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Capítulo 79
La madre suavemente consoló a Pete, a pesar de que su corazó n ya estaba hecho
pedazos.
Tal vez ella estaba mostrando su fuerte voluntad frente a su ex marido
demasiado, por eso la otra parte le quitó todo y llenó de dolor a este niñ o.
—Si quieres que sea feliz, tampoco debes pensar eso ni aquello.
Como si pudiera leer la mente de su madre antes de que hable, Pete la abrazó con
fuerza y de repente cambió su tono a uno má s vivo. Putch también se rió a
carcajadas después de escuchar su sentencia.
—No tienes que preocuparte por tu madre, tengo mucho trabajo aquí, y tu tía
Jiew también cocina comida deliciosa todos los días. Tal vez haya una gran
posibilidad de que me olvide por completo de mi hijo guapo.
Pete una vez má s abrazó a su madre, estaba agradecido, profundamente
agradecido por haber sido bendecido por ser su hijo.
Esta madre que lo amaba má s que a la vida.
Esta madre a la que no le importaba lo que otras personas pensaran de su hijo.
Esta madre que lo había protegido por muchos añ os.
Esta madre que respetaba la decisió n de su hijo.
Su madre era la madre má s grande del mundo.
—Te quiero, mamá .
—Mamá lo sabe, empaquemos las cosas, o tendrá s que ir allí sin nada en las
manos.
Pete sonrió . Pero justo cuando estaba a punto de obedecer las palabras de su
madre y empacar las cosas, la tía Jiew entró y dijo:
—La señ orita DeLi está aquí, Koon Noo. Ya le dije que estabas ocupado, pero ella
insistió en verte.
—Está bien, tía Jiew.
Pete estaba un poco confundido, ¿por qué esta amiga elegiría venir a verlo en este
momento?
Sin embargo, salió de la habitació n con estas preguntas en la cabeza.
—Pete, lo siento. No quise dejar que las cosas se volvieran así. No esperaba que él
te lastimara.
Se había estado preguntando todo este tiempo por qué su padre sabía que estaba
con Ae, y la respuesta estaba frente a él, fue esta amiga, esta persona que ahora
está arrepentida, ella vino aquí para confesarle todo.
—Yo... Cuando supe que regresó a Tailandia, fui a verlo. Le dije al tío que estabas
hospitalizado por culpa de ese hombre. Pero era realmente la verdad, si no
hubieras estado con él , nunca habrías sido arrastrado a todos estos problemas,
así que fui a hablar con él. Quería que te ayudara a abrir los ojos, pero no pensé
que las cosas se saldrían de control... No esperaba que te forzara para ir a
Alemania.
DeLi tenía una expresió n avergonzada en su rostro. Se sentía culpable por
contarle al padre de Pete sobre ellos, pero estaba demasiado asustada para
confesarlo antes. Cuando supo de otras personas que Pete se mudaría a Alemania

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para vivir con su padre, sintió que tenía que ir a decirle la verdad a Pete. Quería
confesarle todo, y esperaba que éste pudiera entender su intenció n.
Ella solo quería lo mejor para Pete, simplemente no quería que él diera un paso
equivocado y se enamorara de un hombre.
Después de escuchar todo esto, este adolescente frente a ella no pudo decir ni una
sola palabra.
—Pete, perdó name. Hice esto porque te amo.
DeLi le estaba suplicando con esperanza en su rostro. Estaba esperando que Pete
pudiera perdonarla, pero cuando Pete le hizo la siguiente pregunta, se quedó sin
palabras.
—¿Hieres a los que amas, DeLi?
—Pete...
—Lo sé, DeLi, sé que solo quieres que me pasen las mejores cosas. Cosas como
arruinar mi vida. ¿Sabes que Ae casi fue a la cá rcel y su familia casi tuvo que pagar
una gran deuda? ¿Que fue casi expulsado de la universidad? Ya he roto con él
como deseas, DeLi.
El tono de Pete seguía siendo tan educado como antes, pero su corazó n estaba
lleno de resentimiento. Sabía que incluso si se enojaba con DeLi ahora, ¿qué
podría obtener a cambio? Todo ya estaba arreglado y ya no era posible regresar.
Sus palabras hicieron que la niñ a apretara los labios con fuerza, sus ojos estaban
llenos de lá grimas.
—Pete, lo siento, ¿podemos seguir siendo amigos?
—Te perdono...
DeLi sonrió tan pronto como lo escuchó . Cuando estaba a punto de dar un paso
adelante para sostener la mano de Pete, Pete volvió a hablar.
—Pero ya no podemos ser amigos, gracias a ti, perdí a la persona que má s amo en
mi vida, ya no puedo hablarte. Lo siento, DeLi... Ya no podemos ser amigos,
Simplemente no puedo mirar a una amiga que hizo que mi corazó n se
despedazara... Lo siento, tengo que empacar mis cosas lo má s rá pido posible. Por
cierto... No vayas a despedirme... Digamos adió s ahora mismo.
Después de eso, Pete se dio la vuelta y entró en la habitació n. Solo quedó la chica
que lamentaba lo que había hecho...
El amor tiene muchas formas y maneras, pero DeLi decidió por su cuenta hacer
algunos pequeñ os trucos detrá s de escena para tratar de ganar a su amor. Sin
embargo, debido a sus acciones, incluso este tipo de amor entre amigos... también
ha terminado.

Capítulo 80
Narra Ae
— Me sentiré mejor pronto. Creo que deberías preocuparte por ti mismo. ¿Có mo
es que mi cuñ ada todavía no se ha aburrido de ti?
— Oye, cuida tu boca, Ae. Mi hijo es un á ngel, así que no puede soportar el olor a
sudor. No es que mi esposa lo odie, así que cuídate o te voy a golpear.

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— Eres má s que bienvenido a venir aquí.
No tengo miedo en absoluto. De hecho, estoy mostrando en una pose retadora
para mostrarle que estoy preparado, sin embargo él agitó las manos.
— Los caballeros no usan la violencia sino solo la boca para calmar las cosas. O si
no, lo aclaran con un juego de Sepak takraw ¿verdad? Tendré que ir contigo.
Ok, mi hermano cambia el tema con cosas que me hacen reír.
— Es increíble. Tu barriga se está volviendo cada vez má s grande. Y tú , con
respecto al juego, me temo que ni siquiera podrá s levantar los pies.
— ¿Me está s desafiando?. Solo espera y verá s, te mostraré lo bueno que soy...
después de todo, ya soy padre de dos hijos.
Asiento y acepto llevar a mi hermano conmigo para jugar epak takraw. Sé muy
bien que él está tratando de animarme, aunque no lo diga en voz alta, me hace
pensar en ello. Siempre me propone acompañ arme a hacer cosas que me
interesan.
Cuando Pete desapareció de mi vida, no tenía ganas de hacer nada. Pero cuando le
dije a Pond que quería desaparecer, ese tipo me rodeó el cuello y me llevó al
campo de fú tbol. Dijo que no debería calmar mi tristeza en un bar, sino que
debería patear la pelota con todo mi corazó n en el campo de fú tbol.
Al final, ¿sabes lo que sucedió ?
Este añ o nuestro equipo de fú tbol ingresó con éxito a la final de la liga
universitaria.
No sé si es por las palabras de Pond o no, pero creo que la ú nica manera de
ayudarme a dormir sin tener una pesadilla es hacer mucho ejercicio para
consumir mi energía.
Puse mi corazó n y mi alma en jugar fú tbol e incluso intenté jugar epak takraw.
También me inscribí en esas organizaciones de voluntariado. Hice todo lo posible
para no tener tiempo de pensar en lo que hizo sufrir a mi corazó n, pero... nunca
he dejado de pensar en él, ni por un momento.
Antes de irme a la cama todas las noches, siempre miro el anillo en el dedo de mi
mano derecha, y realmente aú n puedo escuchar aquellas suaves palabras de Pete
repitiéndose en mis oídos.
—Pero algunas personas dicen que cuando el anillo se usa en el dedo anular en el
lado derecho, significa que... esa persona ya está reservada... entonces... yo creo en
lo ú ltimo... ya soy tuyo, Ai'Ae.
Aú n puedo ver su sonrisa, aú n puedo verlo acariciando el anillo como si
realmente lo atesorara, y me siento un poco culpable, porque acabé comprando
un anillo de plata muy comú n. Al final... siempre me quedo inconscientemente
llorando cada vez que lo recuerdo.
***
—¡Ai'Bajito! ¡Hemos venido a visitarte!
—¿Por qué vienen aquí? ¿Para hacer má s complicadas las cosas?
Mi familia usa una forma normal de consolarme, pero mis amigos usan otro
método... Hacen todo lo posible para venir a mi casa y... perturbar mi vida.

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Aunque apenas ayer regresé del campamento de voluntarios, todos estos tipos se
apresuraron a venir aquí como un grupo. Estos ú ltimos meses han traído a todo
tipo de chicos a mi pequeñ a casa para acampar.
Y ¿Quiénes fueron los que sugirieron esa estú pida idea? Por supuesto, Ai'Pond y
Ai'Sun.
—Escuché que te sentías triste ú ltimamente.
—Siempre dices eso cada vez que vienes a mi casa. ¡Esta ya es la tercera vez este
mes!
Me doy la vuelta y le grito a ese entrometido. Admito que me molesté varias
veces, pero por otro lado, realmente se preocupa demasiado por mí, de lo
contrario, no vendría a mi casa tan a menudo durante las vacaciones.
—No digas eso, Enano No. 1, y tú , Ai'Dear, Enano No. 2 ... Quiero beber.
—¡¿Qué te pasa?!?! ¿Este sol todavía brilla sobre tu cabeza y ya quieres beber?
Ai'Mai se da vuelta para mirar a Ai'Dear, que tiene muchos bocadillos, lo que
significa que se quedará n aquí hasta muy tarde. Alguien definitivamente pasará la
noche aquí, pero no es Ai'Dear, porque cuando cae la noche, alguien siempre
llega a buscarlo.
—¡Todos cá llense! Ya que han venido aquí, entonces ayú denme primero, tengo
muchas cosas que hacer.
Les advierto rá pidamente, Ai'Diew se subió las gafas para hablar.
—Si te ayudo, ¿tu madre nos invitará a cenar? Si no, no lo haré.
La persona a la que siempre le gusta calcular qué gana y qué pierde me responde,
y yo inconscientemente también discuto.
—Pete solía ayudarte a hacer cosas gratis...
Estoy sorprendido
No solo yo, incluso el tipo que lo dijo, de pronto parece darse cuenta de sus
palabras. Ahora me observa con una expresió n compasiva en su rostro. Sin
embargo, lo ú nico que puedo hacer es sacudir mi cabeza.
—Bien, hablaré con mi mamá sobre eso má s tarde.
Regreso rá pidamente al tema original.
—¡Oye! No es necesario, solo estaba bromeando. ¿Con qué quieres que te
ayudemos? Solo dilo, no quiero una cena gratis. Somos tus hermanos, te
ayudaremos un poco, ¿cuá l es el problema?
Parece que mi cara es realmente horrible en este momento, porque incluso
Ai'Diew, el señ or de la pereza, se ofrece voluntariamente para ayudarme gratis
sin protestar. Incluso dice esto después...
—Bueno aveces hacer algo de trabajo físico no esta mal. ¡Solo dime, estoy listo!
—Oye, cuenta conmigo, ¿en qué quieres que te ayude? Quiero hacer ejercicio
también, ¡creo que quiero moldear mis abdominales!
—¿Oh? Ai'Dear, ¿no me digas que quieres tener abdominales para seducir a tu
esposo? Parece que él va a volverse loco por ti.
Cuando Ai'Dear dijo con entusiasmo que también quería ayudar, Sun
rá pidamente se burla de él, y Ai'Dear lo mira mientras aprieta los dientes. Pond
los está observando también gritando y riéndose al mismo tiempo.
—¡Está n molestando a Ai'Dear de nuevo! ¿Acaso es un payaso?

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Cuando Ai'Pond acaba de terminar su oració n, Ai'Dear mira a todos los que está n
presentes en este momento, pero cuando me ve, sonríe.
—Mientras Ae se ría, vale la pena ser un payaso.
Sus palabras me recuerdan que estoy riendo. Aunque poco después levanto mi
mano, toco mi mejilla, y mi sonrisa se desvanece lentamente, luego digo...
—Entonces hablaré con mi papá y mi mamá primero.
(golpe)
—¡¡Ay!!
Cuando me doy la vuelta y estoy a punto de entrar en la casa, escucho un fuerte
ruido, seguido por el quejido de Ai'Dear.
—¡¿Por qué tuviste que abrir tu gran boca?!?! Si Ae ríe, solo deja que siga riéndo,
¿por qué tuviste que mencionarlo?!
Luego escucho que los demá s también unen para fastidiarlo. Lo ú nico que puedo
hacer es, sacudir mi cabeza derrotado, no sé por qué, pero ahora me siento
mucho mejor.
Empiezo a creer que cuando estamos molestos, solo necesitamos un buen amigo
para hacernos sentir mejor.
Tengo cinco de esos amigos... Debo hacer todo lo posible para que no se
preocupen demasiado por mí.
***
—¡Oye, piel oscura, tipo rudo!
Estoy sentado en un banco de piedra en la planta baja de la universidad, rodeado
de estudiantes de primer añ o que tienen un cuaderno en sus manos para obtener
algunas firmas de superiores como yo. De repente, una voz aguda pasa por el aire
y llega a mis oídos haciendo que cambie la expresió n de mi rostro. Cuando me doy
la vuelta para mirar la direcció n de la voz, veo que el graduado se precipita hacia
mí como un bú falo.
—Realmente te extrañ é~~ No he vuelto a nuestra universidad en tres o cuatro
meses... Oh wow ~~ Tus pectorales está n aú n má s desarrollados que antes,
¡déjame tocarlos solo un poco!
—¿No es esa descarada ladyboy? ¡Solo ignó ralo! ¿Quién es el pró ximo?
—¡Chico malo! ¡¿Quién es él desvergonzado que dijo eso?! ¡¡Hoy te voy a enseñ ar
una lecció n!! ¿]Qué es esto?! ¿Consiguiendo firmas de tus mayores? !Quien quiera
la firma de este robusto joven, por favor haga un baile de pollo para que lo vea.
¡Ahora! ¡De lo contrario, no esperen obtener su firma!
Escuché a P'Money decir esto y arrugué el ceñ o un poco. P'Money probablemente
está aquí para visitar a sus juniors (de hecho, no soy su junior directo, porque no
soy un estudiante de IC), cuando ordena a estos juniors que se alineen frente al
tablero de anuncios, incluso hay algunos de ellos escuchá ndolo.
—¡Salta! ¡Gira y salta con los ojos cerrados!
—P, me da vergü enza.
—Bien, si eres tímida, entonces busca a un chico para bailar contigo.
Suspiro, porque mi derecho a ayudar a otros dá ndoles mi firma se ha convertido
en una herramienta para que este senior muestre su poder. Realmente no es
sorprendente que todos estos juniors me persigan para obtener mi firma, porque

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este añ o fui elegido para el título de 'estudiante modelo a seguir', y Pond también
fue el hazer que enseñ ó a los estudiantes de primer añ o a cantar en el campo de
entrenamiento, y él le pidió a todos que me encontraran y me pidieran mi firma.
Me siento tan exhausto.
—Parece que no tienes demasiado tiempo libre.
Siento que la vida, mi vida ya está lo suficientemente ocupada.
—Dime, ¿por qué está s aquí, P?
—Por supuesto que estoy aquí para visitar a mis juniors y profesores. Cuando
veas a tu senior, ¿podrías demostrar que también lo extrañ aste un poco?
P'Money está mirando a uno de mis apuestos juniors mientras sigue
respondiendo mi pregunta.
—Solo admite que está s aquí para ver chicos guapos.
—¡Bien! Estos nuevos juniors son guapos... Nong, anímate, levanta el trasero, ¿no
puedes hacer este baile? ¡¡Solo así, mueve tu trasero por mí!! Date prisa... ¡Los
chicos necesitan menearlo!
Miro a este gracioso senior frente a mí y sacudo la cabeza suavemente, y hay una
leve sonrisa persistente en la esquina de mi boca. Sin embargo, cuando me dice la
siguiente oració n, quedé ató nito.
—En realidad, quería regresar aquí para encontrar al joven má s lindo, pero él ya
se ha ido a Alemania, así que vine a buscar tu trasero de piel oscura. Porque me
parece que estoy viendo a Pete.
Y como siempre, Pond expone la verdad en una sola oració n.
—¿Qué está s haciendo aquí entonces? Esta no es su universidad.
Mi mente se quedó en blanco por un momento y luego con calma respondo.
—Dijo que quería regresar para ver a su amado junior, pero como ya no está aquí,
no tuvo má s remedio que venir a verme.
Pond y ChaAim que estaba junto a él, no dicen nada, solo se miran. No tengo
ningú n problema con Pond diciéndole a su novia lo que me pasó . Siempre ha
mantenido este secreto solo entre amigos y nunca lo ha difundido por la
universidad, así que estoy agradecido por eso. Entonces, sacudo la cabeza
suavemente. Aunque puedo parecer tranquilo por fuera, en realidad siento
demasiadas explosiones por dentro.
—No tienen que mirarme así, estoy bien.
Digo y saco mi teléfono.
—Ae, necesito preguntarte... Realmente quiero saber esto desde el fondo de mi
corazó n.
De repente, Pond me habla en tono serio, solo puedo mirarlo a los ojos mientras
continú a.
—¿Lo extrañ as?
—...
Miro mi mó vil por un momento, me pregunto có mo debería responderle y luego
suspiro. Finalmente, levanto la cabeza y miro a los dos amigos frente a mí, y
aunque contesto en un tono normal, de hecho... mi corazó n... nunca sanará por
completo.

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—Si extrañ ar a alguien puede matar, supongo que ya he muerto decenas de
millones de veces.
Respondo así. Parece que ChaAim realmente quiere consolarme, pero no sabe qué
decir, así que le entrego mi celular.
—Ayú dame a tomar una foto.
—¿Pretendes subirlo a Facebook?
ChaAim me pregunta tomando el celular de mi mano y me ayuda a tomar una
foto.
—Sí... ¿Por qué tienes que subir fotos todos los días?
Pond sigue tan chismoso como siempre. Miro al adolescente con el uniforme
universitario en la pantalla del teléfono mó vil, que se ve exactamente igual al
adolescente en la foto tomada ayer. Luego me levanto y digo en un tono poco
entusiasta...
—Porque Pete siempre se molestaba cuando no subía fotos.
Solo le digo esto y luego me alejo. Sé que probablemente no entienden mi
comportamiento aparentemente sin sentido. Tal vez piensan que ya es demasiado
tarde, pero yo no lo creo.
Esa cuenta de Facebook registra nuestros fragmentos ... Nuestros buenos
recuerdos de esa época... todavía está n allí y no irá n a ningú n lado.
Solo espero que aunque él no publique nada, todavía esté allí.
"No has publicado nada".
"No me gusta tomarme fotos".
"Solo quiero saber lo que estás haciendo".
"Te estoy diciendo, ¿no?"
La conversació n en ese momento todavía está dando vueltas en mi cabeza, ya que
ahora ya no puedo decirle lo que hago todos los días, en su lugar, subo una foto a
Facebook junto con un estado breve. No me importa si mis amigos se ríen de mí
porque piensan que estoy siendo narcisista, porque ven tomarme una selfie todos
los días. No podría importarme menos si vienen a preguntarme por qué de
repente me gusta tomarme fotos, la persona con la que má s quiero compartir mis
pensamientos... ya no está conmigo.
Seguiré actualizando todos los días, para que sepa lo que estoy haciendo. Estoy
bien y todavía lo estoy esperando.
No importa lo inú til que otras personas puedan pensar que es, pero para mí, hay
una capa de significado que no se puede expresar con palabras.
Pete, ¿cómo te va?
Puedo continuar con mi vida bien, pero también sé que... aunque a mi alrededor
siempre hay alguien diciendo que quiere ayudarme a resolver todos los
problemas, lo que pudieron hacer fue curar mis heridas, pero... mi corazó n roto...
nunca se recuperará , ahora nada es como antes.

Narra Pete
—P'Pete, estoy muy feliz hoy, porque una chica se me confesó .

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—¿Oh? El encanto de mi hermano es realmente irresistible, solo tienes diez añ os
y ya hay varias chicas que te confiesan su amor.
—Sí, no puedo evitarlo, soy demasiado guapo.
—Jajaja, sí, eres guapo, ¡el chico má s guapo eres tú !
El clima en Berlín en febrero se va calentado gradualmente, así que después de
despedirme de mis compañ eros de clase, hablé con la Sra. Su y me ofrecí como
voluntario para ir a la escuela primaria a recoger a Alvin. Cuando Alvin me vio en
la puerta de la escuela, corrió hacia mí y me contó sobre muchas cosas
interesantes que ocurrieron en la escuela. Después de escucharlo simplemente
sonreí.
—Pero el chico guapo tiene que irse a casa ahora. Hoy, tu madre dijo que quería
hacerte comida tailandesa.
—¡Wow asombroso!
El Thai de Alvin es muy fluido ahora. Quizá s porque pasó má s tiempo conmigo.
Cuando hablo con él, hablo mitad alemá n y mitad tailandés. Así que se vio
obligado a hablarme en tailandés. Al principio se puso de mal humor y dijo que no
era nada divertido, pero al final cedió e hizo lo que le dije. Ahora me llevo muy
bien con él
—Vamos.
—No quiero tomar de la mano a P'Pete, ¡ya soy un adulto!
El problema del lenguaje está resuelto, pero el hecho de que él piense que ya es
un adulto comienza a causarme dolor de cabeza.
—P, mírate, ¿por qué te vistes así, no sientes frío? ¿Quieres que te dé esta gruesa
bufanda?
Este niñ o de diez añ os que ha crecido a un tamañ o increíble tira de la delgada
bufanda alrededor de mi cuello y envuelve su gruesa bufanda en su lugar, y luego
sonríe brillantemente.
—P, te enfermas fá cilmente, así que tienes que mantenerte caliente, ¿entiendes?
De lo contrario, mañ ana por la mañ ana, te enfermará s y parecerá s un frá gil
conejito de ojos rojos.
Miro a este niñ o de 10 añ os que está actuando como un adulto mientras me dice
esto. No puedo evitar sonreír. Sin embargo, felizmente tomo su bufanda y luego lo
llevo a la estació n del metro. En el camino, sigo pensando en lo que dijo...
Conejito de ojos rojos...
No estoy físicamente enfermo, es solo mi corazón que está sangrando...
Cuando me mudé aquí, todo fue tortuoso para mí. El clima, el alojamiento, la
universidad ... muchos factores me hicieron querer escapar de regreso a
Tailandia. Mi padre solo me permitía llamar a mi madre una vez al mes. Aunque
pude haber hecho llamadas telefó nicas en secreto, seguí obedeciendo su orden.
Creo que es mejor escucharlo, o de lo contrario puede comenzar a hacer algunos
trucos para dañ ar a amigos y familiares en Tailandia.
Por lo tanto, la mirada de conejito de ojos rojos que dijo Alvin en realidad fue
causada por el hecho de que lloré toda una noche en silencio mientras estaba
acostado en mi cama al darme cuenta de que no había salida para mí. Sentía que
no importaba en qué direcció n mirara, no podía ver ninguna luz, pero los que me

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apoyaron y alentaron a superar todo esto fueron mi madrastra y mi medio
hermano.
Los dos hicieron todo lo posible para hacerme feliz. Hicieron mi plato favorito y
me llevaron a lugares lejanos cuando mi padre no tuvo tiempo de disciplinarme.
He estado viviendo aquí durante un añ o, y también he experimentado el período
má s devastador de mi vida.
Realmente quiero agradecerles, así que trato de ser un buen chico, un buen
hermano para devolverles su amabilidad... A veces no puedo evitar pensar... las
personas que no está n relacionadas con mi sangre incluso me tratan mejor que
mi propio padre.
—Hoy es un poco má s especial de lo habitual, Pete.
Tan pronto como entro en la casa, la Sra. Su sale de la cocina. Mis cejas se alzan un
poco y dejo que mi madrastra me arrastre al comedor. Entonces veo un pequeñ o
pastel en el centro de la mesa.
—¿Qué es esto? ¿De quién es el cumpleañ os hoy?
—¿Qué cumpleañ os? Hoy es tu primer aniversario de llegada.
Su sonríe y me dice. Miro este hermoso pastel frente a mí. Veo las palabras 'Feliz
aniversario' y los bordes de mi boca se alzan para revelar una sonrisa de
agradecimiento.
—¡Gracias! Pero mi padre...
—Hoy tu padre no volverá , todavía está en Suiza.
Dejo escapar un suspiro de alivio, luego me siento y disfruto de la cena
cuidadosamente preparada por la madre y el hijo para mí. Me digo a mí mismo
cuando estoy comiendo.
¿Solo ha pasado un año? ¿Por qué siento que son diez?
Estoy muy agradecido.
Gracias a ellos, mi vida no fue tan horrible durante todo este añ o, pero también
quiero disculparme porque ni siquiera hubo un solo día durante este añ o en el
que me sintiera realmente feliz.
Después de que esta pequeñ a celebració n termina, subo las escaleras y me retiro
a mi habitació n. Ahora es mi refugio seguro. Enciendo la computadora como de
costumbre, escribo la direcció n de ese sitio web, escribo rá pidamente en una
línea la contraseñ a, luego... Sonrío.
—Ae también está muy feliz hoy.
Murmuro para mí mismo, extiendo mi mano temblorosa para tocar al chico con
el uniforme de fú tbol en la pantalla. Y miro el texto a continuació n...
"¡Hemos ganado hoy!"
—Felicitaciones, Ae, felicidades, ganaste de nuevo.
Le susurro a la foto, muevo el cursor del mouse al á lbum que Ae creó hace un añ o.
Al principio, no pensé que este á lbum había sido creado especialmente para mí.
Cuando vine por primera vez, casi no me atreví a iniciar sesió n en Facebook,
porque tenía miedo de ver algunas fotos que no podría manejar. Pero cuando hice
clic en el á lbum, muchas de sus fotos captaron mi interés.
"¡Hace mucho calor hoy!"
"Hoy, salí con Ai'Dear"

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"Hoy ayudé a mi familia con el trabajo"
"Hoy es el cumpleañ os de mi sobrina"
"Hoy nació el segundo hijo de mi hermano"
Cada oració n era corta, pero había muchas, era como si le contará a alguien lo que
hacía todos los días. Supe de inmediato que me estaba contando cosas de su vida.
Finalmente, sentarme en silencio frente a la computadora para leer sus estados
se ha convertido en mi rutina diaria. Miro su foto, miro sus ojos, su rostro y su
sonrisa.
Hay 365 fotos en 365 días, cada vez que las miro, caen las lá grimas.
—Ae, por favor no hagas esto...
Aunque digo aquello, cada vez que enciendo la computadora, mi corazó n se llena
de esperanza.
Este es mi momento feliz de menos de diez minutos en un día tortuoso. Estos diez
minutos me hacen sentir que todavía estoy con él.
Golpeo el anillo en el dedo anular de mi mano derecha. Nunca me he quitado este
anillo.
Ae dijo que cuando ya no lo amara, solo debía quitá rmelo y tirarlo. Pero no quiero
quitarlo, y mucho menos tirarlo.
—¿Hm?
De repente, veo algo en la pantalla... es una canció n.
Sé lo que es, pero mi mano temblorosa aú n inconscientemente mueve el cursor
del mouse para hacer clic en él.
"Mun kong pen kwahm ruk
Tee tum hai dtua chun Yung yeun yoo dtrong nee ~~ "
Tan pronto como escucho las primeras palabras de esta canció n, mis lá grimas
comienzan a caer sobre el teclado. La ú nica frase lírica, que es muy significativa y
conmemorativa para los dos, llega a mis oídos.
Era el tono de llamada de mi celular.
Fue la primera canció n que él me cantó .
Fue la primera canció n que cantó cuando se me confesó .
É l quiere decirme... a través de esta canció n... que todavía me ama.
—* sollozo * ... Ae, por favor no... no hagas esto... ¿Acaso no me lo prometiste? ...
¿No ... * sollozo * ...
Baje la cabeza y deje que las lá grimas corran por mis mejillas, tratando de
controlar el volumen de mi llanto para que no sea demasiado fuerte. Ajuste el
volumen de la canció n al má ximo, para que ocupe todo el dormitorio. Lentamente
escucho la canció n, pero mi corazó n ya se ha roto en pedazos. Al final susurro...
—Yo... también te amo... te amo... *sollozo* ... después de todo este tiempo, aú n te
amo.
Un añ o no puede hacer que nuestros sentimientos mutuos se desvanezcan, solo
los fortalece. A veces realmente me odio a mí mismo.
¿Por qué lo amo tanto? ¿Por qué sigue siendo tan bueno conmigo ... ¿Por qué... no
podemos amarnos?
—Te amo, Ae... te amo.

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Y así finalmente, cuando llega el amanecer, me convierto en el conejito de ojos
rojos que mi hermano siempre ve. No puedo evitar preguntarme ... ¿Cuá ndo
terminará n estos días dolorosos?

Capítulo 81
2 años más tarde...
Hoy, el cielo estaba despejado y sin nubes. Un automó vil medio nuevo y medio
viejo, que su propietario compró hace un añ o, ingresaba lentamente a una gran
mansió n. Cuando el criado de la mansió n vio el automó vil, abrió rá pidamente la
puerta y dejó que condujera al frente del edificio principal. El hombre en el auto
giró la cabeza hacia un lado y miró un gran ramo de rosas que descansaba en
silencio junto a él.
—Llegas temprano, Khun Ae. Todavía es temprano en la mañ ana.
Salió del auto y la nana de la casa lo saludó . Ae se apresuró a formar un waii para
la otra parte.
—Buenos días, tía Jiew. ¿Dó nde está la tía Putch?
—Te está esperando adentro. ¡No te he visto en todo un añ o, pero ahora te ves tan
guapo, como un modelo!
—Jaja, creo que probablemente deberías decir que soy tan oscuro como el carbó n.
—¿Qué quieres decir con oscuro? Recientemente, el bronceado se ha convertido
en una tendencia.
Tía Jiew se burlaba de él y, sonriendo al mismo tiempo, miraba al joven que
llegaba a visitarlos todos los añ os, este añ o ya era el tercero.
El joven frente a ella, que llevaba el uniforme de la universidad hace un añ o,
ahora lleva unos pantalones casuales y una camisa de color claro. Y su estatura,
que debería haber dejado de aumentar desde que ya había alcanzado la edad en
que dejó de crecer, aumentó inesperadamente unos centímetros má s en
comparació n con la ú ltima vez que lo vio, por lo que cuando estaba en su
uniforme, se veía extraordinario. Su expresió n facial también parecía mucho má s
madura, sus ojos se volvieron má s determinados y su sonrisa era mucho má s
atractiva. Tía Jiew no pudo evitar mencionar estos cambios.
—¿Acabas de venir directamente desde tu lugar de trabajo?
—Sí, salí del trabajo hace cuatro horas, luego vine directamente.
—Oh, pero aú n tenías tiempo para pasar por la florería en tu camino hacia aquí.
La tía Jiew se rió bajo mientras hacía un gesto usando la barbilla para señ alar el
ramo de rosas que sostenía en los brazos Ae, que estaba sonriendo.
—Probablemente te sientes muy cansado, entra, déjame prepararte el desayuno.
Ae escuchó las palabras preocupadas de la otra persona y rá pidamente entró .
Estaba caminando y mirando todo lo que tenía delante, una expresió n de anhelo
se mostraba en su rostro.
La razó n; él no había visitado este lugar desde hace un añ o atrá s.
—Ae, ¿por qué llegaste tan temprano? ¿Acaso no dormiste, niñ o?

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En este momento, la voz del dueñ o de la casa se acerca, y Ae dejó de mirar a su
alrededor y se volvió hacia la direcció n de la voz. Luego vio a una elegante mujer
de mediana edad parada mientras lo miraba desde la distancia con una sonrisa en
su rostro.
—Khrub, Sawasdee, tía, feliz cumpleañ os.
Ae avanzó con prisa y le dio el ramo de rosas a la otra parte, y esta sonrió y las
aceptó , pero su "sonrisa" ... estaba llena de dolor.
—No tienes que hacer esto todos los añ os, Ae.
Esta oració n fue la misma que antes, y Ae también respondió a la persona con la
misma oració n.
—Por favor, déjame hacerlo, porque si hay alguien que te regala rosas todos los
añ os en su nombre, probablemente eso lo pondría muy feliz.
—Ae...
Putch solo dijo su nombre suavemente, ahora Ae ya se había convertido en un
hombre joven y responsable.
Un joven que hizo todo lo posible para cumplir con la responsabilidad en nombre
de su hijo.
En el pasado, cada añ o, era su hijo amado quien la ayudaba a recoger las rosas y
luego ponerlas en el florero, pero lo que sucedió hace 3 añ os obligó a su hijo a
abandonar su hogar y se fue muy lejos. Sin embargo, en su primer cumpleañ os
que su hijo no estaba en casa, un niñ o de cabello oscuro llegó con una sola rosa en
la mano.
—Estoy aquí para darte la rosa en su nombre, tía.
En ese momento, solo pudo abrazar al niñ o con fuerza y estallar en lá grimas.
Estaba llorando mientras se disculpaba y dijo que no podía hacer nada, pero la
persona, que debería ser la que má s sufrió , la consoló en un tono determinado.
—No importa, tía, volverá pronto.
Aunque la otra parte no dijo su nombre, ella era plenamente consciente de que no
era la ú nica que esperaba ver a su buen hijo regresar a sus brazos, también había
otra persona que esperaba reunirse con su hijo un día. Esta persona, a quien
siempre había considerado como su propio hijo, trató de visitarla con la mayor
frecuencia posible. Hace un añ o, este chico se graduó y también encontró un buen
trabajo en el á rea del suburbio. Aun así, durante este tiempo, él la llamaba
constantemente. Y A menudo le preguntaba sobre su bienestar.
Esta persona que dijo que quería cumplir con la responsabilidad en nombre de su
hijo.
—Gracias, este añ o me diste un ramo tan grande.
—Jaja, porque ya comencé a trabajar...
Ae respondió tímidamente, luego siguió a la otra parte al comedor y disfrutó del
desayuno con la otra persona como en el pasado.
La apariencia y el comportamiento de este joven podrían haber cambiado
drá sticamente, pero su mirada nunca ha cambiado.
Cuando miró la foto del chico en la pared, sus ojos estaban llenos de... amor... y
anhelo...
—Ae... en realidad, también tengo un regalo para ti.

13
De repente, Putch, que estaba sentada en un extremo de la mesa, dijo y tomó a Ae
por sorpresa.
—No es necesario...
—Hmm... aunque realmente no puedo decir que sea un regalo... tengo que pedirte
un favor.
Ae frunció el ceñ o un poco esta vez, pero él accedió voluntariamente a ayudarla.
—No hay problema, ¿hay algo en que pueda ayudar?
—¿Está s libre el 3 del pró ximo mes?
—No estoy seguro, pero como me lo ha dicho de antemano, no debería ser un
gran problema.
Ae estuvo de acuerdo, y Putch sonrió y continuó .
—No tengo tiempo libre el pró ximo mes, porque hay algunos clientes VIP que
quieren quedarse en nuestro hotel, pero ese día tengo que ir al aeropuerto para
recoger a una persona muy importante... Si debo elegir, entonces podría ser
mejor que tu..
!!!!!!!!
De repente, la mano que sostenía la cuchara se detuvo en el aire, se volvió para
mirar a la Sra. Putch con incredulidad. Esta le respondió con una sonrisa, luego
enfatizó ...
—Quiere volver, Ae, quiere volver con nosotros.
<Clank>
La cuchara en su mano cayó y golpeó la mesa de má rmol. Entonces Ae se cubrió la
cara con ambas manos y murmuró ...
—Quiere volver... regresará ... Es el mejor regalo para mí, él...
El chico parecía que estaba a punto de llorar, pero cuando levantó la cara de
nuevo, formó una sonrisa má s brillante que la de los dos adultos que estaban
presentes. En este momento, un rayo de luz de la mañ ana atravesaba la ventana, y
el anillo en el dedo anular de Ae de su mano derecha brillaba a la luz del sol.
—Ve a buscarlo, Ae.
—¡Gracias, tía! ¡Gracias!
Ae solo podía susurrar estas palabras, porque su corazó n ya estaba... desbordado
de felicidad.
El hombre, a quien había estado esperando, volvía a sus brazos una vez má s.
***
—Por favor, ajuste su asiento, señ or.
—Ya lo he hice.
—Oh, lo siento, pensé que no lo había hecho.
En este punto, todas las azafatas de la clase ejecutiva de este avió n seguían
mirando a un hombre guapo. Era alto y delgado, y su aura elegante y noble podía
hacer que cualquiera se enamorara de él a primera vista. Se veía exactamente
igual a esos jó venes maestros ricos en esos dramas en la televisió n. Todos
estaban dando vueltas a su alrededor, intentando todo para tener la oportunidad
de servirlo, o hablar con él.

14
Por lo tanto, no fue sorprendente en absoluto cuando sucedieron todas estas
cosas anteriores, y cuando este joven maestro le sonrió encantadoramente a la
joven azafata, la hizo volverse tan tímida que su rostro enrojeció de inmediato.
Después de un tiempo, las azafatas regresaron a sus asientos y se abrocharon los
cinturones de seguridad porque el avió n estaba a punto de aterrizar. El joven
maestro miró por la ventana del avió n y vio su patria que había dejado atrá s hace
tres añ os.
Estudió una licenciatura en una universidad en Alemania durante dos añ os, luego
estudió MBA en Londres por otro añ o, y ahora... estaba a punto de caminar en
esta tierra que extrañ aba con todo su corazó n.
Pete lentamente cerró los ojos y recordó todas las cosas que habían sucedido
durante los ú ltimos tres añ os, y también la razó n por la que no regresó a
Tailandia después de terminar su programa de pregrado.
Miedo...
Esta era la palabra que siempre se había dicho a sí mismo.
Temor de que... esa persona haya seguido adelante.
Temor de que... el tiempo lo haya cambiado todo.
Temor de que... ya sea demasiado tarde.
Miedo a que... le haya dado la oportunidad a otra persona.
Todo tipo de miedo hizo que Pete retrasara el tiempo de regreso y estudiara una
maestría.
Incluso si en los ú ltimos tres añ os, se le enviaron casi mil fotos a través de las
redes sociales.
Incluso si siempre escuchaba la conmovedora canció n que la otra parte le cantaba
todos los añ os.
Incluso si había muchas señ ales de que la otra parte todavía lo estaba esperando,
aú n tenía miedo, y ahora finalmente había regresado para enfrentar la verdad.
Si Ae ya tiene a alguien que es aún más adecuado para él en su vida, aún así lo
felicitaré de todo corazón.
Pete se dijo a sí mismo, porque esto era lo que siempre intentaba hacer. Porque a
pesar de que Ae publicó muchas fotos en sus redes sociales, todavía podía ver las
fotos de Ae en las cuentas de Facebook de Pond, ChaAim y otros amigos. También
vio que Ae mantenía un contacto cercano con Chompoo, y también tuvo una
buena relació n con su colega... Había muchas personas que habían entrado en su
vida.
—Bueno, es hora.
El joven maestro se dijo a sí mismo por ú ltima vez, luego tomó su equipaje y salió
del avió n.
Pronto, el joven pasó el á rea de aduanas y fue al anden de equipaje para buscar su
equipaje facturado, porque la mayoría de sus pertenencias ya habían sido
enviadas de regreso a Tailandia hace má s de un mes. Inmediatamente después de
pasar la puerta de embarque, miró a su alrededor, tratando de encontrar una cara
familiar. Ya fuera su madre o su tía Jiew, tan pronto como lo vieran,
probablemente estallarían en llanto, pero...
!!!!!!

15
Cuando se dio la vuelta y vio a un hombre que sostenía un gran ramo de rosas
blancas para ocultar su rostro, se sorprendió mucho. El comportamiento de este
hombre atrajo la atenció n de muchas personas en el aeropuerto, pero Pete no
había tenido mucho tiempo para pensar en nada. Sus propios pies ya perdieron el
control y paso a paso, caminó hacia la otra parte, paso a paso... paso a paso ...
Cuando se paró frente a este extrañ o, esta persona bajó el ramo de flores.
—¡Bienvenido a casa!
—¡¡¡Ae!!!
El joven maestro con un abrigo largo miró a la otra persona que se acercaba a él.
Suavemente gritó su nombre. Su visió n ya estaba borrosa...
Ae se veía diferente de las fotos, porque las fotos no podían capturar
completamente cada lado de él.
Ae se había vuelto má s alto.
Ae se volvió aú n má s guapo.
El tono de la piel de Ae estaba menos bronceada.
Ae se había vuelto má s fuerte.
Pero... la forma en que Ae lo miraba seguía siendo la misma que hace tres añ os.
—¿Todavía recuerdas lo que me pediste que te prometiera?... que si conocía a una
persona adecuada, tenía que darme una oportunidad, pero nunca me he quitado
este anillo en los ú ltimos tres añ os. siempre lo he usado. Aunque realmente
quería hacer lo que me dijiste, pero al final, solo estaba buscando tu silueta en
otras personas. ¿Aú n recuerdas la letra de la canció n..
—Si al final, no cambias de opinió n... Está bien, porque mi corazó n nunca
cambiará ... Si esperas que mi corazó n deje de latir por ti...
La letra que ambos recordaban vívidamente en sus corazones provenía de la boca
de Ae. En este momento, los dos dijeron al unísono.
—... Probablemente tendrá s que esperar a que el mundo deje de girar.
El hombre de piel bronceada miró al hombre de piel clara a quien extrañ aba días
y noches. Los bordes de su boca se alzaron, sonrió y luego dijo con una voz
profunda.
—Incluso si el mundo deja de girar... nunca dejaré de amarte.
Cuando Pete escuchó estas palabras, sus ojos ya estaban llorosos. Sostuvo el ramo
de rosas con ambos brazos con fuerza, y Ae dijo ...
—Vuelve a mí, Pete. Esta vez, no voy a soltarte.
No hubo respuesta, Pete simplemente se hundió en él y lo abrazó con fuerza, y su
hermoso rostro se apoyó en el hombro de la otra persona. Fue este hombro el que
le dio coraje y fuerza interminables. Pete dejó que sus lá grimas rodaran sobre el
hombro de la otra persona, pero estas fueron lá grimas de alegría y felicidad, su
corazó n cicatrizado fue completamente curado sin ninguna medicina. Pete dijo
vagamente...—Nunca dejé de amarte, ni siquiera por un segundo.
Los dos hombres se abrazaron en el aeropuerto e ignoraron por completo los ojos
de otras personas. En este momento, el sol de la tarde brillaba en los anillos
plateados en los dedos anulares de sus manos derechas.

16
Incluso si había docenas de personas a su alrededor, no les importaba en
absoluto. Lo que otras personas pensaran de ellos era irrelevante en comparació n
con lo mucho que se amaban.
Este amor accidental, que hizo que dos personas se quedaran una al lado de la
otra para siempre, fue realmente conmovedor.
***
—Ae... Sí ... Ae.. Haagh... Haaa...
Dentro de la lujosa habitació n del hotel, dos hombres en la cama se abrazaban
fuertemente, sus cuerpos unidos como uno. Gemidos resonaban por toda la
amplia sala. Sus manos se unieron fuertemente como si ninguno de ellos aceptara
soltar la otra, como si tuvieran miedo de soltar esta mano nuevamente.
En este momento, el cuerpo blanco de Pitchaya se colocó encima del cuerpo de
Intouch. Ambas piernas blancas y delgadas abiertas de par en par. Su hermoso
rostro se alzó , sus manos apoyadas en el amplio pecho de la otra parte. Dulces
gemidos salían de su boca cuando su cuerpo aceptó aquello caliente para entrar
por completo en él.
—Ae... ¿Te gusta... te gusta?
La persona en la cima cuestionó con voz temblorosa. La persona que yacía debajo
extendió su mano para apretar su suave trasero. Lo masajeó y lo frotó
severamente hasta que Pete gimió y se estremeció .
—Me gusta... No... Al contrario... me encanta...
Ae gruñ ó en voz baja. Miró la hermosa imagen de la belleza frente a él, para ser
precisos, era el rostro, ese rostro que extrañ aba con todo su corazó n.
Esta cara, este cuerpo ardiente, estos gemidos suaves y dulces llegaron a cada
rincó n de su corazó n.
—Ae ... Aa ... Ae ... acarícialos de nuevo...
La persona, que estaba curvando su cuerpo para recibirlo, jadeó y tembló . Dijo
aquella oració n con voz temblorosa cuando las dos grandes manos se levantaron
para apretar y frotar los pezones erectos. Los presionó y los aplastó hasta que se
hundieron. Los apretó y amasó con dureza, haciendo que Pete se sacudiera con
frecuencia. El pulso involuntariamente fuerte lo hizo mirar a su novio y dijo en
voz baja.
—En este momento... No deberías preguntarme...
—Hmm... De ahora en adelante... preguntaré... Te diré.. Te diré todo... Quiero dejar
que Ae ... Hmm... Que Ae sepa ... Ahg!
Pete gimió , su voz temblaba cuando esa cosa extremadamente caliente entró
profundamente en su interior. Levantó su cuerpo má s alto que antes para dejar
que Ae balanceara su cadera hacia arriba y hacia abajo con gran fuerza y lo hizo
temblar involuntariamente.
Estas palabras de Pete hicieron que Ae tanteara su rostro, que estaba humedecido
por el sudor.
—Bien... Dime... Dime todo... Quiero que me digas todo...
El joven dijo con su voz temblorosa y borrosa. Acercó a la otra parte para besarlo.
El cuerpo blanco acurrucado contra el cuerpo musculoso, casi no había espacio
entre ellos. Dos corazones se unían y bailaban rá pidamente juntos. Sus labios

17
intercambiaban sentimientos de emoció n, algo así porque ninguno de ellos quería
retroceder.
—Ae ... Aaahh... Sí...
Cuando sus labios se separaron, Pete gimió tembloroso cuando Ae rebotó su
cadera y entró rá pidamente en su cuerpo hasta que tuvo que colapsar su rostro
sobre el ancho hombro de Ae. Olfateó el aroma del cuerpo que extrañ aba
muchísimo. Ae agarró su cadera blanca, se empujó para entrar y encontrarse con
ese lugar tembloroso y cá lido. Usó aquella acció n para mostrarle a Pete cuá nto lo
extrañ aba.
—Ae... te amo... te amo... na khrub...
La persona en la parte superior se apoyó y levantó un poco su cuerpo. É l acarició
las dos mejillas á speras que tanto amaba mientras dejaba que aquel miembro
caliente se moviera como le agradaba. Se encontró con los ojos penetrantes de Ae,
que también lo miraban como si quisiera tragá rselo entero.
—Yo también te amo... te amo mucho.
—Demuéstramelo... Déjame ver... Ae... Dime... Ahh... Má s que eso... Dímelo una vez
má s ...
—¡AAHHH!
Pete se sobresaltó y jadeó cuando su cuerpo fue empujado hacia abajo, y la
persona con el enorme cuerpo también se levantó y se colocó encima de él.
Empujó sus dos piernas hacia arriba. Su cara aguda y oscura lo miró fijamente,
sus ojos estaban llenos de furia ardiente.
—Te mostraré ... Te haré saber cuá nto te amo.
—Aaahh ... Aaaahhhh.. Ae... Ae... Sí...
Como resultado, el receptor gimió como si se hubiera perdido cuando Ae usó
todas sus fuerzas para atravesarlo violentamente, obligó a su cuerpo a sacudirse
sin poderlo controlar. Pete solo pudo agarrar la sá bana con ambas manos, sus dos
piernas se tensaron mientras aceptaba esa cosa extremadamente caliente, lo que
hizo que su cuerpo y él gritaran de placer.
En esta posició n, Intouch entrelazó una mano con la mano de Pitchaya hasta que
se unieron firmemente, la otra mano estaba levantando su cadera redonda. Luego
mostró su amor a Pete por su propio cuerpo. El sonido de la carne golpeá ndose
uno contra el otro resonó por toda la gran sala.
Una y otra vez, como si quisieran enfatizarse mutuamente que se tenían en sus
brazos.
Pero ambas partes se negaron a simplemente alcanzar el otro lado del sueñ o,
porque ninguno de ellos se movía con un ritmo que no podían manejar.
Alternativamente lo hicieron con fuerza y luego lentamente muchas veces. Se
confiaron los labios el uno al otro, la intensa sensació n mezclada con la dulce
sensació n les hizo no querer perder ni un solo momento.
—No puedo... Ae... yo... ya no puedo...
Pete gimió y le rogó . La persona en la cima logró agarrar su cadera y embistió
profundamente dentro de su cuerpo.
—A... A... Aaaaahh...

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Pitchaya no tuvo que esperar mucho. Intouch dejó liberarse al del cuerpo blanco,
lo dejó pasar al otro lado del sueñ o de amor.
Las dos manos de Pete aú n permanecían rodeando el fuerte cuello de Ae, lo dejó
entrar profundo dentro de su cuerpo y soltar todo su líquido cá lido. Al instante
ambas partes temblaban y jadeaban juntas.
***
—Aú n eres tan lindo.
—Pero te has vuelto mucho má s guapo.
Ae se rió a carcajadas después de escuchar lo que dijo la otra persona, y
rá pidamente acarició la espalda de Pete para ayudarlo a recuperar su corazó n
latiente.
Los dos dejaron pasar el tiempo tranquilamente en silencio. Incluso si tenían
innumerables palabras que querían decir, aú n así eligieron transmitir sus
sentimientos acariciá ndose mutuamente.
—No puedo creer que te hayas vuelto tan romá ntico.
—¿Está s hablando de la cena de esta noche?
Dijo Pete, y Ae sonrió . Recordó lo que sucedió antes. Después de recoger a su
amante en el aeropuerto por la tarde, llevó a la otra parte a este lujoso hotel para
descansar. No solo preparó una cena romá ntica para Pete, sino que también
reservó una habitació n de lujo en el hotel y finalmente se expresaron su amor en
esta cama gigante. Esta serie de gestos romá nticos hicieron que Pete no pudiera
evitar sentirse realmente curioso.
—Ya estoy trabajando. Ya no soy el estudiante universitario que era tan pobre en
el pasado. Todavía recuerdo que ni siquiera podía pagar un par de zapatos de
fú tbol en ese entonces.
—Eres ingeniero, ¿verdad?
—Lo sabes por mis fotos.
Ae comentó sin rodeos, y también quería que Pitchaya lo enfrentara.
Pete estaba evitando sus ojos, se sentía un poco tímido.
—Los viste, ¿verdad?
Aunque fue un poco vergonzoso, Pete asintió y explicó .
—Tus fotos me acompañ aron en muchos momentos difíciles. A veces pensaba...
¿No me lo prometiste? ¿Por qué tenías que hacer que mi corazó n latiera así todos
los días?
Ae frunció el ceñ o un poco. No sabía si debía decírselo o no. Luego apretó la mano
blanca de la otra persona con su mano grande.
—Cumplí mi promesa, y me esforcé mucho por darme una oportunidad.
Pete estaba un poco sorprendido, aunque no estaba realmente dispuesto a seguir
escuchando a la otra persona, todavía lo miraba con una expresió n seria. Ae
levantó su cuerpo un poco y comenzó a contarle a Pete lo que le había pasado
todo este tiempo.
—Solía tratar de estar con Chompoo por un tiempo, pero no funcionó . Chompoo
también sabía que no podía olvidarme de ti y solo la consideraba una amiga.
Ahora aú n somos hermano y hermana. Ella también ingresó a nuestra
universidad y se convirtió en mi junior. Después de que comencé a trabajar, mi

19
colega y yo también hicimos avances romá nticos de ida y vuelta, pero no duró
mucho, porque todas las noches antes de acostarme... Tu cara aparecía en mi
mente.
Ae dijo mientras acariciaba suavemente la cabeza de Pete, de hecho, en realidad
no necesitaba contarle todo esto, podía dejar que estos eventos pasados pasaran
con el viento, pero aun así decidió contarle a Pete, y luego preguntó ...
—¿Qué hay de ti? ¿Hubo alguien má s?
—Sí.
Ae inmediatamente abrió mucho los ojos cuando escuchó su respuesta, y Pete
agarró el teléfono y abrió la galería. Ae frunció el ceñ o, parecía que quería sacar a
esa persona del á lbum de fotos y golpearlo muchísimo, pero aú n así inclinó la
cabeza y echó un breve vistazo a la foto.
—Este niñ o de 12 añ os me seguía todo el tiempo, como mi guardaespaldas.
—Wow.. eres muy audaz, te atreviste a asustarme así, ¡¿no es este tu hermano?!
En este punto, Ae agarró el celular y lo tiró . Luego sostuvo a la otra parte con
fuerza, contuvo las dos manos de Pete, lo que hizo que este se riera mientras
levantaba la cara para mirar a Ae.
—¿Có mo podría tener a alguien má s, Ae? Siempre estuve esperando que
actualizaras tus fotos todos los días.
Ae se echó a reír a carcajadas, luego lentamente liberó su mano y recompensó a
Pete con un dulce beso, Pete también lo estaba aceptando voluntariamente.
—¿Que me cuentas de tu padre?
La sonrisa de Pete comenzó a desvanecerse lentamente, luego sacudió la cabeza
ligeramente.
—Ya no tendrá tiempo de molestarnos.
—¿Por qué?
—Hace dos meses... le diagnosticaron cá ncer de hígado temprano.
Ae se sorprendió por la noticia, y su expresió n sonriente se convirtió en
preocupada. Solo mirando a Pete y él ya sabía que, aunque el padre de la otra
parte les había hecho algo tan atroz, Pete todavía amaba mucho a su padre. Ae
extendió rá pidamente su mano y le acarició el rostro.
—¿Estas bien?
—Estoy bien... estoy realmente bien, Ae. Mi padre tiene a la Sra. Su para que lo
cuide, y todavía está en una etapa temprana. Ya comenzó su tratamiento. Después
de otro añ o y medio, probablemente volverá a la normalidad e incluso podrá
comenzar a causarnos problemas.
Ae realmente quería perdonar a ese demonio, pero cuando pensó en el dañ o que
hizo, todavía se sentía un poco desconsolado, por lo que tuvo que dejar a un lado
la condició n física del hombre y cambiar a otra pregunta.
—Entonces, ¿Necesitas volver allí?
Pete levantó la cabeza y miró a Ae después de escuchar la pregunta.
—¿Quieres que vaya?
—¡No! Incluso si quieres ir, no te dejaré.
Ae respondió con firmeza, y Pete sonrió ... esta fue su tercera sonrisa en los
ú ltimos añ os.

20
—Entonces no iré, me quedaré aquí contigo, no iré a ningú n lado, y tampoco te
daré a otras personas.
Este apuesto joven maestro es mucho má s fuerte que antes, ahora habla con Ae
en un tono terco. Después de que Ae escuchó lo que dijo, lo sostuvo en sus brazos,
y los brazos de los dos hombres se apilaron uno encima del otro sin siquiera un
espacio. Ae susurró al oído de su amante...
—No tengo a nadie má s, solo te tengo a ti, Pete... Te amo solo a ti.
Estos dulces y azucarados susurros hicieron que Pete apoyara su cabeza contra el
hombro de la otra persona, luego levantó la cara para mirarlo. Ae aprovechó la
oportunidad para acercar lentamente sus labios a él.
—¡Eso es muy dulce!
—¿Quieres algo aú n má s dulce?
—¿Hm? ¿Hay algo aú n má s dulce que esto? Flores, cena, palabras ... ¿Qué es aú n
má s dulce que esto?
Ae formó una sonrisa malvada, pero encantadora.
(Empujar)
—¿Quieres probar?
Ae colocó su cuerpo sobre Pete, este envolvió sus brazos alrededor del cuello de
Ae, sonrió aú n má s coqueto que antes y respondió ...
—¡No puedo esperar para probarlo! ¡Déjame probarlo!
Entonces Ae le dio a Pete el dulce 'postre' que era má s dulce que cualquier otra
cosa en el mundo. Transmitieron sus sentimientos de los ú ltimos añ os a través de
sus cuerpos... que podrían resumirse en una oració n...
Amor... Lo mucho que nos amamos

Epílogo
Las nubes blancas se elevan lentamente. El color azul del cielo y el océano
parecen mezclarse entre sí. Olas tras olas golpean la orilla del mar. La brisa fresca
sopla suavemente, trayendo consigo el aroma fresco del océano a aquellos
turistas que estaban sentados en la arena de la playa. Este hermoso y romá ntico
paisaje es extremadamente adecuado para parejas enamoradas, excepto... * tos
*...* tos *
—¡Tin, no te detengas! ¡Apresú rate! No me está s alimentando lo suficientemente
rá pido.
Sí, excepto por una pareja de idiotas... No, para ser má s precisos, excepto por un
apuesto joven maestro y un chico tonto que está sentado en un restaurante cerca
de la orilla del mar. El apuesto joven maestro que vestía solo con ropa de marca,
con un par de tijeras en una mano y una pata de cangrejo en la otra, estaba muy
concentrado en sacar la carne del caparazó n y ponerla en el plato... ya que al
parecer el chico tonto ama comer. El niñ o solo hace dos cosas... sumergir la carne
de marisco en la salsa y meterla en su boca.
—Esta bien, ahora hazlo tú mismo.
Tin dijo cansado, pero sus manos no dejaron de hacer lo que estaban haciendo.
La persona a su lado comenzó a parlotear.

21
—No quiero. Estuve muy cansado toda esta semana, solo me estoy mimando un
poco, ¿no? Esta semana entera, no, todo este mes, tuve clientes tras clientes. Me
dolían los brazos, las piernas, se me adormece la cintura. Toca, los mú sculos de
esos lugares está n muy tensos. También me duele la boca, ¡así que tienes que
consentirme!
Kirakorn no solo habló sin parar, sino que también agarró la mano de su novio,
que estaba cubierta de carne de cangrejo, y la colocó en su cintura y forzó su
mano a presionar esos mú sculos tensos, lo que hizo que la gente alrededor los
mirara de manera curiosa.
Qué tipo de trabajo hace que todo tu cuerpo duela después de ver a tus clientes...
Pareciera..
—Deja de hablar. Está s haciendo que las personas aquí lo malinterpreten.
—¿Hm? ¿Malinterpretar qué? ¿No entiendo? Soy entrenador personal, ¿qué hay
de malo con decir que tengo muchos clientes? Sabes que incluso tengo que hacer
todo lo posible para complacerlos. Ayer hice una pose de yoga incorrectamente.
ahora me duele la cintura, ¿por qué me malinterpretarirá n?
'Un buen yunque no teme al martillo', y este 'yunque' también es muy hablador, a
tal punto que puede hacer que otras personas rá pidamente aclaren el
malentendido. Tin suspiró profundamente y volvió a lo que estaba haciendo.
—Olvídalo.
—¡Hey! ¿Por qué está s de mal humor?
Can pregunta de inmediato. Miró a su novio, que sacudía la cabeza mientras
seguía scando la carne de cangrejo que estaba comiendo sin parar. Tin respondió
lentamente.
—No estoy de mal humor. Solo pensaba en que no eres el ú nico que trabaja,
también tengo un trabajo e incluso acabo de regresar a Tailandia de un viaje de
negocios en Estados Unidos. ¿Por qué tengo que ser el ú nico que consciente?
—Si, tienes razó n.
Can observó en silencio a su guapo novio que incluso se veía má s guapo que
antes.
Ambos se han graduado hace aproximadamente un añ o. Después de discutir con
su padre, Tin comenzó a trabajar de inmediato. No estudió una maestría como su
madre quería. Y Can... Estaba felizmente trabajando como entrenador personal.
La razó n por la que dije que mi novio se volvió aú n má s guapo fue porque...
El Tin en traje es realmente atractivo, se veía exactamente como esos jó venes
maestros ricos. Todo el que lo vea brevemente sabrá de inmediato que no es solo
un hombre de negocios habitual, sino el hijo del dueñ o de la compañ ía. También
sonríe mucho má s, recientemente (a pesar de que fue debido a su trabajo lo que
le hizo no tener má s remedio que hacerlo) llama la atenció n de todas las chicas
que lo rodean. Pero... aú n así está locamente enamorado de una sola persona...
¡Yo!...
El que estaba teniendo este pensamiento de repente se rió como un loco. Tomó
un camaró n ya sin la cá scara (que Tin había pelado), lo sumergió en la salsa y...
—Di ah, deja que Can alimente a Tin ~~

22
La otra parte habló en tono armonioso y el oyente se sintió tan tranquilo por eso.
Le llevó los camarones delante de la boca. Tin se volvió para mirar a la persona
que estaba sonriendo mientras entrecerraba los ojos. El chico le parecía tan
estú pido como el primer día que se conocieron.
—¡Come! ¡Te estoy alimentando!
El camaró n en la mano de Can tocó suavemente los labios de Tin, quería que este
abriera la boca para comérselo.
—¿Está bueno?—Can sonrió y preguntó . Con solo mirar la leve sonrisa de la otra
parte, Can ya sabía cuá l sería la respuesta...
—neh má s o menos.
Can traduce: Cuando Tin dice que es regular, quiere decir que es extremadamente
sabroso.
—Come un poco má s. Debes estar agotado por tu viaje de negocios. ¿Ah?
Cantaloupe tomó otro camaró n y lo empujó a los labios de su novio, mientras
abría la boca para decir 'ah' como un pequeñ o niñ o. El apuesto joven maestro lo
siguió y abrió la boca mientras constantemente tenía una expresió n sonriente en
su rostro, Tin era plenamente consciente de que esta era la mejor manera de
consolarlo (y para alguien como Can, también era la ú nica forma en que podía
pensar ) El hombre blanco se inclinó má s cerca de su novio.
—Te haré sentir bien esta noche. ¿De acuerdo?
Can habla descaradamente de este tipo de cosas mientras le lanza una mirada
sugestiva que tomó a Tin con la guardia baja. Los ojos de Metthanan brillaban,
cuando Can dice 'sentirse bien', también significa que lo harían hasta que
estuvieran exhaustos.
Can no es tímido, igual que Tin, por lo que su actividad nocturna era
normalmente bastante emocionante.
—¿Está bien si lo hacemos ahora?— Tin se acercó , puso su mano en el trasero de
Can y lo frotó . El que fue acariciado no se sintió tímido en absoluto. Le sonrió y
acercó su rostro a su novio.
—¿Lo quieres?
—¡Ajá ! ¡Aquí está n!
Los dos muchachos, que ignoraron todo lo que los rodeaba y estaban a punto de
besarse en pú blico, pero fueron interrumpidos repentinamente por la voz de
alguien que venía del otro lado de la cerca de madera del restaurante. Esto hizo
que Tin se sintiera demasiado molesto. Entrecerró los ojos ante la direcció n de la
voz ... luego los abrió ampliamente.
Allí no solo estaban Pond y su novia, sino también sus amigos del instituto.
Incluso P'Money estaba aqllí haciendo una pose para tomar la foto. Tin solo
suspiró profundamente.
—¿Quieren comer?
Can le pidió a sus amigos que se unieran a él para comer mariscos. Actuó como si
nada hubiera pasado. Pond sacudió la cabeza.
—Espera, ¿viste a Ai'Ae y Ai'Pete? Vinimos aquí juntos y por un segundo que no
presté atenció n, desaparecieron. ¿Crees que estén haciendo lo mismo que ustedes

23
dos, esconderse en algú n lugar para hacer 'eso'? ¿cosas sexys? Si lo hubiera
sabido antes, probablemente le hubiera pedido a ChaAim que hiciera lo mismo .
—¡Ouch! Estoy bromeando, es broma. No me pegues, me duele.
Cuando Pond acababa de terminar la oració n, su propia novia usó su codo para
golpearlo, haciendo que Can se riera. Tomó el ú ltimo trozo de cangrejo y se lo
echó a la boca. Luego se levantó y jaló a la persona junto con él.
—Vamos, Tin. Busquemos a esos dos. ¡No los hemos visto en casi 3 meses, vamos
a ser la tercera rueda!
—Bien, bien dicho. Grandes mentes piensan igual. Hoy, todos seremos su tercera
rueda.
—Admites directamente que pediste unas vacaciones solo para meter la nariz en
sus asuntos,
Su amigo de la escuela secundaria Dear lo regañ ó , Pond solo se rió a carcajadas y
dijo.
—Cá llate y concéntrate en cuidar a tu chico.
Dear lo miró y se dio la vuelta. El resto de ellos se rió a carcajadas y todos
hablaron al mismo tiempo.
—Sí, vamos todos. Saboteemos los planes de Ae.
***
Las olas seguían golpeando la orilla del mar continuamente, pero esta vez fue
diferente. En la playa de arena blanca, dos hombres iban de la mano, paseando
por las largas playas.
Dos personas que se veían completamente diferentes entre sí, desde su
complexió n, su apariencia y la forma en que se vestían. Solo había una cosa que
era similar, la sonrisa que tenían en sus rostros.
—Esto es tan pacífico...
—¿Está s insinuando que los demá s son demasiado ruidosos?
—No solo son ruidosos, también son entrometidos y un dolor de cabeza. Solo
quiero estar aquí con mi esposa, solo nosotros dos.
El chico de piel oscura sacudió la cabeza. No dudó en absoluto cuando dijo la
palabra 'esposa'. El chico alto y blanco solo podía sonreír y balancear su mano
suavemente.
—No fui yo quien les dijo esta vez...—Pete sonrió y comentó .
El oyente se detuvo un poco y luego dijo honestamente—Lo olvidé... no les dije a
propó sito. Dijeron que querían ir de viaje, accidentalmente me equivoqué y dije
que ya tenía un plan contigo. Cuando Ai'estú pido Pond supo que queríamos viajar
a Pak Nam Pran, tuvo esta idea y le pidió a otras personas que se unieran a él
también. A veces realmente no entiendo có mo puede hacerlo, era obvio que todos
tenían sus propio asuntos, y aun así él fue capaz de pedirles que se unan.
El oyente sonrió . Todavía recordaba, hace muchos añ os, cuando querían hacer un
viaje para dos, y esas personas también los siguieron.
—Pero creo que es divertido. Desde el momento en que volví hasta ahora, no he
tenido la oportunidad de salir con todos de esta manera.
Pete sonrió , y la persona que sostenía su mano se volvió para mirarlo.
—Si está s de acuerdo, entonces yo estoy de acuerdo también.

24
Al final, el que se sentía molesto solo pudo sonreír. Y extendió la mano para tocar
el pelo suave de su Ai'Koon Chai.
—¿Eres feliz?
El oyente soltó una carcajada. Sostuvo esa mano cá lida y grande y la colocó en su
mejilla.
—Ae es mi felicidad. En este momento, estoy feliz, tan feliz que podría olvidar lo
miserable que fui durante esos tres añ os.
—Eso es bueno. Quiero que seas feliz. Haré todo lo posible para que te sientas
feliz todos los días.—Dijo Intouch acariciando suavemente esa mejilla blanca y el
hombre guapo no pudo evitar decir:
—Ae... sabes... comparado con la primera vez que nos conocimos... Te has vuelto
mucho má s amable...
El contrario no pudo ocultar su sonrisa ante este comentario.
—La primera vez que te vi... estaba pensando... ¿Qué tipo de hombre es este? No
solo tiene una apariencia atractiva y delicada, sino que también le gusta llorar, y
ni siquiera soy un tipo de persona que sabe có mo consolar a otras personas.
El recuerdo de la primera vez que se encontraron estaba volviendo a ellos. La
primera vez que este tipo lo ayudó , gritó tan fuerte mientras le preguntaba si
quería morir o algo así, pero esta persona también fue quien lo llevó a la clínica
después de eso.
—¿Qué hay de mí en este momento?
—¿Tú en este momento?— Ae hizo una pausa por un momento. Esta mirando a la
persona que lo observa con curiosidad y luego sonrió .—Sigues igual que antes.
Sigues siendo guapo, eso puede hacer que cualquier chica se enamore de ti. Aú n si
eres débil o te guste llorar...
La expresió n en la cara de la otra persona cambió de inmediato, ya que pensó que
lo que escucharía serían cumplidos, pero Ae no le prestó atenció n, continuó .
—Entonces seré yo quien limpie esas lá grimas y proteja a esa persona por el
resto de mi vida. Aunque nunca he consolado a nadie, pero cada vez que lloras, te
tendré en mis brazos y te consolaré. En mi ojos, en mi corazó n, eres esa persona.
La cara de Pete se volvió má s y má s brillante, no pudo evitar sonreír.
—Y... ¿qué clase de persona soy en tus ojos?
—Alguien que sabe pelear, tiene un rostro que da miedo y no es nada romá ntico.
La expresió n de Ae se volvió má s sombría, lo que indica que no esta feliz. El
causante de esto sonrió feliz y dijo.
—Pero también es la persona que Pitchaya má s ama.
Luego agarró la mano de la persona que acababa de decir que ama y la apretó con
fuerza.
—Alguien que me enseñ ó a ser má s fuerte. Alguien que me enseñ ó a ser paciente.
Alguien que me hizo ser una mejor persona. Me será las lá grimas. Es mi héroe. Es
alguien que tiene un corazó n tan vasto como el océano. Má s importante aú n,
alguien a quien nunca cederé ante nadie.
Pitchaya dijo mientras tenía la sonrisa má s amorosa en su rostro.

25
—Gracias, 'Casualidad', por dejarme conocer a Ae, gracias por dejar que Ae
aparezca accidentalmente en esa calle, tirar de mí y salvarme. Gracias por todo y
gracias por dejarme... enamorarme de ti.
Le dijo a su persona má s querida lo que realmente había en su corazó n. Ae lo
escuchaba atentamente, luego agarró su mano derecha.
—Eso no es todo, Pete.
—¿Hmm?
—No solo por dejar que te enamores de mí, sino también por dejar que me
enamore de ti y... que nos enamoremos el uno del otro.
Pete sonrió y lo dejó continuar.
—No me importa si nos conocimos de casualidad o no. Solo me importa lo que
nos trajo. De ahora en adelante, te protegeré. Fue mi decisió n cuando elegí
amarte.
Estaban declarando su amor mutuo en la playa. Pete se sintió un poco tímido,
bajó la cabeza y dijo tímidamente.
—Ae khrub ~~~
—Tomemos una foto juntos. No quiero tomar una foto solo.
Ae envolvió el hombro de Pete y sacó su teléfono mó vil para tomarse una selfie.
Pete también levantó la cabeza para mirar el teléfono que tenía delante.
Ae sostenía su mano izquierda y acercó sus manos izquierdas al teléfono. Porque
esos anillos ya no se usaban en los dedos anulares de sus manos derechas.
Si el anillo en el dedo anular de la mano derecha significaba que el usuario había
sido tomado, entonces el anillo en el dedo anular de la mano izquierda
significaba... Que esta persona le pertenecía para siempre.
—A Ae realmente le gusta tomar fotos ahora.
—Pero tú me gustas má s.
Pete solo quería molestarlo un poco, no esperaba escuchar su confesió n. Comenzó
a sentirse un poco tímido. No tuvo má s remedio que mirar la cá mara en la que
podía ver su rostro apoyado en junto al rostro de Ae, detrá s de ellos estaba el
océano vasto y azul.
<click>
Ese recuerdo fue capturado así como así. El chico de piel oscura levantó
suavemente la barbilla de su novio y estaba a punto de darle un dulce beso...
—¡¡¡Los encontré!!!
—¡Ai'Imbécil!— Una voz familiar lo interrumpió , lo que hizo que Ae no pudiera
evitar darse la vuelta y maldecir al dueñ o de esa voz. Pete solo pudo sonreír, se
dio la vuelta y vio a un grupo de personas guiadas por Pond acercá ndose a ellos
desde lejos.
¡¿Por qué 'accidentalmente' hice un amigo como él!?
—No me mires así, Ai'Ae. Esta vez, tus amigos realmente quieren celebrar que
ustedes dos está n de vuelta juntos. Ai'bajito, sonríe por una vez, no te matará , ya
sabes.
Intouch se rió a carcajadas, tomando a Pond con la guardia baja. El que solía ser
bajo se metió el celular en el bolsillo y asintió con la cabeza.
—Debería celebrar, ¿verdad?

26
—Err... Sí...
—Entonces... ¡¡¡Déjame patearte el trasero para celebrar, Ai'Estú pido Pond!!!
Dijo Ae y corrió hacia Pond para darle una patada, pero Pond lo esquivó . Estaba
corriendo mientras Ae iba detrá s de él.
¡Hoy si no puedo patearle el trasero, entonces ni siquiera soy humano!
Mirando la escena frente a él, Pete se quedó a un lado sonriendo como de
costumbre. P'Money luego se acercó , lo abrazó y les dijo a todos que se tomaran
una foto de ellos juntos. El ruido proveniente de este grupo de amigos agitó la
atmó sfera tranquila y silenciosa de la costa. Todos estaban muy felices porque
podían reunirse. El sonido de la risa feliz representaba amistad y amor.
Si la 'casualidad' les permitió encontrarse, entonces de ahora en adelante, deben
ser ellos quienes decidan su propio amor.
Si no se hubieran esperado pacientemente el uno al otro.
Si no se amaran con esa misma paciencia.
Si no se hubieran aferrado el uno al otro.
Si no creyeran pacientemente el uno en el otro.
Entonces, no importa cuá ntas personas 'accidentalmente' hayan conocido en sus
vidas, nunca se enamorará n con la misma intensidad.
Una vez que la semilla del amor ya ha brotado, debes atesorarla y cuidarla.
Porque solo entonces... ese amor... será ú nico...

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Especial 1
Siempre que te tenga a mi lado en el futuro...
Era tarde en la noche, un automó vil lujoso se acercó lentamente y se detuvo
frente a la villa. Un joven con su costoso traje salió apresuradamente del auto con
algunos archivos en ambas manos. Rá pidamente entró a la casa.
—Oh... ¿Koon Noo ya está en casa?
—khrub Sawadee. ¿Dó nde está Ae, tía Jiew?
[Nota: สวัสดี (Sawadee = sawadíi) significa Hola. Si eres hombre se agrega el khrub
(krab) y si eres mujer (Kah)]
Tan pronto como entró , la criada principal, que estaba a punto de irse a dormir,
se acercó para saludarlo. Al no obtener la respuesta que quería, el joven, que
acababa de regresar del extranjero, se impacientó y repitió la pregunta una vez
má s.
Los ojos de tía Jiew estaban llenos de cuidado y amor cuando miró al joven
maestro. Cada vez que Koon Noo hablaba de Khun Ae... Su expresió n fría se volvía
má s amable, completamente diferente en comparació n con aquellos momentos
en que estaba interactuando con el personal femenino del hotel.

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[Nota: "Khun" prefijo tailandés agregado antes del nombre, en señ al de respeto y
cortesía.]
Koon Noo Pete había regresado de Reino Unido durante aproximadamente un
mes. Incluso se le dijo que descansara por un mes o dos antes de comenzar a
trabajar nuevamente, pero él insistió en ayudar a su madre a administrar el hotel.
Obviamente, siendo el ú nico hijo de la dueñ a del hotel y el precioso nieto de la
familia, estaba má s que calificado para estar en esa posició n, pero cuando se tiene
en cuenta su personalidad, se puede observar a un hombre perfecto, el sueñ o de
muchas chicas.
Se dice que todas las damas del hotel siempre está n intentando llamar su
atenció n todo el tiempo.
Por el momento, Koon Noo Pete, que es alto y delgado, con aura de élite
emitiendo de él, vestido con un traje a medida, parecía aú n má s atractivo que
cualquier celebridad. Sus ojos brillan con irresistible gentileza. Sus cejas oscuras
gruesas, su nariz hermosa y alta era como la de las estatuas esculpidas. Una
sonrisa suave siempre estaba presente en sus labios carnosos. Se parecía al
Príncipe Azul que habita en corazones de muchas chicas jó venes.
Pero tan pronto como era algo relacionado con esa persona... ¡este Príncipe Azul
se convertiría en un niñ o nervioso!
—Khun Ae ha estado aquí desde las 9 de la noche... Todavía te está esperando en
la sala de estar, Koon Noo.
Ese apuesto ingeniero es el hombre que tiene el corazó n de Koon Noo Pete.
—¡¿Ae ha estado esperando a Pete por dos horas?!
Dijo Pete. El sentimiento de culpa se mostraba en su rostro, y esto hizo que la
persona que lo miraba sonriera suavemente.
—Koon Noo, por favor créeme, Khun Ae... É l te está esperando por qué así lo
desea... Ahora, por favor, discú lpame porque la tía Jiew necesita ir a cerrar la
puerta...
Tía Jiew sonrió y quiso irse para dar un poco de privacidad a la joven pareja.
—Tía Jiew, no es necesario. Voy a cerrar la puerta yo mismo. Por favor, solo ve a
dormir... Realmente no necesitas esperarme la pró xima vez... No quiero que te
quedes despierta hasta tarde por mí.
Pete dijo, su voz estaba llena de culpa. La persona a su lado tenía una sonrisa en
su rostro mientras lo miraba todo este tiempo.
—No, no es que me quede despierta hasta tarde. Todos los días, tanto Koon Noo
como Khun Putch trabajan hasta muy tarde. He estado así durante muchos añ os
ya. No se preocupe. Si no veo a todos en casa con mi mis propios ojos, voy a
preocuparme. Ahora, vete, Khun Ae te ha estado esperando demasiado tiempo.
Tía Jiew lo empujó hacia la sala de estar, se dio la vuelta y se dirigió a la puerta.
Pete solo podía agradecerle repetidamente mientras ingresaba en la sala.
Había una persona esperá ndolo allí.
Parecía frustrado por el trabajo estresante, pero aun así, durante esos momentos,
¡Ae se veía extremadamente sexy!
Pero... Pete sonrió no por esas cosas. É l sonrió porque en este momento tenía a Ae
a su lado para protegerlo.

28
—Solo cuando Ae está aquí puedo sentirme feliz. ¡Tan feliz que no puedo creerlo!
La sonrisa en su rostro se volvió má s y má s brillante. Levantó suavemente la
mano para tocar el rostro de Ae. Luego se quitó el chaleco y lo puso sobre la mesa.
El hombre alto, que podía hacer que todas las chicas pelearan por él, se subió en
silencio al sofá y envolvió ambas manos alrededor de la cintura de Ae. Frotó su
rostro sobre el firme pecho de Ae y escuchó su fuerte corazó n latir. Esto hizo que
Pete se sintiera realmente tranquilo.
—Desearía que esto pudiera durar para siempre.
—¿Me has estado observando mientras estuve durmiendo?
—¡¡¡Eh!!!
Pete exclamó sorprendido cuando escuchó la voz profunda pero somnolienta que
venía de lo alto. Pete levantó la cabeza y vio a Ae, que estaba entrecerrando los
ojos por la luz brillante. La cara de Pete no estaba tan roja como antes, porque en
este momento, solo podía concentrarse en la pregunta, una sonrisa brillante
estaba presente en su rostro.
—Entonces... ¿me dejará s dormir aquí?
Ae frunció ligeramente el ceñ o y...
¡Repentinamente!
—¡Ah!
—Voy a dejarte sentir... mucho má s... que solo dormir...
Ae abrazó la cintura de Pete con fuerza. No pudo evitar suspirar.
¿Por qué Pete seguía tan delgado, tan delgado como antes?
Ae sonrió suavemente y lo besó en la nariz, y luego en las mejillas mientras hacía
este sonido abrasador hasta que Pete no pudo soportar má s y reír a carcajadas.
Apoyó ambas manos sobre el pecho de Ae. Sus ojos miraban a los ojos de la otra
parte.
—¿Está s cansado, Ae? En realidad, yo también podría ir a Rayong por Ae...
Pete levantó las manos y acarició suavemente la cara de Ae. Este sonrió mientras
lo miraba, luego sostuvo una mano de Pete y besó suavemente en la palma de esa
mano.
—No, no estoy cansado. En cuanto te veo, ya no me siento agotado.
La voz de Ae era profunda, no tan agresiva como otros hombres, era muy gentil y
dulce. Ae miró a su persona má s querida frente a él y besó la palma de Pete una
vez má s. La sensació n dolorosa en su corazó n fue rá pidamente reemplazada por
la sensació n cá lida.
—Fueron solo 2, 3 horas. Pude esperarte por 3 añ os, ¿no? Incluso si tengo que
conducir 10 horas solo para verte, no me importa en absoluto. Son solo 3 horas,
estoy feliz y dispuesto a hacerlo.
Ae dijo como si fuera algo menor, pero hizo que Pete se sintiera aú n má s culpable.
La sonrisa en su rostro desapareció gradualmente. Sintió que era igual que todos
los demá s.
Durante esos 3 añ os, el tiempo había enseñ ado a estos dos muchas cosas, y uno
de ellos atesoraba cada momento feliz cuando podían estar juntos.
Por lo tanto, aunque Ae estaba trabajando en la zona industrial de Rayong y Pete
estaba en Bangkok, aú n planeaban reunirse una vez por semana. Es por esta

29
razó n que Pete sintió que estaba siendo un poco injusto, ya que Ae siempre era el
que viajaba a Bangkok a verlo.
—No hagas una cara así. Simplemente no quiero que estés cansado.
—Entonces... ¿debería dejar que solo Ae vaya y venga así nada má s?
—No. En este momento, te está s acostumbrando a tu trabajo, no quiero que
tengas que pensar demasiado, así que seré yo quien venga a ti. Pero cuando ya te
hayas establecido, esperaré a que vengas a mí.
Ae sonrió y dijo. Sostuvo la mano de Pete con fuerza hasta que volvió a sonreír.
—Incluso cuando finalmente me haya establecido con mi trabajo, simplemente
dirá s que... tienes que volver a visitar a tu sobrina. Ae obviamente está
preocupado de que yo tenga que conducir una larga distancia.
Pete dijo mientras mostraba esta expresió n de "te conozco" a Ae, y esto dejó al
oyente sin palabras. No podía pensar en ninguna excusa en absoluto.
Solo pudo sonreír y dijo.
—Sí. Siempre tienes razó n...
La forma en que Ae lo miró en este momento hizo que Pete no pudiera evitar
reírse a carcajadas.
Pete sabía que desde que regresó a Ae, Este lo trató con má s cuidado y
preocupació n que antes. Incluso si ya no era una persona que necesitaba ser
atendida. Se había convertido en un hombre capaz, pero Ae todavía lo trataba
como si aú n fuera el estudiante de primer añ o que estaba sentado detrá s de él en
su bicicleta. Sin embargo, Pete no tuvo ningú n problema con eso. Frente a otras
personas, él era el Sr. Pitchaya, pero frente a esta persona, solo quería volver a ser
su Pete, un tipo ordinario al que le gustaba actuar lindo frente a él.
¡El tiempo vuela!
—Realmente no me gusta cuando puedes leer todo lo que tengo en mente.
Ae usó todas sus extremidades para envolver al hombre alto y delgado frente a él.
Lo abrazó con fuerza y lo besó continuamente en las mejillas izquierda y derecha
hasta que Pete se rió y lo apartó , pero estaba demasiado débil... o simplemente no
tenía la intenció n de hacerlo... porque los cá lidos abrazos de Ae le resultan muy
adictivos.
—Suficiente... Suficiente... Ae... Ahh... Hmm... Tu vello está rozando mi cara...
Jajaja... Suficiente...
Pero cuanto má s intentaba Pete detenerlo, má s Ae no podía contenerse... desde la
barbilla hasta la manzana de Adam. Al principio era el sonido de la risa, luego se
fue transformando gradualmente en otra cosa. Pete apretó fuertemente a Ae, no
le dejó seguir besá ndolo.
—Ae... No hagas mucho ruido cuando me beses...
Los labios calientes de Ae estaban presionando el cuello de Pete, lo chupó
suavemente, causando que Pete sintiera que la fuerza de todo su cuerpo se había
agotado y todo lo que podía hacer era jadear. Solo quedaba el sonido de la
respiració n. Pete contuvo sus gemidos en la garganta. Agachó la cabeza para
mirar a la persona que estaba atacando su cuello.
—No, Ae. Esta vez no es...

30
—Tu madre ya está dormida desde las 10 de la noche. Tía Jiew también está
durmiendo... así que... ruega todo lo que quieras, Pete...
Ae dijo descaradamente con su voz profunda. Al mismo tiempo, la mano grande,
que estaba colocando en el trasero de Pete, comenzó a moverse. Lo ú nico que
Pete hacía en ese momento era aferrarse a los hombros de la otra persona. Sus
ojos se cerraron con fuerza. Estaba disfrutando la dulce sensació n que los besos
de Ae le trajeron.
¡¡¡Se siente tan bien!!!
<Knock>
<Knock>
<Knock>
En medio de este momento de calor, un sonido continuo de golpes hizo que dos
hombres, que se estaban ahogando en el momento, se sobresaltaran de repente.
Ambos ni siquiera tuvieron tiempo de separarse el uno del otro cuando
descubrieron que la hermosa dueñ a de esta casa los estaba observando con una
mirada divertida y amorosa en su rostro.
—¡Ah!... Mamá ... Pete ya está de regreso en casa...
El hijo dijo suavemente. Luego se apresuró a arreglarse la ropa mientras el
invitado, que estaba sentado a su lado, se revolvió el pelo con timidez.
—Sí, puedo ver que está s aquí. Aú n no he dormido, así que decidí pasar a verte.
La madre dijo suavemente. Miró a los dos muchachos que actuaban como dos
estudiantes que acababan de hacer algo malo y fueron atrapados con las manos
en la masa por su maestro, esto hizo que la tía Jiew, que estaba parada junto a
ella, tuviera dificultades para contener la risa.
—Por favor no te preocupes, Ae, duerme aquí esta noche. Me voy a dormir
pronto.
La madre no mencionó lo que acababa de suceder. Consideró a Ae como un hijo
propio y le dijo que durmiera en la habitació n de Pete como hace un mes. Para ser
sinceros, Ae podía esperar a Pete en la habitació n, pero aú n así insistía en
quedarse en la sala de estar y esperar a que el dueñ o de esa habitació n volviera a
casa.
—Sí... entonces... voy a darme una ducha.
Ae respondió rá pidamente. Agarró su mochila que quedó en el sofá y la arrojó
sobre su hombro. Pete agarró los archivos. Luego caminó hacia su madre y la
abrazó .
—Buenas noches mamá .
Pete la besó suavemente en la mejilla. Se sentía tan tímido que ni siquiera podía
mirar a su madre.
—Vuelvan a su habitació n ahora. Ambos deben estar realmente cansados.
Esperaron hasta que ella terminara de hablar entre risas y luego subieron las
escaleras.
Los adultos de abajo estaban observando a los dos muchachos. Sus ojos estaban
llenos de amor y felicidad.
—Señ ora... Es muy agradable, cada vez que los veo tan cariñ osos, estoy tan feliz.

31
Tía Jiew sonrió y dijo aquello. No le importó que hace un momento, la pareja
olvidara por completo su existencia, ya que solo quería ver a Koon Noo y Khun Ae
felices.
—Yo también. Nunca me he sentido molesta porque Pete ama a Ae.
Después de escuchar lo que dijo la señ ora Putch, la tía Jiew no pudo evitar
preguntar.
—Señ ora... ¿Alguna vez pensó que... sería mejor si a Koon le gustaran las mujeres?
—Nunca he tenido ese pensamiento, nunca.
La señ ora respondió con firmeza. Había una mirada mitad triste, mitad feliz en su
hermoso rostro.
—El amor entre un hombre y una mujer no significa que conducirá a la felicidad.
Jiew... Ya ves... Mi matrimonio fue un fracaso. No quiero que Pete sufra como yo.
Incluso si Ae es un hombre, y puede hacer feliz a Pete por el resto de su vida. Eso
es suficiente. No me importa si la pareja de Pete es hombre o mujer. Estoy feliz si
mi hijo es feliz con la persona que elija.
Sus palabras fueron ciertas y sinceras, lo que hizo que la tía Jiew sonriera feliz
después de escuchar lo que dijo.
—Entonces... ¿Qué pasa si Khun Ae propone...?
Madame Putch permaneció en silencio un momento y después dijo:
—Entonces, ¿qué color de vestido crees que debería usar en su boda?
Tía Jiew sonrió como una forma de responder. Putch también se sintió divertida
por todas las cosas que acababa de decir, las mismas que ya había pensado
durante mucho tiempo. Si esos dos realmente quisieran casarse, entonces en esa
boda, ella estaría al lado de su hijo. Para ser honestos, ella realmente quiere ver
esa foto...
***
<En el cuarto de bañ o>
Debajo de la ducha en el lujoso bañ o, había dos hombres que ardían con la llama
del amor.
—Aa... Hm... Ae... no puedo soportar má s... Entra en mí...
Pete estaba parado dentro de la bañ era, sin una sola tela para cubrir todo su
cuerpo. Puso ambas manos en la pared mientras sus dos rodillas se apoyaban en
esa misma bañ era. Ae se inclinó y se colocó detrá s de la espalda de Pete. Su gran
mano estaba jugando con el miembro de Koon Chai Pete. Luego usó su dedo para
provocar la entrada, su dedo estaba frotando antes de empujar dentro y fuera del
cuerpo de Pete continuamente.
Pete jadeó fuerte. Su hermoso rostro estaba sonrojado por el sentimiento de
excitació n. Levantó la cabeza hacia arriba. Dulces gemidos salieron de esos suaves
labios y resonaron por toda la habitació n.
—No me seduzcas. De lo contrario, podría lastimarte.
Ae mordió las orejas de Pete. Estaba observando todo el cuerpo de este mientras
cambiaba de blanco a rojo, lo que lo hacía sentir realmente emocionado. No había
duda de que cada vez que Ae se enfrentaba a Pete, siempre era un "depredador"
contemplado a su "presa".

32
Ae realmente quería empujarse a ese lugar maravilloso, pero había pasado un
tiempo desde la ú ltima vez que lo hicieron, por lo que tuvo que evitar lastimar a
su novio.
—No... te estoy seduciendo... a ti... Aah... Hagh... Ae... No... muevas... tu dedo así...
yo... me voy a... Aaahhh...
Pete ni siquiera pudo terminar su oració n ya que el dedo largo, que estaba
sumergido en lo má s profundo de él, se movió aú n má s fuerte. Ae empujó su dedo
dentro y fuera repetidamente, provocando que Pete temblara. El jadeo se hizo
má s intenso. Pete extendió sus piernas aú n má s.
La imagen era demasiado hermosa, sorprendió al hombre alto y grande que
estaba parado detrá s. Ae bajó la cabeza y lamió continuamente las gotas de agua
en la espalda de su novio.
—No me provoques, Pete.
—Ae... yo no...
—Ya estoy duro... Si sigues provocá ndome... Voy a morir en tu cuerpo...
—Yo... todo lo que quiero... eres tú ... Ae...
El ingeniero Intouch era conocido por su calma y autocontrol, pero por el
momento, su esposa lo molestaba tanto que tuvo que maldecir. Miró a la persona
que estaba de espaldas a él.
Frente a él en este momento está Koon Chai Pitchaya, que está cubierto de agua.
Todo su cuerpo era rojo. Sus dos rodillas ligeramente extendidas. El dedo de Ae
entraba y salía por su agujero. Incluso podía ver débilmente el interior de ese
lugar cuando sacó . Al mismo tiempo, la cara de Pete estaba cubierta de lá grimas
debido a la emoció n. Todas estas cosas se combinaron y crearon la imagen má s
hermosa que Intouch haya visto.
Ae de repente detuvo lo que estaba haciendo. Pete seguía gimiendo sin parar el
nombre de su amante. Ae rá pidamente sacó su dedo para reemplazarlo con su
miembro. Usó la punta de su dedo para frotar la entrada, causando que Pete se
sintiera aú n má s emocionado. El gemido provenía de él.
Cuando Ae vio que esa mano blanca frotaba su hombría, no pudo contenerse má s
y rá pidamente empujó su cosa grande y redonda dentro del estrecho agujero de
Pete. Una persona normal podría no ser capaz de manejar una penetració n tan
repentina, pero Pete estaba tan acostumbrado. É l suplicó deliberadamente por
ello.
Cuando todo el asunto ya estaba en lo profundo de él. Pete retiró la mano. Sus
ojos estaban llenos de sentimientos. Ae no pudo evitar agarrar esa mano suave.
Cuando vio a Pete haciendo algo así, se dio cuenta de lo sexy que era su novio. No
podía apartar los ojos de un Pitchaya tan sexy como ese.
—Aa... Ah... Hahh...
Al ver que Ae estaba satisfecho con lo que acababa de hacer, Ai Koon Chai se
sonrojó y dijo.
—Aaa... Ae... ¿Te gusta?... ¿Se siente bien?
El joven era franco, así que cuando vio a Pete descaradamente seduciéndolo así,
no pudo tolerarlo má s.
—Realmente quieres matarme...

33
Ae dijo mientras empujaba hacia adentro y hacia afuera con dureza.
—Aaa... aah.. Má s... Ae... Ae...
El tipo grande frotó suavemente los brazos blancos y suaves de su amante. El
sonido que hizo Pete, provocó que Ae se sintiera aú n má s emocionado. Su ritmo
se hizo má s rá pido. En este momento, Pete solo podía soltar distraídamente
algunos gemidos rotos. Su aliento se hizo má s rá pido. Intentó coordinarse con Ae
para permitir que esa cosa intensamente caliente entrara en él con mayor
facilidad.
El ambiente se hizo cada vez má s cá lido. Su movimiento se hizo má s y má s fuerte.
Tanto su cuerpo como su alma se unieron como uno.
—Bien... Pete... Se siente increíble...
Ae susurró en los oídos de Pete con su voz cá lida y profunda. Mirando la cara
blanca de su amante, no pudo evitar darle un beso caliente. No mucho después,
sus labios se unieron. El sonido de los besos resonó por toda la habitació n. Ae
agarró la cosa caliente de Pete y se movió arriba y abajo sin dejar de empujarse
sin parar por detrá s.
Pete se sentía tan bien, era como si estuviera en el cielo.
De repente, todo el bañ o quedó en silencio. Dos cuerpos se abrazaban
fuertemente. Se conectaron como uno.
Me tienes y yo te tengo a ti.
Sus lenguas bailaban e intercambiaban sentimientos emocionados. Cuando casi
llegaron al clímax, solo se escucharon sonidos de gemidos rá pidos y llenos de
emoció n. Ambos llegaron al mismo tiempo. Pete estaba exhausto. Lá grimas de
emoció n cayeron incontrolablemente de sus ojos.
—Ven aca.
Cuando Pete estaba a punto de agacharse para meterse en la bañ era, Ae lo abrazó
rá pidamente y ambos se entraron juntos.
En la bañ era caliente, dos cuerpos estaban apoyados uno contra el otro. Ae usó
sus fuertes brazos para abrazar el cuerpo blanco y suave de Pete. Esta posició n
hizo que Pete pareciera mucho má s pequeñ o ya que tuvo que acurrucarse,
mientras que las manos de Ae eran demasiado grandes ... Demasiado grandes
para que pareciera que no solo estaba abrazando su cintura sino también todo su
mundo. Ae besó suavemente el cabello ligeramente humedecido por el sudor de
su novio. Sus besos estaban llenos de cuidado y amor.
—¡Definitivamente moriré sobre tu cuerpo algú n día!
Ae bromeó suavemente con la persona que estaba sentada en su regazo mientras
se preguntaba có mo podía ser este chico tan lindo.
Las palabras de Ae hicieron sonreír a Pete. Giró la cabeza y la frotó sobre el
hombro de Ae. Incluso podía sentir los latidos del corazó n de su amante en su
pecho.
—No soy tan bueno, Ae...
—Para mí, hoy fuiste realmente bueno, Pete... En comparació n con antes, está s
mejorando...
El hombre grande y de piel oscura entrecerró los ojos mientras miraba a su novio,
que lo atraía mucho. Solo los gemidos de Koon Chai Pitchaya ya podían volverlo

34
loco. Pete se dio la vuelta y miró directamente a los ojos de Ae. Seguía siendo la
misma persona que antes, era tímido pero siempre haría todo lo que Ae dijera.
—No soy así para nadie... Solo Ae... Todo lo que hice hoy fue para hacerte sentir
bien... Quiero que te sientas tan bien para que nunca me dejes.
Pete expresó su sentimiento en un tono serio. Ae estaba desconcertado por su
confesió n. Una sonrisa suave y profunda salió de su garganta.
—Nunca te dejaré, Pete. Nunca sucederá .
En el momento en que Pete dijo que quería que Ae se quedara a su lado y no
dejarlo ir, Ae admitió que se sentía realmente feliz. Porque él mismo solía tener
este sentimiento de celos y posesividad antes. Incluso pensó que si podía obtener
el corazó n de Pete, nunca lo dejaría ir hasta el día de su muerte.
—¿Qué hay de ti, Pete?
Ae le preguntó . Pete se dio la vuelta para observar a Ae. Se miraron a los ojos.
Entonces este se hundió en el cá lido pecho de su novio. Usó ambos brazos para
abrazar a Ae y susurró suavemente.
—¡Siempre estaré aquí! Estaré contigo para siempre, nunca má s me separaré de
ti.
Pete parecía tan adorable, que hizo que Ae sintiera que su corazó n estaba a punto
de saltar de su pecho. La sonrisa en el rostro de Ae se hizo aú n má s brillante. Bajó
la cabeza para besarse en los labios carnosos de su novio.
¿Quién podría haber pensado que el Sr. Pitchaya, que normalmente era tan serio,
podría ser tan lindo cuando estaba con él?
—Ae... Hmm... Está s... otra vez...
Por el momento, sus cuerpos estaban cerca el uno del otro. Por lo tanto, Pete
podía sentir incluso hasta el má s mínimo cambio... Extendió suavemente su mano
para tocar el 'pequeñ o Ae'. Justo como pensaba, a pesar de que acababa de llegar,
una vez má s esa parte se endureció .
—Es porque hace un momento estabas actuando lindo.
Ae habló a los oídos de Pete con su voz profunda y cá lida. Casualmente admitió
que estaba duro solo por la confesió n de Pete.
—Entonces... Tienes que asumir toda la responsabilidad... Pete...
La voz de Ae llegó a los oídos de su novio. Esos brazos só lidos apretaron a Pete
má s fuerte como si quisieran que se convirtiera en uno con él. Pete enterró su
rostro en el cuello bronceado de Ae.
Ai Koon Chai luego susurró tímidamente.
—Krhub, Ae~
Y una vez má s, la temperatura en el bañ o cada vez era má s alta...
—Estoy pensado en comprar una casa.
—¿Una casa?
Cuando finalmente terminaron de bañ arse, ya era tarde en la noche. Las
manecillas del reloj mostraban que ya era un nuevo día. Pete ahora estaba
sentado frente al espejo, secá ndose el cabello mientras la otra persona estaba
medio acostada, mitad sentada en la cama.
Ae tenía esa expresió n seria en su rostro cuando le contó a Pete la noticia
sorprendiendolo un poco.

35
—Pero ahora no, todavía tengo que pagar el auto, aunque no importa. P'Oh ha
dicho que pagaría la mitad como regalo de graduació n para mí. Sin embargo, he
decidido que tengo que comprar una casa o un apartamento en los pró ximos dos...
no... tres añ os.
Después de que su cabello ya estaba seco, Pete dejó el secador y se subió a la
cama. Levantó la cabeza para mirar a la otra persona.
—Entonces, ¿En qué á rea te gustaría comprar tu casa? ¿Rayong?
—Rayong no es tan malo... Pero tu está s en trabajando en Bangkok.
—¡Eh!
Pete se sorprendió al escuchar lo que dijo Ae. Miró directamente a la persona que
hace un momento hablaba muy en serio cuando dijo que quería comprar una
casa.
—No tengo la intenció n de quedarme en Rayong por mucho tiempo. Aunque la
paga es buena y habrá beneficios si trabajo horas extras, el trabajo está bien, pero
no podemos estar juntos. Realmente no quiero perder má s tiempo. He estado
trabajando allí durante 1 añ o y 6 meses. Hay un superior que está muy pendiente
de mí. Quiere que trabaje para él. El salario es mejor. Lá stima que no sea bueno en
inglés o de lo contrario tomaría su oferta. Ese trabajo puede tener incluso
mejores condiciones que mi trabajo actual.
Ae suspiró profundamente y Pete, que estaba sentado con las piernas cruzadas
sobre la cama, preguntó con curiosidad.
—¿Qué problema hay de comprar tu casa?
Ae levantó la cabeza y miró a Pete con una mirada seria en su rostro. Extendió la
mano para tocar el suave cabello de Pete.
—NUESTRA casa.
Pete quedó desconcertado por un corto tiempo por las palabras de Ae. Miró a su
hombre y se dio cuenta de que ahora había una sonrisa en el rostro de Ae.
—Mi automó vil es solo un automó vil de segunda mano. Ni siquiera vale 100.000
baht. P'Oh dijo que me pagaría la mitad, así que creo que solo necesito trabajar
durante varios meses má s y seré capaz de terminar el resto. Y aunque justo
ahora, dije que quería comprar una casa. Aacabo de comenzar a trabajar por tan
solo un añ o. Si quiero comprar una casa, entonces tendré que prestar dinero.
Incluso aunque parezca que me sobreestimo, quiero comprar un apartamento o
una casa para cuando regrese a Bangkok, tener un lugar donde quedarme.
Ae de repente habló a una velocidad má s lenta.
—Y también significa que... podemos permanecer juntos para siempre.
Pete observó en silencio. Estaba observando la cara de Ae cuando esté describía
su futuro de una manera seria pero entusiasta. Y la existencia de Pete también se
incluyó en ese futuro.
—Pero... Ae no necesito una casa... Puedes venir a mi casa...
Después de escuchar lo que dijo Pete, la expresió n de Ae se puso un poco
incó moda.
—Ya he molestado a tu madre y a tía Jiew demasiadas veces, Pete. Cada vez que
volvía a Bangkok, no importaba a qué hora llegaba, la medianoche, la 1 o las 2 am,

36
siempre se quedaban despiertos y me esperaban. ¿Pero sabes, Pete? Hoy, cuando
regresé aquí, el primero que quería ver era a ti.
Ae pronunció cada palabra claramente con su tono profundo y cambiante y su
sinceridad oculta. Solo así y fue suficiente para calentar todo el cuerpo de Pete.
El calor enrojeció sus ojos.
—Si me dices que venga al hotel de tu familia solo una o dos veces, entonces está
bien. Pero no quiero que otras personas digan que dependo de la familia de mi
esposa. Tu madre no dirá nada, pero quiero demostrar que tengo la capacidad de
cuidarte. Cuando finalmente pueda tener mi propia casa, entonces podré
demostrarle que puedo cuidarte bien, Pete.
Intouch agarró la mano de Pete y acarició suavemente el anillo en el dedo anular
de su mano izquierda. Cada palabra de él era como la promesa má s sincera y fiel
que se grabó profundamente en el corazó n de Pete.
—Tal vez solo soy un pobre ingeniero por ahora. Y mi salario no es alto, pero...
por favor espérame, Pete. Me convertiré en un mejor hombre. Lo intentaré aú n
má s. Ganaré mucho dinero. Haré todo lo posible para demostrar a todos que no te
equivocaste al elejirme.
Pete escuchó en silencio a su novio. Aunque cuando dijo esas cosas, siempre hubo
una sonrisa amable en su rostro, el oyente no pudo evitarlo. Sus ojos se llenaron
de lá grimas.
—Ae... Sabes... No has cambiado nada.
Pete dijo suavemente. Sostuvo firmemente la gran mano de la otra parte.
Independientemente de có mo resulte el futuro. Ae siempre sería el mismo
hombre. El hombre que podía hacer latir su corazó n. El hombre que amaba con
todo su ser.
—¿Eso es malo?
Ae sostenía la cara de Pete mientras usaba a sus dedos para jugar con las
comisuras de sus labios y hacerlo sonreír.
—Por supuesto. Es malo. Muy malo. Porque si Ae sigue siendo así, hará que me
enamorare aú n má s.
—Está bien... Eso es bueno. Cuanto má s me ames, mucho mejor.
Cuando terminó su oració n, Ae aprovechó esta oportunidad para abrazar a Pete.
Abrazó a la persona que aú n estaba en ropa de dormir y lo dejó descansar sobre
su pecho. Ai Koon Chai podía escuchar un leve sonido de risa proveniente del
pecho de Ae. Inesperadamente también soltó una carcajada.
—Ae khraaaab~~~~
—¿Qué sucede?—Ae lo abrazó con fuerza y le preguntó .
—Entonces... ¿Qué piensas comprar, una casa o un departamento? ¿Puedes
dejarme compartir el pago también?
Pete preguntó con cautela y nerviosamente esperó la respuesta. Porque en su
mente, Pete pensó que cuando Ae dijo que quería comprar una casa, esa casa
debía ser de su propiedad personal. Sin saber que Pete estaba preocupado, en
este momento, Ae dijo con su voz profunda.
—Uhm, será nuestra casa, ya sea que compartas el gasto o no, igual te anotaré
como copropietario.

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Pete se levantó y miró al hombre frente a él. Podía ver claramente en sus ojos la
seriedad y la terquedad.
—Quiero una casa que nos pertenezca a nosotros dos. Solo tú y yo. Nadie má s.
Fue la mejor respuesta que Intouch pudo darle a Pitchaya. Tan pronto como Ai
Koon Chai escuchó la respuesta de Ae, envolvió sus brazos alrededor de la cintura
de Ae. Se acostó encima de su novio y golpeó suavemente su pecho firme. Podía
sentir claramente que Ae también le devolvió el abrazo.
—Ae... Sabes... Sigues siendo tú ... Todo lo que haces me demuestra que me amas
má s que nada.
—Está bien... está bien... Ya es la 1 de la mañ ana, duerme un poco. Hablaremos
má s sobre eso mañ ana.
Ae respondió . Pete apoyó su mano sobre el pecho de su compañ ero, levantó la
cabeza y asintió varias veces. Sin embargo, Ae no lo dejó volver a acostarse a su
lado tan fá cilmente. Levantó una de sus piernas, la envolvió alrededor de la
cintura de Pete y la convirtió en su refuerzo personal con forma humana y...
<Beso>
—Buenas noches.
Un suave beso fue colocado en la frente de Pete. Solo dos palabras cortas pero
cá lidas ya podían hacer que Pete revoloteara. É l fijó su posició n para que el lugar
donde estaban sus corazones pudieran estar aú n má s cerca. Luego susurró
suavemente.
—Buenas noches a ti también, khrub Ae~~
Pete cerró los ojos. A pesar de que todavía había tantas cosas que quería hablar
con Ae, sabía que este había trabajado durante todo un día y luego tuvo que
conducir hasta aquí para encontrarse con él. Debe estar agotado. Por lo tanto, Ai
Koon Chai pensó para sí mismo... Después de todo, no nos vamos a separar nunca
más, así que está bien dejarte ganar esta vez, hasta mañana.
Mientras lo pensaba, no pudo evitar sonreír. Lentamente cayó en un hermoso
sueñ o. Imá genes borrosas aparecieron una tras otra frente a sus ojos. Solo uno de
ellas estaba clara, era el futuro de Ae y Pete, ambos estaban parados dentro de su
casa.
3 añ os de separació n y pensó que el tiempo podría hacer que este amor se
desvaneciera. Sin embargo, Pete estaba seguro de una cosa: si hubiera un día en
que tuvieran que separarse, independientemente de cuá nto tiempo sería, Ae y él
seguiran siendo los mismos del primer día, nunca cambiarían.
Y este amor nunca cambiará ...

Especial 2
—¿Por qué está s aquí todas las mañ anas? Tu casa también tiene un gimnasio—
preguntó Can
—¿Qué tiene de malo ir a entrenar? —Responde Tin
—No está mal, pero desperdicias tu dinero.
A las siete de la mañ ana, todos salieron de la cama listos para trabajar, Kirakorn
no fue la excepció n, terminó de prepararse e inmediatamente fue rumbo a su

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trabajo, luego descubrió a su amante, el 'joven maestro' de una familia
reconocida, sentado có modamente en el gimnasio.
Sí, después de la graduació n, Kirakorn se ha convertido en un entrenador, y hasta
ahora ha estado trabajando durante todo un añ o.
Así es, 1 añ o completo, excepto cuando viaja por negocios o trabaja hasta la
medianoche. Entonces este chico rico y blanco llamado Tin, siempre viene al lugar
de trabajo de su amante. Es como una declaració n indirecta para los compañ eros
de trabajo de Can, como si siempre lo que tratara de decir es 'Soy el amante de
Can'.
Kirakorn no se siente incó modo debido a esto, la razó n es que considera que
pagar la membresía para su amante es un desperdicio. Debido a que la casa de
Tin también tiene su propio gimnasio, equipo completo, incluso tiene una piscina
para nadar, en comparació n con el gimnasio al que está viniendo, pero aú n así
gasta su dinero aquí. Eso es desérdiciar. Y lo má s importante es... que ncluso lo
contrató como su entrenador privado.
—Tin, si quieres, te entrenaré todas las noches antes de ir a la cama durante una
semana entera, lo haré gratis, está s desperdiciando decenas de miles de baht aquí
—Can es como antes, no un principiante. El oyente solo suspira ante la inocencia
de su amante.
De hecho, Tin se opuso firmemente a que Can trabajara en este lugar, pero aú n a
su oposició n Can insiste en mantener el puesto.
—Quiero hacerlo, este lugar es adecuado para mí, no tienes derecho a
detenerme.
No importa lo que Tin diga, su novio aú n quiere trabajar en este lugar. En
respuesta, finalmente se le permitió trabajar con una condició n. Eso
independiente de una buena remuneració n o lo que sea, pero durante el trabajo
tiene que mantenerse en contacto con Tin.
¡Ah!, Otra cosa, Tin también ideó una manera de mantener a su amante cerca, la
idea consiste en venir aquí todas las mañ anas a 'patrullar' para que todos sepan
que el carita blanca de bebé tiene un dueñ o.
—Vale la pena el trabajo extra, ademá s del beneficio de practicar antes de ir a
trabajar.
Tin se encogió de hombros, se puso de pie frente a la cinta de correr, no espera a
que el 'entrenador privado' abra la boca para responder, comienza a mover su
cuerpo.
—¿Cuá nto tiempo te quedará s hoy?—El hombre que se estaba preparando para
correr de repente escuchó esta pregunta y se volvió para mirar a su amante, que
en comparació n con antes era mucho má s blanco.
—Cuarenta minutos. Hoy tengo que ir a la empresa un poco antes... ¿Cuá ntos
clientes tienes hoy?— Ya en la ú ltima frase Tin preguntó con una expresió n
incó moda, especialmente cuando vio al otro hombre sonreír mientras mostraba
cinco dedos al frente de él.
—Incluyéndote, hay un total de cinco. A las ocho de la mañ ana, dos amigos, y un
momento después, cuando vayas a trabajar, P 'Plim vendrá .
—¿P'Plim?

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Ese nombre nunca lo ha escuchado... Entonces significa que esta persona acaba
de contratar a Can como entrenador. ¿Y por qué Tin se da cuenta de esta persona?
es porque conoce a cada uno de los clientes de su pareja. No importa cuá l sea el
nombre, no necesita ningú n esfuerzo para saberlo, no tiene que investigar la
historia de uno en uno, porque su amante es un hombre de palabra.
—Oh, P'Plim es una diseñ adora de interiores, de cuarenta añ os pero es
extremadamente elegante, divertida al hablar, también es buena para entrenar,
pero recientemente decidió contratar a su propio entrenador, hoy es su primer
día— Se puede notar una persona que trabaja con algunos equipos de culturismo,
y otra limpiando mientras habla sobre lo que sabe acerca del nuevo cliente.
Entonces ahora, donde quiera que mire, las cejas de Tin está n fruncidas mientras
observa a su alrededor.
—También he hablado con P'Plim varias veces, cada vez que la veo la saludo. ¿Ves
eso? Saludar a los demá s es algo bueno.
—Oye, no tienes que preguntar mucho, ¿Can no deberías decirle tu mismo todo?
—Después de escuchar esto, Tin se vuelve má s y má s impaciente.
¿No crees que las personas que te contratan como sus propios entrenadores
tienen otras intenciones?
Su calor hacia los demá s comienza a molestar al corazó n de Tin. Esta no es la
primera vez que el practicante de Can lo molesta de esta manera.
Can es fá cilmente amado por los demá s, es muy fá cil para él tener una buena
relació n con los otros, y en este punto ya lo conocen muy bien. Cuando aú n
estaban estudiando, Tin se dio cuenta de que Can conocía casi la mitad de la
universidad, a donde quiera que iban siempre escuchaba a alguien llamarlo.
Ahora está trabajando, y no se puede culpar a sus colegas, la naturaleza
increíblemente humana de Can no lo hacen discreto.
Si el cliente finje enamorarse, le dirá para comer juntos una comida, y luego se
marchará .
Si el cliente finge perder las llaves del auto, pidiéndole que lo busque, también
ayudará a la persona a buscar.
Si el cliente le dijo que era muy perezos hasta para determinar si le gustan los
chicos o no, también se sentará a escuchar para consolar.
Si el cliente le dijo que le ayudara a masajear los mú sculos del pecho, responderá
que esa persona solo se lastimó inconsintemente aquel lugar.
—¡Maldito!— Después de todo, Tin solo puede maldecir en su corazó n, hasta el
punto que la ignorancia de Can desconoce.
—¿De qué está s hablando?— desde hace quince minutos Can está preguntando—
¿Qué quieres hacer hoy?
No sabe por qué su amante suspira, luego lo detiene descuidadamente y le
entrega una toalla para que se limpie el sudor.
Se apresuró , y miró a los ojos del otro con una sonrisa.
—Tin, no me digas... ¿no dijiste que querías verme?— Can habla mientras él
mismo le limpia el sudor a la persona opuesta, no es un roce tan brusco como
antes, sino suave, muy suave. — ¿Qué tal recogerme para ir a casa?—

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inmediatamente lo miró y sonrió , una sonrisa realmente dulce, tan dulce... que
hace que la ira del otro se calme.
—Bueno, hoy quiero practicar estilo libre—Tin acerca su hermoso rostro a la
persona sonriente, lo suficientemente cerca como para poder sentir el aliento del
otro.—... pero quiero hacer estilo libre en la cama, ¿de acuerdo?— El chico guapo
susurró al oído de su amante, luego la punta de su nariz parecía deslizarse
distraídamente sobre los pó mulos del otro. La distancia es tan cercana que se
puede sentir la temperatura corporal del oponente.
Can evita con prisa los ojos ardientes como el fuego del opuesto, luego... Emerge
de su rostro una sonrisa semejante a flores que acaban de florecer.
—Está bien, a las 7 en punto esta noche habré terminado, ven a buscarme, luego
iremos a tu apartamento o casa, depende de ti.
No esperes que personas como Can se avergü encen, porque realmente no es
tímido, él es del tipo de personas que no tienen reparos al expresarse.
Tin termina lanzando un suspiro, porque quiere hacerlo ahora, no hasta la noche.
—¿Por qué suspiras? ¿No podrá s recogerme en la noche? Bueno, entonces no
necesitas hacerlo, puedo ir yo mismo, ¿a dó nde quieres que vaya, a casa o al
apartamento?
La razó n por la que Tin suspira...
Después de escuchar eso, lo ú nico que hace es golpear la cabeza de su amante.
—idiota.
—¡Oiiiiiii! ¿¡Por qué me insultas!? ¡no me insultes! ¡ven aquí! ¡dímelo en la cara!—
entrecerró los ojos, enrolló sus mangas como si estuviera listo para pelear, pero
Tin también que es muy há bil y coordinado con su amante, levanta ambas manos
en señ al de rendició n.
—Esta noche te llevaré a mi apartamento. Mi madre está en casa hoy—
Terminando de hablar Tin tomó la toalla en la mano de Can y luego fue al bañ o.
Rodando los ojos, inmediatamente Can se paró frente a él y cá lidamente pregunta.
—¿Entonces ya no entrenará s?— no lo malinterpreten, no es porque se sienta
mal consigo mismo, en realidad Can tiene la costumbre de reaccionar lentamente.
—No tengo inspiració n, voy a prepararme para ir a la reunió n—Tin respondió
mientras iba al bañ o, dejando a Can, que solo se apartó en el acto, pero no se
quedó quieto por mucho tiempo.
El joven entrenador blanco miró a su alrededor, después de no identificar a nadie,
rá pidamente siguió a su "aprendiz" al bañ o, luego...
A toda velocidad...
<<Beso>>
Can coloca sus manos sobre la nuca de Tin, besa ligeramente a su amante y luego
retrocede un poco para mirarlo.
—Si vas a declararle la guerra a tu hermano, espero que ganes—Solo pudo decir
eso al mismo tiempo que usa la palma de su mano para acariciar la mejilla del
contrario.
Tin guarda silencio, mira a su amante animá ndolo, se inclina para besar a Can una
vez, pero de pronto se ríe y aprieta al otro contra la pared.

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—Dú chate rá pido y prepá rate para la reunió n... a las siete te veo esta noche—Sin
embargo, sabiendo que la otra persona lo está ahuyentanlo, Can le habla, y en este
estado tiene dificultad para escuchar, porque cada palabra expresa ansiedad,
causando que el que estaba enojado, sea incapaz de enojarse má s, finalmente se
rinde y simplemente empieza a reír.
La persona que lo envía al infierno, y luego un segundo má s tarde lo lleva al cielo,
es solo Can.
No mucho después, el joven maestro Metthanan está listo, los pantalones se
mezclan con una camisa con las líneas finas, y está yendo directamente a su
"entrenador personal". En este momento, Can rie y habla entre clientes,
ignorando por completo la mano de la persona contraria que lo abraza.
—¡Me voy!
—Hmm, esta noche—Can solo le palmeó el hombro haciendo que la persona que
va a encontrarse con su amante esta noche, salga con una sonrisa.
No sabe lo importante que es para Tin, pero solo por animarlo, tiene la plena
confianza de que todo saldrá bien en la reunió n de hoy.
Cuando el chico guapo desapareció de la vista, la chica que estaba conversando
con Can abrió la boca y pregunta.
—P'Can, ¿esa persona ya ha estado aquí antes?
Can ve la direcció n de Tin, y recuerda que la persona que pregunta nunca practica
en la mañ ana, por lo que no conoce Tin. Pero también recuerda que su amante lo
contrató como entrenador personal, por lo que también puede ser considerado
como un cliente, así que que solo puede asentir ante las dudas de la persona
opuesta.
—wow, es tan guapo... ¿es heterosexual?— Esta pregunta hizo que Kirakorn
frunciera el ceñ o, luego rió con sarcasmo.
¡Oiiii Tin, ahora tienes a otra persona tus pies!
Pensando en un hombre tan guapo, no puede evitar reírse porque descubrió que
después de la graduació n, parece que Tin ha cambiado mucho.
Los dos tienen ahora veintitrés. Apariencia, personalidad, incluso el contacto
visual ya no es lo mismo que cuando tenían dieciocho añ os. Especialmente al
comienzo del trabajo para ayudar a la compañ ía de su padre, a pesar de la
cantidad de personas mayores en la junta, aú n muestra la majestad de la
autoridad, estricto y joven maestro frío. Ahora, Tin es como una estrella brillante
en lo alto, por lo que la gente solo lo puede ver, y no alcanzar. Incluso Lemon dijo,
para alguien como Tin, cualquier chica que no esté loca por él sería extrañ a.
Definitivamente extrañ a.
Lo siento chicas, esa flor ya tiene un dueño.
Pensando en ello, Can sonrió , susurrando al oído de la chica:
—Es demasiado gay, Incluso tiene una 'esposa'.
—¿Eh?—Después de escuchar y quedar con la boca abierta. Can asintió para
asegurarse de que lo que acababa de decir era cierto, y luego también enfatizó
una oració n.
—É l ama mucho a su 'esposa'—Listo, Can se despidió y se fue.

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En el camino, el joven blanco se reía sin parar continuamente. El atractivo de su
amante es demasiado, pero él es la persona má s confiable que puede decir con
confianza:
Soy una persona muy confiable, así que cuando Tin dice que solo me ama a mí,
confio sinceramente en él.
—Esa esposa no es otra que yo, jajaja.
Can murmuró a sí mismo, y luego se echó a reír tan alegre como ver a Tin parado
frente a él.
Porque Can sabe cuá nto amor le tiene, lo ama tanto que puede afirmar con
confianza que:
¡Pase lo que pase, en sus ojos soy yo y solo yo!
***
—Em Can es una persona divertida, elegirlo como entrenador personal no es
nada decepcionante.
—Plim no digas eso, me da vergü enza.
—Digo la verdad.
—Jajaja en este momento encuentro algunas historias tuyas interesantes, así que
tendré que venir regularmente a practicar.
Justo ahora, Kirakorn cambió completamente al modo de entrenador de
culturismo. A pesar de que no tiene una cara bonita, en realidad tiene la sonrisa y
los ojos brillantes como los actores coreanos, y estos son suficientes para hacer
que Can sea encantador como un hermoso cielo lleno de estrellas, también lleva
una ropa deportiva ajustada, no es tan musculoso, pero sí lo suficientemente
firme. para crear una curva muy bonita "Hermosa escena" frente a ella que hizo
que su corazó n de cuarenta añ os se derritiera como el agua.
—Estoy sonriendo demasiado, esto creará arrugas en el rabillo de mis ojos.
—¿Qué? P 'Plim, ¿tienes arrugas? No lo creo—Can sonríe en su corazó n después
de que susurró esas palabras con asombro debido a la piel de una mujer de casi
cuarenta añ os. Realmente quiere pedirle el secreto para contarle a su madre,
porque desde los cuarenta añ os hasta ahora ella está engordando cada vez má s, la
cara gradualmente muestra arrugas. Pero probablemente es por miedo que Can
no se atreve a preguntar.
—Te garantizo que cualquier chico que pase voltearía a mirarte—El joven
entrenador blanco dijo, porque la otra persona, a má s de tener una piel hermosa,
también hace ejercicio regularmente en el gimnasio, una camisa sin mangas con
un sujetador rosa adentro para enfatizar el físico, es lo que se ve a primera vista.
Al igual que una niñ a de unos veinte añ os, parece que está prestando atenció n a
su cuerpo.
—¿Tú también?—Plim preguntó de inmediato.
—Por supuesto que soy uno de ellos— Honestamente, Can solo le echó un
vistazo, pero la otra persona está sonriendo alegre, observando al joven
entrenador frente a ella mientras toca su mano.
—Puedes poner celosas a las personas. Para ser honesta, ¿có mo mantienes tu
cuerpo?

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—Gracias al ejercicio, una dieta moderada, constante entrenamiento, aplicando
todo esto asegura que tengas un ajuste perfecto—Dijo eso, pero Can cruzó los
dedos detrá s de la espalda, porque la verdad es que no come bien, siempre come
hasta hartarse, a tal punto de que incluso haciendo ejercicio como un loco no le ha
ayudado en absoluto, y es debido a esto que su amante siempre le repite "Tu
estó mago definitivamente no es normal"
Can está de acuerdo con esta opinió n de su amante. Aunque es un entrenador de
culturismo, no es como sus colegas que comen saludablemente para mantenerse
en forma, siempre quisquillosos con los alimentos, no comen lo que realmente
quieren. Y siempre sin grasa.
Can por otro lado, está comiendo como una persona normal, todo gracias a Tin,
que siempre compra comida deliciosa para alimentarlo.
—¿Can por favor come conmigo? Por favor, hazme saber lo que una mujer de
mediana edad debe agregar a su menú .
Las personas a menudo lo hacen, invitá ndolo a comer, y aquello con los clientes
no va en contra de las regulaciones del centro, por lo que Can ríe alegremente.
—Está bien, ¿cuá ndo está libre P 'Plim?— Can acepta de inmediato, olvidando por
completo lo que le prometió a cierta "persona", hasta que lo recuerda de repente,
por lo que solo intenta justificarse a sí mismo.
Simplemente comeré con un cliente, no haré nada malo, Tin no se enojará
—Te traje algo de merienda que acabo de comprar en Chiang Mai hoy.
Como el entrenador de la 'belleza envejecida' comenzó esta semana, Can también
comenzó a acercarse a ella, en parte gracias a mensajes en LINE. Esto no es para
sorprenderse, ya que un entrenador personal en el gimnasio también a menudo
debe enviar mensajes de texto a sus clientes en LINE para organizar el horario de
entrenamiento, Sin embargo, Can y esta cliente no solo programan citas, sino que
también está n mezclando otras cosas, principalmente acerca de su dieta para
comer.
—Aprecio tu gratitud, pero me temo que tengo que rechazar tu propuesta— Can
abre la boca para rechazarla, no por un pensamiento repentino, sino porque
desde comienzo de este trabajo, ya había quedado de acuerdo con su amante en
lo siguiente...
"Absolutamente no debes recibir los regalos de los demás, ¿De acuerdo?"
"Si eso es lo que pides, y aunque estoy de acuerdo... Entonces, excepto por ti, no
aceptaré el regalo de nadie, ¿Está bien?"
Es por eso que Can después de recibir la invitació n por parte de la otra persona,
negó con la cabeza inmediatamente.
El rechazo a P 'Plim la desanimó drá sticamente, ella parece extremadamente
decepcionada.
—No te enfades, simplemente no quiero que otros clientes empiezen a crear
malentendidos— La rá pida reacció n de Kirakorn hace que ella sonría.
—Si es así, simplemente dá selo a tu hermana. Llévatelo, compré mucho, ¡Por
favor piénsalo mientras me ayudas a comer menos!— P 'Plim usó toda la
habilidad persuasiva que tenía, usando Incluso a la hermana de Can para inventar
una excusa y por supuesto Can cayó rá pidamente.

44
Dárselo a Lay, si es así, creo que está bien... ¿verdad?
—Ah, gracias, P 'Plim, mi hermana estará muy feliz, ú ltimamente se ha estado
lamentando de sus estudios, le daré comida para que la acompañ e mientras
estudia— Can aceptó de inmediato, su mano se estiró para recibir la gran bolsa de
regalo del lado opuesto...
De repente sintió un escalofrío en la nuca...
No estoy haciendo nada malo jaah...
Tragó saliva, y entonces vió ...
Una persona con un traje de lujo sentado en el á rea de descanso mirando la bolsa
en su mano.
Can desesperadamente intentó devolver el objeto de inmediato, pero cuando ya
lo había tomado, la contraria también retiró su mano, así que la persona que lo
había estado observando en silencio habló ligeramente.
—Lo siento, ¡hablamos má s tarde!
—Bueno, ¿los visitantes si podían vernos verdad? Está bien, yo también me tengo
que ir. Hoy ya no tengo prá ctica, simplemente quería traerte estos regalos para ti.
¡Así que nos vemos el lunes!—también agregó una sonrisa realmente dulce, luego
ella se fue, dejando un gran peso en el hombro del joven entrenador.
La mirada de Tin irradia una sensació n de inhibició n invisible que casi no le
permite respirar.
¡Pero no hice nada malo!
—Tin, hoy no tienes una cita conmigo, ¿qué haces aquí? ¿O viniste a practicar?—
Can trata de sonreír, porque normalmente cuando lo ve sonreír, Tin se reirá , pero
ahora... É l estaba en silencio y usó sus ojos como lá ser, lo miró , hasta el punto que
Can comenzó a sentirse caliente.
—No me mires así, sabes que Lay está estudiando mucho, así que ella le trajo
esto, no lo recibí para mí— Can sonríe explicando, pero la otra persona aú n no
responde.—Bueno, realmente tengo clara la situació n—kirakorn comienza a
enfatizar.
—No te he dicho nada, simplemente olvídalo, solo quería verte un momento.. así
que ya me voy.
Definitivamente está enojado.
Can miró su rostro serio, su voz tan fría como el hielo, rá pidamente se alejó
aunque solo acababa de llegar.
Una serie de acciones que incluso un idiota notaría de inmediato.
Tin está enojado.
—¡Vamos! esta noche iré a tu departamento. Termino a las once, antes de las doce
en punto iré a tu casa ~~~—dijo Can sonriendo, en su corazó n él sabe que tarde
o temprano para corregir su error y hacer las pases con su amante, tendrá que
usar este método ,ya que para él esta tá ctica es la mayor probabilidad de éxito.
Solo atiéndelo un poco en la cama, asegurándote que se calme.
—Hoy tengo que ir a casa a dormir— Tin respondió en tono frío, quitando la
mano que se aferraba a su brazo, haciendo que Can pusiera los ojos en blanco.
¡Tin se atrevió a rechazarme!
—Entonces déjame ir a tu casa—Can intenta cambiar el tema de inmediato.

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—No es necesario, solo ve a comer con tu invitada— Después de escuchar eso,
Can abre mucho má s los ojos, se detiene, mira a su alrededor e intenta recordar
si hoy tenía invitados, pero no. Solo iba a quedarse limpiando y cerrando el lugar.
Y ahora, es demasiado tarde para correr y atrapar a su amante. Así que saca su
celular inmediatamente y llama a su "aliada" a la velocidad de la luz para pedirle
consejos.
—Laaaaaaaay, tienes que ayudarme.
No esperó a que la otra persona siquiera diga una sola palabra y gritó a través del
mó vil causando que Lemon, que está leyendo un libro, frunza el ceñ o.
...¿Qué hiciste para enojar a P'Tin nuevamente?...
Mi hermana es brillante e inteligente.
—No lo sé aú n. Naturalmente, siempre está enojado, pero sucedió después de que
recibí un refrigerio de una clienta.
...¿eh?, él no es de mente tan estrecha, Él sabe que no puedes rechazar al cliente...
Tiene razó n.
...¿Tenía alguna otra razón sobre tu cliente que lo hizo enojar?...
—No hay ninguna, no hay nada, solo fuimos a comer juntos dos veces, ella solo
quería darme buena comida, aunque eso es lo ú nico que no le dije a Tin—Can dijo
un poco má s rá pido que un cohete, causando que la persona en el otro extremo
tuviera dolor de cabeza.
Después de escuchar, Lemon dijo enojada...
...¿Qué demonios les pasa chicos?
Si no está celoso, definitivamente eso será extraño...
Fue invitado a comer porque ella quería acostarse con él. Ademá s, él no le dijo a P
'Tin, y P'Tin se enteró , estaba enojado, ¿Có mo podría P 'Tin tolerar escucharlo
todo el día?
—Oye, aú n queda un cliente, primero hablaré con él.
Lay de pronto ya no oye nada má s, así que pensó que su hermano estaba
atendiendo a alguien.
¿Para qué la llamó entonces?
En realidad, cuando Can escuchó a su hermana explicar, inmediatamente Can
entendió que su amante está celoso, así que...
—Bueno, lo siento, me acabas de mostrar el camino... Ah, ¿a dó nde fue?
Después de escuchar a su hermano, Lemon responde de inmediato.
...Consuélalo en la cama, ¿lo has intentado?...
—Maldita sea, acaba de rechazarme.
Él ni siquiera me prestó atención.
...¿Por qué? Cada vez que pelean, se han reconciliado en la cama, nunca usaron
palabras, Bueno... ¿entonces quieres intentarlo de otra manera?...
—Sí, no importa, date prisa, no me gusta la expresió n de su rostro. Tin nunca me
miró así—dijo Can impaciente. Lemon se echó a reír tímidamente y finalmente
encontró un "conejillo de indias"
Para demostrar có mo rendiría su experimento...
...Escucha con atención, debes...

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Al mismo tiempo, en otro lugar, ahora con calor, Tin suspiró tan fuerte como pudo
para desahogar todo el dolor en su corazó n. De hecho, esa cercanía ya la había
visto con algunos clientes, ya lo había visto... muchas veces.
En el pasado, Can también organizó un tiempo para encontrarse con amigos o
juniors, pero ahora también pasó mucho tiempo enviando mensajes de texto a los
clientes en LINE. Pensá ndolo así, Tin se siente infeliz.
No solo eso, también Can sale a comer y conversar con ellos, las personas
inteligentes saben perfectamente con qué propó sito.
Lo que quieren no es "comer", sino "comerse" a los entrenadores jó venes.
Desde que Can comenzó a trabajar, no solo las mujeres sino también los gays
tienen ojos para él.
—Shyaaaa...— Tin suspiró de nuevo, sosteniendo sus puñ os en la parte superior
de su auto deportivo.
Hoy Tin estaba buscando especialmente a Can, pero después de trabajar diez
horas, e ir a verlo, simplemente encontró a su amante recibiendo el regalo de
alguien má s...
¿Te olvidaste Can, que cuando te busqué por primera vez, también utilicé ese
método para convencerte?
Solo pensando un poco en los regalos, él debería saber por qué estoy tan enojado,
¿Enserio es tan difícil?
—Es tan tonto.
Sacudió la cabeza, sosteniendo una bolsa de zapatos deportivos tirada en el
asiento trasero, luego fue a la puerta para abrir el asiento del automó vil...
—¡AHHH!
Can actú a tan rá pido como un cohete y le tocó la espalda, lo que provocó que Tin
comenzara a gritar fuerte, volverse y gritar fuerte otra vez hasta que de pronto
escucha una voz familiar resonar.
—Lo siento, no te enfades, Tin, me equivoqué.
Inmediatamente supo quién lo estaba abrazando por detrá s. Se dio la vuelta, y
solo alcanzó a ver una cabeza redonda girando para rozar su corazó n, boca abajo.
Esta acció n hace que Tin piense que este método... está ... funcionando.
—¿Qué hiciste mal?— se escuchó la voz fría y cá lida del chico guapo preguntar.
—Recibir el regalo de otra persona, incluso si sé que no debía.
—¿Qué má s?
—Ir a comer con los invitados sin decírtelo.
—¿Qué má s?
—Hmm.. también mensajearme en LINE con los clientes...—La confianza de su
propia culpa no es muy grave, pero esta vez al parecer es algo má s grave. Tin ha
estado completamente enojado por una hora ahora, sin embargo, en este
momento se encuentra con una persona que tiene ambos brazos envueltos
alrededor de su cintura y con un coeficiente intelectual bajo.
Después de un momento se hizo un poco hacia atrá s, para poder ver a Can un
poco mejor..
—No solo eso.

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—¿Qué má s, qué hice mal excepto eso?— Can expresa inocente, no sabe qué otros
errores cometió má s graves que estos. Mirando a Can, levantó la cabeza para
observarlo directamente, al detectar que los ojos del otro mostraban ira difícil de
ocultar, escuchó una voz baja decir:
—¿No te das cuenta dó nde te equivocas?... Realmente no tienes idea de celoso que
estoy.
Can sabe que él es lo que Tin má s ama en esta vida, pero en cuanto escucha lo
celoso que está su novio, de inmediato abraza este pensamiento en su corazó n.
Tin se da la vuelta y quiere entrar al auto, pero la esquina de repente la agarró
este amante con "cara de bebé".
—Pero no tienes que estar celoso, porque nada de lo que pasó tuvo ningú n
significado para mí, nunca pensé que estarías celoso, porque creí que confíabas
en mí como yo confío en ti—Estas palabras rá pidamente detuvieron a Tin. Esto es
realmente lo que quiso escuchar.
Mientras Tin intenta mantenerse consciente, el cá lido calor de su cuerpo es
transmitido a su novio. Normalmente Can es muy terco, por lo que la mayor parte
del tiempo, es difícil escucharlo decir la dulce frase de amor que acababa de
pronunciar...
—Tin, Tin, no te enojes conmigo Tin, realmente Can ama solo a Tin, te amo solo a
tí yo...
Inmediatamente, Tin sintió como su corazó n empezaba a disolverse. Esas
palabras encantadoras, difícil de creer que Can las diga de esa forma. Parecía
como si lo ú nico que quisiera es derretirle el corazó n.
Tin se da vuelta de inmediato para mirar a Can y descubre que su amante está
parpadeando sorprendido. Sus ojos de cachorro dan una mirada lamentable...
—Está s empeorando.
—No me importa, ¿mientras no estés enojado?— Can responde de inmediato
cuando vio a Tin reír, peleando torpemente hasta que este lo detuvo.
—¿Está s intentando seducirme?
—¡Así es!— El oyente asiente como un pollo picoteando para que el contrario
deje de lado su enojo.
—Entonces ven a mi departamento— Dijo y luego suelta la pequeñ a mano de su
amante, sube de inmediato al auto y Can sonríe rá pidamente, porque Tin dijo que
ya no está enojado, y al parecer a Metthanan le gustó este método.
—Bueno, cuando termine, iré a buscar a Tin— Este entrenador de 'cara de bebé'
se inclinó sonriendo, sus ojos está n fijos en el chico guapo sentado en el auto.
Al ver a Can tan sudoroso de correr para encontrarlo, Tin suspira levemente,
luego junta su cara cerca de la nariz de su novio haciendo una una ligera presió n
en la punta.
Finalmente, el fuego del enojo parece extinguirse, así que la pró xima vez que Tin
se moleste, Can puede aprender de este momento para saber qué hacer por su
amante de corazó n duro.
A pesar de saber có mo seducir a Tin, es imposible entender por qué no pensó en
que... —Estaba celoso...

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Si tienes curiosidad, Can te lo contestará ... La razón fue porque tiene una hermana
inteligente, con quien puede hablar y tener ayuda. Dios Después de que creó un
hermano estúpido, definitivamente también le creo una hermana inteligente, y así
ayudar a que el hermano pueda vivir.
Esto no ha terminado aú n.
El costoso automó vil se alejó , pero deben saber que Can siguió muy obediente el
consejo de su hermana...
''¡No te enfades, te amo solo a tí!''
—Creo que el cien por ciento de Tin se derretirá con una confesió n de amor dulce.
Esta noche también debes actuar un poco mejor, y así Tin definitivamente ya no
estará enojado. También ya no hay necesidad de mostrarle tanta amabilidad a los
demá s. ¿Entiendes?
La hermana dijo, y el hermano cumplió estrictamente.
Echó un vistazo a la corriente de mensajes cortos que ella le envió , incapaz de
contener su sonrisa feliz.
Estas palabras cortas son suficientes para entender...
[¡Incluso si sientes que vas a morir, tienes que hacerlo!]
Cantaloupe simplemente rió , aunque está cansado y a pesar de que le duele el
cuerpo, está decidido a servir bien a su esposo, haciéndolo feliz.
Debo hacer que Tin me ame, debe estar fascinado por mí, para que no se atreva a
enojarse como hoy.
Soy un simple idiota, muy flojo para explicar. Después de todo Tin ya no está
enojado conmigo, eso es todo.
Aun así, Can debería saber que no habrá enojo siempre y cuando no vuelva a
provocar los celos de su novio.
...É l te quiere mucho, así que si no te cela, eso sería definitivamente extrañ o...

Especial 3
No me preocuparía demasiado..
¡¡¡si no fuera por esto!!!
Actualmente, el joven y guapo empresario apodado 'tigre frío' ahora mismo se ha
convertido en un 'tigre enojado'
Tin Metthanan está mirando la pantalla de su celular, su rostro que generalmente
es tranquilo se vuelve serio, porque la imagen en la pantalla es...
Su amante junto con una mujer.
[~ Hoy tuve la oportunidad de encontrarme con Can, después de la prá ctica lo
invité a comer.
¡Wow! Tener una buena comida con una persona joven, hace que incluso mi
á nimo se vuelva igual de joven ~]
Escribió una mujer de mediana edad en facebook al pie de una foto.
No, el enfado no es porque su novio salga a comer con la mujer de mediana edad,
ni por la foto de la mujer, tampoco porque etiquetó a Can en facebook, sino
porque descubrió que Can ha estado enviá ndose mensajes de texto con esta
clienta en LINE, le fastidia que invadan el espacio privado de su pareja.

49
Para Tin, Facebook es algo muy personal, no le gusta la gente que irrumpa
libremente en su cuenta. Y otra de las razones es por que es Metthanan, su
historia de amor con Can en Facebook no puede ser compartida a la lijera.
Tin no quiere este tipo publicidad, ni que la gente lo sepa, solo en su lugar de
trabajo ya hay mucha gente que no sabe có mo cerrar la boca. Y en cuanto a Can,
nunca pensó en esto, y mucho menos en comprender el amor de su amante.
Tin aprieta los dientes para tratar de controlar sus sentimientos porque sabe, que
si él va comer o charlar con otros, a Can nunca le importará , no se verá afectado
emocionalmente por alguien como él.
A veces es por este círculo que usualmente se enoja.
¿Có mo se puede hacérselo saber a Can? ¿Có mo podría decirle que no le gusta que
le preste demasiada atenció n a su trabajo.
Los dedos de Tin continú an golpeando la mesa preguntá ndose có mo hacer que su
amante comprenda sus sentimientos.
—Deberías dejar de ser demasiado amable.
Se vistió con un lujoso chaleco, murmuró a sí mismo, luego se puso de pie y fue
hacia ese alguien para llevar a cabo su plan.
—Can
—Espera un minuto, estoy contestando un mensaje en LINE.
—Can...
—¿Qué? Espera un minuto, ya casi termino.
—¡Cantaloupe!
—Llá mame con ese nombre otra vez y no me levantaré.
Esta respuesta llevó a Tin hacia el hombre medio sentado que estaba acostado en
la cama. Fue a sentarse detrá s y le rodeó la cintura con los brazos. No solo Can
sabe que estaba a punto de alcanzar el límite de tolerancia de Tin, sino que
también confiaba en que a este no le importaría.
Sus ojos aú n está n pegados a la pantalla del celular...
—¿Puedes dejar de enviar mensajes? Está s conmigo, Can.
—Espera un minuto, no te enojes, te pediré disculpas má s tarde, ahora
concretaré una cita con un cliente—Tin Después de escuchar, la sensació n de
sangre caliente llega a su cerebro. Aunque a sus ojos, Can sigue siendo
encantador...
Sí, el volcá n en su corazó n está a punto de estallar.
Después de todo, Tin solo suspiró levemente.
Hoy es un día libre poco comú n, porque el tiempo de vacaciones de Can no es el
mismo. Por eso, Tin también accedió a cenar en este lugar porque hace ya algú n
tiempo que no ve a los padres de su pareja.
Los dos ya habían salido con la familia de su novio antes. En ese momento, Can
estaba asustado hasta el punto de no poder levantar la mirada, la madre de Can
también estaba aterrorizada al enterarse de la situació n, como si hubiera sido
golpeada por un desastre, pero afortunadamente está Lemon, su hermana, un
tó nico que ayuda a la persuasió n.
Durante los ú ltimos tres añ os, los padres de Can han mostrado su voluntad de que
ambos puedan continuar su relació n, hasta ahora han comprendido plenamente y

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al mismo tiempo se resignaron a la idea de que del ú nico hijo de la casa, no les
dará un nieto.
—¿Qué sucede?
—Me siento muy bien, con el cará cter de mi hermano, si hubiera tenido una
esposa, habría sido abandonado. Pero ahora tiene un esposo que se preocupa.
Después de esto, tiene mucha suerte.
Tan solo pensar en lo que dijo Lemon, Tin se siente extrañ o, especialmente por la
frase "Es mejor tener un esposo que una esposa".
Hablando de eso, Can de repente se sonrojó , pero no esperaba que asintiera,
luego le dijo a su madre...
—Eso es cierto, si tuviera esposa solo discutiría con mi madre por estupideces y
má s estupideces, y no podemos garantizar que la pueda tolerar. Tengo que
agradecerle a mamá por darme todo. No tendré que preocuparme de que mi
madre se muera de hambre má s tarde, porque le conseguí un yerno que es
increíblemente rico.
Ahora que lo piensa, Tin no puede evitar reír, pero.. Está a punto de volver a
renunciar a la naturaleza de su amante.
Tin, con los pá rpados hacia abajo, mira la cabeza de su novio que está apoyada en
su pecho.
—¿Qué haces con mi celular?
Tin tomó el artefacto de las manos de Can (en realidad es el mó vil que le compró
como regalo a su amante). Inmediatamente Can lo mira directo a los ojos, luego
exclama.
—¡Ah, mi teléfono!
—Pero fui yo el que lo compró .
—Me lo compraste, pero no está a tu nombre.
No pasa mucho tiempo antes de que se lo diga...
—Nos amamos, no es importante el nombre de quien se use.
—Si el nombre de todos es el mismo, entonces devuélmelo, tengo que responder
el mensaje del cliente, no me gusta que la gente espere mucho.
El oyente entrecierra los ojos, no comprende por qué para estas cosas Can es muy
inteligente, pero para captar sus propios asuntos, siempre es lento.
El teléfono sonó alto en la mano de Tin y sin pensarlo dos veces respondió la
llamada—Can quiere que esperes un poco má s.
—Ah, ¿qué está s haciendo?
—Solo respondí a tu llamada, así que no tienes que preocuparte.
Can debería saber que es ahora cuando debe escuchar obedientemente al menos
un poco, pero no se da cuenta de la discusió n. Su novio incluso esconde el celular
detrá s de su espalda.
—Estas tratando de decir, ¿hay otras personas má s importantes que yo?
—No hagas eso, Tin, no vuelvas a hacer eso, no lo vuelvas a hacer, devuélvemelo
¿naa naa?— Can comienza a usar una voz suave. Normalmente, su novio sería
amable, pero esta vez, Tin apretó las cejas cuando el contrario insistió en el
teléfono diciendo que le iba a causar problemas.
¡quién está intentando hacer algo!

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—¡HA!—Can rá pidamente aprovechó la oportunidad para agarrar el celular de
nuevo, pero el otro lo esquivó haciéndole caer sobre la cama. Por supuesto, Tin
tampoco ignoró la oportunidad, rá pidamente giró a Can, luego presionó hacia
arriba y lo bloqueó completamente colocá ndose encima.
—Te aclaro estoy muy enojado.
Dice Tin en voz baja, Can miró a los ojos del otro. No se sabe si fue por salir por un
período de cuatro añ os o no, pero ahora ya no le tiene miedo a la parte temible de
Tin, sino que ríe, levanta la mano para tocar la mejilla de su novio. Acariciando
sus mejillas suavemente. Sin embargo, Tin también sabe que Can no está tomando
la situació n en serio.
Este acto de Can es como... si estuviera tratando con Gucci.
—No me toques, no soy un perro—La voz fría que usó provocó que Can riera.
Dejó de acariciar, luego envolvió sus brazos alrededor del cuello de Tin, listo para
hacerlo inclinarse.
—¿Qué hay de esto?
Can besa los labios de su amante, besarlo y luego irse inmediatamente.
—Realmente me gusta—Tin suspiró impotente y dijo mientras caía lentamente—
Sigue, no pares—Insatisfecho, Tin se agachó para volver a besar esos pequeñ os
labios. En su mente creyó que Can seguiría persuadiéndolo, pero...
—¡Sí!... ¡lo tengo!
Cuando la otra persona dejó de prestar atenció n de inmediato, Can roba su
teléfono celular y luego rueda para pararse junto a la cama. Ademá s, tiene el
coraje de reírse victorioso. Aunque su risa es realmente encantadora, ahora, este
niñ o enserio merece ser golpeado.
—Espera un minuto y luego continuaré.— Can pasa por el asiento, levanta el
teléfono y sigue escribiendo. Esta acció n provocó que unas nubes negras
sobrevinieran inmediatamente al otro chico.
Tin se levantó , tomó su celular y la llave del auto, luego...
( ¡MARCHARSE! )
—¿Hmm?
Can levanta la cabeza, descubre que su amante se ha ido, pero el "cerebro de
meló n" creyó que el otro acababa de bajar al primer piso para beber agua, por lo
que siguió mirando fijamente su teléfono, hasta, que...
(bruummm ~ bruummm ~)
—¿Eh?
Cuando escuchó el motor arrancar, Can entró en pá nico y miró por la ventana,
viendo que la cola del auto deportivo se alejaba mientras gritaba.
—¡¡¡TINNNNNN!!! ¿¡¡QUE PASÓ ?!!—Los gritos de Can hicieron que su hermana
que leía un libro, se detuviera para ver qué estaba pasando.
—¿Qué diablos está s haciendo?
—Lay, ¿dó nde está Tin?
Lemon le sonrió a su hermano.
—Aquí vamos de nuevo...
—¿¿HUH??—Can exclamó .
—¡te lo mereces!

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—¡Laaaaay! Está enojado conmigo, ¿có mo puedo arreglarlo?
No pudo esperar para preguntarle a su hermana.
—No sé, no me importa, no me molestes esta vez, Lay está del lado de P'Tin, de
verdad no puedo entenderte, P'Tin es tan perfecto, pero tú no sabes có mo cuidar
de él. Una vez vez te compró flores, pero las olvidaste y las dejaste en la cocina
hasta que se marchitaron. Cuando fueron al cine, te dejó dormir en su hombro,
porque quería hacer cosas romá nticas para ti, pero dijiste que era estresante. No
sé, esta vez está enojado, ¡Lay está de su lado!—Lemon sonrió a su hermano,
luego se volvió hacia su habitació n.
Al perder a su mentora, Can comenzó a decaer mentalmente.
—Puede ser que sea malo cuidá ndolo, pero amo a Tin má s que a nadie, así que
¿debería elegir? ¿dó nde está la parte incorrecta?
Can murmuró para sí mismo, dada la razó n por la que era el chico frío que má s
amaba en el mundo. Pero tal vez este niñ o con cerebro de semillas de meló n
debería saber, que ese amor que siente... Definitivamente debe ser mostrado.
—No, tal vez para mañ ana se habrá calmado, no será mucho tiempo.
Finalmente, Can se tranquiliza a sí mismo, pero al mismo tiempo está escribiendo
un mensaje para disculparse con "alguien" en LINE.
—¡¡¡Tres días, tres días!!!
Can murmura mirando el celular, aú n sin respuesta. En los pasados dias cada
mañ ana que se despierta también mira su mó vil para ver si hay un mensaje de
Tin o no.
Por lo general, Tin solo desaparece cuando se reune con clientes o viaja al
extranjero.
¡Pero siempre me lo dice antes!
—¿Está s cansado de trabajar o... sí, definitivamente es cansancio— Can intenta
tranquilizarse a sí mismo, diciendo que no hay necesidad de pensar má s, pero su
mano sigue tratando de llamar a Tin, quiere reunirse con él para hablar, pero... El
otro extremo de la línea no contesta.—¿O es una reunió n?— Can se hace una
lluvia de ideas pensando como su hermana.
Recientemente, muchos clientes lo contactan así que su mente está un poco
relajada, no hay nada de qué preocuparse, al menos no por por el trabajo. Por
otro lado, había otra historia que lo había preocupado durante varios días.
Definitivamente está ocupado con el trabajo, ¡definitivamente debido al trabajo
ocupado!
Y luego, pasa una semana.
—¿No podemos encontrarnos mas tarde hoy?
—Creo que no
Una cliente le ofreció a Can salir después de entrenar, pero él negó con la cabeza y
dijo que no podía comer con ella.
—¿No está s durmiendo bien? ¿Por qué te ves tan somnoliento?
—¿Te quedas despierto hasta tarde viendo películas?—Al escuchar la pregunta
de una joven invitada, Can decaído, no se atreve a decir la verdad de por qué no
puede dormir.
—No he visto venir a este chico guapo recientemente. Oye ¿rompiste con él, eh?

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—Si ustedes rompen, puedo aprovechar—Le preguntaron a sus colegas entre
risas, la confianza en sí mismo del joven entrenador bajó de inmediato, su
corazó n de repente latía anormalmente rá pido, y ahora su carita está arrugada
como un mono comiendo chile. Can está de mal humor, corre por el centro del
gimnasio como siempre, pero en su cabeza aú n escucha la palabra... "romper".
—¿Qué te pasó después de todo?
—No puedo comer, no puedo dormir, tengo ansiedad, inseguridad, trastornos
digestivos, mal humor, extremadamente aburrido, no estoy completo, mirar el
celular se siente como si quisiera destruirlo, si veo a un perro ladrando lo odio y
solo quiero decirle que cierre la boca, mi madre cocinó arroz y no sabía bien, me
siento mal...
Una larga explicació n hizo que los presentes usaran su extrañ a mirada sobre él,
luego rá pidamente negaron con la cabeza y se fueron, dejando a Can, quien
continuó murmurando cosas que solo el comprendía en su idioma extrañ o.
La razó n por la que una persona que siempre está alegre como él y se vuelve así
es solo por un solo motivo: ¡no ah visto a su amante!
—¡¡¡No puedo soportarlo má s!!!— Finalmente, Cantaloupe habló en voz baja para
sí mismo.
Má s tarde, el entrenador pidió específicamente salir hoy para ir a un lugar que
pensó que definitivamente estaría su amante... la mansió n Metthanan.
***
—¿No te dijo que iba a trabajar a Australia por tres meses?
—¿Eh? ¿Tres meses? ¿Está s bromeando?
El hombre blanco corrió como un tiro a través de la gran villa haciendo que la
mayoría de la gente en la casa supiera que este hombre y su segundo amo tenían
algo que hacer. Finalmente, con ansias de saber la verdad llega de nuevo a la
misma persona.
El padre de Tin acaba hablar con algú n tipo de compasió n hacia su "nuero"
naturalmente se siente muy cá lido.
—¿Cuá ndo fue la ú ltima vez que te llamó ?
—Fue humm, la semana pasada.
—¿No te dijo que tiene que ir al extranjero a trabajar?
—No...
Dios, o ese día no le presté atención, entonces... Resultó que Tin quería hablar de
este asunto importante, pero también me atreví con dureza a echarlo, ignorándolo
por completo.
Entonces, sí estaba enojado.
—¡¡¡AAAAA HHH!!! ¡¡¡Can, estú pido!!!— Al darse cuenta de todo, Can se agachó y
se apretó el pelo, su rostro mostraba pesar mientras lloraba.
Tres meses, tres meses seguidos... Solo tres días no lo vi y no lo pude soportar, tres
meses es mucho tiempo que definitivamente moriré.
Pensando ello, los labios del niñ o murmuraron algo de nuevo para sí mismo.
—¿Can, tienes algo má s que decirme?...
—Espera, déjame pensar un poco, por favor... Can, có mo no lo supiste antes, ¿por
qué sigues siendo despistado? ¿cuá ndo dejará s de arruinar la atmó sfera

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romá ntica cada vez que la crea?—Can continú a murmurando su auto-crimen,
luego levantó la cabeza para mirar al padre de Tin.
—¿Cuá ndo será su partida? o debo ir primero a su trabajo.
Después de escuchar, el padre de Tin suspiró un poco con pesar.
—Bueno, te lo diré... su vuelo es hoy, en un par de horas má s el avió n despegará ,
ahora probablemente esté de camino de la empresa al aeropuerto.
—¡¡¡Y qué estoy esperando!!!— Con notorio asombro, emocionado, ojos bien
abiertos, y manos temblorosas, el corazó n de Can se sentía como una caída libre
hacia un profundo agujero. Miró al padre de Tin, repitiendo de nuevo.—¡Confíe en
mí!
¡¡Aaaaahh Tin, me dejarás morir!!!
Esta frase es el pensamiento má s sincero de Can ahora.
***
—¡Tin, escú chame, escú chame, escú chame!
Después de un rato, Kirakorn recuperó el á nimo, inmediatamente corrió al
aeropuerto internacional de Suvarnabhumi. En el camino, llamó repetidamente a
Tin, pero solo escuchó el sonido que decía que la persona al otro lado del teléfono
lo había apagado. Llamó a la empresa y la secretaria dijo que Tin se ha ido.
En un abrir y cerrar de ojos, Can inmediatamente se sintió inquieto, parece tener
un poco de... Miedo.
Miedo de no poder hablar con él.
Miedo de que si durante los tres meses separados, en ese tiempo teme que Tin
cambie de opinió n.
—Tin, escucha el teléfono, escucha mi llamada.
Durante este tiempo, Can solo oró para que Tin escuchara su teléfono, pero no
había má s esperanza.
(El cliente al que acaba de llamar no puede ser contactado ...)
—¡Odio este sonido!— Dijo enojado, luego corrió a la pantalla electró nica para
comprobar la informació n del vuelo que está a punto de despegar. Conociendo el
tiempo de vuelo y la aerolínea, enseguida utilizó los pies de un jugador de fú tbol
despedido que huía como si volara, los ojos abiertos de par en par miran a su
alrededor, buscando una figura alta, guapa y con buen cuerpo, pero... No vió a
ninguno.
—¿Dó nde está s?— Can dijo con impaciencia, tratando de mirar a su alrededor de
nuevo, aunque no vio a su amante, trató de hacer una llamada telefó nica
repetidamente a pesar de escuchar solo una voz mecá nica á spera hablar. Pero,
aú n abrazó sus esperanzas...
Media hora después el avió n despegó , definitivamente ya no hay tiempo.
Todas las á reas, incluso la de control de seguridad han dejado de funcionar, pero
aú n no se ve la sombra de Tin.
Hace un momento abrazaba la esperanza en el corazó n de poder llegar a tiempo,
pero ahora otra vez... está llorando en silencio.
Llora por su propia estupidez, llora por su falta de atenció n a la persona que ama.

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Can se sienta en una silla al azar y levanta ambas manos para cubrir su rostro, de
tal forma que no puede mirar a nadie, sus labios quedan un poco expuestos por la
hendidura entre los dedos ligeramente abiertos...
—Lo siento, Tin, lo siento, nunca lo volveré a hacer... son tres meses... Tres
meses ... no puedo soportarlo, estoy seguro que no podré soportarlo— Su voz se
estremeció , luego... Las lá grimas también cayeron.
Inicialmente, solo tres o cuatro gotas, al final pronto se rompe en lá grimas,
solloza, sus hombros tiemblan. Las personas sentadas a su lado está n asustadas
así que se levantan y lo dejan, pero su llanto desgarrador es imposible que la
gente no lo note.
—Si Tin apareciera frente a mí, juro que pasaría má s tiempo con él.
—Si Tin aparecía frente a mí, apagaría LINE y me quedaría a su lado.
—Si Tin apareciera... le dejaría hacer lo que quisiera.
—¿De Verdad?
¿Eh?
Mientras lloraba, sus manos estaban empapadas de lá grimas, una voz que cortó
su arrepentimiento, conmocionó a Can, levantó la cabeza, luego vio... Un chico con
una expresió n de enfado sentado a su lado.
—¿Tin? ¡Tin... lo siento, lo siento, estaba equivocado, no te enojes, no te enojes
otra vez!— Inmediatamente Can agarra la camiseta de Tin, la voz le temblaba
mientras lá grimas le rozaban el rostro con una mirada que entristece a la gente.
Después de escuchar, Tin habla.
—Prométeme pasar má s tiempo conmigo.
—Yo ... lo prometo.— Can asintió rá pidamente.
—Promete que la pró xima vez no te enviará s mensajes con otros cuando estemos
juntos.
—¡Lo prometo! ¡Lo prometo!
—Prométeme que me dejará s hacer lo que quiero hacer.
—¡Mmmh!— Can asiente con la cabeza de acuerdo, con las manos todavía
agarrando la otra camiseta, no quiere soltarse, como si cuando lo soltara este
fuera a desaparecer instantá neamente.
Sus respuestas hicieron reír y alegrar a Tin.
—Bien, vayamos juntos a Australia.
—¿¿¿Eh???—La ú ltima frase fue como una vá lvula de retenció n que detuvo a Can,
quien se sorprendió al ver su mano. Tin le agarraba la mano con expresió n en
blanco.
—..¿Qué quieres decir?
Después de escuchar, Tin se volvió para mirar a su amante que tenía los ojos
hú medos.. Encendiendo un rayo de luz.
—Me refiero a que tú y yo... Nos vamos de vacaciones a Australia durante un mes.
—Oh... Pero... Pero...
—¡No hay pero! Me has prometido hacer lo que yo quiera, así que no puedes
cambiar de opinió n.
—Bueno, bueno... pero ¿qué pasa con el trabajo...?— La lengua de Can estaba
trabada, abrazando un indicio de que el oyente no estaba sonriendo.

56
—El trabajo me espera para volver a Tailandia y luego trabajar de nuevo, ahora
tengo que viajar primero con mi amante.
—¡Me engañ aste! —Señ aló a Tin en voz alta. Se volvió para mirarlo con ojos
serios.—Estoy realmente enojado contigo.
—¿Hum?...
Después de un rato, se inclina..
—Lo siento.
—Es bueno que lo sepas, ahora que te das cuenta de lo irritante que es para mí,
¿có mo te sentiste creyendo que de verdad me iría a trabajar durante tres meses?
—Mi corazó n casi se sale.
—¿Qué má s?
—Triste, desgarrador, y...— Tin miró directamente a los ojos de la persona
opuesta, escuchó la voz de su amante debilitarse lentamente y luego se detuvo de
repente.
Después de eso, Can agarró a Tin del brazo.
—No te vayas así, Tiiiin.
Después de escuchar, Tin sonrió , usando sus manos suaves para limpiar las
lá grimas de su amante.
—No iré a ninguna parte, solo piensa un poco, alguien como yo no sabría qué
hacer sin ti— Can rió ... Esta sonrisa hace que la otra persona se sienta fascinado,
ademá s, de que es una prueba má s de que no está enojado por haber sido
engañ ado.
Debido a que la atenció n de Can ahora está completamente en Tin, ¿cuá nto
tiempo se necesita para recordar la ira de la venganza?...
El cerebro lento de este niñ o, a veces también es una ventaja...
—Entonces tu padre también se puso de acuerdo contigo, ¿verdad?
—ajá .
—¡Bueno, de tal padre tal hijo! Te perdono, porque estoy feliz, feliz de que no me
dejaste para ir a ese lugar— ¿Lo ven?, esta es la razó n por la que Tin ama tanto a
esta persona.
—Pero, ¿qué pasará con mi trabajo?
—Má s tarde, me ocuparé del resto.
Otros se sentirá n muy incó modos por la repentina ausencia, pero Can sonrió y se
secó la cara con lá grimas en la camisa de su amante.
—Está bien, creo que te asegurará s de que todo esté bien.
—¿Por qué sabes lo que estoy pensando?
Tin acaba de tomar el pasaporte y el boleto de avió n, así que Can solo puede reír.
—Es porque tú siempre lo dices.
Después de todo... la vergü enza de Can solo se muestra por un má ximo de dos
segundos.
—Por cierto habrá n muchos extranjeros, ¿Qué podría decirles?... ¿Dó nde está mi
visa australiana?— El titular del pasaporte saludó con la mano mostrá ndoselo.
Tin frunció el ceñ o levemente, como si sintiera que la ú ltima pregunta es muy
tonta, así que abre la boca y pregunta.
—¿Sabes quién es tu amante verdad?

57
¡jaaa!
É l se rió y luego asintió .
Olvidé quién es mi amante. Solo una visa, totalmente en su capacidad. É l puede
hacerlo todo.
—No lo olvides, accediste a dejarme hacer lo que quiera.
—Oh, no lo olvidaré. ¡Puedo dejarte hacer todo lo quieras!—Can ríe felíz y
encantador, dá ndo una respuesta muy agradable, voluntariamente está de
acuerdo, también solo porque el amante dijo que no lo dejará por tres meses,
ademá s de que está a punto de ir al extranjero y viajar juntos
Apagó el teléfono, cerró LINE, ahora es el momento de quedarse con la persona
que má s ama.
***
—Ven aquí..
—Oh, duele.
En este momento, dos jó venes han volado a la capital Australiana, pero desde que
se registraron en el hotel, kirakorn aú n no ha visto el sol de Sidney.
—lo siento, tú mismo dijiste que harías todo lo que yo quisiera.
—¿Ya cuá ntas veces lo hemos hecho? ¿cuá ntas rondas será n? —Can dijo de
inmediato pero.... mientras hablaba agarró específicamente una"parte del cuerpo"
frente a él, seguido de la risa de Tin.
—Tu boca dijo eso pero tu cuerpo siente esto —El empresario dijo mientras
extendía su pierna hasta el joven entrenador que estaba arrodillado, usó los
dedos de los pies para despertar esa parte del cuerpo provocando que Cantaloupe
se sobresaltara.
—Oi, no te... Detente... ahg..
—No podrá s salir en esta condició n.
—Puedo resistir, no salí durante una semana—Can explica de inmediato y deja
que el oyente baje su mano para hacer que Can se agache y envíe una sonrisa de
deseo.
—Yo mismo haré que lo quieras —esta respuesta hace que el espectador mire
hacia arriba y se encuentre con un par de ojos serios, hasta que Can levanta
ambas manos y las desliza por el gran cuerpo de su novio. Una vez má s tuvo que
usar su boca, dezlisando su lengua por todo aquel lugar.
—por favor, hazlo otra vez.
—Hum...—la punta de la lengua, color fresco, recorrió en la mitad del cuerpo
contrario.
Ahora los cá lidos labios de Can persiguen mas abajo, en aquella zona. De rodillas
se detiene a contemplar el largo de aquel ó rgano mientras comienza a lamer
desde la base hasta la punta, suavemente llegando al final de la parte roja, antes
de abrir la boca para que entre el calor.
Una mano grande acaricia su cabeza, al mismo tiempo que intenta sujetarse.
Las contracciones se vuelven má s tediosas, cuanto má s chupa, má s satisfecho se
siente el amante que desde hace muchos añ os no pensaba que sería capaz de
experimentar algo así.
¿Qué es este tipo de sentimiento?

58
Can se las arregló para ser há bil, untar, lamer y chupar, sabiendo lo que debía
hacer mientras levantaba sus manos para bajarle los pantalones a su novio hasta
los tobillos, mirando hacia la persona que respiraba con má s dificultad.
—Hmmm ... Ai'Can
—casi está listo— cuanto má s escucha a Tin gemir, má s mueve su boca de
adentro hacia afuera rá pidamente alternando con una pequeñ a rotació n para ver
de vez en cuando el estó mago de Tin contraerse, asegurá ndose de que esté
satisfecho. Ambos al parecer ya no pueden mantenerse establemente de pie.
No sabe por qué, pero cuando vio al hombre arrogante ser atendido por su boca,
tuvo la pequeñ a sensacion de sentirse "solitario".
—¿Quieres que lo lama hasta que termines?—Preguntó Can al oyente que ahora
apoyaba sus manos en sus caderas.
—¿Puedo ponerlo en mi boca?
—¿Que si puedes usar tu boca en el mío? Nunca lo hiciste, salvo una vez. —Can
responde con seriedad a esta persona, sonriendo má s que antes.
Mmm
—Esto es mejor— Tin toma del brazo a su amante y lo arrastra la gran cama,
luego deja que Can se sienta a horcajadas observá ndolo de la cabeza a los pies.
Quiere atender al joven entrenador con el mismo entusiasmo.
Esta posició n es absolutamente correcta.
—Ah... hagh... ha... no puedes hacerlo... ahh.. aú n...
—Tengo que preparar este lugar primero..
—ahh...... shyia ... ¡maldita sea! —Can maldice tan pronto como gira su trasero
hacia su amante, porque este elige burlarse de él diciendo que aú n necesita
relajarse. que aú n es muy estrecho para poder entrar. Sin embargo, la hora
anterior ya estuvo allí dentro quien sabe cuá ntas veces.
Está completamente listo, pero Tin prefiere jugar con ese lugar, quiere ver el
rostro de Can sonrojarse má s y má s.
Boca abajo con sus muslos hacia arriba dando una muy buena vista Can insiste...
—Ah.. yo creo...—Can gime bajo
Ambos amantes sin perder mas tiempo usan sus manos para sujetar aquella
longitud caliente dirigiendola al mismo punto.
Tin empieza a moverse con fuerza. Usa su lengua para recorrerle la espalda a la
persona de abajo, al mismo tiempo que el sonido de sus pieles comienza a resonar
por la amplia habitació n al má ximo. Sus respiraciones son cada vez má s pesadas a
medida que la longitud de su miembro entra y sale de su amante.
—Um... uuhhh...— electricidad recorre el cuerpo de can a través de los labios de
su novio, la misma sensació n de ya hace añ os.
Tin usa su mano para jugar con el miembro caliente de Can y hace que la persona
de abajo se sobresalte. El sonido de la piel persiste con los gemidos en el cuello de
ambos.
(gotear)
Sus cuerpos está n hú medos, el ritmo se acelera cada vez má s..
—Ahh... mierda... ahg.. ¡sí!

59
La respiració n es má s difícil que nunca. Dejan que sus caderas se muevan hacia la
otra. El calor, mientras está n en la habitació n se intensifica, solo hay calor, la
atmó sfera es demasiado caliente ahora, lo que los impulsa a llegar a su má xima
felicidad.
El hombre má s joven dejó que su parte trasera continú e siendo atacada, siguió
con su cuerpo los movimientos del otro. Los labios calientes de Can buscaron los
de su amante, introdujo la punta sintiendo la exitació n del contario. Extendió una
mano y se aferró del cuello de Tin al mismo tiempo que sus lenguas se unían al
ruido de toda la habitació n.
—Ahh.. me siento tan bien..
—me siento igual..
Respondiendo la mano grande de Tin, se desliza hacia el miembro caliente de Can
para frotarlo y hacer que se muevan juntos con má s fuerza, mientras que Can usó
sus manos para sostenerse del cuello de Tin tanto como pudo.
—Voy a venirme de nuevo...
Can dejó salir su líquido mientras aú n estaban conectados entre sí, el sonido de su
respiració n antes de cerrar los ojos era de felicidad, ese sonido, esa respiració n la
sentía el contrario en su hombro.
La contracció n del receptor cuando llegó a su punto empezaron a hacer efecto en
el emisor..
—Ah ... ahh...
(Sacar...)
Kirakorn fue el primero en liberarse. Luego le siguió su novio, pero algo diferente
está vez...
—Hazlo con tu boca...
Can volvió a bajar entre las piernas de Tin. Luego abrió la boca y comenzó a
succionar para mantenerlo duro, sin embargo, su amante anunció que estaba por
terminar pronto.
—Caaannn yo... ahh.. aagh...
Revive al ritmo de los amantes contrayéndose para indicar que estaba a punto de
liberarse.
Can continuó tá n rá pido como pudo, usando parte su mano también, hasta que el
agua tibia de su novio se derramó y le manchó el rostro, lo cual no le importaría
en absoluto...
Su boca, y su rostro desordenado lleno de líquido caliente, hicieron que Tin de
inmediato lo tomara del dorso para conducirlo a un fuerte abrazo.
—lo siento, creo que soy un psicó pata por esto.
—pero...
Can ríe en voz baja y susurra —no solo tú , creo que la psicosis fue mutua..
Sea lo que sea siempre y cuando Tin esté satisfecho, está bien mientras sea
eró tico, pensó Can.
—Vá monos de paseo—de repente, le dijo Tin a la persona que trajo de viaje pero
con la que no ha ido a ningú n lado desde que llegó —Perdó n por hacer esto
Can lo mira directo a los ojos con calidez.
—¡Muy bien, de acuerdo, Iré a ducharme primero!

60
El oyente dijo emocionado y porque pensó que un buen novio seguiría haciendo
esto, pero antes de correr al bañ o, se detuvo se volvió y dijo:
—Esta noche, podemos hacerlo de nuevo si quieres, pero mañ ana
definitivamente tendrá s que traerme comidas deliciosas. Fue realmnte estresante
la semana que pasé sin ti. ¡Incluso bajé de peso!
Diciendo eso desapareció en el bañ o por un rato. A cambio de algo de comer, el
sexo es bueno para él.
El plan de Tin no fue ese en primer lugar... Por lo general finje enojarse, pero no
espero que este alguien no podría dormir y comer a tal punto de perder peso.
Sin embargo tomará su parte de esta situasió n.
A Can le gusta darse el gusto con la parte del novio enojado... mientras Tin ahora
debe encargarse de agregarle el mismo peso antes de regresar a Tailandia.
Mis colegas creyeron que Tin y yo rompimos, tengo que decirles que no me rendí.
¡Cuando regrese les haré saber que mi novio y yo estamos mejor que nunca!
De hecho, Cantaloupe a veces puede ser la persona má s inquietante que existe.

Especial 4
Pete se fue... Me dejó...
Dentro de la cabeza del adolescente que estaba sentado en el campo de fú tbol,
solo quedaba este pensamiento. Miró la sombra de sí mismo que se extendía bajo
la puesta de sol. Recordó aquellos días en los que estaba de la mano de esa
persona, paseando por el campo. Pero ahora... ya no está . Quizá s, incluso la
oportunidad de volver a estar en ese mismo sitio... se había ido.
La persona que amo jamás volverá.
Mientras pensaba en ello, Ae no pudo evitar cubrirse la cara con las manos.
Cuando su visió n se volvió borrosa, se dio cuenta que sus manos estaban
empapadas por las lá grimas. Pero a él no le importó . Incluso si lo llamaban
debilucho, maldito perdedor, no importaba, porque en este punto solo podía
pensar en una persona... Pete.
—¿Qué se supone que debo hacer, Pete? ¿Qué se supone que debo hacer sin ti?,
¿có mo podría vivir?
Aquella persona fuerte que podía superar cualquier cosa, cuando se trataba de
amor, ni siquiera tenía el coraje de enfrentar la verdad...
Esos recuerdos de ellos está n desapareciendo lentamente.
Hoy, la mamá de Pete llamó a Ae para hacerle saber que iría al apartamento para
llevarse todas las cosas. A pesar de que Ae se recordó a sí mismo que debía
ayudar, ya que sabía que dos delicadas mujeres no serían capaces de levantar
cosas pesadas, pero... sus piernas no tenían fuerzas para llevarlo allí y enfrentar la
cruda verdad.
En este momento, una figura apareció repentinamente y bloqueó el ú ltimo
destello del sol poniente. Ae ni siquiera se preocupó de mirar hacia arriba para
ver quién era.
—La tía Putch ya está en el apartamento de Pete, Ai'Ae—dijo la figura en tono
preocupado.
—...

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Pond habló mientras al que se le pidió que fuera al departamento de su exnovio a
recoger las cosas por él, solo se quedó quieto como un está tua. Ver a su amigo en
un estado como este hacía que una persona que siempre estaba alegre como Pond
no pudiera ni siquiera formar una sonrisa. Pond le dio una palmada en el hombro
a Ae y dijo:
—La mamá de Pete me pidió que te dijera que quiere verte. Parece que está
preocupada por ti...
—Yo... no sé si pueda verla. Fue por mí culpa que Pete tuviera que ir a un lugar
tan lejano como ese, yo...
Intouch se sentía tan ahogado.
Al ver a su amigo así, Pond quiso decirle algo para consolarlo, pero... La herida
estaba fresca,y aunque fuera tratada con la mejor medicina, no se curaría de
inmediato. Por lo tanto, solo palmeó el hombro de la otra persona varias veces
má s, le dio la espalda y se alejó .
En este momento, solo quedaba Ae. Estaba sentado allí solo en silencio, con
ambas manos cubriendo su cabeza al mismo tiempo que cerraba los ojos con
fuerza.
Sin ti, ¿có mo voy a seguir viviendo?... ¡Qué debo hacer!..
—¿Puedes darte prisa, Pond? Ai'Ae durante horas ha estado bebiendo alcohol
como si fuera agua.
—¿Por qué no lo detuviste?
—¡No me atrevo a hacerlo! ¡Parece que quiere beber hasta morir!
Cayó la noche, y también el horario de apertura de bares nocturnos.
Normalmente, Pond siempre está dispuesto a pasar el rato con sus amigos y
acompañ arlos a beber su propia tristeza, pero cuando escuchó lo que Can dijo por
teléfono, no pensó que podría hacerlo. Cuando Pond llegó a la barra que dijo Can,
vio... a su amigo Ai' bajito, sentado en silencio, bebiendo vaso tras vaso de abajo
hacia arriba.
—¡Maldita sea! ¡Me voy a volver loco!— Pond suspiró profundamente.
—Esa debería ser mi línea. Ai'Ae ha venido aquí durante toda una semana. Quería
llevarlo a casa, pero me golpeó la mano. Uno de tus amigos dijo que Ai'Ae venía
aquí a beber todas las noches.
—Lo sé. Soy su compañ ero de cuarto. ¡Yo soy quien lo ha estado llevando de
regreso al dormitorio todas las noches!
Una sola palabra de maldició n ni siquiera pudo salir de la boca del tipo mestizo.
Pond pensó que este estado medio vivo y medio muerto de su amigo duraría
unos cuantos días, ya que una persona fuerte como Ae definitivamente se pondría
de pie y enfrentaría la verdad con valentía, pero no todo era como él pensó en
absoluto. Ae no solo no va a las prá cticas de fú tbol, también se salta clases.
—¿Qué hacemos? ¿A dó nde fue Pete? ¿Qué les pasó a los dos? Le pregunté al
idiota de Ai'Tin y él tampoco me dio respuesta.
Preguntó Can con sospecha. Incluso si pudiera adivinar que algo malo sucedió
entre sus dos amigos, no se atrevía a creer que fuera la verdad. Estos dos se
amaban tanto... y aun así terminaron rompiendo...
Incluso un bocazas como Can no sabía qué decir en esta situació n.

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—¡Maldita sea! Quieres beber hasta morir, ¿verdad?
Cuando Ae acababa de terminar un vaso e intentaba llenar otro, Pond
rá pidamente lo agarró de la mano para detenerlo. Esto hizo que Ae finalmente
levantara la cabeza para mirar a su mejor amigo. Su rostro estaba rojo, sus ojos
estaban medio cerrados, una sonrisa estú pida estaba presente en su rostro. Pond
nunca había visto a Ae así antes.
—Pond... Bebe conmigo... (Hip)...¿Si?... ¡¡¡Sabe tan bien... !!!—Ae dijo
incoherentemente, incluso hipo una vez.
—¡¡Hijo de p*ta! ¡¡¡Detente!!!— Ae no solo dijo esas palabras sino que también
levantó el vaso, con la intenció n de seguir bebiendo, lo que provocó que la
persona que lo miraba perdiera toda la paciencia.
Ai'Ae no se comporta así. ¡¡¡¡¡Él no es así!!!!
—No me detengas... quiero... beber... ¡¡QUIERO BEBER!!
Ae gritó y trató de retirar el vaso. Normalmente, sería capaz de arrebatá rselo
fá cilmente, pero ahora estaba tan borracho que todo lo que podía hacer era
mover los brazos como un gato buscando arañ ar. Al final, había llegado al límite
de Pond.
—¡AE! ¿Crees que Ai'Pete estará feliz de verte así? ¿Tan borracho que ni siquiera
puedes caminar a casa solo? ¿Por qué diablos tienes que torturarte así? Sé que tú
no eres así, ¡¡¡ no lo eres!!!
—¡¿ENTONCES QUE QUIERES QUE HAGA?!?!
El tipo perdido usó toda su fuerza para agarrar el cuello de la camisa del tipo
frente a él. Levantó la cabeza, miró y le gritó a Pond. Sus ojos llorosos estaban
llenos de ira. Con forme hablaba, las lá grimas rodaban lentamente por sus
mejillas.
—Dímelo tú , Pond... Dime.... Dime... ¿Qué se supone que debo hacer... Se ha ido....
Qué debo hacer, dime. ¡¡¡DIME!!!
Ae se dejó caer en la silla, la mano que apretaba el cuello de la otra persona
también se aflojó y tan solo murmuró .
—Pete... Vuelve... Vuelve conmigo.
—¿Qué debemos hacer, Ai'Pond?
La situació n era tan grave que Can se asustó . En una situació n como esta, su
habilidad de 'levantar el á nimo' era completamente inú til, y mucho menos su
aliento.
Pond inhaló profundamente. Su corazó n se desgarró . Fue triste ver a su amigo
volverse tan cobarde. Ae en este momento se comporta como alguien que lo ha
perdido todo.
Entonces...
—Can, tu paga la cuenta.
—Suéltame... ¡Suéltame, idiota Pond!
—¡Cierra la boca y sujétate de mí! No voy a dejar que mi amigo se comporte así...
Tan pronto como terminó de hablar con la persona de ojos pequeñ os, Pond se dio
la vuelta, agarró al tipo ebrio y se dirigió de regreso a la universidad. Realmente
no podía tolerar ver a Ae convertirse en un extrañ o como este.
¡Puedes estar triste todo lo que quieras, pero no puedes torturarte así!

63
Ae fue arrojado al césped como una almohada. El futbolista estaba sentado en el
suelo como si toda su fuerza fuera completamente drenada de su cuerpo y no
pudiera pararse en absoluto. Solo podía mirar el campo de hierba en el que
siempre corría con entusiasmo.
El fú tbol solía ser el amor de mi vida, hasta que te conocí Pete...
Una pelota de fú tbol fue lanzada a su lado, interrumpiendo su pensamiento y
causando que Ae levantara la cabeza. Trató de abrir los ojos para mirar a su mejor
amigo, que lo miraba con enojo.
—¡Patea, no te gusta mucho el fú tbol? ¡Patéalo!
—¡No me molestes!
Ae gritó de vuelta una voz aú n má s fuerte. Usó toda su fuerza para empujar al
muchacho que ahora estaba agarrando su camisa. Tenía los ojos rojos y la voz
ronca. Pond apretó la mandíbula, se acercó a Ae y lo tomó por el cuello de su
camisa una vez má s.
—¡Ae! ¡Suficiente! ¡Despierta y enfréntate a la verdad! ¡¡Ai'Pete se ha ido!!! É l
quiso romper para que puedas seguir quedá ndote aquí estudiando y está s
usando ese maldito alcohol para destruirte, ¿crees que está bien?!?! Sé que tienes
el corazó n roto, pero tienes que ponerte de pie, levantarte y jugar fú tbol. ¡Aquí!
Patea esta maldita pelota de fú tbol. Si no sabes qué hacer ¡¡¡Entonces juega
fú tbol!!! ¡¡¡Patea a la portería!!!
La voz de Pond resonaba por todo el campo de fú tbol mientras su mano apretaba
con fuerza la camisa de la otra parte. Después de escuchar lo que dijo Pond, Ae
cerró los ojos y luego negó con la cabeza.
—No lo sé...
Tan pronto como Pond escuchó lo que dijo Ae, soltó el cuello de la camisa de la
otra parte y lo empujó para que cayera al suelo. Caminó hacia la pelota y la
recogió ...
(Golpe)
—¡Ay!
El tipo de sangre mixta pateó la pelota directamente a Ae, haciéndolo exclamar de
agonía. Pero Pond Aú n se sentía satisfecho con la fuerza que usó , por lo que
continuó levantando la pelota y se alejó aú n má s y la pateó a su mejor amigo otra
vez. La persona que se suponía que era un excelente futbolista solo podía usar
débilmente sus manos para bloquearlo. Pond no se contuvo cuando pateó la
pelota, por lo que aú n golpeó a Ae y lo lastimó .
La persona que no solía hacer ejercicio con frecuencia comenzaba a jadear. Miró
al muchacho que estaba sentado y acurrucando su cuerpo por el dolor y se
preguntó si debería sentir lá stima por su amigo o no.
—¿Y ahora qué? ¿Ya te has despertado? ¿Fue suficiente? ¿O quieres que te patee
hasta que mueras yn puedas olvidarlo todo?
Pond preguntó con su voz estricta. Cuando vio a la otra persona aú n sentada allí
y en silencio. No pudo aguantar má s y gritarle enojado.
—¡¡Ai'Ae, Idiota!!! No eres Ai'Mai. No sabes beber. ¡¡Un futbolista como tú no hace
cosas que sean dañ inas para su cuerpo!! Si quieres aliviar tu tristeza, en lugar de
atormentarte a tí mismo, deberías venir al campo de fú tbol. Solo considera la

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pelota como toda tu tristeza y patea a la portería de fú tbol. No uses alcohol para
resolver tu problema, ¡no eres así! Ai'Pete no está aquí, pero si supiera lo que
haces, ¿te imaginas lo preocupado que estaría? ¿Qué pasa con tus amigos, tus
compañ eros de equipo, tus padres, tu hermano, cuñ ada, tu sobrina, si continuas
así, ¿qué crees que sentiran? Ponte de pie, Ae , ¡¡¡se acabó el tiempo de tu
debilidad!!!
Pond estaba extremadamente serio cuando le dijo a Ae esto. Quería hacerle saber
que realmente no podía mirarlo en este estado ni siquiera por un segundo má s.
Ae debería ser quien lo regañ e, no al revés.
Incluso si sus palabras llegaron a la persona que estaba sentada en el suelo, no
levantó la cabeza para mirarlo ni una sola vez. En este momento, Pond se acercó a
él y se sentó a su lado.
— Aú n nos tienes, Ae. Todavía hay muchas otras personas en tu vida. Te lo ruego,
no seas así.
Incluso si a Pond la mayor parte del tiempo le gustaba hacer el tonto, en este
momento está extrañ amente serio. Con todo su corazó n, le rogó a su amigo que
dejara de torturarse. Finalmente, Ae levantó la cabeza y lo miró .
—Lo siento.
—No hace falta que te disculpes. Ponte de pie. ¡Parece que te has peleado con un
perro!
Pond no se equivocó cuando dijo eso, pero también olvidó que fue él quien
acababa de patear la pelota hasta dejarlo así.
Cuando estaba a punto de levantar a Ae, este dijo de repente.
—Por favor déjame... solo... quiero tener un tiempo a solas para pensar en todo.
A pesar de que Pond tenía mucho miedo de que su amigo diera un paso en falso y
cayera al pozo sin fondo de nuevo, solo pudo suspirar y dejar a Ae solo, sentado
en el tranquilo y desolado campo de fú tbol con el baló n a su lado.
En la tranquila oscuridad, el chico que estaba durmiendo repentinamente abrió
los ojos. Miró a su alrededor, todo está completamente oscuro. Se dio cuenta de
que se encuentra en la habitació n del hotel donde su novio trabaja como gerente.
Ae se volvió para mirar a la persona que estaba acurrucá ndose en su brazo.
Levantó la manta para cubrirlo, se acercó lentamente y lo miró fijamente. Sus ojos
estaban llenos de amor. Extendió su mano para acariciar ese suave cabello. Algo
que siempre le gustó hacer cuando aú n estaba en la universidad. Incluso ahora,
Ae seguía siendo como el primer día, siempre le gustaba hacer estos gestos
íntimos.
—Ae... ¿Qué hora es?—El toque ligero hizo que el joven se despertara lentamente.
Todavía estaba medio dormido y preguntó con voz somnolienta. El adicto al
trabajo, que acababa de llegar de Rayong hasta aquí para encontrarse con su
novio, se dio la vuelta y agarró el teléfono de la mesita de noche, lo encendió para
ver la hora.
—Son las 4 am...
—Ae... ¡¿¡¿Tú ... Estuviste llorando?!?!
La luz que venía de la pantalla del teléfono iluminó el rostro de Ae, lo que hizo
que Pete, que aú n tenía sueñ o, abriera los ojos ampliamente de inmediato. Se

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sentó y se dio la vuelta para encender la lá mpara de la cama. Luego se volvió para
mirar a la persona a su lado que solo tenía puestos sus pantalones cortos. Su
rostro estaba cubierto de lá grimas.
—¿Por qué está s llorando?
Pete preguntó pacientemente y usó su mano para limpiar suavemente esas
lá grimas en ese rostro varonil. Sus ojos estaban llenos de preocupació n. Ae solo le
sonrió y abrazó a la otra persona. Luego se inclinó sobre la cabecera de la cama y
Pete preguntó confundido.
—¿Ae? ¿Qué pasa? ¡Dime!
—Solo fue un sueñ o.
—¿Un sueñ o?
El oyente sonrió ...
—Soñ é con el momento en que no estabas a mi lado. Recuerdo que Ai'Pond pateó
la pelota varias veces hacia mí una noche... creo que realmente pude sentir el
dolor en mi brazo.
Pensar en el pasado todavía podría herirlo mucho. Esas palabras de Ae
confundieron a Pete aú n má s. Por lo tanto, levantó la cabeza y pidió una
aclaració n.
—¿Qué quieres decir?
—En ese momento, estaba como loco. Pond hizo todo lo posible para ayudarme a
superarlo. Todavía lo siento gracioso cada vez que lo pienso. Me comparó con
Ai'Mai. Dijo que yo no era Ai'Mai, no me permitió convertirme en un alcohó lico
como él. Incluso me dijo que imaginara toda mi tristeza como una pelota y la
pateó . Su cerebro en ese momento parecía má s brillante que de costumbre.
Esta vez, Pete se acercó . posó su rostro en el cuello de su novio.
Después de eso, Ae comenzó a contarle todo lo que sucedió en el pasado durante
ese tiempo. Pete solo pudo sonreír y escucharlo en silencio. A pesar de que eran
solo recuerdos, aú n podían hacerlo sentir tan miserable.
Durante ese tiempo, si no hubiera tenido a la tía Su y Alvin a su lado, no habría
pensado que podría pasar por eso. A diferencia de Ae, no usó alcohol para ahogar
su propia tristeza. En cambio, lloraba todo el día. Pete lloró porque su amor no
pudo vencer el poder y el dinero. Lloró mientras se preguntaba có mo fue que
resultaron las cosas así.
—Para ser honesto, realmente necesito agradecerle a Ai'Pond. Pero solo pensar
en el hecho de que él hará una cara digna de un golpe mientras se burla de mí,
hace que no quiera decirlo jamá s.
Ae negó con la cabeza al mismo tiempo, haciendo reír a carcajadas al oyente.
—Entonces... ¿Por qué son tan unidos él y tú ? No... En realidad creo que ahora
eres mucho mas cercano de tus amigos del instituto que de los de la universidad.
Esta pregunta hizo que Ae suspirara profundamente.
—Porque era un alborotador.
—¿Qué quieres decir?
—¿Quieres escucharlo?—Ae se dio la vuelta para mirarlo. Pete asintió .
—Entonces... tengo que volver a la época en que todavía está bamos en la
secundaria... ¿No te lo dije? Que Ai'Pond y yo no fuimos a la misma escuela

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secundaria desde el inicio, porque yo fui transferido a su secundaria mucho má s
tarde...
Esta historia sobre el pasado, sin duda, evitaría que la pareja volviera a
dormirse...
—¡Ai'Mai, le he pedido con éxito a esa estudiante del grado 11 que salga conmigo!
—Wow ¿No fue demasiado fá cil? ¿No dijiste que te tomaría un mes, por qué solo
te tomó dos semanas ahora? No está mal, amigo mío, no está nada mal.
El lunes por la mañ ana fue el día má s difícil para todos los estudiantes con
síndrome de fin de semana. Los estudiantes de la clase 10-2 tampoco fueron la
excepció n. Este grupo de personas adormiladas entraron en el aula espaciosa, que
tenía un total de 40 estudiantes, y en esta clase, había un grupo singular llamado
Thai F5, aquellos que no tenían ningú n talento o buena apariencia nunca se
atrevían a meterse con ellos.
Mai; El gá ngster de la escuela, aunque no era muy guapo, nadie se atrevía a
cuestionar su capacidad para luchar. Nadie se atreve a meterse con él.
Pond; Un chico de ascendencia italiana, muy guapo. Está en la misma clase que
Mai.
Sun; Innegablemente guapo, el tipo de guapo que podía hacer que cualquiera se
enamorara de él a primera vista. Conoce a Mai y Pond desde la secundaria.
Dear; Posee una linda mirada, confía principalmente en su aura para unirse al
grupo.
Diew; Un nerd de cuatro ojos con capacidad de aprendizaje sú per buena, nadie
sabe por qué lo asignaron a esta clase no tan superior, pero él y Dear solían ser
compañ eros de clase, y se unió a este grupo simplemente por su capacidad.
Las cinco personas que se especializaron en diferentes campos establecieron una
profunda amistad desde el primer día de clases. Cuando no tenían nada que
hacer, se reunían y charlaban sobre chicas. Nadie supo si fue el destino o
simplemente una coincidencia que se conocieron y, a partir de ese momento, su
amistad duró para siempre.
Si hubiera este grupo sobresaliente en una clase, también siempre habría un
grupo de personas que se notaran menos.
En ese momento, Ae todavía era un joven adolescente de piel oscura. Sus padres
esperaban que pudiera estudiar en una escuela famosa. Fue seleccionado
especialmente para ingresar a esta escuela debido a su talento en el deporte, pero
siempre se sentaba en silencio en la esquina del aula, solo cuando tenía que
trabajar en grupo llegaba a charlar con algunos de sus compañ eros. Siempre
estaba manteniendo la distancia con los demá s.
Al mirar al grupo de personas que hablaban de chicas voluptuosas con tanta
emoció n, Ae no pudo evitar negar con la cabeza.
¿Cómo pueden hablar de clas hicas así?
Ae realmente no estaba de acuerdo con lo que estaban haciendo, pero no había
necesidad de recordarles este tipo de cosas, así que continuó leyendo
tranquilamente su libro, esperando que terminara la clase para ir a practicar
fú tbol.

67
—Estoy recibiendo tareas, estoy recibiendo tareas, ¿quién má s no las ha enviado
todavía? Por favor, venga aquí y entregue su tarea.
Un compañ ero de clase con una mirada linda se acercó al frente del escritorio de
Ae, y este levantó la cabeza para mirarlo.
—Oye, Dear, acabo de poner mi tarea aquí. ¿Puedes ayudarme a enviarla? Es má s
conveniente si lo haces tú .
—Solo vete, lo entregaré antes de que comience la clase.
Dear le dijo a otro compañ ero de clase, luego se dio la vuelta y formó una gran
sonrisa a la persona detrá s de él.
—Ae, no te concentres solo en jugar fú tbol, no te olvides de entregar tu tarea. que
esta sea la ú ltima vez que la olvidas.
Dear dijo sonriente, pero Ae, que no podía recordar muy bien los rostros de otras
personas, ni a este compañ ero de clase, asintió .
—Me disculpo. Será la ú ltima vez, realmente no la olvidaré.
—Bueno, no lo olvides la pró xima vez, nuestro maestro puede ser muy estricto...
Acabas de transferirte, si mal no recuerdo, eres el atleta de la escuela, ¿verdad?
Dear sonrió brillantemente, luciendo como un bebé curioso, Ae solo asintió .
—¿Oh, en serio? ¿Qué tan alto eres?
—160cm.
—jajaja, soy incluso má s alto que tú . ¡Oye, Ai'Diew! Ya no puedes llamarme
Ai'bajito. ¡Soy má s alto que el miembro del equipo de fú tbol!
En este punto, la persona que solía tener solo 165 cm durante el lapso de tres
añ os, y que solo creció un centímetro cada añ o, corrió hacia Diew para presumir,
Diew se subió las gafas y se rió , luego dijo en un tono serio.
—Ríete todo lo que quieras ahora. Espera hasta que te gradú es, no creo que seas
má s alto que él.
—¡¡¡Estú pido Diew, vete al infierno!!!
Dear le gruñ ó a Diew y se escapó . Ae era alguien que solo se enfocaba en su
interés y no podía importarle menos el sexo opuesto, por lo que realmente no
quería mezclarse con este grupo, pero quién podría haber pensado que solo
sucedió un incidente y causó que una persona imperceptible como él lo llevaran a
unirse al mejor grupo de la clase.
***
—¡Oye! ¡Si te atreves, pelea conmigo, mano a mano!
—¡Demonios!, ¡incluso te atreviste a jugar con mi chica!
Después del entrenamiento de fú tbol, Intouch se dirigió a la estació n de
autobuses para ir a casa como de costumbre. Cuando de repente escuchó a
alguien discutiendo junto a la escuela, no pudo evitar fruncir el ceñ o y se dio
cuenta de que algo andaba mal. Si fuera otra persona, se habrían escapado del
problema, pero Ae no lo hizo. Siguió la fuente del sonido. Quería ver si alguien
necesitaba su ayuda.
¿No es ese... mi compañ ero de clase?
Ae vio a un niñ o con uniforme escolar tirado en el suelo, alrededor habían tres
estudiantes universitarios golpeá ndolo.
— Fue tu chica quien voluntariamente abrió las piernas para mí.

68
—¡Estú pido mocoso, quieres morir!
Uno de ellos golpeó a Pond en la cara.
—¡Oye, déjalo ir!
Ae gritó , dejando su mochila y su baló n de fú tbol, Pond levantó la cabeza para
mirar a la persona que había llegado a ayudarlo.
—Ai'Mai...
Sin embargo, no era la persona que tenía en mente, por lo que se detuvo de
inmediato.
—No te acerques aquí, o te golpeará n también.
Obviamente, en la mente de Pond, para alguien que es incluso má s bajo que él
como Ae, ¿qué podía hacer para ayudar? Sin embargo, Ae no se retiró , sino que
dio un gran paso hacia adelante.
—Deja ir a mi amigo.
—Mantente al margen, Ai'bajito. No es de tu incumbencia.
La otra parte dijo, Ae apretó el puñ o y miró a las personas que eran mucho má s
altas que él, pero no retrocedió en absoluto.
—¡Te lo digo una vez má s, suelta a mi compañ ero de clase!
—¿Y si no lo hago? ¿Qué hará s?
—Por supuesto que haré esto...
<Puñ etazo>
Un fuerte golpe aterrizó en la cara del estudiante universitario, la persona que fue
golpeada perdió el equilibrio. Al mismo tiempo, se sorprendió , porque no creía
que Ae, que no parecía que se peleara, lo golpearía. Ae tampoco les dio tiempo
para reaccionar, con solo mirarlos y ya sabía que no se rendirían fá cilmente.
Precisamente pateó a otra persona y rá pidamente levantó a Pond, que se veía tan
horrible en ese momento.
—¿Estas bien?
—Tú ... Tú eres Ae... Ae... ¡¡¡Cuidado !!!
Ae casi no pudo esquivar el puñ o que se acercaba. Es cierto que era futbolista,
pero en realidad, también practicaba Muay Thai, por lo que Ae se preparó
rá pidamente y esperó a que se le acercaran, inclinó ligeramente su cuerpo hacia
un lado para evadir el puñ o del oponente, luego barrió su pierna y alcanzar las de
la otra parte. En este momento, Pond también se puso de pie y usó su manga para
limpiar la sangre de la comisura de su boca.
(Recuerden: Muay Thai es una disciplia parecida al boxeo, pero con técnicas
similares también a las artes mixtas.)
—¡Está s jodidamente bien!
—Solía practicar Muay Thai.
Ae respondió mientras bloqueaba el ataque de su oponente, y el grupo que tenía
má s peleoneros ahora ni siquiera estaban seguros de si había alguna posibilidad
de ganar esta pelea de tres contra dos.
—¡¡Oigan !! ¿¡¿Qué está n haciendo ahí?!?!
De repente, el sonido penetrante de un silbato llegó desde la distancia,
acompañ ado por el grito del decano que se acercaba poco a poco, lo que provocó
el pá nico en ambas partes que se peleaban.

69
—Esto no ha terminado, solo espera y verá s.
Aunque aquellos tipos eran mayor que ellos, solo les lanzaron una amenaza y
luego huyeron en la direcció n opuesta. Ae inmediatamente se apresuró a recoger
su mochila y su baló n de fú tbol, pero de repente fue arrastrado por Pond.
—¡Corre! Ahora tengo la culpa. ¡Si el maestro me atrapa, mi papá me matará !—Ae
dijo.
Cuando no había nadie má s a su lado, Pond, que acababa de establecer un
profundo respeto hacia la persona que era diez centímetros má s baja, y que podía
escapar incluso má s rá pido que él, no pudo evitar murmurar...
¡Este Ai'Bajito es rudo!
No importa qué tipo de experiencia emocionante experimentó ayer, el héroe que
salió a ayudar se sentó en silencio en la esquina del saló n de clases hoy.
Ae miró a su alrededor y descubrió que la persona que se acostó con la novia de
otra persona no llegó a la escuela hoy. Ayer, ni siquiera intercambiaron una
palabra y simplemente se apresuraron a regresar a sus hogares.
Repentinamente...
—¿Hm?
Justo cuando Ae se estaba concentrando en hacer su tarea (porque se olvidó
hacerla la noche anterior), estaba rodeado de varias figuras, que se pararon
alrededor de su escritorio y proyectaron sombras sobre él. Ae levantó la cabeza
en confusió n, solo para ver a los F5 mirá ndolo con atenció n. Sun también levantó
su mano y tocó su barbilla mientras tenía una mirada examinadora en su rostro.
—¿Ai Pond nos dijo que lo ayudaste ayer?
—Fue algo sin importancia.
—¿Es cierto que le diste una paliza a esos tipos?
Ae tenía esa mirada incó moda en su rostro, quería decir que no los venció hasta
ese punto, pero ni siquiera dijo nada todavía y una voz suave y linda lo
interrumpió . El sonido vino de la pequeñ a belleza entre ellos.
—Wow, wow, ¿incluso practicaste Muay Thai antes? ¡Ai'Pond dijo que incluso
conocías ese movimiento 'Hanuman Thaiwai Waen'!
[Nota: Hanuman Thaiwai Waen, es el movimiento o la técnica que verá n en el gif
de aquí abajo.]

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publicació n, intente quitarla o subir otra.

—No, solo está exagerando.

Ae respondió apresuradamente, sentía que Pond ya lo había pintado como una
especie de maestro de la lucha. Diew sonrió y dijo: Bueno, Pond es un gran
desastre, pero nunca miente. Tú lo ayudaste ayer. Si fuera yo, ya le habría pedido
que me invitara a tener una gran comida hoy. ¿Có mo quieres que te pague?
Dijo la persona codiciosa a quien Dear conocía desde la escuela secundaria, y Ae
respondió con seriedad.
—Simplemente pasé y lo ayudé un poco, no necesito ninguna recompensa, si
fueran ustedes los que vieran eso, también me ayudarían.

70
Deng!...
Todos miraron a Ae y Diew se echó a reír de repente.
—Jajaja, no, no, nunca daría un paso al frente para ayudar, nunca me pelearé. No
soy tan estú pido como ellos.
—No creo que yo pueda. Sería el primer noqueado.
Dear agregó , Ae simplemente negó con la cabeza y dijo: Bien, no hablemos má s de
eso.
Justo cuando Ae estaba diciendo esto...
—¡¿Dó nde está mi héroe?!?!
El adolescente de raza mixta gritaba y entraba apresuradamente al aula, tenía una
venda al borde de la boca. Se dirigía directamente a Ae que estaba rodeado por el
grupo, y..
—¡Por favor acepte mi má s profundo agradecimiento!
Pond se arrodilló , con ambas manos y la cabeza hasta tocarel suelo, se postró
justo frente a Ae, lo que hizo que todos se sorprendieran, incluido Ae.
—¿Qué está s haciendo? No lo hagas.
—Por supuesto que te estoy mostrando mi gratitud. Gracias a ti, no me golpearon
horriblemente. Esas personas son realmente peligrosas, ya sabes. Y realmente no
me metí con su novia, fue su novia quien me sedujo.
Esas palabras sonaban como si Pond se estuviera poniendo una excusa, Ae no
pudo evitar fruncir el ceñ o.
—Tú también merecías ser golpeado, ¿no puedes hablar de chicas de una manera
má s amable.
Ae soltó lo que tenía en mente. No le tenía miedo a una pelea de todos contra
todos,
—Es la verdad, ella realmente me sedujo —Pond dice enojado.
(Golpe...)
—¡Eres realmente un pervertido, Ae no podría tener má s razó n!
Dear golpeó a Pond, y Mai, que estaba a su lado, le dio una palmada en el hombro
a Ae.
—Eres realmente increíble. La pró xima vez que me meta en una pelea, te llamaré,
estos muchachos son muy débiles.
Mai señ aló con el dedo a los otros miembros del grupo, y los que fueron llamados
débiles objetaron en voz alta.
—Ya basta. Nuestra primera clase es física, tenemos que cambiar de aula, vamos,
Ae, ven con nosotros.
Diew impidió que discutieran, mientras instaba a sus amigos a que se cambiaran
a otra clase, pero tampoco se olvidó de llamar al pequeñ o adolescente que
acababa de hacer una hazañ a ayer para que lo acompañ ara. Ae también se puso
de pie, empacó las cosas y salió del aula junto con los F5.
Repentinamente...
—Siéntate con nosotros má s tarde, quiero escuchar tu heroica historia de ayer.
Sun desaceleró sus pasos y agarró el hombro de Ae y dijo que quería escuchar la
historia. Y Ae, que todavía no estaba muy familiarizado con ellos, se frotó la
barbilla.

71
—Está bien, pero no fue tan exagerado como dijo tu amigo.
Este fue el comienzo de la amistad entre estas seis personas...
La gente solía decir que la amistad má s sincera y duradera siempre se construye
desde una edad temprana. Al parecer... es verdad.
***
—¿Eso significa que peleabas a menudo en la secundaria?
—Sí, iría cada vez que Ai'Mai me pidiera ayuda, pero tenía que evitar a los
profesores, o de lo contrario me echarían del equipo de fú tbol.
Ya era temprano en la mañ ana y la historia sobre el pasado de Ae también estaba
llegando a su fin. El oyente sonrió gentilmente. Aunque su amante siempre tenía
una expresió n seria en su rostro, cada vez que mencionaba el pasado, siempre se
veía muy feliz.
—Cuando estuve ausente fue Pond quien te ayudó , ¿no deberías postrarte ante él
también, jajaja?
Pete preguntó con una sonrisa en su rostro, pero Ae negó con la cabeza mientras
tenía esta expresió n de 'incluso si me matan, no lo haré' en la cara.
—Está bien, duerme un poco, aú n puedes dormir unas horas má s.
(muack)
Ae apretó a Pete con fuerza y le dio un fuerte beso en el rostro, luego se levantó .
Pete estaba confundido por su comportamiento.
—Necesito ir al bañ o.
Ae dijo y se fue. Pete, que estaba acostado en la cama, tomó su mó vil, buscó el
nú mero de teléfono que su amigo acababa de cambiar el mes pasado y envió un
mensaje corto a la otra parte. Por la mañ ana, recibió la respuesta...
(¿Qué quieres decir?)
El mensaje de Pete puede resultar un poco incomprensible.
(¡Acepta mi postración como un signo de mi más profunda gratitud! Lo hago en
nombre de Ae).
No importaba si Pond no entendía, Pete, sabía que Pond es el tipo de persona con
la que todos querrían entablar amistad. Este chico siempre lo había estado
ayudando a él y a Ae. Incluso si la personalidad de este amigo tenía muchos
defectos, esta persona también es el mejor amigo de Ae.
Si Ae no quiere decirlo, deja que sea él quien lo diga.
Son una pareja, entonces está bien que él agradeciera a su amigo en nombre de su
amante... ¿verdad?

Especial 5
—¿Está s listo?
—Estoy listo.
—Todavía no es demasiado tarde para arrepentirse.
—Ae, estoy listo ¡estoy completamente preparado!
Durante las vacaciones de cuatro días de Tailandia, la mayoría de la gente optaría
por salir de Bangkok para tomar un poco de aire fresco fuera del á rea
metropolitana, o elegir viajar al extranjero porque esta época no era la temporada

72
turística para los extranjeros. Koon Chai Pete envió una solicitud a su madre
pidiéndole unas vacaciones para poder disfrutar de sus días libres junto Ae.
En este punto, los dos hombres habían llegado a su destino: dos edificios de
colores brillantes alineados uno al lado del otro.
Ae miró a Pete y repitió la pregunta que le había hecho repetidamente durante
una semana.
¿Está Pete realmente seguro de que quiere venir a mi casa?
La mirada nerviosa de Ae hizo sonreír a Pete. É l asintió con la cabeza hacia él
como si quisiera decirle que estaba listo para enfrentar a la familia de su amante.
Ae de todos modos también ya había planeado traerlo de regreso para ver a su
familia.
Al final, nuestro joven ingeniero soltó un largo suspiro.
—Bueno, si eso es lo que quieres.
Después de eso, el hombre alto y corpulento tomó la delantera y se bajó del auto
primero, luego se dirigió al maletero y sacó el equipaje de su novio. El dueñ o del
equipaje también se bajó del coche. En ese momento...
—¡Pete! ¡Cariñ o, has venido!
Un grito venía hacia ambos y una figura voladora se hundió en el esbelto cuerpo
de Pete. La fuerza de hundimiento fue tan fuerte que fue empujado hacia atrá s
unos pasos. Fue una suerte que Ae estuviera justo detrá s de él para sujetar su
cintura, pero ambos casi cayeron al suelo debido a su poderosa madre.
—Pete, ¿có mo está s? No te he visto en varias semanas, Ae simplemente no te traía
aquí, ¿tu trabajo es demasiado ocupado y agotador? ¡Te ves má s delgado!
Luego, sus manos regordetas pellizcaron las mejillas del apuesto joven maestro y
siguió revisá ndolo de arriba abajo para ver si el joven frente a ella estaba bien de
salud o no. Ella lo trató con má s preocupació n que a su propio hijo. El hombre
cuyas mejillas estaban siendo pellizcadas sonrió y dijo.
—Estoy muy bien, madre, ¿y usted? ¿Có mo está ? No la he visto en mucho tiempo,
¡realmente la extrañ é!
El tono de Pete era sincero, su comportamiento amable y obediente agradó
enormemente a la madre de Ae.
Estaba segura de que su propio hijo Ae nunca actuaría tan dó cilmente con ella... ni
en un milló n de añ os...
—Oh, sí, tengo algo para usted. Hoy traje el postre popular del que hablamos
antes.
—¡Oh, qué buen niñ o, incluso recuerdas a esta anciana, a diferencia de mi hijo, su
padre y yo casi olvidamos có mo se veía!
Como madre, se burló de su propio hijo, pero sonrió alegremente cuando vio al
amante. Tan pronto se enteró que venía a esta casa a verla, se sintió realmente
satisfecha.
—Mamá , es porque tengo que trabajar.
Ae suspiró y su madre se dio la vuelta para mirarlo.
—Lo dices como si no tuvieras ni un solo día libre, porque si realmente quisieras
podrías venir a casa a ver a todos.

73
La madre y el hijo comenzaron a discutir de un lado a otro. Pete rá pidamente
trató de ser el mediador.
—Mamá , no se enoje con Ae, fue mi culpa. Ae estuvo conmigo en sus días libres.
La madre de Ae negó con la cabeza y agitó la mano.
—No fue tu culpa. Cuando aú n no habías regresado a Tailandia, este mocoso casi
no regresó a casa. Simplemente no me molesté en decir nada en ese momento, no
sabes que después de que comenzó a trabajar, solo volvía a casa una vez cada tres
o cuatro meses. N'Yam se asustó y lloró cuando lo vio, porque había pasado tanto
tiempo desde que vio a su tío que ya había olvidado su rostro.
La madre de Ae, que estaba de buen humor, empezó a parlotear sobre el pasado
de Ae. Pete notó la expresió n incó moda de Ae, solo para escucharlo susurrar la
cruda verdad.
—Parece que durante los pró ximos dos días, mi mamá felizmente va a darte
chismes sobre mí.
—Por supuesto, mi hijo favorito ha vuelto, ¡definitivamente debo contarle todo
sobre tu oscura historia!
Las palabras de la madre hicieron que Ae suspirara impotente. Luego tomó la
mano de su novio y lo llevó al pasar la puerta de la casa.
—Pete necesita lavarse la cara primero. Debe estar exhausto.
Cuando terminó de hablar, arrastró a su novio arriba y su madre preguntó en voz
alta.
—Pete, no has comido nada, ¿verdad? Me aseguraré de prepararte una buena
comida.
—Está bien, mamá , gracias... ¡Wow!
Pete exclamó . Estaba sorprendido por la gran fuerza de Ae, quién tiró de él con
fuerza, haciéndolo casi tropezar. Volvió la cabeza para mirar la ancha espalda de
la persona que tenía enfrente.
—No tienes que estar de acuerdo con mi mamá . Creo que durante los pró ximos
días, está s destinado a que mi madre se aferre a ti.
El tono desesperado de Ae combinado con su mirada preocupada hizo que Pete
no pudiera evitar reír.
—Pero ese futuro no es nada malo.
—¿Hmm?
Ae, que caminaba al frente, giró la cabeza para mirar a Pete y vio una sonrisa feliz
en su rostro.
—Estoy muy feliz de que tu familia acepte nuestro amor, así que estoy dispuesto
a hacer cualquier cosa.
Una respuesta tan encantadora hizo que Ae no pudiera evitar extender la mano y
frotar suavemente la cabeza de la otra persona.
—Bien, perdí.
Así es. Ahora, la familia de Ae había aceptado por completo a Pete como amante
de Ae.
Pete regresó apresuradamente a Tailandia hace unos meses. Le preocupaba si Ae
todavía lo amaba o no, y también si la familia de Ae lo aceptaría o no, porque
nunca olvidó que fue él quien casi causó los problemas familiares de Ae... Todas

74
las cosas que habían sucedido en el pasado. le hizo preocuparse de que todo el
mundo pudiera pensar que fue él quien arrastró a Ae un pozo sin fondo. Le
preocupaba que todos lo odiaran y no le dieran la bienvenida. Sin embargo,
cuando Ae lo trajo a esta casa, que no había visitado durante tres añ os, lo que
sucedió fue...
—Cariñ o, ¡deseo que la buena suerte te acompañ e siempre y que la mala suerte se
vaya!
Fue recibido con un cá lido abrazo y un deseo lleno de preocupació n. Aquella voz
sincera hizo que Pete, quien estaba decidido a no llorar, abrazara a la madre de
Ae con fuerza. Estaba temblando y dijo: Lo siento, me disculpo por lo que ha
hecho mi padre. Lo siento mucho por todos.
Y su mayor logro después de esa visita fue obtener el perdó n de todos.
Nadie lo culpó . Todos le dieron la bienvenida. Estaban felices de que pudiera
regresar, y los padres de Ae también le dijeron que simplemente los llamara
mamá y papá directamente. Pete estaba tan emocionado que no pudo calmarse
durante mucho tiempo.
Por lo tanto, si la madre de Ae quería que él hablara con ella, estaba muy
dispuesto a hacerlo. Esto era solo una cosa menor comparada con lo que esta
familia le había dado.
Su familia lo aceptó .
—Creo que mi mamá es solo la primera ola de está s vacaciones. Nuestro plan
original era muy bueno, hacer turismo en la montañ a.
Ae dijo mientras abría la puerta. La habitació n era prá cticamente la misma que
antes.
Pete abrazó la cintura de Ae por detrá s, apoyó la barbilla en el hombro de la otra
persona y dijo en voz baja: Pero sé que definitivamente también querías regresar
a tu casa.
Pete sabía que Ae también había tenido en mente visitar a su familia, pero entre ir
a casa e ir a verlo, Ae prefería lo ú ltimo.
Solo podían reunirse una vez a la semana, por lo que Ae elige estar con él. Al
principio, a Pete le preocupaba que pudiera ser un poco inapropiado el hecho de
que Ae pasara sus días libres acompañ á ndolo, pero la familia de Ae lo apoya
mucho, tanto que dejan que él haga lo que mejor le parezca.
En ese momento, su madre dijo...
—He visto el rostro oscuro de este mocoso por má s de 20 añ os, ahora con mucho
gusto te doy la oportunidad.
Entonces, ¿có mo podría no amar a esta familia? Realmente Pete ama mucho a la
familia de Ae.
—¿Có mo lo sabes?
Ae preguntó y lo miró . Pete sonrió y acercó aú n má s su rostro a Ae.
—Porque extrañ ará s a tu sobrina y sobrino, N'Yim y N'Yam si no te quedas.
Al escuchar lo que dijo Pete, Ae solo pudo suspirar.
—Realmente no tengo ninguna objeció n a tus palabras.
—¡Jajaja, de hecho eres su sirviente!

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Era una buena y rara oportunidad, por lo que Pete se burló de él de inmediato. Ae
se dio la vuelta para agarrar la delicada cintura de la otra persona e inclinó la
cabeza para permitir que sus frentes se tocaran.
—Te atreves a reírte de mí.
Su rostro y tono grave no asustaron a Pete en absoluto, se rió aú n má s fuerte.
—Sí, sigue actuando de esta manera, ¿quién es el que asustó a su propio sobrino?
Después de escuchar lo que dijo Pete, Ae no pudo evitar sentirse impotente.
—No soy como tú , N'Yam es un niñ o al que le aterrorizan los extrañ os, pero solo
necesitas acariciarle la cabeza varias veces y ya se aferrara a ti.
Dijo el joven mientras pensaba en su pequeñ o sobrino. Su personalidad y la de su
sobrina se invirtieron por completo. Es muy tímido. Cuando N'Yim tenía tres
añ os, a ella le gustaba mucho hablar, mientras que N'Yam que ya tiene tres añ os,
todavía se esconde detrá s de sus padres. Muy aparte del hecho de que también
estaba extremadamente asustado de su tío de aspecto intimidante.
—Jajaja, no está s feliz. Ae está de mal humor, ¿verdad?.
La persona que tenía un cuerpo bastante delicado en comparació n con Ae dijo en
broma. Ae sintió como si su novio estuviera jugando con su corazó n.
Sin ninguna advertencia, Pete fue empujado hacia abajo en la cama, Ae luego se
inclinó y colocó ambas rodillas a los lados del cuerpo de Pete, se acercó a su
rostro, con una mano colocada junto a su cabeza mientras le susurraba al oído
con su voz profunda.
—¿Te atreves a decir que estoy de mal humor?
Su tono intimidante podía hacer que sus colegas se rindieran, pero ahora no tenía
ningú n efecto amenazante en Pete. Por el contrario, Pete solo sintió que... Ae así
era realmente sexy.
La persona que estaba encima de él se veía realmente amenazante, una sonrisa
malvada siempre se presentaba en su rostro, sus ojos miraban a la persona que
estaba siendo restringida debajo de él mientras su otra mano bajaba lentamente
por el cuerpo de Pete. Cuando llegó a su pecho, le frotó los pezones a través de su
camisa, e incluso tiró un poco como forma de castigo.
—Todavía no es demasiado tarde para retractarte de tus palabras.
—¡Ahg! ... ¿Y si no lo hago?
—¡HA!
Pete exclamó suavemente, mientras el dedo de Ae pellizcaba y tiraba de su pezó n,
y su cara se acercaba a su oreja...
—Entonces te castigaré hasta que te retractes de tus palabras.
—Ae... No... No podemos, en un momento, tendré que bajar a ver a mamá .
—Entonces tendré que castigarte aú n má s fuerte. Porque consideras a tu suegra
má s importante que a tu esposo.
—Aa... Ha... No... Espera un minuto...
La persona, que se estaba burlando de Ae hace un momento, solo podía jadear
mientras intentaba detener el ataque. Pero sabía demasiado bien que cada vez
que su amante lo deseaba, él se rendiría y lo dejaría hacer lo que quisiera. Incluso
desde que era un estudiante universitario, Ae ya no conocía límites cuando se

76
trataba de desearlo. Ahora era aú n peor, y no había forma de que Pete pudiera
resistirse.
La mirada encantadora y seductora de Ae despojó a Pete de la resistencia y lo
hizo entregarse sumisamente a su abrazo.
—Voy a 'amarte' hasta que tus piernas se tambaleen y tu cara se ponga roja
cuando bajes las escaleras. Esa mirada debe ser realmente linda.
Su voz profunda estaba dando vueltas alrededor de su oreja e hizo que Pete se
sonrojara instantá neamente. Recordó el momento en que estuvieron en su casa la
semana pasada. Hicieron el amor en el bañ o temprano en la mañ ana, y cuando
terminaron, bajó a desayunar. Al principio, se preguntaba por qué su madre y su
tía Jiew sonreían de esa forma tan extrañ a, hasta que se vio en el espejo y se dio
cuenta en ese momento.
Tenía los ojos llorosos, la cara enrojecida y los labios aú n hinchados... Estaba tan
avergonzado que no se atrevió a mirar a su madre durante varios días.
Ae parece que... realmente te gusta burlarte de mí de esa manera.
—Ae, ¡eres un pervertido!
—Bueno, admito que soy un pervertido, porque tú eres demasiado lindo.
Después de que terminó su oració n, su cuerpo grande se presionó hacia abajo con
su rostro pegado al cuello de Pete. Besos tras besos caían sobre su cuello
haciéndole gemir.
—Ae, te has vuelto muy malo.
—Pero sé que te gusta que sea malo.
Así es, solo está siendo malo con él en la cama., porque tan pronto como se
levanta Ae sigue siendo bueno con él como antes.
—¿Podemos... esperar hasta la noche, Ae?
—Solo dame un poco, luego te dejaré bajar má s tarde—Intouch dijo íntimamente.
Parecía que quería tragarse a su amante por el vientre, si no fuera por...
—¡¡¡Tío Ae !!!!!
La voz cristalina que venía de la niñ a pasó de repente y atravesó la pared. El
hombre que sumiso y suave en la cama hace un momento estaba tan asustado que
sus ojos se abrieron en un segundo. Rá pidamente apartó a la persona que estaba
encima de él. En este instante, la niñ a también se rió y abrió la puerta,
casualmente entró corriendo a la habitació n. Entonces de repente se detuvo...
—Tío Ae, ¿por qué está s sentado en el suelo?
Esta pregunta hizo que Ae volviera la cara y mirara a la persona en la cama
dá ndole una mirada de 'No olvidaré esto', Pete solo pudo sonreír levemente.
Esto es aú n mejor que dejar que N'Yim vea una escena no apropiada para niñ os.
Pete transmitió sus pensamientos a su amante a través de sus ojos, y Ae se dio la
vuelta y miró a su sobrina que sostenía un par de guantes de boxeo rojos. Ahora
ella tiene casi siete añ os.
N'Yim se ha vuelto má s alta. Ya no es la niñ a que solía llevar un par de colteas
hace unos añ os. Aunque sigue siendo tan linda como antes, tiene el cabello corto y
varonil. Heredó de los excelentes genes de su madre; la nariz alta, los ojos
grandes y la piel bronceada de su padre. Su fuerte personalidad fue
completamente heredada de su padre y tío...

77
Otras niñ as probablemente querían tocar el piano o hacer ballet a la edad de seis
añ os, pero N'Yim... quería practicar boxeo.
—Tropecé con la cama.
—Jajaja, el tío Ae es tan torpe.
Al escuchar la respuesta de su tío, N'Yim, que no sabía lo que acababa de pasar en
la habitació n, sintió que su tío era realmente torpe. Incluso extendió la mano para
tirar de su tío, que era tan fuerte como un bú falo, y luego se dio la vuelta y formó
un waii hacia la persona en la cama.
—Sawasdee kha, tío Pete. Te extrañ é.
Dijo la niñ a mientras se subía a la cama para abrazar la cintura de su tío favorito,
Pete, y Pete le sonrió con cariñ o.
—El tío también te extrañ ó .. pero tu tío Ae realmente te necesita ahora... N'Yam
no puede recordarlo, no está feliz.
Pete susurró al oído de la pequeñ a sobrina, y los ojos de N'Yim se abrieron de par
en par.
—Tío Ae, incluso si N'Yam no puede recordarte, yo te recuerdo, y te amo má s.
La pequeñ a trató de complacer a su tío (que era el ú nico al que se lo haría) y lo
abrazó por la cintura como en el pasado. Su tío favorito de todos los tiempos fue
sin duda este tío Ae frente a ella.
—Eso ya pasó hace un añ o, ¡¿có mo puede N'Yam todavía no recordarme ahora?!?!
Ae no pudo evitar suspirar, porque a su familia siempre le gustaba mencionar
este asunto para burlarse de él.
Se fue de casa para trabajar y no regresó durante casi cuatro meses, por supuesto
que su sobrino de dos añ os no lo recordaba. ¿Qué tenía de extrañ o? P'Oh fue el
peor de ellos. ¿Tenía la intenció n de burlarse de él sobre este asunto hasta que su
hijo tuviera la edad suficiente para ser monje?
—Pero N'Yam realmente le tiene miedo al tío Ae, porque el tío Ae siempre
muestra esta expresió n que da miedo.
Después de eso, N'Yim usó sus dedos para levantar la piel alrededor de los bordes
de sus propios ojos para imitar el aspecto de Ae. Pete no pudo evitar reír. Se reía
con tanta fuerza que su rostro se puso rojo.
—Deja de burlarte de tu tío, ¿para qué está s aquí? ¿No tienes que practicar boxeo
hoy?
Ae preguntó mientras miraba un par de pequeñ os guantes de boxeo rojos que
estaban tirados sobre la cama.
—Ya estuve ahí, pero olvidé que no teníamos clases hoy. Mi papá dijo que soy
olvidadiza a una edad tan joven, y que ni siquiera era mayor todavía... así que le
refuté... Aú n no tengo ni 7 añ os, ¿qué pasa con mi papá ? É l ya tiene treinta, ¿có mo
podría olvidar que hoy es un día festivo?
Verán, esta niña con menos de 7 años incluso sabe como debatir con sus padres. Los
adultos también han estado en una situación difícil aquí.
<Golpe>
—Tío Ae, ¿por qué me pegaste?
Ae no pudo evitar golpear suavemente la cabeza de su sobrina, sus ojos estaban
llenos de amor. Realmente tenía sentimientos encontrados hacia esta sobrina.

78
 N'Yim exclamó insatisfecha. Luego se entregó a los brazos del tío Pete en busca
de consuelo.
—No me digas que el tío Pete se quedará a dormir, entonces debo dormir contigo
esta noche, tío Pete.
Al escuchar que su pequeñ a sobrina quería arrebatarle a su esposa, Ae levantó las
cejas y cambió de tema.
—No me has dicho por qué está s aquí.
—Oh, la abuela me dijo que viniera aquí para decirte que el almuerzo está listo.
Me dijo que llamara al tío Pete para que bajara, o de lo contrario se lo comería el
lobo... Tío Ae, ¿eres el lobo?
La niñ a de siete añ os, que todavía es inocente, frunció el ceñ o y dijo ingenua.
Cuando el tío Ae escuchó lo que dijo su pequeñ a sobrina, su expresió n se volvió
un poco extrañ a, y el tío Pete del otro lado no pudo evitar reír a carcajadas. Se
levantó y tomó la mano de la niñ a.
—Vamos, N'Yim. Dejemos a este lobo hambriento aquí.
—¿Así que el tío Ae es realmente el lobo? ¿No significa eso que el tío Pete es la
Caperucita Roja?
N'Yim mencionó su cuento de hadas favorito, Pete asintió con la cabeza.
—Sí, soy la Caperucita Roja.
La persona que fue empujada al suelo de repente soltó una amenaza. Pete tiró
rá pidamente de la mano de la sobrina y bajó corriendo las escaleras preso del
pá nico.
—¡¡¡Esta noche te dejaré dormir con capucha caperucita!!
Parece que esta noche me va a ser mucho más difícil contener mis gemidos...
***
—Pete, realmente no tienes que ayudarme, ya está s sudando mucho.
—Mamá , estoy bien, quiero ayudarte.
En este momento, probablemente todo el personal del hotel no creería que el
joven, quien era el gerente y el nieto del fundador del hotel y nunca había hecho
ningú n trabajo laboral desde que era un niñ o, estuviera ayudando a la madre de
su novio. a lavar los platos.
Así es, en este momento, Pete, con las mangas hasta los codos, estaba sentado en
un pequeñ o taburete. Había dos grandes tinas de palanganas llenas de platos
sucios frente a él. Con una mano sosteniendo una esponja burbujeante, la otra
mano sosteniendo un plato, estaba limpiando há bilmente.
Un hombre tan guapo y elegante debería estar en un centro comercial de lujo en
lugar de estar sentado en la calle como un trabajador. Debería estar sosteniendo
una copa llena de vino tinto en lugar de lavar los platos aquí. El hecho de que él
apareciera en este lugar hizo que varias chicas llegaran a comer, porque la noticia
de que el hijo del dueñ o de este restaurante tenía un amigo tan
sorprendentemente guapo que vino aquí para ayudar ya se había extendido por
toda la calle como la pó lvora, Pete, sin duda, se había convertido en el niñ o má s
popular de esta calle.

79
La velocidad de Pete era cada vez má s rá pida, pero los platos que tenía delante se
amontonaban cada vez má s, lo que hacía que nuestro joven maestro sudara
demasiado.
Cuando vio que Pete insistía en ayudarla, la madre de Ae no tuvo má s remedio
que dejarlo en paz, pero no mucho después...
—Pete, ¿có mo es que está s aquí y limpiando platos? No es necesario, déjame
hacerlo.
El padre de Ae pasó y vio a Pete limpiando los platos. Gritó en voz alta y quería
quitarle el trabajo, Pete solo le sonrió y dijo.
—Papá , estoy bien. Puedo hacerlo.
—Esto no es bueno, niñ o. Déjeme hacerlo.
—No, por favor déjame hacerlo. Ae me dijo que le duele la espalda, así que si se
sientas así, definitivamente empeorará . Por favor déjame hacerlo.
Insistió Pete. El padre de Ae no tuvo má s remedio que comprometerse, pero el
anciano no fue a ningú n lado, se quedó a su lado para enjuagar los platos con agua
limpia.
Incluso después de que se ocuparon los platos que estaban apilados como una
pequeñ a colina, Pete aú n no se sentó a descansar, sino que actuó como un
camarero y ayudó a limpiar las mesa. P'Nat, que acababa de regresar con su hijo,
no pudo evitar sentirse sorprendida al ver esto.
—Pete, ¿Por qué está s aquí? ¿Por qué no subes? Hace mucho calor, mírate, está s
sudando... ¿N'Yim? ¿No te lo dijo mamá ? ¿Có mo pudiste dejar que el tío Pete lo
hiciera?
La primera nuera de la familia llamó a su hija. N'Yim, que estaba practicando
boxeo en la puerta del restaurante, escuchó la llamada de su madre y
rá pidamente entró corriendo a la casa.
—Mamá , estoy practicando.
—¿Practicando?
P'Nat no pudo evitar fruncir el ceñ o.
—Sí, tengo que practicar boxeo para luchar contra el lobo.
Pete que está limpiando una de las mesas de inmediato. Se dio la vuelta para
mirar a la emocionada sobrina y quiso detenerla, pero ya era demasiado tarde...
—El tío Pete dijo que iba a ser devorado por el lobo esta noche, así que tengo que
practicar mucho para derrotar al lobo hambriento. ¡¡¡Mírame !!-
N'Yim mostró sus movimientos a su madre y P'Nat miró a su hija que llevaba un
par de guantes de boxeo. No pudo evitar reír a carcajadas.
—Oh... si es 'ese' lobo... entonces no necesitas practicar má s, porque parece que
alguien está má s que feliz de ser comido
P'Nat no pudo evitar burlarse de él. En este momento, el niñ o que estaba
agarrando los pantalones de su madre dijo...
—Tío Pete... ¿El tío Pete morirá ? ¡No, no te dejaré morir!
El niñ o de tres añ os, de rostro redondo, ojos grandes y piel blanca, heredó por
completo los genes buenos de su madre. Cuando escuchó que el tío Pete iba a ser
devorado por el lobo, se puso muy ansioso y estuvo a punto de llorar. Corrió hacia

80
Pete, lo agarró por los pantalones y se negó a soltarlos. Aunque no lo había visto
en tres semanas, recordó quién era inmediatamente cuando lo vio.
N'Yam estaba muy feliz de ver al tío Pete, porque el tío Pete le traía mucha comida
deliciosa cada vez que venía.
—El tío Pete no morirá , sí, sí, N'Yam, por favor no llores.
Pete se puso en cuclillas y abrazó a este lindo niñ o, y P'Nat, que estaba de pie
junto a él, se echó a reír de inmediato.
—Oh, Dios, ni siquiera sé quién es su verdadero tío ahora. Cuando ve al tío Ae, se
esconde tan rá pido como puede. Cuando ve al tío Pete, no puede esperar para
correr hacia él.
Pete miró hacia arriba y susurró .
—No podemos decir eso frente a Ae, o de lo contrario se pondrá de mal humor.
Cuando escuchó lo que dijo, Nat se rolvió a reír de buena gana.
—Jajaja, tenía razó n después de todo. N'Yim estaba pegada a su tío Ae cuando era
una niñ a. Ae probablemente pensó que su sobrino se aferraría a él como su
hermana. ¿Quién hubiera pensado que N'Yam le tiene miedo?, solo porque este
tío se ve realmente aterrador... pero Ae se veía realmente frío en el pasado,
especialmente cuando no estabas aquí, nadie se atrevería a meterse con él, hasta
que regresarste él empezó a sonreír de nuevo.
— (tos) P'Nat, ¿es muy divertido chismear sobre mí?
En este momento, el joven que había salido a trabajar con su hermano y regresó .
Todos en la escena miraron la fuente del sonido y vieron a Ae mirá ndolos con los
brazos cruzados frente a su pecho, de pie junto a él estaba su hermano, que se
reía.
—Jajaja, vamos, Ae, mi esposa tiene razó n, tienes que aceptar el hecho, cuando
Pete no estaba aquí, todos pudimos ver lo deprimido que estabas.
Dijo P'Oh y también le dio una fuerte palmada en el hombro a su hermano. Ae
solo pudo suspirar profundamente.
—Bien, tienes razó n.
¿Quién hubiera pensado que el joven, que generalmente actuaba con calma,
admitiría personalmente que estuvo deprimido en el pasado, y la persona que se
mencionó abrió los ojos ampliamente, su rostro se puso rojo al instante, pero no
por el clima cá lido. ¿Por qué... se sentía tímido?
Ae... ¡¿Olvidaste que tu familia todavía está aquí?!?! ¡Todos ellos!
—¡Jajaja, eres un adicta a las esposas!
La madre de Ae fue la que se rió en voz alta primero, respondió Ae.
—¡Lo dices como si no te agradara Pete!
Ahora Ae tenía valor de ver a los ojos de su madre. Ella confirmó .—¡Es mi nuera!
—¡É l también es mi esposa, mamá !
Ae objetó , no miró por completo a Pete, quien no sabía qué expresió n debería
usar en ese momento. En este momento, P'Nat también se le acercó y le dijo.
—Parece que Pete es la 'nuera' favorita de esta familia. Jajaja.
Su tono burló n hizo que Pete no pudiera evitar quejarse.
—P'Nat, por favor no te burles de mí.

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—No estoy bromeando, es la verdad. Créeme, a todos en esta familia les gustas
má s que a nadie.
Nat se inclinó má s cerca y dijo. Pete no sabía si debería sentirse feliz o tímido. Se
dio la vuelta y cada mano de él tomó una mano de cada niñ o. Dijo suavemente.—
El tío Pete cree que es mejor que vayamos arriba para jugar.
Después de eso, Pete, quien tomó a dos niñ os con él, parecía que estaba huyendo
de este caó tico lugar.
¿Có mo podía quedarse aquí para escucharlos discutir este vergonzoso asunto si él
era la esposa má s querida de alguien o la nuera favorita de alguien? Todo el
vecindario de esta calle probablemente ahora todos sabían que él era la esposa de
Ae ... (suspiro)...
—A... ¡tan silencioso!
Después de un día largo y ajetreado, cayó la noche y la casa también quedó en
silencio. El Sr. Intouch también se sentó en la cama exhausto. Trabajar duro
durante una semana fue mucho má s có modo en comparació n con 'pelear' con su
madre por la mano de su esposa.
—También fue divertido charlar con mamá .
Pete dijo con una sonrisa en su rostro, aunque debería ser el que má s cansado
estuviera.
Obviamente, esta persona lo llevó aquí por un tiempo, y luego esa persona lo tiró
allí por un momento. ¡¿Có mo no podía sentirse cansado?!
—No dije que no fuera divertido, pero también muy agotador. Probablemente
deberías ser tú quien má s se sintiera cansado, por eso te pregunté si estabas listo
para pasar la noche en mi casa.
Ae miró ligeramente hacia arriba, sonaba agotado. Pete le sonrió y dijo.
—Mi sentimiento de felicidad es mucho má s que el sentimiento de cansancio.
Pete se le acercó con un frasco de loció n en la mano, se sentó en la cama y le dijo a
Ae.
—Cierra los ojos, Ae.
—No tienes que hacer esto. No hará ninguna diferencia.
Aunque lo dijo, Ae cerró los ojos y dejó que su novio le aplicara crema hidratante
en la cara.
—Porque no lo hará s todos los días, por eso tengo que ayudarte a aplicarla
durante tus vacaciones.
Pete sonrió gentilmente. Sabía que su novio era el tipo de persona a la que le
importa un bledo cuidarse a sí mismo, así que hizo todo lo posible para ayudar a
la otra parte a cuidarse.
—Si no soy guapo, ¿no me amará s?
Ae abrió un ojo para mirarlo y preguntó . Pete se limitó a sonreír.
—Incluso ahora, ya te ves demasiado guapo para mí. No hago esto para hacerte
aú n má s guapo. Solo quiero que te cuides. La imagen personal es realmente
importante para el trabajo, ya sabes, y hay polvo en cualquier lugar de tu entorno
de trabajo, incluso tienes que soportar el viento y el sol, es imposible lucir guapo
en ese tipo de ambiente...

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Pete bajó la cabeza y besó la nariz de su amante, Ae agarró el hombro de Pete y
tiró a la otra parte hacia abajo.
—Es quien soy. Siempre he sido así de descuidado, pero tú ... ¿Por qué tuviste que
limpiar los platos y arruinar tus manos?
—Si mis manos se vuelven á speras, ¿me amará s menos?
La contrapregunta de Pete hizo que Ae no pudiera evitar fruncir el ceñ o.
—Yo no dije eso.
—Solo digo. Quiero ayudar a todos los miembros de tu familia. Me gusta tu
familia. Me gusta estar aquí. Me gustas, la persona que me abrazaría
voluntariamente con fuerza, incluso si no tengo el olor del perfume de Armani,
solo el olor a cuerpo recién limpio.
Pete le estaba diciendo a Ae que entre ellos, la apariencia no era importante en
absoluto.
—Está s preocupado porque yo limpio los platos, al igual que yo estoy preocupado
porque tienes que trabajar bajo un clima duro todos los días.
Los dos hombres que se aman realmente se preocupaban el uno por el otro. No
querían que la otra parte se volviera aú n má s guapo, incluso má s guapo para
presumir ante nadie. Realmente estaban hablando de corazó n acorazó n.
Así es, esta persona es la que nunca podría defraudar, la que haría cualquier cosa
para protegerlo, incluso si tuviera que sacrificar su propia vida. Este mundo es
demasiado grande, todas y cada una de las estrellas del cielo estan tan lejos unas
de otras. Solían estar muy lejos el uno del otro, como esas estrellas solitarias,
solos en la vasta Vía Lá ctea. Al final, se reunieron, iluminá ndose entre sí con su
luz tenue, pero brillante. Pasaron juntos por las cuatro estaciones: primavera,
verano, otoñ o e invierno. Pasaron todos los días ordinarios y disfrutaron cada
minuto de sus vidas. Estos ya eran suficientes. En el pasado, Pete siempre pensó
que lo mejor que le había pasado a su vida era conocerlo. Pero luego se dio cuenta
de que lo má s lindo era poder reencontrarlo después de un largo tiempo de
separació n.
Las palabras de Pete hicieron que Ae agarrara su cabeza y lo besara con fuerza.
—esta bien, tu ganas, eres una buena 'nuera'. Dame la loció n, me la aplicaré por
la mañ ana y por la noche.
Eventualmente, Ae cedió . Se inclinó má s cerca y besó el cuello blanco de Pete e
inhaló a pulmó n lleno.
—¡¡Qué olor tan encantador!!
Este ingeniero en particular murmuró , y el gerente del hotel también sonrió
gentilmente.
—Usé el mismo jabó n que tú .
—No, no es el olor a jabó n, sino la fragancia de tu cuerpo... ¿Está s listo para
ponerte la capucha roja y pasar la noche conmigo, Pete?
—¿Ah? ¿Hablas en serio?
Pete no pudo evitar exclamar. No esperaba que esas palabras de broma que Ae
dijo al mediodía fueran reales, pero cuando lo pensó ... ¿Acaso hubo una sola vez
en que Ae no le ha hablado en serio?
—Jaja...

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Una risa profunda salió de la garganta de Ae, y la gran mano se estiró para
desabrochar la ropa de Pete. Su boca decía que este momento era tiempon entre
esposos, no el momento para que la 'nuera' mostrara respeto a los mayores.
Sin embargo...
<Toc, toc, toc>
—¡Tío Ae! ¡Tío Pete! ¡¡N'Yim y N'Yam quieren dormir contigo!!
Los golpes en la puerta interrumpieron lo que estaba sucediendo en la habitació n.
El lobo hambriento que disfrutaba de su Caperucita Roja tuvo que alejar a la
presa de su boca y... suspiró profundamente.
—Só lo ingoralos.
Volvió a coger a la presa, los ojos de Pete se abrieron y empujó el hombro de la
otra persona.
—Ae, nuestra sobrina y nuestro sobrino está n llamando a la puerta.
—Vamos a ignorarlos.
—Ae ~~~
—No quiero prestarles atenció n.
—Aeeee~~~
Pete llamó el nombre de la otra persona en un tono lindo. Los golpes en la puerta
tambien se volvieron má s nsistentes, e incluso má s fuertes. Ae suspiró de nuevo y
no pudo evitar soltar una maldició n. Pete solo sonrió y empujó suavemente a la
persona de cuerpo alto, grande y dijo.
—Creo... que esto ya es lo suficientemente bueno...
<Muak ~~>
Pete besó la cara de Ae como una forma de animarlo, luego se levantó y abrió la
puerta para las dos pequeñ as bellezas. Los dos niñ os pequeñ os se apresuraron a
entrar en busca de sus tíos má s queridos, solo para escuchar a Ae decirle a N'Yim.
—N'Yim, no volveré la semana que viene.
—¿Por qué?
La niñ a preguntó en voz alta, pero su tío Ae definitivamente nunca se lo diría...
Cada vez que vuelvo... ¡¡¡Mi esposa siempre es secuestrada!!!

Especial 6
—Primero calienta durante 10 minutos, Pete.
—¿Está bien si lo hago durante 20 minutos?
—Depende de mi cliente, Jajaja. El Sr. Pitchaya es mi cliente ahora, lo que quiera,
lo sigo.
Había caído el anochecer, mucha gente pasa por este popular gimnasio después
del trabajo y antes de irse a casa van a ejercitarse un poco para mantenerse en
forma, al igual que Koon Chai Pitchaya, un joven gerente de hotel, que vene aquí
desde hace varias semanas. No solo eso, también contrató a Can como su
entrenador personal. Por lo tanto, el vínculo entre estos dos viejos amigos volvió
a ser fuerte, como en su época universitaria.
El que estaba hablando en ese momento es... el tipo bocazas, Kirakorn.
—Esperaré hasta que termines de calentar y luego comenzaré la hora de
entrenamiento.

84
—Está bien. Puedes establecer la hora en este momento.
—Está bien, mi trasero. No soy tan impaciente. Veinte minutos después,
comenzaremos oficialmente. De todos modos... ¿por qué dijiste que quieres
aumentar tu tiempo?
Incluso cuando él dijo que dejaría a su 'cliente' que calentara durante 20 minutos
antes de comenzar, este mono aú n permanecía inactivo frente a la caminadora,
parecía que no tenía absolutamente ninguna intenció n de irse y quería quedarse a
charlar. con Pete, lo que hizo que el que ya estaba corriendo en la cinta sonriera
alegremente.
—Quiero hacer ejercicio para poder unirme a Ae en sus carreras todas las
mañ anas y seguirle el ritmo, a diferencia de ahora, solo corro 15 minutos y ya no
puedo recuperar el aliento.
Pete dijo mientras se sentía avergonzado. Porque su cuerpo era un poco débil y
frá gil... No, en realidad no es cierto, era solo porque no hace ejercicio con mucha
frecuencia.
—Dios mío, no deberías compararte con él. Ai'Ae ha estado en competencias de
marató n desde que era un estudiante de segundo añ o. Es muy resistente.
Dijo Can negando con la cabeza. Entonces, de repente, recordó . Pete solía llamarlo
para pedirle algú n consejo sobre algú n asunto relacionado con lo fitness y, en
aquel momento justo después, lo contrató como su entrenador personal.
—Quiero entrenar mi cuerpo. Para que se vea mejor.
—Vamos, tu cuerpo ya está en su mejor forma, ni demasiado gordo, ni demasiado
delgado, simplemente no tienes muchos mú sculos. Siempre te has visto así.
Después de eso, Pete dio una respuesta clara.
—Al principio, estaba bastante indeciso, pero ya tengo 24 añ os. Si no empiezo a
hacer ejercicio ahora, me temo que cuando llegue a los 30, todo mi cuerpo
comenzará a degradarse. Eso me temo... Can... Solo mira a Ae... ¿Quién dijo que los
hombres tendrían barriga cervecera después de empezar a trabajar? Ae no ha
cambiado, su cuerpo se vuelve aú n má s agradable que antes.
Cantaloupe tradujo la frase de su amigo... Tenía miedo de que si engordaba, su
novio se aburriera de él. —Pero acabas de hacer ejercicio durante una semana,
por supuesto que aú n no podrá s ponerte al día con Ae— Can expresó su opinió n.
—¿Quieres probar los ejercicios para ganar mú sculos? Te hará n lucir genial.
Can se burló de él. La persona que estaba en la cinta de correr inmediatamente
negó con la cabeza.
—Asustará a Ae.
—Jajaja... No me refiero a hacer ejercicio hasta que te vuelvas extremadamente
musculoso. Me refiero a hacer ejercicio hasta que tu cuerpo se vuelva má s firme.
Te garantizo que no te veras mal. Ae no tendrá miedo. También hay otro
beneficio...
Can suavizó su voz, se acercó a los oídos de Pete...
—Durará s má s en la cama...
—Hmm...
—¿Entonces? ¿Interesado ahora?

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Después de escuchar lo que dijo Can, Pete se volvió para mirarlo, ya que se reía y
se burlaba de él en voz alta, lo que hizo que la cara de la persona, que estaba
interesada en sus palabras, se pusiera roja. Pensó en el hecho de que había
regresado a Tailandia durante bastante tiempo y no estaba ocultando con quién
estaba saliendo en ese momento. Ademá s, Can salía con su amigo también. Pete
respondió suavemente.
—Ae dura mucho tiempo, Can...
—¿Hm?
El Mono Albino se acercó de inmediato con emoció n en su rostro, era todo oídos
para má s. Pero la otra persona negó con la cabeza, expresando que no quería
continuar con esta charla en la cama, por lo que Can rá pidamente cambió de
tema.
—Uhmm... Está bien si no quieres hablar de eso. Entonces... ¿Ai'Ae todavía hace
ejercicio? Siempre estaba ocupado con el trabajo. Antes de que regresaras, rara
vez salía con nosotros. Todo lo que sabía era trabajo, trabajo, trabajo de la
mañ ana a la noche. Realmente no sé cuá ntos turnos trabajaba, pero parecía ganar
mucho. Su empresa le proporcionaba alojamiento, probablemente no necesitaba
gastar mucho en cualquier cosa... excepto para pagar el préstamo de su coche. De
todos modos, vuelvo a mi pregunta anterior, ¿todavía juega al fú tbol?
Una vez má s, Can pudo demostrar su habilidad fuera del tema a la perfecció n, lo
que hizo sonreír al que jadeaba y corría en la cinta.
—Sí... Incluso si hace frío, seguirá saliendo a jugar al fú tbol con sus compañ eros.
E... Incluso les enseñ a a los hijos de sus compañ eros de trabajo...
Pete respondió honestamente. El oyente asintió .
—Realmente es un faná tico de los deportes. Durante estos días libres, ¿también te
pidió que te unieras a correr?
—No... Ae no me preguntó ... si quería unirme a él... fui yo quien lo detuvo...
Pete jadeó . Había estado corriendo por un corto tiempo, pero su frente ya estaba
hú meda por el sudor. E incluso se propuso venir aquí a hacer ejercicio 2 o 3 veces
por semana.
—¿Quieres que reduzca la velocidad?
—Está bien. Aú n puedo manejarlo.
Can negó con la cabeza y suspiró . Para ser honesto, realmente no quería que Pete
lo contratara como su entrenador personal. Fue solo una pérdida de dinero. Pete
también podría hacer ejercicio por sí mismo. Pero tenía que admitir que poder
hablar con su viejo amigo todas las semanas así, le producía alegría.
Hablando francamente, cuando supo que Pete había regresado a Tailandia, saltó
de felicidad. Todavía puede recordar cuando se encontró con Pete de nuevo, se
sumergió en Pete y lo abrazó con tanta fuerza que incluso Ae no pudo liberarlo de
Pete.
—Muy bien, no má s charlas. Primero haz tu rutina de calentamiento. Regresaré
en 20 minutos.
Finalmente Can deja a su amigo solo para hacer su trabajo. Realmente se estaba
tomando en serio su responsabilidad como entrenador personal. ¡tenía que
asegurarse de manejar el cuerpo de Pete lo mejor que pudiera!

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Debo mostrarle a Ai'Ae que su novio no se equivocó cuando me eligió como su
entrenador personal. Pensó en voz baja...
Me aseguraré de que Pete pueda durar más en la cama para satisfacerte. No podrás
huir de sus manos, Ai'Ae. ¡Muaajajajajajaja!
Este pensamiento de Can era extrañ amente confiado, pero muy divertido.
—¡Esto sabe tan bien!
—Má s despacio, Can.
—Tengo tanta hambre. He estado sudando desde la mañ ana.
¡Solo olvídate de ese pensamiento anterior! Porque de momento, la persona que
acababa de decir que ayudaría a su amigo a conseguir un buen cuerpo para
satisfacer a su amante, solo se enfocaba en comer para llenar su estó mago sin
fondo.
¿Calorías? A él nunca le ha importado eso.
¿Gordo? Deja que ese pensamiento se vaya solo.
Si ya tiene una buena comida frente a él, ¿por qué tendría que preocuparse por
esas cosas?
Como resultado, Can empujó la bolsa en la que había un logo del famoso gimnasio
en el costado y continuamente empezó a masticar, olvidá ndose de todo lo demá s.
Esta escena hizo que Pete de repente tuviera la idea de burlarse un poco de su
amigo.
—¿Tin se ríe de ti cuando te ve comiendo así?
—É l está acostumbrado. Tú también deberías comer. Si no quieres desarrollar
mú sculo, entonces no necesitas comer solo proteínas. De lo contrario, má s tarde,
cuando te ejercites, perderá s tu fuerza bastante rá pido.
Esto es algo que debería decir un entrenador personal. Pete solo sonrió y comió la
misma cantidad de comida que normalmente comía. El joven y apuesto maestro
estaba comiendo y mirando a la persona del lado opuesto. Can no cambió mucho
en comparació n con la época en que todavía era estudiante de la universidad,
excepto por una pequeñ a cosa... Cada vez que pasaba uno de sus compañ eros de
trabajo, lo llamaba 'Pete' en lugar de 'Ai'Pete. 'y cambió el pronombre' Gu 'por
algo má s educado. Incluso si Can usara el mismo pronombre que antes, a Pete no
le importaría en absoluto. Pero quizá s, Can se sintió cauteloso al hacerlo frente a
sus compañ eros, después de todo, no era muy bueno llamar a su cliente 'Mung'.
—Escuché que Tin vendría aquí para hacer ejercicio también.
—Viene aquí todas las mañ anas para declarar su propiedad.
—¿Declarar su propiedad?
Pete frunció el ceñ o confundido. Al que le preguntaron rió a carcajadas. Parecía
que no podía importarle menos el increíble nivel de celos de su novio.
—Uhm... Declarando su propiedad... Viene a decirle a todos mis colegas que estoy
secuestrado.
—¿Hm?
Pete se sorprendió un poco. Miró a la persona que sostenía un muslo de pollo en
el lado opuesto, solo para ver que la otra parte asintió para confirmar que todo lo
que dijo era verdad.
—Uhm, es verdad. ¿Ai'Ae nunca ha hecho eso antes?

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—No... Ae nunca ha hecho algo así antes...
Pete negó con la cabeza. Aunque Ae iba al hotel a verlo de vez en cuando, no haría
nada para que todos supieran sobre su relació n. Si alguien lo sabía, era solo
porque veían a Ae con regularidad. Y también porque Ae tuvo el privilegio de ir
directamente a su oficina sin tener que pedir permiso a la recepcionista. Ae nunca
había dicho nada sobre su relació n con nadie, pero Pete sabía que era porque su
novio no quería que otras personas lo miraran con discriminació n.
Incluso si a Pete ya no le importaba que la gente supiera que es gay, tampoco
sentía la necesidad de decírselo a todo el mundo. Mientras él mismo, Ae y sus
familias pudieran aceptarlos, ya era suficiente. Tin, por otro lado, no estaba
pensando lo mismo que ellos. Si encontraba al que amaba, tenía que hacerle saber
a todos que esa persona era suya, nadie podía tocarlo, nadie podía quererlo.
—Es la verdad. Ai'Tin incluso les dijo a mis colegas que él es mi novio. Me besó
frente a todos en el gimnasio. Quiere convertirme en su posesió n. Se pone celoso
en cualquier lugar, en cualquier momento. Tampoco me permite recibir regalos
de otras personas. El mes pasado, fuimos a Australia. ¿Puedes creerlo? Solo
porque comí con mi cliente sin avisarle, él se enojó tanto y quiso hacer un viaje de
negocios al extranjero. Tuve que correr al aeropuerto para rogarle que se
quedara.
—¿Incluso hasta ese punto?
Cuanto má s se entera Pete de ello, má s divertido se puso. Luego recordó al Tin del
pasado... No.. Incluso si ve a Tin ahora, aú n le parece que es del tipo que no
muestra sus sentimientos fá cilmente, frío y tranquilo. Pero basado en lo que
acababa de escuchar... Tin no parecía tan tranquilo como pensaba que era.
—Casi me pongo a llorar en el aeropuerto (es la verdad). Pero no estaba enojado
con él. Sé que se puso celoso porque me ama.
Can no pensó demasiado, le contó todo a Pete. Después de todo, la persona frente
a él, fue testigo de su historia de amor desde el principio.
—Tin realmente ama mucho a Can, te ha amado desde que ustedes dos estaban
en la universidad.
—Por supuesto.
Cuando Pete lo mencionó , Can inmediatamente se sintió muy orgulloso, porque
sabía demasiado bien cuá nto lo amaba y apreciaba Tin.
—A veces... desearía poder tener tanta confianza como Can..
—No está s seguro de que Ai'Ae te ama. Vamos, ¿có mo puedes tener ese tipo de
pensamiento? É l te ama mucho. Cuando no estabas aquí, parecía muerto. Durante
ese tiempo, cambió demasiado. Pero tan pronto como regresaste, se volvió una
persona completamente diferente, y...
—No, no, Can. No es que no esté seguro de que Ae me ame.
Pete negó rá pidamente con la cabeza. Al hablar del amor que Ae le dedicó , estaba
seguro de que no era menos que cualquier otra cosa.
—Lo que quise decir es que no tenía la confianza suficiente para contarle a otras
personas sobre nosotros.
—Quiere decir...

88
Hablando de este modo, Can ya no andaba con rodeos y le preguntó directamente.
Antes de que pudiera soltar la pregunta, la persona que no tenía a nadie con
quien hablar sobre este tema ya se lo había dicho. Después de todo, Can ya sabía
sobre él y Ae, preferiría decírselo que guardarlo en su corazó n y sentirse tan
molesto por eso.
—Can, el punto es... sé que cuando Ae está trabajando, tiende a mantener una
buena relació n con sus colegas. Y aunque acaba de cambiar de trabajo, todavía
está en Rayong. Hay una compañ era de su trabajo anterior que también es
ingeniera y quiere transferirse a la misma empresa que él. Anoche, vi un
comentario que ella publicó en su muro de Facebook, decía: 'Se acerca mi
cumpleañ os. P'. Guapo, no olvides llevarme a comer kha ~~ '... No sé có mo decirle
que Ae ya tiene amante.
—Aishh, deberías responderle, solo dile "Ae no es libre. Tiene que quedarse a mi
lado, no tiene tiempo para nadie má s".
Can inmediatamente compuso un comentario dulce, pero lleno de posesividad
para su amigo.
Después de escucharlo, Pete solo pudo suspirar.
—Tengo muchas ganas de hacerlo, pero tengo miedo. No es bueno que Ae lo vea.
Pete dijo en un tono triste. É l vio la foto de esta compañ era de trabajo antes,
cuando todavía estaba en Inglaterra.
—¿Dó nde? Muéstrame. Quiero ver có mo se ve. Al menos, debes hacer tu mejor
esfuerzo.
Can formó un puñ o con la mano y lo levantó para animar a su amigo. Pete sacó su
teléfono, inició sesió n en el Facebook de Ae para que Can pudiera ver ese
mensaje, pero...
(Pinky Pinku: Oh wow, P... Le pediste a P'Ae que te llevara a comer, pero... ¿ya le
has preguntado a su novio, P'Pete?)
Este comentario má s reciente hizo que Pete frunciera el ceñ o. Trató de recordar
quién era esta persona, luego gradualmente abrió ampliamente los ojos...
¡Chompoo!
Pete rá pidamente hizo clic en el perfil de Pinky Pinku para comprobarlo. Tal
como pensaba, era esa encantadora hermanita. El apuesto joven maestro no supo
có mo reaccionar, por lo que solo le dio su teléfono a la persona del lado opuesto.
—Oye, es N'Chompoo, publicó un comentario. ¿Sabes, Pete? Durante el ú ltimo añ o
en la universidad, N'Chompoo fue el escudo de Ai'Ae. Quienquiera que intentara
coquetear con él, la usaría como excusa, y ella siempre estaba dispuesta a
ayudarlo también. Pero no pienses demasiado, no pasó nada entre Ai'Ae y Nong.
Son ú nicamente hermano y hermana.
Can explicó rá pidamente, ya que todavía recordaba vívidamente que sus dos
amigos solían pelear solo por esta Nong. Pete solo sonrió y asintió .
Pete sabía que Ae y Chompoo solían tener citas, pero solo fue por muy poco
tiempo. Ae dijo que él y N'Chompoo nunca habían tenido una cita verdadera. Solo
la invitó a comer una vez y luego rompió con ella. Chompoo dijo que eso era
suficiente para ella. porque sabía que... Ae nunca se había olvidado de Pete.

89
Cuando Pete pensó en el hecho de que solía ponerse celoso de esta Nong, sintió
que estaba siendo absolutamente ridículo.
—De todos modos, ¿ya lo sabías? N'Chompoo está saliendo con T.
—¿Hm?
—Parece que realmente no lo sabes. Ai'Ae no te lo dijo, ¿verdad? Jaja, todavía es
un tipo al que no le gusta meter la nariz en los asuntos de otras personas. Uhm,
N'Chompoo está saliendo con T, una senior en su universidad. Esas dos son má s
bien tortolitas. Sospecho que después de salir con Ae, ya no quiso salir con otros
chicos.
Después de escuchar lo que dijo Can, un sentimiento que estaba enterrado en lo
profundo del corazó n de Pete desapareció repentinamente, al mismo tiempo, se
sintió un poco culpable hacia Chompoo.
—Wow... ¡Ae dejó un comentario!
Can gritó sorprendido, miró la pantalla del teléfono y se rió a carcajadas.
—Jajajaja, Ai'Ae siempre será Ai'Ae. No te atreves a decirlo, pero él si se atreve.
Can se rió y le mostró a Pete el teléfono al mismo tiempo para dejarle ver un
comentario corto y directo debajo del comentario de Chompoo.
(Ae Intouch: Tienes razó n. Primero tengo que pedirle permiso a mi novio).
—¿Ae realmente hizo eso?— Koon Chai Pitchaya murmuró suavemente. Se cubrió
la cara con una mano. Quién hubiera pensado que su novio diría algo así.
¿Ae sabrá... que... el comentario que acaba de publicar en Facebook... da la
impresión de que... al parecer es controlado por su 'esposa'...
—No hay necesidad de pensar má s en esto, Ai'Ae ya ha llegado a este punto. Si
hay otra persona actuando así de nuevo, solo diles que Ai'Ae es tuyo.
Can usa su mano cubierta de grasa para palmear el hombro de Pete. Luego volvió
a comer, haciendo que Pete no supiera qué decir.
Justo en ese momento...
<Brwzzzzzz>
—Espera un minuto, Ai'Tin está llamando... Oye, ¿quieres saber cuan celoso que
es Tin?
Can sacó el mó vil y miró el nombre en la pantalla. Entrecerró los ojos mientras
sonreía. Pete ni siquiera tuvo la oportunidad de responder todavía y ya había
presionado el botó n de contestar.
—Tin, Tin, Tin, videollamada a través de Line ahora.
Luego Can cuelga inmediatamente luego de aquella petició n.
Después de un momento, el tono de llamada volvió a llegar desde el celular.
—¿Hola, qué pasa?
Can dijo en voz alta, movió el muslo de pollo hacia arriba y hacia abajo frente al
hombre, que vestía un traje elegante y estaba sentado en su silla de oficina de
cuero, a través de la pantalla del dispositivo.
—¿Dó nde está s?
La persona a la que se le preguntó sonrió en secreto.
—Estoy cenando con un cliente.
—¡¿¡¿Qué dijiste?!?!

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La persona del otro lado rá pidamente frunció el ceñ o. Preguntó en un tono má s
alto y luego dijo mientras enfatizaba.
—¿Olvidaste la ú ltima lecció n?
—Vamos, cá lmate, ¿quieres? Ai'Tin a ~~~ Ai'Tin, cá lmate, déjame mostrarte mi
cliente.
Tan pronto como vio que la cara de su novio se puso sombría, Kirakorn
inmediatamente giró el celular 180 grados para que Tin pudiera ver la cara de su
'cliente'. Cuando Pete vio que el mó vil se volvía hacia él, sonrió y agitó la mano
para saludar.
—¿Có mo está s, Tin?
—¿Pete?
—Uhm, soy yo. Estoy cenando con Can.
Pete dijo rá pidamente y ajustó su expresió n de sorpresa.
—...¿Có mo es que se encontraron?
Cuando Pete estaba a punto de contestar, Can giró el teléfono y formó una sonrisa
brillante, como si no tuviera miedo al ver el rostro disgustado de su novio.
—Ai'Pete viene a hacer ejercicio. É l es mi cliente. Ya te lo dije, ¿no? ¡Estoy
cenando con él ahora, y aprovechamos esta oportunidad para hablar sobre ti y
Ai'Ae felizmente!!
Una vez má s, Can abrió la boca y habló a pleno rendimiento, lo que hizo suspirar a
la persona del otro lado del teléfono. Luego lentamente formó una sonrisa.
—¿Entonces ustedes unen sus fuerzas para hablar a espaldas de sus novios?
—Piensa lo que quieras. Está bien, no estés celoso y no te pongas de mal humor.
Kiss, kiss na, muaaaaack~~~
El rostro 'digno de adorar' de Can hizo que el joven y frío maestro negara con la
cabeza en señ al de derrota.
—¿Can vas a casa solo? ¿O quieres que te recoja?
—No es necesario, no es necesario. Puedo ir solo. Te llamaré cuando esté en casa.
Parece que todavía tienes mucho trabajo sin terminar. ¡fighting! Continuaré con
mi comida.
Can cuelga. Tenía la intenció n de pasar por la compañ ía de su novio para
encontrarse con él má s tarde.Pero todavía debe tener mucho trabajo del que debe
ocuparse. Si no, ¿por qué tendría que vestirse tan bien así, solo para estar sentado
en la oficina?
—¿Ves? Realmente le gusta ponerse celoso.
Can miró a la persona del lado opuesto como si quisiera presumir de su logro.
—Al poder ver a Tin así, siento que acabo de ganar el premio mayor...
<"It would be love" empieza a sonar (llamada)>
Pete no pudo terminar su propia oració n y de repente sonó el teléfono.
Rá pidamente contestó .
—Krab, Ae.
—Jaja, ni siquiera has terminado de hablar, Ai'Ae es tan pegajoso...
Can se rió y bromeó con Pete.
Pete sonrió después de escuchar lo que dijo.
—¿Dó nde está s?

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Estas palabras suenan excepcionalmente familiares... Ae...
Pete pensó ... Dos hombres que se consideraban enemigos entre sí, de alguna
manera la forma en que procesaban sus pensamientos es extrañ amente idéntica.
Realmente increíble.
—Estoy cenando con un amigo.
—¿Qué amigo?
Pete se rió a carcajadas, pero no quería burlarse demasiado de su novio.
—Es Can. ¿Quieres hablar con él?
—¿Ai'Can? No es necesario. ¿Vas al gimnasio hoy?.... Mmm, solo llamo para decir
que no hay nada entre esa chica y yo en Facebook. No voy a salir a comer con ella,
pero voy a enviarle un mensaje de 'feliz cumpleañ os'. Te llamo para decirte esto.
Esas palabras de Ae hicieron que la pequeñ a semilla de felicidad en el corazó n de
Pete brotara, creciera, floreciera y dara frutos rá pidamente.
Si Ae ya ha sido así de educado, ¿por qué debo preocuparme?
Para ser honesto, Ae realmente no tenía que decírselo, pero aú n así eligió decirle
la verdad a su novio para que se sintiera a gusto.
—Está bien, gracias por avisarme. Te llamaré cuando llegue a casa.
—En realidad... hay otra cosa que necesito decirte. Nong Yim estaba llorando y
rogando por pasar un tiempo contigo, de todos modos, hablaré contigo má s
tarde... No sigas escuchando a Ai'Estú pido Can parloteando, hará sangrar tus
oídos.
Ae colgó después de eso. Pete sonrió , se guardó el celular en el bolsillo y miró
hacia arriba para encontrarse con la mirada burlona de la persona que tenía en
frente.
—Si Ai'Pond estuviera aquí, sería muy divertido. Definitivamente estaría má s que
feliz de unirse a cosas como esta ... De todos modos, comamos juntos la pró xima
vez. Me gusta.
—¿Te gusta?
Pete enarcó las cejas y miró a la persona del lado opuesto, que estaba riendo.
—Uhm, me gusta hablar a espaldas de Ai'Tin. Especialmente contigo, es má s
divertido.
Esta breve respuesta hizo que Pete se riera felizmente. Eso significaba que a
partir de ahora, cada noche de fin de semana, podría charlar con Can.
A veces, era difícil contarle a otras personas sobre su vida amorosa, por lo que
poder contá rselo a alguien que pudiera entenderlo fue lo mejor. Ademá s, ambos
tienen novios.
Y así, los dos amigos pasaron toda la noche para... 'hablar a espaldas' de sus
respectivos amantes...

Especial 7
—P'Can, ¿sabes qué día es en los pró ximos tres días?
—Veamos, hoy es martes, en tres días má s... es viernes.
—¡¡¡Tonto!!!
Hace una hora, Kirakorn llegó a casa. En menos de diez minutos han resuelto
limpiar los platos, luego, mientras Can con intenciones de ir descansar su cuerpo

92
exhausto e irse a bañ ar, su hermana de repente se apresuró a preguntar qué día
es en los pró ximos tres días. La persona cansada no pudo pensar en nada mejor y
simplemente dio su respuesta, pero el resultado fue... Su hermana queriendo
rociarle agua en la cara después de escucharlo.
—Hoy es martes, tres días má s son seis. El sexto dia ¿Sá bado verdad?— Can dice
mientras su hermana mantiene la boca abierta en señ al de desaprobació n ante la
insistencia. Después de escuchar eso, Lemon rodó sus ojos y trató de calmarse,
parecía como si quisiera abofetear a su hermano para despertarlo.
Muchas veces Lay encuentra a Gucci incluso má s inteligente que su hermano.
—Solo está s burlá ndote de mí, ¿no es así?
Can estaba cansado, había regresado del trabajo y pudo haber dejado a su
hermana y leer có mics tranquilo. Pero simplemente persigue a Lay a su
habitació n y se recuesta en la cama mientras sus ojos aú n está n fijos en el comic
que lleva en las manos. Aquel acto del hermano hace que Lemon apriete las cejas.
—Te estoy preguntando seriamente ahora, cuando naciste, ¿nuestros padres se
olvidaron de darte algo llamado cerebro?
—Oiiiii, no quiero jugar... Si quieres algo, dilo claro, no me hagas adivinar, mi
cerebro es lento, ¿sabes?—Can deja el libro a un lado, admite sin dudar que no
entiende lo que dice su hermana. Después de escuchar eso, Lemon se sentó a
regañ adientes en la cama, luego tomó el libro en las manos de su hermano y
preguntó molesta.
—P'Can ... ¿Qué día es en tres días?
—Sa......
—¡Si respondes sá bado, te romperé ese libro en mil pedazos!—Lemon grita
agresivamente, lista para romper el libro en dos. Esto hace que Can ponga a
funcionar rá pidamente su cerebro pensando...
¿Entonces es viernes?
El rostro confundido del hermano provocó que la hermana volviera a hacer la
pregunta con un suspiro.
Por mucho que quisiera que adivine, no creía que fuera posible.
Entonces, después de todo, Lemon tuvo que decir la respuesta ella misma.
—P'Can, ¡¡Es el cumpleañ os de tu novio!!
¡¡¡SHYIIIIIAA!!!
La persona que estaba acostada en la cama se sienta de inmediato, rá pidamente
saca el celular para abrir el calendario y verlo, luego... Enfrenta la terrible
situació n.
—¡¡¡Por qué tuve que nacer tan estú pido!!! — Can llorar y con la misma fuerza,
coloca sus brazos alrededor del cuello de su hermana.
Lemon suspira de nuevo.
—Estas acabado...
—¡Lay! Laaaaaay, debes ayudarme, ayú dameee!— Después de eso, este hermano
olvidadizo inmediatamente agarró a su hermana y la sacudió tan furrte que
parecía como si el cielo y la tierra se sacudieran al mismo tiempo.

93
—¡Ah, no me sacudas así!, Lay está cansada de tener un hermano estú pido como
tú —Lemon ajustó sus hombros para acomodarse la ropa, luego sus ojos
comenzaron a brillar, prepará ndose para comenzar... el sermó n.
—De verdad que no entiendo ¿en qué punto se habrá fijado realmente P'Tin?
enserio ¿quieres dejar que tu hermana te recuerde el cumpleañ os de tu amante
hasta la hora de tu muerte? ¿Crees que siempre podré hacer algo? Sabes... P'Tin
está loco por ti. Por lo tanto, el cumpleañ os de tu novio debe siempre estar
presente en tu cabeza, si no puedes recordarlo, pon una nota en tu celular, ¡así no
agobiará s a tu hermana! —Cuando Lemon habla de esta manera , el oyente
siempre asiente obedientemente con una sonrisa.
Escucha a tu hermana, ella siempre tiene razón.
—P'Tin no solo te llevó a comer a un restaurante de lujo, sino que también te dio
obsequios tan caros que una vez que viste el precio casi te dejan ciego, también te
dio flores, que por cierto olvidaste y dejaste que se marchitaran. En resumen,
P'Tin siempre está tratando de crear una atmó sfera romá ntica para ti, pero tus
respuestas siempre son '¿Por qué me dices eso?' o 'no necesitas hacer ese tipo de
cosas aburridas má s '... no sabes cuá nto hace por ti, ¿có mo puedes decir que es
aburrido? ¡Incluso un extrañ o viendo lo que haces no podría soportarlo!
Lemon dio un largo respiro.
Después de escuchar eso, Can se sentó inmediatamente en el suelo, luego levantó
la cara y puso ojos de cachorro.
—Lay... ayú dame. Si no me ayudas, Tin se enojará . ¿Quieres ver a tu hermano
pelear con su amante?
Al ver el arrepentimiento de su hermano, la consejera amorosa Lemon se sentó
con las piernas cruzadas frente a Can y sonrió .
—Si Lay te ayuda, ¿estarías de acuerdo en hacer todo lo que diga Lay?
—¡Estoy acuerdo!—Can asiente de inmediato sin pensar. No tiene miedo de la ira
de Tin, en realidad no quiere verlo herido porque su amante olvidó su
cumpleañ os.
—Ok, primero, P'Can debe llevar a P'Tin a comer en un restaurante de lujo...
—¿Acaso no sabes cuá nto cuesta comer allí? Solo una comida costará má s de la
mitad de mi salario de un mes. ¡De ninguna maldita manera! —Kirakorn
inmediatamente negó con la cabeza, pensar en la factura a pagar lo enloquecería.
Después de eso, se encogió de hombros y miró a su hermana.
—Entonces regalos...
—Oh, eso es má s razonable.
—Pero no olvides que es Tin Metthanan, definitivamente tienes que comprar un
regalo que se adapte a su condició n y estatus, ¿sabes?—Escucha su consejo
apretando las cejas.
—Como...
—Deben ser cosas de uso exclusivo para P', como una bufanda, un reloj de marca
como los que él ya usa, un perfume o incluso una pluma estilográ fica.
—¡Está s loca!—Al escuchar las palabras de la hermana, Can inmediatamente
abrió los ojos, y sus manos temblaron de repente.
— Sabes que es lo mejor que se puede hacer, ¿no?

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—Incluso si fuera solo una pluma estilográ fica de esas que usa, también me
costará má s de la mitad de mi salario de un mes. ¡Casi decenas de millones, no sé
si está n mezcladas con oro o algo así!—. Can negó con la cabeza violentamente.
Por lo general, no prestaba especial atenció n a las pertenencias de su amante,
pero debido a que ha estado con él durante mucho tiempo, naturalmente sabe
qué perfume usa, qué reloj (tenía al menos diez relojes distintos y caros que
combinaba con cada traje que usa), incluso la pluma estilográ fica también...
—Lay, quieres que me muera de hambre, ¿verdad?
—¡Ehhhhhhhhh!
Lemon cruza dos dedos detrá s de su espalda. En realidad, esta hermana también
sabe que no necesariamente debe comprar algo caro, pero la idea no le parece
mala, y Honestamente ver a su hermano un poco estresado le parece interesante.
—No puedo pagarlo.
—Ok, entonces solo hay una ú ltima forma... Espera un minuto—Terminado,
Lemon regresó corriendo a su habitació n sosteniendo un có mic.—Mira esto.—
Aunque es difícil de entender, Can toma el libro que le pasó su hermana, y luego
lo ve... En la imagen se puede ver a dos chicos abrazá ndose con fuerza.
—oh.. oh... D... esto es...
Cuando vio la vívida imagen en la historiera, Can jadeó hasta el punto en que su
barbilla casi cayó al suelo y Lemon rió con entusiasmo.
—Esta es la tercera forma. Si no tienes dinero, renuncia a tu cuerpo.
—Pero este hombre solo está usando un delantal.
El hermano se mantenía gritando, mostrando una y otra vez la imagen de un
personaje masculino que vestía solo un delantal en la habitació n, con el siguiente
diá logoo...
"¿Quieres darte un bañ o, cenar... o comerme?"
—¡¡¡DIOS MIO!!! No puedo decir eso!!!
La negativa de Can hace que Lemon sonriera aú n má s feliz, luego tomó el libro en
las manos de su hermano y dijo casualmente.
—P'Can, Lay solo puede pensar en tres formas para elegir. Primero, lleva a P Tin a
comer en un restaurante elegante, segundo, comprar un regalo digno del estatus
de Tin Metthanan; tercero: delantal, desnudo, luego saltas a la cama .—Lemon
dijo con las manos en alto. Aunque Can puede oírla, su rostro está tan blanco
como si hubiera muerto.
—¿Por qué hay tan pocas opciones?
—Es todo, ya te di tres opciones. Así que, nada má s. Lay solo pensó en tres
formas. Si aú n amas a P'Tin, y quieres hacer algo para el cumpleañ os de tu novio,
elige una forma. Solo puedo ayudar hasta aquí.—Terminado, Lemon se alejó de la
habitació n de su hermano, entonces... Sus ojos brillaron con malicia al recordar la
reciente conversació n.
Al saber su estado, no es tan difícil adivinar qué elegirá . Está cansada de cuidarlo,
así que sacrificar a su hermano para divertirse un poco, para ella está bien... Y
P'Tin también estará felíz.
Si tiene éxito, definitivamente P'Tin no lo olvidará en su vida.

95
Para el joven maestro Tin Metthanan, su cumpleañ os no significa nada especial.
Desde que era un niñ o, cada cumpleañ os tenía que celebrarlo junto a su hermano,
debido a que sus padres siempre estaban ocupados con el trabajo sin siquiera
preocuparse. Pero desde que supo del verdadero rostro de su hermano, los
recuerdos de algú n cumpleañ os también se borraron. A partir de entonces, fue un
día normal como cualquier otro.
Hasta que... conoció a Can.
No... Can no es como un amante meticuloso que haría algo para sorprenderlo,
ademá s no le daría un regalo de cumpleañ os, incluso su primer cumpleañ os
después de que empezaron a salir Can lo olvidó .
Pero, pensá ndolo bien.. Esos pequeñ os momentos le hacen sonreír, especialmente
cuando recordó su cumpleañ os el añ o pasado, la sonrisa en este momento se
volvió aú n má s intensa.
—Pastel de cumpleañ os... Espera, pastel de cumpleañ os... ¡¡¡Dó nde compro un
pastel de cumpleañ os!!! ¡¡dó nde!! ¡¡¡La panadería!!!
Ese día, él y Can fueron juntos al cine, pero no le dijo a Can que era su
cumpleañ os, ni dio ningú n indicio. Eran casi las nueve de la noche, cuando
estaban a punto de salir del cine le dijo a Can.
—Gracias por pasar mi cumpleañ os conmigo.
¡Eso fue todo!
Can inmediatamente se volvió loco. Corrió al centro comercial fuera del cine
gritando muy fuerte, tirando de él apresuradamente de un lado a otro para
encontrar una tienda que vendiera helados. Por supuesto, las panaderías estaban
definitivamente cerradas, pero Can no se dio por vencido, corrió y corrió para
finalmente encontrar una tienda.
Vio una pequeñ a panadería a lo largo del otro camino que se estaba preparando
para cerrar, Can se apresuró a encontrar al dueñ o y comenzó a explicar con
rapidez...
—P', por favor véndeme, hoy es el cumpleañ os de mi novio, pero se me olvidó , un
pastel pequeñ o, solo necesito un pastel, ¡te lo ruego!
La sú plica de Can hace que el joven maestro, parado junto al coche, niegue con la
cabeza. Aunque Can no podía pagarlo... Increíblemente, trajo un pequeñ o pastel
de crema con una vela de regreso. El tipo que sostenía el pastel de crema que no
es fá cil de conseguir a esas horas de la noche se le acercó , abrió la boca y dijo...
—¡Feliz cumpleañ os, gracias por nacer hoy, gracias por dejar que nos
conozcamos!—Tin se sintió cá lido, y solo río sin má s.
Para Tin, solo unas pocas frases son suficientes para hacer que su corazó n sea
como una explosió n de fuegos artificiales brillantes como en el nuevo añ o. En este
momento, mirando a la persona opuesta, incluso si su novio olvidó su
cumpleañ os, solo puede pensar en una cosa: Absolutamente tener que sostener
la mano de Can por el resto de su vida.
A partir de entonces, su cumpleañ os comenzó a cobrar significado. Ese día... Abrió
los ojos a la vida, aunque pasaron muchos añ os, finalmente encontró a su razó n, a
esa razó n.. la misma que también olvidó su cumpleañ os.

96
Pensando en ello, Tin negó levemente con la cabeza. Aunque Can sea olvidadizo,
afortunadamente todos los añ os tiene una hermana para recordá rselo. Si Can le
prepara algo para él (aunque la mayoría sean ideas de Lemon, está bien),
entonces sea lo que sea, definitivamente se sentirá muy feliz.
El añ o pasado, Can quiso hacer una línea de flores hasta su apartamento, pero
probablemente fue porque Lemon no especificó lo que debía hacer, o su hermano
simplemente tiene cerebro de semillas de meló n, entonces... Otras personas
usarían solo pétalos para esparcirlos y formar el camino, pero Can es lo opuesto,
usó los capullos enteros.
El añ o anterior, Can hizo un círculo de velas perfumadas en su bloque de
apartamentos, lo que provocó que el humo encendiera la alarma de incendios
perturbando a todo el edificio. Luego, un añ o antes de eso, Can y Phu, su sobrino,
le cantaron el feliz cumpleañ os juntos, pero Can olvidó que Phu quería ser el que
dirija, lo que provocó que bebé Phu se enojara y rompiera lo que se preparó con
cuidado, Maldita sea, Can casi corre para matar a este ú nico nieto.
¿Lo ven?, si cada cumpleañ os es tan caó tico como esos, definitivamente no los
olvidará .
Entonces, este añ o, las expectativas de Tin son un poco...
Ya quiero saber qué va a pasar esta vez.
Pensó y luego puso sus manos sobre la pila de papeles apilados como una
montañ a sobre la mesa. Actualmente, está a cargo de la cooperació n
internacional. Su padre quiere que sea gerente, pero debido a que la empresa
nunca ha invertido capital en el exterior, él tiene que prepararse para llegar al
mercado del Sudeste Asiá tico, por lo que algunas personas estará n a cargo de esta
categoría, durante este tiempo las obras se está n amontonando. Pero, hoy...
Quizá s tenga que irse a casa un poco má s rá pido.
... ¿A qué hora vuelves?...
El hecho de que su amante le enviara ese mensaje le hizo querer volver
rá pidamente a casa, no a la villa Metthanan, sino al apartamento de lujo que
recibió como regalo cuando se graduó .
¿Este año preparará flores?
Pensando un poco, Tin estalló en carcajadas, empacó rá pidamente sus cosas,
luego condujo a casa, pero de repente...
...escúchame, no te apresures, dame otra hora...
El contenido del mensaje le hace saber a Tin que este añ o... Su amante
definitivamente quiere sorprenderlo con algo. Así que caminó rá pidamente a la
habitació n, abrió la puerta y luego entró .
—¿Qué es ese olor?—Tin se llevó la mano a la nariz. En este punto, la persona en
la habitació n debe haberlo escuchado, y lo sabe porque gritó rá pidamente desde
adentro.
!!!!!!
—¡Dios, te dije que no te dieras prisa!
Lo que hace que Tin abra mucho los ojos es... Can de repente salta a la puerta para
darle la bienvenida.
¿Tendrá algún trastorno?

97
El joven maestro Tin Metthanan se quedó en silencio, sus ojos miraban al hombre
opuesto. Tenía el cabello enredado, su rostro desgarrado, con expresió n de
miedo, usando un delantal.
Sí, ahora nuestro Cantaloupe lleva un delantal rojo, con un corazó n blanco y una
flor impresa en la parte delantera del pecho, el largo del delantal era suficiente
para ocultar el á rea sensible debajo. Tin usó ojos agudos para trazar una línea de
arriba a abajo, desde los hombros suaves hasta los mú sculos de las pantorrillas,
causá ndole un temor inquietante a su pareja.
—Oye, no mires, estoy avergonzado—La mirada del contrario hace que las manos
avergonzadas de Can se abrazen para cubrirse. Un poco indeciso, Tin no sabe si
preguntar por el delantal o no, pero finalmente abre la boca para mencionar otro
problema.
—¿Qué es ese olor?
—¡Estoy muerto, la cena!— El hombre que acaba de decir que está avergonzado
grita de repente, corre de regreso a la cocina, dejando a Tin parado allí rodando
los ojos hacia la pequeñ a sombra del otro... En este punto, descubrió que excepto
por el delantal, Su amante no estaba usando absolutamente nada, dejando al
descubierto una espalda blanca y sus nalgas redondas.. así tan inocentemente
corriendo a la cocina.
El paisaje detrá s del delantal, en realidad... es... Bastante bonito.
Mientras pensaba, se quitó el chaleco, puso los documentos sobre la mesa, siguió
al amante hasta la cocina y luego vio... Un campo de batalla.
—Mi madre y Lay dijeron que era simple, ¿qué es simple? ¿En qué se envuelve
esto? ¡No hay nada tan fá cil como se ve en los comerciales!— La cocina que antes
estaba limpia y ordenada, ahora está sucia por todas partes, la comida esparcida
por todos lados. En la cocina hay dos ollas, en un lado una olla hirviendo agua con
objetos azules flotando hacia arriba, parece no comestible; en el otro lado de la
olla había algo quemado de color amarillo seco, quizá s adivinando vagamente
parecía era un huevo frito.
Al ver esta escena, Tin levantó la mano y tomó el hombro de su amante...
—¡¿Por qué soy tan estú pido?! Quería hacerte una sorpresa para tu cumpleañ os,
pero al final, lo arruiné todo... ¿Can, eres un saboteador? ¡¡¡Aaaaahhh qué es
esto!!!
En este momento, Tin se encuentra con las manos hacia abajo, mirando al otro
tipo deprimido con los hombros hacia abajo como si aceptará la derrota
sorpresivamente y fracasara.
—¿Quién dijo que lo arruinaste todo?— Tin levantó ambos brazos para alcanzar
a Can por detrá s. Este ú ltimo era como un Pequeñ o bebé jadeando.
—Mira, esto es negro como el carbó n. Si te lo comes, es probable que el
cumpleañ os de este añ o lo celebres en el hospital.
—No necesito nada de esto... sino...— Su dedo se adentró alrededor del delantal,
tirando suavemente hacia abajo. Esta acció n está estremeciendo el alma de Can,
en este momento recuerda la forma y la postura de su presente.
—No es lo que piensas...

98
——¿No lo que pienso?—Le preguntó a su amante, entrecerrando los ojos, por lo
general es un descarado pero ¿qué le sucede ahora?.... Todo su cuerpo se ruboriza
como si lo hubieran hervido al fuego.
—Um... No, aunque al principio parece lo que piensas, pero no es así. No quería
vestirme así, solo no sabía qué regalo de cumpleañ os darte. Entonces Lay me dio
la idea de usar este delantal tonto y yo... —Can habló tan rá pido como si estuviera
disparando un arma, provocando que la persona contraria que escuchaba las
palabras pierda el control. Aun así, a Tin no le importó demasiado, tiró
apresuradamente a su amante vestido con ropa provocativa empujá ndolo a la
mesa del comedor en la cocina, luego bajó la voz.
—Eso significa, que eres mi regalo de cumpleañ os este añ o... así que me
corresponde a mí quitarte el delantal.
—Hum... Hum... ¿Entonces quieres..?— Can pregunta inseguro. Después de
escuchar, Tin se quitó la corbata y apretó los labios.
— Siéntate en la mesa.
—¡Huh!
—Hoy es mi cumpleañ os, ¿no me escuchaste?... Siéntate—Aunque no lo repitió en
voz alta, el corazó n de Can se mantuvo tembloroso. Al final, se ofreció a subir a la
mesa.—Dame tus manos.
—¿Para qué?
—Can.
—¡Está bien!—Can preguntó qué hacer, y el contrario de inmediato lo amenazó
suave, así que tuvo que escuchar y poner las manos al frente.
Luego, el joven maestro Tin Metthanan... Agarró su propia corbata para atar las
manos de su amante.
—Maldita sea.
—...
—Maldita sea, Can— Tin habla constantemente, y aunque no hace ninguna
expresió n, en su corazó n se siente tan divertido cuando mira la cara de pá nico de
su novio. Tan frío como el hielo, Can estaba temblando, pero aú n cerraba las
piernas, sin saber que estando sentado en la mesa, el paisaje debajo del delantal
ya está completamente expuesto.
—Hmm... tengo algo que decirte.
Tin Cree que Can está queriendo retrasar el tiempo, pero luce serio con su cuerpo
de color rosa. Levantó la mirada, y escuchó .
La forma de contener la respiració n del hombre de abajo, que siempre habla
mucho y que ahora se esfuerza para decir una sola palabra, en definitiva esto lo
hace extremadamente lindo.
Ha pasado tanto tiempo para estar agradecido por tenerlo como su 'novio'.
—Dime.
—Es que...—Can intenta cubrirse los oídos e incluso con los ojos cerrados, de
pronto dijo rá pidamente en un suspiro.—¿Quieres darte un bañ o, cenar... o
comerme?
—....

99
Tin abrió la boca de par en par, mirando al hombre que no dijo nada má s, no
había absolutamente forma de imaginar sus sentimientos en la ú ltima frase.
—Maldita sea, Can.— volvió a decir, con una sonrisa indecente. También observa
como Can lentamente abre las piernas. Tin se acercó rá pidamente, le levantó las
manos (que ya estaban atadas) contra la mesa y susurró una frase.
—O podríamos abrir los regalos juntos, lentamente, durante el mayor tiempo
posible.
En este punto, Can tampoco puede controlar má s sus sentimientos... É l sabía que
esta noche, definitivamente "abrir los regalos de cumpleañ os" sería agotador...
—Tin... Tin... Ahg... no puedo soportarlo.. Maldició n... Ahh...— En este momento, el
hombre que vestía un delantal rojo oscuro está acostado en la mesa del comedor,
con las piernas colgando. Abiertas de par en par, manos levantadas hacia arriba,
empapado de sudor, la humedad se vuelve má s intensa, porque los delgados
dedos de alguien está n penetrando profundamente. Está bastante claro que las
emociones ocultas bajo el delantal, son de mucho interés de la otra persona de
pie.
—¿Có mo puede ser esto tan nuevo?
—... Ah... T... Tienes razó n..— Levantó la cabeza, temblando envuelto en jadeos, su
trasero también estaba balanceá ndose con los dedos dentro provocando
constantemente una sensibilidad interna en aquel pequeñ o punto.
—¡HAA!...
—Mojaste el delantal— La mano de Tin sujetaba la cosa dura del otro debajo de
la tela. Can temblaba, sintiendo que los dedos de su amante se deslizaban
lentamente hacia afuera, luego de repente atacan de nuevo, lo que hace que el que
recibe se muerda los labios hasta el punto de querer sangrar.
Evidentemente hablando. Al ver a Can, puedes notar como de sus ojos salen
pequeñ as lá grimas, su cuerpo tiembla sin parar. Cada vez que se excita comienza
a calentarse. No quiere esperar en su corazó n, pero... En el proceso de "jugar" al
amante, de repente emergen sentimientos de placer involuntarios.
—Ah... Tin... tú ... te quiero... lo quiero... No es suficiente... aú n no es suficiente—
Las hermosas palabras vinieron de kirakorn haciendo que Tin deje de mover las
manos hacia arriba y hacia abajo, y luego comience a sujetar su rígido miembro
para hacer fricció n con la punta frente a la pequeñ a entrada.
Can no deja de temblar, y comienza a desesperarse.
—Tin, vamos... Si no, me enojaré... Ah entra...—Se estremeció temblando, pidiendo
desde lo má s profundo de su garganta. Después de escuchar, Tin lo sujetó con
fuerza, y al mismo tiempo pudo sentir como tenía la mano llena de líquido.
—¿Enojado? Pero hoy es mi cumpleañ os.— exitado se quitó sus prendas
inferiores, levantó los ojos para ver a la persona acostada en la mesa, al parecer
sus piernas no tienen fuerza, y el mantel oscuro hace que el cuerpo blanco sea
má s prominente.
Can baja sus manos atadas a la parte inferior de su cuerpo, luego...
—Si... ahh.. lo metes ahora... no me enojaré... ah...
Después de escuchar, Tin está completamente cubierto por el deseo.

100
En este momento, Can está usando sus manos para separar el pequeñ o punto,
como invitá ndolo a entrar. El rostro, los ojos y la voz de la persona de abajo,
provocan que la erecció n de Tin crezca hasta el punto de sentir dolor, así que...
!!!!
—Ah... Tin... Tin... Tu.. Ah... Es... Grande ... Agh...—La cintura del nombrado se
levantaba chocando rá pidamente. El fuego ardió profundamente en la pequeñ a
cueva cá lida. Este ataque repentino hace que Can caiga en el país de las hadas,
có modamente gimiendo constante. Al ver al tipo debajo balanceando su trasero
blanco para atrapar cada ataque, es inevitable que no puedan continuar de una
manera má s violenta.
—Ah... Ah... Tin... yo... me duele...—Can empieza a gritar, pero en el fondo sigue
moviéndose como si desmintiera lo que su boca deshonesta protesta... Los dos
melocotones redondos rozan constantemente con la mesa por lo que al dueñ o de
estos dos cada vez le es má s insoportable...
Tin se retira repentinamente, volviendo al amante hacia atrá s, de modo que la
palma de la mano descansa sobre la mesa, luego... De nuevo se sumerge
provocando que el otro hombre ame gemir.
—Ah... Tú sí... Esta postura es buena... Ah... Tin... Ahí... se siente bien...— El joven
entrenador continuaba temblando, ademá s de que se mantenía empujando
contra el otro cuerpo, a lo que la persona de pie estaba extremadamente de
acuerdo.
La mesa que sostiene el cuerpo duro debajo sobre el delantal, comienza a
moverse hacia arriba y hacia abajo.
Tin observa la espalda blanca como la nieve de su novio, brilla ante sus ojos. Este
chico usó el delantal a propó sito para que él lo mirara.
Un hombre desnudo con esta prenda má s la imaginació n, también pueden
despertar su deseo má s profundo y hacerlo má s intenso que nunca.
—y... yo ... voy a terminar...—El sonido de golpes en ambos cuerpos resonó en la
cocina. Tin se detiene solo un pequeñ o instante, luego deja un beso en su amante.
A los ojos de los dos, ahora son iguales.
Cerca del clímax, los dos cuerpos ahora chocan cada vez má s fuerte, cada vez má s
rá pido, el ritmo se acelera... Finalmente, en la ola de amor constante, ambos
terminan lanzando sus deseos.
El espacio se llena de jadeos. Sin aliento, una voz clara de repente resonó ...
—Feliz cumpleañ os... Tin... no he hecho nada... Pero... eres lo que má s amo en esta
vida...
Tin demoró la mano alrededor de la cintura de su novio, estaba exhausto así que
se inclinó para besar la suave espalda blanca llena de sudor...
Con voz baja dijo.
—¿Quién dice que no hiciste nada? Eres lo mejor que hay en mi vida. Gracias por
tu regalo de cumpleañ os, Can.—Dejó un beso suavemente en el hombro.
Can intenta respirar de nuevo y luego se vuelve para mirar a la persona que acaba
de "recibir su regalo de cumpleañ os".
Se imaginará n que un pequeñ o meló n como este, diría algo dulce, pero...
—Tin...—Llamó dulcemente a su amante, luego...—Ordena pizza, tengo hambre.

101
—...
No solo eso, incluso su estó mago gruñ ó fuerte, haciendo que Tin se pusiera rígido
de repente, pero luego... Sonrió .
—Pizza es pizza. Toma una ducha, y luego comeremos— Terminó , recogió los
pantalones para ponérselos, luego fue a buscar el celular y ordenar la pizza con
la que el amante estropeó el ambiente.
El Bebé glotó n sonríe como las flores, aunque le tiemblan los pies en el bañ o,
parece que ha olvidado que arruinó el cumpleañ os de su amante otra vez.
Prepárate... El año que viene quizás ya no sea necesario.
Pero, si alguien le preguntara a Tin... ¿Te sientes mal?
É l responderá que Can nunca lo arruinó , porque lo mejor de su cumpleañ os... es
que Can estuvo a su lado.
Sí, el cumpleañ os ahora es, El Cumpleañ os.
Gracias a Can, su cumpleañ os se volvió significativo otra vez.
—¿Será igual de extrañ o el añ o que viene?
Todavía mantiene sus expectativas de que Can haga algo fuera de lo comú n. Sin
embargo sea lo que sea está seguro de que será absolutamente especial y
extraordinario, así que...
Realmente quiero que el próximo año llegue pronto.
.

Especial 8
—Oye, dime ¿por qué el padre de Aim no quiere verme?
—Porque nadie quiere un yerno como tú .
—¡Soy un buen hombre!
—Bueno, en realidad no tengo á nimos como para estar hablando contigo.
—porque aunque te vez bien tu boca dice cosas malas.
—¡Son un grupo de malos amigos!
Junto al buen hombre, Pond, sus amigos de la escuela secundaria se reú nen a
cenar y beber durante las vacaciones. De hecho, que todos estén reunidos aquí es
algo bueno, porque generalmente cada vez que quieren encontrarse, no hay
tiempo, tienen que trabajar o ir a casa a visitar a sus familias. Incluso Ae, que no
se ha juntado con sus amigos así durante casi un añ o. Esta vez, puede unirse.
Es una suerte para todos.
Sin embargo... El estado de á nimo de Pond en este momento no es tan bueno.
Solo porque... tuvo un pequeñ o conflicto con su futuro suegro.
Las cosas comenzaron desde hace unas horas cuando él y su novia que han estado
juntos desde el primer añ o, fueron a celebrar su sexto aniversario de relació n.
Después de la celebració n, ChaAim se fue a casa después de ver a sus amigos.
Pero...
—¿Por qué vuelves tan tarde? Ha pasado una hora má s de la hora del toque de
queda.
El padre de Aim se paró en la puerta, rechinó los dientes, y disciplina a su hija con
mucha dureza.

102
—¿Qué te pasa, oh, papá , ha establecido un toque de queda para su hija, eh~ por
qué se comporta de esta manera...
—Mierda, ten cuidado, le volaré la cabeza a tu perro. Tengo que fijar el toque de
queda. Ella es mi hija. ¡Así que debes obedecer mis reglas!—le gritó el padre de
ChaAim a Pond, y rá pidamente la hija puso a trabajar su cabeza para pensar una
excusa, sin embargo...
—Si dejo que usted me denigre de esta forma, estará creando un marido estú pido
para su hija.
—¡Quién dice! No te lo prometí, ¡nunca será s el esposo de Aim!
El padre de ChaAim y Pond se encuentran cara a cara intercambiando palabrotas,
su rostro está rojo mientras que el ú ltimo tiene una mirada particularmente
impertinente...
—Bueno, entonces me arrodillaré.
—¡¡¡Mierda Pond!!!
—Papá , papá , por favor cá lmate, Pond está bromeando... ¿No es así Pond?
La novia giró la cabeza y lo obligó a aceptar sin embargo...
—Estoy serio no estoy jugando.
Aunque solo un segundo después Pond só lo puede fingir ser inocente y decir: Sí,
si estoy bromeando, quiero que se ría, pero su cara parece que está má s arrugada
que nunca.
—¡¡¡Mierda Pond!!!
Pond de pronto ve que el futuro suegro toma una pala y parece que va a
golpearlo, así que rá pidamente se escapó , al mismo tiempo pudo ver a una mujer
de mediana edad parada en el patio trasero riendo.
—Madre, hola, volveré cuando el padre no esté en casa.
—solo vete Pond, te llamaré entonces.— Al ver que la mano de su esposa lo
enviaba lejos, el padre de Aim que todavía estaba atacando a Pond, se volvió para
culpar a su esposa, Pond también aprovechó la oportunidad para escabullirse
bajo las indicaciones de ChaAim. Entonces, esa es la causa y efecto de las quejas
de Pond en este lugar, se siente como si un perro orinara los neumá ticos de su
propio auto.
—No lo entiendo...¿Qué punto de mí se ve como una mala persona?— Pond dijo
mientras abría la cá mara frontal para disfrutar de su belleza, ha estado con
ChaAim durante seis añ os, pero ¿por qué el padre de su novia continú a
negá ndose a aceptarlo?
—Parece como si fueras alguien con tres esposas y cuatro hijos, con una gran
boca que te hace delatar tus tres pequeñ as aventuras—Dear ahora responde, este
chico se graduó con éxito de un doctorado a través de una beca, y acaba de
regresar a tailandia poco después de ese tiempo. Al escuchar a Dear, el mestizo
italiano no pudo evitar tocar su rostro y decir:
—¿Soy tan guapo? ¿Estas alavá ndome?
He visto vanidad, pero nunca he visto a alguien presumir tanto, como es de
esperarse Sun lo tolera. no puede evitar reír, se siente confiado hasta decir: ¿Has
oído si quiera a Dear terminar sus palabras? ¡Dijo que eres "hablador", esa es una
palabra despectiva!

103
Pond inmediatamente replicó : "No se me puede comparar ni con la mitad de tu
boca. ¡Puedes abrir esa boca para otra cosa que no sea hablar basura! ¿No es así,
Dear?— Replicó el mestizo y miró a su adorable compañ ero de clase que estaba
jugando con su teléfono mó vil. La otra parte probablemente le está enviando un
mensaje a su esposo, ya que este no asistió a la reunió n.
—Pregú ntale a Mai, no lo sé, ¡estoy charlando con mi sobrina!— Dear siempre ha
dicho que él y la hija adoptada de Porch son felices interactuando entre sí, por lo
que Pond levantó la mano para bloquear la pantalla del teléfono mó vil del otro,
enojado.
—Amigos o sobrina, ¿cuá l eliges?
Esta pregunta hace que Dear responda sin pensarlo: Por supuesto, elijo a mi
sobrina, tu ya está s acostumbrado a que te rechacen.
—¡Eres un hombre sin conciencia!
—Bueno, si el anciano no te acepta, solo déjala embarazada, estoy seguro de que
ese método es efectivo...
<< ¡GOLPE! >>
—¡Eficaz tu trasero! ¡Por favor deja a un lado tus pensamientos vergonzosos!—
Cuando Mai dijo las palabras, Ae inmediatamente le recordó a la otra parte con un
golpe, advirtiéndole severamente que no le diera a Pond una idea tonta, de lo
contrario, Pond definitivamente lo hará , pero este inmediatamente negó con la
cabeza y dijo:
—No haré eso.
—¿Hmm?—Esta vez, todos los presentes lo miraban sorprendidos por la
expresió n seria del que habló .
Vieron el rostro de Pond y él dijo con seriedad: El costo del matrimonio es
demasiado alto. Esto debe considerarse durante mucho tiempo. Ahora mi dinero
no es suficiente para pagar mi matrimonio.
—¡Oye! ¡Ahora creo que eres un buen hombre!— Dear dijo mientras seguía
charlando con su sobrina, y la persona que fue detenida sigue seria.
—Oye, lo digo en serio. El salario de Aim es má s alto que el mío. No podemos
casarnos ahora, primero tengo que ahorrar. Hasta que al menos pueda mantener
a una familia, esperaré otros tres añ os, y si su padre todavía no está de acuerdo,
usaré el método de Mai...
Golpe~ ~
—Oye, estú pido Ae, ¿qué está s haciendo?
—¡Cuá ndo vas a pensar, Pond!— Ae volvió a utilizar la violencia contra su amigo,
pero la persona a la que le golpeó la cabeza sonrió .
Cuá ntos añ os han pasado y Ae sigue siendo un hombre serio que nunca cambia.
—¿En qué parte no estoy pensando?
—¡Desde la primera vez que conociste al padre de Aim, no pudiste hacer nada
má s que enojar al hombre!— El corazó n a largo plazo de Ae también está muy
familiarizado con la historia de amor de este amigo. La primera vez que vio al
padre de Aim, se lanzó a él como si nada, el hombre estaba tan sororendido, que
no lo discutió en absoluto con ellos. Y en aquel mismo instante Pond se presentó
como el novio y futuro esposo de su hija. Cuando Aim tenía apenas solo 18 añ os.

104
Naturalmente su padre se molestó y lo persiguió con un palo para hecharlo de su
casa.
—¿Por qué lo hizo? ¿Creyó que me daría por vencido? Solo hice una auto-
presentació n normal— Esto hizo que Ae suspirara.
—¡Cuando apenas llegaste lo llamaste ''Papi''— Al escuchar a Ae decir esto, Pond
no pudo evitar reír, recordando la expresió n de sorpresa del padre de su novia, en
ese momento fue gracioso.
—Pero fue realmente divertido. Deberías haberlo visto. Fue tan lindo— Pond dijo
y Ae negó con la cabeza.
—No es sorprendente que el padre Aú n no esté de acuerdo contigo. Si alguien
como tú enamorara a Nong Yim, definitivamente lo golpearía hasta tirarle los
dientes.
—Estoy de acuerdo con el punto de vista de Ae, no quiere que una chica así tenga
un amante como él— Dear intervino, el tipo de preocupació n que él siente es má s
por su sobrina que por su amigo.
—Sun, escucha lo que está n diciendo, ahora todos me está n atacando.
—Simplemente dicen la verdad. ¿Dó nde está el error?—Sun respondió y Pond
resopló , se vuelve para mirar hacia atrá s. El resultado es que Mai y Dior
continú an jugando piedra, papel o tijeras para ser el siguiente en "apuñ alar" el
corazó n de Pond, quién tiene que levantar las manos para rendirse y mirar hacia
Arthit (Sun) en busca de consuelo.
—Quién, me das algunas ideas, al igual que cuando fá cilmente me aconsejaron
sobre la hermana de Rio— El problema que involucra a los novios hace que los
chicos borrachos levanten levemente una ceja sin responder, excepto Ae quién
continuó :
—ChaAim tiene tres hermanos menores. Al contrario, tú tienes tres hermanas
mayores... Una ú nica hija, por supuesto, como padre, no querrá que tengas a su
bebé.
—Ae, Ae, ¿có mo conoces tanto a mi novia?— ensancha los ojos, el tono da miedo,
como si su amigo quisiera tomar a su esposa, Ae solo sonrió :
—Tu pensamiento podría ponerte en peligro, sabes...
—Oye ~ Estoy bromeando, ok, ok, recordé que fuí yo el que te obligó a escuchar
lo que dije... Oye, Sun, ¿Tienes algo que decirme?—Pond volteó y le preguntó a
Sun quién había pasado con éxito a la familia de su novio. El Sr. Arthit solo miró
hacia arriba y lo acarició , Pond sabe que está retrasando el tiempo para decirle
algo.
—Tu fuiste el que nos invitó esto.—Dijo Dior
—¡Mierda! ¡Esta pequeñ a reunió n no cuenta, hablan de dinero y enseguida
lastiman mis sentimientos!
—Bueno, yo también quiero ahorrar dinero para mi esposa—Sun sonrió y Pond
tuvo una lucha interna.
—Solo estaba preguntando, así que detente Dior, Tu sales a comer casi todos los
meses y quieres explotar a tu pobre amigo, ¡no te lo permitiré!— Pond
interrumpió inmediatamente y estaba a punto de abrir la boca otra vez, pero Dior
no pudo evitar reír y decir: lo vez, yo puedo hacerlo sin ti.

105
Sun sigue sonriendo y charlando con su demá s amigos.
—¿Alguna vez has oído hablar de la verdad de que no te rindas hasta alcanzar la
meta? Sin embargo no tienes que hacer ningú n truco. Te enseñ aré a conseguir a
tu esposa y su papá .
Al ver la expresió n insidiosa de Sun, el resto de los oyentes bá sicamente pueden
concluir: de repente este sujeto podría simpatizar con el padre de la novia de
Pond.
—Veo que está s mal Pond.
—De solo pensarlo ya me siento agotado.
***
Gracias al amigo del que tomó el consejo el dia anteror, fue directo a la casa de su
novia para aprender. Aim simplemente escuchó sin má s remedio a su novio y lo
hizo sin interrumpir debido a que estaba lo suficientemente acostumbrada a esta
actitud, que no dijo nada al respecto.
—Por supuesto, sé que aunque mi padre a veces es un poco duro, si no te rindes
frente a él, algú n día te aceptará —ChaAim dice la verdad, y al mismo tiempo su
corazó n en secreto se angustia por su novio.
Tengo que luchar con su padre, tengo que pelear por su niñ a.
Cuando eran estudiantes, ChaAim estaba un poco preocupada de que algú n día
rompería con Pond. Una de las razones fue la actitud y forma de pensar de Pond, y
otra razó n fue... su padre.
Como ú nica hija de la familia entre tres hermanos menores, su padre le tiene
cuidado especial, se preocupa de que se encuentre con gente mala, se preocupa
de que se encuentre con hombres de mal cará cter y que la lastimen, sobre todo
cuando ve a Pond, por alguna razó n su preocupació n es particularmente seria.
ChaAim también temía que Pond se rindiera a mitad del camino y encontrara otro
nuevo amor, una chica que probablemente lo aceptaría en casa.
Sin embargo... Durante seis añ os, toda la actuació n de Pond le hizo ver que este
hombre tiene muchas deficiencias en su personalidad, pero su grado de
especificidad no se ha perdido para nadie.
¿Pueden creer que esa existencia pervertida no tiene comportamientos
irrespetuosos má s que solo besarla en la universidad?
ChaAim al principio y desde ese momento pensó que ambos aú n eran jó venes. No
crecieron para ser responsables el uno del otro, por lo que ella nunca accedió a
tener relaciones intimas con él. Pond también dijo que la entendía, por lo que
nunca ha habido má s que besos, y a él le parecía demasiado para preguntar.
No fue hasta que se graduaron y trabajaron duro que la relació n empezó ahacerse
mas estable, porque la propia ChaAim no es una persona de juegos, es una
persona feudal que no puede aceptar el sexo prematrimonial. Aim quiso solo
sentimientos entre los dos. De volverse la relació n mucho má s estable, las ú ltimas
cosas se convertirá n naturalmente en una cuestió n de rutina, esto es en lo que
está pensando.
Lo que ella casi no pudo creer cuando lo oyó fue...
Dado que los dos tenían una relació n de varios añ os, Pond naturalmente comenzó
a hablar sobre su matrimonio.

106
Por supuesto, no será ahora, ni en dos añ os. Pond está empezando a describir
seriamente el plan de matrimonio que quiere que ambos tengan. Desde entonces,
ChaAim ha estado convencida de que esta es la persona, aú n cuando todos decían
que era un fanfarró n.
El hombre que siempre miente y provoca problemas en todas partes, está
convencida que nadie má s que esta es la persona a la que puede confiar el resto
de su vida.
A lo largo de los añ os, muchas personas piensan que romperá n tarde o temprano,
porque creen que Pond no podrá soportar sus limitaciones ni su papel de novio
responsable. De hecho, Pond no suele hablar en serio y aveces demuestra
deliberadamente que no es confiable, pero en má s de una ocasió n demostró que
es una persona responsable, ama a los amigos, ama a la familia y aunque a
menudo es como una patada en el trasero, puede ser muy sensato, y todo por el
bien de sus mayores, o de su madre, sus hermanas menores y amigos.
El ú nico obstá culo que queda es que el padre de su novia está demasiado
preocupado por ella.
—¿Quieres que esperemos hasta los treinta? Oye, no seas así Aim, o seré
demasiado mayor cuando tenga hijos—Ven, a veces las palabras de Pond la hacen
llorar.
—En el futuro, la piel de tu hijo será oscura como tú .
—Oye, no soy oscuro, mi piel no le tiene miedo al sol.
—¿No te visualizas como un cerdo a la brasa? Con una panza cervecera— ChaAim
no pudo evitar reírse de él, mientras seguía tirando de la carne de su cintura, y
este ú ltimo gritaba que no podía aceptar la realidad.
Este chico, especialmente después del trabajo, se dedica ú nicamente a comer y no
hacer ejercicio.
En este momento, el motor de un automó vil se acercó lentamente y dos personas
repentinamente miraron hacia atrá s. Al segundo siguiente, Pond empujó a su
novia a la casa y luego...
Nuestro granduló n, Pond, estaba en la entrada, esto hizo que la persona que
conducía frunciera el ceñ o.
—¿Qué está s haciendo en mi puerta?— El padre entró en estado de alerta y Pond
levantó la cabeza y lo miró .
—Vine a pedirle perdó n—El otro lado frunció el ceñ o con má s fuerza, y Pond
continuó diciendo con seriedad: Sé que siempre te he estado irritando. Si he
hecho algo que le hizo sentir insatisfecho, vengo a disculparme sinceramente, y
espero que pueda bendecirme para estar con ChaAim...
—No estoy de acuerdo, no finjas estar dolido frente a mí, ¡no te creo! ¡Continuará s
tomando el sol aquí, pequeñ o perro!— Aim, que ha estado con Pond durante seis
añ os, entró directamente a la casa y dijo que estaría pendiente de lo que
sucediera. Pond no siguió como se esperaba, pero de acuerdo con lo que le enseñ ó
Sun. El novio se arrodilló en la puerta.
—Asegú rate de fingir lá stima la pró xima vez. Contigo lo ú nico que hará s será
avergonzarla.

107
Pond no está seguro de poder ganarse el corazó n de la familia de su novia en esta
vida.
É l pensaba que sí, pero Pond sigue insistiendo en arrodillarse frente él.
Hoy, debo ganarme el corazó n del papá de Aim.
—¡Papá , eres tan cruel!
—¡P'Pond se ve tan lamentable!
—¡Está haciendo calor, es mediodía, Pond se quemará con el sol!
—¡Hey! Realmente me siento mal por Pond, nunca conocí a un suegro tan
aterrador—En la habitació n al costado, la cara del padre de Aim era como el
juego pausado de un teléfono mó vil.
La luz del sol seguía barriendo la puerta. El yerno que se negó seguía firme en su
posició n, sin embargo la voz de la esposa sonó en el oído del padre en ese
momento, acompañ ada de las quejas de los otros tres hijos, y varios niñ os que
salieron por la puerta de una manera nada discreta... El papá de repente se sintió
un poco preocupado.
—Llá malo, se va a quemar má s.
—Vino a pedirte perdó n, y tú no lo aceptas, nisiquiera se atreve a entrar a la casa
— La madre de Aim habla sobre el futuro yerno, seguida de una serie de sonidos
repetidos:
—¡si!
—¡si!
—¡Sí papá !
—¡¿Oigan, chicos, son mis hijos o sus hijos?
—Sí, por supuesto que somos tus hijos, ¿siquiera tienes que preguntar? Acabamos
de decir la verdad—Al ver esto, los tres hijos también se pusieron del lado de
Pond.
De repente el padre que había entrado a casa, se levantó y suspiró
profundamente.
—Papá , Pond y yo hemos estado juntos durante seis añ os, ¿no puedes estar tan
preocupado por las cosas de tu hija?
—Sí, padre, si P'Pond no fuera bueno, seguro mi hermana no habría estado tanto
tiempo con él.
Una vez má s, la esposa y los hijos lo persuaden colectivamente, lo que hace que el
padre se vuelva cada vez má s culpable. Volvió la cabeza y vio a su retoñ o, solo ver
la expresió n preocupada de la hija quien asomaba la cabeza para mirar a su novio
en la puerta, le hizo suspirar profundamente de nuevo.
¡Pero solo tengo una hija!
Aunque piensa que Pond no es una buena persona, el padre sabe que la otra parte
no parece ser de los que tienen varias amantes y chicas para dejar a su hija
agraviada. De hecho, parece que no quiere rendirse aunque tenga todas estas
dificultades. El padre es hombre, y lo sabe bien, sabe que solo bastará unos añ os
má s para que... ChaAim acabe casá ndose.
—¡Oigan~ acaso son un grupo de lobos!— el padre finalmente dijo casi en señ al
de derrota, lo que hizo que la hija que le había estado preocupando el corazó n de
inmediato sacara el teléfono y se pusiera en contacto en secreto con el novio que

108
ya había ajustado el tono de llamada del teléfono mó vil de antemano para saber
cuando era su novia quien llamaba....
El celular en el bolsillo del pantaló n se sacudió . En ese momento, el exterior de la
puerta había sido puesto en una visera, sosteniendo un pequeñ o ventilador
eléctrico y una botella de agua helada. La persona que estaba a la sombra de un
á rbol, cuá ndo lo notó se apresuró y volvió corriendo a la posició n establecida.
Incapaz de aguantar, Pond en el momento en que se abre la puerta se acomoda
en su lugar.
—Tó mate esto y te puedes ir..
Con un tono muy impaciente, la expresió n de Pond es má s lastimera, pone las
manos juntas para formarle un waii al padre de Aim.
—Lo siento, sé que he hecho muchas cosas con las que no ha estado satisfecho a
lo largo de los añ os, pero espero que pueda aceptar el hecho de que he estado con
ChaAim durante seis añ os. Hablo en serio con ella. —El tono de Pond es muy
sincero. El papá de Aim sigue indiferente diciendo:¿Qué tienes para ofrecer?
—Ahora no puedo ofrecele nada, pero le demostraré que amo a su hija. Y
realmente quiero pasar mi tiempo con ella en el futuro— Con firmeza, estas
palabras hicieron sentir conmocionado al padre que tenía al muchacho frente a él.
Al verlo obstinadamente en cuclillas así, sintió que estaba siendo sincero.
—¿Quieres que te permita estar con Aim?
—Ya se lo había dicho ¿Aú n no está permitido?.
El padre estaba deprimido, parecía ser suave, y Pond ocultó en secreto su sonrisa,
aunque rió , inmediatamente cambió de nuevo a una expresió n seria:—¡Gracias,
papá , gracias!
—Bueno, có mo no voy a estar de acuerdo, si toda mi familia me asedió , pero te en
cuenta que si te atreves a dejar a mi hija y hacerla infeliz, te buscaré en esta y en
la otra vida para matarte!
Luego, el padre regresó a la casa y su rostro se veía mucho mejor. Aunque
después de hablar, vio que el tipo que decía ser su yerno no respondía.
Hasta que el mayor entró en la casa, Pond finalmente sonrió con aire de
suficiencia.
—¡Esto realmente funciona!— Pond estaba feliz. Usó sus ojos para confirmar que
el padre de Aim había entrado y tiró de ChaAim al patio trasero. Su novia que lo
siguió no pudo evitar suspirar.
—¡Tu boca es resbaladiza!
—¡Pero tu papá realmente se puso sentimental!— Pond dijo con una sonrisa, y
mientras extendía su rostro, ChaAim miró hacia arriba y empujó la frente del otro
fin sus dedos.
—No te confíes mucho, ¿no lo escuchaste? ¡Si haces algo que me ponga mal, mi
papá te matará !— ChaAim dijo mientras arrugaba la nariz, y Pond no pudo evitar
pellizcar la nariz de la chica. Cuando vio que el otro lado quería irse, rá pidamente
inclinó la cabeza y besó las mejillas de su novia.
—¡No te preocupes!
—Esta es una recompensa por ganar el corazó n de papá .
—¡¿Ganar qué?! Mi padre acaba de aceptarte.

109
—Entonces espera hasta que tu papá me acepte por completo y te tendré una
gran recompensa— Pond no se detuvo. Seguía mirando a su novia con los ojos
entre-cerrados. Tenía muchas ganas de meter sus ojos, y finalmente...
—Bueno, la recompensa también podría ser recompensada— Después de
escuchar, la boca de Pond estaba a punto de ir a su oreja formando una gran
sonrisa, esperando la recompensa de su novia...
Hey ~
—Mierda Pond, ¿qué está s haciendo aquí? ¿No te dije que te fueras?¿Eh?
Justo cuando un beso gratificante cayó sobre el rostro de Pond, la voz de un
adulto familiar sonó , la imagen que se mostró frente a él debió haber visto la
interacció n íntima entre su hija y este joven:
—¡¡¡Pond de Mierda!!!
No quiere que el padre lo vuelva a llamar porque probablemente no será para
nada bueno, Pond inmediatamente vuela para escapar del patio trasero, detrá s de
él está el padre que lo persigue como un trueno, y ChaAim, que se quedó quieta,
solo pudo suspirar.
—Papá , fue mi iniciativa besar a Pond...
Dijo ChaAim para sí misma, porque sabía que aunque lo dijera en alto, él no la
escucharía.
Miren esa situació n... Al parecer ambos seguirá n luchando por varios añ os.
Por lo tanto, el camino del amor del rey de los entrometidos todavía está muy
lejos.
La buena noticia: El papá de Aim finalmente pudo aceptarlo.

Especial 9
—¿A dó nde vamos hoy?
—¡Al parque acuá tico, tío!
—¡Sí!
Todos los fines de semana, nuestro ingeniero pasa tiempo junto a su novio má s
querido, son como guisantes y zanahorias. Pero hoy fue un poco diferente...
porque había un par adorable muy animados haciendo todo tipo de ruidos en el
auto.
Uno de ellos es una niñ a que acaba de cumplir 7 añ os hace unos meses, y el otro
es un niñ o que solo tiene 4 añ os. Se reían constantemente entre sí.
En cuanto a la razó n por la que todos estaban sentados en este automó vil
dirigiéndose a un parque acuá tico en el centro de Bangkok en este momento,
sucedió el mes pasado. Los niñ os seguían quejá ndose de que el tío Pete no había
visitado su casa para pasar la noche durante mucho, y el tío Ae tampoco volvía a
casa muy a menudo. No habían salido en mucho tiempo.
N'Yim comenzó a hacer una pequeñ a rabieta, y cuando la hermana mayor se puso
de mal humor, por supuesto que el hermano menor no perdería contra ella, por lo
que también la imitó . Su padre casi se volvió loco por ellos, así que no tuvo má s
remedio que levantar el teléfono y llamar a su hermano menor para regañ arlo, y
su volumen no estaba bajo en absoluto.
—Tienes que consolar a tus sobrinos, Ae.

110
Este tío, que mimaba al má ximo a su sobrina, no tuvo má s remedio que llamarla
apresuradamente. Al principio, N'Yim no quería hablar con él, fue solo cuando
escuchó a su padre decir que el tío Ae le concedería cualquier deseo, tomó
rá pidamente el teléfono y le propuso a su tío algo que no pudo rechazar.
—Tío, tienes que llevarnos a mi hermano y a mí, por supuesto también tienes que
traer al tío Pete.
Después de que su sobrina colgó , Ae llamó rá pidamente a Pete y se lo contó . Pete
siempre había querido pasar el rato con N'Yim y N'Yam, así que al final, los cuatro
felizmente se embarcaron en un viaje al parque de atracciones y desde luego al
parque acuá tico también.
¿En cuanto a qué parque de atracciones irían?
¡Por supuesto, le tocó a la princesa Yim tomar la decisió n final!
—Pequeñ a, ¿tienes hambre? El tío Pete te ha preparado unos bocadillos.
El hombre sentado en el asiento del pasajero sacó un recipiente de comida de la
canasta de picnic a sus pies. Cuando N'Yam lo vio, rá pidamente extendió la mano
para mostrar que quería comer, y N'Yim miró a Pete con curiosidad.
—¿Lo hizo la abuela Jiew, tío Pete?
—Sí, la abuela Jiew se levantó temprano en la mañ ana para prepararte esto.
La niñ a mencionó a la tía Jiew, quién es excelente en la cocina. Hubo una vez en la
que Ae llevó a Yim con él cuando fueron a su casa, N'Yim y la tía Jiew solo se
vieron por poco tiempo. Es por esta razó n que cuando la tía supo que Pete quería
levantarse temprano en la mañ ana y llevar a los sobrinos de Ae algo para comer,
inmediatamente decidió preparar algunos bocadillos para los niñ os.
Parecía que ella también amaba a estas dos bellezas, N'Yim y N'Yam.
— Primero comamos un poco. Pasará mucho tiempo antes de que lleguemos allí.
Después de eso, Pete le dio a N'Yim un sándwich y luego le entregó uno má s
pequeñ o a N'Yam. Ambos niñ os agradecieron cortésmente a Pete cuando
recibieron los bocadillos. Parecía que su familia les había enseñ ado muy bien.
—Gracias, tío Pete. Acabo de ver que también tenemos algunas salchichas.
Luego, el niñ o, que aú n estaba aprendiendo a hablar, mencionó el trozo de comida
en forma de palito colocado junto al recipiente del sá ndwich. Ae frunció el ceñ o
después de escuchar lo que dijo, lo miró a través del espejo retrovisor y vio los
ojos de su sobrino mirando directamente a las salchichas.
—¿Realmente quieres comerlas? Pero, ¿có mo las sujetará s?
—Yo puedo. Soy muy bueno en eso.
Yam aú n tenía una expresió n de 'Debo comerme esto' en su rostro. Pete tuvo que
tomar un trozo de servilleta para envolver un extremo de la salchicha y luego se
la entregó al niñ o que de inmediato formó una sonrisa de satisfacció n. Su tío
bioló gico empezó a murmurar para sí mismo.
—Parece que solo comer puede hacerlo hablar.
—De hecho él habla mucho, pero como no vas a casa muy a menudo, no lo ves.
La encantadora sobrina no estuvo de acuerdo, y Ae en realidad no supo có mo
objetarla.
—El tío lo siente mucho.

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Eventualmente, Ae no tuvo má s remedio que murmurar en un tono culpable. La
sobrina se rio, extendió las manos y abrazó el reposacabezas del asiento del
automó vil, y luego llevó la salchicha que tenía en la mano a la boca del conductor.
—No estoy enojada, tío. Por favor come esto, así tendrá s la energía para jugar
conmigo y con mi hermano todo el día.
Ae de repente tuvo la sensació n de que su sobrina ya había crecido e incluso sabía
có mo cuidar a su familia.
No es de extrañar por qué mi hermano siempre habla consigo mismo tan
recientemente.
—Los niñ os está n creciendo muy rá pido. En un abrir y cerrar de ojos ya tienen 7
añ os, y luego, cuando no está s prestando atenció n, ya se ha convertido en una
adolescente que querrá un novio. Un papá como yo ya tendría dolor de cabeza
con solo pensarlo. Por supuesto, tu tio dejará que su pequeñ o mono se divierta
felizmente todo el día.
—Está s insinuando que mi papá y mi mamá son monos. Entonces también eres
un mono, porque eres el hermano menor de mi papá .
¿Ven? Al final, N'Yim continú a burlá ndose de él.
—Solías llamar al tío Ae en busca de ayuda cada vez que estabas en problemas
antes...
Ae suspiró profundamente. En ese momento, N'Yim aú n está aprendiendo a
hablar, pero para ser honestos, incluso ahora... ya es es muy buena.
—P', ¿por qué está s alimentando a nuestro tío?
De repente, el niñ o que estaba disfrutando de la deliciosa comida en ambas
manos le preguntó a su hermana. La persona que estaba siendo alimentada miró
por el espejo retrovisor y vio a un niñ o regordete e inocente sentado en el asiento
trasero, inclinando la cabeza hacia un lado con una mirada confusa en su rostro.
—Como el tío está conduciendo, le doy de comer.
—No, no necesitas hacerlo, P'. No puedes alimentarlo, debes dejar que lo haga el
tío Pete, el tío Pete es su novio oficial.
Luego de escuchar esta frase, dos adultos casi vuelven la cabeza para mirar a este
niñ o que parece ser la reencarnació n de Cupido. Al mismo tiempo, su hermana
también soltó suavemente un '¡Oh!' y luego se recostó en su asiento, no sin antes
decir con una voz pura.
—Si el tío Ae y el tío Pete son amantes, el tío Pete debería alimentar al tío Ae, al
igual que mamá alimentaba a papá cuando él conducía. Ahora que lo mencionas,
realmente no es mi deber.
—Tampoco es mi deber.
Los dos pequeñ os, que compartían el mismo punto de vista, asintieron
inocentemente y los dos tíos no supieron rechazarlos. Después de todo, cada
palabra que salía de la boca de los niñ os no estaba mal.
Ae tomó la iniciativa.
—Ahh... dame de comer.
— Pero antes podías comer solo.
Pete negó levemente con la cabeza, porque anteriormente, siempre que Ae quería
comer algo en el auto, siempre podía hacerlo solo. Ae podía terminar de comer

112
todo en poco tiempo sin ninguna ayuda, pero esta vez quería que lo alimentaran...
Ae vio aquel comportamiento cauteloso frente a los niñ os y luego formó una
sonrisa.
—Pero eso era 'antes', vamos, ¿quieres decepcionar a los niñ os?
—Los niñ os no está n esperando a que lo haga.
Pete sonrió al darse cuenta de que Ae lo estaba obligando a alimentarlo.
—Pero yo sí estoy esperando. Quiero ver a mis dos tíos siendo amorosos el uno
con el otro.
De repente, N'Yim asomó por el espacio entre los dos asientos, con voz cristalina,
estaba expresando su ardiente deseo digno de una fujoshi. No estaba claro si fue
debido a la solicitud de la niñ a que hizo que él no pudiera negarse o no, ya que
Pete apresuró a alimentar a Ae con un trozo de sá ndwich. Al mismo tiempo, no se
olvidó de burlarse de él mientras lo alimentaba.
—Ae Probablemente has pasado demasiado tiempo con tu sobrina, incluso
aprendiste a qué te mimen.
Ae frunció el ceñ o.
—Antes, siempre eras tú el que actuaba lindo para pedirme algo, así que también
puedo pedirte que me mimes, ¿verdad?
Ae le guiñ ó un ojo a Pete y sonrió con picardía. Esto hizo que la cara de Pete se
pusiera roja al instante. No estaba seguro de si era porque los niñ os estaban allí o
no, pero este gran hombre, que normalmente es serio, en realidad se estaba
burlando de él. Pete no sabía qué decir excepto...
—Incluso si está s pidiendo que te mime, no voy a decir nada.
—Jaja, eso es bueno.
De repente, Pete sintió que no solo habían dos pequeñ os en este viaje, sino
también un adulto con el corazó n de niñ o.
—¿Qué pasó , N'Phu?
—No es asunto tuyo.
<Golpe>
—¡Ay! ¿Por qué me golpeaste, P'Can? Duele.
Al mismo tiempo, al otro lado de Bangkok, Can planeaba ir al cine privado de su
novio para pasar un buen rato, pero de repente se detuvo cuando escuchó el
sonido del juego proveniente de la sala de estar. Siguió el ruido y vio a un niñ o
sentado allí, sosteniendo un joystick con ambas manos y jugando el juego de
manera agresiva, como si quisiera liberar todas sus emociones a través del juego.
Can entró rá pidamente para investigar.
Cuando le preguntó qué le pasaba al niñ o, quien antes mencionaba sin parar a su
padre cada vez que abría la boca, le respondió en un tono inaceptable, lo que hizo
que Can le diera un golpe en la cabeza al niñ o.
Incluso si la otra parte fuera el heredero directo de la gran familia, no dudaría en
golpearlo.
El niñ o de repente tiró el joystick en su mano al suelo y se dio la vuelta para
lanzarle a Can una mirada desafiante. Can miró el hermoso rostro de la otra
persona... Su rostro estaba demasiado rígido y no era lindo en absoluto.

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Ahora Phu ya tiene ocho añ os, ya no es un niñ o regordete y se ha convertido en
un niñ o con un cuerpo esbelto, un par de ojos afilados, hermosas cejas y una nariz
alta. Era seguro que no sería menos guapo que su padre o su tío cuando creciera
por completo, pero el tema principal es... su personalidad tiene algunos defectos.
Su familia lo ha tratado como un tesoro desde una edad temprana y toda la
familia siempre está dando vueltas a su alrededor, por lo que se ha vuelto un poco
egocéntrico. Mucha gente no sabría qué hacer con sus comportamientos
irracionales, excepto... P'Can.
Porque en casa, siempre que Phupha quería algo, todos lo complacían. Sin
embargo, cuando le ordenaba a Can que se acercara, Can no solo lo molestaría
horriblemente, sino que también lo golpearía con ganas.
—Te estoy educando. ¡¿Quién te dijo que hablaras así con los adultos, mocoso
mimado?!
Can levantó la mano mientras miraba al niñ o cuyas lá grimas estaban a punto de
salir. La boca de Phupha estaba murmurando y también volvió la cara.
—Porque los adultos nunca cumplen sus promesas.
—¿Hm?
Can respondió inconscientemente, mirando al niñ o que de alguna manera
actuaba inusual en comparació n con lo normal frente a él, rá pidamente se sentó
junto a N'Phu y preguntó .
—¿Oh? ¿Entonces tu 'buen' papá te dejó plantado?
—...
¿Ven? Yo tenía razón.
Can quiso levantar las cejas para expresar su orgullo por su propia inteligencia,
pero cuando vio al niñ o que amaba a su padre má s que nada inclinando la cabeza,
se compadeció de él. Puso su mano sobre el hombro de la otra persona y
preguntó en voz baja.
—¿Qué te prometió Tul esta vez?
—Papá me prometió ... que si sacaba buenas notas este semestre, me llevaría a
Tokyo Disneyland, ya tengo mis resultados desde hace una semana, pero aú n no
ha regresado de Europa, ni mucho menos llevarme fuera. Y la semana que viene
tengo que ir a Francia a visitar a mi madre.
Oh, resultó que estaba enojado con su padre.
—¿Por qué tiene que ser Disneyland? Nosotros tenemos el parque de atracciones
Siam en nuestro país.
—¡No quiero! ¡Solo quiero ir a Disneylandia! ¡Papá me lo prometió !
Phupha estaba haciendo una rabieta de nuevo. Can frunció el ceñ o y rá pidamente
apretó el puñ o.
—No me está s escuchando de nuevo, mocoso mimado.
—¡No lo soy!
Cuando Phu vio a Can formando un puñ o, inmediatamente se cubrió la cabeza con
ambas manos, temiendo que lo lastimara mientras se oponía en voz alta. Sin
embargo, Can no tenía intenció n de usar la violencia, pero...
—Incluso si tu padre no está , aú n tienes a tu tío Tin, ¿no es así?

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Cuando el puñ o de Can estaba a punto de alcanzar el cabello de Phu, se convirtió
en una palmada y luego acarició suavemente la cabeza de Phu.
Phu, que tenía miedo al dolor, abrió secretamente uno de sus ojos para echar un
vistazo.
—El tío está ocupado, no está libre.
—Pero yo estoy libre.
—¿Entonces?
El chico cuestionó de inmediato. Levantó la cabeza y miró confundido al
legendario novio de su tío (a quien la abuela no quería ver).
¿Lo llevaría a Japó n?
En ese momento, había alguien pasando por la puerta de la habitació n.
Resultó que llegó a buscar al invitado que nunca actú a como invitado.
—¡Tin! ¡Tin!
Can gritó , y después de que Tin lo escuchara, rá pidamente se dio la vuelta y luego
entró en la habitació n.
—¿No dijiste que querías ir a la cocina a comer algo? N'Phu, ¿qué pasa? ¿Sigues
enojado con tu padre?
—No estoy exagerando. ¡Fue porque papá no cumplió su promesa!
El chico rá pidamente refutó y trató de explicar el hecho de que estar actuando así
no era irrazonable en absoluto, solo quería dejar claro un punto. Tin negó con la
cabeza. Este niñ o se molestó con toda la familia durante toda una semana. É l
mismo ni siquiera sabía có mo lidiar con este sobrino.
—Tin, cambio de planes.
—¿Cambio de planes?
Al mismo tiempo, el tipo que a menudo cambiaba de opinió n rá pidamente gritó
en voz alta y Tin repitió inconscientemente las palabras de la otra persona.
Observó que su novio frente a él se levantaba emocionado, agarró la pequeñ a
mano de su sobrino y lo arrastró con él.
—Hoy vamos al parque de atracciones Siam.
Después de eso, el niñ o fue arrastrado fuera de la habitació n. Al principio, el niñ o
no reaccionó en absoluto, pero cuando se dio cuenta de lo que estaba pasando,
Phu gritó de inmediato.
—¡No quiero ir al parque de atracciones! ¡Quiero ir a Disneyland!
—¡Vamos! No importa si es en Siam o Disneyland, ¡ambos son divertidos! el
parque de atracciones Siam incluso tiene un parque acuá tico, vamos Tin, date
prisa, ve por el coche saquemos a este genio para celebrarlo.
Can dijo mientras se reía de buena gana. El conductor no pudo evitar pensar...
Obviamente él también tenía ganas de ir, solo usa al niño como excusa.
—Tío, quiero probar eso, quiero jugar en ese.
Después de que los dos adultos llevaron a los dos niñ os al parque de atracciones
Siam, la niñ a, que se suponía que debía sentarse en el carrusel, luciendo como una
elegante princesita, estaba tirando de los pantalones de su tío mientras señ alaba
una atracció n extrema no muy lejos, lo que podría asustar a muchos adultos con
solo mirarlo. Pete la miró con expresió n de desconcierto en el rostro.
—¿No tienes miedo, N'Yim?

115
—No, no tengo miedo, ¡quiero jugar! ¡Quiero jugar en eso!—dijo emocionada.
N'Yim, que tenía el cabello corto tiró del brazo de Ae y se dirigió a dicha atracció n.
Pete también tomó la mano de N'Yam y los siguió , luego se puso en cuclillas y le
preguntó al niñ o.
—N'Yam, ¿En qué te gustaría jugar?
—Puedo jugar en cualquier cosa. Jugaré lo que juegue mi hermana.
El niñ o obviamente no estaba al tanto de la trampa que su hermana le había
tendido, pero N'Yam ni siquiera había llegado a esa atracció n todavía y la
atenció n de N'Yim ya estaba atraída por otra cosa. Señ aló un edificio no muy lejos.
El frente del edificio estaba pintado solo de negro y rojo... parecía el rojo de la
sangre.
—¡Tío, vamos a la casa embrujada!
—¡Fantasmas! ¡No! ¡No entraré allí!
Los gritos tomaron desprevenidos a los dos adultos, porque nadie pensó que una
niñ a pequeñ a se atrevería a entrar en la casa encantada, mientras que la reacció n
de N'Yam fue má s como las de los niñ os normales. Porque cuando escuchó la
palabra 'embrujada', rá pidamente abrazó el muslo del tío Pete y sacudió la cabeza
mientras lloraba.
—No da miedo, Nong, todos son falsos. Papá me dijo eso. Papá dijo que incluso si
realmente hubiera fantasmas, aú n podríamos ahuyentarlos de un puñ etazo.
N'Yim realmente estuvo a la altura de su nombre, sonrió y comentó lo que su
padre le dijo anoche. Incluso levantó ambas manos, formó en una de ellas un
puñ o mientras usaba la otra para tronar las articulaciones de dicho puñ o.
Después de que Ae escuchó lo que dijo, pensó .
[Nota: Yim significa "sonrisa" en tailandés].
P... ¿Estás criando a una niña o un niño?
—No, los fantasmas te secuestrará n. Mami dijo que si no te portabas bien, los
fantasmas te llevarían.
—Pero no estoy haciendo nada malo, ¿verdad, tío Ae?
La niñ a miró hacia arriba y le pidió confirmació n a Ae. Parecía que estaba
decidida a entrar allí. Ae no tuvo má s remedio que suspirar profundamente.
—Está bien, si quieres entrar ahí, entonces entremos allí, pero tienes que
prometerle al tío que no puedes mantenerte muy lejos, ¿de acuerdo?
—Tío, ¿tienes miedo?
La niñ a levantó la cabeza y preguntó con una mirada de desconcierto en su
rostro. Realmente no podía entender por qué su tío no quería que ella estuviera
demasiado lejos de él. Cuando Pete pensó en el hecho de que su novio podría
tener miedo de la casa encantada, no pudo evitar soltar una carcajada.
En realidad, es bastante divertido para alguien tan grande como Ae tener miedo
de los fantasmas.
—¡¿De qué te estas riendo?!
En este momento, Ae envolvió apresuradamente sus brazos firmes y gruesos
alrededor del cuello de Pete y lo atrajo hacia él. Pete no podía dejar de sonreír.
—Me estoy imaginando que los fantasmas te persiguen.

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—Tío Ae, ¿vas a huir de los fantasmas? ¡No, papá dijo que deberías asestarles un
golpe directo a los fantasmas cuando los veas!
Ae fue malinterpretado por tener miedo de los fantasmas, no sabía có mo limpiar
su nombre. No tuvo má s remedio que suspirar y luego revolvió la cabeza de su
novio antes de soltarlo.
—Entonces, quédate con N'Yam y espéranos. Quiero llevar a N'Yim adentro para
luchar contra los fantasmas.
Después de eso, Ae, junto con N'Yim, desaparecieron detrá s de la entrada de la
casa embrujada. Y N'Yam, que se quedó atrá s, de repente rompió a llorar sin
previo aviso. Se le caían las lá grimas y apretó los pantalones de Pete con fuerza.
—Tío Pete, mi hermana y mi tío... ¿Será n secuestrados por los fantasmas? No
quiero eso... <llorar>
—Cariñ o, no se llevará n a nadie, volverá n pronto. No llores. No llores...
Pete abrazó al niñ o y lo levantó . Quería extender una mano para secar las
lá grimas de N'Yam, pero debido a que la otra parte estaba demasiado pesada,
temía no poder sostenerlo con una sola mano. Por lo tanto, no tuvo má s remedio
que besar la cara del niñ o para consolarlo.
—Awwww... ¡Qué adorable!
—¿Cuá l? ¿El adulto o el niñ o?
—¡Ambos son lindos! Realmente quiero encontrar un hombre así para que sea el
padre de mi hijo ~~
Cuando Pete escuchó la conversació n, rá pidamente se dio la vuelta para mirar la
fuente del sonido, y luego vio a dos o tres mujeres jó venes no muy lejos
mirá ndolo. Cuando sus ojos se encontraron, las chicas rá pidamente desviaron la
mirada y fingieron que no lo estaban observando, pero tampoco se fueron. Pete se
echó a reír.
—Creen que eres el hijo del tío Pete.
—No, soy el hijo de papi Oh y Mami Nat.
Yam objetó , lo que hizo sonreír a Pete y abrazó al niñ o con má s fuerza. Si esto
hubiera sucedido unos añ os antes, probablemente Pete ya se habría cuestionado
a sí mismo. Pero ahora, después de todos los giros y vueltas de la vida, finalmente
ha aceptado el hecho de que no puede darle un hijo a Ae.
Mientras se tengan el uno al otro, es má s que suficiente para ser felices juntos
todos los días... Ademá s, ¿no tienen ya dos lindos sobrinos?
"Dos niños ya son suficientes. Si realmente tenemos nuestro propio hijo, ¿no
significaría que ese hijo se llevará a mi esposa?
—¡Pero amo al tío Pete!
Los pensamientos de Pete fueron devueltos a la realidad por la voz de Yam, el
chico estaba abrazando su cuello y Pete le susurró al oído.
—¿Amas al tío Pete má s de lo que amas al tío Ae?
—Por supuesto, pero por favor no le digas al tío Ae, mi papá dijo que el tío Ae se
sentiría molesto.
Pete sonrió feliz después de escuchar lo que dijo. También apretó con fuerza las
mejillas del niñ o. En este momento, Ae ya había salido de la casa embrujada con

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su mano todavía sosteniendo la mano de la sobrina. Cuando vieron esta escena, se
confundieron.
—¿De qué se está n riendo ustedes dos?
—Nada... ¿Fue divertido, N'Yim?
—Bueno, no vi ningú n fantasma, só lo escuché muchos sonidos, había bastante
viento y luego salí. No dio miedo.
La niñ a negó con la cabeza y pareció decepcionada. En ese momento, hubo gritos
de adultos que venían de la casa embrujada. Pete se volvió para mirar a su novio,
solo para verlo negar suavemente con la cabeza, luego colocó su mano sobre la
cabeza de N'Yim.
—Vamos a jugar en el agua, no pierdas el tiempo parada aquí.
Después de eso, Ae tomó la mano de N'Yim y estaba a punto de irse, pero ella
volvió a tirar del brazo de su tío.
—¡No he probado esas cosas allá , tío!
—¡No eres lo suficientemente alta!
—Mas tarde, después de hoy, tengo que ir a casa y beber leche. Cuando sea lo
suficientemente alta, debes traerme aquí.
N'Yim se sintió realmente desafortunada, luego se dio la vuelta para mirar a la
persona que sostenía a su hermano.
—Y el tío Pete también, tú y el tío Ae tienen que traerme aquí de nuevo.
—Sí, te lo prometo.
—Yo también. No te olvides de mí.
En este momento, N'Yam también levantó su mano en alto, les estaba recordando
a todos que no se olvidaran de él, Pete rá pidamente extendió su dedo meñ ique
para engancharlo con el de N'Yam.
Antes de dirigirse al á rea del parque acuá tico, Pete vio a varias chicas de pie en
silencio y mirá ndolos, luego inclinaron la cabeza como si se preguntaran algo. Al
final, cuando pasó junto a ellas con Ae, Pete incluso escuchó accidentalmente sus
susurros.
—No creo que sea una familia de solo un padre y un hijo. ¡Obviamente es una
familia de tres!
Pete sonrió después de escuchar sus susurros. Ae se dio la vuelta para
preguntarle.
—¿Por qué está s sonriendo?
—Nada. Creo que hoy puedo experimentar la sensació n de ser madre por un
momento.
Las palabras de Pete confundieron a Ae, pero cuando vio al pequeñ o sobrino en
los brazos de Pete, finalmente se rió a carcajadas.
—Creo que será s una buena mamá .
—¿Olvidas que yo también soy un hombre?
Y la respuesta de Ae fue perfecta.
—Solo sé que eres mi esposa, y eso es todo.
Esta vez, la 'esposa' no supo qué decir.
—Hace mucho calor, quiero ir a casa.
—Sí, hace demasiado calor, vamos a casa.

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En este punto, Can se estaba sintiendo realmente divertido porque estaba
mirando a los dos jó venes frente a él que tenían casi exactamente la misma
expresió n en sus rostros.
N'Phu cruzó los brazos frente a su pecho y en su rostro mostraba que estaba
molesto. Tin también cruzó los brazos frente al pecho y también había una
expresió n de irritació n en su rostro.
De acuerdo, realmente no había necesidad de adivinar a quién seguiría Phupha en
el futuro.
—Tonterías, ya estamos aquí, ven, Phu, juguemos en el agua.
—¡No! Tengo una piscina en casa, no hay necesidad de venir aquí a jugar. Hace
demasiado calor, no me gusta.
Este niñ o malcriado impredecible comenzó a quejarse. Can frunció el ceñ o.
Sacrificó su precioso tiempo de dormir en la habitació n con aire acondicionado
para traerlo aquí a jugar, está a punto de hacer una rabieta. Nada se escapa a los
ojos de Tin, así que suspiró profundamente. Sabía que sería así.
—¿Có mo puedes ser tan ignorante? Todo lo que sabes es quedarte en casa y jugar
videojuegos todo el día, tarde o temprano, tus ojos se dañ ará n. Deberías pasar
má s tiempo al aire libre. Sacrifiqué mi precioso tiempo para traerte aquí a jugar,
al menos muestra algo de aprecio.
—¿Cuá ndo te pedí que lo hicieras?
—¡Hey! ¡Estú pido mocoso!
El niñ o pequeñ o y el niñ o grande empezaron a discutir... Por lo tanto, el asunto
cayó en manos de Tin, quien en un principio quería irse a casa. Agarró el hombro
de su novio con una mano y el hombro de su sobrino con la otra, luego los
arrastró a ambos al á rea del parque acuá tico. Porque sabía que si seguían así,
N'Phu se irritaría aú n má s por el calor.
Solo después de que llegaron al á rea del parque acuá tico y se cambiaron de ropa,
el sentimiento de infelicidad de N'Phu se volvió menos intenso. Incluso señ aló el
colorido tobogá n en el á rea de los niñ os y le pidió a Can que se uniera a él.
Después de todo, N'Phu todavía es un niñ o, por lo que es bastante normal que
cambiara de humor rá pidamente.
Ademá s, Tin también entendía por qué todo el mundo estaba malcriando a Phu...
porque ahora ya no tenía madre.
Evidentemente, no bastaba con que un niñ o que estaba en la edad de añ orar el
amor maternal viera a su madre só lo una vez al añ o. No importaba cuá nto
mimara su hermano a Phu y cuá ntas personas contratara para cuidar de él, Tin
sintió que nunca podría compararse con sus propios padres. Por lo tanto, Tin a
veces sentía lá stima por él y simplemente le dejaba hacer sus berrinches, sin
embargo esto hacía que Phu se volviera tan irracional, que cada vez que Can lo
veía, siempre decía.
"Tu sobrino es solo una copia de ti. Ya es suficiente tener un tipo arrogante en el
mundo. No conviertas a tu sobrino en ti".
Tin no podía entender nada en absoluto. ¿De qué manera eso fue algo malo? ¿Es
mejor dejarlo saltar arriba y abajo como su novio con TDAH?

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[Nota: TDAH significa Trastorno por déficit de atenció n con hiperactividad. Es
una condició n cró nica mental que incluye dificultad de atenció n, hiperactividad e
impulsividad.]
—¡¡Can!! ¡¡Deja de molestar!!
El hombre que estaba sentado mirando las pertenencias fue agredido. Un chorro
de agua clara se vertió sobre su cabeza. Rá pidamente miró hacia arriba y vio a
Can, que llevaba un bañ ador que le llegaba hasta las rodillas, sosteniendo una
pequeñ a taza en la mano y sonriéndole.
—Ya estsmos aquí, ¿por qué te quedas allí? Vamos a jugar. Aguafiestas.
—Creo que solo me sentaré aquí, puedes jugar todo lo que quieras.
—¿Por qué tienes que ser así?
—Déjame en paz. Aquí estoy bien.
Tin negó con la cabeza con calma. No quería actuar como un loco junto a su novio.
Can abrió ampliamente los ojos.
—¡Oye! No te dejaré sentarte allí, luciendo tan guapo para ser observado por
otras mujeres, date prisa y trae tu trasero aquí.
—¿Está s celoso?
—¿Qué está s diciendo? Simplemente no quiero que esas chicas se sientan
decepcionadas porque ya tienes una esposa.
¿Lo ven? Cantaloupe sigue siendo tan honesto como siempre. Al mismo tiempo,
había un niñ o que observaba en silencio la interacció n de los dos adultos. De
repente corrió hacia el lado del banco y sacó la billetera de Tin con la velocidad de
un rayo. Sacó dos billetes mientras miraba a su alrededor sin parar. Al final, con el
dinero en la mano, caminó hacia la heladería como si nada. Tampoco informó a
nadie en absoluto.
Cuando se acercó a la heladería, vio que ya habían dos o tres personas en fila, por
lo que frunció el ceñ o.
No quiero hacer fila, hace mucho calor. Solo quiero comer helado de inmediato.
Al tener este pensamiento, Phu fue directamente al principio de la cola, donde
estaba parada una niñ a empapada, extendiendo sus manos para tomar un gran
vaso de refresco y un helado de chocolate.
—Tó malo. No necesitas darme el cambio.
Phu dio un paso adelante sin rodeos para tomar el refresco de cola en su mano,
colocó un billete violeta en el mostrador de la caja y luego se alejó de la heladería
para volver con su tío. En este momento, el vendedor y todos los que hacían cola
para comprar el helado estaban ató nitos por su movimiento y sus ojos estaban
muy abiertos.
[Nota: El billete morado es de 500 baht, aproximadamente $16 USD]
Sin embargo...
—¿Có mo pudiste hacer eso? ¡¿Debes hacer cola primero?!
La niñ a lo alcanzó apresuradamente, agarró a Phu por el hombro con una mano y
le preguntó muy enojada.
Phu tuvo que darse la vuelta y mirar a la niñ a.
—Puedes volver a la fila, el vendedor no dijo nada.

120
Tan pronto como el niñ o terminó su oració n, tomó un gran sorbo de cola, y
después de tomarlo, también hizo un fuerte eructo mientras tenía una expresió n
muy 'digna de golpearlo' en su rostro. La niñ a apretó el puñ o inconscientemente.
—¿No te enseñ ó tu maestro en la escuela que se debe respetar la fila?
—Lo hicieron, ¿y qué?
Al chico mimado no podría importarle menos esto. Luego se dio la vuelta y estaba
a punto de encontrar la ruta por dó nde llegó . La pequeñ a se quedó parada en el
mismo lugar, sus ojos brillaban por las lá grimas.
—¡Mocoso mimado!— gritó la niñ a.
<GOLPE>
—¡¡¡¡Ay!!!!
Luego agarró el hombro del niñ o y le dio un puñ etazo en el ojo. El vaso en la mano
del niñ o voló de inmediato y cayó al suelo. El niñ o se sorprendió por este
repentino ataque. Inmediatamente gritó en voz alta. Sintió que este era el
sentimiento má s doloroso que jamá s había experimentado en su vida.
Nunca, ni siquiera mis padres me han golpeado.
—¡Este puñ etazo te enseñ ará lo que es hacer fila! — dijo en tono de satisfacció n
esta pequeñ a, que no toleraría la injusticia enfrentá ndolo para darle una lecció n.
En este punto, la boca del chico, que era má s alto y má s grande que ella, se
crispaba y luego...
—Waaa...
—Cá llate, es obvio que tú eres el culpable, será s castigado si haces algo malo.
—N'Yim, ¿qué pasó ?
El sonido de los niñ os peleando rá pidamente llamó la atenció n del adulto no muy
lejos. Rá pidamente miró a su alrededor y pronto encontró a quien estaba
buscando, por lo que rá pidamente corrió hacia allí. Se acercó a la niñ a y le
preguntó qué estaba pasando. Debido a que estaba enojada e impaciente, la niñ a
estaba teniendo dificultades para explicá rselo a su tío Pete.
—Tío Pete, tomó mi bebida, no lo dejé. Papá dijo que si alguien hacía algo mal,
podía golpearlo.
La niñ a lo explicó razonablemente, y Pete solo pudo abrir los ojos ampliamente y
miró a estos dos archienemigos. Mientras Phupha lloraba, Pete levantó la mano
por encima de las cejas, tratando de encontrar a los padres del niñ o, en ese
momento...
—Phupha, ¿qué pasó ?
De repente, alguien se apresuró a llegar allí, Pete se sorprendió al ver quién era
esa persona.
—Tío, duele, ay... duele mucho... <sollozo>... no puedo... no puedo ver nada...
<sollozo>
Su llanto iba en aumento y el niñ o corrió hacia su querido tío con la cara cubierta
de lá grimas. Tin frunció el ceñ o. Miró hacia arriba y estaba a punto de discutir con
la otra parte. En ese momento se dio cuenta...
—¿Pete?
—Hey, Ai'Pete, ¿Qué está s haciendo aquí? ¿Qué sucedió ?
Can también corrió hacia el lugar y preguntó confundido.

121
Tin dijo enojado —Esta mocosa golpeó a N'Phu.
—Mi nombre es N'Yim, no 'esta mocosa'. Le pegué porque se portaba mal. Se
metió en la fila y tomó mi bebida. El tío Ae dijo que tenía sed. Quería darle de
beber a mi tío.
La niñ a no retrocedió en absoluto. Constantemente enfatizaba que no era culpa
suya. El nombre que acababa de mencionar hizo que Tin frunciera el ceñ o.
—¿Ae?
—Sí, mi tío Ae.
Esta vez, Tin y Can se miraron y Pete sonrió .
—Esta es N'Yim, la sobrina de Ae, y ese chico es...
Pete usó su dedo para señ alar al niñ o que lloraba—Este es Phu, el sobrino de Tin
—dijo Can
—¿Oh? Qué coincidencia.
Pete sonrió torpemente, porque incluso si la otra parte estaba equivocada, N'Yim
lo golpeó primero. En este momento, Ae se acercó con su sobrino. Escuchó la
breve explicació n de su novio sobre la situació n y luego miró a las dos personas
conocidas en el lado opuesto, no pudo evitar levantar las cejas.
No hace falta decir que ambos niñ os dijeron que no estaban equivocados.
Ahora, solo había el sonido de sollozos en el lado de N'Phu, que todavía se cubría
el ojo. Cuando Ae miró a N'Yim con una expresió n seria en su rostro, su mirada
arrogante y obstinada también desapareció gradualmente.
—No hice nada malo, tío Ae.
—Pero no deberían usar la violencia, ¿por qué no pudieron hablar primero?
—Yo hablé con él.
La niñ a respondió con confianza. Ae se agachó y miró a su sobrina y luego
suspiró .
—Se equivocó al interrumpir la fila, pero ¿sabes por qué tú también está s
equivocada?
—Le pegué.
La pequeñ a niñ a inmediatamente inclinó la cabeza, sabía la razó n por la que ella
también tenía la culpa. Ae asintió suavemente y luego continuó .
—Como ya sabes que también hiciste algo incorrecto, ¿sabes lo que tienes que
hacer?
Aunque tenía esa expresió n reacia en su rostro, la niñ a aú n hizo lo que le dijo su
tío y se dio la vuelta para mirar a Phupha, cuya nariz estaba roja por el llanto.
Luego dijo suavemente.
—Lo siento. Siento haberte lastimado. Estamos a mano ahora.
La voz de la niñ a era muy suave. Phu simplemente volvió la cabeza y la ignoró .
—Tío Tin, tienes que castigarla.
<Golpe>
—¡Ay! ¡P'Can!
—¿Todavía tienes el descaro de pedirle a tu tío que haga eso? ¿Quién te dijo que
te metieras en la fila en primer lugar? Será mejor que te golpeen al menos una o
dos veces, para que puedas recordar la lecció n, y tú ... Cá llate, si tu sobrino hizo

122
algo mal, entonces debe disculparse. La sobrina de Ae ya ha dicho que lo siente.
¿Eres realmente un hombre? Así que no te disculpará s, ¿verdad?
Afortunadamente, Can también estuvo presente porque rá pidamente agarró la
cabeza de su novio con la mano mientras regañ aba a N'Phu. Sus palabras dejaron
sin habla al tío y al sobrino.
—Oye, date prisa y discú lpate con N'Yim.
Can agarró a Phu por el hombro y lo obligó a enfrentarse a N'Yim. Phu rechinaba
los dientes.
—Lo siento.
—¿No te sientes aliviado?
Can dijo con satisfacció n, luego alborotó el cabello del niñ o para mostrar que
estaba haciendo un muy buen trabajo.
—Dime, ¿có mo es que tú también está s aquí?
—Suelo venir aquí con mis sobrinos. No puedo creer que te vea aquí.
Ae respondió a la pregunta de su amigo, Can se echó a reír por esta coincidencia.
—Tú y tu sobrina son exactamente iguales. Ambos son buenos ejemplos de
personas que no tolerará n la injusticia.
—Y solo saben usar los puñ os.
Tin acarició la cabeza de su sobrino y agregó enojado.
—Tu eres igual, solo sabes resolver problemas con dinero.
Can se dio la vuelta para regañ ar a su novio. Tin puso los ojos en blanco, luego
llevó a su sobrino al lado opuesto. Sin embargo, a Can no le importaba menos
esto, estaba má s preocupado por los sentimientos de su viejo amigo. Palmeó
fuertemente el hombro de Ae y dijo...
—Entonces yo también me voy, adió s, N'Yim, ¡tu golpe fue increíble!
Después de que Can, alcanzó al tío y a su sobrino, dejando atrá s a la otra familia.
Soltaron un largo suspiro.
—Es bueno que todos nos conozcamos, de lo contrario Tin definitivamente no se
hubiera rendido tan fá cilmente.
—Bueno, como dijo Can, ese niñ o crece en un mundo de dinero... N'Yim, no
puedes ser como él.
Ae se dio la vuelta para tomar la mano de su pequeñ a sobrina, y la pequeñ a
asintió con la cabeza.
—Papi dijo que no pueden comprarnos con dinero, tío Ae.
—Bien... Ahora, ve y juega con el agua.
—No, tengo que volver a la fila para comprar la bebida.
Dijo la niñ a en voz alta y se dirigió a la cafetería. Pete le recordó rá pidamente.
—Si hay alguien metiéndose en la fila de nuevo, no puedes golpearlo esta vez,
N'Yim.
—¡Lo sé!
La niñ a confirmó y se escapó , dejando atrá s a los dos tíos. Ambos suspiraron.
—Es agotador, pero también muy divertido, Ae.
—Sería mucho mejor si mi hermano no le enseñ ara a su hija a ser tan agresiva.
Ae negó con la cabeza suavemente, luego bajó la cabeza para preguntarle al
pequeñ o sobrino en sus brazos.

123
—Tu hermana es realmente agresiva, ¿N'Yam quiere ser como ella o quiere ser en
una persona tranquila?
La respuesta a esta pregunta probablemente solo podría revelarse en el futuro,
pero una cosa era segura...
¡Sin duda, llevar de paseo al sobrino y a la sobrina durante todo un día fue mucho
má s agotador de lo que esperaban! Pero esta también fue una buena oportunidad
para experimentar ese sentimiento de ser padres.

Especial 10
—Muchas gracias por lo de hoy.
—Por favor, no digas eso. Solo estaba haciendo mi trabajo.
Aunque el hotel que administa Putch es solo un hotel mediano en el centro de
Bangkok, el nivel de su gracia y sofisticació n no es inferior al de los hoteles de
cinco estrellas. Por lo tanto, su hotel a menudo es elegido como sede de varios
eventos importantes. Hoy fue igual que antes, Pete llegó a saludar a la persona de
la empresa de relaciones pú blicas que se encargaba de organizar este evento.
—Mis clientes quedaron realmente satisfechos con el servicio que brindó su hotel
en el ú ltimo evento.
—En realidad, todo fue gracias a la señ orita Ticha. Usted organizó un evento tan
emocionante que todos lo disfrutaron mucho.
—Oh, por favor no me halague demasiado, o de lo contrario podría empezar a
volverme arrogante.
Dijo esta gerente de eventos, cuyo nombre es Ticha, mientras tenía una sonrisa
encantadora en su rostro. Observó al chico guapo de traje frente a ella. Sentía que,
independientemente de las veces que viera a la otra parte, no podía apartar la
mirada de él.
Pitchaya estaba en la parte superior de la lista de 'el hombre con el que todas las
chicas quieren salir con má s frecuencia'. Viene de una familia conocida, tiene un
trabajo decente, es de buena apariencia y muy educado, como el Sr. Perfecto en
esos dramas para adolescentes. Por eso, cuando Ticha se enteró de que su cliente
finalmente decidió elegir este hotel como lugar para realizar el evento, se
emocionó mucho.
—Estoy diciendo la verdad... Si hay algo en lo que necesite que cooperemos, por
favor há gamelo saber.
—Está bien, muchas gracias.
Ella le sonrió dulcemente. Cuando vio que la otra persona volvía para mirar
algunos documentos, caminó silenciosamente unos pasos má s cerca de él. La
fragancia de su perfume llegó a su nariz de inmediato. El olor era exquisito y
suave, con una pequeñ a mezcla de sensualidad. Inmediatamente supo que este
hombre tenía muy buen gusto.
—Oh, no me di cuenta de que ya es mediodía. No esperaba molestarlo por tanto
tiempo así. Entonces... por favor déjeme invitarlo a almorzar, para mostrar mi
agradecimiento por su ayuda.

124
Nadie esperaría que esta mujer hiciera un movimiento tan rá pido como ese, dijo
esas palabras mientras sonreía encantadoramente a Pete. En este momento, Pete
miró primero el reloj, luego su expresió n facial se volvió incó moda.
—Lo siento mucho, pero hoy ya tengo una cita a las 12:30.
—¿Es con un cliente? ¡Oh! Lo siento mucho, por ser tan grosera...
Pero ella realmente quería saber con quién se iba a encontrar la otra parte. Hizo
todo lo que pudo para quedarse hasta el almuerzo.
Después de escuchar lo que dijo Ticha, el hombre de enfrente simplemente
sonrió , indicando que no le importaba en absoluto. Entonces sus ojos inteligentes
se volvieron mucho má s tiernos. Nada podía escapar ante la mirada atenta de
Ticha, se sentía realmente ansiosa.
—ok, es só lo un asunto privado... Esa persona... es alguien muy importante para
mí.
La sonrisa se desvaneció inadvertidamente en el rostro de la oyente. Se sintió
mal del estó mago. Especialmente cuando miró el hermoso rostro, ojos dulces y
encantadora sonrisa de Pete, se sintió aú n má s molesta. Luego escuchó a la otra
persona decir con emoció n.
—Es mi hermano. Viene de Alemania. Ya debe haber llegado.
—Aa... Entonces esa persona es su hermano.
Ticha soltó un suspiro de alivio. Su rostro se iluminó con una alegría inconcebible.
Pete notó su cambio de expresió n. No tenía idea de que hace un momento la dama
frente a él estaba reproduciendo un melodrama de 67 episodios en su cabeza, así
que frunció el ceñ o.
—¿Qué pasa?
—Nada. Solo pensé que era una persona muy especial, porque se ve muy feliz.
Su respuesta hizo que Pete formara una sonrisa. É l asintió y sonrió gentilmente.
—Sí, estoy feliz. Realmente feliz.
La hermosa dama se sintió aliviada.
Solo se estará reuniendo con su propio hermano y ya estaba así feliz. Si fuera una
cita con su amante, ¿qué tan emocionado se pondría?
***
—¡¡¡Alvin!!!
Después de despedirse de su cliente, Koon Chai Pitchaya se dirigió al vestíbulo del
hotel para preguntar si su hermano había llegado o no. Sin embargo, tan pronto
como se acercó a la zona del vestíbulo, vio a un niñ o alto y grande de 14 añ os
junto al mostrador de recepció n. Su estilo de moda era má s europeo que asiá tico.
Llevaba una mochila enorme a la espalda. Pete se acercó rá pidamente a él y gritó
su nombre en voz alta.
Cuando el adolescente, que llevaba un par de audífonos, escuchó su llamada,
inmediatamente se los quitó y se dio la vuelta para buscar a la persona que lo
acababa de llamar, luego su rostro originalmente inexpresivo se transformó
inmediatamente en una
sonrisa feliz.
—¡P'Pete!

125
El niñ o de piernas largas, que ahora era casi tan alto como Pete, corrió
rá pidamente hacia él y lo abrazó con fuerza. Pete le dio varias palmaditas en los
hombros y luego empujó suavemente a la otra parte.
—Mi hermano se ha vuelto tan alto ahora— dijo Pete mientras miraba a su
hermano menor, a quien no había visto en má s de un añ o. Este niñ o solía seguirlo
a todas partes.
—Por supuesto, Alvin ya no es un niñ o de 12 añ os. Incluso hablo tailandés con
fluidez.
Dijo el adolescente con confianza, lo que hizo que Pete, quien también era su
maestro de tailandés, no pudiera evitar acariciar su cabello un poco.
—Tu yo de 14 añ os todavía se parece a tu yo de 12 añ os.
—Soy casi tan alto como tú , P'Pete.
Pete no tenía ninguna objeció n sobre este asunto. Probablemente por la comida,
el clima o el entorno que hacía que su hermano menor, que en realidad era 10
añ os menor que él, pareciera má s un adolescente de 16 a 17 añ os. No se parecía
en nada a los niñ os asiá ticos de su edad. Heredó el gran porte de su padre. Tiene
un rostro que lo hace ver inteligente y atractivo. Probablemente en los pró ximos
añ os, se convertirá en el novio perfecto, el sueñ o de todas las chicas.
—Nunca podrá s alcanzarme cuando se trata de la edad. Ven, vamos a ver a mi
madre. Ella realmente quiere verte.
Pete tenía la intenció n de llevar a Alvin a la oficina de su madre, pero su hermano
menor estaba preguntando por otra persona.
—¿Cuá ndo podré conocer a tu novio, P'Pete?
Pete se detuvo de repente. Miró la sonrisa astuta de este adolescente, sonrió
suavemente mientras decía—Si te dejo conocerlo, ¿está s seguro de que no le
causará s ningú n problema?
—P'Pete todavía piensa en mí como un niñ o.
—Porque eres má s joven que yo, niñ o.
—Niñ o haz esto, niñ o eso. Ya soy lo suficientemente mayor para hacer las cosas
que hacen los adultos.
Pete volvió la cabeza. Sus ojos estaban llenos de duda y sorpresa. Miró a su
hermano menor que de inmediato dejó de hablar cuando vio su mirada. Sus ojos
brillaban y sonrió con picardía.
—Es solo... que ya casi sé có mo protegerme.
El oyente simplemente negó con la cabeza en silencio. Sabía que el niñ o se crió en
un país extranjero, por lo que no era extrañ o que estas cosas fueran bastante
normales. Pete abrió el camino al frente, sin saber qué tipo de mirada estaba
teniendo la persona de atrá s cuando lo observaba.
—Quiero que admitas que ya soy un adulto y ya no un niñ o.
***
<Toc, toc, toc>
—P'Pete, ¿puedo entrar?
—Claro.
La cena estuvo excelente. Putch estaba tratando con sinceridad al hijo de su
exmarido. Incluso le dijo que considerara su casa como su hogar, porque ella

126
también lo considera como su propio hijo. Al igual que Su, que se hizo cargo de
Pete mientras aú n estaba en Alemania.
Después de la cena, los dos hermanos regresaron a sus propias habitaciones. No
mucho después, el que Pete supuso que iría a su habitació n, realmente llegó a
verlo.
—¿Por qué no has dormido todavía? Debió ser agotador estar sentado en el avió n.
Deberías dormir temprano para poder levantarte temprano mañ ana, ya que
quiero llevarte a un lugar.
Pete dejó el libro que estaba leyendo para hablar con su hermano. Alvin se acercó
y se sentó en el borde de la cama.
—Alvin ya ha dormido lo suficiente en el avió n. Pero... ¿Por qué no puedo dormir
en tu habitació n?
La pregunta inesperada del hermano menor hizo que el oyente frunciera
ligeramente el ceñ o.
—Mmm... creo que si quieres descansar, es mejor tener tu propia habitació n.
—Pero antes solíamos dormir en el mismo cuarto.
—Fue en el pasado, Alvin.
Pete sonrió . Miró al niñ o travieso que estaba actuando de manera irrazonable
mientras pedía dormir en su habitació n. Su obvio rechazo hizo que el rostro del
adolescente se volviera aú n má s molesto, luego vio la foto de él con otra persona
colocada junto a la cama.
—Pero si se tratara de tu novio, entonces lo dejarías dormir aquí, ¿verdad?
—¡Alvin!
Dijo Pete. Luego siguió la mirada de su hermano menor, que estaba observando
esa imagen, era una foto en la que Ae estaba envolviendo su brazo alrededor de
su cuello y ambos sonreían cá lidamente.
<'it would be love' sonando>
De repente, el celular, que estaba junto a la cama, vibró . Ambos se volvieron en
esa direcció n. Alvin luego vio una expresió n facial de su hermano que nunca había
visto antes... Sus ojos estaban llenos de felicidad, lo que indica que no podía
esperar para atender esta llamada.
—Necesito tomar esto.
Dijo Pete. Abrió la puerta y salió al balcó n. El nombre se escapó de la boca de su
hermano antes de que saliera de la habitació n, lo que hizo que Alvin no pudiera
evitar formar un puñ o.
—Ae...
—¡Maldició n!
Alvin maldijo en voz baja y luego respiró hondo. Su rostro se veía realmente
horrible, realmente esperaba que su hermano pudiera entrar en este momento,
que vea su expresió n y lo consuele. Sin embargo, su curiosidad se apoderó de él.
Rá pidamente observó toda la habitació n. Caminó hacia el armario y lo abrió para
hechar un vistazo al interior. Luego giró la cabeza para mirar a su hermano
mayor, que estaba de espaldas a él y se concentraba en hablar por teléfono.
—Esto no es de P'Pete.

127
Había una camisa y un pantaló n. Probablemente fueron para ocasiones formales.
También había un montó n de ropa de fú tbol y uniformes. Talvez se usaron como
ropa de dormir. Su hermano nunca usaría ese tipo de ropa para dormir. Lo que
significaba que... hay alguien má s... alguien que llega a dormir... y muy a menudo.
Alvin volvió a observar los alrededores con má s atenció n. Se dio cuenta de que
este lugar no parecía un lugar en el que solo viviera una persona.
Ropa de diferentes tallas, revistas deportivas, dos cepillos de dientes, dos vasos
y...
Alvin se sorprendió cuando encontró lo que había en el cajó n.
—Alvin, ¿qué está s...?
Pete se dio la vuelta para echar un vistazo y rá pidamente colgó el celular.. Se
apresuró a regresar a la habitació n mientras su hermano menor sacaba algo del
cajó n.
Condones y lubricante.
—Alvin, no tienes derecho a esculcar mis cosas.
Pete trató de mantener la calma y hablar con su hermano. Alvin sostuvo con
fuerza esas cosas que acababa de sacar.
—P'Pete, ¿duermes con él en esta habitació n? La habitació n de tu madre está al
lado.
—Alvin, eso es asunto mío.
Pete hizo todo lo posible por mantener la calma, aunque en el fondo estaba
furioso. Siempre había sabido un hecho, por eso trataba de mantener la calma.
Pero su hermano ni siquiera quería mantenerse al margen. Levantó la cara y miró
a Pete. Sus ojos estaban llenos de decepció n.
—¿Sabes, P'Pete... que hice todo lo posible por crecer má s rá pido? Traté de ser
má s alto, solo para que me notaras. Siempre me eh preguntado ¿Por qué tuve que
nacer tan tarde? ¿Por qué soy soy 10 añ os má s joven que tú ? ¡¿¡¿Por qué nací en el
momento en que estaba destinado a no poder nunca llamar tu atenció n?!?!!
El secreto que guardaba en lo má s profundo de su corazó n se reveló de repente.
El oyente solo pudo suspirar profundo. Pete supo durante bastante tiempo qué
tipo de sentimiento estaba albergando su hermano.
Antes, a Alvin simplemente le gustaba estar a su lado y lo seguía a todas partes.
Pero cuando Alvin comenzó a expresar su hostilidad hacia sus amigos,
especialmente los varones, mientras quería estar aú n má s cerca de él, le gustaba
pedirle que lo mimara, le gustaba decir que lo amaba, fue entonces que empezó a
sospechar. Sin embargo, no dijo nada. Incluso cuando Alvin supo que había
decidido volver a Tailandia, le suplicó que no fuera.
Pete se obligó a pensar que este chico simplemente no quería que su hermano
mayor se fuera. Pero ahora mismo... todas sus sospechas se habían hecho
realidad...
—Alvin, aú n eres joven. Siempre estuviste a mi lado, talvez es por eso que
confundes algunos pensamientos...
—¿Aú n eres joven?... P'Pete no puede aceptar mis sentimientos porque soy 10
añ os menor, ¿¡¿no?!?

128
Alvin gritó en voz alta, lo que hizo que la expresió n del rostro del oyente se
volviera espantosa.
—No, en absoluto. Alvin, es porque eres mi hermano.
Pete dijo la verdad, lo que hizo que Alvin apretara los dientes. Luego, enojado,
arrojó las cosas en su mano sobre la cama, parecía que estaba realmente herido
por esas palabras.
—Si pudiera elegir, hubiera preferido nunca nacer como tu hermano.
Tan pronto como terminó con aquella frase, se dio la vuelta y salió de la
habitació n. Pete solo pudo suspirar profundamente. Se puso una mano en la sien
y amasó con suavidad. Parecía que estaba experimentando un terrible dolor de
cabeza en este momento.
¿Que debería hacer?
Este pensamiento lo hizo sentir agotado tanto física como mentalmente, por lo
que tomó el celular con prisa y marcó el nú mero de su novio.
***
Lo primero que hizo Alvin muy temprano en la mañ ana fue buscar a los adultos
que vivían en esta casa mientras sostenía con fuerza en la mano una foto que
acababa de tomar de la sala. Cuando vio a la madre de su hermano, que estaba
desayunando, rá pidamente se acercó a ella y le mostró la foto.
—Tía Putch, ¿este tipejo viene aquí muy seguido?
Preguntó mientras señ alaba a la persona que estaba parada junto a su hermano
en la imagen, y la señ ora que estaba sentada frente a ellos en esa imagen también
era la persona que estaba frente a él en ese momento. La foto parecía una foto
familiar, pero sin su presencia en ella.
—¿Có mo puedes llamarlo así, Khun Alvin? Tienes que llamarlo P'Ae.
La tía Jiew, que estaba parada cerca, habló . Realmente no le gustó la forma en la
que el chico hablaba. Aunque el oyente estaba muy disgustado, no se atrevió a
decir nada, ya que sabía que la tía Jiew es una persona a la que su hermano mayor
respeta.
En ese momento, Putch levantó la cabeza y miró a Alvin. Ella sonrió suavemente.
—Sí, Ae viene aquí con bastante frecuencia. Deberías saber que Ae es...
—El novio de P'Pete... lo sé.
Alvin dijo malhumorado, luego arrastró una silla y se sentó . Cuando los adultos de
la casa le respodieron de forma tranquila, supo que probablemente ya lo sabían
todo.
La primera vez que empezó a sospechar que a su hermano mayor le podrían
gustar los hombres fue cuando entró en su habitació n sin llamar y lo vio mirando
la foto de un muchacho. Su padre también le insinuaba a menudo y le advertía
que no se apegara a su hermano mayor todo el tiempo, por lo que gradualmente
se dio cuenta de la verdad. Después de eso, finalmente supo la razó n por la que
P'Pete tuvo que irse a Alemania a vivir con él y su madre, fue porque insistió en
estar con el tipo de la fotografía.
Cuando supo la verdad, Alvin se sintió un poco extrañ o. No sentía a Pete
repugnante en absoluto. Al contrario, se compadeció de su hermano cuyos ojos
siempre estaban rojos por el llanto diario. Solía pensar que era porque extrañ aba

129
a su familia en Tailandia, pero resultó que era porque su hermano mayor estaba
desconsolado debido a que tuvo que romper con su persona má s amada. Desde
entonces, comenzó a mirar a Pete de manera diferente.
Su hermano mayor era una buena persona. Incluso si tenía una apariencia
hermosa y brillante, pero en el fondo es muy frá gil. Por eso, Alvin pensó que tenía
que protegerlo y cuidarlo, se convirtió en alguien en quien podía depender.
Cuando finalmente entendió lo que sentía por su hermano mayor, este decidió
volver a Tailandia para ver a su novio, lo que lo entristeció durante mucho
tiempo.
Solo podía culparse por no haber nacido en el momento adecuado. Nació
demasiado tarde y en una familia equivocada. Desde el día en que abrió los ojos a
la realidad por primera vez, ya se había hecho a la idea de que nunca podría estar
junto a Pete.
Putch miró su expresió n afligida y sonrió gentilmente.
—Alvin, ¿quieres hablar con Ae? Hoy es su día libre. Siempre viene todos los fines
de semana para encontrarse con Pete. Pero como Alvin está aquí, este fin de
semana Ae no vino. Puedo pedirle a mi conductor que te lleve a la casa de Ae.
El adulto lo compadeció . Sus palabras hicieron que este adolescente se pusiera
impaciente y respondiera.
—Por supuesto.
Putch sacó su teléfono y llamó a su 'yerno'. Cuando Alvin ya se había subido al
coche para dirigirse a la casa de Ae, la tía Jiew no pudo evitar negar con la cabeza.
—¿Es este el síntoma del complejo del hermano?
—Uhm, debe ser eso. Solo déjalo que trate a Ae tan solo una vez, y sabrá por qué
Pete lo ama tanto.
Anoche, a pesar de que pudo escuchar algunas partes de la conversació n, Putch se
mantuvo en silencio y regresó a su habitació n. Esto no era algo en lo que pudiera
interferir. Solo podía esperar que Alvin entendiera y dejara ir a su hijo.
Había pasado una hora. El lujoso coche giró hacia un pequeñ o callejó n. Habían
muchos edificios coloridos y no muy altos a ambos lados del camino. Alvin ni
siquiera sabía en qué lugar de Tailandia se encontraba en ese momento. El
entorno, el diseñ o exterior del edificio, el restaurante informal y una tienda de
electricidad en la planta baja le hicieron fruncir el ceñ o.
Ninguno de ellos, no está n ni cerca del nivel de P'Pete.
Esta fue la primera impresió n de Alvin. El chico de piernas largas se quedó quieto.
En el fondo, se sentía realmente reacio. Comenzó a preguntarse qué estaba
haciendo aquí.
—Todavía tenemos lugares disponibles, khrub.
De repente, una voz clara llegó a los oídos de Alvin desde abajo. Agachó la cabeza
y vio a un niñ o lindo y regordete que le sonreía alegremente.
—¿Qué?
—P'Yim le dijo a Yam que le hiciera saber que todavía hay mesas vacías en
nuestro restaurante.
Dijo el niñ o y señ aló la direcció n del restaurante. En este momento, su hermana
pequeñ a estaba ayudando a tomar los pedidos de los clientes.

130
—No estoy aquí para pedir comida.
—Entonces... ¿Por qué viene al restaurante de la abuela de Yam?
El niñ o lo interrogó . El oyente frunció el ceñ o. Este niñ o es realmente molesto.
—Estoy buscando a una persona llamada Ae.
—¡Ah! Está s buscando al tío Ae... ¡Abuela! Está buscando al tío Ae.
El niñ o corrió hacia una persona algo regordeta que estaba parada junto a la
estufa y dijo en voz alta. La mujer levantó la cabeza para mirarlo y luego sonrió .
—Ae ya me lo había dicho. Solo sube las escaleras... N'Yam, llévalo arriba.
—¡Ok Abuela, yo me encargo!
Y luego el niñ o tiró de la camisa de Alvin, aunque realmente quería darle un golpe
en la mano, lo siguió y entró en el restaurante.
Mientras lo seguía, aú n tenía este pensamiento despreciable en su mente de que
todo en este lugar no coincidía en absoluto con su hermano mayor.
—Ese tipejo llamado Ae, ¿có mo es?
— ¿Por qué llamaste al tío Ae tipejo?
Yam le respondió con una voz infantil, pero llena de sospecha.
—Respó ndeme.
Dijo enojado la persona a la que realmente le desagradaban los niñ os. Sin
embargo, la expresió n del rostro del niñ o se volvió realmente emocionada al
hablar de su tío.
—El tío Ae es estricto, pero también muy amable.
—¿Qué quieres decir? ¿Puedes explicar un poco má s?
Preguntó el oyente en tono impaciente, estaba muy ansioso, quería saber má s. El
niñ o que antes estaba alegre de repente se puso de mal humor.
—El tío Ae es muy estricto.
—¿Qué tan estricto?
—¿Por qué eres tan agresivo con Yam?
El chico no entendió así que preguntó ingenuamente. El oyente comenzó a perder
la paciencia, su rostro estaba lleno de frustració n.
—Que estoy haciendo..¿Por qué estoy hablando con este niñ o gordo?
—¡No soy gordo! La abuela dijo que soy gordito.
Yam hizo un puchero y se opuso. Alvin sonrió inmediatamente después de
escuchar lo que dijo Yam.
—¿A esto lo llamas 'no estar gordo'? Eres tan redondo como una pelota.
Alvin extendió la mano y tocó el vientre del niñ o para demostrar su punto. Yam
no estaba de acuerdo con él, así que comenzó a replicar.
—¡Yam no es gordo!
—¡Gordo!
—¡No soy gordo!
—¡Gordo!
Alvin no quería perder, por lo que contraatacó agresivamente. Los ojos del niñ o
comenzaron a derramar unas cuantas lagrimas, estaba a punto de llorar. Incluso
si notó eso, Alvin no retrocedió ni un poco de discutir con este niñ o mucho má s
joven que él. Solo había un pensamiento en su mente... Tenía que ganar esta
discusió n.

131
—No estoy gordo, Yam no es gordo... <Sollozo>... <Sollozo>...
Yam comenzó a sollozar, sus lá grimas caían como gotas de lluvia. La persona que
lo hizo llorar no sintió ni el má s mínimo remordimiento.
—Eres un gordo lloró n...
—¡Waaaaaaaaa!...
Este niñ o de 4 añ os rompió en llanto. La persona que acababa de salir de la
habitació n caminó rá pidamente hacia él después de escucharlo.
—N'Yam.
—...<Sollozo> ... tío Ae...
Cuando vio a su tío, el niñ o corrió hacia él y lo abrazó por la cintura. Ae también
se puso en cuclillas apresuradamente y le devolvió el abrazo para consolarlo.
Era la primera vez que Alvin ve en persona al amante de su hermano mayor.
¡Un hombre tan ordinario, ¿Podría conocer fá cilmente a una persona como Pete
en cualquier lugar de la calle?
Pensó para sí mismo y luego continuó observando a la otra parte con má s
atenció n. Tenía un rostro estricto con un par de ojos aterradores y piel
bronceada, lo que podía hacer que la gente se sintiera aterrorizada cuando lo
miraban. Comparado con él, P'Pete era mucho má s amable y amigable. Y Alvin
creía firmemente que él mismo era definitivamente má s guapo que Aep cientos
de veces.
—No llores, N'Yam. Los hombres no lloran así de fá cil.
Ae acarició suavemente la espalda de su sobrino y se dio la vuelta para saludar a
la otra parte.
—Eres Alvin, ¿verdad? Madre llamó para avisarme.
—¿Madre?
Alvin se sorprendió un poco. La 'madre' de la que esta persona estaba hablando...
era la mamá de P'Pete.
—Sí, mamá dijo que querías hablar conmigo. Siéntate.
Ae se sentó en la silla y dejó que su sobrino se sentara en su muslo. El oyente
también se sentó con cautela. Finalmente pudo hablar con el novio de su hermano
cara a cara.
—Pareces mucho má s adulto que en las fotos. Pete solía mencionarte mucho.
La persona mayor inició la conversació n primero. Alvin se sorprendió por sus
palabras.
—¿P'Pete te habla de mí?
Ae asintió .
—Sí, Pete parece que realmente te ama.
—Yo también lo amo.
Este adolescente impulsivo inconscientemente subió el volumen mientras
hablaba. El oyente frunció ligeramente el ceñ o, pero no dijo nada.
—Es amor... pero no amor fraternal— dijo sin rodeos.
Alvin tomó una decisió n. Esperó la respuesta de la otra parte, pero todo lo que
obtuvo fue una mirada muy tranquila y dó cil que venía de él.
—Deberías decirle esto a Pete, no a mí.
—¿No está s celoso o enojado? ¿No tienes miedo de que te lo quite?

132
—No, realmente no. Después de todo, sigues siendo el hermano menor que Pete
má s ama.
Alvin estaba asombrado porque esta persona no se parecía en nada a lo que
esperaba. La persona frente a él estaba insinuando que, independientemente de
cuá nto amaba a Pete o de tener sentimientos diferentes hacia él, nunca lo odiaría,
porque era el hermano menor de Pete... otra persona importante para él.
—Y le creo a Pete con todo mi corazó n. Es un insulto para él si sospecho que
siente algo por otras personas.
Alvin se quedó sin palabras, se enfrentó a esta persona por solo unos minutos y se
dio cuenta de que... perdió . Los ojos de Ae estaban determinados, tan
determinados como si nada pudiera hacerlos temblar.
—¿Crees que puedes cuidar a P'Pete? Solo bastó una mirada para saber que eres
mucho má s pobre que él.
Si pensaba que solo con decir algo así podía enojar a Ae, entonces este chico
estaba completamente equivocado. Para alguien que era bastante honesto y
directo como Alvin, estaba a kiló metros de distancia en comparació n con su
malvado padre. Después de escuchar lo que dijo, Ae solo sonrió . Su sonrisa era
decidida y confiada.
—Sí, soy má s pobre que Pete. No tengo nada que pueda compararme con él, pero
eso no significa que vaya a ser así en el futuro.
—¿Qué quieres decir?
Ae levantó ambas manos.
—Voy a usar estas dos manos para hacer las cosas posibles. Voy a hacer todo lo
posible para trabajar má s. Le mostraré a Pete que puedo cuidar de él. Voy a usar
estas manos para protegerlo por el resto de su vida.
Entonces Ae dejó caer ambas manos y miró a Alvin con seriedad.
—Puede que no me creas, pero haré todo lo posible para demostrá rtelo. Te
prometo que cuidaré bien de Pete. Lo trataré mejor que a nadie en este mundo.
Ae no espera que la otra persona lo acepte. Sin embargo, le acaba de dar una
promesa a este chico de 14 añ os. Incluso si no era necesario, pero Ae lo hizo
porque este chico es una de esas personas importantes para su novio. Cualquiera
que fuera importante para su novio también lo es para él. Las palabras y la acció n
de la otra persona hicieron que Alvin se sintiera perdido.
A los ojos de este hombre, P'Pete siempre fue su prioridad... pero para él... Para
Alvin era nada má s que un sentimiento de querer convertir a la persona que ama
en su posesió n.
—Como sea. Todavía te odio— dijo el adolescente sin rodeos, pero Ae solo sonrió
—Esperaré y veré si realmente puedes lograrlo o solo sabes alardear.
Finalmente, Alvin enfatizó mientras terminaba su oració n observando la
expresió n sonriente de la otra parte.
—Eres má s que bienvenido a esperarlo.
Cuatro ojos se miraron durante un rato, como si quisieran leer lo que la otra
persona estaba pensando en ese momento, luego Alvin bajó la mirada primero.
Observó hacia abajo e inesperadamente se encontró con un par de ojos llorosos,
pero enojados.

133
—¿Qué está s mirando, gordito?
—...¡Waaaaaaaaaaaaa!...
El niñ o que es tan redondo como una pelota volvió a gritar fuerte, causá ndole
jaquecas a su tío. El hermano menor de su amante puede parecer maduro, pero
en el fondo sigue siendo un muchacho infantil de 14 añ os. Alvin obviamente
estaba sacando su enojo hacia Ae en N'Yam.
Justo en este momento...
—¡Ae! ¡Alvin!
La persona que llegó má s tarde se acercó rá pidamente a ellos. Cuando ambos
adultos aú n no habían hecho ningú n movimiento, el niñ o ya se bajó rá pidamente
de los muslos del tío Ae y corrió para abrazar a su tío Pete con fuerza. Luego le
dijo a Pete mientras sollozaba.
—Tío Pete... <sollozo> Yam no es gordo... Yam no es gordo.
—No llores... ¿Qué le pasó a Yam?
—Fue él... <sollozo>... Dijo que... Yam... Estaba... Gordo...
Yam usó su dedo regordete para señ alar al 'culpable'. Alvin abrió ampliamente los
ojos cuando vio que su hermano mayor lo miraba con una expresió n sería, pero
'maternal' en su rostro.
—Alvin, ¿realmente dijiste eso?
—¿Eh? Por supuesto que no, P'Pete.
El 'culpable' lo negó de inmediato. El que lo denunció tampoco cedió .
—Tío Ae... El tío Ae también lo escuchó ... ¿Verdad? Yam no miente...
—Sí, sí. Yam no mintió . Eres un buen chico, no llores.
Pete consoló rá pidamente al niñ o. Luego se dio la vuelta para mirar al
adolescente mimado. Simplemente se descuidó un momento y este muchacho ya
se había apresurado a este lugar para causar problemas. La mirada de Pete hizo
tartamudear a Alvin.
—Lo siento.
—¿Y eso por qué?
—Anoche... dije que no quería ser tu hermano.
Pete se limitó a sonreír. Sostuvo al niñ o, se lo devolvió a su tío y miró a su
hermano menor.
—Tengo algo que necesito decirte también.— Pete respiró hondo y continuó .
—Anoche, cuando está bamos hablando y dije que no podía aceptar tus
sentimientos, no es porque seas má s joven que yo, y tampoco porque eres mi
hermano menor. No importa si eres tú o alguien má s.... Mi corazó n... no me
pertenece desde hace muchos añ os...
Pete dijo en un tono serio. Luego se acercó a Ae y colocó su mano sobre el pecho
izquierdo de su novio.
—Mi corazó n... ya fue entregado a este hombre. Lo siento.
—...
Aunque ya lo sabía, aunque ya lo había entendido, aunque podía ver cuá nto se
amaban... Todo lo que el hermano menor podía hacer era permanecer en silencio
y darse la vuelta para irse.
—Volveré primero.

134
—¡Alvin!
Cuando escuchó a su hermano gritar su nombre con incredulidad, Alvin giró
ligeramente su cuerpo.
—Hoy, Alvin quiere descansar. Por favor, espera hasta mañ ana para que
hablemos, P'Pete. También...
El que estaba hablando se detuvo un momento como si estuviera tratando de
tragarse sus palabras.
—Nos vemos la pró xima vez... P'Ae.
Dijo Alvin e inmediatamente se alejó , dejando atrá s a dos adultos mirá ndose
entre sí y un niñ o de cuatro añ os que acababa de presenciar un triá ngulo
amoroso.
Finalmente, Ae y Pete suspiraron al mismo tiempo.
—Lo siento porque mi hermano te ha molestado.—dijo Pete
—Está bien, tu hermano también es mi hermano... Incluso me estaba revisando de
la cabeza a los pies...
Dijo el ingeniero mientras recordaba la mirada hostil de Alvin, luego recordó la
mirada desdeñ osa de su padre.
—Su personalidad es... realmente como tu padre.
—Pero no tanto, Ae.
El hermano mayor intentó defender a su hermano menor. La otra parte le dio una
mirada después de escuchar lo que dijo.
—Eres tan parcial.
—Porque es mi hermano menor.
La persona que acababa de decir que no estaba celoso comenzó a mostrar
síntomas de celos. Pete estaba secretamente feliz por dentro. Luego soltó una
carcajada. Ae lo miró y dijo en tono serio.
—¿Te hizo algo inapropiado cuando compartía la cama contigo en el pasado?
—Déjame pensar...
Pete deliberadamente sostuvo esa ú ltima oració n mirando fijamente a su novio
que estaba celoso de un niñ o de 14 añ os. Sin mencionar que hace 2 añ os solo
tenía 12.
—No pasó nada. Ae, ¿está s celoso de un niñ o?
Pete finalmente sonrió . Ae puso los ojos en blanco.
—Si no te quisiera, entonces no me sentiría celoso.
—¿Me está s declarando tu amor?
—Claro que sí.
Ae admitió casualmente. Pete se sonrojó de inmediato. Se acercó a su amante y
extendió la mano para cubrir los ojos del pequeñ o N'Yam...
< Beso~~ >
—Tu recompensa, por ser tan comprensivo.
Pete sonrió . Luego empujó suavemente a Ae y también quitó la mano que cubría
los ojos de N'Yam.
—Me iré primero, vendré a verte el pró ximo fin de semana, Ae.
Cuando estaba a punto de irse, una mano grande lo agarró del brazo. Ae se acercó
a él y le susurró al oído.

135
—¿Puedes quedarte aquí por hoy y salir mañ ana por la mañ ana... Después de
todo, tu hermano ya ha dicho que no saldrá n hoy.
Ae dijo mientras frotaba el muslo de Pete. Cuando tocó ese lugar cá lido, los dos
jó venes que no se habían visto durante casi una semana empezaban a excitarse.
—Ae, me está s tentando de nuevo.
—¿De acuerdo?— Ae levantó la cabeza, miró a Pete cara a cara y este preguntó en
voz baja.
—¿Alguna vez te he rechazado?
Intouch dejó rá pidamente un beso en la mejilla de su novio. Y casi al instante se
dio cuenta de su sobrino, que estaba cubriendo sus dos ojos con sus propias
manos. Si Alvin pudiera ver esta escena, sabría que ya perdió incluso antes de
comenzar.
No importa cuá nto insistiera Alvin, nunca podría competir con una sola palabra
de Intouch.

Especial 11
<<Beep beep beep beep...>>
La habitació n estaba oscura y la temperatura era fresca. Por el momento, el
hombre que estaba envuelto bajo una gruesa manta movía con pereza su cuerpo.
Extendió la mano fuera de la manta y buscó la fuente de alarma, el sonido má s
molesto que nadie querría escuchar temprano en la mañ ana. Esta persona tomó
el teléfono y retiró la mano hacia la manta. Luego tocó la pantalla y con los ojos
entrecerrados, miró la hora en el celular y después lo colocó boca abajo.
—Mmm... ¿Qué hora es?
Cuando escuchó la pregunta, movió su cuerpo hacia el otro lado y abrazó a la
persona que compartía la misma cama, con fuerza por detrá s enterró su rostro en
la espalda desnuda de la otra parte. Debido a eso, el muchacho que originalmente
estaba medio dormido se despertó lentamente y dijo lo siguiente con voz
somnolienta...
—Son las 5 am... <bostezo> Hoy no estoy de guardia... Dame 5 minutos.
—Cada vez que dices cinco minutos, siempre se convierten en 15.
Tin bromeó , y Can comenzó a despertarse lentamente. Sin embargo, el tipo que
se suponía que debía estar en el gimnasio a las seis en punto apretó su agarre
alrededor de la cintura de Tin, parecía que iba a caer en un dulce sueñ o y
babearía feliz muy pronto. Tin rá pidamente se dio la vuelta y miró el rostro de
Can, luego le acarició suavemente el cabello.
—¡Can, despierta!
—Mmm~~~ ¡solo 5 minutos má s!
El mono hiperactivo murmuró en voz baja y estaba a punto de cubrirse la cabeza
con la manta, pero el novio que había estado con él durante tanto tiempo sabía
que haría eso, así que levantó la manta, buscó la boca de Can en la oscuridad y
finalmente. presionó un suave beso en él.
—Date prisa y levá ntate, o llegará s tarde.
—....
El nú mero al que había llamado al parecer no estaba disponible en este momento.

136
Can todavía estaba dormido, lo que hizo que los bordes de la boca del joven
empresario inconscientemente se levantaran un poco. Deslizó su mano en la ropa
de dormir de Can y bajó lentamente. Acarició suavemente su piel, luego inclinó la
cabeza y le susurró al oído.
—Si no puedes salir de la cama, te 'ayudaré' ... pero entonces, definitivamente
llegará s tarde.
—¡Oye! ¡Estú pido Tin! Solo quería dormir otros cinco minutos má s, ¡¿por qué
quieres hacerlo justo ahora?!
Can, que estaba medio despierto y medio dormido hace un rato, rá pidamente
empujó el hombro de su novio. Abrió los ojos ampliamente, observó cuá n
inteligente es su novio.
—¡Ya pasaron cinco minutos!
—¡De ninguna manera!
Tin no respondió directamente, tomó el teléfono celular de su novio, tocó la
pantalla y se lo mostró . La hora, que se mostró en la pantalla, eran las 5:05 am.
Can originalmente quería discutir, pero cuando vio la evidencia, no tuvo má s
remedio que sentarse rá pidamente y frotarse los ojos con ambas manos. Su
comportamiento era má s el de un niñ o y no el de un joven que ya tenía 25 añ os.
Al final, Can reunió todas sus fuerzas para salir de la cama y correr al bañ o. Tin lo
estaba mirando mientras mantenía una sonrisa en su rostro.
—¿Quieres café? Te prepararé un poco.
—¡Sí! ¡Y algunos aperitivos también!
El hombre que no se había despertado del todo rá pidamente gritó en voz alta en
el bañ o.
Para Can, comer siempre fue su prioridad.
Luego, la persona que no tenía que levantarse tan temprano se quitó la manta y
salió del dormitorio para ir a la cocina. Hirvió agua para el café, luego abrió un
cajó n para sacar dos tazas que tenían el mismo color. Una taza estaba pintada con
un mono sentado en una silla de oficina y la otra estaba pintada con un mono
saltando de un á rbol. No es necesario mencionar que el primero es suyo y el otro
es de Can.
Aunque Can solo dijo que quería comer tostadas, Tin encendió la estufa de gas e
hizo un huevo escalfado bien hecho. Tin sabía muy bien lo que le gustaba comer a
su novio.
Poco tiempo después, el café estaba listo y el desayuno cuidadosamente colocado
sobre la mesa.
—Tin, Tin, el ama de llaves vendrá hoy para llevarnos la ropa a lavar, ¿no?
—¿Ya nos hemos estado viviendo juntos por medio añ o y aú n no lo recuerdas?
Tin no respondió , sino que preguntó a la otra persona. En este momento, Can solo
vestía un par de jeans, sonrió después de escuchar lo que dijo.
—Te lo pregunto porque solo quiero asegurarme. Si la ves, recuerda preguntarle
por mí si ve mi remera verde, es la de camuflaje, no la encuentro por ningú n lado.
—Le preguntaré cuando la vea. Come tu desayuno, o llegará s tarde.

137
Tin le dijo a su novio, que se estaba colocando la camiseta, que desayunara.
Cuando se acercó a la mesa del comedor y vio un huevo escalfado extra,
inmediatamente mostró una expresió n de satisfacció n.
—Realmente me conoces demasiado bien.
Después de eso, Can rá pidamente se sentó en su asiento exclusivo y disfrutó de
este sencillo desayuno (tendría que comer un poco má s en el trabajo). Tin
también se sentó y tomó un sorbo de café mientras miraba a su novio en silencio.
—Entonces... ¿Ya he estado viviendo contigo durante medio añ o?
Cuando Can preguntó , su boca estaba llena de comida. Tin negó con la cabeza.
—¿No lo recuerdas?
—Puedo recordar una cosa... que te amo.
Tin Metthanan fue derrotado.
En este punto, el hombre alto observó en silencio a su novio que estaba comiendo
tan felizmente, las migas de pan estaban por toda su boca. Sintió satisfacció n y
alegría. Lo má s importante era... su novio finalmente había dado un gran paso y
decidió vivir con él. Nunca antes se había sentido tan feliz.
De hecho, Tin le había estado pidiendo a su novio que se mudara con él durante
un añ o, pero como todavía había muchas cosas que preocupaban a Can, no
pudieron llegar a un acuerdo. Hasta que un día, Can dijo esto mientras comía con
él.
—Creo que sería muy bueno desayunar contigo todas las mañ anas.
Ese fue el comienzo de su mudanza juntos. Y ahora, finalmente pudieron
desayunar juntos todos los días.
—¡Bien! Tin, hoy Ai'Ae quiere mudarse a su nuevo apartamento. Planeo ayudarlo
después de que termine el trabajo.
—¿Entonces se mudará hoy?
La pregunta de Tin hizo que los ojos de Can se agrandaran.
—Oye, Ai'Ae te compró el apartamento, ¡¿có mo puedes no saberlo?!
Después de que Tin escuchó lo que dijo Can, movió los ojos de izquierda a
derecha.
—Se lo compró a la empresa, no a mí. Todo lo que hice fue darle algunos consejos
sobre la compra de una propiedad y luego enviar a un agente de bienes raíces
para que lo ayudara.
Tin dijo sin entusiasmo. No tenía tanto tiempo libre para preocuparse si Ae había
preparado todos los documentos necesarios o cuá ndo se mudaría.
—¡Mi novio es tan despiadado!
Can dijo en broma, pero en realidad no lo creía. Porque aunque Tin dijo que solo
le dio un pequeñ o consejo, Can sabía que Tin le dijo a Ae todo lo que podía pensar
sobre la compra de una propiedad en tan solo unas horas. No solo le dijo a Ae qué
ubicació n era buena, cuá nto debería ser el pago inicial, qué opció n era mejor,
pagando todo de una vez o perió dicamente, comprando una casa o un
apartamento, sino que también le enseñ ó a Ae có mo conseguir un préstamo del
banco. Con estos conocimientos en su cabeza, Ae podría trabajar fá cilmente como
agente de bienes raíces. Al final, Ae incluso tuvo que llamarlo específicamente
para agradecerle su ayuda.

138
Eso fue hace un añ o cuando mencionó sus deseos de comprar una casa, y este
añ o... Ae dijo que estaba listo para mudarse.
También dijo que iría con Pete a su nuevo hogar.
Cuando Can pensó en esto, no pudo evitar sonreír, porque realmente entendía
có mo se sentía Ae. Cuando el amor entre dos personas se hiciera má s fuerte cada
día que pasaba, tendrían un fuerte deseo de vivir juntos. Incluso si ambas partes
son hombres, aunque no habría boda, ni certificado de matrimonio, tampoco
ningú n documento legal para proteger a su pareja, pero el profundo sentimiento
que tienen el uno por el otro, es lo que les hace querer estar má s cerca. Esta fue
también la razó n por la que se mudó a vivir con Tin.
Lo que querían era pasar la vida juntos, amarse y disfrutar de la compañ ía del
otro por el resto de sus vidas... no importa en lo má s mínimo si no había un
certificado de matrimonio.
—¿No puedes simplemente solo asistir a la reunió n de este fin de semana?
Incluso si vas hoy, no hay mucho en lo que puedas ayudar. No es como si su
familia no estuviera allí para ayudar a mover las cosas.
—jajaja, la reunió n de este fin de semana fue organizada por Ai'Pond, dijo que
quería organizar una fiesta en esa nueva casa... hablando como si él mismo fuera
el dueñ o.
Cuando Can pensó en la persona que reunió a todos no era otro que el Rey de los
Chismes, se rió a carcajadas. Escuchó que Pond incluso invitó a los viejos amigos
de su escuela secundaria.
Parece que el nuevo hogar de Ae será un desastre después de esa fiesta.
—Bien, entonces no iré hoy. Deberías volver a dormir. Yo mismo lavaré los
platos... ¿Irá s al gimnasio?
Can cambió de tema, luego rá pidamente agarró el plato, las dos tazas y se dirigió
al fregadero. Tin negó con la cabeza.
—No puedo. Quiero preparar algunos materiales para una reunió n en la
empresa... Pasaré por el gimnasio a eso de las 7:30.
—Está bien, lo entiendo. No tengo ningú n cliente para ese momento, te esperaré.
Can dice mientras limpia rá pidamente los platos. Luego regresó al lado de Tin. En
ese momento, Tin todavía estaba sentado en la mesa del comedor y sostenía su
teléfono mó vil para revisar correos electró nicos.
Entonces, Can se acercó por detrá s, Tin se dio la vuelta y levantó la cabeza para
mirarlo. En este momento, Can bajó la cabeza y presionó un beso en los labios de
su novio, luego sonrió y levantó la cara.
—Bueno me voy a trabajar ahora.
—Está bien, te veré má s tarde.
Después de eso, con una expresió n alegre en el rostro, Can salió de la casa, porque
solo este simple beso ya le había dado suficiente energía para trabajar.
Incluso si Can supo que habría desafíos cuando vivieran bajo el mismo techo,
también sabía que la dulzura que traía vivir juntos valía totalmente la pena. En
este momento, mientras vivan juntos, se sienten extremadamente satisfechos.
—¡Uf!... Estoy tan cansado.
—¿Solo eso y ya te cansaste?

139
—¡Nos estamos mudando, Ae! ¡Có mo no puedo sentirme cansado!
Después de ordenar todos los muebles cuidadosamente, Koon Chai Pitchaya se
sintió tan agotado que se dejó caer en la cama, lo que hizo que la persona que
estaba colocando sus trofeos en el estante se volviera y sonriera mientras miraba
a la persona que estaba acostada. Luego se acercó a él y se inclinó para mirarlo
mientras sonreía.
—Esta es nuestra casa, ¿verdad?
Pete puso su mano en la mejilla de la otra parte y preguntó en voz baja. Ae
también puso su mano sobre esa mano blanca, su rostro se iluminó . Aunque está
exhausto, también está realmente feliz.
—Sí. Esta es nuestra casa.
Ae agarró esa mano suave y tiró de la otra persona para que pudiera sentarse.
Luego le acarició las mejillas.
—A partir de ahora, es posible que tengas que pasar por muchas dificultades
junto a mí.
—Ae, estoy má s que listo para quedarme a tu lado y superar cualquier obstá culo.
Pete respondió gentilmente. Levantó la cara, envolvió sus brazos alrededor de la
cintura de su novio y presionó su rostro contra esos abdominales musculosos.
Ae miró en silencio a su alrededor. Finalmente había alcanzado este hito.
El apartamento que eligieron fue un apartamento de lujo construido por
Metthanan Corporation. Tenía una sala de estar, dos dormitorios, una cocina y un
bañ o. A pesar de que no estaba cerca de la estació n de metro, para alguien que
tenía sus propios autos como estos dos, no era un gran problema. Sin embargo, el
apartamento era bastante grande y si bien el diseñ o interior no se ajustaba a sus
gustos, probablemente iban a estar ocupados en este apartamento un tiempo.
A pesar de que el apartamento era má s caro de lo que esperaba, Ae había estado
ahorrando una cantidad suficiente de dinero desde que comenzó a trabajar. Sin
mencionar que má s adelante, tuvo un aumento en su salario y bonificaciones cada
mes.
Al principio, cuando la madre de Pete se enteró de esto, quiso comprarlo como
regalo para los dos, pero Ae rechazó cortésmente su oferta. Quería hacer todo lo
posible para lograr lo que quería. Incluso rechazó regalos de inauguració n de la
casa. Solo recibió la ayuda de su amante, porque Pete ya había dicho que esta casa
era su casa también, por lo que tenían las mismas responsabilidades a la hora de
pagar los gastos.
Sabía que la cantidad ahorrada en la cuenta bancaria de Pete en ese momento era
suficiente para pagar toda la casa, pero no quería gastar el dinero de su novio.
Si Pete quería ayudar, podía compartir los gastos, siempre que Ae fuera quien
pagara la mayoría.
El plan de comprar su propia casa del joven ingeniero Intouch de hace dos añ os,
finalmente se había hecho realidad.
Así es. También significaba que Pete había regresado a Tailandia hace ya 2 añ os.
Fueron 2 añ os de felicidad. A veces discutían pero nunca soltaban la mano del
otro. Para Ae, estos dos añ os fueron invaluables y significativos, pero quería
convertir estos '2 añ os' en... eternidad.

140
—Vamos a comer. Mi mamá ya dejó arreglado todo en la cocina.
Ae levantó a su novio, a quien le gustaba actuar lindo. Pete se puso de pie y miró
en la direcció n donde estaba la cocina durante un rato. La mitad de la comida fue
preparada por la mamá de Ae, y la tía Jiew terminó lo demá s. Todos se fueron
cuando terminaron sus trabajos. Antes de irse, el hermano mayor de Ae incluso
dijo...
—Deberíamos irnos. No debemos molestarnos en su ceremonia de
mudanza(noche de bodas)
Después de escuchar lo que dijo, las mujeres acordaron irse y no quedarse a
comer con ellos, ya que todas querían dejar un tiempo privado para estos 'recién
casados'.
—Esta será nuestra celebració n de bodas, Ae.
El oyente sonrió mientras servía la comida en la mesa. Los 'recién casados'
disfrutaron de su primera comida en su nuevo hogar.
—Pero por ahora, es posible que todavía tenga que ir y venir entre aquí y la casa
de mi madre.
Dijo Koon Chai Pete. Se sentía preocupado por dejar a su madre sola en su casa,
por lo que no podía mudarse completamente.
Ae se rió a carcajadas.
—¿Todavía recuerdas el momento en que discutimos sobre la compra de nuestra
casa el añ o pasado?
Pete asintió . Intouch miró a su novio con ojos amorosos y repitió la frase del
pasado.
—Estaré aquí esperá ndote, en cualquier momento, siempre estaré aquí
esperá ndote.
Pete se sorprendió , porque eso fue lo que le dijo a Ae antes.
El añ o pasado, cuando comprar la casa era solo un plan, debido a que Ae todavía
estaba trabajando en Rayong, se burlaron el uno del otro y dijeron que el que se
quedaría regularmente en esta casa sería Pete, que estaba trabajando en
Bangkok. Ae quizá s solo lo visitó durante 2 días los fines de semana. Pero Ae
mantuvo las cosas en secreto para prepararle una sorpresa.
Ae solicitó en secreto un trabajo en una gran empresa en Bangkok. Tenían una
oficina realmente grande en el centro de la ciudad. Hizo su entrevista en secreto
sin avisarle a Pete, solo se lo dijo cuando se trasladó de regreso a Bangkok.
Y esa fue la razó n por la que querían comprar la casa un añ o antes de lo planeado.
Durante esos 2 añ os, el salario de Ae se duplicó en comparació n con el comienzo.
A pesar de que el trabajo era agotador, y aunque se sentía cansado, Ae dijo que no
podía compararse con cuando se separaron. Su dedicació n y esfuerzo hicieron
que Pete entendiera que había caído rendido por completo a este hombre.
Ae es hombre de palabra. Cuando se trataba de mantener su palabra, era la
persona má s seria que Pete había conocido.
Cuando Pete pensó en ello, no pudo evitar sonreír. Ae siempre decía que soñ aba
demasiado en grande, pero cualquiera que lo mirara lo sabría... en la vida,
siempre estaba haciendo todo lo posible y ponía mucho de su esfuerzo en lograr

141
su sueñ o. Este hombre siempre avanzaría valientemente para lograr su objetivo.
Y lo que hizo tan feliz a Pete fue el hecho de que ese objetivo... era él.
—No llores.
Cuando una mano cá lida y grande le tocó la cara, Pete se dio cuenta de que estaba
llorando. É l sonrió gentilmente y frotó su rostro con la mano de la otra persona.
—¡Estoy tan feliz!
Pete se aclaró la garganta y levantó la mano para secarse las lá grimas. Cambió de
tema y comenzó a asignar quién haría qué trabajo en la casa. Estuvieron hablando
un rato, y de repente ambos pensaron lo mismo... Esta es realmente nuestra casa.
—¿Qué está s mirando?
Después de la cena, antes de bañ arse, Pitchaya se detuvo y se paró frente al
balcó n. Estaba viendo la puesta de sol, cuando se encendieron las luces de los
alrededores de la ciudad, recordó la época en la que todavía estaba en Inglaterra
y cuá nto le deprimía esta vista. Pero en este momento, era tan hermoso como un
sueñ o.
El joven maestro estaba perdido en sus pensamientos. En este momento, un par
de brazos firmes se envolvieron repentinamente alrededor de su cintura con
fuerza desde atrá s, y una voz profunda estaba circulando junto a su oreja.
Pete se apoyó en ese pecho cá lido y colocó suavemente sus manos sobre las de su
novio.
—Estaba pensando qué tipo de plantas deberíamos cultivar en el balcó n. ¿Qué te
gusta?
—Plantemos algunas rosas.
Ae susurró al oído de Pete, luego enterró su rostro en el cuello blanco de la otra
parte y le dio un suave beso.
—¿Por qué rosas?
El apuesto joven maestro giró su rostro para mirarlo. Tenía una expresió n de
desconcierto. Ae se acercó al oído de su novio.
—Para que podamos regalarle a mamá en su cumpleañ os... También...
De repente, dos manos grandes se deslizaron debajo de la camisa de Pete y se
movieron lentamente hacia abajo... hasta que pudo sentir que el cuerpo de la otra
persona se tensó debido al nerviosismo. Luego le dijo con su voz profunda y
atractiva.
—Podría llevarte el desayuno a la cama.
—Ae... Me está s malcriando demasiado.
—Bien... quiero consentirte aú n má s.
El hombre alto y grande comenzó a lamer ese cuello blanco, olió sudor mezclado
con el olor corporal natural de su amante. Sus dos manos estaban frotando la
suave piel debajo de la ropa, lo que hizo que el joven maestro gimiera
suavemente.
—Ae, te has convertido en un parlanchin tan dulce.
Pete murmuró . Su cuerpo estaba temblando cuando dos dedos á speros frotaban
sus pezones rosados con suavidad.
—Puedo ser incluso má s dulce que esto... ¿Quieres intentarlo?—Intouch dijo
suavemente.

142
Las yemas de sus dedos pellizcaban y golpeaban continuamente los pezones
haciendo temblar y gemir a la otra persona.
—A... Ae...
—¿Entonces? ¿Quieres probarlo?
El joven maestro giró su rostro para mirar a Ae una vez má s y dijo dulcemente.
—¿Alguna vez te he rechazado?
Esta respuesta hizo sonreír tanto al oyente como al hablante... Se miran a los ojos
con pasió n. Sus labios se acercaron cada vez má s y se tocaron.
<Besar>
El sonido del beso resonaba por todo el espacio. Las grandes manos acariciaban
los dos pezones sin parar hasta que se pusieron duros. Pitchaya arqueó
inconscientemente su cuerpo hacia el frente. Jadeaba y gemía sin parar. Sus labios
se abrieron levemente para recibir esa lengua caliente y hú meda de la otra parte.
También de vez en cuando chupaba los labios de la otra parte con suavidad.
Pete estiró las manos para abrazar el cuello de la persona que estaba detrá s de él
y permitir acariciar su cuerpo má s fá cilmente.
—A... Aaaa ... Ae siempre le gusta jugar con mis pezones.
—Porque son realmente lindos — Ae dijo con su voz profunda.
Continuamente presionó varios besos en la mejilla esponjosa de la otra persona,
luego se deslizó lentamente hacia abajo y chupó el cuello blanco de Pete. Sus
respiraciones se hicieron má s pesadas y la atmó sfera se volvió tan caliente como
el fuego ardiente.
El joven maestro travieso frotó lentamente su trasero contra eso erecto detrá s de
él. Podía sentir que la cosa extremadamente caliente estaba prendiendo fuego a la
parte inferior de su cuerpo.
—¡Ah!
Cuando la mano á spera de la otra persona se deslizó dentro de sus pantalones y
tocó su miembro caliente, todo el cuerpo de Pete se tensó . Colocó una mano en la
ventana mientras usaba la otra para sostener la nuca de la persona detrá s de él. El
cuerpo musculoso y el delicado cuerpo estaban tan cerca como si no hubiera
espacio entre ellos.
Tanto los pantalones como la ropa interior de Pete cayeron gradualmente al
suelo. Pete se dio la vuelta para mirar a Ae y dijo con su voz temblorosa.
—Ae... Corre las cortinas... Alguien podría ver...
Intouch inmediatamente extendió su mano para tirar de la cuerda y correr las
cortinas. Luego tuvo toda su atenció n en su novio. Sus ojos estaban hú medos, sus
mejillas rojas, sus labios suaves estaban humedecidos por la saliva, tenía esa
expresió n en su rostro como si quisiera má s... Todas estas cosas hicieron que
Intouch no pudiera contenerse.
Ae se quitó la ú nica camiseta que le quedaba en el cuerpo. Luego dio unos pasos
hacia atrá s para mirar ese hermoso cuerpo blanco, que lentamente se estaba
poniendo rojo.
Pete ya no se sentía tímido al mostrar su cuerpo frente a los ojos de su novio. Por
el contrario, incluso trató de usar su cuerpo para seducirlo, lo que hizo que Ae
solo quisiera tragarlo entero.

143
—Mmm...
Ae miró esta hermosa vista durante unos segundos y se acercó a él nuevamente.
Sus labios se mezclaban entre sí, sus carnes también se frotaban entre sí. El joven
amo tiró de la camisa de su novio para profundizar aú n má s y continuaron
besá ndose nuevamente.
—¡Ah!
El hombre del enorme cuerpo empujó a la otra persona contra la cortina y bajó la
cabeza para envolver su boca alrededor del pezó n. Usó sus labios y su lengua para
lamerlo y chuparlo. Pete estaba temblando mientras deslizaba sus manos por el
cabello de Ae y sostenía su cabeza con fuerza. Este tipo de toques íntimos lo
marearon.
—A... Ae ... Aaa ... Haaa ...
Ae se arrodilló y usó su boca hú meda para envolver esa punta rosada. Luego
escuchó un jadeo y gemidos provenientes de arriba.
—Ae... Aaa... Ae...
El aliento caliente le golpeó la parte inferior del vientre. La boca hú meda y
caliente se tragaba lentamente todo. La sensació n de extrema excitació n le hizo
temblar. Levantó la cara para mirar al techo. Sus manos agarraron con fuerza el
cabello negro de la persona arrodillada.
El joven ingeniero conocía demasiado bien el cuerpo de su amante. Llevó la mano
al trasero, frotó suavemente la entrada y la presionó suavemente. Luego empuja
la punta de su dedo dentro del estrecho agujero, hurgando y dando vueltas. Esto
hizo que Pete se sobresaltara, estaba temblando y jadeando pero aú n abriendo
má s las piernas para permitir que la otra persona explorara su agujero má s
fá cilmente.
—A... Haaa... Hmm...
Ae puso dos de sus dedos en la boca de Pete. Pete lo siguió obedientemente.
Lentamente lamió el espacio entre los dos dedos y los chupó . El sonido de succió n
estaba por toda la habitació n, lo que hizo que el deseo ardiente dentro de Ae se
hiciera aú n má s fuerte.
No había forma de que el personal del hotel supiera lo sexy que era su joven
gerente.
Este pensamiento hizo que Ae retirara los dedos de esa cá lida boca y se deslizara
lentamente hacia la parte sensible que estaba debajo. Luego se puso de pie y miró
el rostro sonrojado de su amante. Ambos sabían lo que iba a pasar a continuació n.
—Aa... Haa... Aa...
—¿Te duele?
—No... Ae... no duele...
Pete negó con la cabeza. Envolvió sus brazos alrededor del cuello de Ae. Cuando
el dedo largo lo empujó , esta extrañ a sensació n hizo que su corazó n latiera má s
rá pido. Sus gemidos venían de lo má s profundo de su garganta. Su pecho se movía
hacia arriba y hacia abajo rá pidamente. Su cuerpo blanco de repente se tensó . El
sentimiento de excitació n recorrió su cuerpo, lo que le hizo hundir la cara en el
hombro de la otra persona.
—Es aquí, ¿no?

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—Aa... Ae... Ese lugar... Má s...
Cuando Ae encontró el lugar. Rá pidamente empujó hacia adentro y hacia afuera
vigorosamente e hizo que la otra parte no pudiera pararse y cayó completamente
en su abrazo, el sonido de jadeo estaba alrededor de sus oídos.
Un dedo, dos dedos, luego tres dedos... entraban y salían de su agujero.
Ya no eran estudiantes de primer añ o en la universidad, por lo que sabían
demasiado bien có mo hacer que la otra persona se sintiera bien.
En este momento, el estudiante de primer añ o, que solía ser tímido en el pasado,
levantó la cara de su novio y le dio un beso profundo. Luego extendió su mano y
abrió la cremallera de la otra parte para liberar su miembro. Frotaron sus cosas
entre sí y eso los hizo gemir a ambos.
—¡Ahg! ¡Ae!
De repente, Pete sintió como si su cuerpo fuera levantado del suelo. También se
dio cuenta de que la otra parte ya había sacado los dedos. Envolvió ambas piernas
alrededor de esa cintura firme. Ambos brazos se aferraron al cuello de su amante
y lo sostuvieron con fuerza. Tenía miedo de caer.
Ae levantó el cuerpo blanco y dejó que su novio se apoyara en la cortina.
—Aaah... Aaa... Ae... Má s... Esta posició n...
La cosa extremadamente caliente fue empujada lentamente dentro de él, lo que
hizo que Koon Chai Pitchaya temblara y hundiera la cabeza en el hombro de su
novio. Se mordió los labios. Ae entró profundamente en él y prendió fuego a cada
centímetro que pasaba. Todo su cuerpo se sentía tan caliente. El joven maestro
apretó la cintura de la otra parte con má s fuerza.
—Ah...
La lengua hú meda de su novio de repente lamió alrededor de su pezó n y causó
que Pete se sobresaltara. Luego, el joven ingeniero comenzó a mover lentamente
la cadera. Empujó dentro y fuera del estrecho agujero. La intensa sensació n era
demasiado, Pete sintió que podía dejar de respirar.
—Ah... aah... Aaa... Ae... Ae...
Olas de placer golpearon a Pete y lo hicieron soltar gemidos sexys. Ae usó toda su
fuerza para empujar como si quisiera usar el sonido de su carne golpeando para
responder a Pete.
Permanecieron en esta posició n por un tiempo. Sus respiraciones se volvieron
gradualmente má s calientes. Dos cuerpos apoyados uno contra el otro. El sudor
corría por sus espaldas. El sonido de los gemidos y el sonido de los cuerpos
chocando unos contra otros calentaron toda la habitació n.
Ae empujó ese trasero blanco hacia arriba y lo empujó rá pido y duro. Cada vez
que se empujaba má s profundamente en el cuerpo de Pete, hacía que todo el
cuerpo de su amante se tensara y su agujero se sacudiera involuntariamente.
Repitieron una y otra vez hasta que estuvieron a punto de alcanzar el clímax...
—Ae... voy a... A... no puedo... Demasiado profundo...
Pete gimió y dijo entrecortadamente. Sostuvo a Ae aú n má s fuerte. Ae empujó
hacia él má s rá pido. El sonido de la carne golpeá ndose entre sí resonó en la
habitació n. Ambos se vinieron al mismo tiempo. El joven maestro soltó el líquido
blanco y fangoso por todo su vientre.

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Ae todavía permaneció en esta posició n por un tiempo. Levantó a la otra persona
y lo dejó apoyarse en las cortinas. Enterró su rostro en ese pecho cá lido mientras
jadeaba pesado. Luego lo sacó lento. El semen blanco inmediatamente cayó al
suelo gota a gota.
Pete jugó un poco con el cabello de su novio quien todavía estaba jadeando
rá pido. En ese momento...
—El añ o que viene... vamos a Estados Unidos.
—¿América?—Pete intentó recuperar su corazó n palpitante. Preguntando.
Ae levantó la cara, sonrió y dijo.
—California no está mal. Quiero practicar mi inglés.
Pete estaba confundido, tal vez su novio solo quería viajar, así que comenzó a
pensar cuá ndo serían sus vacaciones. Sin embargo, una voz profunda y llena de
seriedad interrumpió rá pidamente su pensamiento.
—Vamos a casarnos, Pete.
—¡¡¡Ae!!!
Pete exclamó sorprendido. Abrió los ojos ampliamente y miró fijamente el rostro
que estaba cubierto de sudor de la persona frente a él. Ae sonrió suavemente y
dijo.
—Quiero quedarme a tu lado por el resto de mi vida.
Cuando Pete escuchó esto, extendió sus manos para envolver el cuello de Ae,
enterró su rostro en ese hombro cá lido y ancho. Al escuchar el débil sollozo que
venía de su hombro, el hombre que acababa de decir esas palabras de propuesta
sonrió aú n má s.
—Lo digo en serio.
<sollozo>... <sollozo>...
El bebé lloró n que desapareció hace muchos añ os había regresado. Su sonido de
llanto, que Ae no había escuchado durante mucho tiempo, le hizo sonreír. Sonrió
tan felizmente, porque sabía que la respuesta era algo que su corazó n deseaba.
—Pero ahora necesito bañ arte primero. ¿Puedes caminar?
Al ver a la persona que tenía el rostro hundido en el hombro sacudiendo la
cabeza, indicando que 'no preguntes, solo hazlo', por lo que en esta posició n, el
joven futbolista llevó a su amante al bañ o. En ese momento, Pete, con la voz
entrecortada, tartamudeó y dijo.
—Yo... también... quiero quedarme a tu lado... por el resto de mi vida...
Esta fue la respuesta má s perfecta.
Después de eso, no solo salió el sonido del agua corriendo del bañ o, sino también
el sonido sexy que hicieron los 'recién casados'. Era como si su deseo no tuviera
fin, como si esta noche fuera realmente su noche de bodas y también... la noche en
la que prometieron que se quedarían el uno al lado del otro para siempre.
A partir de este día, siempre habrá un lugar que les dará la bienvenida...
Porque es aquí donde dos personas que se aman ahora esperará n cada día el
regreso del otro...
Un lugar al que a partir de ahora llamará n 'hogar'.

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 Especial 12 FINAL
—¡P'Ae, P'Pete, por aquí!
Para los estudiantes, realmente hubo demasiados días importantes, las
ceremonias de apertura, dar la bienvenida a nuevos estudiantes, conocer nuevos
amigos y asistir a las actividades de animació n en el campus. Sin embargo, el día
má s importante, por supuesto, debe ser el día de la graduació n.
El día que representa el éxito de todos sus esfuerzos.
Hoy es ese día importante.
Sin embargo, no es un día importante para ciertos seniors, sino para la
encantadora hermana de esas personas... Nada mas que Chompoo.
En este momento, los dos hombres que se habían graduado desde hacía varios
añ os, con un ramo de flores en la mano, se acercaron por detrá s a la chica de cola
de caballo que vestía una toga de graduació n. La niñ a estaba felizmente tirando
de las manos de sus superiores, y ellos también se sentían realmente felices por
ella.
—¡Felicitaciones, Chompoo!
—Gracias, P'Pete, estoy tan feliz de que hayas venido a verme ¡Realmente te
extrañ é!
La niñ a dijo con dulzura, tomó el ramo del hombre, se dio la vuelta y le sonrió a
otro mientras decía alegremente.
—Y tú también, P'Ae. Gracias, déjame darte un abrazo.
—¿Está s loca? ¡P'Pete todavía está parado aquí!—Lemon, la estudiante de quinto
añ o del departamento de medicina, le golpeó la cabeza y gritó en voz alta.
—Solo estaba bromeando un poco—Chompoo exclamó suavemente en un tono
molesto.
—Bromeando... ¿Olvidas que también tienes novia?
Lemon, que pasó su precioso tiempo libre para asistir a la ceremonia de
graduació n de su amiga, señ aló con el dedo a una chica guapa que estaba parada
detrá s de Chompoo quien mientras observaba sostenía una cá mara profesional
en sus manos. En este momento ella estaba mirando y Chompoo le mostró dos
dedos en señ al de victoria.
—Creo que definitivamente lo entenderá .
—¿Es eso o te refieres a obligarla a entender?
Las dos chicas seguían discutiendo como hace unos añ os. No habían cambiado en
absoluto. Pete no pudo evitar sonreír.
—Hoy, tienes mi permiso para abrazarlo.
—¿Hmm?
Chompoo se dio la vuelta y lo miró . Pete empujó a su novio al frente y volvió a
enfatizar.
—Hoy, dejo que mi esposo te abrace, pero después de hoy, no dejaré que lo
vuelvas a hacer.
Las dos chicas se miraron con los ojos bien abiertos. No habían visto a P'Pete
durante mucho tiempo, por lo que no esperaban que P'Pete realmente tuviera a
P'Ae bajo su control tan estrictamente que el hombre ni siquiera tuvo la

147
oportunidad de hablar. Esto hizo que Chompoo se notara extremadamente
sorprendida y dijo: ¡¿P'Ae realmente le tiene miedo a su esposa?!
—¡Oye! No digas eso, Ai'Chompoo, incluso si lo sabemos, deberíamos
guardá rnoslo para nosotras, o de lo contrario P'Ae se sentirá realmente
avergonzado.
Ae vio a ambas juniors y a su novio bromeando sobre él. No había rastro de
malestar en su rostro, entonces le entregó un regalo a Chompoo y dijo: Sí, ahora le
tengo mucho miedo a mi esposa, así que es mejor que no me abraces. No quiero
meterme en problemas.
Ae dijo sarcá sticamente e hizo que la cara de Pete se volviera roja.
Ae... ¡¿Estás insinuando que soy una tigresa?!!
[Nota: ''ser una tigresa'' es una metá fora que se usa generalmente para las
mujeres. Cuando se llama alguien ''tigresa'', está s insinuando que es implacable,
fá cil de poner celosa y controladora con su marido...]
—Jajaja, lo sé, gracias por venir a verme, vamos a tomarnos una foto juntos.
Chompoo dijo mientras reunía a todos en un solo lugar para hacer la foto.
Pete se dio la vuelta para preguntarle a la joven que estaba en su quinto añ o en el
departamento médico. Quien en ese momento, estaba ayudando a Chompoo a
cargar algunas cosas.
—Lemon, ¿y tu hermano? ¿No viene hoy a la ceremonia de graduació n de sus
juniors?
—No sé dó nde está . Lo ú nico que sé es que se llevó a P'Tin con él. P'Tin
probablemente en este momento está quejá ndose sin parar de que el clima hoy es
demasiado caliente o algo así.
Lemon parecía conocer muy bien al novio de su hermano. Pete sonrió . Había
tanta gente que probablemente no podría encontrar a sus dos amigos pronto.
Después de tomar una foto, Chompoo se volvió de nuevo y sonrió .
—¿Por qué no van ustedes dos a dar un paseo por el campus? Estoy segura de
que les traerá buenos recuerdos del pasado cuando aú n eran estudiantes. No han
vuelto a este campus desde hace varios añ os.
La niñ a sugirió , luego tomó una flor del ramo de rosas rosadas que Pete le dio y se
la entregó a su 'hermano' favorito y le sonrió .
—En caso de que de repente quieras hacer algo romá ntico...
—¿Aú n quieres graduarte pacíficamente?
Ae dijo en un tono serio, luego levantó la mano para sujetar la rosa. Chompoo
sonrió , se dio la vuelta y se mezcló con el grupo de sus amigos, dejando a los dos
hombres mirá ndose el uno al otro.
—¿Te gustaría dar un paseo? Hace mucho que no he venido por aquí.
Cuando su novio le preguntó , el futbolista accedió de inmediato. Observó el
entorno ruidoso y bullicioso que se veía exactamente igual que hace unos añ os...
Realmente no estaba de humor para ser parte de él.
Si se hubiera graduado con Pete, habría sido genial.
—En ese entonces, habría sido genial si nos hubiéramos graduado juntos.

148
Las palabras de Pete tomaron a Ae con la guardia baja. Se dio la vuelta para mirar
a su sonriente novio. Su pensamiento volvía a la época en que todavía estudiaban
en esta universidad.
<Agarrar>
—Ae, hay mucha gente aquí.
—No me importa. Solo quiero tomar la mano de mi novio —Ae giró la cabeza y le
dijo en un tono serio, caminaba por el sendero mientras sostenía la mano de su
amante, ignoró por completo las miradas de otros estudiantes. No le importaba si
algú n joven estaba mirando sus manos, porque era lo que quería hacer. Quería
decirles a todos que... el hombre que está a su lado es su novio.
Este hombre fue de quien se enamoró desde que era un estudiante de primer añ o,
y este lugar fue testigo del comienzo de su amor.
—El estacionamiento sigue igual que antes.
—Ahora hay má s carriles para bicicletas. Si aú n estuviera estudiando aquí, sería
mucho má s fá cil llevarte.
Ae respondió lentamente mientras miraba el estacionamiento lleno de sus
recuerdos.
—¡La cafetería sigue ahí!
—Oh, esa taza de café amargo...
—Aú n recuerdas.
—Nunca olvidaré nada que esté relacionado contigo.
Ae dijo en broma. Al mirar la cafetería, recordó aquella vez que Pond quiso
burlarse de él, Pete se rió a carcajadas.
—Ahora la cantina es casi tan grande como el centro comercial.
—Sí... En ese entonces, el cerdo a la parrilla solo costaba docenas de baht.
—Antes me invitabas a comer.
—Si hubiera sido el precio actual, probablemente habrías tenido que pagar las
comidas tú mismo.
Intouch dijo en broma. Pete también se rió , porque aunque la persona junto a él
pagaba por sus comidas todo el tiempo, al sumar, el total no era una pequeñ a
cantidad de dinero.
Ambos continuaron caminando por el campus, recordando constantemente sus
días de estudiantes. En poco tiempo llegaron al campo de fú tbol.
—Este lugar está lleno de nuestros recuerdos.
Ae habló primero, se dio la vuelta y miró a su novio, quien también sonrió y
asintió . Sostuvo su mano con má s fuerza.
—En realidad, tengo algo que quiero confesarte, Ae.
—¿Hmm?
Ae frunció el ceñ o y miró a su novio, quien gentilmente movió sus manos.
—La verdad es que... siempre que jugabas fú tbol, realmente envidiaba este
campo. Tenía celos del baló n, admiraba el fú tbol porque gastabas todo tu esfuerzo
en él. Admiraba este baló n de fú tbol que podía hacer que lo amaras tanto...
Pete sonrió y confesó , luego se acercó a Ae un paso má s y continuó en un tono
feliz.

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—Pero te amo, tú que está s locamente enamorado del fú tbol, ya sea que estés
llevá ndo seriamente el baló n en este campo de fú tbol o está s fuera de el. Tú ,
persona que siempre puede hacer que mi corazó n lata má s rá pido.
Este tipo de confesió n hizo que Ae sintiera que no era una confesió n porque hizo
algo mal, sino má s bien como si estuviera declarando directamente su amor por
él, lo que causó que el rostro bronceado de Ae se enrojeciera instantá neamente.
—Si me preguntaras cuá ntas veces has hecho que me enamore perdidamente de
ti, entonces mi respuesta es que no puedo recordar nada, porque hay demasiadas.
Ae escuchó muy seriamente. Pete sonrió y continuó .
—Pero si me preguntas con cuá ntas personas estoy obsesionado... Mi respuesta
es...
Pete estiró su dedo, señ aló el pecho de la persona frente a él y continuó ...
—Só lo tu.
Esta frase por sí sola hizo que Ae se sintiera realmente emocionado, simplemente
quería empujarlo hacia abajo y llevar a cabo varias actividades para mayores de
18 añ os. Pero también era consciente de que todavía estaban en el campo de
fú tbol del campus, por lo que tuvo que reprimir su impulso interior.
Ae de repente se arrodilló sobre una de sus rodillas y le entregó la rosa que tenía
en la mano.
—¿Quién es Pete del departamento Internacional? Alguien te está enviando amor.
Esta frase hizo que Pete se preguntara si debería reír o sentirse avergonzado.
—Sí, estoy aqui.
Pete respondió y Ae continuó .
—Pete, alguien te está enviando amor... Dijo... no es porque la universidad sea
demasiado grande, que la persona a mi lado parece aú n má s significativa, en
realidad es porque... no importa cuan grande sea este mundo, la persona que está
junto a mi es mas importante que cualquier otra persona.
Las palabras de Ae fueron realmente sinceras. Después de eso, le entregó la rosa a
la persona que tenía en frente. Pete tomó la rosa y se sintió muy tímido.
—Ae, ¿Eso fue romá ntico?
Pete dijo en broma.
—¿Crees que no fui lo suficientemente romá ntico?
Pete sonrió y luego asintió con la cabeza y dijo.
—Bueno...¿Quieres que llore para que lo veas?
—Jajajaja, prefiero verlo en la cama.
—¿Te sientes exitado de nuevo, Ae?
—¿Todavía no está s acostumbrado?
El sol distante fue descendiendo gradualmente. Los dos hombres en el campus
todavía caminaban de la mano, recordando los recuerdos que tenían en este
campo de fú tbol y riendo a carcajadas. Desde su primer encuentro hasta que se
hicieron amigos y se enamoraron, luego, juntos, hablaron sobre có mo conservar
su amor mutuo de forma imperecedera en el futuro por venir.
Al mismo tiempo, otra pareja en el campus...
—¡¡¡Ai'Tin, vamos juntos, no te quedes aquí solo, está s actuando como un
anciano!!!

150
La otra pareja en el campus aú n estaba discutiendo, porque uno de ellos dijo que
quería esperar a la otra persona en el Departamento Internacional mientras que
la otra parte quería ir a caminar con él por el campus. Después de todo, no habían
estado aquí durante varios añ os. Por supuesto, cuando el clima era tan caluroso,
Tin definitivamente no estaba dispuesto a caminar.
—¿Qué quieres decir con 'como un anciano'? ¡Te he acompañ ado durante má s de
una hora! Has venido a gruaduaciones durante 4 añ os, ¿có mo puedes conocer a
tantos juniors?
Tin se quejó , sintió que no debería venir aquí con él en absoluto. Pensó que solo
necesitaría acompañ arlo para felicitar a uno de sus junior en su día de
graduació n. ¡Quién podría haber pensado que en realidad conocía a má s de una
docena de jó venes que se graduaban el mismo día! Ya habían dado una vuelta por
el campus y todavía quedaban algunos que aú n no habían visto.
—Es obvio que no puedes levantar el trasero.
—Así es. No puedo levantarme.
Can inclinó la cabeza, luciendo como Gucci, pero no mucho después, le dijo: Iré
solo entonces, ¡pero no te arrepientas si conozco a una hermosa jovencita!
Puedes pensar que esta estrategia definitivamente funcionaría. Pensó que Tin se
levantaría y lo seguiría, pero la otra persona simplemente sacó una tablet y jugó
con ella, luego levantó las cejas y agitó la cabeza de lado a lado diciendo:
—Como quieras, ¿Crees que todavía puedes ponerte duro para una mujer?
Err... No está del todo equivocado... ¡¿Pero qué quiso decir con'todavía puedes
ponerte duro'?!?! ¡¡¡Nunca he tocado a una mujer en mi vida!!!
—¡¡¡Eres tan malo!!!
—¡El día anterior, dijiste que me amabas má s!
No había nada que pudiera decir para objetar...
Can abrió la boca, pero no salió nada, porque lo que Tin dijo era la verdad. Miró al
joven maestro que estaba sentado en silencio mientras cruzaba las piernas,
luciendo realmente arrogante. Estaba jugando felizmente con su tableta y Can no
pudo evitar decir:
—Todavía no entiendo por qué me enamoré de ti hace siete añ os.
—¿Qué quieres decir?—Tin lo miró y preguntó enojado. Can prosiguió .
—No estoy diciendo que no seas bueno. Solo me pregunto por qué te amo tanto.
Realmente no sé por qué, solo sé, que estoy enamorado de ti.
Can, el mono delgado dijo todo lo que había en su corazó n, lo que hizo que la
expresió n de Tin mejorara un poco, pero también le impidió decirle a Can la
verdadera razó n por la que este podría haberse enamorado de él. Incluso si
supiera claramente por qué Can lo amaba.
Todo fue porque sintió lá stima por él.
Una vez lo llamó repugnante y falso, hasta que Can vio su lado débil... Tin nunca le
diría que se empezó a enamorar de él solo porque lo compadecía.
—Porque a menudo me compras comida, no, definitivamente no es solo por eso.
Recuerdo que solías tener muy mal genio, pero cuando finalmente me di cuenta
de lo que estaba pasando, ya no podía, No... podía tolerar que otras personas
digan cosas malas sobre ti delante de mí.

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En ese momento, paso a paso, lo estaba haciendo enamorarse de mí. Incluso antes
de que pudiera entender sus sentimientos, ya se había enamorado.
Tin pensó en su cabeza.
—Pero yo si sé por qué me enamoré de ti.
—¡¿Por qué?!
Preguntó Can con curiosidad. Se inclinó má s cerca de él. Los bordes de la boca de
Tin se elevaron y dijo:
—¡Porque eres poco inusual!
—¡¿Qué?! Quieres que te golpee, ¿verdad? ¿De qué manera soy inusual? ¿Así que
te gusto porque soy raro? ¡Eres realmente un Infeliz! ¡¿Có mo pudiste decir eso de
tu novio?!
Can gritó en voz alta, Tin se encogió de hombros porque...
Can no era extrañ o, pero debido a él, los latidos de su corazó n se volvieron
inusuales. Incluso si tuviera que morir, nunca le diría esto, ¡porque es realmente
vergonzoso!
—El punto de partida no es importante. Lo que importa es el proceso.
Can se sorprendió y luego sonrió .
—Sí, lo que importa es el proceso, te amo na... Ai'Tin...
Can susurró mientras se sentaba a su lado y le decía en un tono muy suave.
—Entonces... tienes que ir con Can.
—¡No!
—¡¿Có mo puedes ser tan despiadado?!
Tin todavía se negaba a ceder y hacía gritar a Can, lo que llamó la atenció n de las
personas que pasaban junto a ellos para comprar agua. Se dieron la vuelta y los
miraron con sorpresa.
—¡Oye, Ai'Can!
—Ai'Pond, ChaAim, ¿por qué estan aquí?
La llamada repentina hizo que el mono hiperactivo se volviera rá pidamente para
mirar la fuente del sonido, y luego vio a una pareja acercá ndose.
—Vengo a asistir a la ceremonia de graduació n de ChaAim, ella también se graduó
este añ o... ¿Y tú ? ¿Vienes a ver a tu junior?
—Sí.
Can respondió de inmediato, estaba tan listo para charlar con Pond por un
tiempo, si no fuera porque...
—¡¡¡Ai'Pond!!!
Se oyó un grito agudo procedente de detrá s de Pond. Todos miraron en la
direcció n del sonido y vieron... una hermosa mujer que estaba jugando con su
cabello rubio mientras sujetaba la mano de un extranjero de ojos azules.
—¿Quién es usted?
Pond preguntó dubitativo. El rostro de ChaAim estaba realmente sombrío...
—¡Soy yo, Manopov, la chica má s hermosa del mundo!
—¡¡¡WOOOW!!!
Todos estaban tan sorprendidos que no podían cerrar la boca viendo a esta
atractiva mujer frente a ellos con los ojos bien abiertos. Poseía una piel bronceada

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que podía rivalizar con las modelos femeninas sexys y atractivas, su voz era
realmente profunda. Ella era sin duda alguna...
—¡P'Money!
—¡Si, soy yo!
Todos todavía no podían creer lo que veían, y Money se acercó lentamente a
todos.
—¡Dios mío! Todos está n presentes hoy, ¿vinieron todos a asistir a la ceremonia
de graduació n de sus juniors? ¿Dó nde está el enano feo? Es una oportunidad tan
rara para reunirnos así, ¡debemos celebrar!
P'Money dijo alegremente. No estaba claro si era el destino o simplemente una
mera coincidencia, pero los dos hombres que eligieron el Colegio Internacional
como su ú ltima parada, simplemente llegaron aquí...
—¡¡Hablando del diablo!! ¡¡Dios mío!!! ¡¡¡Mi querido N'Pete!!!
P'Money gritó muy fuerte y corrió hacia su Nong para darle un abrazo, incluso
presionó fuertes besos en su mejilla izquierda y derecha. Ae dio un paso atrá s, y
luego estiró su pierna, como si quisiera decir '¡no me beses, si te atreves a
besarme, te mataré!'
Hubo todo tipo de risas. Todos estaban muy felices porque pudieron reunirse por
varias razones. Por lo tanto, la celebració n era obviamente imprescindible.
Como si todos hubieran regresado a su punto de partida, lentamente recordaron
los viajes que habían realizado en este campus... Se llenaron de muchas
emociones y recuerdos.
Este podría ser un nuevo punto de partida, pero definitivamente no es el final del
camino.
Todavía les esperaba un largo viaje en el futuro, este lugar es el punto de partida
donde se encontraron con sus otras mitades y a partir de entonces, decidieron
tomar la mano de esa persona para envejecer juntos.
Este fue el lugar donde conocieron al amor de sus vidas.
Este lugar fue el lugar que les enseñ ó a permanecer fieles a su amor.

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