Universidad Nacional Experimental del Táchira.

Departamento de Ingeniería de Producción Animal.

Legislación valores y proyecto. 2022-3. Moreno V. Yelitza.

El delito cibernético, también conocido como delito informático, es una

preocupación creciente en todo el mundo a medida que avanza la tecnología y
se realizan más actividades delictivas en línea. Incluye una amplia gama de
delitos, como piratería informática, robo de identidad, fraude informático y
acoso cibernético. Estos problemas empezaron a surgir fuertemente en el siglo
XX con los hackers que buscaban desafiar el sistema. En Venezuela, estas
actividades están reguladas por la Ley de Delitos Informáticos y su reforma
reglamentaria, en la que se describen varios tipos de delitos informáticos y las
sanciones que pueden imponerse por los mismos.

El origen de los delitos informáticos yacen de los años 70, la literatura

menciona que estos eran hackers que generalmente eran jóvenes entusiastas
que buscaban desafiar a los sistemas informáticos y demostrar sus habilidades
técnicas. Con el tiempo, los delitos cibernéticos se han vuelto mucho más
sofisticados y organizados. Los criminales utilizan técnicas como el phishing, el
malware y el ransomware para robar información o dinero de empresas y
particulares. También han surgido nuevas formas de delitos cibernéticos, como
el cibercrimen y el ciberterrorismo, los cuales son penalízalos en muchos
países del mundo. Actualmente, hay una creciente conciencia sobre la
necesidad de abordar los delitos informáticos debido al aumento de su
incidencia y el alcance global de la tecnología.

Por lo general, los delitos informáticos se consideran infracciones a la ley

basadas en el derecho penal y, por lo tanto, pueden ser perseguidos y
sancionados en cualquier lugar del mundo. Muchos países tienen su propia
legislación específica para los delitos informáticos, que detallan los
procedimientos de investigación y enjuiciamiento adecuados para este tipo de
crímenes.
 En el caso de Venezuela, “la ley especial contra delitos informáticos”
busca garantizar la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los sistemas
informáticos, redes de datos y servicios relacionados en el país, al mismo
tiempo que protege la seguridad y privacidad de las transacciones electrónicas.
La ley prevé la investigación, el enjuiciamiento y el castigo de los delitos
relacionados con la informática, y describe los procedimientos y requisitos para
las investigaciones y pruebas legales, está ley incluye el acceso no autorizado
a un sistema informático o red, la interceptación de datos o comunicaciones, el
robo de datos electrónicos y la distribución de software malicioso. Las
sanciones pueden variar desde multas hasta prisión, según la naturaleza y la
gravedad del delito cometido.

Así mismo, la Ley de Delitos Informáticos y su reforma reglamentaria,

además de señalar las sanciones para los delitos cibernéticos, también
establecen procedimientos y requisitos para las investigaciones y pruebas
judiciales. Esto es importante para garantizar que los organismos encargados
de hacer cumplir la ley puedan investigar y enjuiciar de manera efectiva los
delitos cibernéticos, y que las pruebas obtenidas por medios legales sean
admisibles en los tribunales. En general, la ley juega un papel crucial en la
protección de los venezolanos de los daños del ciberdelito. Al delinear los tipos
de delitos y las sanciones asociadas con ellos, así como los procedimientos
para investigar y enjuiciar estos delitos, la ley brinda un marco para tratar el
delito cibernético que garantiza la seguridad de las personas, las empresas y
las organizaciones en el entorno digital.

Por otra parte, cuando se habla de las firmas electrónicas, se hace

alusión al método actualmente muy utilizado para los trámites legales para
agilizar de manera eficiente el tiempo en procesos como apostillas, tributos,
registros, legalizaciones de títulos y demás documentos necesarios, para la
firma de documentos de forma digital solo con el acceso a internet. También
en muchos países, incluyendo Estados Unidos y la Unión Europea, existen
leyes específicas que definen y regulan el uso de las firmas electrónicas y
establecen medidas adicionales de seguridad para garantizar su autenticidad.
Por ejemplo, en Estados Unidos, la Ley de Firmas Electrónicas y el Estatuto
UETA (Uniform Electronic Transactions Act) reconocen la legalidad de las
firmas electrónicas y establecen requisitos técnicos para su uso adecuado.

En el caso de Venezuela, son muy utilizadas para los procesos legales,

estas brindan mayor seguridad y autenticidad que las firmas en papel, ya que
utilizan tecnologías basadas en criptografía para prevenir la suplantación de
identidad y el fraude. En el ámbito empresarial, las firmas electrónicas han
ganado terreno en la realización de transacciones online y, ya que permiten
que este proceso se lleve a cabo de manera más rápida y económica. Además,
las firmas electrónicas están disponibles en varias formas, incluyendo la firma
basada en certificados, la firma biométrica o incluso las soluciones de firma
gestionada, lo que la hace muy flexible a diferentes necesidades
empresariales.

Adicionalmente, para regular y controlar las actividades del sector

tecnológico el rango de sanciones aplicadas generalmente depende de la
gravedad del delito cometido y puede incluir encarcelamiento, multas y otras
medidas que las autoridades consideren apropiadas. El acceso no autorizado
al sistema se considera uno de los delitos más graves contemplados en esta
ley. Cualquiera que obtenga acceso, sin permiso, a los sistemas informáticos
de otra persona puede enfrentarse a penas de prisión de hasta cuatro años.
Según la ley, la interceptación de comunicaciones electrónicas puede acarrear
una pena máxima de seis años de prisión.

La ley también establece sanciones para otros delitos basados en la

tecnología, como el acceso ilegal a información confidencial, la piratería y la
creación o distribución de software malicioso o virus. La fabricación,
distribución o venta de dispositivos técnicos de vigilancia, como cámaras espía,
también se considera ilegal según esta ley, además, en 2021, el gobierno
promulgó la Ley Antibloqueo, que tiene como objetivo dificultar que las
sanciones extranjeras afecten la economía del país. La ley, que algunos
consideran controvertida, incluye disposiciones que exigen que las plataformas
digitales y los proveedores de servicios de Internet cumplan con las
regulaciones gubernamentales para monitorear y bloquear sitios web que no
cumplan con las pautas nacionales establecidas por las autoridades.

Si bien existen varias leyes y reglamentos que rigen la tecnología de la

información en Venezuela, siempre es importante tener en cuenta que las
sanciones por estos delitos pueden variar dependiendo no solo de la gravedad
del delito sino también del sistema legal del país. Por lo tanto, es recomendable
consultar a un experto legal en el país para comprender a fondo las leyes y
reglamentos relacionados con las actividades de tecnología y uso de
computadoras.

Por ende, es interesante considerar la existencia de la tipificación de los

ciberdelito, ya que es un proceso complejo que involucra muchos componentes
diferentes. Uno de los principales objetivos de tipificar el delito cibernético es
establecer definiciones legales claras para varios tipos de actividades delictivas
que se cometen utilizando computadoras, redes u otras formas de
comunicación electrónica. Esto incluye cosas como la piratería, el robo de
identidad, el fraude en línea y muchos otros tipos de actividades delictivas en
línea.

Una vez establecidas estas definiciones legales, es necesario determinar

las penas apropiadas para los diferentes tipos de delitos. Esto puede implicar la
creación de nuevas leyes o la modificación de las leyes existentes para
garantizar que sean aplicables a las circunstancias únicas de los delitos
cibernéticos. Las sanciones por delitos cibernéticos pueden variar desde multas
y servicio comunitario hasta encarcelamiento y otros castigos severos. Además
de definir los hechos delictivos y determinar las sanciones correspondientes, la
tipificación de los ciberdelitos también implica establecer procedimientos para
investigar y enjuiciar a los autores. Esto puede incluir la definición de las
funciones y responsabilidades de los diferentes organismos encargados de
hacer cumplir la ley y la creación de protocolos para recopilar, analizar y
presentar pruebas digitales en los tribunales.
 Además, tipificar el delito cibernético ayuda a las jurisdicciones a
establecer medidas preventivas y protecciones para minimizar el impacto de los
ataques. También ayuda a desarrollar un marco legal integral que se ocupe del
delito cibernético, que va desde medidas regulatorias hasta pautas de
procedimiento durante las investigaciones y las acciones posteriores al ataque
cibernético.

Es importante ante esto, tener en cuenta varias opciones preventivas

para evitar los delitos informáticos como por ejemplo, mantener el software y
los sistemas actualizados, utilizar contraseñas seguras y diferentes para cada
cuenta, utilizar software antivirus y firewalls, ser precavido en el uso de las
redes sociales: se debe limitar la información que se comparte en las redes
sociales y ser precavido en la interacción con extraños, no abrir correos
electrónicos de destinatarios desconocidos, no descargar software proveniente
de fuentes desconocidas, y en un caso de mejor seguridad utilizar vpn pago
para enlazar cuentas y tarjetas y asegurar así nuestros datos.

Finalmente es importante tener en cuenta la necesidad de conocer está

ley ya que en la actualidad por medio de las redes se ve inmerso gran parte de
nuestros días, sea por estudio, trabajo o entretenimiento, hay que estar alerta y
tener en cuenta que la prevención es clave en este sentido, y es importante
estar constantemente actualizado sobre el tema. Siempre es necesario acceder
a un asesor legislativo para comprender mejor cada detalle de la ley, en caso
de necesitar ampliar información sobre este tema. Así mismo conocer la
necesidad de tipificar el delito cibernético para mantener la ley y el orden en el
mundo en línea, garantizar la seguridad de las personas y las organizaciones y
preservar la integridad de los avances tecnológicos de la sociedad.
 Referencias en línea

 Gaceta oficial, 2021. Ley especial contra los delitos informáticos.

Recuperado:
https://www.oas.org/juridico/spanish/mesicic3_ven_anexo18.pdf
 Parada Ricardo, 2018. Cyber crimen, delitos informaticos. Recuperado:
https://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/2018/09/doctrina46963.p
df
 Rodolfo Posada, 1998. Delitos informáticos. Recuperado:
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 Diario aporrea, 2022. Prevención digital. Recuperado:
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 Estado diario, 2022. Prevención de delitos informáticos.
Recuperado:https://estadodiario.com/al-aire/algunas-consideraciones-
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 Miranda Pablo, 2017.La necesidad de tipificar el delito de fraude informático
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https://repositorio.uchile.cl/bitstream/handle/2250/151758/La-necesidad-de-
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 Del pino Santiago, 2016. Delitos informáticos. Recuperado:
https://www.oas.org/juridico/spanish/cyb_ecu_delitos_inform.pdf