Este documento resume la evolución del empleo formal e informal en Perú entre 2007-2018, encontrando que la participación del sector informal en el empleo total ha disminuido gradualmente. También analiza cómo la tasa de informalidad varía según el estrato socioeconómico. Finalmente, concluye que la pandemia ha impulsado nuevas formas de trabajo no convencionales que podrían potenciar la informalidad laboral a menos que se implementen políticas para regular estas relaciones laborales emergentes.
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Este documento resume la evolución del empleo formal e informal en Perú entre 2007-2018, encontrando que la participación del sector informal en el empleo total ha disminuido gradualmente. También analiza cómo la tasa de informalidad varía según el estrato socioeconómico. Finalmente, concluye que la pandemia ha impulsado nuevas formas de trabajo no convencionales que podrían potenciar la informalidad laboral a menos que se implementen políticas para regular estas relaciones laborales emergentes.
Este documento resume la evolución del empleo formal e informal en Perú entre 2007-2018, encontrando que la participación del sector informal en el empleo total ha disminuido gradualmente. También analiza cómo la tasa de informalidad varía según el estrato socioeconómico. Finalmente, concluye que la pandemia ha impulsado nuevas formas de trabajo no convencionales que podrían potenciar la informalidad laboral a menos que se implementen políticas para regular estas relaciones laborales emergentes.
Este documento resume la evolución del empleo formal e informal en Perú entre 2007-2018, encontrando que la participación del sector informal en el empleo total ha disminuido gradualmente. También analiza cómo la tasa de informalidad varía según el estrato socioeconómico. Finalmente, concluye que la pandemia ha impulsado nuevas formas de trabajo no convencionales que podrían potenciar la informalidad laboral a menos que se implementen políticas para regular estas relaciones laborales emergentes.
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MACRO II
Mercado Laboral
Ariana Melany Flores Martinez
Patricia Isable Mucha Salinas Introducción: PBI Y EMPLEO Se presenta la evolución de la participación del sector informal en el PBI a precios corrientes y en el empleo equivalente, en el periodo 2007-2018. El comportamiento del empleo informal se debe básicamente a la evolución del empleo en el sector informal. Tradicionalmente, las investigaciones sobre empleo informal se han referido tanto a las actividades no agropecuarias como a las del área urbana El sector formal en Perú se refiere a aquellos empleos que están registrados y cumplen con la normativa laboral y de seguridad social. Estos empleos brindan beneficios y derechos laborales a los trabajadores, como protección social, cobertura de salud y seguridad laboral La masa salarial del sector formal se refiere a los salarios y remuneraciones pagados a los trabajadores en empleos formales, es decir, aquellos empleos que están registrados y cumplen con la normativa laboral y de seguridad social Muestra la tasa de informalidad por estrato socioeconómico. Entre el 2002 y 2013 creció a una tasa promedio anual de 6,1%. Posteriormente, la expansión económica se desaceleró entre los años 2014 y 2017, llegando a crecer, en promedio, a 3,1% anual. En el trimestre enero-febrero-marzo del año 2022 en comparación con similar trimestre del año 2021, la población ocupada aumentó en el sector Minería en 38,2%, Servicios en 13,5%, Manufactura en 12,5%, Comercio en 11,6% y Construcción en 9,0%; mientras que, en Pesca disminuyó en 29,2% y Agricultura 5,9%. El crecimiento económico de 2019 se tradujo en una moderada generación de empleo. El aumento de la demanda de trabajo (tasa de ocupación) igualó al crecimiento de la oferta de mano de obra (tasa de participación), motivo por el cual no se registraron cambios en la tasa de desocupación entre 2018 y 2019. La tasa de desocupación aumentó más en hombres que en mujeres, sobre todo, en los primeros meses del confinamiento. Hacia el trimestre móvil junio-agosto 2020 respecto a igual periodo de 2019, la brecha de la desocupación se ha reducido: en hombres, la tasa de desocupación subió 10,0 pp mientras que en mujeres creció 9,5. La disminución de la población ocupada fue mayor en el estrato etario más joven (de 14 a 24 años de edad). El incremento en la tasa de desocupación de estos jóvenes (18,8) triplicó lo obtenido por los adultos de 45 y más años de edad (6,3), durante junio- agosto 2020 y el mismo periodo de 2019. Conclusiones La pandemia ha impulsado nuevas relaciones laborales no convencionales, entre las que destaca especialmente el trabajo a distancia o en casa o de trabajadores que se hallan en un límite difuso entre asalariados e independientes, lo que potencia aún más la informalidad. Así, en el futuro próximo, las políticas públicas tendrán el reto de recuperar lo perdido en la materia, y de generar las condiciones adecuadas para que estas nuevas relaciones laborales no redunden en empleos de menor calidad.