El Plan Económico de La Iglesia
El Plan Económico de La Iglesia
El Plan Económico de La Iglesia
Para poder financiar esta nueva empresa o establecimiento de una nación le dio
ordenes concernientes al Diezmo para poder lograr todo lo establecido.
“…el dinero responde a todo.” (Ecle. 10:19): “Por placer se hace el banquete,
el vino alegra a los vivos y el dinero responde por todo.”
Se ve por medio de esta escritura que para Abraham dar los diezmos era algo
natural, algo que se estaba practicando.
Se han hallado tablas de arcilla que muestran que los asirios, egipcios, y aun los
chinos antes del tiempo de Abraham, daban los diezmos para sostener sus
sacerdotes religiosos y para ayudar en el mantenimiento de sus templos.
Muchos atribuyen el diezmo a la ley por lo tanto, creen que los miembros de la
Iglesia no tienen la obligación de diezmar.
Entre las muchas leyes que recibió el pueblo de Israel tenemos los diezmos.
Es interesante notar que los israelitas no solamente daban los diezmos una vez
sino tres veces.
El Diezmo de la Tierra
Levítico 27:30-34:
Y Números 18:2-7:
Vs. 21-24:
“Yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel como
heredad por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del
Tabernáculo de reunión. 22 Los hijos de Israel no se acercarán al Tabernáculo
de reunión, para que no carguen con un pecado por el cual mueran.
Vs. 26-28:
“Hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis los diezmos de los hijos
de Israel que os he dado como vuestra heredad, vosotros presentaréis de
ellos, como ofrenda mecida a Jehová, el diezmo de los diezmos. 27Se os
contará vuestra ofrenda como grano de la era y como producto del lagar.
28Así presentaréis también vuestra ofrenda a Jehová de todos los diezmos
que recibáis de los hijos de Israel; se la daréis al sacerdote Aarón como
ofrenda reservada a Jehová.
“Sino que el lugar que Jehová, vuestro Dios, escoja entre todas vuestras tribus,
para poner allí su nombre y habitar en él, ese buscaréis, y allá iréis. 6Allí
llevaréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos y la
ofrenda reservada de vuestras manos, vuestros votos, vuestras ofrendas
voluntarias y las primicias de vuestras vacas y de vuestras ovejas; 7 allí
comeréis delante de Jehová, vuestro Dios, y os alegraréis, vosotros y vuestras
familias, de toda obra de vuestras manos en que Jehová, tu Dios, te haya
bendecido.”
24Si el camino es tan largo que no puedas llevarlo, por estar lejos de ti el lugar
que Jehová, tu Dios, haya escogido para poner en él su nombre, cuando
Jehová, tu Dios, te haya bendecido, 25entonces lo venderás, llevarás el dinero
contigo e irás al lugar que Jehová, tu Dios, escoja.
26Allí entregarás el dinero por todo lo que deseas: por vacas, por ovejas, por
vino, por sidra o por cualquier cosa que tú desees. Comerás allí delante de
Jehová, tu Dios, y te alegrarás, tú y tu familia. 27»No desampararás al levita
que habite en tus poblaciones, porque no tiene parte ni heredad contigo”
Se recogía cada tres años y debería usarse con el fin de repartirse con los
levitas (Ministros), los forasteros, huérfanos, y viudas. El propósito era para
que Dios bendijera al dador del diezmo.
Malaquías 3:8-12:
Cabe hacer notar aquí que no solo el diezmo es reclamado, sino también las
ofrendas.
Jesucristo dijo que el no vino a abrogar la ley sino a cumplirla. Los diezmos y las
ofrendas eran parte de la ley (Mt. 5:17; Lc. 21:1-4).
Mt. 5:17 “No penséis que he venido a abolir la Ley o los Profetas; no he venido
a abolir, sino a cumplir”
Lc. 21:1-4: “Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en
el arca de las ofrendas. 2Vio también a una viuda muy pobre que echaba allí
dos blancas. 3Y dijo: En verdad os digo que esta viuda pobre echó más que
todos, 4pues todos aquellos echaron para las ofrendas de Dios de lo que les
sobra; pero esta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía”
Mateo 23:23: “Pero ellos insistían a gritos, pidiendo que fuera crucificado; y
las voces de ellos y de los principales sacerdotes se impusieron.”
AQUELLO QUE NO DEBERIAN DEJAR DE HACER ERA DAR LOS
DIEZMOS.
Lucas 20:20-26:
23 Pero él, comprendiendo la astucia de ellos, les dijo: ¿Por qué me tentáis?
24Mostradme la moneda. ¿De quién es la imagen y la inscripción?
Respondiendo dijeron: De César. 25Entonces les dijo: Pues dad a César lo que
es de César y a Dios lo que es de Dios. 26Y no pudieron sorprenderlo en
palabra alguna delante del pueblo, sino que, maravillados de su respuesta,
callaron.”
¡Esto es más que el diezmo! Podemos ver que no hubo mucha necesidad de
enseñar sobre el diezmo pues los creyentes estaban dando el cien por ciento.
El apóstol Pablo escribió la gran mayoría de las epístolas. Como un verdadero
israelita, él tenía que cumplir con toda la ley.
- Siendo irreprensible y justo en cuanto a la ley, él tenía que cumplir con sus
diezmos
1 Corintios 9:9-14:
“En la ley de Moisés está escrito: «No pondrás bozal al buey que trilla». ¿Se
preocupa Dios por los bueyes 10o lo dice enteramente por nosotros? Sí, por
nosotros se escribió esto, porque con esperanza debe arar el que ara y el que
trilla, con esperanza de recibir del fruto.
13 ¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del Templo, y
que los que sirven al altar, del altar participan? 14Así también ordenó el Señor
a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio”
Los versículos de 1 al 7 nos aclara que en la ley estaba escrito que la persona que
trabajaba sembraba y cuidaba ganado, debería comer del fruto de su trabajo.
El versículo 10 nos dice que por nosotros fue escrito(es decir, los ministros), y
con esperanza de recibir el fruto de nuestro trabajo (ministrando la palabra de
Dios).
Era pues obligación del pueblo sostener la obra de Dios y a los ministros
trayendo al templo (casa de Dios) sus diezmos, ofrendas y sacrificios.
De igual manera ordeno el Señor (de la misma manera diezmos y ofrendas) a los
que anuncian (predican) el evangelio, que vivan (sean sostenidos) del evangelio.
“El que es enseñado en la palabra haga partícipe de toda cosa buena al que lo
instruye.”
“Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor,
mayormente los que trabajan en predicar y enseñar”
“Pero ahora voy a Jerusalén para ministrar a los santos porque Macedonia y
Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los pobres que hay entre los
santos que están en Jerusalén. 27Les pareció bueno hacerla, ya que son
deudores a ellos, porque si los gentiles han sido hechos partícipes de sus bienes
espirituales, deben también ellos ayudarlos con bienes materiales”
d) Ofrenda para los santos, (1 corintios 16:1-3; 2 Corintios 8 y 99):
“En cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también de la manera
que ordené en las iglesias de Galacia. 2Cada primer día de la semana, cada
uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo,
para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas. 3Y cuando haya
llegado, enviaré a quienes vosotros hayáis designado por carta para que
lleven vuestro donativo a Jerusalén”