La Honra de Dios
La Honra de Dios
La Honra de Dios
1 Samuel 2:30
30 Por tanto, Jehová el Dios de Israel dice: Yo había dicho que
tu casa y la casa de tu padre andarían delante de mí
perpetuamente; mas ahora ha dicho Jehová: Nunca yo tal
haga, porque yo honraré a los que me honran, y los que me
desprecian serán tenidos en poco.
Vivimos en un mundo cada vez más apartado de Dios.
Un mundo lleno de contiendas, de chismes, de envidias,
de brujería, de idolatría, de traición, de juzgamiento.
Un mundo en donde prima el dicho común, no de “haz el bien
y no mires a quien” sino la frase “el fin justifica los medios” y
aquí vemos como somos engañados, hasta cuando leía sobre
esto vi que erróneamente había creído lo que todo el mundo
decía, que quien había dicho esta cita Maquiavelo.
Destruimos la integridad de una persona sin investigar si lo
dicho es realidad.
La frase no es de Maquiavelo, la dijo Napoleon y fue atribuida
a Maquiavelo como conclusión de su libro El príncipe, a lo que
se concluyo que lo que quiso decir fue esto.
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1 Daniel 1-21
Daniel y sus compañeros en Babilonia
1 En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino
Nabucodonosor rey de Babilonia a Jerusalén, y la sitió. 2 Y el
Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de
los utensilios de la casa de Dios; y los trajo a tierra de Sinar, a
la casa de su dios, y colocó los utensilios en la casa del tesoro
de su dios. 3 Y dijo el rey a Aspenaz, jefe de sus eunucos, que
trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes, 4
muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen
parecer, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de
buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del
rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos. 5
Y les señaló el rey ración para cada día, de la provisión de la
comida del rey, y del vino que él bebía; y que los criase tres
años, para que al fin de ellos se presentasen delante del rey. 6
Entre estos estaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los
hijos de Judá. 7 A estos el jefe de los eunucos puso nombres:
puso a Daniel, Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y
a Azarías, Abed-nego. 8 Y Daniel propuso en su corazón no
contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el
vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que
no se le obligase a contaminarse. 9 Y puso Dios a Daniel en
gracia y en buena voluntad con el jefe de los eunucos; 10 y
dijo el jefe de los eunucos a Daniel: Temo a mi señor el rey,
[Escriba aquí]
que señaló vuestra comida y vuestra bebida; pues luego que
él vea vuestros rostros más pálidos que los de los muchachos
que son semejantes a vosotros, condenaréis para con el rey
mi cabeza. 11 Entonces dijo Daniel a Melsar, que estaba
puesto por el jefe de los eunucos sobre Daniel, Ananías,
Misael y Azarías: 12 Te ruego que hagas la prueba con tus
siervos por diez días, y nos den legumbres a comer, y agua a
beber. 13 Compara luego nuestros rostros con los rostros de
los muchachos que comen de la ración de la comida del rey, y
haz después con tus siervos según veas. 14 Consintió, pues,
con ellos en esto, y probó con ellos diez días. 15 Y al cabo de
los diez días pareció el rostro de ellos mejor y más robusto
que el de los otros muchachos que comían de la porción de la
comida del rey. 16 Así, pues, Melsar se llevaba la porción de la
comida de ellos y el vino que habían de beber, y les daba
legumbres. 17 A estos cuatro muchachos Dios les dio
conocimiento e inteligencia en todas las letras y ciencias; y
Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños. 18
Pasados, pues, los días al fin de los cuales había dicho el rey
que los trajesen, el jefe de los eunucos los trajo delante de
Nabucodonosor. 19 Y el rey habló con ellos, y no fueron
hallados entre todos ellos otros como Daniel, Ananías, Misael
y Azarías; así, pues, estuvieron delante del rey. 20 En todo
asunto de sabiduría e inteligencia que el rey les consultó, los
halló diez veces mejores que todos los magos y astrólogos
que había en todo su reino. 21 Y continuó Daniel hasta el año
primero del rey Ciro.
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Daniel (que en hebreo significa Jehová mi juez) un joven de 15
años para este contexto que nos habla la biblia, el rey
Nabucodonosor invadió a la cuidad de Jerusalén en el año 601
A.c.
un periodo duro para el pueblo de Israel.
Pero había sido como resultado de su desobediencia,
Habían decidido no honrar a Dios y se habían lanzado a la
idolatría, no respetaban sus mandamientos.
Y habían dado la espalda a su quien les había dado tantas
cosas y los había llenado de tantas bendiciones.
La diferencia en este contexto histórico lo encontramos
en la vida de Daniel, a pesar de su edad y de la condición
en que se encontraba decisión honrar a Dios, aunque eso
le pudiera haber costado la vida.
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Dios siempre respalda a sus hijos y hasta en las circunstancias
más criticas allí esta Dios, aun en los lugares donde estemos
en peligro, en lugares donde no seamos bien recibidos.
Proverbios 16-7 “Cuando los caminos del hombre son
agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz
con él”
Daniel pudo ser egoísta y decir solo YO, pero hablo por sus
tres compañeros y logro tener una buena influencia sobre
ellos, algo que lo hacia diferente y le daba autoridad y
liderazgo.
Daniel honra a Dios, y Dios le dio fortaleza física.
15 Y al cabo de los diez días pareció el rostro de ellos mejor y
más robusto que el de los otros muchachos que comían de la
porción de la comida del rey. 16 Así, pues, Melsar se llevaba la
porción de la comida de ellos y el vino que habían de beber, y
les daba legumbres.
Daniel honra a Dios, y Dios le dio sabiduría y entendimiento
de sueño.
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17 A estos cuatro muchachos Dios les dio conocimiento e
inteligencia en todas las letras y ciencias; y Daniel tuvo
entendimiento en toda visión y sueños.
Daniel honra a Dios, y Dios le da poder y reconocimiento.
18 Pasados, pues, los días al fin de los cuales había dicho el
rey que los trajesen, el jefe de los eunucos los trajo delante de
Nabucodonosor. 19 Y el rey habló con ellos, y no fueron
hallados entre todos ellos otros como Daniel, Ananías, Misael
y Azarías; así, pues, estuvieron delante del rey. 20 En todo
asunto de sabiduría e inteligencia que el rey les consultó, los
halló diez veces mejores que todos los magos y astrólogos
que había en todo su reino. 21 Y continuó Daniel hasta el año
primero del rey Ciro.
Daniel gano reconocimiento, respeto y autoridad, pero no por
EL, sino por honrar a Dios, seguir sus principios y así mismo
Dios lo fortaleció, dio sabiduría, entendimiento y lo puso en
un lugar de honra y privilegio, no intento agradar al Rey, sino
agradar a Dios y obtuvo de parte de EL grandes bendiciones.
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