4.1. Brindis Del Bohemio

EL BRINDIS DEL BOHEMIO
(Guillermo Aguirre y Fierro)

En torno de una mesa de cantina, una noche de invierno ¡Bravo!, dijeron todos
Regocijadamente departían seis alegres bohemios Inspirado esta noche has estado
Los ecos de sus risas se escapaban Y hablaste breve, bueno y substancioso
Y de aquel barrio quieto
Iban a interrumpir el impotente y profundo silencio El turno es de Raúl; alce su copa y brinde... por Europa
El humo de olorosos cigarrillos en espirales se elevaba al Ya que su extranjerismo es delicioso
cielo Bebo y brindo, clamó el interpelado
Simbolizando al resolverse en nada Brindo por mi pasado
La vida de los sueños Que fue de luz, de amor y de alegría
Pero en todos los labios había risas En el que hubo mujeres tentadoras
Inspiración en todos los cerebros Y frentes soñadoras que se juntaron a la frente mía
Y repartidas en la mesa Brindo por el ayer
Copas pletóricas de ron, whisky o ajenjo Que en la amargura que hoy cubre de negrura mi corazón
Era curioso ver aquel conjunto, aquel grupo bohemio Esparza sus consuelos
Del que brotaba la palabra chusca Trayendo hasta mi mente las dulzuras de goces
La que vierte veneno De ternuras, de amores, de delicias, de desvelos
Lo mismo que, melosa y delicada, la música de un verso Yo brindo; dijo Juan
A cada nueva libación Porque en mi mente brote un torrente de inspiración
Las penas hallábanse más lejos del grupo divina y seductora
Y nueva inspiración llegaba a todos los cerebros Porque vibre en las cuerdas de mi lira el verso que
Con el idilio roto que venía en alas del recuerdo suspira
Que sonríe, que canta y que enamora
Olvidaba decir
Que aquella noche, aquel grupo bohemio Brindo porque mis versos cual saetas
Celebraba entre risas, libaciones Lleguen hasta las grietas formadas de metal y de granito
Chascarillos y versos Del corazón de la mujer ingrata
La agonía de un año que amarguras dejó en todos lo Que a desdenes me mata
pechos. ¡Pero que tiene un cuerpo muy bonito!
Y la llegada, consecuencia lógica, del Feliz Año Nuevo Porque a su corazón llegue mi canto
Una voz varonil dijo de pronto Porque sequen mi llanto sus manos que me causan
¡Las doce, compañeros! embelesos
Digamos el requiescat Porque con creces mi pasión me pague... ¡vamos!
Por el año que ha pasado a formar entre los muertos Porque me embriague con el divino néctar de sus besos
¡Brindemos por el año que comienza! Siguió la tempestad de frases vanas

Porque nos traiga ensueños Toscas y tan humanas
Porque no sea su equipaje Que hallan en todas partes acomodo
Un cúmulo de amargos desconsuelos Y en cada frase de entusiasmo ardiente
Hubo ovación creciente y libaciones, y reír, y todo
Brindo; dijo otra voz
Por la esperanza que a la vida nos lanza, de vencer los Se brindó por la patria, por las flores
rigores del destino Por los castos amores que hacen de un valladar una
Por la esperanza, nuestra dulce amiga ventana
Que las penas mitiga y convierte en vergel nuestro Y por esas pasiones voluptuosas
camino Que el fango del placer llenan de rosas
Y hacen de la mujer la cortesana
Brindo porque ya hubiese a mi existencia puesto fin con
violencia Sólo faltaba un brindis... el de Arturo
Esgrimiendo en mi frente la venganza El del bohemio puro de noble corazón y gran cabeza
Si en mi cielo de tul, limpio y divino De aquél que sin ambages
No alumbrara mi sino una estrella brillante, ¡mi Declaraba que sólo ambicionaba robarle inspiración a la
esperanza! tristeza
Por todos estrechado
Alzó su copa frente a la alegre tropa desbordante de risa
y de contento Que mi destino me señala el camino
Los envolvió en la luz de una mirada Por el que volveré muy pronto a su lado
Sacudió su melena alborotada y dijo así, con inspirado
acento Por la anciana adorada y bendecida
Por la que con su sangre me dio la vida
Brindo por la mujer Y ternura, y cariño
Mas no por esa en la que halláis consuelo en la tristeza Por la que fue la luz del alma mía
Rescoldo del placer, ¡desventurados! Y lloró de alegría, sintiendo mi cabeza en su corpiño
No por esa que os brinda sus hechizos
Cuando besáis sus rizos artificiosamente perfumados Por ella brindo yo, ¡dejad que lloré!
Y en lágrimas desflore esta pena letal que me asesina
Yo no brindo por ella, compañeros Dejad que brinde por mi madre ausente
Siento por esta vez no complaceros Por la que sufre y siente que mi ausencia
Brindo por la mujer, pero por una Es un fuego que calcina
Por la que me brindó sus embelesos
Y me envolvió en sus besos Por la anciana infeliz que sufre y llora
Por la mujer que me meció en la cuna Y que del cielo implora que vuelva yo muy pronto a estar
con ella
Por la mujer que me enseñó de niño lo que vale el cariño ¡Por mi madre!, bohemios
Exquisito, profundo y verdadero Que es dulzura vertida en la amargura
Por la mujer que me arrulló en su brazos Y de mis negras noches es mi estrella
Y que me dio en pedazos
Uno por uno, el corazón entero El bohemio calló
Ningún acento profanó el sentimiento nacido del dolor y la
¡Por mi madre! bohemios ternura,
Por la anciana que piensa en el mañana Y pareció que sobre aquél ambiente flotaba
Como en algo muy dulce y deseado inmensamente
Porque sueña tal vez Un poema de amor y de amargura

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¡Brindemos por el año que comienza! Siguió la tempestad de frases vanas

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