Los 22 Pueblos
Los 22 Pueblos
Los 22 Pueblos
Su origen
La función de los pueblos indígenas estuvo, en los primeros años de la colonia,
relacionada con el concepto de reducción. Los pueblos surgieron en torno de los
antiguos centros de población; la fundación de pueblos es importante, porque el
número de ellos dependían del número de encomiendas que se podían adjuntar a
los conquistadores; dependía también del monto de los tributos que se
recolectaban, y finalmente, interesaba a la corona que las tierras recién adquiridas
estuviesen y no desiertas. De los pueblos que se fundaron, muchos prosperaron y
se conservan en la actualidad, sin embargo, larga es la lista de los pueblos que
encontramos mencionados en las crónicas coloniales y que hoy no existen ya;
“algunos de los pueblos ya extintos, fueron San Bartolomé la Costilla, Santo
Domingo Sinacamecayo, Santiago Cotzumalguapa, San Juan Perdido, Guaymoco,
Guaymango entre otros”.
Su vinculación genética, cultural con el pueblo Maya
El traje: Esa vistosa y colorida prenda típica de Guatemala y de otras regiones de
Mesoamérica, tuvo también su origen en el periodo posterior a la conquista, el
traje prehispánico fue mucho menos vistoso, pues consistía generalmente en un
taparrabo y a veces en unan tilma o especie de capa, sobre todo en las regiones
frías; también se llevaba un tocado de cabeza para protegerse del sol y
ocasionalmente sandalias, las mujeres gastaban un sayo de algodón en los climas
fríos mientras que en los lugares cálidos vestían solo una saya y llevaban el torso
descubierto.
Los indígenas fueron muchas veces renuentes a vivir reducidos en pueblos y así
se escapaban de ellos en cualquier ocasión, tal situación dio motivo a que los
conquistadores descubrieran sobre la necesidad de crear un traje distinto para
cada pueblo y así identificar a sus indígenas de su encomienda. Los diseños
originales dados por los españoles, estaban, a veces, en la enorme riqueza y
variedad de los propios trajes típicos de la península ibérica.
Religión: El aspecto religioso fue uno de los más drásticamente modificados en los
indígenas. Una de las cosas que más sorprendieron a los conquistadores de
Tenochtitlan, fue el observar las paredes de los templos gemelos de Huitzilopochtli
y Quetzalcoatl untadas de sangre seca, como resultado de los diarios ritos que se
hacían, como ofrenda a estos dioses.
La religión de los indígenas mesoamericanos consistía en aquella práctica
idolátrica de una diversidad de dioses. Debe tenerse en cuenta que para los
indígenas sus ídolos eran dioses en sí mismo y no una representación de ellos;
por este motivo fue relativamente fácil el destruir o sustituir tales deidades. Las
órdenes religiosas que tuvieron a su cargo, la predicación del evangelio de
Guatemala, fueron en un principio, la de los Dominicos, Franciscanos y
Mercedarios; posteriormente se sumaron muchas otras que reforzaron o
complementaron la tarea.
El celo apostólico fue grande ya que los frailes tuvieron que aprender la lengua de
los naturales, a efecto de predicarles con mayor eficiencia, esto no fue fácil ya que
muchos de estos fueron martirizados por los indígenas y otros fueron atacados en
altamar por piratas proveniente de los países que abrazaron la reforma de
protestante de Lutero, Calvino, Enrique III y otros.
Creencias: El sistema de creencias de los indígenas fue, quizá, los menos
afectados por la conquista cultural. Esto significa que permaneció y permanece
relativamente intacto, ya que se cree que las tradiciones se transmiten
principalmente por tradición oral. En familia, de padres a hijos y, con el conjunto de
creencias de un individuo o nación son intangibles y permanecen muy al fondo del
exterior, frecuentemente pasan desapercibidas sobre todo para un proceso de
transculturación formal.
Claros ejemplos de estas creencias son:
- Que la mujer tiene un efecto debilitante sobre lo masculino en general.
- Existe en el cuerpo un equilibrio entre calor y frio.
Lenguas: Estas prácticamente no sufrieron ningunas modificaciones y siguieron
hablándose en las mismas regiones, excepto porque agregaron a su léxico nuevas
voces provenientes del castellano, sobre todo aquellas que eran precisas para
nombrar a los elementos traídos por los europeos y que, por la misma razón no
tenían nombre las lenguas del país. Al presente año aún sobreviven en Guatemala
algunas lenguas que se derivaron del maya antiguo.
Su construcción histórica y socioeconómica en un modo de producción
históricamente determinado
La economía del reino de Guatemala siempre se basó en la agricultura, ya que la
región nunca fue rica en metales preciosos, salvo la región hondureña y eso
limitadamente. Haciendo uso de conceptos modernos es posible distinguir dos
sistemas agropecuarios no separados sino interdependientes: el comercio o
especulativo y el de consumo interno o no especulativo.
El primero incluyó la agricultura de exportación y unos pocos de consumo
mayoritario entre la población española (por ejemplo, el azúcar, el trigo, el ganado
mayor), que requerían una cierta inversión, y explotaciones agropecuarias de
algún tamaño, que eran propiedad de españoles y criollos.
El segundo estaba en manos de indígenas e incluían tanto productos de origen
americano (por ejemplo, maíz y frijol) como traídos de Europa (por ejemplo, trigo y
azúcar a partir del siglo XVII, cerdos, ovejas, gallinas, y algo más).
Agricultura comercial
La agricultura de exportación dependió siempre de un producto principal, que era
el que movía la economía a otorgar el efectivo que permitía efectuar las
importaciones de España. En la primera época de la colonia ese producto fue el
cacao, pero ya al final del siglo XVI entro en crisis, al compartir desfavorablemente
con el que los propios españoles producían en ecuador (Guayaquil) a menor
precio. Bien el cultivo de cacao no desapareció si dejo de ser el producto motor de
la economía. En sustitución llego el añil que se convirtió en los indios del XVII en
la base de la economía del reino. Sin embargo, después de 1630 entro en crisis
como resultado de la imposibilidad de exportarlo en las cantidades que se habían
venido produciendo.
La producción creció solo después de 1750 y alcanzo sus cifras más altas en la
última década de siglo. En los mejores años del siglo XVIII se habían exportado un
millón de libras, pero a partir de 1811 la aportación se estancó en alrededor de
450000 libras, no pasando de 350000 después de 1817 es probable que una parte
de la producción haya sido de contrabando por Belice.
Referencias:
1. Escobar Medrano, E. (1994). Antología: Historia de la Cultura de
Guatemala. Guatemala: 3a edición Cooperativa de Servicios Varios, Facultad de
Ciencias Económicas, Universidad de San Carlos.
2. MINISTERIO DE EDUCACIÓN, (1999). Historia Sinóptica de Guatemala.
Guatemala: Editorial fucude, Fundación para la Cultura y el Desarrollo y
H.C.G. Herencia Cultural Guatemala.
3. Akkeren, R. (2007). La visión Indígena de la conquista. Guatemala: Editorial
Serviprensa, S. A.