Industria 4
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La Industria 4.0 se basa en nueve pilares tecnológicos. Estas innovaciones
conectan los mundos físico y digital y habilitan sistemas inteligentes y
autónomos. Las empresas y cadenas de suministro ya utilizan algunas de
estas tecnologías avanzadas, pero todo el potencial de la Industria 4.0
cobra vida cuando se utilizan juntas.
La Industria 4.0 implica la promesa de una nueva revolución que combina
técnicas avanzadas de producción y operaciones con tecnologías
inteligentes que se integrarán en las organizaciones, las personas y los
activos.
A lo largo de este ciclo, el acceso en tiempo real a la información está
impulsado por el continuo y cíclico flujo de información y acciones entre
los mundos físicos y digitales. Este flujo tiene lugar a través de una serie
de pasos iterativos conocido como PDP –por sus siglas en inglés physical-
to-digital-to-physical-:
Del mundo físico al digital. Se captura la información del mundo
físico y se crea un registro digital de la misma.
De digital a digital. En este paso, la información se comparte y se
interpreta utilizando analítica avanzada, análisis de escenarios e
inteligencia artificial para descubrir información relevante.
Del mundo digital al físico. Se aplican algoritmos para traducir las
decisiones del mundo digital a datos efectivos, estimulando
acciones y cambios en el mundo físico.
1. El Big Data y las analíticas de la IA: en la Industria 4.0, el Big Data se
recopila desde una amplia gama de fuentes, desde equipos de fábrica y
dispositivos de internet de las cosas (IoT), hasta sistemas
de ERP y CRM, hasta apps del estado del tiempo y del tránsito. Las
analíticas potenciadas por inteligencia artificial (IA) y machine learning
se aplican a los datos en tiempo real –y la información estratégica se
aprovecha para mejorar la toma de decisiones y la automatización en
todas las áreas de la gestión de la cadena de suministro: planificación de
la cadena de suministro, gestión de logística, fabricación, I+D e
ingeniería, gestión de activos empresariales (EAM) y compras–.
2. Integración horizontal y vertical: la columna vertebral de la Industria 4.0
es la integración horizontal y vertical. Con la integración horizontal, los
procesos están estrechamente integrados a "nivel de campo" –en la
planta de producción, en múltiples instalaciones de producción y en toda
la cadena de suministro–. Con la integración vertical, todas las capas de
una organización están vinculadas –y los datos fluyen libremente desde
la planta de fabricación hasta las oficinas y desde allí al resto–. En otras
palabras, la producción está estrechamente integrada con procesos de
negocio como I+D, garantía de calidad, ventas y marketing, y otros
departamentos –y los silos de datos y conocimiento son cosa del
pasado–.
3. Computación en la nube: la computación en la nube es el "gran
habilitador" de la Industria 4.0 y la transformación digital. La
tecnología en la nube de hoy en día va mucho más allá
de velocidad, escalabilidad, almacenamiento y eficiencia de costos.
Proporciona la base para la mayoría de las tecnologías avanzadas –
desde IA y machine learning hasta internet de las cosas– y le da a las
empresas los medios para innovar. Los datos que alimentan las
tecnologías de la Industria 4.0 residen en la nube y los sistemas
ciberfísicos del centro de la Industria 4.0 utilizan la nube para
comunicarse y coordinarse.
4. Realidad aumentada (AR): La realidad aumentada, que superpone el
contenido digital en un entorno real, es un concepto central de
la Industria 4.0. Con un sistema de AR, los empleados utilizan lentes
inteligentes o dispositivos móviles para visualizar datos de IoT en tiempo
real, piezas digitalizadas, instrucciones de reparación o
montaje, contenido de capacitación, y más cuando miran algún elemento
físico –como una pieza de equipamiento o un producto–. La AR sigue
emergiendo, pero tiene implicancias importantes para el mantenimiento,
servicio y control de calidad, así como para la capacitación y seguridad
de los técnicos.
5. Internet de las cosas industrial (IIoT): internet de las cosas (IoT) –
puntualmente, Internet de las cosas industrial– es tan central para la
Industria 4.0 que los dos términos a menudo se utilizan de manera
indistinta. La mayoría de las cosas físicas de la Industria 4.0 –
dispositivos, robots, maquinaria, equipos, productos– utilizan sensores y
etiquetas RFID para proporcionar datos en tiempo real sobre su
estado, rendimiento o ubicación. Esta tecnología les permite a las
empresas operar cadenas de suministro más fluidas, diseñar y modificar
rápidamente productos, evitar la inactividad de los equipos, estar al tanto
de las preferencias del consumidor, hacer seguimiento de los productos
y el inventario, y mucho más.
6. Fabricación aditiva/Impresión 3D: la fabricación aditiva, o impresión
3D, es otra tecnología clave que impulsa la Industria 4.0. La impresión
3D se utilizó inicialmente como una herramienta de creación rápida de
prototipos, pero ahora brinda una gama más amplia de
aplicaciones, desde la personalización en masa hasta la fabricación
distribuida. Con la impresión 3D, por ejemplo, las piezas y los
productos pueden almacenarse como archivos de diseño en inventarios
virtuales e imprimirse bajo demanda o donde se lo necesite –reduciendo
tanto las distancias de transporte como los costos–.
7. Robots autónomos: con la Industria 4.0, una nueva generación de
robots autónomos está emergiendo. Programados para realizar tareas
con mínima intervención humana, los robots autónomos varían mucho
en tamaño y función, desde drones de escaneo de inventario hasta
robots móviles autónomos para operaciones de recoger y ubicar.
Equipados con software de vanguardia, IA, sensores y visión de
máquina, estos robots son capaces de realizar tareas difíciles y
delicadas –y pueden reconocer, analizar y actuar sobre la información
que reciben de sus alrededores–.
8. Simulación/gemelos digitales: un gemelo digital es
una simulación virtual de una máquina, producto, proceso o sistema del
mundo real basado en datos de sensores de
IoT. Este componente central de la Industria 4.0 le permite a las
empresas comprender, analizar y mejorar el rendimiento y el
mantenimiento de los sistemas y productos industriales. Un operador de
activos, por ejemplo, puede utilizar un gemelo digital para identificar una
pieza específica que funciona mal, prever problemas potenciales y
mejorar el tiempo productivo.
9. Ciberseguridad: con el aumento de la conectividad y el uso de Big Data
en la Industria 4.0, la ciberseguridad efectiva es
primordial. Implementando una arquitectura Zero Trust y tecnologías
como machine learning y blockchain, las empresas pueden automatizar
la detección, prevención y respuesta ante amenazas –y minimizar el
riesgo de violaciones a los datos y demoras en la producción en todas
sus redes