Raul Kenia
Raul Kenia
Raul Kenia
VIENTRE SUBROGADO
GONZALEZ RANGEL KENIA
MARA
Metodología de la investigación
21 de noviembre de 2013
INTRODUCCION
JUSTIFICACION
MARCO TEORICO
Corrientes moralistas:
Unidad del ser humano, compuesto de cuerpo y alma espiritual. Este principio es
aceptado en la antropología cristiana; como es ser humano está integrado por
cuerpo y espíritu, el acto conyugal ha de ser al mismo tiempo corporal y espiritual.
Evadir las realidades que presenta la investigación científica con las innovaciones
y las alteraciones que han traído al proceso natural de reproducción no es la
manera correcta en que deben de actuar los juristas. Situaciones tan
confidenciales que afecten a los vínculos familiares no se han presentado
anteriormente y cabe preguntarse si. Lo que es indudable es que la familia del
futuro ha de sufrir grandes cambios y entre ellos, uno de los más estremecedores
será la filiación. En lugar de permanecer morosos, debe aprovecharse esta
increíble oportunidad para diseñar la sociedad del futuro.
Frente a ello, hay juristas que plantean que estar dentro del seno materno es
requisito de la personalidad. Pero si se hace una interpretación literal de dichos
textos conduciría a considerar excluido de protección jurídica al concebido fuera
del seno materno, en cuyo caso el comienzo de la existencia de la personalidad no
coincidiría con el momento de su concepción, sino con el de su implantación en el
seno materno.
¿Cuáles son los casos especiales en los cuales se les tiene mayor prioridad en
esto?
¿Hay alguna garantía que la mama que va a rentar el vientre no se quede con el
hijo?
PROBLEMA DE INVESTIGACION
OBJETO DE LA INVESTIGACION
OBJETIVO
CAMPO DE ACCION
HIPOTESIS
Seguridad jurídica para ninguna de las partes, lo cual deja a las partes en un
estado de inequidad ante la ley.
Métodos y técnicas
ANTECEDENTES HISTORICOS
El primer caso de un niño gestado por encargo, mediante un trato de una agencia
intermediaria, tuvo lugar en los Estados Unidos en Louisville, Kentucky, en el año
de 1930, cuando una mujer identificada como Elizabeth Kane, de 37 años de edad
y madre de sus tres hijos, recibió $10,000 dólares por el servicio. Las mujeres
casadas son generalmente preferidas a comparación a las que no han tenido
ninguna experiencia maternal.
MATERNIDAD SUBROGADA
El caso conocido en Estados Unidos como “Baby M”, puso en evidencia en este
país la ausencia de la regulación legal sobre la maternidad subrogada y la
necesidad de regular los avances científicos a raíz de los cuales surge esta
posibilidad de reproducción, es decir, que se celebre un contrato cuyo objeto es el
“ alquiler” del útero de una mujer que gestara un embrión que puede ser o no su
hijo biológicamente y que indudablemente constituye un problema directamente
relacionado con los derechos reproductivos; este caso es el siguiente.
La Sra. Mary Bell Whitehead, fue inseminada artificialmente con el esperma del Sr.
Staern, derivado de un contrato que celebraron entregarían al Sr. Stern y a su
esposa, quienes por problemas de fertilidad no podían concebir naturalmente. En
dicho contrato se especifico que la mujer contratada para gestar al niño no
desarrollaría ni intentaría desarrollar una relación madre-hijo con o los niños que
pudiera concebir y que cedería la custodia de este a la pareja contratante, también
se pacto que dicha mujer renunciaría a todo derecho materno relacionado con tal
niño. Por último, en dicho contrato se acordó que la pareja pagaría a la mujer
$10,000 dólares como compensación por sus servicios y los gastos del centro de
fertilidad, como parte de un total aproximado de $25,000 dólares, que la pareja
accedió pagar a dicho centro médico.
Los señores Whitehead huyeron a Florida con la niña, y tres mese después fueron
localizados y la bebe fue devuelta a los Stern; se amplió la custodia temporal que
previamente les fue concedida y se otorgaron derechos limitados de visita a la Sra.
Whitehead. Al dictar la sentencia, el juez Sorkow declaro el contrato de
subrogación valido y ejecutable, dio por terminados los derechos maternos de la
Sra. Hitehear y otorgo la custodia exclusiva al Sr. Stern. Posteriormente la Sra.
Stern adopto legalmente a la niña.
La Sra. Whitehead apelo ante el Tribunal Supremo de New Jersey, señalado con
el contrato que celebro era inválido y no ejecutable. Al dictar sentencia el Tribunal
resolvió confirmar la custodia concedida al padre biológico de la niña y anulo la
finalización de los derechos maternos de la madre natural y requirió al tribunal
inferior que definiera los términos de las visitas de aquella con la niña, pues,
considero que, aun cuando la madre subrogada hubiera accedido y comprendido
las consecuencias del contrato que firmo, tal consentimiento era irrelevante en
virtud de que el hecho de la conducta comprada con dinero fuere voluntaria no
significaba que fuere buena o que estuviera mas allá de la regulación o
prohibición; sin embargo, el Tribunal considero que no había prohibición legal a la
subrogación cuando la madre subrogada se presenta voluntariamente y sin recibir
pago alguno, siempre y cuando se le permitía el derecho cambiar de decisión y de
afirmar sus derechos maternales.
Como podemos advertir, el tema del vientre subrogado es sumamente complejo,
como lo son en general todos aquellos relacionados con el derecho reproductivo.
CASOS JUDICIALES
COMPRAVENTA DE NIÑOS
En el año de 1981 Mary Roe fue contratada para ser artificialmente inseminada
con esperma del esposo de una señora incapacitada para procrear por haberse
ligado las trompas. De acuerdo con el contrato celebrado, recibiría $5,000 dólares
por la promesa de gestar y dar a luz a un hijo que entregaría al padre biológico a
su nacimiento.
Según los planes, antes del nacimiento el padre biológico daría a conocer su
intención de reclamar la paternidad y al ser asentado lo reconocería como suyo.
Por su parte, la subrogada y su esposo aceptarían que el contratante era de su
hijo, renunciarían a su custodia y demás derechos sobre él y consentirían en que
la esposa estéril lo adoptara.
Como esa ley impedía que el contrato fuera realizado conforme a lo planteado, los
esposos contratantes iniciaron un juicio tendiente que les impedía indirectamente
procrear un hijo mediante el procedimiento de “subrogación de maternidad”, lo que
juzgaban violatorio en su perjuicio del “derecho a la privacidad”, declaro por la
Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos, como implícito en otros
derechos constitucionales.
En fallo de primera instancia la corte declaro que “el interés del Estado expresado
en la ley es evitar que el mercantilismo o afán de lucro afecte la decisión de una
madre para otorgar su consentimiento para que su hijo sea adoptado. Es principio
fundamental, agrego que los niños no pueden ni deben ser materia de
compraventa”, y prosiguiendo “Consideraciones mercenarias para crear una
relación de parentesco y su impacto en la unidad de la familia afecta las bases
mismas de la sociedad humana y ofende a la comunidad”. La corte de
Apelaciones a la que recurrió la pareja contratante rechazo la vista del caso y
emitió su opinión diciendo: “La ley no prohíbe a los apelantes tener un hijo como lo
planearon, sino hacer mal uso de los procedimientos de adopción como un medio
de cambiar la situación legal del niño, y ese propósito consideramos que no se
encuentra dentro del ámbito de las garantías protegidas por el derecho
constitucional a la privacidad.”
Por su parte, el Procurador General del Estado de Michigan declaro con motivo del
caso planteado ante los tribunales:
Pocas mujeres se prestarían por gusto a ofrecer el uso de su cuerpo por nueve
meses si lo único que conseguirían fuera el placer de hacer a otros felices con la
adopción de su hijo, por lo que, salvo los casos de excepción, el pago es el
incentivo para que gesten el hijo que no desean concebir, lo lleven en el vientre
por nueve meses, a pesar de que normalmente no lo hubiesen hecho, y lo
entreguen a su nacimiento renunciando a todos sus derechos; es obvio que
cuando lo hacen es merced a la recompensa recibida. El contrato celebrado entre
las partes resulto nulo a la luz del derecho estatal.
Un caso más…
Las corte solicito la intervención del Procurador General del Estado en vista del
interés público que revestían ambas solicitudes, resolviendo el funcionario que “en
tanto que la señora había sido inseminada con el consentimiento de su marido, el
niño por nacer debía ser considerado, de acuerdo con la ley, como hijo legitimo del
matrimonio” y no del contratante.
Máxime los grandes avances científicos que han permitido diversos avances de
reproducción asistida. Estos derechos fueron definidos en mayor medida en la
Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, cuyo texto fue aprobado el
13 de septiembre de 1994 en el Cairo, de la siguiente manera:
Estas son solo algunas de las interrogantes que surgen a raíz de la maternidad
subrogada y que inciden directamente en diversos campos del derecho, entre los
que se encuentran, como ya se menciono, los derechos reproductivos, ello sin
desconocer que en cada caso se pueden generar otras interrogantes apartes de
las antes formuladas y que no son más que el resultado de los avances que tiene
las ciencia que por lo general va mucho más rápido que la regulación, ya que hace
algunas décadas hubiera sido impensable que la madre biológica fuera distinta
de la gesta o incluso que se pudiera concebir un niño fuera del útero materno.
Derivado de estos avances y de las consecuencias que implican, es necesario que
se expidan leyes que afronten los problemas que surgen a raíz de nuevas
situaciones que tienen lugar en la sociedad, es decir, es indispensable que tales
actos se regulen y con ellos se impongan limites y soluciones que den mayor
seguridad a las partes involucradas en ellas. Más aun, ante la realidad de que
existen madres subrogadas e independientemente de la respuesta que se pueda
llegar a dar a las respuestas antes formuladas, se presenta una situación de
hecho ineludible consistente en que, como resultado de las inseminaciones
artificiales realizadas a las mujeres que “subrogan su útero”, están naciendo niños
y niñas, lo que torna aun más necesaria su regulación.
México no ha sido ajeno a adelantos científicos como el que ahora nos ocupas,
pues, en la Asamblea Legislativas del Distrito Federal se ha aprobado la Ley de
Maternidad Subrogada, sin embargo, aun no ha sido promulgada y publicada por
el Jefe de Gobierno de la entidad, al igual que nuestro tema principal “El vientre
subrogado” conforme al procedimiento legislativo que prevé la legislación aplicable
, ni tampoco existen precedentes judiciales que establezcan ciertos lineamientos
que sirvan de guía a casos que puedan surgir en nuestro país como el Baby M; lo
que genera un inseguridad jurídica para las personas que deciden realizar un
procedimiento de este tipo e incluso para el niño o niña que sea concebido
derivado de un procedimiento de este tipo.
CHANTAJE CRIMINAL
Como consecuencia del incumplimiento de llevar una vida sana, el niño nació con
síndrome alcohólico por su habitual consumo de estimulantes, alcohol, drogas,
etcétera.
En otro caso, que cuenta el mismo Keane, la pareja subrogante estaba formada,
por un(a) transexual y su “marido”. Cuando la madre subrogada se entero se negó
a entregar al hijo procreado. Una corte de California apoyo su decisión y lo retuvo.
ANUNCIO INSOLITO
“Marido sin hijos, casado con mujer infértil, desea obtener un hijo de probeta. La
mujer de descendencia inglesa o del Noroeste europeo que se interese colaborar,
deberá indicar los honorarios que pretenda y su edad.”
El anuncio que antecede fue publicado en The San Francisco Claronicle el día 15
de abril de 1975, y aunque se refería a Lest tuve baby, en realidad lo que
anunciante pretendía era que una mujer de las características señaladas se
presentara a ser inseminada artificialmente con los gametos del anunciante hasta
embarazarse y al nacimiento su hijo le fuera entregado, renunciado de la madre
biológica a sus derechos maternales. La técnica de la fecundación in vitro, de
dónde provino el término “niños de probeta” empleado en la solicitud, no había aun
tenido éxito en seres humanos al tiempo del anuncio, sino hasta 1978, con el
nacimiento de Louise Brown.
180 mujeres respondieron al llamado, y entre ellas fue una seleccionada una del
área de la bahía de San Francisco, quien por la suma de diez mil dólares entre
honorarios y gastos, acepto ser inseminada y a dar a luz a un niño lo entrego a su
padre renunciando a sus derechos conforme a lo pactado.
UN “TÍO” GENEROSO…
Por último, el caso de un hombre soltero que desando tener un hijo sin
involucrarse en su procreación, solicitaba una pareja de raza blanca que quisiera
que la mujer fuera inseminada su semen y al nacimiento de su hijo ofrecía
constituir un fideicomiso de $20,000 dólares en su favor y solamente fungiría como
“tío” del recién nacido.