Inteligencia Emocional T3
Inteligencia Emocional T3
Inteligencia Emocional T3
PSICOLOGIA
MONOGRAFIA
AREA:
FUNDAMENTOS DE LA PSICOLOGIA
GRUPO:
1
INTEGRANTES:
1.-ERICKA ESPINOZA IZQUIERO
2.-ENI MEDINA VILLALOBOS
3.-FLOR ELIZABETH SOLANO VASQUEZ
4.-DIANELE SILVA JUAREZ
5.-MADDELYNE LINARES CHILON
DOCENTE:
OSCAR IVAN ALFARO BUSTAMANTE
CAJAMARCA – PERU
2022
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
INDICE DE CONTENIDO
1. Resumen
2. Introducción
3. Marco Teórico
3.1 ¿Qué es la Inteligencia Emocional?
3.2 3.2 Las emociones en el ámbito educativo
6. Conclusiones
7. Referencias bibliográficas
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
RESUMEN
En este artículo se pretende analizar la relación entre la inteligencia
emocional y el rendimiento académico observando si hay una influencia
significativa del primer factor sobre el segundo concepto, centrándose en
los estudiantes. Mediante la revisión bibliográfica se fue buscando a través
de distintos autores las definiciones, modelos, factores e instrumentos
que caracterizan a estos términos para finalmente poder relacionarlos. Por
lo que después de exponer varios de los estudios realizados se concluye
que la inteligencia emocional afecta de forma directa al rendimiento
académico, a pesar de que la mayoría de autores no la incluyan como tal
entre los factores es uno de los más importantes ya que se ha visto
reflejado que sin ese factor el rendimiento se ve afectado y, por lo tanto,
las calificaciones.
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
INTRODUCCION
La inteligencia emocional juega un papel fundamental en el desarrollo y
crecimiento de la personalidad del sujeto.
Desde hace un tiempo se vienen detectando niveles de estrés, ansiedad y
fracaso escolar cada vez más elevados y en etapas educativas más
tempranas. Este suceso viene derivado de factores como el aumento de
responsabilidad y autonomía, carga de trabajo académico, así como falta
de habilidades para gestionar las emociones.
De ahí que, en las últimas décadas, la Inteligencia Emocional haya
adquirido una mayor importancia en el ámbito educativo, la cual actúa
como medio para promocionar el bienestar psicológico del alumnado,
facilitándoles la comprensión del entorno que los rodea, así como
dotándolos de las competencias necesarias para hacer frente a las
diversas situaciones que se presentan. De esta manera, este constructo se
constituye como un proceso educativo que ha de ser permanente y
continúo favoreciendo el desarrollo integral de los estudiantes.
En este sentido, la correcta adquisición y utilización emocional se
encuentra estrechamente ligada al éxito escolar, la cual concede una
mayor relevancia a la comprensión de los contenidos sobre la
memorización en el aprendizaje. De esta manera, se hace necesaria la
incentivación del desarrollo de la Inteligencia Emocional en el alumnado,
ya que posee un gran impacto tanto a nivel educativo, como a nivel social.
En esta misma línea, atendiendo a, las habilidades emocionales son
promotoras de los procesos mentales, y actúan contribuyendo a favor de
la concentración y el control de situaciones estresantes, así como de la
automotivación, permitiéndoles llevar a cabo de forma satisfactoria sus
estudios y tareas académicas.
Asimismo, aquellos estudiantes que adquieren unos correctos niveles de
Inteligencia Emocional, desarrollan habilidades para gestionar
adecuadamente sentimientos como la ansiedad y la depresión, así como
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
1. MARCO TEÓRICO
1.2 ¿QUÉ ES LA INTELIGENCIA EMOCIONAL?
Inteligencia Emocional es el modo de entender la inteligencia, más allá de
los aspectos cognitivos, tales como: la memoria y la capacidad para
resolver problemas. Hablamos, ante todo de nuestra capacidad para
dirigirnos con efectividad a los demás y a nosotros mismos, de conectar
con nuestras emociones, de gestionarlas, de auto motivarnos, de frenar
los impulsos y vencer las frustraciones. El término popularizado por Daniel
Goleman en su libro “Emotional Inteligencie”, publicado en 1995 señala:
“La Inteligencia Emocional nos permite tomar conciencia de nuestras
emociones, comprender los sentimientos de los demás, tolerar las
presiones y frustraciones que soportamos” (Goleman, 1995, pág. 3). A
grandes rasgos podríamos decir que es la habilidad para tomar conciencias
de las propias emociones y de las demás personas y la capacidad para
regularlas. También existe la regulación de las emociones de los demás, en
el sentido de que el comportamiento de cada persona influye en las
emociones de los demás y por tanto en su comportamiento. Conciencia y
regulación emocional deben considerarse competencias básicas para la
vida, ya que la persona que las adquirido está en mejores condiciones de
afrontar los retos que plantea la vida.
La educación emocional
La educación basada en el desarrollo de la inteligencia emocional ayuda a
minimizar las situaciones que nos afectan de forma negativa, tanto mental
como físicamente, fomentando un estado de bienestar y equilibrio
emocional, ya que permite aprender a transformar las emociones en
estímulos y aprendizaje positivo.
Se fundamenta en los principios de prevención, desarrollo e intervención
social, con los objetivos de promover el crecimiento afectivo-cognitivo y
social de los alumnos, fomentar al máximo posible todas sus capacidades
individuales, sociales, intelectuales y culturales, así como educar las
emociones para conseguir su enriquecimiento como persona.
La inteligencia emocional es una parte de la inteligencia social que incluye
la capacidad de evaluar, expresar, regular y emplear nuestras emociones
adaptándolas a cada situación, de tal forma que guíen nuestro
pensamiento y comportamientos y nos permitan reconocer cuándo
pasamos de un estado emocional a otro.
Aunque el ser humano es un animal racional, se deja llevar por estímulos
emocionales irracionales, siendo posible controlar estas conductas
emocionales moldeando los hábitos adquiridos, pretendiendo que el niño
controle su propia conducta, en lugar de depender constantemente de las
situaciones y de las personas con las que se relaciona.
Tanto en el ámbito familiar como en el escolar debemos potenciar la
importancia de la educación emocionalmente inteligente. Esta a su vez se
puede extender al ámbito laboral y prácticamente a todas las relaciones
interpersonales. Toda emoción sin excepción afecta directamente al
proceso de aprendizaje. De ahí la importancia de saber reconocerlas y
gestionarlas eficazmente para utilizarlas a nuestro favor.
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
Familia
La familia tiene una gran influencia en la formación y desarrollo de la
personalidad y de las actitudes. Los padres aportan seguridad para que los
hijos se abran al mundo físico y social, y vuelven a ellos para recibir ayuda,
apoyo, consuelo y seguridad. Los padres tienen más variadas
oportunidades para influir en el comportamiento del niño, son los
principales educadores, sobre todo durante la infancia.
La acción de la familia es reforzada y completada por la escuela, ambos
constituyen los principales contextos para potenciar el desarrollo
emocional y lograr una personalidad sana e integral del niño, que
contribuya a su bienestar personal y social.
Los padres deben centrarse en enseñar a sus hijos buenos modelos de
vida. Incluso en familias donde los niveles de inteligencia no son altos los
niños pueden tener buenos modelos donde aprender.
Escuela
Los estudiantes disponen de un lugar de referencia, la escuela, donde es
necesario estimular el empleo de las distintas capacidades de las que
disponen.
No todos los alumnos requieren aprender de la misma manera, ya que la
misma materia puede ser presentada de distintas formas para facilitar su
asimilación, siendo el estado emocional el que influye en el procesamiento
de la información.
Disfrutarán más si el profesor educa emocionalmente, construirán más
fácilmente su propia autoestima, tendrán un mejor rendimiento
académico y una mejora de la creatividad, extendiéndose a ellos las
cualidades humanas del educador, y originándose un ambiente escolar
menos agresivo y con menos problemas relacionados con la disciplina.
Los objetivos inalcanzables originan sentimientos de incapacidad y la
autoevaluación realista evita la tendencia a generalizar el fracaso que se
da en algunos individuos a partir de limitaciones concretas e
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
Rendimiento académico
Como ya hemos comentado, muchos de los problemas que podemos
encontrar dentro del ámbito educativo se pueden contrarrestar y dar
solución mediante la inclusión de las emociones en la escuela. Las
emociones influyen directamente en el desempeño académico, pues
actúan sobre el aprendizaje.
Diferentes estudios han comprobado que al incorporar las emociones a la
enseñanza los resultados académicos son más satisfactorios, pues
alcanzan una mayor eficacia y calidad en el proceso de enseñanza y
aprendizaje. Por esta razón debemos potenciar las competencias
emocionales como un elemento ineludible para facilitar el desarrollo
curricular del alumno.
La concentración y la atención son factores determinantes a la hora de
conseguir un aprendizaje eficaz. Pero cómo puede un alumno estar
concentrado en la clase de historia, por ejemplo, si está preocupado,
triste, enfadado porque acaba de pelear con un amigo…
Todas esas emociones generan sentimientos, que si no sabemos controlar
y gestionar hacen que nuestros pensamientos se trasladen fuera del aula.
Por tanto, nuestro aprendizaje se ve influenciado negativamente.
Por lo tanto, existe una conexión entre la inteligencia emocional y el
rendimiento escolar. Las relaciones tanto intrapersonales como
interpersonales influyen sobre la salud mental de los estudiantes, y
mantener un buen equilibrio afectará al rendimiento académico final.
CONCLUSIONES
“INTELIGENCIA EMOCIONAL Y
REFERECIAS BIBLIOGRAFICAS
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