La Responsabilidad Social
La Responsabilidad Social
La Responsabilidad Social
Ejemplo de alteridad:
Cuando un hombre y una mujer con distintas creencias religiosas quieren unirse
en matrimonio es necesario que exista alteridad para comprender las diferencias
que hay entre los dos.
Los humanos somos seres sociales, eso es innegable y una característica vital para
nuestra supervivencia. En la vida cotidiana nos relacionamos con muchas personas y las
interacciones diarias son incontables se dan en la familia, en el trabajo, en el gimnasio,
entre otros. Pero dentro de las relaciones sociales y especialmente en la sociedad actual
surgen valores negativos que destruyen una sana convivencia, como el egoísmo, el
individualismo, etc., para combatir estos problemas es necesario tener un sentido de
alteridad.
La alteridad en el ámbito familiar es imprescindible, comprender los puntos de vista de
nuestra familia y preocuparse por las necesidades de los otros permite una fraternización
y diálogo precisos para que la familia sea unida. En el ámbito profesional, el tener
sentido de alteridad permite una mejor relación con los compañeros de trabajo, por
ejemplo, para terminar un proyecto es inevitable no relacionarse con otros y al contrario
hay que ser abierto a las formas de pensar de los otros y sus ideas. En el ámbito social,
la alteridad posibilita ser activo en la sociedad, respetando las señales de tránsito al
conducir porque hay que pensar en los peatones. En el ámbito político analizando las
propuestas de los candidatos y pensar en sus intereses.
Bibliografía
Gonzáles Álvarez, L. (2009). Ética (Cuarta ed.). Bogotá: El Búho S.A.S.
Tamay Ochoa, J. M. (2020). Ética y Moral. Loja: Ediloja Cía. Ltda.