La muerte es el fin de la vida terrena del hombre y el comienzo de su estado definitivo, ya sea en la vida eterna o en la muerte eterna. Según la perspectiva cristiana, la muerte marca el límite entre el tiempo de gracia donde el hombre puede decidir su destino eterno y el estado definitivo de bienaventuranza o condena. No hay posibilidad de conversión después de la muerte, por lo que las opciones realizadas durante la vida terrena determinan la suerte eterna de cada persona.
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La muerte es el fin de la vida terrena del hombre y el comienzo de su estado definitivo, ya sea en la vida eterna o en la muerte eterna. Según la perspectiva cristiana, la muerte marca el límite entre el tiempo de gracia donde el hombre puede decidir su destino eterno y el estado definitivo de bienaventuranza o condena. No hay posibilidad de conversión después de la muerte, por lo que las opciones realizadas durante la vida terrena determinan la suerte eterna de cada persona.
La muerte es el fin de la vida terrena del hombre y el comienzo de su estado definitivo, ya sea en la vida eterna o en la muerte eterna. Según la perspectiva cristiana, la muerte marca el límite entre el tiempo de gracia donde el hombre puede decidir su destino eterno y el estado definitivo de bienaventuranza o condena. No hay posibilidad de conversión después de la muerte, por lo que las opciones realizadas durante la vida terrena determinan la suerte eterna de cada persona.
La muerte es el fin de la vida terrena del hombre y el comienzo de su estado definitivo, ya sea en la vida eterna o en la muerte eterna. Según la perspectiva cristiana, la muerte marca el límite entre el tiempo de gracia donde el hombre puede decidir su destino eterno y el estado definitivo de bienaventuranza o condena. No hay posibilidad de conversión después de la muerte, por lo que las opciones realizadas durante la vida terrena determinan la suerte eterna de cada persona.
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LA
MUERTE TEMA 3 LIMITES DE NUESTRA EXISTENCIA
Solo el hombre tiene conciencia de
que muere NACIMIENTO
MUERTE El hombre muere solo
El hombre es consiente de que todo
muere LA MUERTE PARA EL HOMBRE DE HOY
El hombre está apegado al mundo, apegado a la vida
práctica, se "emborracha" de la vida para privarse del pensamiento de la muerte. Pero es una manera de engañarse: a pesar de todo la muerte está ahí, llega como intrusa, se presenta sin ser llamada. LA MUERTE EN EL PENSAMIENTO CRISTIANO La respuesta "cristiana" a la cuestión de la muerte se expresa con la categoría "resurrección de los muertos", no con la de "inmortalidad" o "reencarnación". El sentido “cristiano” de la muerte como destino definitivo del peregrinar humano. 1013 La muerte es el fin de la peregrinación terrena del hombre, del tiempo de gracia y de misericordia que Dios le ofrece para realizar su vida terrena según el designio divino y para decidir su último destino. Cuando ha tenido fin "el único curso de nuestra vida terrena" (LG 48), ya no volveremos a otras vidas terrenas. "Está establecido que los hombres mueran una sola vez" (Hb 9, 27). No hay "reencarnación" después de la muerte. CEC QUE NOS DICE LA SAGRADA ESCRITURA FUNDAMENTOS BIBLICOS SOBRE LA MUERTE
Con la muerte termina el tiempo de la decisión; la suerte
eterna de la persona depende de las opciones realizadas en la existencia histórica que acaba en el evento de la muerte (2Co 5,10; Hch 9,27).
La muerte es el comienzo del estado definitivo, es decir, la
entrada en la vida eterna (cf Lc 23,42). LA MUERTE COMO DESTINO Consecuencia de nuestra condición creatural El hombre creatura de Dios: Participa de la vida perfecta de Dios, pero es creatura. Como creatura es dependiente y limitado ontológicamente: frágil, débil moralmente, transitorio. La muerte un signo claro de nuestra caducidad: (Sal 62,10; 90, 9-10; 144,3; Job 7, 6-18; Is 38,12; 40,6). La muerte es un destino inevitable, "camino sin retorno" (Job 16,22), suerte del sabio y del necio (Qo 2,16). La muerte es un castigo por el pecado del hombre: si Dios ha creado todo para la incorruptibilidad y para que subsistiera (cf Sb 1, 14; 2, 23), ella entró al mundo por el pecado del hombre y "por envidia del diablo" (cf Gn 2,17-3,10; Sb 2,24). Si la muerte es destino ¿cómo puede ser castigo? Sin el pecado ¿habría el hombre experimentado la muerte?.
• La muerte es destino: el cumplimiento del hombre en la vida eterna
comporta necesariamente la muerte como abandono de lo que es frágil y corruptible • Para entrar a la vida eterna hay que despojarse de lo mortal • Sin el pecado la muerte sería experimentada no como laceración, como algo angustioso o como castigo. Sin embargo, después del pecado ella es experimentada como castigo, es decir, como ruptura dolorosa, como laceración angustiosa y temida. LA MUERTE TÉRMINO DEFINITIVO?
LA METEMPSICOSIS: Transmigración del alma a otros seres
vivos hasta la purificación plena. Religiones orientales.
LA REENCARNACIÓN: El alma se encarna sucesivamente en
otros cuerpos humanos para progresar y perfeccionarse, hasta no necesitar ya el cuerpo.
LA OPCIÓN FUNDAMENTAL DESPUÉS DE LA MUERTE: Posibilidad
de conversión después de la muerte. No se toma en cuenta la irrepetibilidad del ser humano y la responsabilidad frente a su vida. Tales teorías pueden llevar a no tomar en serio nuestra vida (ella sería "una entre otras": “de todos modos, podré aprovechar pues tengo otras oportunidades”...; El pensamiento judeo - cristiano
Nos presenta la muerte como término definitivo del estado
de peregrinación del hombre.
Con ella acaba el tiempo en que podemos merecer o
desmerecer, hacer nuestra opción fundamental por Dios o contra Dios. (cf Mt 25; Jn 12,25; 2Co 5,10).
Después de la muerte no hay ninguna posibilidad de
conversión. Todo se decide en la vida terrena. La muerte en Cristo como bienaventuranza PARA EL CRISTIANO LA MUERTE ES: Paso necesario a la vida eterna y, por ello, un despojarse. Se trata de un "cambio de traje", "cambio de tienda" o de "ciudadanía" (2Co 5,4-8; 2Pe 1,13-14). El hombre abandona el elemento corpóreo y se reviste de incorruptibilidad, tendrá un cuerpo "espiritual“. Ganancia. El misterio de Cristo hace asumir algo más: la plenitud de la vida. Paradójicamente, la muerte nos introduce a la plenitud de la vida. PARA EL CRISTIANO LA MUERTE ES: Iluminada por la esperanza. El que vive en comunión con Cristo se encamina a la vida y no experimenta la muerte como castigo. Cumplimiento de la vida cristiana. Es momento en que se realiza la plenitud, donde puede hacer el acto supremo de fe y esperanza; confía totalmente en Dios, acepta plenamente su Palabra. Puede hacer el acto supremo del amor a Dios y a su prójimo. Valoración de la vida terrena: no se mira como un sin sentido, sino como preparación valiosa e inicio de vida "en Cristo". MAGISTERIO Y TRADICIÓN DE LA IGLESIA PAPA JUAN XXII (1331-1332) Los justos como los impíos tendrán que esperar hasta el juicio final y la resurrección de los muertos para llegar al "gozo del Señor“ porque . . .
a) Tal como afirma la Sagrada Escritura y San Bernardo,
únicamente el juicio otorga la posesión del reino
b) Para la perfecta bienaventuranza el alma precisa del
cuerpo. La retractación de Juan XXII fue publicada por su sucesor, Benedicto XII, que se dio a la tarea de resolver tan difícil cuestión. Por tal motivo emitió la constitución Benedictus Deus (DS 1000-1002) Donde se enseña que tanto el estado de vida eterna como el de muerte eterna comienzan "inmediatamente después de la muerte". Más tarde Florencia confirmará esta doctrina (DS 1305s) con palabras que hará suyas el Vaticano II: los justos ya purificados "gozan de la gloria contemplando claramente a Dios mismo, uno y trino, tal cual es" (LG 49). TEOLOGÍA DE LA MUERTE desde la CRISTOLORÍA La única respuesta que se encuentra viene de Dios, no del hombre. De hecho, la fe en la resurrección surge como extrapolación del concepto "Dios", que "no es un Dios de muertos sino de vivos" (Mt 22,32). Jesucristo muere para resucitar y nos muestra la verdadera vocación del hombre: el ser humano no es un ser-para-la- muerte sino un ser-para-la-vida, y vida eterna. No es fin, sino tránsito, no es término sino pascua de la forma de existencia provisional a la forma de existencia definitiva. El bautizado ve la muerte ya no como angustiosa cesación de su ser, sino como acto que ha de vivirse con entrega libre y amorosa, en la esperanza de la resurrección MUERTE Y DEFINITIVIDAD La acción de morir conduce a la persona a su definitividad, es decir, la fija en su destino. Desde el punto de vista humano, vemos que el tiempo le es dado al hombre como espacio en el que forja su destino. La libertad es disposición de la persona sobre sí mismo en orden al fin; esta libertad nos ha sido dada para llegar a ser lo que queremos ser; al final, el hombre se encontrará con todas sus realizaciones, que serán la fiel imagen de sí mismo. Por su parte, la Biblia da por supuesto que con la muerte se clausura el estado peregrinante del hombre, pues de lo contrario el mensaje salvífico no podría ser la oferta de la salvación definitiva. Quien habla de salvación habla de irrevocabilidad, de una salvación de una vez por todas, pues una salvación "por un rato" no es salvación plena. MUERTE Y DEFINITIVIDAD Pues bien, si Dios crea al hombre para la salvación, lo diseña de forma que sea una criatura activamente capaz de salvación o, de lo que es lo mismo, de una acción definitiva. El hombre es un ser habilitado para llegar a un fin, pues de lo contrario siempre sería inacabado, incompleto, "insalvable". Por tal motivo se dice que la realidad de un genuino estado final del hombre es la condición de posibilidad de la salvación. Si la vida tiene sentido, la muerte debe dar al hombre el permanecer en la vida eterna en lo que quiso ser durante el tiempo; y esto gracias no a una decisión aislada, sino en cuanto suma totalizante de las actitudes vividas. En cuanto a la meta a la cual el hombre está llamado por su misma naturaleza, la muerte es anulación de toda posibilidad de devenir, es la facticidad (realidad) consumada, o como dice la teología escolástica, el "término del estado de prueba por su naturaleza". TAREA 1) Resumen en una página de lo visto en la primera clase de que es PARUSÍA. 2) Resumen en una página de lo visto en la primera clase de que es MUERTE. 3) Estudiar para el 1er examen. MARANATHA! VEN SEÑOR JESÚS TAREA 2 EN 10 LÍNEAS DEFINE QUE ES LA MUERTE.