Tutela Marco Perez Perez

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Señor

JUEZ DEL CIRCUITO (Reparto)


Manizales.

Referencia: Acción de tutela de Marco Pérez Pérez contra la Alcaldía de Manizales,


secretaría de Gobierno.

MARCO PÉREZ PÉREZ, natural de España, en tránsito por Colombia, identificado con
Pasaporte PAJ209008, de manera respetuosa me permito solicitar a usted el amparo
constitucional de mis derechos, los cuales han sido vulnerados de manera flagrante por la
Alcaldía de Manizales, todo lo cual baso en los siguientes hechos en los cuales
fundamento las pretensiones que más adelante formularé:

HECHOS.

PRIMERO. Tal y como consta en los certificados adjuntos, soy alumno de la escuela de
tauromaquia de la diputación de Salamanca durante el curso 2.022-23

SEGUNDO. Fui invitado por la entidad sin ánimo de lucro, CORMANIZALES, en su calidad
de promotora de la feria taurina de Manizales, para hacer una exhibición con tres novillos,
que de conformidad con el reglamento taurino QUE ES LA LEY 916 DE 2.004 y que está en
plena vigencia concordante con el arte universal del toreo, se ajustan a mi edad, tamaño y
capacidad artística, COMO QUIERA QUE SE TRATA DE NOVILLOS DENOMINADOS ERAL,
DE DOS AÑOS DE EDAD Y DE ALREDEDOR DE 200 KILOS la cual tiene como propósito
recaudar fondos, a favor del HOSPITAL INFANTIL DE CALDAS, que en mi calidad de infante
y adolescente, estoy motivado y especialmente empeñado en apoyar de manera
irrestricta.

TERCERO. No obstante lo anterior, el Ministerio de Trabajo seccional Valle del Cauca, a


través de su dirección territorial, quien sin ser competente para ello, expidió un acto
administrativo identificado con el número 6483 del 28 de diciembre de 2.022, bajo el
entendido de (…) “concurrir un riesgo grave e inminente para la seguridad o salud de los
referido menores ( se refiere a la Niña Mariana Mantilla Lemus y al suscrito actor), aunado
a que las actividades deportivas profesionales de torero y/o cuadrillas de ruedo son
consideradas como peores formas de trabajo infantil y se encuentra establecida en la
clasificación de actividades peligrosas y condiciones de trabajo nocivas para la salud e
integridad física o psicológica de las personas menores de 18 años de edad. Lo anterior
hasta tanto se supere la inobservancia de la normatividad”.
CUARTO. Dicho acto administrativo ordenó la “paralización o prohibición inmediata de
trabajos o tareas la actividad (sic) a realizarse en la PLAZA DE TOROS CAÑAVERALEJO”.

QUINTO. Como consecuencia de lo anterior, me vi obligado a abandonar dicho festejo


taurino, a instaurar otra acción de tutela contra dicho acto administrativo y cuyo fallo de
primera instancia se encuentra pendiente.

SEXTO. Sin embargo, cuando estoy preparado para actuar en Manizales, la Alcaldía de
Manizales, a través de comunicación suscrita por la señora Secretaria de Gobierno de
Manizales y el profesional de la unidad de seguridad ciudadana de esa misma secretaría,
el día 28 de diciembre de 2.022, informó al director ejecutivo de CORMANIZALES, QUE HA
LLEGADO A LA CONCLUSIÓN DE (…) “NO AUTORIZAR la participación del menor de edad,
MARCO PEREZ, o cualquier persona menor de edad, durante la temporada”.

SEPTIMO. Dicha decisión padece de falsa motivación como quiera que se fundamenta en
el contenido de una Resolución, la Nº 1796 de 2.018 expedida por el Ministerio del
trabajo, que enlista las actividades peligrosas que por su naturaleza o condiciones de
trabajo son nocivas para la salud e integridad física o psicológica de los menores de 18
años, de que trata el literal d del artículo 3º del convenio 182 de la OIT.
En especial hace referencia al numeral 9º del artículo 3º de dicha resolución que indica
que:

“9º Actividades que impliquen el contacto directo con animales que generen alto
riesgo para la salud y seguridad de los menores de 18 años”.

OCTAVO. Lo anterior permite colegir una sistemática actuación de las autoridades


Colombianas tendiente a impedir la exhibición de mi arte, bajo la falacia de que se trata
de una actividad laboral derivada de la existencia un contrato de trabajo.
Nada más impreciso que lo anterior: se reitera. Mi condición es de estudiante del arte
taurino y mi propósito es hacer una exhibición artística ante el público Manizaleño, sin
que ello implique la existencia de un contrato de trabajo ni nada por el estilo.

NOVENO. Estoy en este bello País únicamente con el objeto de presentar mi arte en
exhibiciones altruistas, de carácter solidario y filantrópico. Mi formación y gusto por la
tauromaquia es equivalente a la de otros infantes y adolescentes que se preparan para
mostrar sus habilidades en temas como los karts, la equitación, el motocross, el trial, el
bicicross, actividades riesgosas que implican la adquisición de cierta pericia, que se va
adquiriendo en la medida en que se pueda practicar y mostrar en actividades de
exhibición. Estos hechos están directamente vinculados y conectados con el ejercicio de
los derechos al libre desarrollo de la personalidad y al de escogencia libre de profesión u
oficio.

PRETENSIONES.

En virtud de lo anterior, solicito respetuosamente a Su Señoría que mediante sentencia


constitucional ampare mis derechos al libre desarrollo de la personalidad, a la libre
escogencia de profesión u oficio, al debido proceso a la defensa y a la libre contradicción y
se me permita exhibir mis capacidades artísticas dentro de los festejos taurinos a
celebrarse los días 4 y 5 de enero de 2023 en la monumental plaza de toros de Manizales
dentro del marco de la celebración de la temporada taurina 2023.

FUNDAMENTOS JURIDICO CONSTITUCIONALES EN QUE FUNDO LA TUTELA DE MIS


DERECHOS.

Sea lo primero afirmar que la actividad taurina es una actividad legal, regulada en la Ley
916 de 2.004, sobre cuya constitucionalidad y alcance se ha pronunciado la Honorable
Corte Constitucional en varias ocasiones, y que en su cuerpo normativo permite una
amplia gama de eventos y en cuyo plexo no existe prohibición alguna para la exhibición de
menores de edad. Incluso el artículo 80 de dicha norma expresa claramente que

“ARTÍCULO 80. <Aparte tachado INEXEQUIBLE> Para fomento de la fiesta de


toros, en atención a la tradición y vigencia cultural de la misma podrán crearse
escuelas taurinas para la formación de nuevos profesionales taurinos y el apoyo y
promoción de su actividad”.

Por lo tanto, la exhibición que me propongo realizar esta plenamente permitida y es legal
en el ámbito del derecho positivo Colombiano.
Las autoridades administrativas no tienen facultades para prohibir mi actuación ni la
realización del evento, más aun cuando se trata del caso de plazas de primera categoría,
pues su ámbito de actuación ha sido restringido por el legislador como puede colegirse de
la simple lectura de las siguientes normas de la Ley Taurina:

“ARTÍCULO 3º. CLASIFICACIÓN DE LAS PLAZAS DE TOROS. Los recintos para las


celebraciones de espectáculos taurinos se clasifican en:
A. Plazas de toros permanentes
B. Plazas de toros no permanentes (polideportivos, coliseos)
C. Plazas portátiles
ARTÍCULO 4º. PLAZA DE TOROS PERMANENTES. Son plazas de toros permanentes
aquellos edificios o recintos específica o preferentemente construidos para la
celebración de espectáculos taurinos.

ARTÍCULO 10. CLASIFICACIÓN DE LAS PLAZAS DE TOROS PERMANENTES. Las


plazas de toros permanentes se clasifican, por su tradición o en razón del número o
clase de espectáculos taurinos que se celebran en las mismas, en tres categorías.
Serán plazas de primera categoría:
Plaza de toros de “Santa María” de Bogotá.
Plaza de toros de “Cañaveralejo” de Cali.
Plaza de toros “Monumental” de Manizales.
Plaza de toros de Cartagena de Indias.
Plaza de toros “La Macarena” de Medellín, y las que se construyan con capacidad
superior a diez mil espectadores. (se subraya)

ARTÍCULO 14. REQUISITOS PARA CELEBRACIÓN DE ESPECTÁCULOS


TAURINOS.  <Ver Notas del Editor> La celebración de espectáculos taurinos
requerirá la previa comunicación al órgano administrativo competente o, en su
caso, la previa autorización del mismo en los términos previstos en este
reglamento.
Para la celebración de espectáculos taurinos en plazas permanentes bastará
únicamente, en todo caso, con la mera comunicación por escrito. En las plazas no
permanentes será necesaria la autorización previa del órgano administrativo
competente.
La comunicación o la solicitud de autorización podrán referirse a un espectáculo
aislado o a una serie de ellos que pretendan anunciarse simultáneamente para su
celebración en fechas determinadas.

ARTÍCULO 19. El órgano administrativo es el competente para suspender o prohibir


la celebración de todo tipo de espectáculos taurinos, únicamente en plazas no
permanentes o portátiles, por no reunir los requisitos exigidos”.

La Alcaldía de Manizales en su actuación está incidiendo por fuera de sus límites de


autoridad, en la definición de qué personas pueden o no participar en los festejos
regulados en la Ley taurina, desconociendo incluso su propio precedente, pues en enero
del año 2022 yo participé en el festival taurino, siendo un rotundo triunfador en dicho
evento y los mismos funcionarios que hoy intentan prohibir mi actuación, no la
prohibieron en esa oportunidad.
Además de lo anterior, el Código de infancia y adolescencia Colombiano indica claramente
que:

“ARTÍCULO 30. DERECHO A LA RECREACIÓN, PARTICIPACIÓN EN LA VIDA


CULTURAL Y EN LAS ARTES. Los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho
al descanso, esparcimiento, al juego y demás actividades recreativas propias de su
ciclo vital y a participar en la vida cultural y las artes.

Igualmente, tienen derecho a que se les reconozca, respete, y fomente el


conocimiento y la vivencia de la cultura a la que pertenezcan.
PARÁGRAFO 1º. Para armonizar el ejercicio de este derecho con el desarrollo
integral de los niños, las autoridades deberán diseñar mecanismos para prohibir el
ingreso a establecimientos destinados a juegos de suerte y azar, venta de licores,
cigarrillos o productos derivados del tabaco y que ofrezcan espectáculos con
clasificación para mayores de edad.
PARÁGRAFO 2º. Cuando sea permitido el ingreso a niños menores de 14 años a
espectáculos y eventos públicos masivos, las autoridades deberán ordenar a los
organizadores, la destinación especial de espacios adecuados para garantizar su
seguridad personal”.

Y de manera adicional expresa que:

ARTÍCULO 31. DERECHO A LA PARTICIPACIÓN DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS


ADOLESCENTES. Para el ejercicio de los derechos y las libertades consagradas en
este código los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho a participar en las
actividades que se realicen en la familia, las instituciones educativas, las
asociaciones, los programas estatales, departamentales, distritales y municipales
que sean de su interés.
El Estado y la sociedad propiciarán la participación activa en organismos públicos y
privados que tengan a cargo la protección, cuidado y educación de la infancia y la
adolescencia.
(todas las subrayas y negrillas son mias)

Otro argumento esencial esta apuntalado en el hecho de que no he sido citado ni oído en
las actuaciones administrativas en las cuales mis derechos fundamentales han sido
vulnerados de manera directa, impidiéndome el libre ejercicio de los mismos.

Los derechos de los niños gozan de especial protección del Estado por norma
Constitucional y en materia de ley especial, dice el mismo código de infancia y
adolescencia que:
ARTÍCULO 26. DERECHO AL DEBIDO PROCESO. Los niños, las niñas y los
adolescentes tienen derecho a que se les apliquen las garantías del debido proceso
en todas las actuaciones administrativas y judiciales en que se encuentren
involucrados.
En toda actuación administrativa, judicial o de cualquier otra naturaleza en que
estén involucrados, los niños, las niñas y los adolescentes, tendrán derecho a ser
escuchados y sus opiniones deberán ser tenidas en cuenta.

PRECEDENTES CONSTITUCIONALES Y COSA JUZGADA CONSTITUCIONAL.

La Ley taurina colombiana ha sido blanco de diversos ataques frente a su legalidad y


constitucionalidad, que han sido objeto de pronunciamiento del máximo tribunal
Constitucional, que en su calidad de Guardian de la Constitución, se ha pronunciado en
múltiples oportunidades sobre la legalidad de la fiesta brava, la del reglamento y sobre el
ámbito de competencia de las autoridades:

1) Sentencia C-1192/05: Declaró constitucional el art. 1º de la Ley 916 de 2004


(Reglamento Nacional Taurino), que declara a los espectáculos taurinos como
expresión artística del ser humano, por considerar que los mismos corresponden a un
criterio histórico de los pueblos iberoamericanos (entre ellos el
colombiano) y que en ejercicio de sus competencias, el Congreso obró conforme al
principio de razonabilidad.
2) Sentencia C-115/06: reiterando la sentencia C-1192/05, la Corte señaló que las
corridas de toros son una expresión artística arraigada a la tradición, de donde se
desprende que el Estado, en armonía con las normas constitucionales, pueda regular
una actividad cultural, y no solo regularla sino también protegerla.
Adicionalmente, la Corte señaló el reconocimiento legal de una actividad y su
regulación, no implica que por esta razón se aliente, ni mucho menos se obligue a los
ciudadanos a asistir a este espectáculo, pues “el ordenamiento constitucional
garantiza plenamente el ejercicio de la opción de los ciudadanos que, de acuerdo con
sus convicciones, se oponen a la lidia de toros.”
3) Sentencia C-246/06: en relación a la demanda contra el art. 22 de la Ley 916 (que
permite el ingreso de menores de 10 años a las corridas de toros, pero en compañía de
un adulto), la Corte determinó que existe cosa juzgada constitucional (Sent. C-
1192/05). Adicionalmente, determinó que la tauromaquia “constituye una
manifestación de la riqueza y diversidad de nuestro pueblo” y que prohibir
absolutamente el ingreso de menores de edad sería coartar sus derechos
constitucionales de participar en las actividades culturales.
4) Sentencia C-367/06: Al examinar si la participación de los alcaldes municipales y
distritales en la Presidencia de los espectáculos taurinos y en el Comité Técnico
contrariaba algunos preceptos constitucionales, determinó que dichos servidores
públicos, de conformidad con el art. 209 de la Constitución, deben obrar con
fundamento en el principio de imparcialidad. Por consiguiente, es inconstitucional que
además de vigilar la expresión artística autorizada y regulada por el Congreso, hagan
parte de la misma.
5) Sentencia C-666/2010: al examinar la constitucionalidad de las excepciones a la
protección de los animales consagradas en el art. 7º de la Ley 84 de 1989 (Estatuto
Nacional de Protección de los Animales), la Corte estableció que existe una tensión
entre el deber de protección a los animales y la protección a las manifestaciones
culturales de la nación. En esta sentencia resolvió que los espectáculos taurinos
pueden tener lugar en los lugares en donde exista tradición y sin que se puedan
destinar recursos públicos para su promoción.
6) Sentencia C-889/12: al examinar algunas normas sobre el Estatuto Nacional Taurino,
sobre los requisitos para la realización
de espectáculos taurinos en plazas de toros permanentes (como el caso del municipio
de Madrid), la Corte distinguió entre poder de policía, función de policía y actividad de
policía, reiterando que las autoridades administrativas no pueden prohibir
espectáculos taurinos, pues están sometidas al principio de legalidad estricta,
correspondiéndole únicamente al Congreso de la República adoptar una decisión
sobre su prohibición.
7) Auto 025/2015: Resolvió la solicitud de nulidad de la sentencia T-296 de 2013
haciendo un recuento de las sentencias C-1192 de 2005, C-666 de 2010 y C-889 de
2012 concluyendo: (i) que la calificación legal de la actividad taurina como arte es
facultad exclusiva del Legislador; (ii) que el carácter nacional de la regulación taurina
se halla determinada en la Ley, debiendo entenderse que alude a su aplicación
uniforme en los lugares donde está permitida la actividad taurina; (iii) que el
impedimento o la prohibición del espectáculo taurino en los términos de la Ley 916
de 2005, excede la competencia de las autoridades territoriales colegiadas o
ejecutivas, a quienes corresponde el ejercicio de la función de policía con sujeción
estricta a la ley; y (iv) que la destinación legal de los escenarios taurinos es
constitucionalmente admisible, como es el caso de la Plaza de Toros de Santa María de
Bogotá.
8) Auto 547/2018: Mediante el cual se declaró la Nulidad de la sentencia C-041 de 2017
que había conminado al Congreso a legislar sobre la materia en un término de dos
años y que declaraba inconstitucional la excepción que se hacía de la actividad taurina
a la tipificación como maltrato animal. La razón para declarar la nulidad de su propia
sentencia fue el desconocimiento de la cosa juzgada pues ya la Corte se había
pronunciado en las sentencias C-666 de 2016 y C-889 de 2012 sobre la protección
constitucional a la actividad taurina.
9) Sentencia T-296 de 2013: Aquí la Corte Constitucional ordenó al Distrito Capital de
Bogotá: “(i) la reapertura de la Plaza como escenario taurino en condiciones de
neutralidad e igualdad, garantizando la selección objetiva de los proponentes y la
realización de los fines de transparencia en la administración pública aplicables al
proceso; (ii) el restablecimiento de los espectáculos taurinos en las fechas u ocasiones
usuales en la ciudad de Bogotá, incluyendo tanto la temporada regular en los primeros
meses del año como el Festival de Verano en el mes de agosto; (iii) la sucesiva,
periódica y regular realización de las actividades taurinas tradicionales, con las
características habituales de la calidad y contenido de tal expresión artística.” En el
mismo orden de ideas, de manera perentoria la Corte previno a la Alcaldía Mayor de
Bogotá, lo siguiente: “(iii) abstenerse de adelantar cualquier tipo de actuación
administrativa que obstruya, impida o dilate su restablecimiento como recinto del
espectáculo taurino en Bogotá D.C.”

SUSPENSION PROVISIONAL COMO MEDIDA CAUTELAR DE URGENCIA QUE PERMITA EL


LIBRE EJERCICIO DE MIS DERECHOS.

Teniendo en cuenta los hechos, pretensiones y sustentos jurídicos en que se apuntala la


presente acción y que, la corporación sin ánimo de lucro CORMANIZALES ha presentado
los recursos de reposición y subsidiariamente apelación contra la decisión objeto de la
presente solicitud de tutela, la presunción de legalidad de la misma, aunque no ha
cobrado firmeza impide que me presente en los festejos del 4 y 5 de enero de 2023
previstos en la Monumental plaza de toros de Manizales, lo que implica un perjuicio
irremediable por cuanto no puedo expresar mi arte ante el autorizado y calificado grupo
de espectadores de la fiesta SOLICITO a Su Señoría en calidad de Juez de tutela que
SUSPENDA LOS EFECTOS DE LA PROHIBICION de mi participación en la temporada taurina,
pues el término que se tomarían las autoridades administrativas para decidir los recursos
y para instaurar las acciones legales contra la decisión y el tiempo que El Juez
Constitucional requeriría para decidir, superaría el marco temporal de mi actuación y de
mi estancia en Colombia, pues como puede observarse, me ha sido expedida visa hasta el
15 de enero de 2023, fecha en la cual debo abandonar el País.

NOTIFICACIONES.

Las recibiré en los siguientes correos electrónicos: jbjalabert@hotmail.fr;


joselitobautista08@hotmail.es
La entidad accionada las recibirá en CONSEGUIR CORREO ELECTRONICO DE LA
SECRETARIA DE GOBIERNO MUNICIPAL

PRUEBAS Y ANEXOS.

Presento como pruebas los siguientes documentos:

1. Copia de la comunicación de diciembre 28 de 2022 remitida por la Secretaría de


Gobierno de Manizales en la que se niega la autorización de mi participación en la
temporada taurina.
2. Copia del recuros de reposición y subsidiariamente de apelación presentado por
CORMANIZALES ante la misma entidad.
3. Copia del poder expedido por mis progenitores a mis apoderados en los cuales se
expresan los alcances del mismo.
4. Copia de la Visa electrónica otorgada a mi por el Consulado de Colombia en Sevilla.
Y en el que consta que he sido invitado por CORMANIZALES como torero.
5. Documento expedido por la dirección de la escuela taurina de la diputación de
salamanca en que consta que soy alumno en dicha escuela y que estoy habilitado
para exhibir mis capacidades artísticas en la feria taurina de Manizales.
6. Cartel de la temporada taurina 2023 de Manizales en que se anuncia mi nombre.

Ruego a Su señoría proceder de conformidad.


Respetuosamente,

MARCO PÉREZ PÉREZ.


PASAPORTE PAJ209008.
Señores
ALCALDIA DE MANIZALES.
SECRETARÍA DE GOBIERNO.
CIUDAD.

JUAN CARLOS GOMEZ MUÑOZ, mayor de edad, vecino de Manizales, identificado como
aparece al pie de mi firma, en calidad de director ejecutivo y por ende representante legal
de CORMANIZALES, por medio del presente escrito me permito presentar a ustedes, de
manera RESPETUOSA, recurso de reposición y SUBSIDIARIAMENTE de apelación para ante
el Señor Alcalde de la ciudad, contra la actuación administrativa contenida en la
comunicación de diciembre 28 de 2.022, por medio de la cual se decidió unilateralmente
NO AUTORIZAR la participación del menor MARCO PÉREZ PÉREZ en la temporada taurina
de Manizales a celebrarse en la Monumental plaza de toros de Manizales, cuya exhibición
artística enparticular esta programada para los días 4 y 5 de enero, todo lo cual hago en
término hábil.

SOLICITUD DE URGENCIA Y PRIORIDAD.

De manera comedida, solicito a ustedes que el presente recurso se desate a la mayor


brevedad posible, de manera prioritaria habida consideración que, de una parte, están
involucrados los derechos prioritrios de un menor; y de otra, su actuación está prevista
para los días 4 y 5 de enero de 2023.

Los reparos contra la decisión los sustento de la siguiente manera


PRIMERO. El Joven Marco Perez no actuará en Manizales con base en un contrato de
trabajo o de prestación de servicios que implique una remuneración económica. El Joven
torero en formación actuará de manera gratuita, sin remuneración y con la idea esencial
de exhibir sus capacidades artísticas ante los espectadores de la corrida y el festival
taurinos a celebrarse los días 4 y 5 de enero.

SEGUNDO. El Joven torero en formación pertenece a la escuela taurina de la diputación de


Salamanca y en su proceso formativo esta plenamente habilitado y preparado para
efectuar la exhibición artística.

TERCERO. La exhibición artística del joven incorpora la lidia de tres novillos de alrededor
200 kilos y por los dos años de edad, que se denominan ERALES, lo que conforme con el
reglamento taurino es perfectamente permitido, pues adicionalmente, dicha Ley no
prohíbe la actuación de menores de edad.

CUARTO. La decisión que aquí se impugna, contiene no solo lo que la doctrina ha


clasificado como una falsa motivación sino que además adolece de un total
desconocimieinto a la ley vigente a los precedentes de la Corte Constitucional y a las
normas que regula el código de infancia y adolescencia todo lo cual explico de la siguiente
manera:

Las autoridades administrativas no tienen facultades para prohibir la actuación del Joven
MARCO PEREZ PEREZ, ni la realización del evento, más aún cuando se trata del caso de
plazas de primera categoría, pues su ámbito de actuación ha sido restringido por el
legislador como puede colegirse de la simple lectura de las siguientes normas de la Ley
Taurina: (Ley 916 de 2.004)

“ARTÍCULO 3º. CLASIFICACIÓN DE LAS PLAZAS DE TOROS. Los recintos para las


celebraciones de espectáculos taurinos se clasifican en:
A. Plazas de toros permanentes
B. Plazas de toros no permanentes (polideportivos, coliseos)
C. Plazas portátiles

ARTÍCULO 4º. PLAZA DE TOROS PERMANENTES. Son plazas de toros permanentes


aquellos edificios o recintos específica o preferentemente construidos para la
celebración de espectáculos taurinos.

ARTÍCULO 10. CLASIFICACIÓN DE LAS PLAZAS DE TOROS PERMANENTES. Las


plazas de toros permanentes se clasifican, por su tradición o en razón del número o
clase de espectáculos taurinos que se celebran en las mismas, en tres categorías.
Serán plazas de primera categoría:
Plaza de toros de “Santa María” de Bogotá.
Plaza de toros de “Cañaveralejo” de Cali.
Plaza de toros “Monumental” de Manizales.
Plaza de toros de Cartagena de Indias.
Plaza de toros “La Macarena” de Medellín, y las que se construyan con capacidad
superior a diez mil espectadores. (se subraya)

ARTÍCULO 14. REQUISITOS PARA CELEBRACIÓN DE ESPECTÁCULOS


TAURINOS.  <Ver Notas del Editor> La celebración de espectáculos taurinos
requerirá la previa comunicación al órgano administrativo competente o, en su
caso, la previa autorización del mismo en los términos previstos en este
reglamento.
Para la celebración de espectáculos taurinos en plazas permanentes bastará
únicamente, en todo caso, con la mera comunicación por escrito. En las plazas no
permanentes será necesaria la autorización previa del órgano administrativo
competente.
La comunicación o la solicitud de autorización podrán referirse a un espectáculo
aislado o a una serie de ellos que pretendan anunciarse simultáneamente para su
celebración en fechas determinadas.

ARTÍCULO 19. El órgano administrativo es el competente para suspender o prohibir


la celebración de todo tipo de espectáculos taurinos, únicamente en plazas no
permanentes o portátiles, por no reunir los requisitos exigidos”.

La Alcaldía de Manizales en su actuación está incidiendo por fuera de sus límites de


autoridad, en la definición de qué personas pueden o no participar en los festejos
regulados en la Ley taurina, desconociendo incluso su propio precedente, pues en enero
del año 2022 el Joven MARCO PEREZ PEREZ actuó en el festival taurino, siendo un rotundo
triunfador en dicho evento y los mismos funcionarios que hoy intentan prohibir su
actuación, no la prohibieron en esa oportunidad.

Además de lo anterior, el Código de infancia y adolescencia Colombiano indica claramente


que:

“ARTÍCULO 30. DERECHO A LA RECREACIÓN, PARTICIPACIÓN EN LA VIDA


CULTURAL Y EN LAS ARTES. Los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho
al descanso, esparcimiento, al juego y demás actividades recreativas propias de su
ciclo vital y a participar en la vida cultural y las artes.
Igualmente, tienen derecho a que se les reconozca, respete, y fomente el
conocimiento y la vivencia de la cultura a la que pertenezcan.
PARÁGRAFO 1º. Para armonizar el ejercicio de este derecho con el desarrollo
integral de los niños, las autoridades deberán diseñar mecanismos para prohibir el
ingreso a establecimientos destinados a juegos de suerte y azar, venta de licores,
cigarrillos o productos derivados del tabaco y que ofrezcan espectáculos con
clasificación para mayores de edad.
PARÁGRAFO 2º. Cuando sea permitido el ingreso a niños menores de 14 años a
espectáculos y eventos públicos masivos, las autoridades deberán ordenar a los
organizadores, la destinación especial de espacios adecuados para garantizar su
seguridad personal”.

Y de manera adicional expresa que:

ARTÍCULO 31. DERECHO A LA PARTICIPACIÓN DE LOS NIÑOS, LAS NIÑAS Y LOS


ADOLESCENTES. Para el ejercicio de los derechos y las libertades consagradas en
este código los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho a participar en las
actividades que se realicen en la familia, las instituciones educativas, las
asociaciones, los programas estatales, departamentales, distritales y municipales
que sean de su interés.
El Estado y la sociedad propiciarán la participación activa en organismos públicos y
privados que tengan a cargo la protección, cuidado y educación de la infancia y la
adolescencia.
(todas las subrayas y negrillas son mias).

Otro argumento que debe esgrimirse contra la actuación confutada consiste en que los
derechos del menor MARCO PEREZ PEREZ que son preferentes sobre los de los demás han
sido vulnerados con la decisión, como quiera que no ha sido oído y vencido, lo que implica
que la decisión especial sobre el menor no podía tomarse sin su audiencia previa, lo que
impone una violación directa al derecho sustancial contenido en el código de infancia y
adolescencia que indica que:

ARTÍCULO 26. DERECHO AL DEBIDO PROCESO. Los niños, las niñas y los


adolescentes tienen derecho a que se les apliquen las garantías del debido proceso
en todas las actuaciones administrativas y judiciales en que se encuentren
involucrados.
En toda actuación administrativa, judicial o de cualquier otra naturaleza en que
estén involucrados, los niños, las niñas y los adolescentes, tendrán derecho a ser
escuchados y sus opiniones deberán ser tenidas en cuenta.
Por lo tanto la decisión debe ser revocada.

QUINTO. Si no es suficiente lo anterior, la decisión objeto de recursos desconoce los


precedentes constitucionales de nuestra Corte Constitucional y por ende vulnera no solo
derechos fundamentales, sino que además se torna en ilegal por violar la Constituicion de
manera directa.
La honorable Corte constitucional ha efectuado 9 pronunciamientos que son cosa juzgada
constitucional y mas allá de toda duda ha expresado en ellos los fundamentso
constitucionales y los alcances de la Ley taurina, sobresaliendo en ellos la delimitación de
la actuación de las autoridades adminsitrativas desde su función de policía.
Veamos:

1) Sentencia C-1192/05: Declaró constitucional el art. 1º de la Ley 916 de 2004


(Reglamento Nacional Taurino), que declara a los espectáculos taurinos como
expresión artística del ser humano, por considerar que los mismos corresponden a un
criterio histórico de los pueblos iberoamericanos (entre ellos el
colombiano) y que en ejercicio de sus competencias, el Congreso obró conforme al
principio de razonabilidad.
2) Sentencia C-115/06: reiterando la sentencia C-1192/05, la Corte señaló que las
corridas de toros son una expresión artística arraigada a la tradición, de donde se
desprende que el Estado, en armonía con las normas constitucionales, pueda regular
una actividad cultural, y no solo regularla sino también protegerla.
Adicionalmente, la Corte señaló el reconocimiento legal de una actividad y su
regulación, no implica que por esta razón se aliente, ni mucho menos se obligue a los
ciudadanos a asistir a este espectáculo, pues “el ordenamiento constitucional
garantiza plenamente el ejercicio de la opción de los ciudadanos que, de acuerdo con
sus convicciones, se oponen a la lidia de toros.”
3) Sentencia C-246/06: en relación a la demanda contra el art. 22 de la Ley 916 (que
permite el ingreso de menores de 10 años a las corridas de toros, pero en compañía de
un adulto), la Corte determinó que existe cosa juzgada constitucional (Sent. C-
1192/05). Adicionalmente, determinó que la tauromaquia “constituye una
manifestación de la riqueza y diversidad de nuestro pueblo” y que prohibir
absolutamente el ingreso de menores de edad sería coartar sus derechos
constitucionales de participar en las actividades culturales.
4) Sentencia C-367/06: Al examinar si la participación de los alcaldes municipales y
distritales en la Presidencia de los espectáculos taurinos y en el Comité Técnico
contrariaba algunos preceptos constitucionales, determinó que dichos servidores
públicos, de conformidad con el art. 209 de la Constitución, deben obrar con
fundamento en el principio de imparcialidad. Por consiguiente, es inconstitucional que
además de vigilar la expresión artística autorizada y regulada por el Congreso, hagan
parte de la misma.
5) Sentencia C-666/2010: al examinar la constitucionalidad de las excepciones a la
protección de los animales consagradas en el art. 7º de la Ley 84 de 1989 (Estatuto
Nacional de Protección de los Animales), la Corte estableció que existe una tensión
entre el deber de protección a los animales y la protección a las manifestaciones
culturales de la nación. En esta sentencia resolvió que los espectáculos taurinos
pueden tener lugar en los lugares en donde exista tradición y sin que se puedan
destinar recursos públicos para su promoción.
6) Sentencia C-889/12: al examinar algunas normas sobre el Estatuto Nacional Taurino,
sobre los requisitos para la realización
de espectáculos taurinos en plazas de toros permanentes (como el caso del municipio
de Madrid), la Corte distinguió entre poder de policía, función de policía y actividad de
policía, reiterando que las autoridades administrativas no pueden prohibir
espectáculos taurinos, pues están sometidas al principio de legalidad estricta,
correspondiéndole únicamente al Congreso de la República adoptar una decisión
sobre su prohibición.
7) Auto 025/2015: Resolvió la solicitud de nulidad de la sentencia T-296 de 2013
haciendo un recuento de las sentencias C-1192 de 2005, C-666 de 2010 y C-889 de
2012 concluyendo: (i) que la calificación legal de la actividad taurina como arte es
facultad exclusiva del Legislador; (ii) que el carácter nacional de la regulación taurina
se halla determinada en la Ley, debiendo entenderse que alude a su aplicación
uniforme en los lugares donde está permitida la actividad taurina; (iii) que el
impedimento o la prohibición del espectáculo taurino en los términos de la Ley 916
de 2005, excede la competencia de las autoridades territoriales colegiadas o
ejecutivas, a quienes corresponde el ejercicio de la función de policía con sujeción
estricta a la ley; y (iv) que la destinación legal de los escenarios taurinos es
constitucionalmente admisible, como es el caso de la Plaza de Toros de Santa María de
Bogotá.
8) Auto 547/2018: Mediante el cual se declaró la Nulidad de la sentencia C-041 de 2017
que había conminado al Congreso a legislar sobre la materia en un término de dos
años y que declaraba inconstitucional la excepción que se hacía de la actividad taurina
a la tipificación como maltrato animal. La razón para declarar la nulidad de su propia
sentencia fue el desconocimiento de la cosa juzgada pues ya la Corte se había
pronunciado en las sentencias C-666 de 2016 y C-889 de 2012 sobre la protección
constitucional a la actividad taurina.
9) Sentencia T-296 de 2013: Aquí la Corte Constitucional ordenó al Distrito Capital de
Bogotá: “(i) la reapertura de la Plaza como escenario taurino en condiciones de
neutralidad e igualdad, garantizando la selección objetiva de los proponentes y la
realización de los fines de transparencia en la administración pública aplicables al
proceso; (ii) el restablecimiento de los espectáculos taurinos en las fechas u ocasiones
usuales en la ciudad de Bogotá, incluyendo tanto la temporada regular en los primeros
meses del año como el Festival de Verano en el mes de agosto; (iii) la sucesiva,
periódica y regular realización de las actividades taurinas tradicionales, con las
características habituales de la calidad y contenido de tal expresión artística.” En el
mismo orden de ideas, de manera perentoria la Corte previno a la Alcaldía Mayor de
Bogotá, lo siguiente: “(iii) abstenerse de adelantar cualquier tipo de actuación
administrativa que obstruya, impida o dilate su restablecimiento como recinto del
espectáculo taurino en Bogotá D.C.”

SEXTO. Bajo la misma lógica habría que prohibir las escuelas de formación y las
actuaciones de menores en otras actividades tales como bicicross, BMX, motocross, trial,
automovilismo, paracaidismo, gimnasia, acrobacia, equitación, boxeo, lucha, artes,
marciales, técnica en mecánica automotriz y de motos, en tornos, metalmecánica,
carpintería y soldadura etc, y en fin, dicha postura implicaría el abolicionismo restrictivo
de innumerables actividades en las que los menores participan bajo el ejercicio de su
libertad, manifestado no solo en el derecho de escoger su profesión u oficio, sino también
bajo el principio del libre desarrollo de la personalidad.

Por las anteriores razones, ruego a ustedes revocar la decisión comunicada en la carta de
diciembre 28 de 2.022.

Respetuosamente,

JUAN CARLOS GOMEZ MUÑOZ


C.C.

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