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Cómo Conseguir La Felicida

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¿Cómo conseguir La Felicidad?

Hablar de felicidad es sin duda unas de las preguntas que todas las personas hemos
tenido en algún momento de vida, cuestionarnos acerca de qué produce esa sensación de
bienestar en nosotros y cómo acceder a ella, puede ser la motivación para determinadas
conductas y objetivos, pero realmente ¿Qué es la felicidad?

Iniciemos por la idea desde Comte & González (2001). Para quien es
indispensable retomar el concepto de deseo, ya que, es éste la esencia del hombre y de esta
manera la felicidad está en todo lo que se desea; es decir, los seres humanos encontramos
felicidad en aquellos objetivos o metas que ponernos en el futuro, específicamente en
aquello que nos falta y que esperamos que suceda para “Ser felices”, sin embargo, una vez
se alcanza el propósito o conseguimos lo que esperábamos, se tiende experimentar
sentimientos de aburrimiento porque ya no hay deseo, por ende ya no existe la felicidad.

Desde esta mirada, los seres humanos para hallar la felicidad podemos encontrar
tres opciones (1) El olvido o la diversión, que nos invita a pensar en otra cosa, a fingir que
no nos aburrimos, (2) La huida hacia adelante, es decir de esperanza en esperanza; fijando
la felicidad siempre en un nuevo deseo, y finalmente propone (3) El salto, que se convierte
en una esperanza absoluta que se encontrará después de la muerte. De este modo, se podría
inferir que la mayor barrera para encontrar la felicidad es la esperanza, porque “esperar es
desear sin saber” (Comte & González, 2001, p. 45).

La invitación de Comte-Sponville, para encontrar la felicidad es precisamente la


desesperanza, en el sentido literal de esta misma, en otras palabras, el autor nos invita a
vivir sin esperar y refiere el término “La felicidad del acto” que no existe en el futuro, en la
esperanza, sino que solo existe en el presente, se construye desde la voluntad y sí depende
de nosotros.

Por otra parte, la noción de felicidad desde Epicuro nos lleva al concepto del placer,
que se define como la cosa más importante de la vida humana y bajo la cual se puede
construir la felicidad “El placer es el principio y el fin de una vida feliz”. Y señala dos tipos
de placeres (1) Los Catastemáticos (Placeres en reposo), haciendo referencia a un estado
físico que se caracteriza por la ausencia de dolor en el cuerpo o perturbaciones en el espíritu
y (2) Los Cinéticos (Placeres en movimiento) y son aquellos relacionados con el cuerpo,
como la bebida, la risa, la amistad y el sueño.

De esta manera, para Epicuro la felicidad es placer en un estado donde no hay


perturbaciones, y el camino para buscar dicha felicidad está relacionado con el ser buenos
en el actuar e identificar y elegir, entre aquellos deseos que son naturales/necesarios de
aquellos que no lo son. También, define tres ingredientes de la felicidad (1) Tener amigos,
personas con las que tengamos un contacto permanente y con quien se aprende el arte del
buen vivir, (2) La libertad, el poder ser independiente, autónomos, libres de costumbres y
política, y (3) una vida bien analizada, con tiempo para la reflexión y pensamientos en
calma.

Como podemos evidenciar, la felicidad desde esta postura se relaciona con lograr
tener una vida sencilla, consciente y plena, vivida desde las grandes virtudes, disfrutando
desde las acciones diarias sin dejarnos llevar por los bienes materiales o placeres no
necesarios, pero ¿Cómo lograrlo en la actualidad?

No cabe duda que durante el siglo XX el consumismo aparece como una gran puesta
para fomentar el gasto y generar nuevas necesidades a las comunidades, llevando a
entender la felicidad desde la postura de Comte-Sponville, construyéndola desde aquello
que nos falta. Hoy es común que la mayoría de las personas piensen en su felicidad dentro
del futuro: Cuando tenga, cuando pase, cuando compre, cuando vaya. Es decir, como se
expuso anteriormente, una felicidad basada en deseo y carencia, pero que cuando esa falta
se cubre ya no nos sentimos felices y quizá la mejor estrategia que hemos implementado
para continuar es vivir de salto en salto.

Ahora, la felicidad entendida desde Epicuro nos invita a vivir de manera mesurada,
a disfrutar de lo poco, a meditar sobre las cosas que nos hacen felices, a reconocer nuestros
deseos y gozar el placer desde lo mínimo, lo cual podemos ver desde lo más minúsculo de
la existencia misma, como, por ejemplo: cuando tenemos sed y bebemos un vaso de agua
satisfacemos el deseo, y ello podemos experimentar cierta felicidad, está sería la mejor
manera de construirla.

A manera de conclusión, ambos autores incluyen el placer como un factor


determinante en la construcción de la felicidad, pero no un placer en el futuro sino en el
presente, que es construido por los seres humanos en la medida que se logra renunciar a los
placeres que no son necesarios o que están puestos en el futuro y que no dependen de
nosotros, sino que se construyen con voluntad. La felicidad para ambos es ausencia de
dolor, sufrimiento y la capacidad de lograr desear/disfrutar lo que se vive/tiene en el
presente, esta es la felicidad que deberíamos elegir todos los seres humanos. ¡En la
sociedad actual, cuanto nos falta construir esta felicidad!

Referencias

Álvarez, C. P. (2000). La filosofía y el sabio estoico: examen de la virtud. Horizontes


educacionales, (5), 27-35.
Comte-Sponville, A., & González, E. F. (2001). La felicidad, desesperadamente. Paidós.
Epicuro y la felicidad. (2023).En H. Mazo, Cuidado del sí. UPB

López Salort, D. O. (2021). Epicuro: los caminos para la felicidad. Enfoques, 33(1), 87-105.

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