han propuesto
como tratamientos independientes plausibles, pero también como componentes
aditivos dentro de un tratamiento con enfoque cognitivo conductual. Esto último
constituye un planteamiento interesante en cuanto proporciona nuevas vías de
tratamiento de los factores de mantenimiento del trastorno.
No quisiéramos terminar esta revisión sobre la eficacia de los tratamientos para
la ansiedad social sin comentar, brevemente, la opción de la terapia farmacológica.
Esta opción se recomienda cuando el paciente presenta síntomas de ansiedad de
moderados a graves (Keeton y Crosby Budinger, 2012) o cuando la persona no
quiere llevar a cabo un tratamiento psicológico. Hay estudios que indican que los
efectos de los psicofármacos en el TAS van de pequeños a medianos y aunque la
reducción de los síntomas tiene efectos sobre la calidad de vida, se requerirían
estudios para evaluar los mecanismos de acción de la farmacoterapia y establecer si
hay o no realmente diferencias entre las distintas clases de psicofármacos (Davis,
Smits y Hofmann, 2014). Curtiss, Andrews, Davis, Smits y Hofmann (2017) revisaron
52 ensayos y encontraron un tamaño del efecto de pequeño a grande en la eficacia
de los psicofármacos sobre los síntomas de la ansiedad social (g de Hedges= 0,41)
en comparación con el placebo. Según las clases de psicofármacos, los inhibidores
selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS) y los inhibidores de la
monoaminoxidasa (IMAO) fueron los más eficaces (g= 0,44 IC 95% [0,37-0,51] y g=
0,36, IC 95% [0,21-0,51], respectivamente).
Williams et al. (2020) llevaron a cabo un metaanálisis con 67 ensayos
aleatorizados y sus resultados indican que los ISRS tuvieron una mejor respuesta al
tratamiento comparados con el placebo. La paroxetina, en concreto, fue la más
eficaz en la reducción de la gravedad de los síntomas comparada con el placebo y,
por este motivo, la recomiendan como primera línea de tratamiento para el TAS, así
como, en general, los ISRS. No obstante, estos resultados se basan en pruebas
consideradas de baja calidad.
Teniendo claro el estado de la cuestión de los tratamientos existentes para el
TAS y las demostradas pruebas sobre su eficacia, queda una última cuestión por
abordar: la naturaleza multidimensional de la ansiedad social. La infrecuente
consideración de este aspecto resulta sorprendente, especialmente dada la amplia
evidencia empírica que la apoya. Basta con revisar la literatura sobre la evaluación
del trastorno, particularmente los estudios sobre los diversos instrumentos de
autoinforme (cuestionarios, escalas, inventarios) empleados para medir el TAS. Este
ha sido un largo camino si tenemos en cuenta que, desde que se analizaron las
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 523
Método
Participantes
Instrumentos
Las medidas de evaluación fueron las mismas para todos los participantes en el
estudio. Se siguió un protocolo de evaluación que incluía una entrevista
semiestructurada y una batería de cuestionarios, aunque a continuación se describen
los instrumentos empleados para evaluar características relativas a la ansiedad social:
a) “Entrevista clínica semiestructurada para la ansiedad social” (ECSAS) (Salazar y
Caballo, 2018). Este instrumento permite hacer una evaluación detallada del
TAS (y tener un cierto conocimiento de otros problemas psicológicos y médicos,
así como del consumo de drogas). La duración de la entrevista es de una hora y
media aproximadamente. El instrumento tiene el valor añadido de que puede
emplearse como entrevista diagnóstica, dado que incluye preguntas que
permiten identificar cuáles de los criterios diagnósticos para el TAS, según el
DSM-5 (APA, 2013), cumplen los pacientes. La ECSAS está formada por 11
apartados generales y cinco secciones específicas para evaluar las cinco
dimensiones de la ansiedad social (Caballo et al., 2012, 2015; Caballo, Salazar,
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 525
Procedimiento
entrevista (con la ayuda de los cuestionarios) para seleccionar a los pacientes que
participarían en los grupos de tratamiento. Los sujetos que acudieron
voluntariamente para el tratamiento de la ansiedad social debían tener el
diagnóstico de trastorno de ansiedad social (TAS) o fobia social como su problema
principal. Además, trastornos comórbidos excluyentes eran el tener un trastorno del
espectro de la esquizofrenia u otros trastornos psicóticos, un trastorno bipolar, un
trastorno límite de la personalidad o un trastorno por consumo de sustancias
psicoactivas. El máximo número de personas permitidas por grupo era de 10
pacientes y la edad mínima para participar era de 18 años, sin límite superior. Se
animaba que hubiera pacientes de ambos sexos, aunque no era un requisito para
formar el grupo. Todos los participantes en este estudio fueron pacientes que
acudieron voluntariamente a tratamiento y que el único beneficio que pretendían
lograr era mejorar su problema de ansiedad social. No hubo pagos por participar en
la investigación.
GRUPOS DE TRATAMIENTO
Aunque el objetivo principal del estudio era comprobar la eficacia del nuevo
programa IMAS para el tratamiento de la ansiedad social, decidimos incluir otros
tratamientos que abordasen también la intervención en ansiedad social, a pesar de
las limitaciones que impuso el escaso tiempo de la convocatoria que hicimos. Así,
conseguimos cinco grupos que aplicaron el IMAS (dos en Ecuador, dos en Paraguay
y uno en España), un grupo que utilizó la TCC (Paraguay) y un grupo de terapia
farmacológica (España). Ambos grupos de tratamiento de comparación estaban
compuestos de pacientes con tratamiento individual, pero los consideramos a todos
como un solo grupo.
El grupo IMAS recibió una intervención psicológica desarrollada recientemente
(Caballo, Salazar y Garrido, 2018; Caballo, Salazar, Garrido, et al., 2018) y es la
primera vez que se evalúan los resultados de su aplicación en pacientes con ansiedad
social. En el siguiente apartado se especifican algunas características de dicho
programa.
El grupo de la TCC individual fue aplicado por una psicóloga con experiencia
clínica, siguiendo el modelo de Hofmann (2007) y Hofmann y Otto (2008). Los
componentes de este tratamiento fueron: 1) psicoeducación sobre el trastorno, 2)
modificación de la atención y de la situación, 3) reestructuración cognitiva y 4)
exposición y aceptación (aceptación incondicional de la realidad). Además, se añadió
un componente del protocolo de Clark y Wells (1995) referido a la modificación del
procesamiento problemático anterior y posterior al evento. La media de sesiones fue
de 16 (4 meses), con una duración de 50 minutos cada una y con una frecuencia
semanal. Se hicieron cuatro sesiones de seguimiento cada dos semanas. En dos
casos, fueron necesarias cinco sesiones adicionales de seguimiento (una al mes).
El grupo de terapia farmacológica fue aplicado por psiquiatras en un hospital
público de España y se utilizó una combinación de psicofármacos. Todos los
pacientes, excepto uno, estaban tomando previamente algún tipo de psicofármaco.
Se realizó la evaluación inicial al comienzo del tratamiento farmacológico específico
para la ansiedad social y la segunda evaluación se realizó a los 4,8 meses de media
528 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
Análisis de datos
𝑀𝑀𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝 −𝑀𝑀𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝
𝑑𝑑 = (𝐷𝐷𝐷𝐷𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝+ 𝐷𝐷𝐷𝐷𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝𝑝) ; 𝑟𝑟 = 𝑍𝑍⁄√𝑁𝑁
�
2
Resultados
Tabla 1
Diferencias pre/postratamiento del grupo IMAS (N= 45) en el “Cuestionario de ansiedad
social para adultos” (CASO)
Figura 1
Distribución de las puntuaciones CASO antes, después y a los seis meses
(seguimiento) del tratamiento
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 531
Dado que el CASO tiene puntos de corte diferentes para hombres y mujeres en
la mayoría de las dimensiones, hicimos análisis separados por sexo. En la tabla 2 se
presentan las medias y desviaciones típicas de las puntuaciones en el CASO de
hombres y mujeres antes y después haber terminado el tratamiento con el programa
IMAS. El número de hombres con medidas pretratamiento era de 17 y el de mujeres
de 28. No había diferencias significativas entre ellos en las puntuaciones
pretratamiento en ninguna de las dimensiones del CASO ni en la puntuación global
del mismo. Este mismo número de hombres y mujeres respondieron a las medidas
postratamiento.
Todas las diferencias pre/postratamiento son estadísticamente significativas,
con una ansiedad social en el postratamiento notablemente inferior a las
puntuaciones obtenidas antes del tratamiento. Estos resultados eran respaldados
tanto en análisis con la t de Student (hombres [p< 0,001]; mujeres [p< 0, 001]) como
con la prueba de rangos de Wilcoxon (hombres [p< 0,01]; mujeres [p< 0,01]).
Mientras que en la evaluación pretratamiento las medias de todas las dimensiones y
la puntuación total del CASO se situaban por encima del punto de corte, en la
evaluación postratamiento todas esas puntuaciones habían caído, de forma
importante, por debajo del punto de corte tanto en mujeres como en hombres.
Quisimos también hallar la magnitud o el tamaño del efecto de las diferencias
pre/postratamiento para averiguar hasta qué punto el programa IMAS había sido
eficaz para disminuir el nivel de ansiedad social de los participantes (tabla 2). En
todas las dimensiones y en la puntuación total, el tamaño del efecto fue grande (d>
0,8), siendo habitualmente superior a 1,3 (muy grande) y llegando incluso a ser
superior a 2 en algunas dimensiones y en la puntuación total (mujeres). Los análisis
no paramétricos dieron resultados análogos, con magnitudes del efecto grandes en
todos los casos (r> 0,50).
Tabla 2
Diferencias pre/postratamiento en hombres (n=17) y en mujeres (n= 28) del grupo IMAS en
el “Cuestionario de ansiedad social para adultos” (CASO)
Si bien los resultados por sexo fueron consistentes con los del grupo completo
(tabla 1), se observaron diferencias en el tamaño del efecto entre hombres y mujeres,
de magnitud variable, dependiendo de la dimensión analizada. Sin embargo, tras
estimar los modelos de trayectorias (path models) de interacción en todas las
dimensiones, los coeficientes de regresión del término de interacción resultaron en
todos los casos no significativos (p> 0,05). Como ejemplo, la figura 2 muestra las
medias de la puntuación general del CASO en hombres y mujeres, antes y después
del tratamiento. Aparentemente se da un ligero efecto de interacción que, sin
embargo, resulta no significativo (Λ= -0,26; p= 0,53).
Figura 2
Medias de las puntuaciones en el CASO según el sexo antes y después del tratamiento
130
120 Hombres
Mujeres
110
100
CASO
90
80
70
60
Pretratamiento Postratamiento
Tabla 3
Diferencias pre/postratamiento del grupo IMAS (N= 44) en la “Escala de ansiedad social de
Liebowitz – versión de autoinforme” (LSAS-SR)
Tabla 4
Diferencias pre/postratamiento (N= 44) en el grupo IMAS en las cinco dimensiones de la
ansiedad social evaluadas con la “Entrevista semiestructurada para la ansiedad social”
(ECSAS)
Uno de los objetivos del programa era averiguar si las mejoras logradas por el
programa IMAS se mantenían un cierto tiempo después de terminado el mismo.
Para ello se programaron evaluaciones de seguimiento a los 6 meses. La tabla 5
muestra los resultados del análisis para el grupo completo (N= 25). Los pacientes
siguieron mejorando a los seis meses del tratamiento en todas las dimensiones del
CASO y en la puntuación total, pero sólo en la dimensión Interacción con
desconocidos la mejora fue estadísticamente significativa (p< 0,05). Este resultado
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 535
Tabla 5
Diferencias postratamiento/seguimiento a los seis meses (N= 25) en el grupo IMAS en el
“Cuestionario de ansiedad social para adultos” (CASO)
La tabla 6 muestra los resultados del mismo análisis en función del sexo. Tanto
los hombres como las mujeres mejoraron en prácticamente todos los casos a los seis
meses de terminado el tratamiento, aunque las diferencias no fueron
estadísticamente significativas (p> 0,05) al compararlas con sus puntuaciones justo
al terminar el tratamiento. Estos resultados se daban tanto en análisis con la t de
Student como con la prueba de rangos de Wilcoxon en ambos sexos. Sólo en la
dimensión Interacción con desconocidos la mejora de las mujeres fue
estadísticamente significativa (p< 0,05), con puntuaciones menores en la dimensión
después de seis meses de terminado el tratamiento. Esta diferencia no fue
refrendada por el contraste no paramétrico (p= 0,07). En todo caso, el tamaño de
dicha diferencia fue pequeña en mujeres (d= 0,44).
Además, en la evaluación de seguimiento a los seis meses las medias de todas
las dimensiones y la puntuación total del CASO se mantenían por debajo del punto
de corte tanto en mujeres como en hombres, excepto en el caso de estos últimos en
la dimensión de Interacción con el sexo opuesto, que puntuaban 0,20 por encima
de dicho punto de corte (20), aunque su puntuación había disminuido desde el
postratamiento hasta el seguimiento.
536 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
Tabla 6
Diferencias postratamiento/seguimiento en mujeres (n= 15) y en hombres (n= 10) del grupo
IMAS a los seis meses en el “Cuestionario de ansiedad social para adultos” (CASO)
Tabla 7
Diferencias postratamiento/seguimiento del grupo IMAS (N= 24) en la “Escala de ansiedad
social de Liebowitz – versión de autoinforme” (LSAS-SR)
Aunque con las consiguientes precauciones sobre estos resultados por el bajo
número de sujetos del grupo TCC individual (N= 7), los hallazgos obtenidos para
este grupo por medio de la prueba de rangos de Wilcoxon indicaban una mejora
significativa de la ansiedad social en el postratamiento con respecto a las
puntuaciones en el pretratamiento en todas las dimensiones del CASO (p< 0,05) así
como de forma global (p< 0,05). Estas mejoras se confirmaban con la LSAS-SR, en
la que las puntuaciones en el postratamiento eran significativamente inferiores (p<
0,05) en las subescalas de Ansiedad, Evitación y en el total. Las puntuaciones de la
entrevista seguían confirmando esta mejoría, ya que la ansiedad disminuía en todas
las dimensiones de la ansiedad social de forma significativa (p< 0,05), excepto en las
faceta de “Evitación” en las dimensiones 1, 2, 3, 4 y subdimensión 5b, en la faceta
“Ansiedad” en las dimensiones 3 y 4 y en la faceta “Interferencia” en la dimensión
4. Cuando consideramos el tamaño del efecto de las diferencias pre/postratamiento,
encontramos que en todas las dimensiones y en la puntuación total del CASO el
tamaño del efecto fue grande (r> 0,5). En las subescalas y en la puntuación total de
la LSAS-SR, el tamaño del efecto fue también grande (r> 0,5), así como en las
dimensiones de la ansiedad social y sus facetas medidas por la entrevista (ECSAS),
excepto en la faceta “Evitación” de la subdimensión 5b, que fue mediano (0,3> r<
0,5).
Los hallazgos en este grupo deben considerarse con las mismas precauciones
que en el caso del grupo de TCC individual debido al bajo número de pacientes
participantes (N= 5). Los resultados obtenidos para este grupo por medio de la
prueba de rangos de Wilcoxon indicaban una mejora de la ansiedad social en el
postratamiento con respecto a las puntuaciones en el pretratamiento en
prácticamente todas las variables evaluadas. Sin embargo, sólo en dos de las cinco
dimensiones del CASO, específicamente Quedar en evidencia/Hacer el ridículo y
Hablar en público/Interacción con personas de autoridad esas diferencias eran
significativas (p< 0,05). Dichas diferencias no eran confirmadas con los resultados
de la entrevista, donde no se encontraron diferencias significativas
pre/postratamiento en ninguna de las dimensiones ni en sus facetas. Tampoco la
LSAS-SR reflejaba diferencias significativas pre/postratamiento. Cuando
consideramos el tamaño del efecto de las dos dimensiones anteriores en las que las
diferencias eran estadísticamente significativas, dicho tamaño del efecto era grande
(r> 0,5).
No había diferencias pretratamiento entre los pacientes del grupo IMAS y los
de los otros dos grupos de intervención (TCC individual, tratamiento farmacológico)
en ninguno de los cuestionarios que evaluaban ansiedad social (CASO y LSAS-SR),
excepto en la dimensión 4 del CASO (Quedar en evidencia o en ridículo) entre el
538 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
grupo IMAS y el grupo de tratamiento farmacológico (p< 0,05), puntuando más alto
en ansiedad este último (p< 0,05). En los 32 apartados de la entrevista (ECSAS), sólo
encontramos diferencias significativas (p< 0,05) entre el grupo IMAS y el grupo de
TCC individual en dos de ellos, los dos relativos a la dimensión 1, Interacción con
desconocidos, en las facetas de “Ansiedad” (puntuaba más alto el grupo de TCC
individual) e “Interferencia” (puntuaba más alto el grupo IMAS). Entre el grupo IMAS
y el grupo de terapia farmacológica solo había diferencias en dos facetas (p< 0,5),
uno en la de “Interferencia” de la dimensión 1, Interacción con desconocidos y otro
en la de “Evitación”, en la dimensión 5, Hablar en público. Dado que esas diferencias
no eran estables (no se confirmaban con el cuestionario y con la entrevista) y dado
que a nivel de cada dimensión global no había diferencias significativas en ningún
caso, no tuvimos en cuenta esas diferencias pretratamiento. Por el contrario, si había
diferencias significativas en la edad de los participantes entre el grupo de
tratamiento farmacológico y los otros dos grupos (IMAS, TCC individual), siendo la
media de edad del primer grupo superior a la de los sujetos de los otros dos (p<
0,05).
Con respecto a las diferencias entre el IMAS y los otros dos grupos (TCC
individual, tratamiento farmacológico) en el postratamiento, tenemos que
considerar los resultados con precaución, como ya hemos venido insistiendo, dado
el bajo número de pacientes de estos dos últimos grupos. En el caso de las
diferencias entre el grupo IMAS y el grupo TCC individual, este último grupo
mantenía niveles de ansiedad superiores (U de Mann-Whitney) en las dos medidas
de autoinforme de ansiedad social (CASO y LSAS-SR) después del tratamiento. No
obstante, esas diferencias sólo eran significativas (p< 0,05) en las dimensiones del
CASO, Interacción con desconocidos y Hablar en público/Interacción con personas
de autoridad, así como en la puntuación total del CASO. Dichas diferencias se
confirmaban con la entrevista (ECSAS), en la que había diferencias significativas (p<
0,05) en todas las dimensiones, excepto en la subdimensión Hablar en público,
aunque sí en la subdimensión asociada Interacción con personas de autoridad. La
diferencia también era significativa en la puntuación total de la entrevista (p< 0,05).
En todos los casos, las puntuaciones del grupo TCC individual en ansiedad social
eran superiores a las puntuaciones del grupo IMAS. El tamaño del efecto de esas
diferencias, en todos los casos, era mediano (0,3> r< 0,5) (véase tabla 8).
En el caso de las diferencias entre el grupo IMAS y el grupo de terapia
farmacológica, este último grupo mantenía niveles de ansiedad superiores en las dos
medidas de autoinforme de ansiedad social (CASO y LSAS-SR) después del
tratamiento, así como en casi todas las dimensiones y facetas de la entrevista. No
obstante, sólo eran significativas (U de Mann-Whitney) en las dimensiones Expresión
asertiva de molestia, desagrado o enfado (p< 0,05), Quedar en evidencia/Hacer el
ridículo (p< 0,01) y Hablar en público/Interacción con personas de autoridad (p<
0,05), así como en la puntuación total del CASO (tabla 9). Aunque estas diferencias
en el postratamiento se confirmaban por la entrevista, con puntuaciones superiores
en el grupo de terapia farmacológica en casi todas las facetas, sólo en algunas
llegaban a ser significativas, como en varias facetas de las dimensiones de Quedar
en evidencia/Hacer el ridículo (“Evitación” y “Malestar”) (p< 0,05), de la
subdimensión Hablar en público (“Evitación”) (p< 0,05) y de la subdimensión
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 539
Tabla 8
Medias y desviaciones típicas en el postratamiento entre el grupo IMAS (n= 45) y el grupo
TCC individual (n= 7) en el CASO y en la LSAS-SR y comparación no paramétrica (U de
Mann-Whitney) de las diferencias entre estos dos grupos
Tabla 9
Medias y desviaciones típicas en el postratamiento entre el grupo IMAS (n= 45) y el grupo
de tratamiento farmacológico (n= 5) en el CASO y en la LSAS-SR y comparación no
paramétrica (U de Mann-Whitney) de las diferencias entre estos dos grupos
Discusión
Referencias
Acarturk, C., Cuijpers, P., van Straten, A. y de Graaf, R. (2009). Psychological treatment of
social anxiety disorder: a meta-analysis. Psychological Medicine, 39(2), 241-254. doi:
10.1017/S0033291708003590
544 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
Aderka, I. M. (2009). Factors affecting treatment efficacy in social phobia: the use of video
feedback and individual vs. group formats. Journal of Anxiety Disorders, 23(1), 12-17.
doi: 10.1016/j.janxdis.2008.05.003
Ahn, J. K. y Kwon, J. H. (2018). Modifying negative self-imagery increases the effectiveness
of cognitive behavior therapy for social anxiety disorder: a benchmarking study.
Cognitive Therapy and Research, 42(5), 598-611. doi: 10.1007/s10608-018-9918-5
Alden, L. E., Buhr, K., Robichaud, M., Trew, J. L. y Plasencia, M. L. (2018). Treatment of social
approach processes in adults with social anxiety disorder. Journal of Consulting and
Clinical Psychology, 86(6), 505-517. doi: 10.1037/ccp0000306
American Psychiatric Association (2013). Diagnostic and statistical manual of mental
disorders, 5ª ed. (DSM-5). Arlington, VA: Autor.
Barkowski, S., Schwartze, D., Strauss, B., Burlingame, G. M., Barth, J. y Rosendahl, J. (2016).
Efficacy of group psychotherapy for social anxiety disorder: a meta-analysis of
randomized-controlled trials. Journal of Anxiety Disorders, 39, 44-64. doi:
10.1016/j.janxdis.2016.02.005
Caballo, V. E., Arias, B., Salazar, I. C., Irurtia, M. J., Hofmann, S. G. y CISO-A Research Team
(2015). Psychometric properties of an innovative self-report measure: the Social Anxiety
Questionnaire for Adults. Psychological Assessment, 27(3), 997-1012. doi:
10.1037/a0038828
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Arias, V., Hofmann, S. G., Curtiss, J. y CISO-A Research Team
(2019). Psychometric properties of the Liebowitz Social Anxiety Scale in a large cross-
cultural Spanish and Portuguese speaking sample. Brazilian Journal of Psychiatry, 41(2),
122-130. doi: 10.1590/1516-4446-2018-0006
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Arias, B., Irurtia, M. J., Calderero, M. y CISO-A España, Equipo
de Investigación (2010). Validación del “Cuestionario de ansiedad social para adultos”
(CASO-A30) en universitarios españoles: similitudes y diferencias entre carreras
universitarias y comunidades autónomas. Behavioral Psychology/Psicología Conductual,
18(1), 5-34.
Caballo, V. E., Salazar, I. C. y Garrido, L. (2018). Programa de Intervención multidimensional
para la ansiedad social (IMAS): libro del paciente. Madrid: Pirámide.
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Garrido, L., Irurtia, M. J. y Hofmann, S. H. (2018). Programa de
Intervención multidimensional para la ansiedad social (IMAS): libro del terapeuta.
Madrid: Pirámide.
Caballo, V. E., Salazar, I. C. y Hofmann, S. G. (2019). A new Multidimensional Intervention
for Social Anxiety: the MISA program. Behavioral Psychology/Psicología Conductual,
27(1), 149-172.
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Irurtia, M. J., Arias, B., Hofmann, S. G. y CISO-A Research Team
(2008). Social anxiety in 18 nations: sex and age differences. Behavioral
Psychology/Psicología Conductual, 16(2), 163-187.
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Irurtia, M. J., Arias, B., Hofmann, S. G. y CISO-A Research Team
(2010). Measuring social anxiety in 11 countries: development and validation of the
Social Anxiety Questionnaire for Adults. European Journal of Psychological Assessment,
26(2), 95-107. doi: 10.1027/1015-5759/a000014
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Irurtia, M. J., Arias, B., Hofmann, S. G. y CISO-A Research Team
(2012). The multidimensional nature and multicultural validity of a new measure of
social anxiety: the Social Anxiety Questionnaire for Adults. Behavior Therapy, 43(2), 313-
328. doi: 10.1016/j.beth.2011.07.001
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Irurtia, M. J., Arias, B. y Nobre, L. (2013). The assessment of social
anxiety through five self-report measures, LSAS-SR, SPAI, SPIN, SPS, and SIAS: a critical
analysis of their factor structure. Behavioral Psychology/Psicología Conductual, 21(3),
423-448.
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 545
Caballo, V. E., Salazar, I. C., Olivares, P., Irurtia, M. J., Olivares, J. y Toledo, R. (2014). Assessing
social skills: the factorial structure and other psychometric properties of four self-report
measures. Behavioral Psychology/Psicología Conductual, 22(3), 375-399.
Clark, D. M. y Wells, A. (1995). A cognitive model of social phobia. En R. G. Heimberg, M. R.
Liebowitz, D. A. Hope y F. R. Schneier (dirs.), Social phobia: diagnosis, assessment, and
treatment (pp. 69-93). Nueva York, NY: Guilford.
Curtiss, J., Andrews, L., Davis, M., Smits, J. y Hofmann, S. G. (2017). A meta-analysis of
pharmacotherapy for social anxiety disorder: an examination of efficacy, moderators,
and mediators. Expert Opinion on Pharmacotherapy, 18(3), 243-251. doi:
10.1080/14656566.2017.1285907
Davis, M. L., Smits, J. A. J. y Hofmann, S. G. (2014). Update on the efficacy of
pharmacotherapy for social anxiety disorder: a meta-analysis. Expert Opinion on
Pharmacotherapy, 15(16), 2281-2291. doi: 10.1517/14656566.2014.955472
Fedoroff, I. C. y Taylor, S. (2001). Psychological and pharmacological treatments of social
phobia: a meta-analysis. Journal of Clinical Psychopharmacology, 21(3), 311-324. doi:
10.1097/00004714-200106000-00011
Feske, U. y Chambless, D. L. (1995). Cognitive behavioral versus exposure only treatment for
social phobia: a meta-analysis. Behavior Therapy, 26(4), 695-720. doi: 10.1016/S0005-
7894(05)80040-1
García-Pérez, L. y Valdivia-Salas, S. (2018). Intervención en el trastorno de ansiedad social a
través de la terapia de aceptación y compromiso: una revisión sistemática. Behavioral
Psychology/Psicología Conductual, 26(2), 379-392.
González, M. P., Bobes, J., García, M., Badía, X., Luque, A. y Dal-Ré, R. (1998). Assessing
social phobia. The Spanish validation of the gold standard clinical scales: the LSAS and
the SADS. European Neuropsychopharmacology, 8(8, supl. 2), 259-260. doi:
10.1016/S0924-977X(98)80471-9
Gureje, O., Adeyemi, O., Enyidah, N., Ekpo, M., Udofia, O., Uwakwe, R. y Wakil, A. (2008).
Mental disorder among adult Nigerians: risks, prevalence, and treatment. En R. C.
Kessler y T. B. Üstün (dirs.), The WHO Mental Health Surveys: global perspectives on the
epidemiology of mental disorders (pp. 211-237). Nueva York, NY: Cambridge University.
Hayes, A. F. (2017). Introduction to mediation, moderation, and conditional process analysis:
A regression-based approach. Nueva York, NY: Guilford.
Hayes, S., Strosahl, K. y Wilson, K. (1999). Acceptance and commitment therapy: an
experimental approach to behavior change. Nueva York, NY: Guilford.
Hofmann, S. G. (2007). Cognitive factors that maintain social anxiety disorder: A
comprehensive model and its treatment implications. Cognitive Behaviour Therapy, 36,
195-209. doi: 10.1080/16506070701421313
Hofmann, S. G. y Otto, M. W. (2008). Cognitive-behavioral therapy for social anxiety disorder:
evidence-based and disorder-specific treatment techniques. Nueva York, NY: Routledge.
Hofmann, S. G., Sawyer, A. T. y Fang, A. (2010). The empirical status of the “new wave” of
CBT. The Psychiatric Clinics of North America, 33(3), 701-710. doi:
10.1016/j.psc.2010.04.006
Kabat-Zinn, J. (1990). Full catastrophe living: using the wisdom of your body and mind to face
stress, pain, and illness. Nueva York, NY: Delacorte.
Keeton, C. P. y Crosby Budinger, M. (2012). Social phobia and selective mutism. Child and
Adolescent Psychiatric Clinics of North America, 21(3), 621-641. doi:
10.1016/j.chc.2012.05.009
Kessler, R. C., Berglund, P. A., Chiu, W.-T., Demler, O., Glantz, M., Lane, M. C., Jin, R.,
Merikangas, K. R., Nock, M., Olfson, M., Pincus, H. A., Walters, E. E., Wang, P. S. y
Wells, K. B. (2008). The National Comorbidity Survey Replication (NCS-R): cornerstone
in improving mental health and mental health care in the United States. En R. C. Kessler
546 CABALLO, SALAZAR, CURTISS, GÓMEZ, ROSSITTO, COELLO… Y EQUIPO DE INVESTIGACIÓN IMAS
y T. B. Üstün (dirs.), The WHO Mental Health Surveys: global perspectives on the
epidemiology of mental disorders (pp. 165-209). Nueva York, NY: Cambridge University.
Kessler, R. C. y Üstün, T. B. (dirs.) (2008). The WHO Mental Health Surveys: global perspectives
on the epidemiology of mental disorders. Nueva York, NY: Cambridge University.
Kocovski, N., Fleming, J. y Rector, N. (2009). Mindfulness and acceptance-based group
therapy for social anxiety disorder: an open trial. Cognitive and Behavioral Practice,
16(3), 276-289. doi: 10.1016/j.cbpra.2008.12.004
Liebowitz, M. R. (1987). Social phobia. Modern Problems in Pharmacopsychiatry, 22, 141-
173. doi: 10.1159/000414022
Lipsey, M. W. y Wilson, D. B. (1993). The efficacy of psychological, educational, and
behavioral treatment. Confirmation from meta-analysis. The American Psychologist,
48(12), 1181-1209. doi: 10.1037//0003-066x.48.12.1181
Liu, X., Yi, P., Ma, L., Liu, W., Deng, W., Yang, X., Liang, M., Luo, J., Li, N. y Li, X. (2021).
Mindfulness-based interventions for social anxiety disorder: a systematic review and
meta-analysis. Psychiatry Research, 300, 113935. doi: 10.1016/j.psychres.2021.113935
Mayo-Wilson, E., Dias, S., Mavranezouli, I., Kew, K., Clark, D. M., Ades, A. E. y Pilling, S.
(2014). Psychological and pharmacological interventions for social anxiety disorder in
adults: a systematic review and network meta-analysis. The Lancet Psychiatry, 1(5), 368-
376. doi: 10.1016/S2215-0366(14)70329-3
Norton, A. R., Abbott, M. J., Norberg, M. M. y Hunt, C. (2015). A systematic review of
mindfulness and acceptance‐based treatments for social anxiety disorder. Journal of
Clinical Psychology, 71(4), 283-301. doi: 10.1002/jclp.22144
Olatunji, B. O. y Hollon, S. D. (2010). Preface: the current status of cognitive behavioral
therapy for psychiatric disorders. Psychiatric Clinics of North America, 33(3), 13-14. doi:
10.1016/j.psc.2010.04.015
Pelissolo, A. (2019). Trastornos de ansiedad y fóbicos. EMC - Tratado de Medicina, 23(2), 1-
8. doi: 10.1016/S1636-5410(19)41998-3
Ponniah, K. y Hollon, S. D. (2008). Empirically supported psychological interventions for social
phobia in adults: a qualitative review of randomized controlled trials. Psychological
Medicine, 38(1), 3-14. doi:10.1017/S0033291707000918
Powers, M. B., Sigmarsson, S. R. y Emmelkamp, P. M. G. (2008). A meta-analytic review of
psychological treatments for social anxiety disorder. International Journal of Cognitive
Therapy, 1(2), 94-113. doi: 10.1521/ijct.2008.1.2.94
Rytwinski, N. K., Fresco, D. M., Heimberg, R. G., Coles, M. E., Liebowitz, M. R., Cissell, S.,
Stein, M. B. y Hofmann, S. G. (2009). Screening for social anxiety disorder with the self-
report version of the Liebowitz Social Anxiety Scale. Depression and Anxiety, 26(1), 34-
38. doi: 10.1002/da.20503.
Salazar, I. C. y Caballo, V. E. (2018). Entrevista clínica semiestructurada para la ansiedad social
(ECSAS). En V. E. Caballo, I. C. Salazar y L. Garrido (dirs.), Programa de Intervención
multidimensional para la ansiedad social (IMAS): libro del terapeuta (pp. 359-387).
Madrid: Pirámide.
Schreiber, F., Heimlich, C., Schweitzer, C. y Stangier, U. (2015). Cognitive therapy for social
anxiety disorder: the impact of the ‘self-focused attention and safety behaviours
experiment’ on the course of treatment. Behavioural and Cognitive Psychotherapy, 43,
158-166. doi: 10.1017/S1352465813000672
Segal, Z., Williams, J. y Teasdale, J. (2002). Mindfulness-based cognitive therapy for
depression: a new approach to preventing relapse. Nueva York, NY: Guilford.
Society of Clinical Psychology, Division 12, American Psychological Association (s.f.).
Treatment: cognitive behavioral therapy for social anxiety disorder.
https://div12.org/treatment/cognitive-behavioral-therapy-for-social-anxiety-disorder/
Aplicación del programa IMAS: I. Eficacia del tratamiento 547
Stein, D. J., Lim, C. C. W., Roest, A. M. de Jonge, P., Aguilar-Gaxiola, S., Al-Hamzawi, A.,
Alonso, J., Benjet, C., Bromet, E. J., Bruffaerts, R., de Girolamo, G., Florescu, S., Gureje,
O., Haro, J. M., Harris, M. G., He, Y., Hinkov, H., Horiguchi, I., Hu, C. … WHO World
Mental Health Survey Collaborators (2017). The cross-national epidemiology of social
anxiety disorder: data from the World Mental Health Survey Initiative. BMC Medicine,
15, 143. doi: 10.1186/s12916-017-0889-2
Steinert, C., Stadter, K., Stark, R. y Leichsenring, F. (2017). The effects of waiting for
treatment: a meta-analysis of waitlist control groups in randomized controlled trials for
social anxiety disorder. Clinical Psychology & Psychotherapy, 24(3), 649-660. doi:
10.1002/cpp.2032
Taylor, S. (1996). Meta-analysis of cognitive-behavioral treatments for social phobia. Journal
of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, 27(1), 1-9. doi: 10.1016/0005-
7916(95)00058-5
Terra, M. B., Barros, H. M. T., Stein, A. T., Figueira, I., Athayde, L. D., Gonçalves, M. de S.,
Tergolina, L. P., Rovani, J. S. y da Silveira, D. X. (2006). Internal consistency and factor
structure of the Portuguese version of the Liebowitz Social Anxiety Scale among
alcoholic patients. Revista Brasileira de Psiquiatria, 28(4), 265-269. doi: 10.1590/S1516-
44462006005000008
Warnock-Parkes, E., Wild, J., Stott, R., Grey, N., Ehlers, A. y Clark, D. M. (2017). Seeing is
believing: using video feedback in cognitive therapy for social anxiety disorder. Cognitive
and Behavioral Practice, 24, 245-255. doi: 10.1016/j.cbpra.2016.03.007
Wersebe, H., Sijbrandij, M. y Cuijpers, P. (2013). Psychological group-treatments of social
anxiety disorder: a meta-analysis. PLoS ONE, 8(11), 7. doi:
10.1371/journal.pone.0079034
Williams, T., McCaul, M., Schwarzer, G., Cipriani, A., Stein, D. J. y Ipser, J. (2020).
Pharmacological treatments for social anxiety disorder in adults: a systematic review and
network meta-analysis. Acta Neuropsychiatrica, 32(4), 169-176. doi:
10.1017/neu.2020.6