Voyeur

¡¡¡Feliz Cumple, JC!!!
Entra en el misterioso mundo de Voyeur. Un lugar donde tus más profundos deseos se
presentarán ante sus ojos. Todo lo que tienes que hacer es ver.
Brett Masters vive una doble vida. Es un hijo fiel que puso sus estudios universitarios en espera,
volviendo a casa para ayudar a cuidar a su padre enfermo, pero el mudarse a casa significa mudarse
de nuevo dentro del armario. Incapaz de ser abierto acerca de su sexualidad, un encuentro casual le
ofrece una salida a su frustración sexual y lo seduce a un mundo totalmente nuevo - uno oscuro lleno
de tentaciones y exclusividad.
Brett se encuentra conduciéndose así mismo al misterioso Lounge V y sus patrones
intrigantes. Un club en el que puede disfrutar de sus necesidades y deseos, mucho más
2 importante, permanecer en el anonimato. Dentro Brett descubre un santuario de su
normal, aburrida vida.
¿Brett estará satisfecho permaneciendo en el exterior mirando hacia adentro, o un
día querrá más?
“0/
Una nueva serie de cortos de Louisa Mae. Únete a los hombres del Lounge V en un viaje de
exploración y
Descubrimiento al viajar profundamente dentro de su mundo oculto
Derechos de autor
Dedicación
Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
3
Capítulo 4
Capítulo 5
“0/
Sobre el Autor
En la oscuridad, espero. Los sonidos me envuelven con su calidez, haciéndome compañía

hasta que veo lo que quiero. Lo que necesito. Entonces, y sólo entonces, vengo a la vida.
Mi cuerpo espera, pacientemente, sabiendo lo que desea, lo que anhela para llevarme
al nivel de placer que nunca pensé posible antes de derrumbarse a mí alrededor,
permitiéndome bañarme en el resplandor.
Miro desde las sombras, sin ser visto. Este es probablemente lo más cercano que voy a
llegar a ese nivel de intimidad conmigo mismo. Hay una pequeña voz en la parte posterior
de mi cabeza, diciéndome que permanezca oculto. No abriéndome con nadie sobre mi
sexualidad. Sería más fácil de esa manera. La gente me miraría de forma diferente si
supieran la verdad, se avergonzarían de conocerme. Esto causa confusión dentro de mí, me
obliga a ocultar quién y lo que quiero. No hay manera de que pueda permitir que nadie se
4 acerque a mí en este momento. Aun si quiero estar enamorado, ser sostenido, ser el único
siendo llenado tan completamente que no sabe dónde el terminan y tu comienzas.
En este momento, siento que no soy nada, nadie. Simplemente un fantasma que vive
“0/ en los márgenes de una comunidad y una vida de la que desesperadamente quiero ser
parte. Por ahora, tengo que estar contento con la mano de vida que se me ha repartido. Por
supuesto, sé que llegará el día en que no será suficiente para mí, cuando voy a necesitar
más.
Esto no es como yo quería que mi vida fuera, pero por ahora al menos, es suficiente.
Mi nombre es Brett Masters, y esta es mi historia.
La historia de un voyeur.
Averiguar que me gustaban los chicos era algo que trataba de esconder desde la primera
vez que me pasó. La conmoción y el horror que experimente y como luché con este
descubrimiento durante mi adolescencia no fue fácil. No podía comprender cómo mi mente
y cuerpo parecían estar completamente en diferentes páginas. Demonios, a veces se
sentía como que estaban leyendo libros diferentes.
Al principio, yo lo atribuí a las hormonas. Yo recuerdo que era la razón por la que mi
padre murmuraba desde detrás de su periódico cuando mi madre se ponía molesta. Tener
catorce años y cosas extrañas empezando a ocurrirle a mi cuerpo, ya que evolucionó de un
niño a un hombre joven era confuso. Ya era bastante malo luchar contra los cambios
hormonales normales que todos los niños experimentaban a medida que crecía el pelo en
5 el más extraño de los lugares. A continuación, después añade el modo en el que me
encontré mirando a mi mejor amigo, Stephen, con ganas de besarlo y hacer mucho más fue
algo diferente, y me aterrorizaba.
“0/
Yo estaba confundido, sobre todo, convenciéndome a mí mismo que si miraba a las niñas
el tiempo suficiente, cambiaría. Pensé que tal vez de alguna manera me seria concedido un
milagro y las encontraría atractivas, pero no fue así. Escondí los sentimientos justo en el
fondo del proverbial armario como tantos otros de mi edad lo hicieron. Sólo deseando tener
a alguien con quien hablar de ello.
Mi madre parecía tener un sexto sentido en lo que a mí y a mi hermano mayor se refiere.
Ella me tranquilizo, guiñándome cuando me dijo que era un 'desarrollo tardío' cada vez que
mi padre me preguntó si me encontré a mí mismo 'una chica bonita” en la escuela. Ella me
defendió, diciendo que mis estudios eran mucho más importantes que una novia si quería ir
a la universidad como lo había planeado. En secreto, creo que ella sabía la verdad contra la
que yo estaba luchando tanto. Dicen que una madre solo lo sabe, y yo dudaba que la mía
fuera diferente.
Cinco años mayor que yo, mi hermano, Tristán, estaba ocupado jugando en el campo lo
suficiente por los dos. Él parecía ser la elección natural para que yo hablará acerca de 'cosas
de muchachos,' habiendo sobrevivido a la pubertad por sí mismo. Escuchó como descargué
mi confusión con respecto a mi cuerpo y sentimientos, a pesar de que en realidad nunca le
dije específicamente acerca de mi sexualidad. Tristán me dijo que era normal obtener una
erección sobre la más mínima cosa. Se rio al relatar cómo, para él, ver una bonita chica
presentadora de noticias o del tiempo era suficiente para hacerle ponerse ‘madera', como él
lo llamaba. Él agarraba un cojín del sofá y la ponía sobre su ingle hasta que se iba.
Tristán me hizo reír hasta que mis costados dolieron cuando me contó sobre el momento
en que se encontró uno de los catálogos de venta por correo de mamá y pasó horas mirando
la sección de ropa interior. Con una risa, me sugirió darles una oportunidad, ya que era
mucho más fácil de hacer aparecer en la tienda local y tratar de comprar una copia de una
revista del estante superior. Pensó claramente que estaba pasando por los mismos
problemas que él tuvo; estaba tan equivocado.
En la escuela, las clases de deportes eran las más difíciles para mí. Tomé un segundo
par de pantalones en esos días para tratar de ocultar las situaciones desafortunadas que
pudieran surgir. No era como que estuviera fisgoneando sobre mis compañeros de clase,
pero no era fácil de evitar cuando ellos se cambiaban frente el uno del otro sin cuidado en
el mundo, mientras yo estaba sentado en la esquina más alejada de ellos, con miedo de
mirar en caso de ponerme duro. La vergüenza hubiera sido demasiada, a pesar de que no
pude evitar que mi cuerpo reaccionara.
6 Afortunadamente, esos días están muy por detrás de mí ahora, y yo soy un adulto. Una
parte de la sociedad en pleno funcionamiento y libre de vivir mi vida como yo elija. Me decidí
por la universidad en otra ciudad, lo suficientemente lejos de casa para estar seguro.
“0/ Terminé en la Universidad de Nottingham justo después de hacer mis exámenes finales. No
podía esperar para escapar de las cadenas metafóricas que mantenían mi limite en las
sombras, ocultando al verdadero Brett Masters del mundo. Sólo la vida no iba a ser tan
amable conmigo.
Sólo regresare a casa cuando mi padre se enfermó. Mi madre me necesitaba. Tristán
estaba mochileando por todo el mundo y a ella no le gustaba que le moleste. ¿Pero yo
poniendo mi vida en suspenso? Bueno, parecía estar bien en su libro. Lo que había planeado
para ser una visita de una semana, tal vez dos, se volvió conmigo volviendo a mi ciudad natal
y a mi dormitorio de la infancia durante los últimos seis meses. Seis largos meses que iban
a cambiar mi vida.
Cuando llegué de vuelta a Leeds, me daba miedo, pero era reconfortante, todo al mismo
tiempo. Los lugares que fueron una vez límites para mí como un menor de edad, cerrados
como adolescente ahora estaban abiertos como un adulto. En teoría, yo era capaz de
entrar en cualquiera de los bares homosexuales agrupados alrededor del Lower Briggate
sin miedo, rechazo o cualquier persona apuntándome con el dedo, o susurrando detrás de
sus manos. Tenía miedo, ese era el problema. Incluso después de experimentar la vida
por mí mismo, sin temor a la recriminación, la universidad y una entera nueva ciudad me
dio, gracias a la distancia de cualquier persona que realmente me conocía, todavía tenía
miedo de admitir la verdad a las personas más cercanas a mí. Ninguno de mis amigos de
la universidad sabía que era gay.
Vivir en Nottingham había sido una experiencia liberadora, estaba a poco más de una
hora en coche de Leeds, así que no había ninguna posibilidad de chocar con alguien que
conocía de Leeds. Una vez que había encontrado mi confianza, y los bares correctos, había
habido varias conexiones en los cuatro años que había estado en la universidad, pero eran
hombres sin nombre, al azar en una ciudad que podía ocultarme fácilmente dentro. Un
algún lugar donde nadie me conocía, o francamente no le importaba lo que hacía.
Ahora todo era muy diferente. Leeds era mi hogar; la gente me conocía aquí. Me sentía
como si tuviera que esconder quien realmente era.
Se sentía mal entrar en los bares gay en Leeds. Yo estaba constantemente mirando por
encima de mi hombro, esperando encontrar a mi madre o hermano allí de pie, listo para
arrastrarme fuera y de vuelta a casa como un niño. Por supuesto, esto no sucedió, no había
manera de que mi madre pondría un pie en un bar, y Tristan ni siquiera estaba en el país -
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pero no impidió que la duda y el miedo se arrastrara por mi columna vertebral.
Todavía recuerdo una de las primeras veces que me atreví a pasar a través de la puerta
“0/ y dentro del mundo prohibido de la comunidad homosexual en mi ciudad natal. Me moví más
allá de un portero muy grande e intimidante, que yo estaba convencido de que iba a
preguntarme por qué estaba allí antes de tirar de mí hacia la cuneta a la vista de todos, pero
no lo hizo. En cambio, él asintió brevemente, sus ojos nunca dejando el flujo constante de
gente entrando y saliendo por la puerta. Por supuesto, ¿por qué debería pensar que él me
prestaría atención? era otro cliente, siempre y cuando pagara por mis bebidas y no causara
ningún problema, no recordaría mi cara una vez que entré.
La barra se mostró más activa de lo que pensaba que sería. Parecía que había una
clientela mixta, todas las edades y de ambos lados de la ecuación sexual. Nadie se fijó
en mí como tejí mi camino a través de la barra de donde yo estaba y pacientemente
esperé mi turno. Una vez que había sido servido, agarré la botella de cerveza del
sonriente y demasiado agradable camarero antes de fundirme en la multitud donde me
sentí más seguro.
Una vez que había terminado mi cerveza, sentí los nervios empezar a elevarse muy
dentro de mi estómago. Entonces, vi a alguien que conocía desde la escuela. El miedo se
apoderó de mí mientras el claramente entraba en mi línea de visión. Mierda. Si yo puedo
verlo, entonces seguramente él podría verme. Estaba congelado en el sitio, incapaz de
moverme. Justo cuando estaba debatiendo cómo seguir más allá de él sin ser visto, un
hombre un poco borracho chocó conmigo y derramó su bebida en mi camisa.
“Oh, mierda, lo siento mucho. Aquí, déjame ayudarte “Él se acercó a mí y, sin pensarlo, se
apartó. Una mirada de confusión cruzó su rostro, pero él levantó las manos hacia mí. “No
estaba tratando nada.”
Hice un gesto a mi camisa y en algún lugar hacia la parte posterior de la barra, donde
asumí los baños estarían, sacudí la cabeza. “Está bien, voy a ir y limpiarlo.” Entonces, antes
de que pudiera responder, hui. Haciendo mi camino a través de la multitud de personas,
llegando a los baños, que estaban en el sótano. Me sentí aliviado al encontrar que no
parecía haber nadie en ellos. Era un gran espacio abierto, paredes de ladrillo desnudo con
un lavabo de piedra grande en una de las paredes; en la otra, había una zona de estar.
había una luz tenue, con velas ubicadas en el ladrillo; todo el lugar se sentía extraño como
el sonido de la música del bar por encima reverberó a través del espacio. Se sentía como
si estuviera en otro mundo.
Me las había arreglado para obtener la cerveza fuera de mi camisa, y también conseguir
estar medio seco bajo el secador de manos, cuando oí voces viniendo por las escaleras. En
8 un momento de pánico, me metí en uno de los cubículos, cerrando la puerta detrás de mí.
Con mi corazón latiendo en mi pecho, esperé, escuchando atentamente, deseando que se
fueran, pero no lo hicieron. En cambio, mis oídos fueron recibidos con un conjunto diferente
“0/
de sonidos, los que a partir de esa noche iban a cambiar el curso de mi vida.
Los sonidos de los dos hombres teniendo relaciones sexuales sólo a unos pies de distancia
de mí me congelaron en mi lugar. Estaban quejándose y gruñendo, a continuación, la puerta
del baño se sacudió al rebotar contra ella. Me acerqué más, desesperado por encontrar que
estaba equivocado, y que no había una pareja teniendo sexo justo al otro lado de la delgada
barrera metálica entre nosotros.
Tratando de abrir la puerta, me encontré con que estaba firmemente encajada en su
lugar. Por supuesto que lo estaba, se abría hacia afuera debido a la falta de espacio. Estaba
encerrado dentro y no había nada que pudiera hacer. Era extraño escuchar los sonidos de
sus quejidos y gemidos llenos de lujuria. Hubo palabras murmuradas entre ellos siendo
ahogados por la música desde arriba.
Pasando a sentarme en el asiento del inodoro, me sentí como si estuviera atrapado,
9 aprisionado por una pareja que se necesitaban mutuamente tan mal que no podía esperar
más. Parecía estar en silencio por un momento, pero luego un par de manos aparecieron
sobre la parte superior de la puerta. Suprimiendo un chillido de sorpresa, mis ojos estaban
“0/ paralizados cuando los dedos agarraron cada vez más fuerte la puerta de metal.
Sintiéndome valiente, me mudé de la taza del baño y presioné mi oído contra la barrera de
metal industrial. Estaba frío, pero resonó con el sonido de los gemidos procedentes del otro
lado.
Mi cuerpo empezó a reaccionar a partir del conocimiento que alguien estaba teniendo
sexo en público, a sólo pulgadas de distancia de mí. No sé cuál fue la causa, debería haber
estado disgustado, pero en lugar de eso estaba muy encendido.
“Dios, se siente tan bien.” Gruñó una voz. “tan preparado para mí.”
Hubo un gemido. “¿Estás seguro de que nadie va a venir aquí?”
“Cerré la puerta principal para entrar aquí. Estamos sólo tú y yo, bebé “, fue la
respuesta. “Aunque sé que realmente no te importa si alguien lo hiciera.”
“Oh, Dios, podría ser-:” Las palabras se detuvieron mientras dejaba escapar un
gemido. Sus dedos se cerraban y abrían, luego se cerraron de nuevo sobre la parte
superior de la puerta.
“respira para mí, sólo respira.”
“Tan lleno.” Llegó un profundo gemido. “Necesitas moverte.”
Mi corazón se volcó mientras me daba cuenta de que en realidad estaban teniendo
relaciones sexuales. Apoyé la espalda contra la pared, frotando mi mano sobre mi pene, que
estaba duro y doloroso en los estrechos confines de mis jeans. Sin pararme a pensar, los
desabroché, permitiendo que mi mano se deslice hacia el interior. Tenía que contener un
grito al tocar mi propia carne tierna ahora. Mis ojos rodaron hacia la parte posterior de mi
cabeza en el contacto. Era casi imposible de soportar. Por supuesto que estaba
acostumbrado a darme a mí mismo placer, mi mano se convirtió en mi única forma de alivio
de la tarde, y había sido más escasa de lo que me hubiera gustado. Se sentía mal
masturbarse en mi dormitorio de la infancia, mientras mis padres dormían en la habitación
de al lado. Esto, sin importar que tan equivocado estaba, se sentía bien. Estaba claramente
perdiendo mi mente.
Los sonidos de la otra parte continuaron, los gemidos y gruñidos cada vez más fuertes.
10 Cada vez que se movían, la puerta se sacudió un poco más, y yo temía que el bloqueo
podría ceder y que iban a tirar la puerta abriéndola, dejando al descubierto mi presencia.
“Te sientes tan bien, tan abierto para mí. Lo amas así, ¿verdad? “El riesgo de ser
“0/
descubierto, de ver a la gente follando así.
Un grito ahogado se escapó de él cuando trató de responder, pero su propia lujuria lo
abrumo. Mi mano se movía rápidamente hacia arriba y abajo por mi adolorida longitud.
Estaba luchando por mantener mi propia necesidad de gritar como mi cuerpo era incapaz
de contener la presión por más tiempo. Parecía que no era el único ya que todos gritamos
al unísono, solo el mío fue amortiguado por mi mano libre cubriendo mi boca.
"¿Escuchaste eso?"
¡Mierda! Tal vez no había sido tan silencioso como pensaba. Mi cuerpo era sacudido
por las secuelas de mi orgasmo, y yo tenía demasiado miedo de moverme o hacer un
sonido más.
El sonido de los pasos se alejó, y deje escapar una respiración profunda antes de
coger el rollo de papel higiénico para limpiar mi mano y estómago. Todo lo que quería
era salir de aquí y volver a casa.
“Vamos, vamos a limpiarte y salir de aquí antes de que noten la puerta cerrada.”
De pie en la puerta, escuché con atención mientras los pasos se alejaron y se abrió una
puerta. Exhalando un suspiro de alivio, esperé un par de minutos. Escuchando a las
personas entrar en los baños, decidí hacer mi escape y mezclarme con la multitud.
Deslizando el pestillo hacia atrás, salí preparado para hacer mi salida. Una vez que estaba
fuera de los cubículos, fui a lavarme las manos, necesitando deshacerme de cualquier
rastro. Como me lavé las manos, yo fui consciente de alguien de pie junto a mí.
“¿Disfrutaste del espectáculo?”, Preguntó. “A pesar de que no podrías haber visto
nada por esa puerta cerrada.”
Volviendo a mirarlo a la cara, vi una sonrisa en su rostro. Mis mejillas encendidas de
vergüenza, desvié la mirada, apartándome de la pileta y moviéndome a la secadora de
manos. Se sentía como si todo el aire había sido succionado del espacio. Sólo quería salir
de aquí, pero huir solo confirmaría mi culpa.
“Ni idea de lo que estás hablando.” Me encogí de hombros.
Me siguió, apoyándose en la pared, con los brazos cruzados sobre el pecho.
Observándolo, era más alto que yo, y más pesado. Parecía que hacia ejercicio a partir de
los abultados músculos de sus brazos. Mi garganta se secó mientras lo observaba.
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Con una risa profunda, dio un paso más cerca de mí. “Por supuesto que no. Yo sabía
que había alguien ahí, todo lo que tenía que hacer era esperar. No me has pasado en el
“0/ camino, por lo que es lógico, tenías que estar allí ya.” Se frotó la barbilla antes de que sus
dedos trazaran por mi mejilla, “¿Te ha gustado? ¿Escucharme joderlo bien y duro? ¿Te
encendió, hizo que te dieran ganas de ver como mi polla se hundía en él o hizo que
quisieras ser el que yo estaba tomando tan duro?”
Mi cuerpo estaba empezando a reaccionar una vez más. Sus palabras eran calientes
y pesadas contra mi mejilla, enviando escalofríos a través de mí. Del mismo modo que
reuní el valor suficiente para responder, para decirle lo que quería, otro hombre apareció
detrás de él.
“Joe, ¿pensé que nos íbamos?”
Se apartó de mí hacia él. “Estamos, sólo estaba haciendo un nuevo amigo aquí.” Con
una mano ligera cualquier mundo mágico será probado, produjo una tarjeta de presentación
y la puso en mi mano mientras me susurraba: “Aquí es donde perteneces, sin ocultarte en
los baños malolientes.” entonces, se dio la vuelta y se fue.
Una vez que estuve solo, miré la tarjeta en mi mano. Era una simple tarjeta negra con
una V neón púrpura. Dándole la vuelta, vi uno de esos códigos QR extraños que se
escanean en el teléfono. Lo puse en mi bolsillo y salí del bar, necesitaba poner la mayor
distancia entre este lugar y yo como fuera posible.
Fue sólo cuando estaba con seguridad en un taxi y dirigiéndome a casa que saqué la
tarjeta para mirarla de nuevo, y abrí la aplicación en mi teléfono para escanearla. Una vez
que se había escaneado, me dirigió a un sitio web que mostro el mismo logotipo. Poco a
poco, apareció el nombre Voyeur. Con el ceño fruncido, me preguntaba qué era cuando no
pasó nada más. Estaba a punto de abandonarlo cuando apareció otra ventana. Se limitó a
decir: 'Usted ha sido invitado al Lounge V. Introduzca sus datos y nos pondremos en
contacto.'
La curiosidad pudo más que yo, por lo que puse mis datos en las pestañas y pulsé el
botón enviar. La página, entonces se cerró abajo. Traté de escanear el código de nuevo,
pero no funcionó. Genial, había sido estafado y ahora alguien tenía mi nombre, número de
teléfono y dirección de correo electrónico para vender a quien sabe Dios cuántas compañías
de comercialización. La única cosa buena no me había pedido poner mis datos bancarios
12 El taxi se detuvo a unas pocas calles de distancia, dándome la oportunidad de limpiar
mi cabeza antes de entrar en lo que sería la Inquisición española si mis padres estaban
aún despiertos. Echando un vistazo a la hora en mi teléfono, era justo después de 23:00,
“0/
así que había una posibilidad de que todavía podrían estar despiertos. Caminando hasta la
puerta principal, pude ver una luz en el pasillo, pero no en el salón. Podría tener suerte.
Una vez dentro, cerré la puerta con cuidado antes de arrastrarme por las escaleras
hasta el santuario que era mi habitación. Mi ropa necesitaba ser lavada, eso estaba
claro. Entre el olor a cerveza rancia y el semen seco dentro de mi ropa interior y en mi
piel, ambos mi ropa y yo necesitábamos ser limpiados.
Después de una ducha rápida, me quité la ropa para ponerlos en la lavadora,
deshacerme de la evidencia. Lo que no esperaba era encontrar a mi madre en la cocina,
sentada en la mesa en la oscuridad, albergando una taza de té.
“¡Santo puta mierda!” salte ligeramente, agarrando la ropa a mi cuerpo, tratando de
cubrir algo de mi desnudez ya que solo tenía una toalla envuelta alrededor de mi cintura.
“Brett Andrew Masters, mide tu lenguaje.” Mamá me miró por encima de su taza. Yo
sabía que ella no era feliz cuando ella usaba mi nombre completo.
“Lo siento, me has asustado.”
“estas en casa temprano, corazón.” Ella frunció el ceño. "¿Qué pasó?"
Puse la ropa en la máquina. “Alguien derramó su copa en mí. Yo no quería quedarme
fuera. Esto está por todas partes “.
“¿Te reuniste con Stephen?”
Su pregunta me sorprendió. Stephen había sido mi mejor amigo a través de la escuela
secundaria y habíamos permanecido siendo amigos mientras estaba en Nottingham, pero
no era como había sido cuando fuimos a la universidad. Era diferente entre nosotros ahora.
No era su culpa -si alguien tenía la culpa ante mis ojos, era yo.
“um, no. Me encontré con la gente del trabajo.” La mentira acerca de con quién
estaba vino fácilmente, pero no me detuvo.
Ella no empujo más lejos. En cambio, terminó su bebida, lavó la taza y se acercó a mí,
ahuecando mi mejilla en su mano.
“Bueno escuchar que estás haciendo nuevos amigos, corazón. Sé que volver a casa
no era lo que querías, pero me alegro de que estés aquí. Agradezco el apoyo “.
Me incliné y la besé en la mejilla. “Te quiero, mamá.” Ella se
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limitó a sonreír mientras se fue a la cama.
Una vez que estaba solo, deje escapar un profundo suspiro. Se sentía mal vivir una
“0/ mentira, pero era todo lo que podía hacer por el momento.
Después de mi primera fallida incursión en el barrio gay en Leeds, me quedé con las ganas
de volver, para ver si podía tener una mejor experiencia. En su lugar, hice un montón de
horas extras en el trabajo para distraerme. Eso era lo único bueno de trabajar en un centro
de llamadas para mí, el hecho de que, debido a mis siempre inestables patrones de
cambio, podría tomar ventaja de las horas extras, lo que significa que podría ahorrar algo
de dinero que permitiría que me mude con suerte pronto de la casa de mis padres. La otra
ventaja de las horas era que siempre podía decir que estaba trabajando un poco más tarde
si quería salir a tomar una copa sin tener que decir dónde iba.
Una semana pasó rápidamente, y yo estaba en un descanso en el trabajo cuando
obtuve un mensaje en mi teléfono, pidiéndome ingresar a un sitio web con respecto a mi
pertenencia al Lounge V. Mi corazón comenzó a latir un poco más rápido y mis palmas se
14 pusieron sudorosas como hacia clic en el enlace. La información era escasa, pero se limitó
a decir que había sido aceptado y debería mostrar el carnet electrónico que ellos habían
enviado en mi primera visita. Esto me confundió. ¿Qué demonios era este lugar, y cómo
“0/ me había convertido en un miembro?
Una vez terminado mi turno y llegué a casa, me conecté a mi ordenador portátil y leí el
correo electrónico que me habían enviado en su totalidad sin nadie alrededor para leer por
encima de mi hombro.
El Lounge V era solamente para miembros del club, y era parte de “Beyond Edén”. Ese
nombre lo reconocí. Era un bar en el barrio gay; siempre tenía ese aire de misterio en él. En
el exterior solo había vidrio ahumado, el signo sobre la puerta denota nada más que su
presencia. No dando nada más. Supuse que era un poco demasiado sofisticado para la
gente como yo, atendiendo a los tipos de alto nivel que disfrutaban de las cosas más finas.
Decidido a entrar después de mi turno al día siguiente y verlo por mí mismo
parecía ser la mejor cosa por hacer.
Ocho tortuosas, largas horas pasaron en lo que se sentía como en cámara lenta. Cada
llamada que tome fue un reto, y parecía que cada cliente llamando tenía una queja que
esperaba que resolviera como si tuviera una varita mágica y eso no iba a suceder. Mi trabajo
era simplemente para responder a sus llamadas, escucharlos y luego pasarla a alguien al
que se le pagaba más que a mí. Yo no era nada más que un trasero en un asiento, uno de
los muchos subordinados.
Tan pronto como dieron las 9, rápidamente firme mi salida y salí del edificio. Haciendo
mi camino a través de las calles de la ciudad hacia el barrio gay de Lower Briggate, y mí
objetivo. Estaba agradecido de que fuera un día entre semana ya que no había mucha
gente alrededor cuando finalmente llegué allí. Me puse de pie al otro lado de la calle,
mirando para calibrar lo lleno que estaba, pero nadie entró y nadie salió.
Beyond Edén se encontraba en uno de los arcos del ferrocarril justo al lado de Lower
Briggate. Desde el exterior, todavía parecía como nada especial, sólo el vidrio oscuro con
un cartel con el nombre, algún lugar en el que solo pasabas por delante, sin pensar nada de
él. Tal vez me equivoqué, y esto era algún tipo de broma o tomadura de pelo. Me di la vuelta
para salir cuando vi al hombre que me había dado la tarjeta de pie, mirándome. Mis mejillas
se sonrojaron al instante de nuevo con la memoria de la única vez que nos conocimos. Una
lenta sonrisa se deslizó por su cara, y lo único que podía hacer era mirar mientras se movía
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hacia mí como un león acechando a su presa.
Se puso de pie delante de mí, mirándome de la cabeza a los pies. Yo quería irme,
para romper su escrutinio de mí.
“0/ “Por lo tanto, viniste.” Su voz era baja, el tono profundo enviando escalofríos a través de
mi cuerpo con los recuerdos que evocaba.
“Yo estaba de paso”, dije, sabiendo que no lo creería más de lo que yo lo hice.
Él levantó una ceja con curiosidad a mi respuesta y mis mejillas se encendieron una vez
más lo que le hizo reír. “La manera en que reaccionas es tan inocente. Pero ambos
sabemos que es la segunda vez que has sido menos que veraz conmigo. Tal vez
deberíamos empezar de nuevo.” Él me tendió la mano. “Hola, soy Joe, ¿y tú eres?”
Sacudiendo la mano, respondí antes de que pudiera detener las palabras de salir de mi
boca. “Brett”.
“Mucho gusto, Brett. Ahora, estás de pie frente a un bar en un miércoles por la noche,
así que o estás perdido, o tratando de tener el valor de pasar dentro. Ahora, voy a ir a por la
segunda de estas dos opciones.” Se trasladó para cruzar la calle, dirigiéndose a mí. “¿Te
vienes?” Luego reprimió una sonrisa. “Lo siento, mala elección de palabras lo sé, dada
nuestra última reunión.”
Me di la vuelta para irme y él me siguió, agarrando mi brazo.
“Lo siento, ¿de acuerdo? Me dicen todo el tiempo que debería pensar antes de hablar,
pero a veces sólo sale antes de que pueda detenerlo.” Me soltó, y levantó las manos. “Mira,
yo dirijo. Si quieres unirte a mí, entonces estoy feliz de mostrarte alrededor."
Con eso, cruzó la carretera y lo seguí. Pasando a través de la puerta era como entrar
en otro mundo, el exterior puede haber parecido nada, pero por dentro era una historia
totalmente diferente.
Entramos en una amplia zona de recepción, abierta. Había un alto mostrador, detrás del
cual estaba sentado un hombre atractivo, bien peinado que supuse era de mi edad. Al
segundo que vio a Joe una sonrisa iluminó su rostro y dio la vuelta al mostrador y le echó los
brazos al hombre mayor antes de besar al aire en ambas mejillas.
“Joe, maravilloso verte.” Su mirada se posó en mí. “Veo que trajiste un invitado
contigo.”
Me sentía mal vestido con su escrutinio. Mi camisa y pantalones vaqueros, en conjunto
con una chaqueta de cuero y botas, eran claramente no lo que esperaba ver entrar por la
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puerta. No estaba vestido muy diferente a Joe, ¿por lo que cual era el problema?
“AJ, si compruebas los registros, creo que encontrarás a Brett aquí es en realidad un
“0/ nuevo miembro.” Joe se volvió hacia mí. “¿Asumo que recibió la tarjeta de socio?”
Asentí con la cabeza, pescando mi teléfono de mi bolsillo y abriendo el mensaje antes
de mostrarlo a Joe, que luego se lo pasó a AJ.
Con una sonrisa y floritura, regresó a su asiento, para escribir en un teclado. “Sí, aquí
estamos.” Hubo un zumbido que sonaba como una impresora y luego una tarjeta de plástico
me fue dada. “La tarjeta de miembro. Esto necesita ser producido cada vez que visitas. Te
da acceso sin restricciones a todas las habitaciones y los pisos. Sólo tienes que pagar el
precio de la entrada estándar si llegas después de la medianoche. Bienvenido a Beyond
Edén “.
Miré a Joe, que claramente atrapo mi confusión, y con una sonrisa, me dijo, “Deja que
te lleve dentro, entonces te puedo explicar.”
Asentí con la cabeza, permitiéndole llevarme a través de un gran conjunto de puertas
dobles y en un mundo completamente nuevo.
Joe con confianza me acompañó por un pasillo, y me dijo que había tres bares en este
nivel, cada uno ligeramente diferente del otro. Cuando entramos en el segundo, me di cuenta
que la habitación no estaba tan concurrida como la primera que habíamos pasado y tenía
relajante música de jazz sonando. Había cabinas esparcidas por toda la habitación, cada
una ofrecía privacidad con sus respaldos altos y diseño circular. Parecía que la privacidad
era respetada aquí.
Hizo una señal a una cabina vacía y me deslice sobre el cuero color chocolate del asiento,
permaneciendo cerca del borde en caso de que necesitara salir rápidamente.
Una vez que él se había sentado frente a mí, levantó la mano y un camarero se acercó
listo para tomar nuestra orden. “Lo de costumbre por favor, y lo que quiera Brett aquí.” Sus
ojos nunca dejaron los míos.
“Em, una pinta por favor.” No estaba seguro que el alcohol fuera la mejor idea, pero
pensé que podría ayudar a calmar los nervios y hacer el incómodo silencio que se había
establecido entre nosotros más soportable.
Una vez que llegaron las bebidas, Joe habló primero. “Creo que te estás preguntando
por qué te di esa tarjeta.” Pasó un dedo por el borde de la copa. “Bueno, parecías un poco
perdido y necesitado de orientación. Tomó agallas quedarse donde estabas y disfrutar de
los sonidos de dos extraños teniendo relaciones sexuales. La mayoría de la gente habría
17 hecho notar su presencia, nos hubieran echado fuera por eso. Pero no tú.” Tomó un trago
de su vaso, el líquido ambarino corriendo a través del hielo, ya que llegó a su boca.
Yo estaba fascinado mientras lo bebía: ligeramente largo el oscuro cabello barría
“0/
su cara, el más leve indicio de barba en su fuerte mandíbula.
“Entonces la pregunta es, ¿qué te gusta ver?”
"¿Qué quieres decir?"
“¿Te gusta ver a la gente joder? ¿Te enciende?”
Nunca había pensado en ello, no hasta la otra semana, pero ¿cómo podría decirle
eso?
“Mira, no sé lo que piensas que estaba haciendo allí, pero yo no tenía intención de
escuchar a los dos. Si pudiera me hubiera ido, lo habría hecho “.
Joe se inclinó hacia delante, apoyando los codos en la mesa, entrelazando sus dedos
juntos y apoyando la barbilla. “Pero no lo hiciste. Te quedaste, escondido detrás de la puerta,
escuchándome mientras me deslizaba dentro de él, reclamando su cuerpo necesitado con
mi pene. Estirándolo lo suficiente para que lo jodiera duro. Cada gemido, suspiro y lamento
que escuchaste cuando lo tome. Yo sé que te gusto, puedo imaginarte al otro lado de la
puerta, acariciándote a ti mismo. Tu cuerpo reaccionando. No podías dejar de disfrutar del
espectáculo, pero es una pena que no pudieras ver por ti mismo.”
Sentado de nuevo en la cabina, Joe levantó el vaso a sus labios. “estas duro ante la
idea, ¿verdad?”
No pude contestar, porque, por supuesto, tenía razón. En su lugar, tome un largo trago
de mi cerveza y deseé que mi erección bajara, sintiéndome como un adolescente caliente
de nuevo.
“Brett, no te estoy juzgando. Por favor, no lo creas ni por un minuto. Ser abierto a estas
experiencias no te hace raro, significa que no eres como todos los demás por ahí. Por cada
persona a la que le gusta ver, hay aquellos que disfrutan de ser observados “.
Encontrando mi voz. "¿Te gusta? ¿Ser observado?"

El asintió. “estoy muy asentado en mi relación, pero soy experimental también. Es
liberador “.
Mi cabeza empezó a nadar con esta información. “¿No te importa que la gente te
vea tener relaciones sexuales?”
Joe se encogió de hombros. “Para mí, no es muy diferente de aquellas personas que filman
18 porno, pero no es un acto conmigo. Me gusta y disfruto de cada momento pasado. Si te
gusta algo, por qué no disfrutar un poco.” A continuación, vació su copa, colocando el vaso
sobre la mesa.
“0/ “eres ahora miembro, y siempre serás bienvenido. Hay más en este lugar de lo que se ve
aquí. En este algún lugar puedes disfrutar de esas fantasías, viéndolas hacerse realidad
ante tus ojos. Estrictamente ver, no tocar, a menos que seas invitado. Veo que vas a
necesitar tiempo para pensar en las cosas.” Sacó una tarjeta blanca de su bolsillo y me la
entregó a mí. "Este es mi número. Llámame cuando quieras volver y voy a estar aquí para
guiarte “.
Se levantó de la mesa, sonriendo hacia mí antes de que él se alejara, dejándome con
una cabeza llena de preguntas, y un cuerpo lleno de necesidad.
Una vez que se termine mi bebida, me fui del club, caminando de vuelta hacia el aire
fresco de la noche, sin poder creer lo que acababa de oír. Rápidamente hice señas a un
taxi y me dirigí a casa. Mientras yacía en la cama, pasando una mano por encima de mi
pene, me preguntaba si lo había imaginado. Sin embargo, un rápido vistazo a las dos
cartas tendidas en mi mesita de noche me dijo que era muy real.
Después de esa noche, mi vida nunca sería la misma otra vez.
Pasé un par de noches haciendo investigación en línea. Bueno, cuando digo investigación,
se trataba sobre todo de visitar demasiados sitios de pornografía poco fiables, tratando de
descubrir lo que significaba ver mientras que otros tenían relaciones sexuales. Los
resultados de los motores de búsqueda que vinieron de nuevo a mí confirmaron las dudas
que pudiera haber estado acechando en el fondo de mi mente. Ver esas imágenes me dijo
que era definitivamente gay.
No había nada que realmente me ayudara a averiguar si disfrutaba viendo a los
demás, pero supuse que el hecho de que estaba viendo porno en mi habitación de la
infancia, mientras que me masturbaba me dijo que me gustaba ver. ¿Pero quién no lo
19 hacía? ¿Era perfectamente normal, verdad?
Puse la conversación con Joe en el fondo de mi mente. Estaba mal- cualquier persona
en la situación en la que me había encontrado a mí mismo haría lo mismo. Esperarían hasta
“0/ que las personas teniendo relaciones sexuales se fueran. No hay punto en avergonzarlos,
haciéndoles saber que la gente los había oído. Cuanto más pensaba en ello, más me
convencía de que tenía razón. Pero había una pequeña voz en la parte posterior de mi
cabeza diciéndome que debería saber más, y no debía descartarla completamente.
La pequeña tarjeta blanca se estaba burlando de mí, llamándome por mi nombre. Traté
de bloquearla, colocándola en un cajón y haciendo caso omiso de ella, pero las palabras de
Joe sonaban en mis oídos. Necesitaba saber más. Tenía razón, por supuesto, que había
disfrutado de escucharlos tener relaciones sexuales. Era travieso, prohibido, además
también era enormemente excitante.
Cerrando los ojos, yo estaba allí, de vuelta en el cubículo, escondido detrás de la puerta,
ya que esta resonó con el sonido y las acciones de ellos al otro lado. Si yo fuera honesto,
hubiera querido verlo todo en vez de usar mi imaginación. Nunca había visto algo así antes,
y ahora, sólo de pensarlo me puse duro.
Dios, yo estaba claramente simplemente mal de la cabeza. Esa era la única explicación.
Mi padre tenía razón. Había dicho durante años que el ser homosexual era malo, que era
algún tipo de enfermedad, y aquí estaba yo, su hijo menor, infectado por la enfermedad en
la peor de las maneras. Era mi castigo por ocultar mi sexualidad de ellos. Entonces, ¿por
qué se sentía tan bien?
Los puntos de vista de mi padre sobre la homosexualidad eran extremas. Él no podía
entenderlo y lo que no entendía, lo odiaba. Yo sabía que no tenía sentido ni siquiera intentar
que cambiara de opinión; sería como tratar de empujar el agua hasta una colina: sin sentido.
Pero, aun así, yo lo quería. Lo amaba con todo mi corazón, a pesar de que yo estaba viviendo
una gran mentira delante de sus narices, en su casa.
A menudo me preguntaba cómo reaccionaría a mí diciéndole que era gay. Me imaginaba

que gritaría, vociferaría y luego me negaría, y diciéndome que yo no era hijo suyo. Esto es
por lo que no podía decirle. Eso y el hecho de que estaba enfermo. Los médicos dijeron
que tenía cáncer de pulmón. No fue una sorpresa para mí. Cuando era joven, fumaba como
una chimenea, ignorando las súplicas de mi mamá de parar. Dijo que lidiaría con las
consecuencias cuando sucedieran, y ahora estaba aquí, golpeando firmemente en su
puerta. Sólo que no estaba tratando con ella, dirigiéndose directamente a la negación,
diciendo que los médicos habían cometido un error, a la vez que sonaba como que iba a
toser uno de sus pulmones muy dañados.
20
Me dolía verlo así, una sombra del hombre que conocí y admiraba como un niño, pero
no había nada que pudiera hacer para cambiar las cosas. Todo lo que podía hacer era estar
allí para él y mi madre.
“0/
Había vivido su vida como él había querido, y maldijo las consecuencias. Tal vez
debería tomar una hoja de su libro y hacer lo mismo. No me refiero al salir vestido con la
bandera del arco iris, me refiero al abrazar el lado oculto de mí. Permitiendo el espacio
para moverme, respirar y ver a dónde me llevaba.
En el fondo, sabía dónde me llevaría de nuevo a- “Beyond Edén” y el misterioso lounge
V del que Joe había hablado.
Mientras yacía en la oscuridad, con la mano envuelta alrededor de mi pene, cerré los ojos
y pensé de nuevo en la primera vez que conocí a Joe, los sonidos que su compañero hizo,
la forma en que me hizo sentir en el interior. Mi cuerpo reaccionó, ansiando los sonidos, una
vez más, sólo que esta vez use mi imaginación, y me transporte a mí mismo a través de la
puerta para que yo estuviera de pie, observándolos. En mi fantasía, Joe sonrió cuando me
vio, entonces susurró en el oído de su amante antes de mirar hacia mí, con una expresión
de aceptación en su rostro cuando le permitió a Joe usar su cuerpo mientras yo miraba.
Fue demasiado, mi cuerpo no podía aguantar más. Agarrando la almohada cubrí mi cara
con ella, viniéndome duro. Mi cuerpo se sacudió y tembló con la fuerza de mi orgasmo, y me
dejó sin aliento, jadeante en la oscuridad.
No había nada que pudiera perder. No era como que alguien allí me conocía o se
preocupaba por mí. ¿Qué daño iba a hacer una noche? Podía salir en cualquier momento,
salir por la puerta y nunca mirar hacia atrás. Después de limpiar, pesqué la tarjeta del cajón
y escribí un mensaje en mi teléfono. No me sorprendió cuando recibí una llamada casi
inmediatamente en respuesta, mi teléfono parpadeo en la oscuridad de mi dormitorio.
Contestando, pude escuchar las secuelas de mi orgasmo en mi voz, y así podría él. La
llamada duró menos de un minuto, pero eso fue suficiente para hacer los arreglos.
Viernes, 22:00, Más allá de Edén.
Dos días y estaría allí, cuarenta y seis horas, dos mil setecientos minutos hasta que
un nuevo capítulo en mi vida comenzara, y yo no podía esperar.
21
El bar estaba lleno, no era realmente una sorpresa, ya que era fin de semana. Nadie me
miraba mientras estaba de pie contra la pared, sosteniendo mi bebida. Por otra parte, ¿qué
“0/ esperaba? ¿Las personas comenzarían repentinamente a prestarme atención sólo porque
yo era nuevo por aquí? Mirando el tiempo, pude ver que eran las diez con veinte horas. Joe
estaba tarde y no había ningún mensaje de él.
Mentalmente, había tomado la decisión de terminar mi bebida y luego salir si él no
estaba aquí. No tenía sentido quedarme si él no iba presentarse.
Cuando tragué el último bocado, apareció. "Siento llegar tarde, las cosas se pusieron un
poco agitadas allí atrás." Hizo un gesto con el pulgar a la zona del bar.
"¿Tu trabajas aquí?" -pregunté, sorprendido de que no había pensado en esto antes.
Él rio. "Podrías decirlo." Él puso su brazo alrededor de mi hombro y me llevó fuera del
bar y por un largo pasillo.
Pensé que me estaba echado hasta que giramos a la derecha, cara a cara con un
conjunto de puertas negras de cuero acolchado. Justo por encima de ellos, un letrero neón
púrpura apareció con el nombre, Lounge V. Mi corazón se atoro en mi garganta. Me congele
en el lugar mientras el jalo una de las puertas abriéndola y camino dentro.
Se volvió hacia mí con una sonrisa. "Vamos, Brett, no seas tímido."
Mis pies obedecieron, dando tentativos pasos a través de las puertas dentro de la
oscuridad en espera.
Luego nos encontramos con otro conjunto de puertas y un lector de tarjetas, un poco
como el del trabajo con el que solía entrar y salir del edificio.
Joe se rio de mí. "Esta es la razón por lo que necesitas la tarjeta de miembro." Él
pasó la suya y la puerta se abrió. Con manos temblorosas, siguiendo su ejemplo di un
paso hacia lo desconocido.
Caminamos por un tramo de escalones de piedra pesada, la única luz venia de series
de luces que iluminaba cada lado de las paredes. A medida que bajamos, podía
escuchar el cambio de la música. El ritmo era más profundo y rítmico de lo que se
estaba tocando en el piso de arriba. No fue una sorpresa cuando nos encontramos en
la parte inferior de la escalera con otro hombre atractivo y sentado detrás de un
escritorio.
"Tarde, Col," Joe le dio la bienvenida.
"Tarde, Joe", fue la respuesta, pero sus ojos estaban sobre mí. "¿Puedo ver su
tarjeta, por favor?" -preguntó, con la mano extendida, sus dedos bailando mientras
22
esperaban. Busqué para entregarla, pero Joe me detuvo.
"Él está conmigo." La voz de Joe era severa, casi de mando, y sentí un escalofrío correr
“0/ arriba y abajo de mi espina dorsal.
La mano de Col cayó al instante. "Lo siento, jefe, pensé que querría que me asegure".
Joe sonrió ligeramente. "No esta noche, no lo necesito. Deja de llamarme jefe, Joe está
muy bien."
Con eso, abrió otra puerta y me indicó que pasara al interior.
Una vez que estábamos por nuestra cuenta, me volví hacia él. "¿Jefe?"
Joe suspiró. "Sí, soy su jefe. Soy dueño de este lugar."
Pensé que el mundo se iba a derrumbar a mí alrededor. "¿Tu qué?"
"Soy dueño de esto, bueno, copropietario con Nick, mi pareja.”
"¿Por qué no lo habías dicho? ¿Es por eso que tengo una membresía, para divertirte
cuando quieres un nuevo juguete para jugar?"
"No. Yo te di membresía porque quería. Vi algo en ti que me recordaba a mí. Eres joven,
tímido y muy miedoso de admitir realmente que eres gay, preocupado por lo que la gente
piensa, apuesto que es por eso que estabas escondido en los baños. Algo o a alguien te da
miedo, haciéndote querer huir y esconderte. Aquí puedes ser tan libre como quieras “.
Él dio un paso atrás y me indicó la gran habitación en la que estábamos. "Este es el
Lounge V “.
Lentamente mire alrededor de la habitación, observándolo. Había grandes zonas de
estar en el centro de la habitación, bueno, digo asientos, pero se veían más como camas.
Había unas pocas parejas ocupándolas, algunos estaban simplemente charlando, pero
una pareja se encontraba en medio de una intensa sesión de besos. Parecían tan perdidos
en el otro, como si el mundo alrededor de ellos hubiera desaparecido.
"Este es el atrio, un espacio abierto donde la gente puede ser libre. Las únicas reglas
aquí abajo es que sean respetuosos con los demás, y todo contacto sexual sea seguro y,
por supuesto, consensual".
Mi cabeza se giró para enfrentarse a él tan rápido que temía que podría obtener un
desgarro cervical. "¿Qué? ¿La gente tiene sexo aquí?"
Joe se encogió de hombros. "No tanto aquí. Este es un lugar donde la gente llega a
conocerse, explorar y conectarse. Mamadas, tocar, besar y provocar. Por supuesto, con el
conocimiento de que otros pueden verte."
23
Lo dijo como si estuviera diciendo que era viernes. Luego se trasladó a la pareja perdida
el uno en el otro, corriendo la mano por uno de sus hombros. Observé fascinado como un
gemido escapó de uno de los labios de los hombres y se alejó de su pareja para hacer frente
“0/
a Joe. Con un movimiento de sus ojos, parecía estar comunicándose con el hombre, que se
puso de pie, extendió su mano a su socio antes de llevarlo a otra habitación.
Miré a Joe con curiosidad. "¿Qué fue eso? Pensé que dijo-" Él presionó su dedo
índice a los labios. "Paciencia, todo será revelado."
Luego se alejó al pequeño bar en la esquina. Me quedé mirando detrás de los dos hombres
que ahora habían desaparecido antes de unirme a él. Él me dio un vaso que contenía un
trago de aguardiente o de otro tipo. "Bebe, que lo necesitarás."
"¿Qué es?" Olí el cristal.
"Valor holandés." Apuró y puso el vaso vacío en la barra en la que lo volvió a llenar, y
yo hice lo mismo. Haciendo caso omiso de la quemadura del líquido a medida que viajaba
por mi garganta, lo seguí mientras caminaba a través de otro conjunto de puertas.
Esta habitación era más oscura, casi tono negro. Tomó a mis ojos un par de minutos
para acostumbrarse al nivel de iluminación bajo. Joe estaba a mi lado, su mano en mi
hombro. Su voz estaba justo en mi oído.
“Aquí es donde se produce. La gente viene aquí por intimidad, pero no privacidad. Todo
lo que sucede aquí se pueden ver, y saben que se verá “.
Creo que dejé de respirar por un momento mientras escaneaba la habitación. Había
varias zonas de sillones de descanso esparcidos por toda la habitación.
Joe me empujó más adentro. “Mira, ¿los ves?” Él me dio la vuelta por los hombros, y
luego los vi. La pareja de la otra habitación.
Ellos se sentaron juntos, uno a caballo entre los demás cuerpos, moliéndose juntos en
un baile erótico. Una de sus camisas había sido retirada, la iluminación parpadeante en su
piel desnuda como las manos vagaban por la extensión de piel. Vi, hipnotizado, mientras
continuaban. Cuerpos corcoveando juntos como la pasión los consumía, besos cada vez
más frenéticos, manos empezando a arañarse unos a otros.
“Bello, no.” La voz de Joe estaba en calma. “Les encanta ser vigilados. No dejes que te
engañen, saben que estamos aquí, pero no somos los únicos “.
Me volví a mirarlo, y sus ojos se posaron en la esquina. Seguí su mirada hacia un punto
más alejado. Allí mismo, en la oscuridad sólo podía simplemente haber una pareja que
parecía que estaban teniendo relaciones sexuales, pero no podía ser. ¿Podrían? Sin pensar,
di un paso más cerca, paralizado por la vista delante de mí. No fue hasta que tenía seis pies
24
de distancia que deje de moverme. Sus cuerpos se movían en perfecta simetría, era casi
imposible ver dónde terminaba uno y empezaba el otro. La necesidad era tangible, casi podía
saborearlo en el aire. Yo estaba fascinado.
“0/
Mi mano deslizó su camino hacia abajo a la parte delantera de mis pantalones
vaqueros, frotándome la creciente dureza confinada dentro.
Joe rio detrás de mí. "¿Ves? Es la cosa más natural del mundo. Saben que alguien está
mirando, y no les importa. De hecho, lo disfrutan. Hay una emoción, sabiendo que esto está
mal, pero aquí, bueno, aquí es aceptado. Abrazado “.
Me sorprendió cuando sentí una mano sobre la mía, uniéndose a mí para frotar mi
rápidamente endurecido pene. "Lo disfrutas. Yo sabía que lo harías.” Su cuerpo presionado
con fuerza contra mi espalda. Podía sentir la dureza de su pene contra mi culo. “te sugiero ir
al baño, antes de tener un accidente desafortunado.”
El rubor familiar estaba de vuelta en mis mejillas mientras se alejaba. “A la derecha de
la barra.” Corrí dentro del santuario ofrecido a mí.
Una vez que me había corrido y me limpié, me quedé mirándome a mí mismo en el
espejo. Cabello castaño claro, barrido hacia arriba en un estilo desordenado, ojos azules
mirándome casi ausentes de nuevo, ninguna emoción en absoluto. La persona mirando
hacia mí era casi un desconocido, pero era yo.
Después me lavé la cara y me arreglé a mí mismo lo mejor que pude, me dirigí hacia el
salón. No había ninguna señal de Joe, y en cierto modo, me alegré. No estaba seguro de
que enfrentarlo en este momento fuera la mejor idea. En su lugar, salí por la puerta y a la
noche.
Una vez que estaba fuera, empecé a buscar un taxi, pero casi siendo medianoche,
no había nadie a la vista. Decidí caminar a la estación de tren, a sabiendas de que
tendría una mejor oportunidad allí, incluso si eso significa que me colocara en la cola
interminable por un tiempo.
Al doblar la esquina en Boar Lane, oí que mi nombre era llamado, pero lo ignoré. Entonces
lo oí de nuevo, así que paré y di la vuelta. Mi corazón se hundió y se elevó, todo al mismo
tiempo. Agitando como un loco desde el otro lado de la calle estaba Stephen.
“¡Brett, espera!” Miró el tráfico antes de cruzar. “Qué sorpresa verte, aquí, ¿adónde vas?”
"A casa. Ha sido una noche muy larga “.
“Ven con nosotros, nos vamos a mojito.” Él movió las cejas hacia mí. “Se acaba de abrir
y al parecer el talento que hay es para morirse.” No le hice caso, por lo que cambió su
25 enfoque. “te he llamado y dejado mensajes, pero nunca me las devolviste. ¿Qué pasa?”
“No pasa nada, sólo quiero ir a casa.” Empecé a alejarme de él, pero él me siguió.
“Brett, hemos sido amigos durante años, y luego perdimos contacto cuando te fuiste a la
“0/ universidad. Ahora que estás de vuelta, siento como que no quieres conocerme “.
Stephen estaba siendo llamado por sus amigos, y él los saludó. “Vamos a tomar una
copa, sólo uno. ¿Por favor?” Yo estaba dispuesto a decir que no cuando me dio los ojos de
cachorro y agitó sus pestañas hacia mí. Fue inútil, no había manera de que pudiera decir
no a él. De mala gana, yo estuve de acuerdo, lo que le ánimo mucho.
Estar con él me recordó una de las razones por las que mantuve mi distancia de él,
bueno, la razón principal. Mi atracción por él no se había desvanecido, todavía estaba allí
tan real y más fuerte que nunca. Incluso después de todos estos años, era el objeto de
demasiadas fantasías. Pasar este tiempo con él, viendo como era tan relajado y libre, me
hizo querer más.
Envidiaba su libertad, la fuerza para ser él mismo y mostrar al mundo que él era su
propia persona. También me hubiera gustado que me viera de la misma manera que lo veía.
Pero nunca sería. Stephen era recto, y nunca iba a cambiar, sólo tenía que aceptarlo y
seguir adelante.
Fue una experiencia estar fuera con Stephen y sus amigos. Conocía a un par de ellos
de la escuela. Pero la mayoría de ellos eran de su trabajo. Me sentí fuera de lugar para
empezar, pero Stephen se aseguró de que era incluido en la conversación. Yo quería que
todos los demás se desvanecieran en el fondo, que nos dejara solos para poder pasar
tiempo con mi amigo, solo.
Eso no sucedió. En su lugar, llegué a verlos desear a la clientela femenina en el bar,
probando las líneas para ligar más ridículas que había oído nunca, todo con la esperanza de
llevarlas a la cama. Lo que me hizo sentir mal del estómago estaba viendo a Stephen
participar. Yo lo observaba, su cuerpo alto y buena apariencia. Él podría pasar perfectamente
por un modelo con el pelo sucio marrón y sus ojos avellana, pero podía ser sólo mi visión de
color rosa de él.
No tengo ni idea de por qué me quedé con ellos, el bar no era mi escena y desde luego no
tenía interés en los enjambres de mujeres que estaban atrayendo. En cambio, me ocupé
en el bar, bebiendo demasiado para tratar de bloquear los pensamientos en mi cabeza.
Resulta que fue un gran error, posiblemente el más grande que había hecho esta noche,
ellos eran bastante cercanos ante mis ojos. El alcohol estaba inundando mi sistema y
haciendo girar mi cabeza. Stephen pareció darse cuenta, haciéndome cambiar a agua, y
cuando eso no ayudó, me arrastró fuera del bar, con el brazo alrededor de mi cintura mientras
26
me llevó a un taxi y se aseguró de que llegara a casa sano y salvo.
Mi mundo se había vuelto al revés en una noche. Había descubierto más sobre mí
“0/ mismo que en cualquier otro momento de mi vida. Los sentimientos que tenía por mi mejor
amigo estaban todavía allí y más fuertes que nunca, y yo estaba más que feliz de ver a dos
personas que yo no conocía tener relaciones sexuales para mi propio disfrute.
Lo único rescatable fue que no había abierto mi corazón y boca, diciéndole todo sobre
lo que sentía por él.
¿O lo hice?
Beyond Edén y el Lounge V se convirtió en un santuario para mí, un refugio seguro

donde pudiera olvidar los problemas en mi vida, los sentimientos que tenía por mi mejor
amigo, la enfermedad de mi padre y mi frustración por sentirme atrapado en mi vida.
Cuando estaba allí, nada más importaba.
En las semanas que siguieron, me encontré visitando Beyond Edén más y más, a veces
aventurarme hasta el Lounge V, disfrutando de mi tiempo y las experiencias inmensamente.
El ambiente seguro y el anonimato que ofrecía me permitieron explorar esta nueva parte de
mí. Nadie me miro dos veces, y me convenía muy bien.
Yo era capaz de explorar esta nueva faceta de mi vida, para ver como otros clientes
disfrutaban de la emoción de ser observados. No hubo sordidez en ello, a la aceptación
mutua de la toma y daca requerido-disfrutaban siendo observados tanto como yo disfrutaba
27 viendo. No había nombres siendo intercambiados y sin contacto fuera de la sala de estar.
Incluso si los vi en el bar principal, nunca hubo ningún reconocimiento del otro.
Stephen estaba en mi mente más de lo que quería reconocer. La atracción que sentía
“0/ por él estaba siempre allí, hirviendo justo debajo de la superficie, amenazando con estallar
en un momento dado. Para protegerme a mí mismo, y a él, puse un poco de distancia entre
nosotros otra vez, rechazando una vez más responder o devolver cualquiera de sus
muchas llamadas. Era mejor así, para los dos.
Una noche, para un cambio, me dirigí a uno de los otros bares de la zona gay. Era extraño
caminar solo y ver a la gente salir con los amigos o su pareja. También me hizo darme
cuenta de que no tenía esto. Yo era muy consciente del hecho de que estaba muy solo.
Lo que realmente quería era alguien para tener un día normal o un día con experiencias.
Alguien para volver a casa por la noche, hablar de mi día y escucharlo hablar sobre el suyo.
Un socio para ir a tomar unas copas, una mano para sostener, que pudiera besar cada vez
que me daba la gana, y alguien que me haga sentir como si su mundo comenzara y
terminara conmigo. Un hombre que me amara tan completamente que el mundo exterior se
desvanecería en la nada.
Temía que no iba a ser. Tenía demasiado miedo a dar ese salto de fe y abrir mi corazón
a nadie por miedo al rechazo.
Por ahora, era tener que vivir esta media vida, con la esperanza de que algún día, muy
pronto, podría cambiar.
Estar entre las parejas felices, los homosexuales y los hombres abiertamente
homosexuales hizo darme cuenta de lo asustado que estaba a experimentar esto en mi
ciudad. En el fondo de mi mente, siempre existía la preocupación de que alguien conocido
me viera.
¿Cómo explicaría estar en un bar de homosexuales?
Si yo estaba con un grupo, podría usar eso como una excusa, estar solo era arriesgado,
pero tenía que tomar esa oportunidad.
Después de un par de copas, me fui a casa, caminando más allá de “Beyond Edén” y
resistiendo su canto de sirena. Tenía trabajo por la mañana, que volvería nunca hubo
ninguna duda de eso, pero necesitaba conseguir un cierto sentido de normalidad en mi
vida.
Un par de meses pasó rápido para mí, y mis visitas a Lounge V continuaron. Mi confianza
28
creció con cada una, y el golpe de ver a las personas delante de mí no se había apagado
como pensé que podría hacerlo. En su lugar, me hizo necesitarlo más.
“0/ La posibilidad de las horas extra y el dinero extra ofrecido significaba que había estado
trabajando siete turnos seguidos; me había mantenido lejos del club. Ahora estaba tenso,
lo necesitaba para relajarme. Mi piel se sentía como si se arrastraba cuando ansiaba la
liberación que sólo podía encontrar en el Lounge V. Incluso mi porno favorito no era
suficiente para satisfacerme.
Era un jueves por la noche, y tuve los próximos días de baja laboral. Había estado de
mal humor durante días, pero sabía lo que lo iba a hacer mejor.
Una vez que tuvimos la cena, me excusé con mi madre, diciendo que tenía dolor de
cabeza y estaba cansado. Fue la mejor excusa que se me pudo ocurrir. Acostado en mi
cama, esperé a mis padres para ir a la cama. Su rutina casi esta escrito en piedra, así que
era cuestión de esperar.
Se sentía como horas pasando antes de que finalmente subieran, entonces espere que
la casa estuviera tranquila. Pecando de precaución, a pesar de mi ansiedad espere un poco
más de lo normal para estar seguro de que mis padres estaban dormidos.
En el fondo, sabía que simplemente debería salir, aceptar la invitación en mensaje de
texto de Stephen para “solo salir', como él decía, pero teniendo en cuenta lo que sucedió
la última vez que fui a beber con él, esto se sentía lo correcto por hacer. A pesar de que
hubiera significado que no tenía que arrastrarme alrededor como un ladrón en la noche.
La última cosa que quería hacer era estar en torno a los bares rectos, mientras que él y
sus amigos miraban lascivamente a las mujeres, ojeando y derritiéndose sobre ellas,
mientras que colocaban las apuestas sobre quién iba a ser al que se jodan. Había estado
allí antes la última vez que nos habíamos encontrado y lo odiaba. Yo quería que fuera lo
que yo quería, llevarlo a casa, pero nunca lo fue. Por lo tanto, me estaba preparando para
escaparme de la casa por mi cuenta, para complacer mis necesidades de la única manera
que sabía.
Viendo el tiempo, vi que eran las 23:00, y con una cuidadosa escucha en la puerta de la
habitación de mis padres, yo estaba tan satisfecho de que estuvieran dormidos. Arrastrarme
por la casa en silencio y la oscuridad era ahora una segunda naturaleza para mí.
Una vez que estaba en la calle desierta, pude volver a respirar, pero aun así era un
territorio peligroso. Si alguno de los vecinos me veía, sabía que iban a hablar de ello, y no
sería fácil de explicar. Con la cabeza inclinada, caminaba por la carretera principal, donde
29 por suerte hice señas a un taxi que pasaba. Sentado en el asiento de atrás para distanciarme
del conductor, la única interacción que planeé fue cuando le di mi destino previsto, tan
vagamente como sea posible, diciéndole que me dejara en Lower Briggate. Mientras que
“0/
hicimos el viaje hacia el centro de la ciudad, hice caso omiso de sus muchos intentos inútiles
de una pequeña charla, en su lugar miré por la ventana. Mi cuerpo vibraba de emoción ya
que sabía que estaría pronto en donde que quería estar.
Mostrando mi tarjeta de socio en la puerta, me dejaron pasar, no hubo palabras
habladas, lo que estuvo bien por mí. Después de ir al bar y meterme un refresco, fui a la
esquina más alejada, sentándose y cayendo en uno de mis pasatiempos favoritos aquí,
observar a la gente.
Esto se había convertido en mi rutina, el club, mi santuario. No había visto a Joe para
hablar sobre mis últimas visitas y me preguntaba dónde había estado. Me preguntaba si
estaba aquí esta noche. La pregunta fue respondida cuando lo vi marchar a través de la
habitación.
Él sonrió cuando me vio, acercándome y lanzo sus brazos alrededor de mí. “Brett, mi
chico, ha sido demasiado tiempo. Pensé que habías renunciado a nosotros, encontrándote
a ti mismo una mejor oferta “.
"¿Por aquí? Nunca.” Me reí. “Yo he estado aquí, pero no te he visto. ¿Te has
mantenido ocupado?”
Él asintió con la cabeza, “siempre, muchas cosas que hacer y este lugar no se maneja
por sí mismo. ¿Qué tal una copa en el bar?”
"Si, Por qué no."
Joe sonrió, pero fue atraída su atención por un miembro del personal que apareció de la
nada y le susurró al oído. “Mira, tengo que irme, pero nos vemos luego, ¿de acuerdo?” Con
eso, se había ido.
El bar no estaba ocupado, sin embargo, muchos de los lugares rivales en la zona tenían
una licencia de finales de año, así que este lugar no comenzaría a llegar demasiado ocupado
hasta que los miembros decidieran que querían algún lugar un poco más exclusivo para
pasar el rato, además había una extensión de la licencia debido a los únicos miembros de
la política. Miro el reloj, ahora era justo después de la medianoche. Por supuesto, esto era
ideal para mí. Llegué aquí antes que muchas personas, lo que me permite mezclarme en el
fondo bastante desapercibido.
30 Me preguntaba a mí mismo si había alguna posibilidad de una conexión aleatoria de
tener relaciones sexuales entre los miembros de la barra principal, como finalmente me
sentía lo suficiente confiado para tomar este gran paso. Nunca había visto muy de cerca
“0/ a nadie de esa manera.
Stephen había sido siempre la esperanza a la que me aferré, la que fantaseaba. Pero ya
que no iba a pasar, era el momento para mí de seguir adelante y tratar de encontrar la
felicidad en otro lugar.
Tenía la esperanza de que no sería un problema, pero si no iba a ser, yo era lo
suficientemente joven como para ser considerado una posibilidad por la inmensa mayoría
de la clientela en los bares. Además, al ser todavía una cara bastante fresca alrededor de
Leeds sería un bono. Si resultaba ser un paso demasiado lejos, me gustaría continuar
observando las actividades en la oscuridad del club de sótano.
Cada miembro del Lounge V sabía lo que pasaba a través de las puertas acolchadas
negras. Era una regla tácita que una vez que has entrado, se sabía que la gente estaría allí,
observando, y, a veces, si usted estaba de acuerdo, se uniría con el tiempo para tener
relaciones sexuales. Algunas parejas parecían bajar en la emoción de ser observados, otros
utilizaron la habitación para encontrar a sí mismos un tercero para la noche, antes de ir a la
privacidad de su propia casa o un hotel cercano. Era lo que quería que fuera. Las únicas
reglas que todos tenían que obedecer era que todo el sexo tenía que ser seguro y
consensuado. Si alguien dice que no, entonces era un no. Todo el mundo respeta las reglas.
Si no lo hacía, debería ser echado fuera y perder su calidad de miembro, y supuse que lo
último que quería era estar en el lado equivocado de Joe.
Había perdido la cuenta del número de noches que había pasado aquí, mirando desde
los rincones más oscuros. Era mejor que cualquier pornografía que había encontrado para
ver. Esto era real, no hay escritos, sin acción, sin placer forzada por el bien de las cámaras
y en última instancia, el público que paga.
En el fondo, yo sufría por lo que tenían estas parejas, por la fuerza de ser libre con mi cuerpo
a otro. Pero yo estaba encerrado dentro de mis propios miedos ya que había empezado a
vivir en casa. Me sentía como un niño asustado de nuevo, miedo de salir y admitir que era
gay, cuanto me gustaba y ansiaba la manera que el cuerpo de un hombre se sentía
presionado contra el mío, como afirmado mi cuerpo como suyo. Quería a alguien que me
amara, en cuerpo y alma.
Cuando mi vaso estuvo vacío, lo coloqué sobre la mesa frente a mí. Poco a poco
llegando a mis pies, me dirigía hacia las escaleras que me llevarían a las entrañas de la
sede. Mi corazón comenzó a latir con más fuerza contra mi pecho mientras me acercaba a
31
las puertas pesadas detrás de la cual iba a encontrar lo que necesitaba.
La habitación estaba a oscuras, la iluminación escasa para aumentar el efecto de
“0/ intimidad. Había algunas parejas que ya están aquí abajo, sentados juntos, los brazos
envueltos alrededor del otro. Otros se estaban besando, perdidos en el momento. Mi llegada
apenas se registró en su conciencia, no es que me esperara otra cosa. Tenía un lugar
preferido para sentarme. Era el rincón más alejado, lejos de la puerta, rodeado de oscuridad.
Me escondía perfectamente allí, pero también me dio un punto de vista ideal para ver todo.
Todo lo que tenía que hacer ahora era esperar.
Mis ojos rápidamente se acostumbraron a la oscuridad. Me gustó mucho el tiempo que
tomó para que se concentren y pudieran ver. Luego, a medida que comenzaron a
concentrarse, pude ver las formas de los cuerpos cerca. Un hombre a horcajadas sobre el
regazo de su pareja, los dos moviéndose contra el otro. El sonido de sus labios reuniéndose
y su dificultad para respirar destacó su entusiasmo evidente y necesidad construida entre
ellos. Girando hacia ellos, vi. Era hermoso, la forma en que se movían juntos, los cuerpos
actuaban y reaccionaban como si fueran un solo ser, alimentados por la pasión pura y
necesidad, ya que hacía estragos en sus cuerpos.
Nadie más existiera, o les importaba.
Fue hermoso.
Podía sentir la agitación demasiado familiar en la ingle mientras observaba a la pareja
anónima y su pasión cruda de uno por el otro. El endurecimiento de mi verga dentro de mis
pantalones vaqueros causó que mi aliento se atorara en mi garganta mientras contuve un
gemido. La última cosa que quería era llamar demasiado la atención a mi presencia en caso
de que les moleste, pero teniendo en cuenta su comportamiento, dudaba que siquiera eran
conscientes de mí.
Sin ser consciente, mi mano comenzó a frotar contra la mezclilla, dándole parte de la
atención que tan desesperadamente necesitaba. Mi mano se movió con sus acciones,
llegando a ser cada vez más rápida en el momento perfecto con ellos. Dejé escapar un
profundo gemido mientras luchaba contra las ganas de venirme. Esto pareció molestarlos,
ya que se separaron de su beso, las caras volviéndose hacia mí. La necesidad estaba escrita
claramente en todas sus características, sus pechos agitados por el esfuerzo.
Me quedé inmóvil, el miedo me fijo en mi lugar, ya que se me quedaron mirando a través de
la oscuridad cerca de la habitación. Cada miedo corrió por mi cuerpo en los segundos que
me miraban antes de volverse hacia el otro. Era como que no necesitan hablar para conocer
los pensamientos del otro; Eran un solo ser, se unieron con sus almas. Esto era lo que quería,
esa conexión, esa química.
32
Uno de ellos se volvió de nuevo a mí, una sonrisa lasciva broto en su rostro mientras me
susurraba; “¿Por qué no te unes a nosotros? Podríamos tener algo de diversión juntos “.
“0/
Me estremecí ante la idea. Yo quería ver lo que podrían hacer por mi cuerpo, para
experimentar el placer que sabía que estos dos hombres desgarrarían de él, ya que
tomaran lo que querían. Cada fibra de mi ser quería decir que sí, lanzar la precaución al
viento, pero otra parte de mí gritó que estaba mal, que cuando volviera a casa, mis padres
de alguna manera sabrían. Como que sería escrito por toda mi cara.
Cerré los ojos, luchando contra mis demonios internos, queriendo desesperadamente
experimentar lo que cualquier joven homosexual hizo. Para ser libre y disfrutar de mi vida.
Me quedé de piedra cuando sentí el cepillar de una mano por mi mejilla. Mis ojos se abrieron
de golpe, fijándola en la cara del hombre guapo ahora delante de mí. No podía distinguir su
color de ojos, pero tenía una línea de la mandíbula fuerte y recortada, casi cabello rapado.
Su cuerpo tenía hombros musculosos, fuertes expuestos en el chaleco apretado que
llevaba. Sus ojos se clavaron en los míos, la lengua jugando en sus labios.
El hombre gritó poder y control.
“Usted sabe que quiere esto.” Su mano se unió a la mía en mi tensa erección. “Puedo
decir que me quieres, nosotros queremos.” Con un giro de la cabeza a su compañero,
continuó. “¿Por qué no me dice lo malamente que usted quiere joderme? Para sentir tu
verga dividiéndome amplio, a la vez que eres jodido bien y apropiadamente por él. Cada
golpe en tu cuerpo enviándote más dentro en mí. No tendrías ningún control sobre él. Nos
gustaría hacerte perder la cabeza, y te encantara cada momento de ello “.
Solté un suspiro profundo y tembloroso como sus palabras se registraron en mi cerebro.
Mis ojos miraron a su compañero que estaba mirándome, deseo llenando sus ojos.
Claramente querían esto, me querían. Sin pensar, Asentí en consentimiento. Esta fue la luz
verde que necesitaba. Me quedé de piedra cuando me empujó hacia atrás antes de subir a
mi regazo. Las piernas fuertes y musculosas a horcajadas sobre las mías, manteniéndome
en su lugar como manos ásperas se cerraban alrededor de la parte de atrás de mi cuello,
los labios chocando contra los míos. Su compañero fue a sentarse junto a mí, pude sentir
su cuerpo junto a mí.
No era el débil sabor del alcohol en su lengua, ya que sondeó mi boca. Me devolvió el
beso, desesperado por devolver el calor que irradiaba de mí. La sensación de ser deseado
por no uno, sino dos hombres inundaron mi sistema, que amenazó con ahogarme como fue
33 derribado en el abismo.
“0/ Labios sobre los míos, dos pares de manos fuertes recorrían mi cuerpo, enviando
temblores de deseo teñido de miedo a través de mí. Yo quería esto, los quería. Yo había
estado observando desde las sombras durante tanto tiempo, deseando que ser yo, y ahora
yo tenía mi oportunidad.
Mis labios fueron repentinamente dejados solos lo que me hizo abrir los ojos. Lo que vi
fue que se besaban con pasión sin vergüenza delante de mis ojos. Pulgadas nos separaron
y yo quería probar al segundo hombre; él era claramente quien tenía el control aquí, y
desesperadamente quería que me controle. Coloqué un suave beso en la mandíbula, el
ligero pescuezo erizado contra mis labios magullados mientras besaba a su pareja. No
estaba seguro de que lo había sentido, pero luego se separó, girando su atención hacia mí.
Sus ojos se clavaron en los míos. Hubo un tiro de temor que me recorrió la espina dorsal
en la intensidad de su mirada. Cualquier esperanza de besarlo desapareció cuando se
encontró en posición vertical, enderezándose y elevándose sobre mí. Sentí miedo,
estremeciéndome un poco cuando apareció la mano extendida delante de mí. Se rio de mi
reacción.
“Vaya, vaya, no somos una sorpresa maravillosa.” En cuanto su compañero, habló en
voz baja. “Vamos a tomar esto en algún lugar más privado.”
Sin pensar, puse mi mano en la suya, lo que le permitió traerme a la posición de pie
delante de él y fue entonces que me di cuenta por primera vez lo alto que era. Yo era alto
alrededor de seis pies, pero él se elevaba por encima de mí cuando él totalmente se
enderezó. Supuse que tenía alrededor de seis pies y seis pulgadas, y él era claramente
alguien que tenía cuidado de sí mismo. Pecho muscular y fuertes brazos me dijeron que, si
me quería inclinar y llevarme de aquí, yo sería impotente para detenerlo. Ese pensamiento
me atrajo más de lo que quería admitir.
“Vas a tener el tiempo de tu vida con nosotros.” Sonrió mientras las palabras salían de
sus labios. Sin más palabras, él me llevó de la habitación.
Mi mente estaba frenética como pensamientos corrían a un lado, cayendo unos sobre
otros en la desesperación por ser el que escuché. La idea principal era, quiero esto. Casi
se convirtió en mi mantra. Era como si me estuviera preparando para perder mi virginidad
de nuevo. Lo cual, en cierto modo, era yo.
Esta sería la primera vez que había tenido relaciones sexuales en mi ciudad natal, que
había sido recogido en un local gay, que alguien me deseaba lo suficiente como para
34 llevarme a casa con ellos. Pero no era sólo un hombre, eran dos. Fue como ganar la lotería.
No fue hasta que nos encontramos en la recepción principal de Beyond Edén que sentí
como si pudiera respirar de nuevo. ¡Mierda! No sabía sus nombres. Lo que necesitaba
“0/ saber.
“Lo siento, no sé sus nombres.” Podía sentir los nervios arrastrarse dentro,
mientras me preguntaba si esto era lo que hay que hacer.
“¿De verdad quieres saber?” Cuando el más dominante de los dos se acercó, la
respiración en mi oído, enviando más sacudidas de deseo a través de mi cuerpo. “Por otra
parte, necesitas saber los nombres que gritarás durante toda la noche.” Se alejó, viendo
cómo me afectó como su compañero apareció en mi otro lado antes de que él hiciera las
presentaciones.
“Soy Peter. Mi novio Chris. ¿Y usted es?"
Abrí la boca para hablar, pero las palabras no llegaron. En su lugar, oí mi nombre
procedente de algún lugar detrás de mí. “¿Brett?”
Girando en un pánico ciego, quería que la tierra se abriera y me tragara.
Allí, de pie delante de mí, con el aspecto que debería estar en una pasarela, Estaba Stephen.
Mi boca se abrió y se cerró, haciéndome quedar como una especie de pez de colores.
Peter y Chris dejaron escapar un gruñido profundo de posesión mientras se acercaba.
Pedro se movió para colocarse frente a mí un poco mientras que Chris deslizó su brazo
alrededor de mi cintura, tirando más cerca de él.
“¿Quién diablos eres tu?” Chris gruñó.
Yo quería decir que era mi amigo, pero no pude. Yo estaba demasiado confundido al
verlo de pie en la recepción de un bar gay. Era claramente un error.
"Su amigo. ¿Quién eres tú?” Stephen desafió de vuelta, su tono confiado y sus ojos
fijos en Pedro.
“no es asunto tuyo”, espetó.
Stephen levantó una ceja, sus ojos buscando y encontrando los míos. “Tienes toda la
razón. No eres mi negocio. Pero él lo es.” Se refirió a mí.
Mi corazón comenzó a latir con fuerza, y la respiración se volvió errática. Esto no estaba
sucediendo. No podía ser. Era una especie de extraño enfrentamiento mexicano. El portero
se había acercado y estaba observando el intercambio con gran interés. Supuse que sólo
estaba esperando para asegurarse de que una pelea no se llevará a cabo.
35 Peter no se echó para atrás. “Se va con nosotros porque quiere. Ahora ¿por qué no te
vas a la mierda y nos dejas disfrutar el resto de nuestra noche en paz? “.
Las palabras apenas habían salido de su boca cuando se dio la vuelta y apretó su boca
“0/
contra la mía con fuerza, y el brazo que había sido asegurado por mi cintura fue
reemplazado por él mientras él me atrajo hacia él. Esto es lo que había estado esperando,
sentir sus labios contra mí y fundirse en el beso. Peter era dominante y áspero. No había
nada suave o burlas sobre el asalto contándose en la boca. Respondí, pero yo no era rival
para él. Peter controló el beso, mostrando claramente a Stephen, que estaba a cargo y de
lo mucho que lo quería. Del mismo modo que pensé que estaría perdido en su beso, él se
apartó.
“Vamos, vamos.” Su voz era segura. Chris fue a abrir la puerta de salida de la barra
revelando un taxi esperando a las afueras. “¿Cómo sabes lo que quiere? ¿Sabes algo de
él?” Stephen no estaba dispuesto a dar marcha atrás “. No, no lo hacen. Sólo lo ven como
alguien para tener un poco de diversión por la noche antes de que lo dejen de lado, de pasar
a la siguiente pieza de carne fresca. La gente como ustedes me pone enfermo. Ustedes no
se preocupan por lo que él quiere. Siempre se trata de ustedes y sus necesidades. Mientras
puedan tener relaciones, entonces todo está bien “.
Me volví para mirar a Stephen. Las palabras que había hablado y la expresión de su cara,
una mezcla de confusión y preocupación, me hicieron tambalearme.
Se dirigió a mí. “Brett, no vayas, por favor. Dame cinco minutos. Si después de eso,
esto:” Le hizo una seña a Peter y Chris. “, Es todavía lo que quieres, entonces no voy a
interferir. La decisión es tuya."
La cara de Peter se veía como un trueno, su mandíbula tensa de ira. Es evidente que no
estaba contento sobre sus planes siendo interrumpidos.
En lugar de dirigirme a él, di vuelta a Chris, besándolo rápidamente antes de hablar.
“Cinco minutos, a continuación, voy a estar de vuelta, ¿de acuerdo?”
Chris asintió, colocando una mano sobre Peter. “Vamos a estar en el bar.” Vi la mirada
que Peter le disparó. Fue una de pura ira y rabia, pero necesitaba saber qué Stephen
estaba haciendo aquí si no otra cosa.
El portero nos permitió entrar con una mirada de advertencia. Me preguntaba si iba a
dejar que Joe supiera acerca de la posible perturbación. Stephen me condujo a través de
uno de los bares más tranquilos. Mentalmente me pregunte cómo sabía su camino
alrededor tan bien, pero no era lo importante ahora.
Encontramos algunos asientos, y yo esperaba a que Stephen hablara, para explicar
36 sobre lo que quería hablar conmigo. El silencio entre nosotros pesaba en el aire, por lo
que decidí romper el hielo.
"¿Qué estás haciendo aquí?"
“0/ Sus ojos se encontraron con los míos. Preocupación en ellos, mezclado con algo más,
pero tan pronto como él hizo el contacto, lo rompió de nuevo. Tenía las manos retorciendo
con nerviosismo. Nunca lo había visto así antes. Era nuevo, y eso me asustó un poco.
Stephen aspiró profundamente, todavía sin mirarme mientras hablaba. “¿Por qué crees
que vengo aquí? Es obvio, ¿verdad?”
“buscando una mujer para follar, ¿verdad? ¿Decidido a doblar las posibilidades de
encontrar un compañero de cama?” lo mordí de vuelta, lamentando el tono duro y las
palabras cuando lo vi estremecerse.
Él no respondió, y yo no me atreví a hablar de nuevo por temor a decir algo más de lo
que me arrepentiría. Por último, me miraba, con los ojos transmitiendo un dolor que nunca
había visto antes.
“No, vine aquí ya que tenía que alejarme de todo. Yo quería olvidar, aunque sólo sea por
unas horas “.
Mis ojos se estrecharon. “Este es un bar gay, Stephen, te conozco, ¿verdad? no
eres gay “.
Luchó por esconder una risa. "Correcto. Entonces, ¿Cómo crees que un homosexual
luce? Vienen en todas las formas, tamaños y colores. No hay tal cosa como un hombre gay
estereotipado en estos días. Nosotros no todos corremos alrededor usando color rosa
brillante, cubierto por la bandera arco iris y declarando nuestro amor por Judy Garland
mientras usamos nuestro propio par de zapatillas de rubí.” Tomó una respiración profunda
antes de continuar. “Voy a ser honesto, eres la última persona con la que esperaba
encontrarme aquí esta noche, o cualquier noche. Esperaba, sí, pero nunca en mis sueños
más salvajes creí que estarías aquí “.
“¿Me estás diciendo que eres gay?” Sabía que sonaba sorprendido, pero no porque
tuviera ningún derecho real a considerarlo había mantenido mi sexualidad en secreto de él.
Pero esto en realidad era lo último que me esperaba que me dijera, nunca.
Stephen asintió con la cabeza, su pelo castaño ligeramente cayo sobre sus ojos color
avellana. Yo tuve que detenerme a mí mismo de extender mi mano y alcanzarlo. "Sí. Pensé
que lo sabías, y por eso te mantenías lejos de mí “.
Me reí ante la idea. “¿Por qué no me lo dijiste?”
“Casi lo hice, muchas veces. El último de ellos cuando fuimos la última vez. Yo quería
37
decirte, pero me cerré. Creo que probablemente las mismas razones por las que no me dijiste
que lo eras.” Barrió su pelo hacia atrás y se lamió los labios. Estaba perdido en ese momento.
“0/
“Brett, he tenido tanto miedo de decirte. Siempre pensé que eras recto, por lo que me
preocupaba que no lo entenderías, que podrías pensar que quería llevarte a la cama. Que
por cierto, lo hago.” Él se rio entre dientes.
Le sonreí. El impulso estaba allí para decirle que quería lo mismo de él. "Tienes razón.
Tenía miedo de decirte. Me avergonzaba de lo que soy, del juicio de mí de la gente “.
Stephen se inclinó hacia delante. “Quería decirte durante tanto tiempo como me sentía.
He tenido un peso enorme sobre ti desde la escuela secundaria.” Él parecía estar
avergonzado por la admisión.
“Yo también”, admití, encogiéndose como su rostro aturdido se encontró con el mío.
“Entonces, ¿qué fue todo eso con esos dos?” Hizo un gesto a la recepción donde
sabía que Peter y Chris estarían esperando.
"No lo sé. Era bueno sentirse querido. No son nada para mí. Sólo habría sido una
cosa de una noche. Sexo, puro y simple “.
“vales mucho más, Brett, lo sabes, ¿verdad?”
Cuando no respondí, Stephen decidió que era tiempo para mostrarme lo que quería decir.
Se inclinó hacia mí, sus ojos no se movieron de los míos mientras nuestros labios se
acercaban hasta que finalmente se encontraron. Esto era lo que había estado esperando.
La electricidad que provocó entre nosotros el momento en que nuestros labios finalmente se
reunieron fue intenso. Fluía de mis labios y a través de cada fibra de mi cuerpo. Mis ojos se
cerraron cuando el beso se hizo más profundo. Me sentía como si estuviera volando. Todos
los años de anhelo y el deseo de mi mejor amigo estaban siendo canalizados hacia este
momento, esta primera exploración de nuestros sentimientos por el otro. Afortunadamente,
no fue simplemente sentimientos no correspondidos por mi parte, él sentía lo mismo.
Nos separamos, mis ojos abriéndose lentamente, y fui recibido por su cara sonriente
a pulgadas de la mía.
“Wow”, fue todo lo que pude decir luchando y perdido la batalla para mantener una
enorme sonrisa de mi cara.
Stephen asintió. “¿Todavía necesitas esos cinco minutos para pensar en las cosas?”
Negué con la cabeza.
Se puso de pie, extendiendo su mano. “¿Vamos a salir de aquí entonces? Vamos a ir a
mi casa. Podemos hablar, o te puedo llevar a la cama, arruinando cualquier otra experiencia
38 sexual para ti “.
Tomando su mano, le permití llevarme de la barra, haciendo caso omiso de Peter y
Chris, que estaban esperando claramente que me uniera a ellos. Eso no iba a suceder.
“0/ Tenía todo lo que quería aquí.
Nos metió en el taxi esperando, nuestro destino, el piso de Stephen. Lo que sucedería
después, ninguno de los dos lo sabía. Pero si no tomábamos esta oportunidad, nunca
Sabríamos.
Había estado ciego a lo que estaba delante de mis narices todo el tiempo, pero ya no.
Había pasado demasiado tiempo escondiéndome en las sombras. Ahora era mi momento
de salir al sol y, finalmente, disfrutar de mi vida.
Proyecto de Blue Rose
Traducción/ Correccion: Ross
Traducción hecha de fans para fans

Prohibida su distribución en redes sociales.
Prohibido su venta.
Apoyemos a los autores comprando sus libros.
39
“0/
De parte de todo el equipo de Blue Rose queremos

desearles a J.C un muy feliz cumpleaños. Que en su dia
lo pase maravillosamente y que sus deseos se hagan
realidad.
¡¡¡J.C Feliz cumple!!!
40
“0/

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¡¡¡Feliz Cumple, JC!!!

En la oscuridad, espero. Los sonidos me envuelven con su calidez, haciéndome compañía

Encontrando mi voz. "¿Te gusta? ¿Ser observado?"

A menudo me preguntaba cómo reaccionaría a mí diciéndole que era gay. Me imaginaba

Beyond Edén y el Lounge V se convirtió en un santuario para mí, un refugio seguro

Proyecto de Blue Rose

Traducción/ Correccion: Ross

Traducción hecha de fans para fans

De parte de todo el equipo de Blue Rose queremos

¡¡¡J.C Feliz cumple!!!

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