Noviazgo

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Bosquejos Bíblicos Lectura Bíblica: Mateo 1:18

INTRODUCCIÓN
Tenemos que saber que en la palabra de Dios no aparece la
relación de noviazgo como lo conocemos actualmente, sino que
encontramos la palabra desposorio, tal como lo estaba José y maría
los padres terrenales de Jesús.
La palabra desposado en el original es la palabra “mnesteuo” que
literalmente significa: dar un regalo, es decir que se entregaba algo
como compromiso de que el hombre llegaran a formalizar el
matrimonio con su prometida.
Lastimosamente hoy en día en la relación de noviazgo que en la
sociedad conocemos hay de todo: besos, caricias, sexo, etc, pero
en la gran mayoría no hay compromiso, pues la mayor parte de
veces lo único que se quiere es pasar un buen momento, lo único
que se quiere es buscar placer.
Este día vamos a analizar el noviazgo, pero a la luz de la escritura,
y vamos a comprender algunas verdades que la palabra de Dios
nos enseña sobre cómo tiene que ser un noviazgo cristiano que
sirva de preparación para un buen matrimonio, y que los jóvenes
puedan valorar esas relaciones que hoy llaman noviazgo, si es que
vale o no vale la pena invertir su tiempo, sus sentimientos y su vida
en esa relación.
I. PRIMERA VERDAD: UN NOVIAZGO CON UNA PERSONA QUE
NO QUIERE NADA CON DIOS SIMPLEMENTE NO VALE LA
PENA (2 CORINTIOS 6:14)
“…No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué
compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿y qué comunión la
luz con las tinieblas?..”.
Este versículo no es una recomendación, es un mandato de nuestro
Dios: no te unas con un hombre incrédulo o una mujer incrédula, es
decir con alguien que no quiere nada con tu Dios. Hacerlo es una
desobediencia contra Dios y su palabra y sabemos que la
desobediencia siempre trae malas consecuencias a nuestra vida.
Comprende que muchas veces puede ser más fácil que un
inconverso te lleve a sus malos caminos, pues nuestra carne
siempre esta habituada al mal, a que tú puedas atraer a un
inconverso que no quiere nada con Dios ni con su iglesia.
Reflexiona en esto: de una persona que no tiene temor de Dios
¿qué se puede esperar?
II. SEGUNDA VERDAD: TENER UN NOVIO O UNA NOVIA QUE
SEA DE LA IGLESIA TAMPOCO ES UNA GARANTÍA DE QUE
SEA LA PERSONA CORRECTA (2 CORINTIOS 11:14)
“…y no es maravilla, porque el mismo satanás se disfraza como
ángel de luz…”
Tienes que comprender que hay personas en la iglesia que no son
verdaderos cristianos, hay personas en la iglesia que aún no están
convertidos verdaderamente al Señor. Lastimosamente muchas
veces la iglesia se puede utilizar nada más como un punto de
encuentro para personas vienen a buscar novia o novio, no a
buscar a Dios, cuídate de esas personas que van a las iglesias por
la carne no por el Espíritu.
Lo importante no es solamente si se congrega en una iglesia, lo
verdaderamente importante es que la persona sea un verdadero
hijo o una verdadera hija de Dios, que haya tenido una verdadera
conversión, que sea un cristiano de verdad.
Y posiblemente te estarás preguntando ¿Cómo puedo saber si es
un verdadero cristiano, como puedo reconocer si es una verdadera
hija de Dios? Y la respuesta es sencilla y nos la dio nuestro Señor
Jesucristo (Mateo 7:16-17) POR SUS FRUTOS.
III. TERCERA VERDAD: HAY NOVIAZGOS QUE SON
DESTRUCTIVOS PARA LA VIDA (LUCAS 17:1)
“…dijo Jesús a sus discípulos: imposible es que no vengan
tropiezos; más !ay de aquel por quien vienen!..”
Un noviazgo que sirva de preparación para un buen matrimonio
tiene que ser con una persona que te edifique, que te apoye, que te
anime a ser mejor, no con alguien que te destruya física o
emocionalmente. ¿Como puedes reconocer una relación de
noviazgo destructivo?
 Te asfixia con sus celos y con sus reclamos.
 Te sirve de obstáculo para lograr tus metas, no te permite
estudiar, no te permite congregarte, no te da libertad, sino que
es una persona controladora, imponente y manipuladora que
muchas veces querrá ponerte en contra de tus padres y de tu
familia.
 Siempre intentará caricias indebidas, y presionara para lograr
lo que él quiere y aun puede llegar a usar la violencia; y si esa
persona es así en una relación de noviazgo ¿cómo crees que
será en un matrimonio??
IV. CUARTA VERDAD: MUCHAS VECES LOS NOVIAZGOS
ESTÁN BASADOS EN OTROS INTERESES Y NO EN EL AMOR
(EFESIOS 5.25)
“…maridos, amad a vuestras mujeres, así como cristo amó a la
iglesia, y se entregó a sí mismo por ella…”
Podemos ver que el mandato del Señor para su pueblo es que los
esposos se amen, esa es la base de toda relación de pareja: el
amor. Pero la realidad es que muchas veces hay otros intereses en
una relación de noviazgo y no es el amor:
 Interés por lo económico: por lo que me regala, por lo que
me compra o lo que me puede pagar.
 Interés por el físico: solamente por la atracción física, por el
atractivo físico que la otra persona tiene.
 Por rebeldía: para llevar la contraria a los padres, para
demostrar que hago lo que me da la gana.
 Por lastima: porque confundimos la lastima con el amor,
porque pensamos que sin nosotros la otra persona está
perdida.
 Por presión: Lastimosamente muchas personas quieren
mantener una relación de noviazgo a la fuerza y le dicen a su
pareja: Si me dejas te va a ir mal.
V. QUINTA VERDAD: UN BUEN MATRIMONIO ESTÁ BASADO EN
UNA RELACIÓN CON ALGUIEN QUE TE OFREZCA UN FUTURO
NO SOLAMENTE UN BUEN MOMENTO (1 SAMUEL 15:18)
“…Entonces uno de los criados respondió diciendo: He aquí yo he
visto a un hijo de Isaí de Belén, que sabe tocar, y es valiente y
vigoroso y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso,
y Jehová está con él…”
Eso es lo que significa un compromiso, una relación con futuro, una
relación que tiene un proyecto de vida juntos. Personas que
quieren pasar un buen momento contigo puede haber muchas, pero
ya sea que seas un joven cristiano o una joven cristiana tienes que
pedirle a Dios una pareja que quiera tener un futuro contigo, que
quiera compartir su vida siempre contigo.
Es por eso también importante que tanto el hombre como la mujer
se prepararen para ese futuro, que estudien, que se preparen para
la vida, y que juntos puedan hacer realidad sus metas y proyectos
con la ayudad de Dios.

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