Fase 2 Primero
Fase 2 Primero
Realiza un organizador grafico sobre cualquiera de los siguientes a saber: (Mapa mental, mapa
conceptual, cuadro sinóptico, etc), en el que dé cuenta del análisis realizado sobre los principios de
la contratación Pública en Colombia.
https://www.canva.com/design/DAFb5mEpNFI/sX0Tc4mh_U7o2juH3-pM5g/edit?
utm_content=DAFb5mEpNFI&utm_campaign=designshare&utm_medium=link2&utm_source=sha
rebutton
Resumen El artículo 209 de la Constitución Política de Colombia expone que las funciones
administrativas deben estar al servicio de los intereses generales que se desarrollan con
fundamentos de los principios de transparencia, fe, eficiencia, economía, objetividad, prontitud,
igualdad y publicidad, mediante la delegación y la descentralización de funciones. Las autoridades
administrativas tienen el deber de establecer sus actuaciones para el apropiado cumplimiento de
los fines del estado. La administración pública, dentro de sus órdenes, debe tener un control
interno el cual se debe ejercer a partir de los términos que señalen en la Ley
La ley 80 de 1993 nace con el fin de convertirse en una ley general del estado que tuviese
cumplimiento dentro de todo el territorio colombiano, cuyo objetivo principal es ordenar los
riesgos y principios que rigen los contratos de las entidades públicas o estatales. Esta ley tiene
como característica principal velar por la satisfacción de los intereses públicos o las necesidades
sociales.
La Ley 80 de 1993 tiene como carácter general de expresión los principios generales sobre la
contratación, la falta de detalles en la regulación es por esto por lo que se permite que mediante
la regulación de los distintos procedimientos se tenga una mejor probabilidad de actuación
positiva sobre la misma, esto con la expedición de varios decretos reglamentarios.
Los contratos que son emitidos por medio de las entidades públicas en la legislación colombiana
están sometidos a un áspero control el cual esta pronosticado desde la Constitución Política de
1991 dentro del inciso del artículo 150, donde mencionan los atributos de las funciones del
congreso, el cual dispone lo siguiente: “Competente al Congreso expedir el estatuto general de la
administración pública y en especial” Dentro de la Ley 80 de 1993 se expone que los servidores
públicos tienen el deber de considerar que la celebración de contratos y la ejecución de los
mismos, en tanto las entidades estatales tienen como fin buscar que se realice el cumplimiento de
los fines de estas, la continua y eficiente prestación de los distintos servicios de carácter público,
además de cumplir con la efectividad de los derechos e intereses de los administradores que han
colaborado con estos en consecuencia de dichos fines.
Las personas naturales o particulares, por su parte, deben tener en cuenta que al ejecutar y
celebrar los contratos con entidades públicas, deben sostener además de la obtención de
utilidades cuyo amparo tiene que garantizar el Estado, también deben contribuir con estas en el
logro de sus fines cumpliendo con la función social que les implica.
Es por esto por lo que la Contratación Estatal consagrada en esta Ley es de suma importancia pues
es el principio básico de la economía, pretendiendo así que los proyectos sean cumplidos y regidos
por entes de suma transparencia
En este orden, la función administrativa del poder ejecutivo e incluso las entidades territoriales
gracias a la descentralización, producen que la capacidad de contratación se encuentre en el poder
de entes jurídicos territoriales, lo cual atribuye a a un aseguramiento de la atención necesaria que
se le debe brindar a las propias jurisdicciones a través de los ejercicios contractuales que se
encuentran sustentando fuertemente los principios generales del derecho
Lo anterior aprueba que la puesta en marcha de tan trascendental ejercicio pueda reposar en una
política de carácter publico la cual tenga a capacidad de centralizarse en los problemas públicos
que se encargan de perjudicar la planeación de la contratación con estas entidades, pretendiendo
consolidar el adecuado ejercicio de las competencias de las funciones administrativas asignadas
dentro del marco de la descentralización
Dentro de esta Ley 80 de 1993, en el artículo 23 encontramos que la contratación estatal cuenta
con siete principios fundamentales que deben tener en cuenta los contratistas, dentro la
adjudicación de lo mismos en la administración pública, ya que estos principios son de suma
importancia para garantizar la transparencia de los procesos de selección. Estos principios son:
Principio de Transparencia:
Por las razones anteriores, cualquier decisión tomada en el camino debe tener una motivación
adecuada, y debe ser posible que cualquier persona verifique y cuestione dicha motivación. Debe
garantizarse absoluta claridad sobre la base de la acción ejecutiva20 desdeel momento en que el
gobierno decide dedicar recursos a un proyecto en particular hasta que el destinatario recibe los
bienes o servicios contratados.
III. Desarrollar reglas objetivas, claras y completas que permitan a los oferentes preparar
sus ofertas y en este sentido garantizar la selección de las ofertas más favorables.
Principio de Responsabilidad: Por tanto, el principio de responsabilidad exige el cumplimiento de
la finalidad del contrato, es decir, la finalidad del Estado y la prestación continua y adecuada de los
servicios públicos. Debe vigilar la correcta ejecución del objeto del contrato, es decir, es
beneficioso para la tarea estatal, es de alta calidad y se encuentra íntegramente cumplido.
Debe proteger los derechos de las entidades, evitar sobrecostos y responder con rapidez a las
solicitudes de los contratistas y ciudadanos beneficiarios del proyecto. Debes proteger los
derechos de los terceros que puedan verse afectados por la ejecución del contrato, evitar que
sufran el menor daño posible e indemnizarlos en caso necesario.
El proceso de contratación no está limitado por el grado de subjetividad, y sus reglas deben ser
precisas, claras y completas, y no pueden estar redactadas de manera ambigua o confusa. Cuando
las normas están mal redactadas, crean inconsistencias entre los proponentes y, por lo tanto,
demandas que podrían haberse evitado. Si una decisión de conflicto de leyes es desfavorable para
el Estado, afectará directamente a los servidores o exservidores públicos.
Los negocios de la administración pública deben ser dirigidos como los de cualquier otro, con ética
y justicia. Algunos conceptos éticos entienden la felicidad como autorrealización. Esta forma de
ética se adhiere a la formación del carácter personal para mantener altos estándares morales.
Para mantener una buena imagen moral, debemos realizar proyectos de autorrealización y
autoestima.
Principio de Economía:
“Los procedimientos o etapas deben ser los estrictamente necesarios para seleccionar la
propuesta más afín a los intereses del Estado y todos los trámites deben adelantarse con
austeridad en tiempo y de recursos en términos de la actuación administrativa, por lo cual los
plazos u oportunidades son preclusivas y perentorias.”
De esta forma, las reglas de procedimiento contractual deben interpretarse de tal forma que no
den lugar a la aplicación de procedimientos adicionales a los expresamente señalados,
permitiendo así tomar decisiones desincentivadoras al ocultar deficiencias formales o incumplir
normas no establecidas.
Principio de Planeación:
Los Principios de Planificación se fundamentan y derivan de los artículos 209, 339 y 341 de la
Constitución y significan que los negocios contractualmente legítimos deben estar debidamente
diseñados y diseñados de acuerdo con las necesidades y prioridades que requiere el interés
público, con el fin de asegurar su eficacia. Eficacia de las actividades de contratación estatal La
sexualidad, la satisfacción efectiva del interés general, la protección de los bienes públicos,
cualquier aspecto amparado por un contrato estatal, cuya copia sea eficaz en la prestación
continua y efectiva de los servicios públicos y los derechos de la administración
Así, según la jurisprudencia reiterada por el Consejo de Estado, la ausencia de este principio atenta
directamente contra la naturaleza misma del interés público, con nefastas consecuencias no sólo
para la consecución de los objetivos contractuales, sino también para el interés público y el interés
público. patrimonio público.
El principio de selección objetiva evita características que motiven preferencias subjetivas por
intereses específicos, sugiriendo que los contratistas son seleccionados por la oferta más favorable
para la entidad y las funciones que desempeña. La legislación evita muy claramente el favoritismo
por una parte contratante o una parte contratante en una elección
La elección objetiva se refleja en la relación entre el monto del contrato y el costo de los servicios
a desarrollar por el contratista, y este requisito debe sustentarse en consecuencia para que la
entidad tenga la posibilidad de verificar
Todos los documentos que lo acompañan pueden determinar la capacidad del oferente para
ejecutar el contrato en las condiciones requeridas por las especificaciones publicadas según lo
exige la ley
La concesión a favor del contratista no podrá exceder las disposiciones contenidas en el pliego
publicado, lo cual es un indicador de que se ha cumplido el propósito de seleccionar
objetivamente la propuesta más favorable y ventajosa para la entidad.
Principio de Publicidad:
En la contratación, este es uno de los principios más importantes consagrados en la Ley N° 1150 de
2007 y sirve como bandera filosófica que refleja la selección objetiva de los contratistas para
desempeñar funciones de acuerdo con la entidad que los emplea.
El debido proceso será el principio rector en la sanción de conductas contractuales. “En desarrollo
de las disposiciones anteriores y de las obligaciones de control y vigilancia de los contratos
correspondientes a las entidades sujetas a la Ley General de Contratación de la Administración
Pública, tendrán la facultad de imponer una multa acordada a los contratistas directos para el
cumplimiento de sus obligaciones. La decisión deberá ser precedida por la audiencia de la parte
afectada, la cual deberá tener procedimiento
mínimos para garantizar los derechos al debido proceso del contratista, y sólo continuará mientras
esté pendiente el cumplimiento de las obligaciones del contratista, quien podrá declarar el
Incumplimiento, a fin de hacer cumplir la cláusula penal contenida en el contrato
“Parágrafo. La cláusula penal y las multas así impuestas se harán efectivas directamente por las
entidades estatales, pudiendo acudir para el efecto entre otros a los mecanismos de
compensación de las sumas adeudadas al contratista, cobro de la garantía, o a cualquier otro
medio para obtener el pago, incluyendo el de la jurisdicción coactiva.”
Parágrafo transitorio: Las facultades previstas en este artículo se entienden atribuidas respecto de
las cláusulas de multas o cláusula penal pecuniaria pactadas en los contratos celebrados con
anterioridad a la expedición de esta ley y en los que por autonomía de la voluntad de las partes se
hubiese previsto la competencia de las entidades estatales para imponerlas y hacerlas efectivas.”