Tehprahica: Romea
Tehprahica: Romea
Tehprahica: Romea
ROMEA
TEHPRAHICA
ZARZUELA
en uo acto, dividido en tres cuadros, en prosa, origina)
GERONIMO
CUARTA EDICIÓN
1S13
IvA TBMPRANICA
Esta obra es propiedad de su autor y nadie po-
,
original de
JULIAN í*OME^
música del maestro
CUARTA EDICIÓN
MADRID
S. VKLASCO, IMP., MAEQÜÉS DE SANTA ANA* 11 I>0P.*
Teléfono número 651
1913
£C /vfygueí ^an)05 Qarnón
REPARTO
PERSONAJES ACTORES
ESCENA PRIMERA
Al levantarse el telón sale de la casa el CUERO, que hace sonar su
bocina, á la que responden dentro otras. Van apareciendo por dis-
Música
Coro (Dentro.)
La caza ya se esconde,
la luz del día huyó;
674687
~ 8 —
espera al nuevo día,
descansa, cazador.
La cena nos aguarda
y el lecho pronto está;
el cuerpo fatigado,
reposo pide ya.
Y siguiendo la jornada,
dando ojeos sin cesar,
caza buena y abundante
no cansarse de cobrar.
Buen almuerzo á medio día,
rico vino, agua mejor.
Ya las fuerzas se reponen.
Ya está listo el cazador.
La caza ya se esconde,
la luz del día huyó,
etc., etc.
Hablado
Luis Bueno, muchachos, idos á descansar á los
lugares de abajo, donde tenéis buena cena.
A dormir y á prepararse para los ojeos de
mañana, que serán los últimos, porque nos
volvemos á Granada por la noche. (1)
Uno Gracias, mi amo. (Vase foro.)
Luis ¡Abur! (Llamando.) ¡Curro!
Curro (saliendo.) ¡Zeñorico!
Luis Llevaos adentro eSOS arreos. (Entregan las ar-
ESCENA II
DICHOS, MORONDA
ESCENA 111
ESCENA IV
DICHOS, CÜRRO y GRABIÉ
vanta.)
Luis Sí, nos conocemos hace tiempo.
Grab. Zi zeñó; y tóos lo queremos rnuncho; y mi
hermana má.
Luis Calla, muchacho.
Grab. Po poquita duca pasó mi María cuantito
osté ze marchó. Ze queó má fina que una
cañasuca, y decían que iba pa távira. Má
zuspiro jechó de su cuerpo que lo fueye de
la fragua; y zus ojos yoraban, yoraban, que
uno era er Darro y otro er Geni.
Luis Vamos, ¿te quieres callar?
Mar. No, que siga, que siga...
Ram. Aquí hay aventura, Luisito.
James Interesante mucho.
Luis Pero señores...
Mar. Cuenta, cuenta, Grabié...
Grab, Y ze queó má trizte que un gorrión embra-
ga o; y mi pare le endiñaba candela... y mi
mare le cantaba...
«Tempranica m'ha zalío
como la fló del armendro...»
porque dijo que la mosita no puen queré de
chavaliya. Po aluego ya no yoraba; y ze
queó ma zeria que un civil. Y le jablaban y
— 14 ~
no desía ná; y azín ze pazó jasta que co-
mensó á ronipé y dijo que ya lo había or-
vidao tóo, y tomó otro queré con Migué er
Lobito, que é un moso güeno y tiene parné,
y la camela mucho y ella á é... y na má.
Luis ¡Ah! ¿tiene un novio? Pues me alegro con
toda mi alma.
Mar. > Vay a >
vaya... ¿conque esas tenemos, don
Luis?
Ram. ¿Conque hay novelar
Luis jQué tontería!
Mar. ¡Que la cuente!
Luis jHombre, por Dios!
James Cuente usté, por favó.
Luis Vaya, vaya; dejémonos de tontunas Canta,
Gabrielillo; canta, que para eso te hemos
llamado. Alegra el monte con tus cancio-
nes y echa aquel baileciilo que me hacía
tanta gracia. Ya verán ustedes, ya verá usté,
James, qué salado es el chiquillo.
Mar. Bueno; pero en la mesa lo cuenta usted.
Ram. Sí; no se escapa.
Luis Bien, bien; ya hablaremos. Anda, Gabriel.
Grab. Po en cuantito zepa mi Tempranica que está
ozté aquí...
Luis Pero como no lo sabrá...
Grab. Es que yo...
Luis Es que tú te vas á callar.
Grab. Zi meva á conocé la alegría en la cara.
Lurs Pues que no te la vea.
Grab. ¿Y quié usté que me merque una careta pa
andá por el rancho?
Mar. ¡Ea! venga ese cante y te ganas un duro.
Grab. ¿Un duro? Po jagan ostés parmitas sordas,
que me vi á bailá más que la tarántula, (se
sientan mientras Grabié canta.)
Música
^aislado
cuentro!
ESCENA V
DICHOS menos GRABIÉ
ESCENA VI
Queda la escena sola unos momentos, durante los cuales se oye den-
tro de la casa el bullhúo y algazara de los cazadores. Óyese tam-
bién el ruido de ios cubiertos, vasos, etc. A través de las ventanas
se percibe la luz de la habitación. Sale Grabié con precaución por
el fondo izquierda, llega de puntillas hasta la puerta. Luego va al
~- 19 —
banco que hay bajo la ventana, sube y observa lo qüe ocurre dentro.
Baja rápidamente y corre hasta el sitio por donde salió. Lanza un
débil silbido y vuelve' al banco. En seguida sale por el mismo lado
la Tempranica
María ¡Zi é que quieo velo yo zola .,. ¡yo zolal (1)
Gtrab . ¡Míralo ayí!
María ¿Ouá é? ¿Aqué zin pelo?
Grab . No, chiquiya; má pa acá.
MARÍA Eze tampoco é... (Empuja á Grabié.)
Grab. No arrempuje. (2)
María ¡Ay! ¡Pare mío Jesú! ¿Ande está este hom-
bre?
"Grab . Má pa acá.
MARÍA (Gritando sin poder contenerse.) ¡Ay! ¡Ya lo Veo
ya lo veo!... ¡Zí, zí!... Zon zus
ojos que se cla-
van... ¡Zu riza, que jace alegrá er zentío! ¡Zu
boca... nío e palabrica durses que jieren en
er pecho COn mucho ange!... (Bajando del banco
y con resolución.) Yámalo, Grabié.
•Grab . Chiquiya, ¿estás loca?
María ¡Yámalo!
Grab. Si me dijo que no te dijera ná!
María O lo yama ó entro yo. -
(l) Grabié.
María
(2j María.
Grabié.
— 20 T
-
ESCENA VII
MARÍA LA TEMPRANICA ;
luego DON LUIS y GRABIÉ
Música
María Yo no zé al verte
qué m'ha pazao,
que toita el arma
ze m'ha alegrao.
Ya güervo á hablarte,
ya estoy loquita.
Ya no m'ha aparto
de tu verita.
Y no me digas, Luis,
no me digas que no,
porque entonces, chiquiyo,
me muero de dolor.
(l) María— Grabié -Don Luis.
— 22 —
Luis Calma, calma, Temprana,
y escucha, por favor,
los consejos leales
que voy a darte yo.
María Si es pa decirme
que no te quiera,
ya pues j echarte
pa otra verea.
Tú m'has querío,
me lo has jurao,
y en tus palabras
me he confiao.
Na más con una lisión
me enseñastes á querer;
no me enseñes á orvidá,
que no lo quiero aprendé.
Luis Pero criatura,
¿tú por qué me quieres,
si al dejarte dije
que era para siempre?
Yo no te he mentido;
¿qué es lo que deseas?
María ¿Que por qué te quiero?
¡Ni lo sé siquiera!
Te quiero... porque eres güeno,
porque tienes noble el alma;
te quiero... porque á quererte
me yevaron tus palabras.
Ni sé lo que ziento,
ni sé que me pasa,
ni yo sé er motivo,
ni yo sé la causa
Te quiero por lo que dice
esa copla que se canta.
¡Te quiero porque me sale
de los rincones del alma!
¡Te quiero porque me sale
derjondo de mis entrañas!
Luis ¡Tempranica, Tempranica,
niña de mi corazón!
echa un poco de agua al fuego
de esa indómita pasión.
Vé que tienes pocos años
y aun no empiezas á vivir;
tiempo tienes, Tempranica,
de querer y de sufrir.
— 23 —
María ¡Várgame un debé der sielo;
yo que me yegué á pensá
que na má que con queré
toíto se puede lográ!
Han yenao tus palabrica
de peniya er c rasón.
¡Ya robaste mi alegría!
¡Ya mataste mi ilusión!
Luis No llores, muchacha,
por Dios te lo pido;
te juro que siempre
seremos amigos.
María Eso que tú píes
no lo armito yo.
Aguantarme... sí.
¡Conformarme... no!
Luis Vete, María,
no vuelvas más;
piensa que pronto
te has de casar,
y que ese mozo
que aguarda allí,
con su cariño
te hará feliz.
María Ya voy á di míe;
no güervo má;
y aunque muy. pronto
me he de casar,
sólita quedo,
porque sin ti,
naide en er mundo
me hará feliz.
Hablado
María Una coza zola me va á decí.
Luis Dí, lo que sea, y pronto, que mis amigos es-
peran.
María Tú... ¿quién eres?
Luis Pues., ya lo sabes. Un labrador... un cual-
quiera... ¿Qué
importa? te
María Pero... ¿eres persona fina?
Luis Mujer... creo que sí.
María ¿Y no pué zé nunca mío?
Luis Vamos, criatura, sé juiciosa. ¿No quieres á
tu novio? ¿No es bueno para tí?
María Es pan d'azúca. Es un mozo barí. Es güeno
como una onza... Pero tú... ¡tú te yevate mi
corasón!
Luis Vaya, pues te lo devuelvo, y no hablemos
más.
María ¿De mó y manera... que... jata nunca?...
Luis Sí, Temprana, sí; esto ha concluido. No llo-
res, que tú serás feliz.
María ¡Felí... felí!... Zí, tié razón... Ya no lloro... ¿Lo
vé?... Pero... dime que te acordarás de mí.
Luis ¡Oh! Eso, de seguro.
María Pos no te pío má. Pero no me güerva á vé,
porque si te veo me rebelo.
ESCENA VIII
MUTACION
(l) James— María— don Mariano— don Luis— don Ramón.
— 26 —
CUADRO SEGUNDO
Un rancho de gitanos en lo alto de la sierra; segundo término dere-
cha, un cobertizo con tejadillo, bajo el cual está la fragua y el yun-
que. Una especie de cercado mal hecho con piedras y ladrillos en-
cierra la escena desde el segundo término al proscenio. En el cen-
tro tiene este cercado un espacio va^ío, que es la entrada al recin-
to. De esta entrada parte un camino en cuesta descendente, por el
que suben los personajes á escena. En el telón de fondo se ve Sie-
rra Elvira con sus cumbres negadas. Delante se ve á lo lejos Gra-
nada á vista de pájaro. Es el caer de una tarde del mes de Sep-
tiembre.
ESCENA PRIMERA
La TEMPRANICA dando á los fuelles en la fragua. El SEÑÓ CHANO
trabajando en el yunque, haciendo ayudado por GRABIÉ,
clavos,
que mete y saca el hierro del fuego, y por PILÍN, niño de seis años.
Trozos de hierro, herramientas, espuertas de clavos, etc., bajo el co-
debe haber un perro y dos ó tres gallinas. Sobre la cerca unas cuantas
jaulas de pájaros, y en el suelo, arrimada á la tapia, otra jaula grande
de caña con un gallo de pelea. Al levantarse el telón empiezan á llegar
varios GITANOS de ambos sexos, que quedan en escena durante el.
número musical
Eftúsicsa (i)
Zalea i Triqui-tri,
Jüan )
triqui-tra,
etc., etc.
Hablado
Salú ¡Chano!
Chano ¡Zalú!
Salú Ascucha.
Chano ¿Qué quieres?
Salú ¿Mo vamo á morí de jambre?
Chano ¿Hay pa engañarla? .
S a lú Hay.
Chano Po... ¡ay, ay, ay!... venga lo que haiga.
Past. ¡Zalea!
Zalea ¡Pastora!
Past . ¿Tú has escuchao?
Zalea t
Yo no, pero el estógamo sí, que me da ca
tronío...que m' atonta.
Past. Po arsa ya á jañipeá.
Grab. Mare, ¿hoy hay conejo?
Salú Hoy hay papas en su propia zangre, y un
tiro meyiso pa ca uno.
Grab. Pos er tiro pa un pobre. Vengan las papas.
Pilín ¿Y hay vino?
Past. ¡Vino er diluvio y no te ajogaste, mardesío!
Zalea ¡Ea, Juan! Ya está mi niño má fresco que
un rábano. Míalo que bien pelao.
Juan. No ze distingue po er pelo zi esto é una
criatura ó é una rana.
Zalea Pero bonito zí que ha queao.
Juan Ezo zí, ¡está pa chillalo!
ESCENA II
DICHOS y MIGUEL
ESCENA III
ESCENA IV
(1 ) Miguel— María.
(2) María— don Mariano— don Luis— James— don Ramón.
— —
Mig. Zí zeñó, fragua hay, místela aquí; pero está.
apagá: de mó y manera que eza función z'ha
concluío.
Mar. ¡Qué lástima!
Mig. Pero va á habé otra función más mejó en
toavía y yo les convío zi quien ve canela
fina.
Mar. [Hombre, hombre, sí que queremos!
Luis ¿Y qué función es esa?
Mig. Po na má que una juerga divina, con cante,
baile y el disloque.
Ram. ¡Caramba, qué suerte!
James Buena fortuna tenemos.
Luis ¿Y con qué motivo se da esa fiesta?
Mig. Osté carcule, zeñó. Tengo una novia má
fresca que las rosas y más durse que el ca-
ramelo, y zu pare me ha dao er permizo
antié pa que zea mía, Yo quieo dar envidia
á tó er mundo y he dispuesto un jaleo pa
hoy. Ayé no pudo zé porque eztuve tó er
día en Graná mercando unos cabayo. Den-
tro é ná vendrá aquí toa la gente y ostés»
que han llegao á tan güeña hora, me van á
jacé er favó de tomá una caña á la salú de
la novia.
Luis Con mucho gusto.
Mar. Y un hombre rumbo-
á la del novio, que es
soy simpático por la muestra.
Ram. ¿Eh, señor James? Esto es mejor aún de lo
que buscábamos.
James Yo muy contento.
Luis ¿Y es joven?
Mig. Veinte años tiene
Mar. ¡Vaya un reconstituyente para un enfermo!
Ram. Y bonita... por supuesto.
Mig. ¿Bonita?... ¿Osté ha visto la Vinge de la An-
gustia?... Po, cazi, cazi ayega á eya.
Luis ¿Y cómo se llama?
Mu. María, pero acá la llamamos tóos la Tem-
pranica. (Pausa. Todos se miran sonriendo malicio-
samente. Don Luis queda inmóvil y serio.) ¿Qué fué?
¿No les ha gustao er nombre?
Mar. ¡Sí... sí... la Tempranica... ¡Muy bonito!
Ram. ¡Graciosísimo! ¡Ya lo creo!
MlG. Ya no debe de tardar. (Se aparta un poco á ver-
si vienen.)
3
— 34 —
Luis (Aparte á los otro?.) Vamonos, señores...
Ram. ¡Nada de eso!
Mar. ¡Ahora menos que nunca!... ¡Pues si este va
á ser el capítulo más interesante de la no-
vela!
Luis Señores,., que la cosa puede acabar mal.
Mar. ¡Bah! ¿Quién piensa en eso?
Luis Por favor... yo ruego á ustedes..,
Mig. Aquí viene la gente.
Luis • (¡Maldito contratiempo! ¿Cómo no lo cal-
culé?)
ESCENA V
DICHOS, CHANO, SALÚ, PASTORA, ZALEA, PILÍN, JUAN, GITA-
NOS y GITANAS, COPO GENERAL con guitarras, panderas y pali-
llos. Un gitano trae una cesta ccn botellas de vino blanco y vasos.
Música
Coro ¡Ea! [Ea!...
Vayan peniya afuera
que hoy es er día
de matá las penas.
Se romandiña
una niña morena
con un mosito
d'asúca y canela
Hoy va á sé día
de buya y de fiesta.
¡Ea, ea!
¡Vayan peniya afuera!
chiquiya, salí,
Salí,
chiquiya, á canta,
sali,
que ya viene
esa mosita juncá.
¡Ole ya!
— 35 —
Salí, chiquiya, salí,
que ya viene
esa rosita de Abril.
¡Ea, ea!
jVárgame la Vinge!
¿Qué es lo que yo he visto?
¡Ese hombre me quiere!
¡Por verme ha venío!
¡Ay, amante, amantito,
amante, amante!
¡Las pestañas me estorban
para mirarte!
Al compás de tus ojos
yevo los míos; .
da pensativa.)
HabladQ
(Sale Grabié por el foro y se acerca á la Tempranica ;
guiente:)
Grab. ¡María! (1)
María ¿Qué?
Grab , ¿Tú zabe una coza
MUTACION
— as —
CUADRO TERCERO
El carmen de don Luis en Granada, Fachada de la, casa al fondo
izquierda. La escena un jardín elegante y bien cuidado. Del
es
fondo derecha hasta el proscenio del mismo lado una calle de
aro jstos (rosales, etc.), que termina en primera caja en un cena7
dor bien cubierto de yedras y plantas, de modo que oculten bien
Por las ventanas abiertas del edificio se ven las habi-
el interior.
ESCENA PRIMERA
DON LUIS, LA CONDESA, MIS TE R JAMES, DON MARIANO, DON
RAMÓN, SEÑORITAS y CABALLEROS. Al levantarse el telón, va-
rias parejas bailan dentro de la casa. Luego salen á escena. La Con-
desa, conduciendo un elegante cochecito con capota, dentro del cual
ESCEN A II
ESCENA III
María ¡Grabié!...
Grab . ¿Qué?
María ¡Yo m'ajogo! ¡Ya z'acabó tó!
Grab . María...vamonos de aquí...
María Aspera... (Sale rápida del cenador, mira alrededor
suyo y luego se acerca al cochecillo.)
TELON
A la décima representación de esta obra,
empresa.
OBRAS DE JULIAN ROMEA