El Calor de La Tierra
El Calor de La Tierra
El Calor de La Tierra
“CIENCIAS DE LA SALUD”
INTEGRANTES :
LILIA OJANAMA ASPAJO
ANA MARIA SEGURA JARAMILLO
ANGIE DAVILA MONZIN
MERLY TERESA OCHOA ROMERO
CARLOS VALDERRAMA BERNILLA.
PUCALLPA/PERU
2023
RECURSOS RENOVABLES
EL CALOR DE LA TIERRA
LA CORTEZA
La corteza terrestre varía de 5–70 kilómetros (3.1–43.5 mi) en
profundidad y es la capa más externa. Las partes delgadas son la
corteza oceánica, que subyace en las cuencas oceánicas (5–10 km) y
están compuestas de rocas ígneas densas (máficas) de silicatos de
magnesio y hierro, como el basalto. La corteza más gruesa es la corteza
continental, que es menos densa y está compuesta de rocas de silicatos
de aluminio-potasio-sodio (félsicas), como el granito. Antiguamente las
rocas de la corteza se dividían en dos categorías principales: sial y sima
(Suess, 1831-1914). Se estima que el sima comienza alrededor de los
11 km por debajo de la discontinuidad de Conrad (una discontinuidad de
segundo orden). El manto superior junto con la corteza constituye la
litosfera. El límite corteza-manto ocurre como dos eventos físicamente
diferentes. Primero, hay una discontinuidad en la velocidad sísmica, que
se conoce más comúnmente como la discontinuidad de Mohorovičić o
Moho. Se cree que la causa del Moho es un cambio en la composición
de la roca de rocas que contienen el feldespato plagioclasa (arriba) a
rocas que no contienen feldespatos (abajo). En segundo lugar, en la
corteza oceánica, existe una discontinuidad química entre los
acumulados ultramáficos y las harzburgitas tectonizadas, que se ha
observado desde partes profundas de la corteza oceánica que se han
abducido sobre la corteza continental y se han conservado como
secuencias de ofiolita.
EL MANTO
El manto terrestre se extiende hasta una profundidad de 2,890 km, por lo
que es la capa más gruesa de la Tierra. El manto se divide en manto
superior e inferior, que están separados por la zona de transición. La
parte más baja del manto al lado del límite núcleo-manto se conoce
como capa d” (pronunciado «de doble prima»). La presión en el fondo
del manto es ≈140 G Pa (1.4 M atm). El manto está compuesto de rocas
de silicato que son ricas en hierro y magnesio en relación con la corteza
suprayacente.14 Aunque es sólido, las altas temperaturas dentro del
manto hacen que el material de silicato sea lo suficientemente dúctil
como para que pueda fluir en escalas de tiempo muy largas. La
convección del manto se expresa en la superficie a través de los
movimientos de las placas tectónicas. Como hay una presión intensa y
creciente a medida que uno viaja más profundamente en el manto, la
parte inferior del manto fluye con menos facilidad que el manto superior
(los cambios químicos dentro del manto también pueden ser
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importantes). La viscosidad del manto varía entre 10 y 10 Pa·s,
dependiendo de la profundidad.16 En comparación, la viscosidad del
agua es de aproximadamente 10 −3 Pa·s y la del tono es de 10 7 Pa·s.
La fuente de calor que impulsa la tectónica de placas es el calor
primordial que queda de la formación del planeta, así como la
desintegración radiactiva de uranio, torio y potasio en la corteza terrestre
y el manto.
EL NUCLEO
La densidad promedio de la Tierra es 5.515 g/cm³. Debido a que la
densidad promedio del material de la superficie es de solo alrededor de
3.0 g/cm³, debemos concluir que existen materiales más densos dentro
del núcleo de la Tierra. Este resultado se conoce desde el experimento
de Schiehallion, realizado en la década de 1770. Charles Hutton en su
informe de 1778 concluyó que la densidad media de la Tierra debe ser
aproximadamente el de la roca superficial, concluyendo que el interior de
la Tierra debe ser metálico. Hutton estimó que esta porción metálica
ocuparía alrededor del 65% del diámetro de la Tierra. La estimación de
Hutton sobre la densidad media de la Tierra todavía era
aproximadamente un 20% demasiado baja, a 4.5 g/cm³. Henry
Cavendish en su experimento de equilibrio de torsión de 1798 encontró
un valor de 5.45 g/cm³, dentro del 1% del valor moderno. Las
mediciones sísmicas muestran que el núcleo está dividido en dos partes,
un núcleo interno "sólido" con un radio de ≈1,220 km y un núcleo externo
líquido que se extiende más allá de él a un radio de ≈3,400 km. Las
densidades oscilan entre 9.900 y 12.200 kg/m³ en el núcleo externo y
12,600–13,000 kg/m³ en el núcleo interno.
EL GRADIENTE GEOTÉRMICO:
La temperatura, que podemos medir en los primeros kilómetros de la corteza,
aumenta con la profundidad siguiendo una progresión media de 3 ºC cada 100
metros de profundidad. La relación entre la variación de temperatura y la
profundidad recibe el nombre de gradiente geotérmico.
Además del calor natural de fondo debido a los distintos procesos físicos y
químicos que se dan en el interior del planeta, existen otros factores que
intervienen en la ecuación térmica.
Factores regionales:
El contexto geológico y estructural a escala regional condiciona la distribución
de las temperaturas; así pues, en zonas con vulcanismo activo o en áreas de
reducción de la litosfera, el gradiente geotérmico será más elevado que en
otras zonas sin actividad volcánica o con un grosor litosférico superior a la
media.
Factores locales:
Las diferencias entre les propiedades térmicas de las rocas, como la
conductividad térmica, producen sensibles variaciones laterales y verticales del
gradiente geotérmico. El factor que más condiciona el valor del gradiente
geotérmico es la circulación subterránea de agua, ya que ésta tiene la
capacidad de redistribuir el calor. Así, en zonas de recarga de acuíferos el
gradiente geotérmico disminuye debido a la circulación descendiente del agua
más fría, mientras que en las zonas de descarga sucede lo contrario (ascenso
de agua profunda más caliente). Las estructuras geológicas también pueden
condicionar el gradiente geotérmico en áreas muy reducidas, ya que
localmente el agua subterránea puede ascender desde zonas profundas a
través de planos de fractura, produciendo así anomalías térmicas muy
intensas.
- Manantiales calientes:
La mayoría de las aguas termales caen adentro de uno de los tres tipos más
comunes:
Aquellas que contienen grandes cantidades de carbonato de calcio en
solución.
Aguas acidas, usualment e ricas en sulfatos.
Aguas alcalinas, las cuales tienden a tener altos contenidos de cloruros.
- Geiser:
Por último, la temperatura del fondo del géiser comienza a subir alcanzando el
punto de ebullición; las burbujas del vapor ascienden hasta la punta del
conducto. Al atravesar el cráter del géiser, algo de agua se desborda y salpica
hacia afuera, reduciendo la anchura de la columna y la presión del agua que
hay debajo. Con este escape de presión, el agua súper-caliente se mezcla con
el vapor, ebulliendo violentamente por la columna. La espuma resultante entre
el vapor y el agua caliente es expulsada fuera del géiser.
- Lagos cráter:
- Fumarolas:
Las fumarolas son emisiones de vapor de agua y otros gases que se producen
en los volcanes una vez terminada la fase de mayor actividad de la erupción y
en las grietas asociadas emiten. Corresponden a diversos tipos, cuyos
nombres se refieren a los gases que abundan más: Cloruradas (cloruros),
Ácidas (ácido clorhídrico) o Solfataras (sulfuros). Estas fumarolas emiten sus
gases a temperaturas superiores a 100 ºC, por lo que suele estar presente el
vapor de agua.
- Mofetas:
Tipo de fumarolas cuyas emisiones son relativamente frías (unas 90°C). Los
gases que desprende son especialmente ricos en dióxido de carbono.
CONCLUSIÓN:
Como bien nos dimos cuenta, el calor y la temperatura son términos que
por su cercanía suelen confundirse, e incluso, pensar en que se refieren
a lo mismo, por lo abordado en este espacio, descubrimos que son
conceptos cuya aplicación es diferente, puesto que el calor se refiere a
la energía que se mueve de un cuerpo a otro gracias al gradiente
(diferencia) de temperatura y ésta última es la velocidad promedio de las
moléculas cuando perciben calor, también el concepto suele referirse a
la medida del grado de calor que posee un cuerpo.
BIBLIOGRAFIA
El gradiente geotérmico:
GEISER