Desafíos de La EIB en Ancash
Desafíos de La EIB en Ancash
Desafíos de La EIB en Ancash
Por otro lado, los instrumentos de monitoreo o acompañamiento al docente y al director de IIEE
se centran en el Marco del Buen desempeño directivo y docente con las rúbricas en los cuales
no se encuentra rasgos de EIB, por el contrario, están orientados al monoculturalismo y
monolingüismo que otorga protagonismo solo al docente en las aulas y reconoce como único
espacio de aprendizaje al salón de clases. Por tanto, los especialistas EIB, no pueden
retroalimentar lo que se le exige al docente en el desarrollo cultural y lingüístico. Un desafío es
contar con instrumentos que ayuden a lograr auténticamente IIEE EIB.
Al igual que en el Perú, La EIB en Ancash sigue siendo remedial, solo está pensado para las IIEE
ubicadas en ámbitos geográficos que comprenden zonas rurales, en la urbanidad existen solo
de nombre, no se desarrolla la EIB como corresponde. Si la política se orienta a atender al sujeto
de derechos a desarrollar su lengua y su cultura en el mismo nivel que el castellano o la cultura
occidental, pero como podemos asegurar el derecho de alguien si los otros no les reconocen ese
derecho; por tanto, parte de la necesidad de implementar en todas las IIEE porque vivimos en
una sociedad multicultural y bilingüe o multilingüe.
Hay una fuerte brecha en la formación docente en servicio para que se comprenda cómo
elaborar los calendarios comunales, para comprender qué implica planificar, evaluar y
retroalimentar de manera diferenciada a los estudiantes con distintos niveles de manejo del
quechua, comprender cómo desarrollar la pedagogía o pedagogías interculturales, el diálogo
crítico de saberes, desarrollar actividad pedagógica en diversos espacios. En EIB son muchos los
lugares donde se pueden y deben aprender. Es importante complementarnos entre los
docentes, directivos y también la familia y comunidad para que desarrollar juntos la EIB. En este
proceso es necesario empezar por la intraculturalidad, con ello abrir debate sobre la
subjetividad. Aún prima el ejercicio docente como técnico, operario o implementador que
espera modelos, paradigmas, que aplica las ideas sin un proceso de reflexión y que solo
pedagogiza la EIB. Hace falta posicionar al docente EIB como actor político, social y educativo
que sea capaz de tomar las ideas, ponerlas en práctica y luego hacer teoría para explicar sus
resultados. En EIB no hay modelos, se hace desde la práctica y potencia al máximo la creatividad
docente.
Es necesario también reconocer a docentes que trabajan la EIB de manera silenciosa, que
obtienen resultados positivos a fin de incorporarlos en los estímulos y reconocimientos; en las
metas institucionales para tener referentes regionales que ayuden en esta tarea por la EIB. De
todo lo anotado los desafíos en la región Ancash son: