Fútbol
Fútbol
Fútbol
El fútbol, futbol2 o balompié3 (del inglés británico football) es un deporte de equipo jugado
entre dos conjuntos de once jugadores cada uno, mientras los árbitros se ocupan de que las
normas se cumplan correctamente. Es, ampliamente, considerado el deporte más popular del
mundo, pues lo practican unas 270 millones de personas.4 También se le conoce como fútbol
11 por el número de jugadores de un equipo o fútbol asociación, nombre derivado de la
«Asociación del Fútbol» (The Football Association), primera federación oficial del mundo en
este deporte y que utilizó ese nombre para distinguirlo de otros deportes que incluyen la
palabra «fútbol» o «futbol».5 En algunos países de habla inglesa, también se le conoce como
soccer, abreviatura de association, puesto que el nombre de football en esos países se asocia
mayoritariamente a otros deportes con esa denominación (principalmente en Estados Unidos,
donde el nombre football aplica para el fútbol americano, un deporte totalmente distinto).
El terreno de juego es rectangular de césped natural o artificial, con una portería o arco a cada
lado del campo. Se juega mediante una pelota que se debe desplazar a través del campo con
cualquier parte del cuerpo que no sean los brazos o las manos, y mayoritariamente con los
pies (de ahí su nombre). El objetivo es introducirla dentro de la portería o arco contrario,
acción que se denomina marcar un gol. El equipo que logre más goles al cabo del partido, de
una duración de 90 minutos, es el que resulta ganador del encuentro.
El fútbol se juega siguiendo una serie de reglas, llamadas oficialmente reglas de juego. Este
deporte se practica con una pelota esférica (de cuero u otro material con una circunferencia
no mayor a 70 cm y no inferior a 68 cm, y un peso no superior a 450 g y no inferior a 410 g al
comienzo del partido), donde dos equipos de once jugadores cada uno (diez jugadores "de
campo" y un guardameta) compiten por encajar la misma en la portería rival, marcando así un
gol. El equipo que más goles haya marcado al final del partido es el ganador; si ambos equipos
no marcan, o marcan la misma cantidad de tantos, entonces se declara un empate. Puede
haber excepciones a esta regla; véase Duración y resultado más abajo.
La regla principal es que los jugadores, excepto los guardametas, no pueden tocar
intencionalmente la pelota con sus brazos o manos durante el juego, aunque deben usar sus
manos para los saques de banda.
En un juego típico, los jugadores intentan llevar la pelota hasta la portería rival, lo que se
denomina gol, a través del control individual de la misma, conocido como regate, o de pases a
compañeros o tiros a la portería, la cual está protegida por un guardameta. Los jugadores
rivales intentan recuperar el control de la pelota interceptando los pases o quitándole la pelota
al jugador que la lleva; sin embargo, el contacto físico está limitado. El juego en el fútbol fluye
libremente, y se detiene solamente cuando la pelota sale del terreno de juego o cuando el
árbitro decide que debe detenerse. Luego de cada pausa, se reinicia el juego con una jugada
específica. Al final del partido, el árbitro compensa el tiempo total en minutos que se
suspendió el juego en diferentes momentos.
A nivel profesional, en la mayoría de los partidos se marcan solo unos pocos goles. Por
ejemplo, durante la temporada 2006/07 de la Primera División de España, la liga de fútbol
española, se marcó un promedio de 2,48 goles por partido.7
Las reglas no especifican ninguna otra posición de los jugadores aparte de la del guardameta,
portero o arquero, pero con el paso del tiempo se han desarrollado una serie de posiciones en
el resto del campo. A grandes rasgos, se identifican tres categorías principales: los delanteros,
cuya tarea principal es marcar los goles; los defensas o defensores, ubicados cerca de su
portería, quienes intentan frenar a los delanteros rivales; y los centrocampistas,
mediocampistas o volantes, que manejan la pelota entre las posiciones anteriores. A estos
jugadores se los conoce como jugadores de campo, para diferenciarlos del guardameta. A su
vez, estas posiciones se subdividen en los lados del campo en que los jugadores se
desempeñan la mayor parte del tiempo. Así, por ejemplo pueden existir centrocampistas
derechos, centrales (de contención) e izquierdos. Los diez jugadores de campo pueden
distribuirse en cualquier combinación. Por ejemplo, puede haber cuatro defensas, cuatro
centrocampistas y dos delanteros (4-4-2); o tres defensas, cuatro centrocampistas y tres
delanteros (3-4-3), y la cantidad de jugadores en cada posición determina el estilo de juego del
equipo: más delanteros y menos defensas (por ejemplo 3-3-4) creará un juego más agresivo y
ofensivo, mientras que lo contrario (por ejemplo 5-3-2) generará un juego más lento y
defensivo. Aunque los jugadores suelen mantenerse durante la mayoría del tiempo en una
posición, hay pocas restricciones acerca de su movimiento en el campo. El esquema de los
jugadores en el terreno de juego se llama la formación del equipo, y esta, junto con la táctica,
es trabajo del entrenador.
El guardameta, también conocido como portero, arquero o golero, es el jugador cuyo principal
objetivo es evitar que la pelota entre a su meta durante el juego, acto conocido como gol. El
guardameta es el único jugador que puede tocar la pelota con las manos durante el juego
activo, aunque solo dentro de su propia área. Cada equipo debe presentar un único
guardameta en su alineación. En caso de que el jugador deba abandonar el terreno de juego
por cualquier motivo, deberá ser sustituido por otro futbolista, ya sea uno que se encuentre
jugando o un sustituto. Este tipo de jugadores deben llevar una vestimenta diferente a la de
sus compañeros, sus rivales (incluido el guardameta) y el cuerpo arbitral. Por lo general suelen
llevar el número 1 estampado sobre la camiseta.
Defensa
El defensa, también conocido como defensor, es el jugador ubicado una línea delante del
guardameta y una por detrás de los centrocampistas, cuyo principal objetivo es detener los
ataques del equipo rival. Generalmente esta línea de jugadores se encuentra en forma
arqueada, quedando algunos defensas más cerca del guardameta que los demás. Si es solo un
jugador el ubicado más atrás, recibe el nombre de líbero; si son dos o más, reciben el nombre
de zagueros. Los defensores posicionados en los costados del terreno son llamados laterales o
stoppers (en el caso de que haya un líbero), y debido a su colocación (más cerca de los
centrocampistas) estos pueden avanzar más en el terreno si lo desean. Para nombrarlos se
agrega la zona a la palabra defensa: por ejemplo, un defensa que juega por la derecha
(mirando hacia la meta rival) sería un lateral derecho. También el arquero debe proteger y dar
instrucciones a los defensas.
Centrocampista
Delantero
Actividad física
El fútbol incluye una actividad física muy importante. Durante un partido de balompié
profesional de 90 minutos, un jugador, dependiendo de su posición y de las dimensiones del
campo, recorre entre 12 y 15 km.8910 También durante un partido de similares características,
un futbolista pierde alrededor de 2 kg de líquidos, parte de los cuales son recuperados durante
el tiempo de descanso.11 En partidos que se juegan con altas temperaturas, los árbitros tienen
el derecho de detener el encuentro, generalmente a mediados de un período, para que los
jugadores y el cuerpo arbitral se hidraten.12
Pero al mismo tiempo, el fútbol es uno de los deportes con mayor número de lesiones,13
aunque la mayoría de ellas no son de gravedad. Las lesiones más comunes ocurren en las
rodillas y los tobillos, debido a los movimientos rotativos a los que son sometidos. Las roturas
de meniscos y ligamentos cruzados junto a los desgarros musculares, son lesiones habituales
dentro del fútbol. Las probabilidades de lesión aumentan cuando el jugador no recibe una
preparación física adecuada, particularmente en un deportista aficionado, y cuando el juego se
desarrolla sobre un terreno irregular. Para futbolistas profesionales o semiprofesionales es de
vital importancia la presencia de un preparador físico que regule el tipo de ejercicio físico, así
como la duración y regularidad del mismo. El trabajo del preparador físico se debe
complementar con una correcta alimentación, donde también es recomendable la presencia
de un profesional en la materia.
Recepción
Los jugadores de fútbol deben ser capaces de controlar los balones que reciben. La forma más
fácil suele ser parar la pelota; en este caso, el balón debería ser situado en la posición ideal
para el próximo toque. Los jugadores avanzados pueden usar el primer toque para hacer que
el balón se mueva de forma rápida hacia donde tienen planeado correr. También pueden
utilizar el primer toque para pasar el balón. Evitar el balón en vez de recibirlo puede despistar
a los jugadores oponentes.
Es una acción muy utilizada durante un partido, con el objetivo de recibir el balón, controlarlo
y ponerlo a su servicio para desarrollar en buenas condiciones una acción posterior. La
recepción en parada es aquella en la que se consigue controlar totalmente el balón en los pies,
perdiendo el componente de velocidad pero aumentando la precisión en el manejo posterior
del esférico.
La recepción en semiparada es para conseguir que el balón pierda parte de su valor inicial. La
recepción de amortiguamiento se utiliza para controlar balones aéreos, con trayectoria
descendente, y se produce una amortiguación de la aceleración con el que llega la pelota.
El control del balón puede ser al ras de suelo, o bien con la cara interna de la bota, o con la
planta del pie, con la punta hacia arriba y encajando la pelota entre la planta y el suelo. En los
balones altos, se debe conseguir llevar el balón al suelo con posibilidades de ser jugado
adecuadamente.
Pase
Para mantener la posesión del balón es esencial tener capacidad para pasarlo en corto entre
los jugadores cercanos de forma precisa y a tiempo. Los pases largos precisos permiten una
mayor variedad de situaciones y un juego más directo. Generalmente, los pases que crean
ocasiones de gol se les llama asistencia, aunque cualquier jugador en el campo podría hacer
este tipo de jugadas, generalmente es un mediocampista ofensivo quien lo hace, es trabajo
usual de los jugadores marcados con el 10 o el 8 en sus camisetas.
Tiro
Los jugadores deben tener un equilibrio a la hora de tirar a puerta: ni hacerlo en demasiadas
ocasiones ni tampoco dejar de intentarlo cuando tienen ocasión. Los tiros deberían ser
precisos y potentes, aunque generalmente no se logra esta precisión y potencia al mismo
tiempo. Elegir precisión o potencia depende de la situación y de las características del jugador.