Diversidad Lingüística
Diversidad Lingüística
Diversidad Lingüística
VARIADAD DIAFASICAS
En el ámbito de la lingüística se denominan variedades diafásicas o variedades
situacionales, a diferentes tipos de variantes que involucran cambios en el
lenguaje dependiendo de las circunstancias, tema e interlocutores involucrados en
la comunicación, Las variedades diafásicas se refieren a los usos lingüísticos
exigidos por cada situación, en la que el hablante, o bien mide el alcance de sus
palabras, como en una entrevista, un discurso, una conferencia..., o bien hace un
uso relajado y espontáneo del lenguaje, como ocurre al hablar con la familia o con
los amigos.
Características de la diversidad lingüística
Papúa Nueva Guinea. Uno de los países mega diversos del planeta, y el país en el
que más lenguas se hablan del mundo entero (más de 800), la mayoría de las
cuales se clasifican en el conjunto de las lenguas papúes, propias del Océano
Pacífico occidental, abarcando un conjunto diverso de familias lingüísticas únicas.
También es hogar del inglés, lengua heredada por motivos históricos coloniales, y
otros idiomas híbridos entre inglés, alemán y lenguas nativas, conocidos como el
unserdeutsch (“nuestro alemán”) y el Tok pisin.
Nigeria. Una de las naciones más grandes e importantes del África occidental y
una antigua colonia británica, Nigeria es un país de gran diversidad lingüística, con
más de 500 lenguas distintas, la enorme mayoría de las cuales sigue viva. La
mayoría de ellas son lenguas del grupo Níger-Congo, como el yoruba o el igbo, o
afroasiáticas como el hausa, o nilo-saharianas como el kanuri. También se maneja
el inglés pidgin o “broken”, lengua criolla derivada del inglés, y para los asuntos
oficiales y académicos, el inglés británico.
India. Este es uno de los países más extensos y poblados del planeta, y también
una de las cunas de la civilización, donde surgió la cultura del Valle del Indo.
Luego del continente africano todo, se considera la unidad geográfica con mayor
diversidad cultural, lingüística y genética del planeta. Es hogar de dos gigantescas
familias de lenguas propias: las indoarias (74% de la población) y las drávidas
(24% de la población), así como de otras lenguas provenientes de la familia austro
asiáticas y tibetano-birmanas.
México, antigua cuna de la civilización mesoamericana, es también un buen
ejemplo de enorme diversidad lingüística. Como el resto de las antiguas colonias
hispanas en América, maneja el español como su lengua oficial y mayoritaria, pero
al mismo tiempo conserva y reivindica sus lenguas precolombinas sobrevivientes.
Entre las lenguas nativas aún en uso se encuentran el náhuatl (hablado por un
millón 725 mil personas), el maya (más de 859 mil), el tseltal (556 mil), el mixteco
(517 mil), el tsotsil (487 mil), el zapoteco (479 mil) o el otomí (307 mil), por
mencionar sólo las más predominantes.
Las lenguas indígenas de México están desapareciendo, a pesar de los esfuerzos
por preservarlas y por conservar su legado, independiente de la cultura española
impuesta durante cinco siglos y único en el mundo entero. Con ese fin se ha
invertido en la educación bilingüe para los ciudadanos indígenas y se llevan a
cabo continuas campañas de concientización del riesgo trágico que la pérdida de
estas lenguas representaría para la humanidad.
La importancia de la conservación
Se sabe que los seres humanos somos desobedientes al cambio y a todo lo que
no conocemos, pero también es cierto que incluso los seres más duros y cerrados
son capaces de abrirse y avanzar, dadas las condiciones adecuadas y el esfuerzo
necesario. La perseverancia es la clave de cualquier revolución que pretenda dejar
huella en sus participantes; esto no significa que baste con inmovilizarse en una
postura y esperar la aceptación ajena, pero sí se refiere a que es gracias a la
paciencia y la persistencia que se consigue modificar la estructura mental de las
personas.