Wuolah Free ARIT Tema 2
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anarmoreiras
No se permite la explotación económica ni la transformación de esta obra. Queda permitida la impresión en su totalidad.
1. ADQUISICIÓN DEL CONCEPTO DE NÚMERO POR EL NIÑO. TEORÍA DE PIAGET
1.1. NATURALEZA DEL NÚMERO
El conocimiento del número es de origen lógico-matemático. El niño construye el número a través de la abstracción
reflexionante a partir de su propia acción mental de establecer relaciones. El conocimiento del número está
subordinado a la evolución del pensamiento lógico. Una vez que el niño construye el número es capaz de realizar
operaciones con números.
1. El número se construye, según Piaget, mediante una síntesis de dos relaciones: orden e inclusión jerárquica.
La estructura del número es sólida en el momento en el que el niño “conserva” el número. La conservación tiene
lugar cuando tenga construida mentalmente la estructura de inclusión jerárquica. Para que esto suceda el
pensamiento del niño debe ser “reversible”.
NIVELES
1. AUSENCIA DE CONSERVACIÓN Y DE IGUALDAD. Dada una colección, no es capaz de construir otra con el
mismo número de elementos.
2. NOCIÓN DE CONSERVACIÓN Y AUSENCIA DE IGUALDAD. Dada una colección, construye otra con el mismo
número de elementos pero no conserva esta igualdad.
3. NOCIÓN DE CONSERVACIÓN. De las respuestas correctas y razonadas, los argumentos pueden ser:
- de IDENTIDAD (hay los mismos elementos porque no se quitó ninguno).
- de REVERSIBILIDAD (se pueden poner los elementos otra vez de la misma forma).
- de COMPENSACIÓN (una fila es más larga pero tiene más espacio en el medio).
1.3. REVERSIBILIDAD
Capacidad de realizar, mentalmente, dos acciones opuestas de forma simultánea. Por ejemplo, si tenemos un
conjunto de flores de las cuales 3 son camelias y 5 son rosas, para responder a la pregunta “¿hay más camelias
o rosas?” tenemos que dividir el todo en dos partes y volver a juntar las partes en un todo (F = C + R ; C + R = F).
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1.5. TRAMOS DE DIFICULTAD
Cuando se alcanza la inclusión jerárquica, el niño es capaz de razonar sobre diferencias de uno en cantidades
pequeñas, pero se resulta difícil en cantidades mayorees de ocho. Lo mismo pasa con la conservación. Entre los
6-7 años, Piaget distingue cuatro tramos de números en orden de dificultad para las diferencias de uno y para la
conservación:
- del 1 al 7/8
- del 8 al 14/15
- del 15 al 30/40
- mayores de 30/40
Aunque un niño pueda conservar el número y razonar sobre diferencias de uno en el primer tramo, no puede
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esperarse necesariamente que lo conserve en las siguientes.
- Para llegar al conocimiento del número, el niño debe progresar en el conocimiento lógico-matemático:
clasificaciones, correspondencias término a término, seriaciones, composición aditiva de clases, etc.
- Debido a que la propia construcción del número implica la adición repetida del uno, la suma tampoco debe ser
enseñada de forma directa.
Todas las colecciones de objetos que se pueden emparejar tienen algo en común: el cardinal del conjunto. El
cardinal de un conjunto se refiere a la cantidad de elementos que tiene. Los conjuntos finitos con el mismo cardinal
se dice que son coordinables entre sí. El número natural es cada clase de conjuntos finitos coordinables entre sí.
La memorización de la secuencia numérica es el conocimiento matemático relacionado con el número que más
tempranamente se aprende.
1. CONTAR. Acción que se realiza con la intención de conocer la cantidad de objetos que tiene una colección, es
decir, cuantificar dicha colección. La acción de contar es el conteo.
2. ORDENAR. Asignar un lugar o posición a cada elemento de una colección de forma que constituyan una
secuencia organizada. Para asignar el orden de los elementos de la colección se usan los ordinales.
3. CRONOMETRAR. Secuencia numérica usada como contador temporal. Cada una equivale a una ud. de tiempo.
4. USO CARDINAL DEL NÚMERO NATURAL. Se emplea el número aislado de la secuencia numérica para indicar
la cantidad de elementos de una colección. Se usa el cardinal del número.
5. SIMBOLIZAR O ETIQUETAR. Uso de los números como un código o etiqueta. Podrían ser letras o signos.
- SISTEMA DE NUMERACIÓN. “Un sistema de numeración está constituido por un conjunto finito de signos y
reglas, que hacen posible expresar cualquier número que se desee mediante el uso de signos del que consta
el sistema y siguiendo sus reglas”.
1. FINALIDAD. La finalidad inicial de un sistema de numeración es asignar a cada número natural individual (con
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un límite que depende de las necesidades prácticas) un nombre y una representación escrita, formada por
combinaciones de un reducido número de signos, efectuadas siguiendo leyes más o menos regulares.
2. CUÁL ES MEJOR. Un sistema de numeración es mejor o peor en tanto sea más breve, más fácil de manejar,
etc., o en tanto más lejos permita desarrollar el cálculo.
3. EVOLUCIÓN. Fue lenta hasta llegar al sistema de numeración actual, el sistema decimal posicional cifrado.
Se basan en el principio aditivo de un sistema de numeración. El principio aditivo consiste en que el valor de un
número se obtiene como suma del valor de todos los símbolos empleados en su representación.
- Repetición uniforme de un solo símbolo a modo “tantos como”. Ejemplo: símbolo I (=1) → IIIIIIIIIIIIII (=14)
- Inconvenientes: Representar números grandes; leerlos; distinguir números consecutivos
2. AGRUPAMIENTO SIMPLE:
- Elección de una base para el agrupamiento. Ejemplo: IIIII = V (=5); el ejemplo anterior sería VVIIII (=14)
- Presencia de dos clases de símbolos: para las unidades y para los grupos de unidades.
- Mismos inconvenientes que los sistemas de numeración de representación simple.
3. AGRUPAMIENTO MÚLTIPLE:
Sistema egipcio:
Se dio un gran paso hacia el sistema de numeración actual cuando se decidió emplear dos clases de símbolos:
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unos para las potencias de la base del agrupamiento y otros que indican la multiplicación de éstos (evitando su
repetición).
Sistema chino-japonés:
SISTEMAS POSICIONALES
Se basan en el principio de posición. El principio de posición consiste en que el valor de una cifra, o símbolo
numérico, es relativo, es decir, depende del lugar que ocupe en la escritura del número. Son sistemas
multiplicativos ordenados, por lo que suprimen los símbolos de las potencias de la base (se sobreentienden).
SISTEMAS POSICIONALES CIFRADOS. Los sistemas de numeración babilónico y maya presentan la ventaja de
que son muy fáciles de aprender, puesto que usan un número limitado de símbolos (el babilónico la cuña vertical
u horizontal, y el maya el punto, la barra y el caparazón).
La humanidad prefirió un sistema posicional donde cada multiplicador tiene su propio aspecto, las cifras 1, 2, 3,
4, 5, 6, 7, 8 y 9. Esto es debido a que, una vez adoptado el sistema posicional, se buscó un sistema de signos
que facilitase la escritura y la verbalización de los números.
SISTEMA DECIMAL
47 602 083 = 4 x 10 000 000 + 7 x 1 000 000 + 6 x 100 000 + 0 x 10 000 + 2 x 1 000 + 0 x 100 + 8 x 10 + 3
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Expresión polinómica del número:
Considerando las diferentes órdenes de las unidades y el orden de las cifras de un número, es posible obtener la
expresión polinómica de un número, que consiste en escribirlo como suma de las sucesivas potencias de base
10 que lo constituyen.
Teniendo en cuenta lo anterior, se recogen de forma resumida los principios que organizan el sistema de
numeración decimal:
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1. ES DE BASE 10. Cada diez unidades de un orden constituyen una unidad de orden superior.
2. INTRODUCE EL EMPLEO DEL CERO. El cero indica ausencia de unidades en el lugar del orden donde se
encuentre.
3. ES ADITIVO. El valor que se representa en un número equivale a la suma de las cifras considerando su valor
de posición. Esto hace que el número también se pueda escribir como suma de sus unidades de diferente orden.
4. ES MULTIPLICATIVO. Cada una de las cifras del número es un factor que multiplica a una potencia de diez.
5. ES POSICIONAL. El valor de las cifras en el número es relativo, es decir, depende de su lugar de posición en
el mismo.
6. ORDEN EN LA POSICIÓN. Las cifras en el número están colocadas por su orden de derecha a izquierda, de
forma que la unidad tiene a su izquierda a la decena, ésta a la centena, y así sucesivamente.
- Puede dar lugar a cambiar el orden de las cifras en algunos números. Por ejemplo, 31 en vez de 13.
- Irregularidades en los nombres de los números. Once, doce, trece, catorce y quince no se corresponden con
los nombres de los que los siguen, en los que aparece una suma (diez y seis), o en el caso de las decenas:
veinte (dos dieces).
2. EL PAPEL DEL CERO. Al niño le resulta difícil ver que el cero ocupa un lugar y, por lo tanto, es una cifra
significativa. Como consecuencia puede leer el 402, por ejemplo, como cuarenta y dos, o, al revés, escribir
cuarenta y dos como 402.
- Cada unidad de un orden equivale a diez unidades del orden inmediatamente inferior.
- La repetición escrita lleva implícitas las operaciones de suma y multiplicación. Pensar simultáneamente en
una decena y en diez unidades es una tarea difícil para niños pequeños. Para comprender que un número de
dos dígitos se compone de decenas y unidades, el niño tiene que construir un segundo sistema, le de las
decenas, sobre el primer sistema, el de las unidades, y también requiere que el niño sintetice las relaciones de
orden e inclusión jerárquica.