Se Egypt
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El análisis del léxico egipcio referente a la cópula revela un exceso de vocablos en contraste con el escaso
uso que se hace de ellos. Se deduce de esto que algunas voces podrían tener matices semánticos que no se
expresan en nuestras lenguas, relacionados, por ejemplo, con la posición adoptada durante el acto sexual. Es
el caso de verbos como amo y pAy, que en los pasajes estudiados se refieren a un coito a tergo, mientras que los
verbos nk y nhp lo hacen sólo en ciertas ocasiones. Iconográficamente, aun siendo el coito a tergo la postura
más representada, cabe eliminar, por comparación etnográfica, la posibilidad de que fuera la de uso más co-
mún. Así, cabe interpretar las imágenes documentadas en clave cultural, bien como representaciones satíricas
(humillación del personaje copulado o nkkw), bien como estampas cotidianas (“fantasías sexuales” de los
hombres egipcios, probables autores de las imágenes).
1. Los hebreos, al constituirse como pueblo, prohibieron todas las prácticas sexuales que no estaban destinadas a la re-
producción, por lo que quedaron completamente excluidas, entre otras, la masturbación y los actos homosexuales.
http://doi.org/10.25145/j.TdE.2009.05.02.09
Ésta depende de dos condicionantes: unos facto- evocado de manera metafórica7. A nivel iconográ-
res fisiológicos universales, regidos por el sistema fico, por el contrario, la documentación se encuen-
nervioso central y las hormonas, y unos factores tra básicamente en el ámbito laico, dentro del arte
psicológicos, que son inculcados por el aprendi- no oficial, sobre todo en ostraca localizados en el
zaje y los hábitos de cada cultura o sociedad2. Son poblado de artesanos de Deir el-Medina8. Las re-
estos últimos los que determinan la diversidad de presentaciones sexuales explícitas, en cambio, son
la sexualidad humana y es éste el motivo de la muy escasas en el ámbito sagrado; de hecho, están
pluralidad de comportamientos sexuales entre las limitadas al icono de la cópula entre Isis y Osiris9.
diferentes culturas3. A éste habría que añadir, a modo de excepción, la
representación de un coito en la tumba nº 140 de
En la sociedad occidental, la postura sexual “ofi- Beni Hassan (Reino Medio). En este caso, sin em-
cial” es aquella en la que el hombre yace encima bargo, la imagen es un signo jeroglífico que forma
de la mujer4. Pero esto no es igual en todos los parte de un texto criptográfico10.
colectivos. Un claro ejemplo se encuentra en los
estudios de Malinowski sobre la sexualidad de los En cuanto a las fuentes escritas es difícil extraer
trobriandeses. Él dice: “Los indígenas desprecian información sobre la postura coital que se está re-
particularmente la posición habitual de los euro- latando. A través de algunos textos se puede en-
peos, posición que juzgan poco práctica e indecen- trever que la posición más repetida en el ámbito
te”5. sagrado es aquella en la que la mujer yace estirada
debajo del hombre. En los Textos de los Ataúdes
Las principales fuentes de información para es- se dice:
tudiar la cópula en el antiguo Egipto son las tex-
tuales y las iconográficas, habiendo entre ambas Él copulará en esta tierra de noche (y) de día; (en-
una clara diferencia. El grueso de la documenta- tonces) el orgasmo11 de la mujer llegará debajo de él
cada vez que él copule12.
ción escrita se encuentra en los textos sagrados y
jurídicos, donde se alude al coito de manera to-
talmente explícita6. En cambio, en los textos lite- En cuanto a las relaciones sexuales entre Isis y
rarios, de carácter más profano, el acto sexual es Osiris, en un pasaje del pLouvre 3079 se dice:
33. nk sw aA nk aA Hmt=f. Grafito nº 11 del templo de Tutmosis III (Deir el-Bahari), Marciniak, 1974: 70, lám. XA;
pAshmolean Museum 1945.96, vº 6; Gardiner, 1940: pl VIIa. Este icono se encuentra documentado con posterioridad
en Heródoto (Historia, II, 46,4) y en un molde de Época Grecorromana perteneciente a una colección particular (Mi- [ 127 ]
chaïlidis, 1965: 139-160). En ambos casos se representa a un macho cabrío en vez de un burro.
34. BD 125 (pBM 10.477), “Yo no he copulado con un penetrado” (n nk=i nkk(w)). Aquí nkk(w) es un participio perfectivo
pasivo sustantivado. La pasividad demuestra que el individuo recibe la acción. Parece claro que nkk(w) se refiere a un
hombre sodomizado. Para actos homosexuales ver Parkinson, 1995: 57-76.
35. Tumba de Deshasha (Reino Antiguo). Capilla, pared oeste (PM IV, 122-123).
36. nhp in kA.
37. Es común este tipo de interacción entre escritura e iconografía. Ver Fischer, 1986: 27-28.
38. Para compendios iconográficos de las imágenes sexuales ver: Omlin, 1973; Manniche, 1988; Parra, 2001; Orriols,
2002.
39. Confirman esto Manniche, 1977: 22; Parra, 2001: 193.
40. Omlin, 1973.
Figura 2. Escena II, papiro de Turín 55.001 (Parra, 2001)
de la mujer (Escenas X y XII), en otra, ella está diferencia de lo que piensa Manniche41, creemos
sentada (Escena III), en otra más la mujer está que los antiguos egipcios conocían perfectamen-
encima del hombre (Escena VIII). Hay una es- te la relación directa entre el coito vaginal y el
cena en la que los dos amantes se encuentran de embarazo. Un claro ejemplo se encuentra en un
pie (Escena V) y, finalmente, una es de difícil fragmento de los Textos de las Pirámides, donde
interpretación (Escena XI). Isis y el rey (Osiris) conciben a Horus:
La primera duda que plantea este tipo de imagen Tu hermana Isis vino hacia ti alegrándose por tu
[ 128 ] es discernir ante qué clase de penetración nos ha- deseo (sexual). Tú la colocaste sobre tu falo (y) tu
llamos, ya que es muy difícil diferenciar en imá- semen entró en ella42.
genes bidimensionales si se está representando un
coito per vaginam o per anum. Este último ade- Otra prueba de esta afirmación es el hecho de
más de ser una variedad sexual que aporta distinto que los métodos anticonceptivos femeninos exis-
placer a los sujetos que lo practican, también pue- tentes son por vía vaginal43 o consisten en protec-
de ser empleado como método anticonceptivo. A ciones para la vagina44.
lidad una sola pareja, relacionando el personaje el British Museum52 (fig. 4). En él se representa
itifálico con el hombre de la cópula, y el noble a dos personajes. El individuo de la derecha,
con la mujer copulada. Dada la dualidad sexual aunque la imagen está muy fragmentada, parece
expresada por el binomio noble-mujer, la época ser un hombre que introduce su miembro viril
de la ejecución del grafito y la ubicación de la en el otro personaje. Éste se encuentra inclinado
imagen, sólo puede hacer referencia a la reina hacia adelante, apoyando sus brazos en un
Hatshepsut51. Está claro que estamos ante una objeto no identificado. El sexo del individuo
[ 130 ] imagen que recuerda el acto ya visto entre Seth postrado es muy discutible, por ser una figura
y Anat, donde la bisexualidad de los personajes asexuada53. Por un lado, lleva una peluca corta
nos puede hacer pensar en un coito per anum. y se le representa con pechos pequeños, por lo
que parecería un hombre. Por otro, la falta de
Otro posible caso de coito anal aparece en la representación del falo y los testículos puede
otro ostracon que se encuentra actualmente en hacer pensar que se trata de una mujer. Está
53. Algunos estudiosos también ponen en duda el sexo del personaje delantero. Ver Peck, 1978: 151, fig. 83; Houlihan,
2001: 130-131.
54. Parkinson, 1999: 171.
55. Toivari-Viitala, 2001: 144-145.
Figura 6. Escena I, papiro de Turín 55.001 (Parra, 2001)
En el mismo papiro de Turín, aparte de la ima- ñada de un texto que reproduce las palabras que
gen ya citada, se documentan dos coitos a tergo salen de la boca de la chica: “Quita (?) las cintas
más57. Ambos parecen representar al mismo hom- que has puesto en...”58.
bre penetrando por detrás a sendas muchachas.
Cabe destacar que, mientras que la posición de Se analizarán dos imágenes más de coito a
ellas es diferente en ambas imágenes, el hombre tergo, con una clara característica común: la
[ 132 ] adopta en los dos casos la misma postura: de pun- representación de la mujer con rasgos faciales
tillas asiendo con la mano derecha un saco que simiescos. No es fortuita la alusión a este ani-
apoya sobre su hombro izquierdo; la mano iz- mal en un icono de carácter sexual, ya que es
quierda, en la escena IX (fig. 5), coge el pelo de la frecuente su presencia en escenas con connota-
dama, mientras que en la escena I (fig. 6), pese a ciones sexuales o eróticas59. En la primera de las
estar en la misma posición, ésta queda suspendida imágenes (fig. 7)60, la penetración aún no se ha
en el aire. La imagen de la escena I va acompa- producido61, sino que se reproduce el momento
inmediatamente anterior a la misma, en que tan- que éste fuera el caso en el antiguo Egipto.
to el hombre como la mujer conducen el falo al Así, se deben buscar otras explicaciones para
orificio de destino, sin poderse deducir cuál es. el hecho de que se trate del tipo de cópula más
En el segundo caso (fig. 8)62, es difícil saber representado.
si la introducción del falo se ha producido o
no y por dónde, ya que esta vez, y de forma Al cotejar la diversa iconografía analizada, se
inusual, se representa a los personajes de for- pueden distinguir dos grupos de documentos que
ma semifrontal. representan el coito a tergo. Por un lado, un con-
junto tendría un carácter satírico (figs. 2, 3 y 4), en
Como se ha visto hasta ahora, el tipo de có- el que la penetración sería probablemente por vía
pula más representado iconográficamente en anal y simbolizaría la humillación del personaje
el antiguo Egipto es el coito posterior. A través sodomizado. El otro grupo simplemente consistiría
del léxico, también se ha podido ver que al- en representaciones de tipo cotidiano (figs. 5, 6, 7,
gunas palabras hacen referencia directa a este 8, 9 y 10). Los autores, privados de figurar escenas
tipo de coito (pAy y amo), mientras que otras con contenido sexual explícito en el arte oficial,
son menos explícitas en relación a la postura plasmarían en fragmentos de caliza sus “fanta- [ 133 ]
sexual adoptada (nk y nhp) pero admiten esta sías eróticas”64, sus propias experiencias sexuales
posibilidad. Con la información disponible, es o simples divertimientos eróticos. En este caso, el
difícil aseverar qué tipo de penetración era la orificio de entrada sería indiferente, aunque hay
más practicada por los antiguos egipcios. De que tener en cuenta que una penetración anal se-
hecho, un estudio sobre la conducta sexual hu- ría un eficaz método anticonceptivo. Pero hay otro
mana basado en 190 culturas actuales demues- tipo de información que puede extraerse de este se-
tra que este tipo de coito no es el más usado en gundo grupo: la autoría de los documentos. A prio-
ninguna de ellas63, por lo que es difícil pensar ri, estos documentos podrían haber sido ejecutados
[ 135 ]
68. Parra considera que ésta es la posición “oficial” sin tener en cuenta el tipo de documento. Parra, 2001: 189.
69. Tan sólo tres imágenes pertenecen a este tipo de coito, de las que una es muy dudosa.
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