Taller de Nutrición
Taller de Nutrición
Taller de Nutrición
El término dieta se refiere al hábito alimenticio de una persona. Existen una gran varie-
dad de dietas, algunas de ellas hacen referencia simplemente a un determinado estilo de
vida, como la dieta mediterránea o la dieta vegetariana. Las dietas terapéuticas están di-
señadas para personas con determinadas dolencias, como la dieta libre de gluten para la
enfermedad celíaca o la dieta baja en sodio para las personas que sufren hipertensión.
Las dietas para adelgazar merecen una mención aparte. Existen infinidad de dietas de
moda, temporarias, dietas populares que prometen perder peso con rapidez, pero que
rara vez funcionan, ya que cuando se abandona el régimen, es muy probable que se recu-
pere el peso perdido.
Dietas vegetarianas, Las dietas vegetarianas se enfocan principalmente en el consumo
de productos de origen vegetal (frutas, verduras, legumbres, hortalizas, semillas, granos,
etc.). Existen tres variantes: la dieta vegetariana estricta, la dieta lacto-vegetariana y la
ovo-lacto-vegetariana. Aun las personas que siguen dietas vegetarianas estrictas pueden
nutrirse adecuadamente, siempre enfocándose en incluir alimentos ricos en hierro, proteí-
nas, zinc, calcio y vitamina B12.
Dieta mediterránea, Se trata de una dieta inspirada en los alimentos que se consumen
habitualmente en los pueblos que se encuentran sobre la costa del Mar Mediterráneo. Se
puede decir que es una dieta saludable, basada principalmente en pescados, frutas, vege-
tales, granos integrales, etc.
Dieta baja en sodio, para el tratamiento de la hipertensión arterial: se elimina el agregado
de sal en las comidas, evitando también alimentos ricos en sodio, como fiambres, embuti-
dos, alimentos enlatados, etc.
Dieta libre de gluten, para el tratamiento de la enfermedad celíaca. Se evita todo alimen-
to derivado de trigo, avena, cebada y centeno.
Dieta baja en purinas, para evitar niveles elevados de ácido úrico en sangre: se reduce
notoriamente la ingesta de: cerveza, gaseosas, hígado, riñón, anchoas, sardinas, bacalao,
carnes rojas y otros alimentos ricos en purinas.
Dietas para adelgazar, En esta clase de dietas hay infinidad de variantes, pero se puede
decir que básicamente las dietas para adelgazar se subdividen en:
Dietas bajas en hidratos de carbono.
Dietas bajas en grasas.
Dietas bajas en calorías.
Dietas proteicas, bajas en hidratos de carbono.
Funciones en el organismo
Las funciones de los carbohidratos en el organismo son:
1. Producir energía
Los carbohidratos, tanto los complejos como los simples, son la principal fuente de ener-
gía del organismo, debido a que durante su digestión a través del tracto gastrointestinal se
genera glucosa.
El organismo necesita en promedio unos 160 g de glucosa para funcionar correctamente,
siendo este el combustible preferido por las células del organismo para su buen funciona-
miento. Cuando la glucosa es absorbida en el intestino, gran parte de ella es degradada
para producir adenosín trifosfato (ATP), una molécula de energía que es utilizada en los
diversos procesos metabólicos de organismo para su buen funcionamiento.
2. Combustible para el cerebro
La glucosa que se produce de la digestión de los carbohidratos simples y complejos es
utilizada principalmente por el cerebro para mantener sus funciones vitales, utilizando 120
g por día, lo que representa la mayoría de los 160 g de glucosa que el cuerpo necesita
diariamente.
3. Reserva de combustible para el organismo
Una parte de la glucosa absorbida en el intestino se almacena en forma de glucógeno en
el hígado (aproximadamente 100 g) y otra porción también se deposita en los músculos.
El glucógeno es una molécula que se compone de muchas moléculas de glucosa unidas.
Esta reserva de glucosa se produce para ser utilizada por el organismo como combustible
en posibles eventualidades de "emergencia", como puede ocurrir en situaciones de ayuno
prolongado, de alerta, estrés metabólico o en largos períodos de ejercicios de alta intensi-
dad, por ejemplo.
4. Preservan los músculos
El consumo de carbohidratos también es importante para la preservación de los múscu-
los, ya que la falta de glucosa favorece la pérdida de masa muscular.
Como se mencionó anteriormente, el glucógeno también se almacena en los músculos,
por lo que cuando hay una falta de glucosa en el organismo, esta puede obtenerse a tra-
vés de la degradación de los músculos que se rompen en forma de aminoácidos y son
convertidos en glucosa para producir energía.
5. Promueven la salud digestiva
Las fibras, que pueden ser solubles o insolubles, son un tipo de carbohidrato que no es di-
gerido por el organismo y no produce glucosa, pero es esencial para el proceso de diges-
tión, ya que disminuye la absorción de colesterol, ayuda a regular el azúcar en la sangre,
favorece los movimientos intestinales y el aumento del volumen de las heces, evitando
problemas como el estreñimiento, por ejemplo.
¿Existe otra fuente de energía además de la glucosa?
Sí, cuando el organismo utiliza la reserva de glucosa y hay muy poca o ninguna ingesta
de carbohidratos, el organismo comienza a utilizar las reservas de grasas del organismo
para generar energía (ATP), substituyendo la glucosa por cuerpos cetónicos o ketones.
Qué cantidad se recomienda ingerir
La ingesta en promedio recomendada de carbohidratos totales es entre 200 a 300 gramos
por día. No obstante, esta cantidad varía de acuerdo al peso, edad, sexo y a la actividad
física que realice la persona.
En el caso de la fibra, la recomendación diaria es de 25 a 38 g al día para un adulto salu-
dable y de los carbohidratos simples, la recomendación es que su ingesta no sobrepase el
5% de las calorías totales de la dieta.
Metabolismo de los carbohidratos
Los carbohidratos poseen diversas rutas metabólicas, estas son:
Glucólisis: es la ruta metabólica donde se oxida la glucosa para obtener energía para las
células del organismo. Durante este proceso no solo se forma ATP, también se generan 2
moléculas de piruvato, las cuales son utilizadas en otras rutas metabólicas para obtener
más energía.
Gluconeogénesis: a través de esta ruta metabólica se produce glucosa a partir de otras
fuentes que no son carbohidratos. Esta ruta se activa cuando el organismo pasa por un
período de ayuno prolongado, donde la glucosa puede ser producida a través de glicerol,
a partir de ácidos grasos, de aminoácidos o del lactato.
Glucogenólisis: es un proceso catabólico donde se degrada el glucógeno que está alma-
cenado en el hígado y/o en los músculos para la formación de glucosa. Esta ruta se activa
cuando el organismo requiere un aumento de la glucosa en sangre, manteniendo sus ni-
veles.
Glucogénesis: es el proceso metabólico donde se produce glucógeno, es decir, varias
moléculas de glucosa, para ser almacenado el hígado y en menor cantidad en los múscu-
los. Este proceso ocurre posterior a la ingesta de alimentos con carbohidratos.
Estas rutas metabólicas son activadas dependiendo de lo que el organismo requiera y de
la situación en la que se encuentre.
Hacen que ciertos procesos biológicos ocurran más rápido. A este proceso se
le llama catálisis. Por ejemplo: las enzimas (son proteínas que catalizan
algunas reacciones químicas).
Controlan los procesos del cuerpo, como el crecimiento y el metabolismo. Por
ejemplo: la insulina (hormona que regula los niveles de glucosa en el cuerpo
humano).
Protegen al organismo de las enfermedades. Por ejemplo: los anticuerpos,
como es el caso de las IgG generadas para combatir el Covid-19.
Transportan en el organismo diversas sustancias, como oxígeno, hierro y
lípidos. Por ejemplo, la hemoglobina, la transferrina y las lipoproteínas.
Conforman la estructura de diversos tejidos, como la piel y el cabello. Por
ejemplo, el colágeno y la queratina.
Realizan movimientos de contracción muscular. Por ejemplo, la miosina y la
actina.
Tipos de proteínas
Existen dos grupos principales de proteínas:
Exceso de proteínas
Para personas que realizan actividad moderada. Deben consumir entre 0,8
y 1 gramo de proteína por kilo de su peso corporal, que equivale a unos 56 y
90 gramos diarios de proteínas para un individuo de peso medio.
Para personas deportistas o con gran actividad. Deben consumir entre 2 y
2,5 gramos de proteínas por kilo de su peso corporal, que equivale a unos 100
y 160 gramos diarios de proteínas para un individuo de peso medio.
Los lípidos o grasas son moléculas orgánicas solubles en solventes diferentes al agua.
Están compuestas principalmente de carbono e hidrógeno, y, en menor proporción, de
oxígeno, nitrógeno y fósforo. Los lípidos se caracterizan por cómo se disuelven en diferen-
tes líquidos o solventes. La mayoría son insolubles en agua, mientras que se disuelven fá-
cilmente en solventes orgánicos como el éter, el benceno o la acetona. A diferencia de las
proteínas, los ácidos nucleicos y los carbohidratos, los lípidos no tienen una estructura bá-
sica común. Por eso, dentro de este grupo de biomoléculas se encuentran muchos com-
puestos de formas variadas
Energía
Los lípidos de la dieta son usados como fuente de energía. La grasa del cuerpo o tejido
adiposo es la forma más fácil y efectiva de almacenar energía. Un gramo de grasa
produce el doble de energía que un gramo de azúcar o proteínas.
Estructura celular
Una de las funciones de los lípidos es la construcción de las membranas celulares.
Típicamente, la membrana celular está formada por dos capas de fosfolípidos, con las
caras hidrofóbicas tocándose entre sí, y las caras hidrofílicas mirando hacia afuera.
La membrana plasmática también tiene colesterol intercalado entre los fosfolípidos, lo cual
le da mayor fluidez a la misma. Algunas células poseen también esfingolípidos y
glicolípidos en sus membranas.
Aislamiento térmico
Las plumas de las aves y las hojas de algunas plantas están cubiertas por cera, que es un
lípido que les ayuda a repeler el agua. Los animales poseen debajo de la piel una capa de
grasa que les ayuda a protegerse de las bajas temperaturas externas.
Señalización celular
Los fosfolípidos, en particular el fosfatidilinositol, son moléculas indispensables en la
transmisión de señales desde el exterior de la célula a su interior.
Función endocrina
Las hormonas sexuales y los corticosteroides son hormonas que regulan funciones
esenciales del organismo y son derivadas del colesterol.
Surfactante pulmonar
El surfactante pulmonar es una mezcla de lípidos, principalmente fosfolípidos, que cubre
la superficie de contacto de las células pulmonares con el aire. Su función es bajar la
tensión superficial e impide que los pulmones se colapsen al respirar. A los bebés que
nacen prematuramente les falta este surfactante, por eso deben ser colocados en
incubadoras especiales.
3. Metabolismo de carbohidratos, lípidos y proteínas.
Metabolismo de lípidos Los ácidos grasos (AG) son los componentes principales de los
lípidos complejos (triacilgliceroles, fosfolípidos). Los triacilgliceroles son la forma más
importante de almacenamiento de energía en los animales. Este tipo de almacenamiento
presenta sus ventajas, al oxidarse el C de los AG producen más ATP que cualquier otra
forma de C, además, los lípidos están menos hidratados que los polisacáridos, por lo que
ocupan menos espacio. Los AG se incorporan a las membranas celulares. El principal
órgano de interconversión y metabolismo de lípidos es el hígado.
Retinol o vitamina A
Ácido ascórbico o vitamina C
Colecalciferol o vitamina D
Tocoferol o vitamina E
Vitamina K
Tiamina o vitamina B1
Riboflavina o vitamina B2
Niacina o vitamina B3
Ácido pantoténico o vitamina B5
Vitamina B6
Biotina o vitamina B7
Folato (ácido fólico) o vitamina B9
Cobalamina o vitamina B12
Por su parte, los minerales son elementos naturales que tu cuerpo necesita para mante-
nerse en buen funcionamiento. Al igual que las vitaminas, tienen varios tipos presentes en
distintos alimentos con diversas funciones.
Entre los minerales que el organismo necesita se encuentran el calcio, el fósforo, el mag-
nesio, el sodio, el potasio, el cloro y el azufre. También, se incluyen el yodo, el mangane-
so, el hierro, el zinc, el cobalto, el flúor y el selenio (2)(3).
Leche, hígado, las frutas y verduras de color anaranjado y las verduras de hojas
verde oscuro, como la col y la espinaca (vitamina A).
Granos de cereales y semillas, tomate, atún y carne (B1 tiamina).
Hortalizas verdes, carne, huevo, almendras y espinaca (B2 riboflavina).
Aceite de hígado de pescado (vitamina D).
Yema de huevo, frutos secos y aceites vegetales (vitamina E).
Brócoli, tomate, coliflor, espinaca (vitamina K).
Frutas frescas, cítricos y verduras (vitamina C).
Carne, huevos, mariscos y leche (vitamina B12 cobalamina).
Cereales, vegetales verdes, naranja, kiwi, guayaba, plátano, legumbres y vísceras
de animales (vitamina B9 ácido fólico).
Alimentos fuente de minerales:
En la práctica, la pirámide alimentaria se puede utilizar como una herramienta para orien-
tar cómo es posible componer una dieta saludable de manera equilibrada. Hablamos de
una alimentación variada, moderada, sin complicaciones y colorida.
La pirámide alimentaria, o también llamada pirámide alimenticia, indica la cantidad de ali-
mento a consumir diariamente en proporciones adecuadas para cada grupo. En otras pa-
labras, te permite visualizar qué y cuánto comer en general (pensando en personas sa-
nas).
La pirámide alimenticia ya es bien conocida como inspiración para tener una dieta saluda-
ble. La Escuela de Salud Pública de Harvard la modernizó recientemente. Para traer nue-
vas indicaciones se utilizó la mejor y más actual evidencia científica disponible, buscando
así ofrecer a la población una herramienta que facilite la elección de alimentos. La nueva
versión se denominó Pirámide de alimentación saludable y ofrece recomendaciones muy
importantes para aquellos que buscan comenzar un nuevo estilo de vida.
Los alimentos se organizan en cuatro niveles y ocho grupos de alimentos, por lo que se
dividen en los niveles:
Energéticos: carbohidratos;
Reguladores: vitaminas, minerales y fibras (frutas, verduras, legumbres);
Adyuvantes: proteínas de origen vegetal y animal;
Energéticos extra: azúcares y grasas en general, que deben consumirse en cantidades
moderadas o restringidas. El agua también entra aquí.
En cuanto a los grupos de alimentos, los alimentos se dividen de la siguiente manera:
2. Verduras
Este tipo de alimento aporta vitaminas, minerales y fibra al organismo. Actúan en la regu-
lación de varias funciones metabólicas. La falta de este grupo en la dieta puede dar lugar
a estados de carencia y manifestaciones clínicas. Algunos ejemplos son: brócoli, chayote,
zanahoria, lechuga, entre otros.
3. Frutas
También son fuentes importantes de fibra, vitaminas y minerales esenciales para el equili-
brio y el buen funcionamiento del organismo. Algunos ejemplos son: fresa, manzana, kiwi,
mandarina, naranja, tomate, piña.
4. Legumbres
Este es el grupo conformado por granos, como frijoles, lentejas, garbanzos, soja, entre
otros. Las legumbres son fuente de proteínas de origen vegetal, siendo imprescindibles
sobre todo para quienes practican dietas sin consumo de carne.
5. Carne y huevos
Aquí están las fuentes de proteínas animales. También contiene hierro y vitaminas B6 y
B12. Según la pirámide, el consumo debe ser como máximo dos veces al día. Después de
todo, estos alimentos contienen grasas saturadas y colesterol. Siempre que sea posible,
debemos dar preferencia a las carnes magras.
También son fuente de proteínas para el organismo, además de calcio, nutriente funda-
mental para la formación ósea. No se debe exceder el consumo de este grupo, ya que
son alimentos que contienen grasas saturadas. Prefiere la leche descremada y los pro-
ductos lácteos.
7. Aceites y grasas
Los alimentos de este grupo son fuente de energía y son los responsables del transporte
de vitaminas del complejo B. Al ser alimentos ricos en calorías, su ingesta debe ser mode-
rada y equilibrada. Se recomienda elegir alimentos que sean fuente de grasas buenas
como el aceite de oliva extra virgen, linaza, castañas y almendras. Precisamente, este es
uno de los cambios en la nueva pirámide alimenticia nutricional: se destacan las fuentes
de grasas buenas, apareciendo en la segunda parte de la base, junto a las verduras y los
cereales integrales.
8. Azúcares y dulces
El último grupo está formado por azúcar, miel y dulces. Estos se denominan carbohidratos
simples: bajos en nutrientes y altos en calorías. Su consumo debe ser esporádico.
Alimentos extra: algunos elementos no considerados anteriormente, como las bebidas al-
cohólicas (también de consumo restringido) y los multivitamínicos diarios, también entran
en esta pirámide, en el caso de personas que necesiten reposición de algunos nutrientes.
Por ser muy visual, la pirámide es una herramienta que facilita la comprensión de los nu-
trientes ofrecidos y puede ayudar a democratizar el acceso a una dieta equilibrada;
Diariamente, facilita la elección de los alimentos de forma equilibrada, promoviendo una
mayor conciencia de qué elegir comer;
Fomenta el consumo equilibrado de alimentos, dando prioridad a las frutas y verduras.
Por otro lado, minimiza el consumo de alimentos que pueden ser nocivos para la salud;