DCC1934 T1
DCC1934 T1
DCC1934 T1
A N T E C E D E N T E S Y DEBATES
SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCION DE LA PROVINCIA
DE BUENOS AIRES Y LEY N° 4219
3 J
CONVENCION C O N S T I T U Y E N T E
AÑO 1934
ANTECEDENTES Y DEBATES
SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCION
DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES
Y
LEY N° 4219
TOMO I
LA PLATA
TALLER DE IM P R E S I O N E S OFIt_'IAl.KS
J936
BIBLIOTECA DE LA LEOM-ATUHA
37515
T « 4j » 12Q0 «tf IMC I W 1
T.1
\
RESOLUCION DEL SEÑOR PRESIDENTE DE LA HONORABLE
CONVENCION CONSTITUYENTE POR LA QUE DESIGNA LA
COMISION DE FUNCIONARIOS ENCARGADA DE LA RECO
PILACION Y PUBLICACION DE ANTECEDENTES SOBRE RE
FORMAS A LA CONSTITUCION Y DEBATE.
RESUELVE:
SECCION PRIMERA
Art. 17. Toda persona detenida podrá pedir, por sí ó por medio de
otra, que se le haga comparecer ante el juez mas inmediato, y espe
dido que sea el auto por autoridad competente, no podrá ser detenido
contra su voluntad si pasadas las veinticuatro horas no se !e hubiese
notificado por Juez igualmente competente la causa de su detención.
Todo Juez aunque lo sea en un Tribunal colejiado á quien se hicie
re esta petición ó se reclamase la garantía del artículo anterior, de
berá proceder en el término de veinticuatro horas contadas desde su
presentación con cargo auténtico, bajo multa de mil pesos fuertes.
Art. 18. Será eximida de prisión toda persona que diere fianza su
ficiente para responder de los daños y perjuicios, fuera de los casos
en que por el delito merezca pena corporal aflictiva cuya duración
esceda de dos años.
Art. 19. No se dictarán leyes que importen sentencia, que empeo
ran la condición de los acusados por hechos anteriores, priven de de
rechos adquiridos, ó alteren las Obligaciones de los contratos.
Art. 20. Todo habitante de la Provincia tiene el derecho de entrar
y salir del país, de ir y venir llevando consigo sus bienes, salvo el de
recho de tercero.
Art. 21. La correspondencia epistolar es inviolable. El que la viole
se hace reo de delito punible por la ley, la cual determinará en qué
casos y con qué justificaciones podrá procederse á ocuparla por man
dato del juez.
Art. 22. El domicilio de una persona no podrá ser allanado sino
por orden escrita de juez ó de las autoridades municipales encarga
das de vijilar la ejecución de los reglamentos de salubridad pública.
Art. 23. Ningún habitante de ¡a Provincia estará obligado á hacer
lo que la ’ey no manda, ni será privado de hacer lo que ella no prohíbe.
Art. 24. Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo
ofendan el orden público ni perjudiquen á un tercero están reser
vadas á Dios y exentas de la autoridad de los majistrados.
Art. 25. La libertad de trabajo, industria y comercio, es un dere
cho asegurado á todo habitante de la Provincia, siempre que no ofen
da ó perjudique á la moral ó á ia salubridad pública, ni sea contrario
á las leyes del pais ó á los derechos de tercero.
Art. 26. A ningún acusado se !e obligará á prestar juramento ni á
servir de testigo contra sí mismo en materia criminal ni será encau
sado des veces por un mismo delito.
Art. 27. Las cárceles son hechas para seguridad y no para mortifi
cación de los detenidos. Las penitenciarias serán reglamentadas de
manera que constituyan centros de trabajo y moralización. Todo ri
gor innecesario hace responsables á las autoridades que lo ejerzan.
Art. 28. La propiedad es inviolable, y ningún habitante de la Pro
vincia puede ser privado de ella sino en virtud de sentencia fundada
en ley. La espropiacion por causa de utilidad pública debe ser califi
cada por ley y préviamente indemnizada.
Art. 29. Se ratifica para siempre las leyes de libertad de vientres
y las que prohíben el tráfico de esclavos, la confiscación de bienes,
el tormento, las penas crueles, infamia trascendental, mayorazgos y
vinculaciones de toda especie, debiendo ser enajenable toda propiedad.
12 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
SECCION SEGUNDA
Réjimen Electoral
C A P ÍT U L O I
Disposiciones jenerales
C A P ÍT U L O II
SECCION TERCERA
Poder Lejislativo
C A P ÍT U L O I
C A P ÍT U L O II
D e la Cámara de D iputados
C A P ÍT U L O III
Del Senado
C A P IT U L O IV
C A P ÍT U L O V
C A P ÍT U L O VI
C A P ÍT U L O V il
De la Asamblea jeneral
SECCION CUARTA
Poder Ejecutivo
C A P ÍT U L O I
De su naturaleza y duración
C A P ÍT U L O TI
Tic la form a y del tiem po en que ha d>- ha ce rae bi elección de G obern ador ;t T iec^Gobcrnador
Art. 130. Si no hubiese sido posible obtener las dos terceras par
tes de actas por no haber concurrido á la elección algunas secciones,
el Presidente de la Asamblea lo comunicará inmediatamente al Po
der Ejecutivo para que éste, dando el tiempo necesario, convoque nue
vamente á elección á las secciones que no lo hubiesen verificado.
Art. 131. Quince dias después de las comunicaciones del nombra
miento á los ciudadanos que hubiesen obtenido mayoría, se reunirán
éstos en sesión preparatoria en la Sala de Sesiones de la Asamblea
Lejislativa, para resolver como Juez único sobre la validez de las
elecciones respectivas, á cuyo efecto el Presidente de la Asamblea
Lejislativa remitirá las actas orijinales con los rejistros y las pro
testas que se hubiesen acompañado.
La Asamblea se espedirá dentro de diez dias contados desde su
primera reunión en el exámen de las actas.
Art. 132. Si del juicio pronunciado en el exámen de actas re
sultare que no había dos terceras pártes de electores legalmente nom
brados, se procederá según lo prescripto en el artículo ciento trein
ta, decretándose nuevas elecciones donde hubiesen sido anuladas.
Art. 133. Ocho dias después de terminado definitivamente el exá
men de las actas, se reunirá la Convención electoral en la Capital
de la Provincia y en el local designado, necesitando para funcionar
dos terceras partes de los electores convocados cuyos diplomas hayan
sido aprobados: nombrará de su seno un Presidente y dos Secre
tarios y procederá cada Convencional á nombrar Gobernador y Vice-
Gobernador, por cédulas firmadas, espresando en una la persona por
quien vota para Gobernador y en otra para Vice-Gobernador.
El Presidente de la Asamblea electoral nombrará cuatro de sus
miembros para que reunidos á los dos Secretarios practiquen el es
crutinio comunicando el resultado al Presidente, quien anunciará á
la Asamblea el número de votos que hayan obtenido tales candidatos
y el nombre de los electores que hubiesen votado por ellos.
Los que hayan obtenido mayoría absoluta de sufrajios con rela
ción al número de electores presentes, serán inmediatamente procla
mados por el Presidente de la Convención Gobernador y Vice-Gober
nador de la Provincia.
Art. 134. Si por dividirse la votación no hubiese mayoría abso
luta en favor de un candidato, se repetirá la votación entre los que
hubiesen obtenido la primera y segunda mayoría.
En los casos de empate se repetirá la votación, y si resultare
nuevo empate decidirá el Presidente de la Convención.
Art. 135. La Convención terminará en una sola sesión el nom
bramiento de Gobernador y Vice-Gobernador y lo hará saber al Go
bernador cesante y al Presidente de la Asamblea Lejislativa, acom
pañando copia autorizada de la acta de la sesión á fin de que sea
comunicada á los electos.
Art. 136. Los que hayan resultado electos para Gobernador y
Vice-Gobernador deberán comunicar a la Convención electoral su
aceptación en los diez dias siguientes á aquel en que les fué comu
nicado su nombramiento.
La Convención electoral conocerá en las escusaciones que presen
ten los nombrados antes de tomar posesión del cargo, y en caso de
aceptarlas procederá inmediatamente á hacer una nueva elección.
24 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
C A P ÍT U L O lll
C A P ÍT U L O IV
C A P ÍT U L O V
C A P IT U L O v i
SECCION QUINTA
Poder Judicial
CAPÍTULO I
Art. 174. Toda causa por hecho calificado de crimen por la Ley
será juzgada con la intervención de dos Jurys: uno que declare si
hay lugar ó no a acusación, otro que decida si el acusado es ó no
culpable del hecho que se le imputa.
30 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
Justicia de Paz
C A P ÍT U L O II
Art. 184. Los Jueces letrados serán elejidos por el Poder Eje
cutivo con acuerdo del Senado.
Art. 185. Los Jueces letrados conservarán sus empleos mientras
dure su buena conducta.
Art. 186. Para ser Juez de la Suprema Corte de Justicia se
requiere: —
Ciudadanía en ejercicio, titulo ó diploma que acredite suficien
cia en la ciencia del derecho reconocido por autoridad competente
CONSTITUCIÓN DE LA PROVINCIA AÑO 1 8 7 3 31
C A P ÍT U L O III
Tribunales Militares
SECCION SESTA
5* Siempre que se haga uso del crédito será para obras señala
das de mejoramiento ó para casos eventuales y se votará una suma
anual para el servicio de la deuda.
6* Las enajenaciones solo podrán hacerse en remate público
anunciado con un mes de anticipación.
7* Siempre que hubiere de construirse una obra municipal de
cualquier jénero que fuere, con tal que hubieren de invertirse fon
dos del común, la Municipalidad nombrará una comisión de propie
tarios del distrito ó de la ciudad para que la desempeñe y dirija bajo
cuenta y razón de todos los gastos y empleo de fondos que se con
sagren á ella.
8* Las obras públicas deberán sacarse siempre á licitación.
9° La aprobación de las cuentas no podrá hacerse por los que
las rindan.
Art. 204. Los Municipios, los Cuerpos municipales, los miem
bros de estos y los funcionarios nombrados por ellos están sujetos
á las responsabilidades siguientes:
1" Los Cuerpos municipales responden ante los Tribunales or
dinarios de sus omisiones y de sus transgresiones á la Constitu
ción y á las Leyes; la ley de la materia señalará la sanción penal de
esta transgresión.
2* Los miembros de los Cuerpos Municipales y los demás fun
cionarios municipales responden personalmente, no solo de cual
quier acto definido y penado por la ley, sino también de los daños
y perjuicios que provengan de la falta de cumplimiento á sus de
beres.
3? Los miembros de los Cuerpos municipales están sujetos á
destitución por mala conducta ó despilfarro notorio de los fondos
municipales sin perjuicio de las responsabilidades civiles ó crimina
les en que incurran por estas causas.
4* La solicitud de destitución deberá ser hecha por diez vecinos
del Municipio mayores de veintidós años y presentada ante el Juez
del Crimen de primera instancia del Departamento á que pertenecie
re el acusado.
5* Recibida la solicitud por el referido Juez del Crimen, se tras
ladará al Municipio del acusado dentro de ocho dias, sino tuviese
en él el asiento del Juzgado, convocará un jurado doble en número
al de esa Municipalidad que dentro de ocho dias fallará la causa
al solo efecto de destituir al acusado ó declarar que no hay lugar á
la destitución. Este fallo será inapelable.
6* La ley de la materia determinará la elección, procedimiento
y calidad de los jurados.
SECCION SEPTIMA
Educación Coman
In s tr u c c ió n s e cu n d a ria y su p erio r
SECCION OCTAVA
De la Reforma de la Constitución
SECCION NOVENA
Disposiciones Transitorias
J osé JI . J u r a d o — F ú t i l R c r n a l — D e l fí n R . H u ergo
— J o s é M . M o r í n o — A d o l fo A ln in a — ( itrios E n c in a —
E z e q u ie l A. P treg ru — P ed ro (i ag í m i— J o s é S e r illo
V ázqu ez— J osé M a n u el E stra d a — M a n u el O b a r r io —
Juan J. M o n tes de O ca— M a n u el TI. L a n g r n h e im —
A n t o n i o E . M a ’a v c r — A d o l f o I n s ia r te — A le jo Ti. <Ton-
z a lr z — F r a n c i s c o A lc o b e n d a s — J u a n J. R om ero— M a
r ia n o M a r ín — J o s é T. fíu id n — M ig u e l V ille g a s — L u is
S a n z P e ñ a — P e d r o D . Q u i r o g a — A d o l fo R a w s o n — D a r
do R o c h a — L u is V. V a r e t a — J u lio Ti u ñ e z— E z e q u i e l
N . P a z — N o r b e r t o Q u i r n o C o s ta — F e lic ia n o C a ja r a v ille
— S is to V ille g a s — R e r n a r d o d e J r ig o g e n — J u a n M a r io
G u tié r r e z — V ic e n te F. L ó p ez — R u fin o de E liz a ld r —
S a n t ia g o A lc o r t a — J o s é M . M o r a le s — R a m ó n B . M u ñ iz
'o s é A . O c a n t o s .
D ieg oArana.
Secretario.
Es copia fiel del original
MANUEL QUINTANA
Presidente
D ie c o A ran a.
Secretario
40 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
Diciembre 16 de 187:j.
CONSTITUCION
D E LA
SECCION SEGUNDA
Régimen electoral
C A P ÍT U L O I
Art. 58. Toda elección deberá terminarse en un solo día, sin que
las autoridades puedan suspenderla por ningún motivo.
Art. 59. Se votará personalmente y por boletas en que consten los
nombres de los candidatos.
Art. 60. Ningún ciudadano inscripto que no haya sido movilizado,
podrá ser citado ni retenido para el servicio militar ordinario desde
quince días antes (por lo menos) de las elecciones, hasta ocho días
después de estas.
Art. 61. No podrá votar la tropa de línea, ni ningún individuo que
forme parte de la policía de seguridad.
Art. 62. Las mesas receptoras de votos tendrán á su cargo el or
den inmediato del colegio electoral, durante el ejercicio de sus fun
ciones y para conservarlo ó restablecerlo podrán requerir el auxilio
de la fuerza pública.
SECCION TERCERA
Poder Lejislativo
C A P ÍT U L O I
D e la L e j is l a t u r a
C A P ÍT U L O II
D e la C á m a r a d e D i p u t a d o s
C A P ÍT U L O III
D el S enad o
C A P ÍT U L O IV
Art. 96. Cada cámara tendrá jurisdicción para corregir los actos
que atenten contra su autoridad, dignidad é independencia y contra
las inmunidades de sus miembros. La ley definirá los casos y las
penas para la aplicación de este artículo.
Art. 97. Al aceptar el cargo los diputados y senadores, jurarán
por Dios y por la Pátria desempeñarlo fielmente.
Art. 98. Los senadores y diputados gozarán de una remunera
ción determinada por la legislatura.
C A P ÍT U L O V
CAPlTTLO vi
P r o c e d im ie n to ijara la fo r m a c ió n de las le y e s
SECCION CUARTA
Poder Ejecutivo
C A P ÍT U L O I
D e su n a tu ra leza )i d u r a c ió n
C A P ÍT C L O II
E le c c ió n , de G obern ad or
C A P ÍT U L O III
A tr ib u e io n c / i d el P o d e r E je c u tiv o
C A P ÍT U L O IV
D e lo s M i n i s t r o s s e c r e t a r i o s d e l d e s p a c h o gen era l
CAPÍTULO V
CAPÍTULO V I
D e l F is c a l d e E s ta d o , C o n ta d o r y T esorero de la P r o v in c ia
SECCION QUINTA
Poder Judicial
C A P ÍT U L O I
C A P ÍT U L O II
A t r i b u c i o n e s d e la S u p r e m a C o rte d e J u s tic ia
CAPITULO III
C A P ÍT U L O IV
A d m i n i s t r a c i ó n d e J u s t i c i a e n lo c r im in a l
Art. 176. Toda causa por hecho calificado de crimen por la ley
será juzgada con la intervención de dos jurys; uno que declare si hay
lugar <3 nó á acusación, otro que decida si el acusado es ó nó cul
pable del hecho que se le imputa.
Art. 177. La ley organizará los tribunales que deban aplicar el
derecho en materia criminal, el modo y form a como deben consti
tuirse los jurys y el procedimiento que deba observarse.
Art. 178. Las sentencias que pronuncien los jueces y tribunales
letrados en lo civil, comercial, criminal y correccional, serán funda
das en el texto expreso de la ley, y á falta de éste en los principios
jurídicos de la legislación vigente en la materia respectiva, y en de
fecto de éstos en los principios generales del derecho teniendo en
consideración las circunstancias del caso.
Art. 179. La legislatura puede modificar las bases establecidas en
el artíeulo ciento setenta y seis para el enjuiciamiento por dos jurys
en las causas criminales, por mayoria de votos, si en la práctica ofre-
64 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
C A P ÍT U L O V
Justicia de Paz
C A P ÍT U L O VI
CAPÍTULO VII
T r i b u n a l e s m ilit a r e s
SECCION SESTA
SECCION SEPTIMA
C A P ÍT U L O I
C A P Í T I f t /O II
Educación común
C A P ÍT U L O III
SECCION OCTAVA
De la reforma de la Constitución
SECCION NOVENA
Disposiciones Transitorias
A D IT A R D O H E R E D IA
Presidente.
M a n u e l B . Go n n e t ,
V ice-Presidcnte 1?
II
III
IV
VI
VII
VIII
IX
Insisto, señores legisladores, hoy con más rigor que nunca, que
se impone una sabia y previsora revisión constitucional que la adap
te a las nuevas exigencias y a la sorprendente evolución que en todos
los órdenes se ha operado en la Provincia.
Ella es consecuencia de sabias deliberaciones que supieron ilus
trarla los hombres más eminentes de la República, pero la experien
cia ha constatado que hay que reajustarla, haciéndola más flexible
para que las iniciativas legislativas que consulten necesidades del
momento puedan desenvolverse sin el tropiezo de cláusulas rígidas
y que ya no tienen razón de ser.
Se impone igualmente con caracteres impostergables la sanción
de nuevas leyes de procedimiento que terminen con los formulismos
anticuados y con los recursos dilatorios que hacen interminables la
solución de los litigios.
Con dicho propósito, el Poder Ejecutivo ha designado una co
misión compuesta por eminentes juristas, la que dentro de breve
plazo presentará el proyecto respectivo que será sometido a Vuestra
Honorabilidad.
100 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
M E N S A JE
A la Honorable Legislatura:
El Poder Ejecutivo tiene el honor de dirigirse a Vuestra Honora
bilidad de acuerdo con la facultad que le otorga el artículo 216 de la
Constitución, adjuntando un proyecto de ley por el que se declara
necesaria la reforma de la Carta Fundamental de la Provincia.
Esta iniciativa, anunciada ya en el Mensaje inaugural del l 9 de
mayo de 1926 y repetida en los subsiguientes, condensa un deseo co
lectivo firmemente sustentado cuya satisfacción no puede demorarse
por más tiempo sin peligro de que la ley que informa la vida institu
cional de Buenos Aires, que por su propia esencia debe ser instru
mento eficaz de progreso, desvirtúe en la práctica tan alta finalidad.
Fruto de extensas deliberaciones realizadas por Asambleas diver
sas que no mantuvieron entre sí la necesaria unidad de pensamiento,
102 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE ASO 1 9 3 4 .
II
III
IV
VI
VII
VIII
IX
PROYECTO DE LE Y
ción del padrón provincial, acto político que los desnaturaliza y los
convierte en escenarios propicios al encuentro de las pasiones. Con
la reforma proyectada se les quitaría automáticamente tal inter
vención política y quedarían reducidos a lo que deben ser: cuerpos
puramente administrativos.
d) Supresión de muchos actos electorales. Este aspecto de la
reforma constitucional ha merecido de parte de la opinión pública
la más franca y calurosa acogida. Militan, en efecto, razones so
ciales, económicas y políticas para espaciar los plazos de las elec
ciones, suprimiendo algunas y manteniendo un solo acto electoral
cada cuatro años, en el cual se renovarían íntegramente los Pode
res Ejecutivo y Legislativo y los Concejos Municipales.
Vive nuestra Provincia agitada por las contiendas electorales,
que alejan a los ciudadanos de sus normales actividades y mantie
nen en permanente trajín a los comités políticos, lo que obliga a
los dirigentes de las agrupaciones en pugna, especialmente a los
que son legisladores, a desatender sus delicadas funciones públicas,
pues están constantemente solicitados por las exigencias partida
rias. La reforma que el Poder Ejecutivo propuso a Vuestra Hono
rabilidad terminaría con estos inconvenientes y muchos otros fá
cilmente discernibles, y una gran cantidad de argentinos aptos se
ocuparian en cosas provechosas para la colectividad: toda esa masa
que hoy vive siempre esperando la próxima elección para obtener
algún provecho personal.
Estas y otras cuestiones tan importantes como oportunas con
templa la iniciativa del Poder Ejecutivo que hoy termina su pe
ríodo de ley, por lo que es de esperar que Vuestra Honorabilidad
prestará a la iniciativa su inteligente y patriótica atención, con lo
cual habrá proporcionado a la Provincia uno de los más grandes
y positivos beneficios.
Convención Constituyente — 8
Proyecto de Ley de los señores Diputados Eduardo Sáenz, Ernesto
Weigel Muñoz, Juan Hunter, Rufino Basavilbaso, Silverio
López Osomio, Vicente Lobeira, Joaquín Castellanos, For
mando Saguier, Odilón U. Núñez, Domingo F. Arguas, Ramón,
Méndez, Pedro P. Belderrain.
(Diario de Sesiones de la H. C. de Diputados, año 1895, páginas 118 y 119).
diez diputados o por cinco senadores, sea por iniciativa del Poder
Ejecutivo; pero sólo será tomada en consideración cuando los tres
quintos de votos de cada una de las Cámaras declaren la necesidad
de la enmienda».
El señor senador Weigel Muñoz deduce de esta palabra «enmien
da» que la constitución actual admite las enmiendas parciales. Sin
embargo, si se examina bien el artículo, aparece claro que enmienda
es sinónimo de reforma. No se puede deducir, por consiguiente, de
la forma en que está redactado el artículo, que la constitución actual
admite las enmiendas parciales.
Se ha invocado por el señor senador Weigel Muñoz lo estable
cido en la mayor parte de las constituciones que siguen el sistema
norteamericano; pero a ese argumento se contesta con lo siguiente:
las teorías pueden ser muy bellas, pero los cuerpos legislativos no
pueden separarse del derecho positivo.
Tenemos una constitución que nos determina la forma en que debe
reformársela, y es un deber de lealtad para con ella cumplirla en
todas sus partes, porque de otra manera la constitución que se dic
tara empezaría por ser viciada desde su comienzo.
Los Poderes Públicos en los pueblos representativos, son limita
dos; la constitución es la que determina sus atribuciones, sus facul
tades y sus derechos; y de manera que para saber si un cuerpo
cualquiera tiene una facultad, no hay más que acudir a la constitu
ción y buscarla.
Si acudimos a la constitución que nos rige y buscamos cual es
la cláusula que autoriza a la Legislatura a establecer las únicas en
miendas que debe tratar la convención constituyente, nos encontra
mos con que tal artículo no existe, y por tanto debe negarse a la
Legislatura el derecho de determinar esas enmiendas.
Por otra parte, elegida la convención constituyente, ella es la que
representa la soberanía del pueblo, por delegación, y si la Legislatura
determinara las enmiendas que debe hacer esa convención constitu
yente, nos expondríamos a que, una vez reunida, ella dijera: no
tengo por qué someterme a la ley dictada; de acuerdo con los princi
pios de nuestro sistema de gobierno, yo soy soberano y puedo dispo
ner lo que quiera, como lo dispone el artículo 217 de la constitución,
que dice: «Esta convención se reunirá tres meses después de hecha
U convocatoria, con el objeto de revisar, alterar o enmendar esta
constitución; y lo que ella resuelva por mayoría, será pi~omulgado
como la expresión de la voluntad del pueblo, necesitando para funcio
nar la mayoria absoluta de la totalidad de sus miembros».
Se indica que hay peligro en dejar a una convención constituyente
el que pueda entrar a considerar ampliamente las reformas que sean
necesarias.
Yo creo que hay más peligro, mucho más peligro, señor Presiden
te, en determinar las enmiendas, en ponerle un círculo del cual no
pueda salir.
Si existiera el peligro de que la convención, una vez reunida,
defraudara las esperanzas patrióticas que los Poderes Públicos de la
Provincia tienen acerca de ella, mejor sería no convocarla. Yo creo
que los pueblos, y especialmente el nuestro, tienen la capacidad su-
/j? !
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN / $1/
_____________________________________ | O
ri 1 x
\ m
ficiente para darse cuenta de sus necesidades; y el P. E. espera
si la Legislatura convoca a una convención constituyente, todos
hombres, todos los círculos, todos los partidos políticos, han de dejW’'»
de lado las pequeñas pasiones, para no inspirarse sino en la noblfK,
y elevada pasión del patriotismo y que los convencionales elegidos,
inspirándose en las necesidades del presente y del futuro, han de
realizar mejoras que aseguren los destinos de la Provincia.
Por estas razones, el P. E. consecuente con lo sostenido anterior
mente por él en el proyecto presentado a la Legislatura en 1878, va
a someter a la H. Cámara de Senadores, en sustitución del proyecto
de ley presentado por el señor senador Weigel Muñoz, el que voy a
tener el honor de presentar, y que es, como he dicho, el mismo que
fué sometido en 1878.
He dicho.
Se lee:
P R O Y E C T O D E L E Y D E L P . E.
(Del Diario de Sesiones del H. Senado, año 1901, páginas 348 a 353)
APROBACION EN PARTICULAR
VI
IV
— Se lee:
LEY:
IV
Considerando:
Que la necesidad de la reforma de la Constitución vigente en la
Provincia, ha sido reconocida, sucesivamente por todos los gobernan
tes que han ejercido el Poder Ejecutivo, desde que ella fué promul
gada;
Que, a fin de hacerla efectiva, la Honorable Legislatura de la Pro
vincia hizo oficialmente la declaración constitucional de la necesidad
de esa reforma, la que fué ratificada por el pueblo en el plebiscito a
que fué convocado al efecto;
Que dictada por la Asamblea Legislativa la resolución de mayo 16
de 1902, convocando una Convención ad, hoc, se produjeron las eleccio
nes de convencionales, en 27 de julio de 1902;
Que, no habiendo hecho la Honorable Legislatura de la Provin
cia el escrutinio de esas elecciones, dentro del período marcado por la
misma ley, el Poder Ejecutivo convocó a nuevas elecciones, las que
tuvieron lugar el 30 de octubre de 1904;
Que la Suprema Corte de la Provincia, por fallo de 18 de no
viembre de 1904, declaró nulas esas elecciones, no habiéndose produ
cido, con posterioridad a ese fallo, acto oficial alguno que modifique
la situación del asunto;
Que no es posible que, estando de acuerdo el Poder Ejecutivo, la
Legislatura y el pueblo de la Provincia, en que, para su mayor bien
estar y mejor gobierno, es necesario reformar la Constitución vigen
te, esta reforma esté suspendida por falta de acción de parte de los
poderes públicos, que deben producir los actos preparatorios para la
reunión de la Convención reformadora;
Que la situación actual de la Provincia, en que no existen moti
vos de agitaciones políticas, es la más oportuna para que la reforma
constitucional se lleve a cabo, libre de la influencia de los partidos y
de los intereses transitorios;
140 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
El Poder Ejecutivo —
decreta:
SECCIÓN PRIMERA
DISPOSICIONES GENERALES
A rtículo I o (vigente)
A rtículo 2o (vigente)
Todo poder público emana del pueblo; y así éste puede alte
rar o reformar la presente Constitución, siempre que el bien común
lo exija y en la forma que por ella se establece.
A rtículo 3o (vigente)
A rtículo 4o (reformado)
A rtículo 19 (nuevo)
La Legislatura no podrá iniciar leyes que importen gastos ni
aumentos de sueldos en la administración de la Provincia. Tampo
co podrá una sola Cámara de la Legislatura votar gastos, ni aun
cuando fueran para su propio servicio.
A rtículo 20 (nuevo)
Toda ley, fuera de la de presupuesto, que importe un gasto o
una erogación, deberá crear los fondos especiales con que aquéllos
han de ser atendidos, siempre que no hubiese excedente en el cálcu
lo de recursos hecho por el Poder Ejecutivo.
A rtículo 21 (nuevo)
En todos los casos que se produzcan, en que sea necesaria la
acción de la autoridad, y no exista ninguna disposición constitu
cional autoritativa o prohibitiva, la Legislatura podrá dictar las le
yes necesarias para dar la autoridad y solución requeridas al caso
imprevisto.
A rtículo 22 (nuevo)
Ningún servicio, comisión o empleo, desempeñado en virtud de
ley o de decreto, será gratuito. Los que los desempeñen tendrán de
recho para exigir una indemnización equitativa, en proporción a los
servicios que hubieran prestado.
A rtículo 23 (nuevo)
La Legislatura y el Poder Ejecutivo, aplicarán e interpretarán
esta Constitución, al ejercitar las facultades políticas que ella les con
fiere, sin que sus decisiones puedan ser controvertidas ante los
tribunales.
A rtículo 24 (nuevo)
Los tribunales de justicia no tienen jurisdicción para decidir
cuestiones abstractas de derecho, ni para juzgar de la constitu-
cionalidad de una ley, decreto, ordenanza o reglamento, sino cuando
se trate de su aplicación concreta a un caso contencioso.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 145
A rtículo 25 (nuevo)
Los extranjeros no naturalizados, que se hallen radicados en la
Provincia, paguen contribuciones territoriales por valor d e. . . pe
sos, se hubiesen casado con mujer argentina y tuviesen hijos na
cidos en el país, podrán votar en las elecciones políticas de la Pro
vincia, sin más requisitos que los de acreditar aquellos extremos, e
inscribirse en el registro respectivo. En la ley electoral, se regla
mentará este artículo.
SECCIÓN SEGUNDA
RÉGIMEN ELECTORAL
§ 1. E l empadronamiento
A rtículo 28 (nuevo)
A rtículo 29 (nuevo)
Los Registros Electorales serán formados y llevados por los
oficiales (jefes) de las oficinas del Registro del Estado Civil en
cada distrito (partido) y deberán contener:
I o La nómina de todos los ciudadanos inscriptos en las listas
del servicio militar, con arreglo a las leyes nacionales de la
materia;
2o La nómina de todos los ciudadanos que, no estando obliga
dos a enrolarse, ocurran voluntariamente a inscribirse a las
oficinas del Registro del Estado Civil, justificando el carác
ter que invocan con su fe de bautismo o inscripción civil co
rrespondiente;
S° Los extranjeros, a quienes la ley autorice a votar, con arre
glo a lo dispuesto en el artículo 25 los que deberán hacerse
inscribir personalmente en el Registro Electoral, haciendo
constar los extremos que establezcan las leyes respectivas.
A rtículo 30 (nuevo)
Los Registros Electorales permanecerán abiertos todo el año pa
ra la inscripción de los electores que se encuentren en las condicio
nes del artículo anterior; pero sólo tendrán derecho a votar, en cada
elección, las personas que estuviesen inscriptas en ellos diez días
antes de las elecciones en que deben votar.
A rtículo 31 (nuevo)
A rtículo 32 (nuevo)
A rtículo 33 (nuevo)
Una vez hecha la división a que se refiere el artículo anterior,
ella no podrá ser alterada sino después de cada nuevo censo; salvo
el caso en que por haberse cambiado el sistema de elecciones, su
alteración fuera indispensable.
Los nuevos partidos que se crearen, antes de la realización de
un nuevo censo, serán anexados al distrito electoral más inmediato.
A rtículo 34 (nuevo)
A rtículo 35 (nuevo)
A rtículo 37 (nuevo)
A rtículo 38 (nuevo)
La Junta Electoral, a que se refiere él artículo anterior, tendrá
a su cargo todo lo referen te a formación de padrones electorales
y reclamos sobre empadronamientos; la designación de escrutado
res por sorteo entre los inscriptos de cada distrito que sepan leer
correctamente; los escrutinios de todas las elecciones que se prac-
148 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1 9 3 4
A rtículo 39 (nuevo)
Los oficiales del Registro del Estado Civil, en todo lo referente
al Registro Electoral, dependerán directamente de la Junta Electo
ral Permanente, creada por esta Constitución, en cuyas oficinas de
berá siempre existir una copia auténtica de todos los registros elec
torales de la Provincia. La primera vez, los oficiales del Registro
del Estado Civil remitirán a esta Junta los padrones que organicen
con arreglo a esta Constitución, a los tres meses de instalada la ofi
cina respectiva.
A rtículo 40 (nuevo)
Siempre que se trate de los escrutinios de elecciones de dipu
tados y senadores a la Legislatura, la Junta Electoral Permanente
setá integrada por los presidentes de todas las Cámaras de Apela
ciones que existan en la provincia, siendo su traslación y permanen
cia en la capital a cargo del tesoro público.
A rtículo 41 (nuevo)
La Junta Electoral Permanente deberá practicar los escruti
nios de las elecciones, dentro de los veinte dios posteriores a su ce
lebración, siendo su deber juzgar y decidir sobre la validez del acto
electoral.
Ese fallo, con todos sus antecedentes, será elevado a la corpora
ción para cuya integración se hubiesen practicado las elecciones, a
los efectos de los juicios definitivos que corresponden a aquélla con
arreglo a esta Constitución.
A rtículo 42 (nuevo)
Cuando alguno de los miembros de la Junta Electoral Perma
nente tenga impedimento para concurrir a las reuniones en que de
ban hacerce escrutinios, deberá ponerlo en conocimiento de su reem
plazante legal, quien deberá reemplazarle provisoriamente. Toda au
sencia injustificada, en estos casos, será penada con quinientos pesos
de multa. La justificación deberá hacerse ante la asamblea a la que
corresponda el juicio def initivo del escrutinio.
A rtículo 43 (nuevo)
Cuando lleguen los plazos en que deban reunirse los cuerpos de
liberantes, sin que la Junta Electoral Permanente haya hecho el
escrutinio correspondiente, el cuerpo a que pertenezcan los funcio
narios, que han debido elegirse, se abocará directamente el asunto,
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 149
A rtículo 44 (nuevo)
A rtículo 46 (nuevo)
§ 4. Disposiciones transitorias
Artículo 50 (nuevo)
En tanto la Legislatura no reforme la ley electoral vigente, de
acuerdo con las prescripciones de esta Constitución, el Poder Eje
cutivo convocará a todas las elecciones, modificando por decretos
aquella ley, para aplicar a los padrones, nombramientos de escruta
dores y escrutinios, las disposiciones contenidas en la sección Régi
men Electoral.
A rtículo 51 (nuevo)
Mientras no se adopte definitivamente el sistema electoral que
ha de practicarse en la provincia, todas las elecciones se harán por
el de la lista incompleta, a cuyo efecto se formarán secciones elec
torales que elijan seis diputados y tres senadores, no teniendo cada
elector el derecho de votar sino por listas en que figuren cuatro
candidatos para diputados y dos para senadores.
La Junta Electoral Permanente, hecho el escrutinio a simple plu
ralidad de votos, proclamará electos los seis diputados y tres sena
dores que hubiesen obtenido mayoría de sufragios.
SECCIÓN TERCERA
PODER LEGISLATIVO
CAPITULO I
De la Legislatura
CAPÍTULO II
Del juicio político
El fallo del Senado, en estos casos, no tendrá más efecto que des
tituir al acusado y aun declararlo incapaz de ocupar ningún puesto de
honor o a sueldo de la Provincia.
Ningún acusado podrá ser declarado culpable, sin una mayoría de
dos tercios de votos de los miembros presentes.
Deberá votarse, en estos casos, nominalmente y registrarse en el
diario de sesiones el voto de cada senador.
CAPÍTULO III
Atribuciches del Poder Legislativo
CAPÍTULO IV
A rtículo 83 (nuevo)
Artículo 84 (nuevo)
A rtículo 85 (nuevo)
A rtículo 86 (nuevo)
A rtículo 87 (nuevo)
A rtículo 88 (nuevo)
Los contadores que sean empleados en la Contaduría General,
pueden formar parte de la Oficina de Revisación de Cuentas.
A rtículo 89 (nuevo)
La Oficina de Revisación deberá expedirse, en todos los casos
dentro de los seis meses posteriores a la presentación de las cuentas
que debe examinar.
CAPÍTULO V
Educación del pueblo
A rtículo 91 (nuevo)
CAPÍTULO VI
A rtículo 94 (nuevo)
Artículo 95 (nuevo)
No podrá iniciarse en una Cámara un proyecto de ley sobre la
misma materia o con el mismo objeto que sirviese de base a otro
proyecto de ley ya presentado en la otra Cámara, y del que se hubiese
dado cuenta en sesión, aun cuando su discusión no hubiese comen
zado. Si la Cámara en que se presentó el proyecto, no se ocupase de
él dos meses después de su presentación, la otra podrá ocuparse del
mismo asunto como Cámara iniciadora.
CAPÍTULO V II
DE LA ASAMBLEA GENERAL
SECCIÓN CUARTA
PODER EJECUTIVO
CAPÍTULO I
De su naturaleza y duración
CAPÍTULO II
Elección de gobernador
Para ser elector se exigen los mismos requisitos que para ser
diputado.
No podrán ser electores los diputados o senadores, tanto de la
Nación como de la Provincia.
CAPÍTULO V
SECCIÓN QUINTA
PODER JUDICIAL
CAPÍTULO I
deducidas de los haberes más próximos que los jueces multados de
ban percibir. Esta acción podrá ejercerla cualquiera interesado que
haya intervenido en el asunto en que el magistrado incurrió en la
multa.
CAPÍTULO II
CAPITULO III
CAPÍTULO IV
CAPÍTULO V
De la Justicia de Paz
CAPÍTULO VI
Tribunales Militares
SECCIÓN SEXTA
SECCIÓN SÉPTIMA
DE LA REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN
I -R O Y E C T O DE LKY
FUNDAM ENTOS
Señor Presidente:
La Nación está en paz. La Provincia de Buenos Aires parte
integrante de esta virtuosa República, goza de los beneficios emer
gentes de ese estado de tranquilidad, propicio para las más gratas
evocaciones de todo orden. Al amparo de ese bienestar, conquistado
por el esfuerzo común de todos sus habitantes, puede consagrarse al
estudio sereno, meditado y patriótico de sus instituciones fundamen
tales, para ajustarlas al ritmo de las aspiraciones y necesidades que
la población alienta sinceramente como un anhelo supremo de mejo
rarse a sí misma por el camino de la quietud institucional, dentro
de los límites que nos señala el concepto elevado del bien, sin alejarnos
de la órbita que la Carta Magna nos ha señalado para el desarrollo de
nuestra labor, como Estado libre y soberano.
Con arreglo a estos sentimientos, inspirados en el profundo amor
a la Provincia de nuestros más caros afectos, y en el ferviente deseo
de proporcionarle — por el sendero del orden y de la paz— los ele
mentos renovadores necesarios para el acrecentamiento de su gran
deza y de sus instituciones, tengo el alto honor de presentar a la con
sideración de la Honorable Cámara, el adjunto proyecto de reformas
a la Constitución de la Provincia, en la esperanza de consultar con
justeea y fidelidad los anhelos de todos los que en una u otra forma
se hallan vinculados en la tarea de trabajar incesantemente por el
perfeccionamiento de nuestras instituciones democráticas, que cons
tituyen la esencia misma del régimen republicano representativo en
cuya virtud desempeñamos tan nobles y elevados mandatos populares.
Separada y oportunamente, daré en cada caso, las razones que a
mi modesto juicio fundamentan la necesidad de la reforma que pro
picio. Todo ello — a pesar de mi juventud— es la resultante única y
exclusiva de la experiencia recogida en la práctica de las instituciones
que nos rigen. Hay — entre las modificaciones al estatuto de la Pro
vincia— iniciativas que no me pertenecen. Otros ciudadanos, patrió
ticamente imbuidos de estos mismos ideales, sugirieron en su momento,
la necesidad impostergable de abordar el problema de la reforma cons
titucional. Circunstancias que no es del caso mencionar, obstaron para
que ellas prosperaran con arreglo a los propósitos determinantes de
sus autores. En cumplimiento de un principio de lealtad y de justicia,
que los ciudadanos jamás deben olvidar, a fuer de ingratos, menciona
ré en cada caso, los antecedentes que ilustran las iniciativas referidas.
Estamos ahora, señores diputados, lejos de las grandes luchas
comiciales que agitan las pasiones y conturban los espíritus más se
renos y ponderables. La Nación ha terminado hace poco, con los re
sultados conocidos, el problema de la renovación de sus primeras ma
gistraturas. La Provincia ha hecho lo propio hace muy pocos meses.
El momento y el ambiente de paz y de tranquilidad espiritual y polí
tica que en estos instantes se respira por doquier, hace factible y
conveniente la oportunidad de la reforma que se proyecta. La Hono
rable Convención Constituyente que surja del actual estado psíquico
e intelectual del país podrá con ánimo sereno y desapasionado consa
grarse a la superior misión de incorporar a nuestra Carta Magna,
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 189
.IC E < ¡0 . H IP Ó D R O M O S , C A S IN O S , L O T E R ÍA S
A S IL O S PARA A N C IA N O S , IN V Á L ID O S , H UÉRFANOS V D E SA M PA R A D O S
O R G A N IZ A C IO N JC R ÍD IC A PE LOS P A R T ID O S P O L ÍT IC O S
EL CEN SO P R O V I N C IA L
E L E C C IÓ N I)E GOBERNADOS T V IC E
CO N FLICTO S M UN ICIPALES
C O N S E J O S E SC OLA RES
Por el inciso 59, artículo 213, capítulo 2V, sección séptima, se es
tablece que «la administración local y el gobierno inmediato de las
escuelas, en cuanto no afecte la parte técnica, estarán a cargo de con
sejos electivos de vecinos de cada municipio de la Provincia. Las
condiciones que deben reunir los electores serán las mismas que para
elegir municipales, y las condiciones de elegibilidad y formación de
los Consejos, serán las mismas de las municipalidades».
Por las razones invocadas al fundamentar la reforma del Régimen
Municipal, en cuanto a la oportunidad de elegir todo el mismo día y
duración de los mandatos por cuatro años, considero conveniente que
los Consejos Escolares, sean designados simultáneamente y con idén
tica duración en sus cargos. En un día, la provincia habrá elegido a
todos sus poderes electivos, con los beneficios que ello traerá para
el civismo bonaerense.
200 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
A lfred o D e m a r c h i . M a n u e l G. B o n o r in o .
M L. del Carril, R icardo M. G arcía,
Secretario del Senado. Secretario de la H. C. de DD.
Departamento de Gobierno.
La Plata, noviembre 21 de 1901.
Art. 1’ . . .
Art. 2’ Convócase también para el mismo día, a todas las sec
ciones electorales en que se encuentra dividida la provincia, a
efecto de que los ciudadanos hábiles manifiesten su voto por la
reforma o no de la Constitución.
Art. 3’ Comuniqúese, publíquege e insértese en el Registro
Oficial.
B E R N A R D O I>F. J R ÍÜ O Y E X
G e n sér ick R a m ír e z.
PROYECTO DE R E S O L V C I Ó N
La Asamblea Legislativa —
RESUELVE:
ESCRUTINIO
Número Votos
1 C am pana......................................................... 539
2 General Rodríguez ........ -........................... 235
3 General Sarmiento ..................................... 378
4 Las Conchas ................................................. 627
5 Navarro ........................................................ 1552
6 San Martín ................................................... 1049
7 San F e rn a n d o ............................................... 1289
8 Suipacha ....................................................... 774
9 Merlo .............................................................. 410
10 Almirante Brown ....................................... 432
11 Brandsen ...................................................... 868
12 Cañuelas ........................................................ 786
13 Florencio Várela ....................................... —
14 La Plata ........................................................ 4550
15 Lomas de Zamora ....................................... 2440
16 Quilmes .......................................................... 1405
17 San Vicente .................................................. 907
18 Morón ............................................................ 560
19 Lobos .............................................................. 996
20 Moreno .......................................................... 40s5
21 San Isidro .................................................... 410
22 Bragado ................................................. 1865
23 Carmen de Areco ....................................... 728
■24 Chivilcoy ......................................................... 2826
25 Chacabuco ............................................... 1592
26 Colón .............................................................. 543
27 General Pinto ............................................... 1208
28 Junín .............................................................. 1724
29 Lincoln ............................................................ 2317
30 9 de Julio ...................................................... 2325
31 Rojas .............................................................. 1160
32 San Andrés de Giles ................................... 1750
33 Salto .............................................................. 1341
34 Trenque Lauquen ......................................... 1499
35 Azul ................................................................ 1219
36 Castelli .......................................................... 494
37 DoJpres .......................................................... 672
38 General Alvear ............................................. 28
39 General C o n e s a ............................................. 425
40 General G u id o ............................................... 535
41 Pila ................................................................ 494
206 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 193 4
Número Votos
42 Rauch ......................................................... 878
43 Tapalqué .................................................... 638
44 Tuyú .......................................................... 651
45 Pergamino ................................................ 489
46 San Pedro .................................................. 119
47 Baradero .................................................... 172
48 Juárez ........................................................ 312
49 General Pringles ....................................... 164
50 Coronel Suárez .......................................... 239
51 Necochea .................................................... 245
52 Bahía Blanca ............................................. 151
53 Villarino .................................... 148
54 Marcos P a z .................................................. 599
55 Barracas al Sud ......................................... 1563
56 Bolívar ........................................................ 1894
57 Pehuajó ...................................................... 1924
58 25 de Mayo ................................................. 2622
59 Chascomús ................................................. 406
60 General Belgrano ........................................ 616
61 General Paz ................................................ 1213
62 Saladillo ..................................................... 1516
El Poder Ejecutivo—
d ecreta :
S r . P alacios — ¿ Me permite ? . . .
Antes de seguir adelante, yo haría indicación para que se votara,
por lo menos, la primera parte de la moción del señor Diputado,
a objeto de no engolfarnos en una larga discusión.
S r . Oliver E.— He pedido que se lea por Secretaría el artículo.
No he dicho que haya terminado de hablar.
Sr. P alacios — Yo insisto en mi indicación: es previa la moción
del señor diputado Rosende Mitre para declarar que esta Asamblea
se constituya en sesión permanente.
S r. P residente — Haré presente a la Asamblea que la moción del
señor diputado Rosende Mitre no puede discutirse por partes y
votarse en esa forma mientras él no la divida.
S r . L ópez Cabanillas — Le pediría que la dividiera por partes.
S r . R osende M itre— No tengo inconveniente.
S r . P residente — Sírvase indicar el señor Diputado qué parte
quiere que se ponga en discusión.
S r . R osende M itre — Que la Asamblea se constituya en sesión
permanente.
Sr . P residente — Está en discusión esa parte de la moción.
S r. B ianco — Y o desearía hacer una indicación que me parece va
a ser aceptada por la Honorable Asamblea, que consiste, ante todo
y sobre todo, en que adoptemos algún reglamento. . .
C o n v e n c ió ,-; C o n s t it u y e n t e — 14
210 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
La Plata,septiembre 14 de 1904.
A la Honorable Asamblea Legislativa:
Vuestra Comisión en mayoría, designada para aconsejar el tem
peramento a seguir en vista de los antecedentes presentados en esta
ocasión, y teniendo en cuenta las dos proposiciones sometidas a su
estudio, os aconseja la sanción del adjunto proyecto de resolución
por los fundamentos que se acompañan en seguida.
Dios guarde a V. H.
A. Eehagüe, J. M. Vega, Alberto Rosende Mitre, OuSlfrmo
A. Martínez, Mariano Maldonado, P. ( i nenaga, T. López
Cabanilla».
La Asamblea Legislativa—
CONSIDERANDO:
La Asamblea Legislativa—
RESUELVE:
Septiembre 14 de 1904.
Honorable Asamblea.
Vuestra comisión especial se ha expedido en minoría en el asunto
cuyo estudio le fué sometido, y, por las razones que dará el miembro
informante, os aconseja la sanción de la siguiente —
RESOLUCIÓN:
Pido la p a la b ra .
¡?R. L u n a —
En nombre de la minoría de la comisión, voy a fundar su des
pacho.
La última parte del informe de la mayoría, que se refiere a la
convocatoria que debe hacerse para nueva elección de convencionales,
no ha sido materia de discusión en el seno de la comisión. La minoría,
por su parte, debe declarar que no está tampoco de acuerdo con ese
punto.
Empezaré por lo que es materia de la primera parte del informe
que acabamos de oír.
La minoría de la comisión considera que, habiendo transcurrido
más de dos años desde la época en que la Provincia manifestó su
opinión en favor de la reforma de la carta constitucional, esa
manifestación ha caducado, como asimismo la elección que se prac
ticó en aquel año el 30 de marzo. No habiendo sido considerada esa
elección por la asamblea, como procede por la constitución, ha que
dado sin efecto. Los convencionales electos por ella no han podido
reunirse a llenar su cometido, no habiendo, la asamblea, pasádoles
su nombramiento de tales.
Tenemos, pues, que de hecho han caducado y quedado sin efecto
tanto el plebiscito como la elección de convencionales, que fué su
consecuencia.
La comisión en minoría, para formar su opinión, no ha necesi
tado recurrir a autores extranjeros ni nacionales, por cuanto sabe
que los actos de la asamblea deben ajustarse estrictamente a las
disposiciones de la constitución, que es su ley y a la cual debe
subordinar todos sus procedimientos.
La constitución no ha establecido el término después del cual de
ben caducar las manifestaciones de opinión hechas por los plebiscitos,
ni tampoco ha establecido el término después del cual quedan sin
efecto las elecciones de convencionales, por no haberse hecho el
respectivo escrutinio ni haberse reunido la convención. Es solamente
por una ley especial que se puede resolver esa caducidad.
Pero es de suponer que aun cuando la constitución no ha fijado
término para producir esos efectos, esas manifestaciones del pueblo
2 22 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
había que optar por una. Fuá en ese caso que manifesté que no se
podía entrar a examinar si eran o no válidos los padrones, y pedí
que el examen se circunscribiese únicamente a las exterioridades
legales, entre ellas, la firma de los escrutadores, etc.
Esto fué en el año de 1898, y a consecuencia de no haberse acep
tado esa doctrina, tanto el que habla como sus correligionarios polí
ticos, se vieron obligados a tomar un vapor e irse a tierra extranjera
con el objeto de dejar sin quorum a la asamblea.
Y en 1902, el caso era distinto. Entonces se querían pasar actas
con exterioridades manifiestamente falsas; y se querían pasar bajo
el pretexto de la teoría que yo había sentado en 1898; es decir, que
trataban de cubrir un contrabando de guerra con la bandera que yo
había levantado en otra época.
Fué, entonces, que protesté, exclamando: ¡ A dónde vamos a parar!
Se presentaba una acta, y se decía: Tal escrutador ha muerto; no
puede haber firmado, porque está aquí la partida de defunción. La
Asamblea no tiene derecho de intervenir en eso, se d ijo : Pero ¿cómo
no vamos a intervenir? Tenemos el derecho de examinar todo lo que
se refiere a las exterioridades, sobre todo en caso de duda o de
comicios dobles.
Pero todas estas aparentes contradicciones no tienen nada que
ver con este caso, porque se trata de elecciones que nadie ha impug
nado. contra las que no hay protestas.
Sr . Oliver E.— Considero, señor Presidente, que la resolución
aconsejada por la mayoría de la Comisión ad hoc es perfectamente
inconstitucional.
Creo quo los artículos de la constitución nó admiten interpreta
ción. Las reglas de la hermenéutica se emplean en los casos obscuros,
en los casos dudosos; en los casos claros se lee y se aplica el texto.
El artículo 217 de la constitución no voy a estudiarlo nuevamente
después de la lucida exposición que acaba de hacer el doctor Weigel,
y en cuanto al inciso 6" del artículo 109, en mi pobre opinión, es
muy terminante también.
Creo que si se adopta la resolución aconsejada por la mayoría de
la Comisión, correremos un verdadero peligro: puede producirse un
verdadero conflicto para las instituciones de la Provincia: podemos
llegar hasta la intervención del poder Nacional que vendría a resta
blecer el funcionamiento legítimo de esas instituciones.
Bastaría, en mi opinión, que una minoría de esta Honorable
Asamblea solicitase la intervención para que ella viniera, pues ya
tenemos antecedentes dentro de la misma provincia de Buenos Aires
para poder hacer esa solicitud al gobierno de la Nación.
Creo también, que cualquiera de los ciudadanos cuyo nombre
figura en la lista de convencionales que la Comisión quiere anular,
tendría el derecho de ir a la Suprema Corte de la Provincia, diciendo
que se les quita un derecho, porque no se ha hecho el escrutinio de
la elección; que no habiéndose hecho ese escrutinio no puede anu
larse; y seguramente la Suprema Corte tendría que tomar en cuenta
el derecho invocado y tendríamos entonces que se haría una elección
de convencionales que llevaría el pecado original de su inconsti-
tucionalidad.
2C0 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
tismo más sano, hayan dictado las cláusulas que los comprende —
no debemos rehuir su varonil examen. — ( Muy bien!)
Recuerdo a este propósito, una brillante disertación del actual
Ministro del Interior. Cuando fundó en la Cámara de Diputados
de la Nación, el proyecto de ley electoral, decía, haciendo una de esas
figuras literarias que le han dado fama en el mundo de las letras,
sin perjuicio de ir saturadas de profundo espíritu político, que es
justo reconocerle, que las nociones constitucionales de un pueblo,
pueden compararse a los grandes camalotes que suavemente arras
tran las corrientes del Paraná, de vegetación exuberante, que en
apariencia marchan a merced de las ondas pasajeras, pero cuyas
raíces llegan al limo que los alimenta, que, en nuestro caso, es la
esencia de la nacionalidad argentina!
Y aquí, amparando la insuficiencia de mi palabra, escudando la
insignificancia de mi opinión, con esa opinión que es verdaderamente
autorizada, puedo decir que la constitución de Euenos Aires, que va
a ser reformada, recordando una frase de Jameson, no va a excitar,
no va a despertar siquiera el temor de que pueda ser atacada como
institución fundamental de un estado federal de la República, por
que no habría porteño, no habría argentino capaz de llevar al cuerpo
de nuestras leyes madres, pasiones mezquinas. Tampoco quien se
atreva a encontrar el más leve vestigio, en los artículos de nuestra
carta fundamental, de ningún propósito pequeño, ni rastrero, por
que hay que hacer honor a la nacionalidad, hay que tener en cuenta
que, cuando los convencionales se reúnen en congreso para sancionar
la ley sustantiva que rige las actividades de la vida institucional y
política de la Nación, se inspiran en los grandes ejemplos del pasado,
en los altos ideales del bien y del progreso, para esta tierra feliz,
lo que no es posible olvidar, si se quiere ser digno de los proceres
que nos han dado patria con honor, que nos han dado historia! —
(¡M uy bien !).
Yo no sé si es mucho coraje aludir también a Wilson, pensador
norteamericano, cuando decía que en un congreso es más fácil en
contrar quien quiera disfrazar sus opiniones que confesarlas a luz
del día, cuando a eso llevan, sobre todo, las contingencias de la vida
política y la defensa de los eminentes intereses generales.
Hay que tener ese valor.
Si alguna obscuridad presenta, que para mí no la tiene, el artículo
217 de la constitución, cuando habla de que esta Honorable Asamblea
sólo tiene facultad para hacer el escrutinio, esa duda debe resolverse
por lo más favorable. Y ¿qué sería lo más favorable en este caso?
¿someter a nuevas alternativas eleccionarias el prestigio de la refor
ma de la constitución, cuyos errores no pueden llegar a subsanarse
cuanto antes, por estas trabas de pequeños detalles?
Empalmar la elección de convencionales con la de senadores y
diputados, en marzo del año que viene, cuando estaremos a punto de
tratar otros problemas que afectan hondamente el orden político del
Estado, importa, quizá hacer fracasar éste, que es el pensamiento
dominante de nuestro espíritu, el deseo más legítimo de nuestros
corazones; pues que así lo hemos declarado todos, sin distinción de
partidos: la reforma de la constitución de manera que se asegure
236 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 193 4
RESUELVE:
DECRETA:
Art. I 9 Apruébanse las elecciones de convencionales verificadas
el 30 de octubre del corriente año en la primera, segunda, tercera,
cuarta, quinta y sexta secciones electorales.
Art. 29 Declárase electos convencionales:
Personería
Nuestra personería emana del carácter de ciudadanos argen
tinos inscriptos en el Registro Cívico bajo los números..............
de las secciones.................. de esta capital. Y decimos que emana
nuestra personería de ese carácter, porque, según el artículo
51 de la Constitución, la atribución del sufragio es un derecho
que debe ejercitarse con arreglo a las disposiciones de aquélla, y,
por consecuencia, nadie puede ser obligado a emitir su voto en un
acto electoral que infrinja dichas prescripciones. (Fallos y senten
cias de esa Suprema Corte, tomo 4’ , página 398, serie 4*).
V. E., en el fallo citado, ha establecido que tiene personería para
deducir demanda de inconstitucionalidad de una ley o decreto, aná
loga a la impugnada, todo ciudadano que tenga calidad de elector.
Además, es notorio y consta en las actas de la elección de con
vencionales de 25 de julio de 1902, que fué uno de nosotros candidato
en la lista única que se votó, y, por consiguiente, que, si el escrutinio
se practicara, resultaría electo, lo cual le permitiría abrigar la espe
ranza de formar parte de la convención y servir a la Provincia,
desempeñando una de las más altas y honoríficas funciones que
puede ejercer un ciudadano, como es la de concurrir directamente
a modelar la estructura fundamental de la sociedad política.
Ha hecho camino, indebidamente, el concepto engañoso de que
no existen candidatos electos mientras no se hayan practicado los
escrutinios respectivos. El es científicamente inexacto. El resultado
de un escrutinio, la proclamación hecha por el cuerpo escrutador,
no crea para los candidatos, el carácter de «electos». Esa proclama
ción no es sino declarativa de un hecho ya existente. La condición
de electo no nace sino en virtud de un fíat de los escrutadores. Los
escrutadores no efectúan la elección. Las enunciaciones de los re
gistros electorales no constituyen una caligrafía sin sentido ni valor
alguno, hasta el momento que el escrutinio las verifica y las con
sagra. Ellas crean, en favor de quien figura en esos registros
como candidato, una probabilidad y una ventaja consiguiente que.
como toda ventaja legítima, lleva aparejado un derecho de no ser
despojado de ella arbitrariamente.
Esta breve exposición pone de manifiesto que nos encontramos
comprendidos en los términos del artículo 339 del Código de Pro
cedimientos, que se refiere a los casos en que las autoridades pú
blicas dicten decretos, y las partes interesadas comprendidas en sus
disposiciones y a quienes deban aplicarse, se consideren agraviadas
por ser contrarios a derechos o garantías que estén acordados por
alguna cláusula de la Constitución.
Competencia
¿Tiene jurisdicción V. E. para entender de la queja por incons
titucionalidad que deducimos, tratándose de una cuestión política?
La afirmativa se impone en presencia de los fallos dictados por
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 243
Antecedentes
Cuestiones
Fundamentos
AUTO
CONSIDERANDO:
En disidencia
considerando:
CONTESTACION A LA DEMANDA
POR EL SEÑOR ASESOR DE GOBIERNO
II
J ulio B. V elar .
A U T O
CONSIDERANDO:
Ante rrü —
Héctor Perdriel.
MEMORIA DE LA DEMANDA
to principal del litigio, sino que se alega como argumento que concurre
a hacer valer el derecho gestionado; la parte contraria es, por regia
general, una persona civil, y la Suprema Corte no reconoce de la
inconstitucionalidad sino por incidente, en grado de apelación, y
cuando le es indispensable para pronunciarse sobre la cuestión prin
cipal.
En el orden provincial basta para producir el caso, que una
ley, decreto, etcétera, lesione los intereses pecuniarios, políticos, mo
rales o religiosos garantizados por alguna cláusula constitucional;
la demanda tiene por objeto principal la inconstitucionalidad misma;
se sustancia siempre con el poder público o autoridad que produce el
acto impugnado, y la Suprema Corte puede conocer el caso, originaria
mente, y declarar invalidada la ley, decreto, etcétera, no sólo con
relación al caso particular, sino también en todos los demás, desde
que se le declara nulo e insubsistente y desde que sea materialmente
imposible restringirlo al actor.
En una palabra, tanto en la Nación como en la Provincia, las
atribuciones de la Suprema Corte son casi iguales en lo referente
a sus facultades para pronunciar la inconstitucionalidad, conociendo
del asunto en grado de apelación o por medio de un recurso, pero
en la Provincia la Corte puede conocer originaria y directamente
de una demanda o queja de inconstitucionalidad que se sustancia con
los poderes públicos o autoridades que produjeron el acto impug
nado, de la cual atribución carece la Suprema Corte Federal. (1)
Como se ve, la Constitución de la Nación y de la Provincia pre
sentan diferencias notables por lo que respecta a la competencia y
jurisdicción del Poder Judicial, y es verdaderamente una superche
ría invocar la jurisprudencia del tribunal federal para desconocer
jurisdicción a V. E. en este caso.
No está en tela de juicio apreciar si la institución judicial de
la Provincia responde mejor a la doctrina norteamericana que la
federal; pero demostrará su ignorancia o su mala fe quien afirme
que la organización judicial en los estados que componen la Unión
Sudamericana, es exactamente igual a la creada por la Constitución
de los Estados Unidos.
«En algunos estados, dice Harrison en su obra titulada: «Go
bierno y administración de los Estados Unidos», traducida por el
doctor Carrié, página 384, se ha sancionado disposiciones por las
cuales se pueden someter cuestiones abstractas a sus cortes su
premas.
Ante m í: —
77tetar P m lrM .
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 289
Considerando:
Por ley de 18 de Noviembre de 1901, la Honorable Legislatura,
declaró la necesidad de la reforma constitucional y de acuerdo con lo
que dispone el artículo 217 de la Constitución, ordenó se efectuara
el plebiscito a que dicha disposición se refiere.
Con fecha 30 de Marzo del año siguiente, día fijado para la
elección de Diputados y Senadores, se sometió a los electores a fin
de que votasen en pro o en contra de la convocatoria de una Conven
ción Constituyente, y practicado el correspondiente escrutinio, por
la Honorable Asamblea Legislativa, en Mayo 15 de 1902, de confor
midad con lo preceptuado por el inciso 6" del artículo 109 de la
Constitución, del que resultó, que la mayoría había votado por la
reforma, resolvió la misma Asamblea, convocar una Convención, f i
jando para reunirse, el 15 de Agosto del mismo año, en el recinto
de la Legislatura, procediendo así en uso de la facultad conferida
por el recordado artículo 217.
Dando cumplimiento al expresado mandato, el Poder Ejecutivo
con fecha 16 de Mayo hizo la correspondiente convocatoria a eleccio
nes de convencionales, las que tuvieron lugar el día 27 de Julio del
mismo año. La Honorable Asamblea, no se reunió para practicar el
escrutinio de esa elección, cuya función le correspondía según el in
ciso 69 del artículo 109 de la Constitución.
En 14 de Setiembre del corriente año, la Asamblea con el ob
jeto de llevar adelante la reforma constitucional, declaró que en vista
del tiempo transcurrido, desde la expiración del plazo fijado para
la convocatoria de la Convención, como también de que había ven
cido con exceso el término que el artículo 217 de la Constitución fija
para que aquella pudiera legalmente reunirse; la convocatoria de
15 de Mayo había caducado y que por lo tanto la elección de 27 de
Julio de aquel año, debe desecharse por ser ineficaz y de ningún
valor.
Consecuente la Asamblea con esa decisión, y de conformidad
con la ley que declaró la necesidad de la reforma y del plebiscito
que la ratificó, resolvió convocar una nueva Convención Constitu
yente, fijando para su reunión el día 14 de Diciembre del año actual.
Ahora bien; de las objeciones hechas por los demandantes a
la aludida resolución de la Asamblea, resulta que la cuestión so
metida a juicio puede concretarse én la siguiente proposición;
¿Tiene la Asamblea Legislativa, facultad para declarar la caducidad
de la convocatoria a una Convención Constituyente, después de la elec
ción de convencionales y convocar a una nueva Convención sin haber
practicado el escrutinio de dicha elección?
El fundamento de la resolución impugnada, se apoya en el he
cho de haber vencido el plazo establecido para la convocatoria (15
de Agosto de 1902) y el que fija el artículo 217 de la Constitución.
La Asamblea, en presencia del citado precepto constitucional ha
debido abstenerse como lo ha hecho de practicar el escrutinio, por
haber pasado la oportunidad de hacerlo: y con ello, no ha infringido
C o n v e n c ió n C o n s t it u t e n t e — iq
290 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1 9 3 4
Ante m í:—
Héctor Ptrdrirl.
CAPITULO IV
PROYECTO, DEBATES Y SANCION DE LA LEY QUE DECLARO
LA NECESIDAD DE LA REFORMA DE LA CONSTITUCION
(1932- 1934).
FUNDAM ENTOS
ii. — i ' n i p i c a c u Sn de e le c c io n e s
I M . -----R E G I M E N MUNICIPAL
V I . ----- PODER JU D IC IA L
VII. •— P A D R Ó N EL EC TO RA L .
— Se lee: i
Honorable Senado:
Vuestra Comisión de Negocios Constitucionales ha estudiado el ^
presente proyecto de reformas a la Constitución de la Provincia de
Buenos Aires y por ajustarse al procedimiento fijado en la Sección
Octava del estatuto provincial, y por las razones que os dará el miem
bro informante de la mencionada comisión, os aconseja le prestéis
vuestra sanción.
Dios guarde a Vuestra Honorabilidad.
Afilio Rnncornni, M a nu el X . Martínez.
— Se lee:
— Se lee:
S r. P residente — Se va a votar.
— Se vota y el señor Secretario Villa Abrille pro
clama afirmativa de m&s de tres quintos.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 311
— Se le e :
Art. 4" Las mesas escrutadores de los distritos serán las mismas
designadas para la última elección de senadores y diputados.
Sr. Roncoroni — Debe decir «para la próxima elección de sena
dores y diputados».
Sr. P residente — Se va a leer nuevamente con la modificación.
— Se le e :
Art. 4" Las mesas escrutadoras de los distritos serán las mismas
designadas para la próxima elección de senadores y diputados.
Sr. Presidente — Se va a votar el artículo 49 con la modificación
propuesta por la Comisión.
— Se vota y el señor Seeretnrio Villa Abrille pro
clama afirm ativa de más de tres quintos.
— Se le e :
— Se lee:
PROYECTO DE L E Y , EN REVISIÓN
Honorable Cámara:
Vuestra comisión de negocios constitucionales ha estudiado el pro
yecto en revisión sobre reformas a la constitución, y por las razo
nes que expondrá su miembro informante, os aconseja le prestéis su
aprobación.
Dios guarde a Vuestra Honorabilidad.
Sala de la comisión, l'-* de febrero de 1934.
Arturo de Tineenzi. Juan B. Onuaechra, Dominim Sidoti,
Roberto X. Lobo*. Enrique Juan Limo.
En disidencia :
A n to n io P u rirelli.
Sr . L o b o s — Pido la palabra.
La comisión de negocios constitucionales de que form o parte, ha
contemplado y ha discutido en la reunión de hoy las objeciones fo r
muladas por el señor diputado Puricelli, representante de la minoría.
Yo no soy de los que creen que los vicios o defectos de los gobier
nos de los pueblos puedan modificarse cambiándose la letra de la
constitución. Desgraciadamente, cuando se producen situaciones
anormales, los gobiernos son malos porque violan la letra o el espí
ritu de la constitución. La constitución actual de la provincia no
puede menos de ponderarse y debe alabarse la obra de los constitu
yentes.
Después de las asambleas constituyentes de 1853 y de 1860, co
rresponde a la convención de la provincia de 1871 el mérito de haber
realizado el esfuerzo más ponderado para consolidar las instituciones
gubernativas. La actual constitución, que procede de aquella conven
ción — y cuya armazón fué corregida en detalle en 1889 por última
vez — permite, sin duda, un amplio desenvolvimiento de las fuerzas
sociales y económicas, concentradas en el inmenso y privilegiado te
rritorio que constituye la provincia de Buenos Aires.
La reforma de la constitución es un acto de soberanía ejercido por
el pueblo, como depositario del poder. Los códigos fundamentales no
son intangibles. Sus previsiones han sido el fruto de notables inteli
gencias, pero pueden estar en pugna con las exigencias nacidas de
la evolución, de la transformación de las costumbres y las nuevas
orientaciones del pensamiento. El funcionamiento de sus propias
normas y la aplicación de las mismas, sugiere enseñanzas que, pau
latinamente, van originando críticas y dan asidero a modificaciones
encaminadas a adaptarlas a las actuales exigencias de la vida.
La conveniencia, pues, de introducir modificaciones de acuerdo
con lo aconsejado por la experiencia, es hoy generalmente aceptada, la
opinión pública ha manifestado su manera de pensar en otras oportu
nidades, y los gobiernos han oído esa opinión pública, en la forma
que expuso el señor diputado Sidoti, miembro informante de la co
misión.
El proyecto que ha sancionado el senado y que actualmente está a
consideración de la honorable cámara declara la necesidad de la re
forma de la constitución, de acuerdo a lo que prescribe el artículo
216 de la misma; y no hay duda de que es un asunto de capital im
portancia, como es siempre la enmienda de la carta magna de un es
tado.
Los argumentos que se hacen en contra del proyecto de la refor
ma son de dos clases. Uno, que no se han mencionado expresamente
los motivos de carácter urgente que recomiendan las modificaciones
a introducirse en la constitución. Se ha dicho que la ausencia de esos
motivos fundamentales bastaría para demostrar que no hay una ra
zón imperiosa que haga procedente la modificación. Sin embargo, a
cada rato — y lo ha reconocido también el representante de la mi
noría — surge la exigencia de esta reforma, de corregir los pequeños
detalles de la constitución, que hacen que los gobiernos respetuosos
de ella deban encaminarse muchas veces por senderos que no sean
los más útiles para el pueblo de la provincia.
C o n v e n c ió n C o n s t it u y e n t e — ai
3 22 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
lo que les parece mejor en vez de obtener lo que los otros les presen
tan como mejor. Añádase a esto que cuerpos tales, independientes de
una manera legal como las legislaturas de estado, lejos de estar dis
puestos a ceder ante uno y otro son más celosos, vanidosos y punti
llosos que la mayoría de los individuos. Unicamente un fuerte espí
ritu de partido, comprometido en la consecución de fines políticos co
munes o en vista de beneficios individuales, que pueden ser la con
secuencia de una victoria de partido, pueden hacerles obrar concerta
damente».
En este momento en que nosotros recogemos un anhelo que se
ha expresado por diversos órganos: los poderes públicos, la prensa,
la cátedra universitaria, un anhelo que fué imperioso apenas sancio
nada la Constitución y que a través del tiempo, va acrecentándose
cada vez más. No podemos renunciar por vanas resistencias, cuan
do contamos con la mayoría necesaria en el Senado y en la Cámara de
Diputados, a hacerlo efectivo y sin vacilaciones no3 entregamos a la
tarea de reformar la Constitución, asumiendo toda la responsabilidad
de nuestra actitud, porque no consideramos atendibles los razona
mientos que se dan en contra de nuestro sano y elevado propósito.
Si bien el Senado no ha establecido en el texto de su declaración
cuáles son los puntes sobre los cuales deberá versar la reforma de la
Constitución, ha concretado en los fundamentos ocho cuestiones pa
ra proponer a la convención constituyente.
Voy a analizar, señor Presidente, someramente, algunas de ellas,
para demostrar lo que he afirmado respecto a la necesidad, pública
mente sentida, de que la Legislatura aborde las reformas de la Cons
titución. La primera de ellas consiste en propiciar la elección direc
ta de Gobernador y Vice de la Provincia. Hasta hoy, la elección se
ha hecho por el sistema de segundo grado, sistema anacrónico, que
se ha prestado a la más acerba crítica unánime de todos los consti-
tucionalistas del país. Sistema que fué tomado de la Constitución de
los Estados Unidos, donde, prácticamente, ha sido abandonado, si
guiendo los consejos de la experiencia. Colegios electorales en los
cuales la habilidad política ha llegado, a veces, a extremos tales que
los ha hecho repudiables a la opinión pública, colegios electorales en
los cuales la maniobra electoralista ha logrado frecuentemente la
anulación de la voluntad de las mayorías electoras.
Ha propuesto, como segundo punto, el de la unificación de las
elecciones. Yo pregunto si no es necesaria una reforma que evite la
inusitada frecuencia con que se consulta al pueblo para la Consti
tución de los poderes políticos, restándole las energías necesarias a
su actividad laboriosa y si es verdad o no que la excesiva repetición
de actos electorales en la Provincia de Buenos Aires, fomenta el pro
fesionalismo político y desvía a muchos ciudadanos de las prácticas
honradas del trabajo.
En cuanto a las atribuciones de los poderes Ejecutivo y Legis
lativo, tiende la proposición más que a nada, a quitar, en parte, al
poder legislativo esas facultades ilimitadas que tiene en materia de
gastos. Representantes directos del pueblo, los legisladores, raras
veces formarán un cuerpo colegiado capaz de resistir las presiones
del ambiente para negarse a autorizar gastos que llevan como úni-
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 329
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
ASAMBLEA LEGISLATIVA
ESCRUTINIO DEL PLEBISCITO
Sesión del 27 de junio de 1934
SUMARIO
I. Aprobación del acta de la Asamblea anterior.
II. Asuntos entrados.
III. Aprobación de la moción del señor diputado Lobos, referente
al Reglamento por el cual ha de regirse la Asamblea de la fecha.
858 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
II
ASUNTOS ENTRADOS
III
S r . P r e s id e n t e — Se va a v o ta r la moción.
— Sp votu y resulta afirmativa por mis de dos tercio».
4
DESIGNACION DE DA COMISION ESCRUTADORA DEL ACTO ELECTORAL DEL
PLEBISCITO SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCION Y DESPACHO FAVO
RABLE DE LA MISMA CON RESPECTO A LA VALIDEZ DE LAS ACTAS Y
DEMAS DOCUMENTOS REMITIDOS POR LA JUNTA ELECTORAL.
— Se lee:
PLKR I 8 PI TO
Elección d el t i d* m a rzo d e 1 9 3 4
Seccione» Sufragios En pro En i-mitra Kn blanco
Capital .................. 23. 409 12.644 <;. 70 1 4 .064
Primera ................ 53. 142 26.815 12. 794 1:t . -VÍM
Segunda .............. 37. 831 19.146 8 ,.972 «».713
Tercera ................ fi5. 019 31.763 24...->11 <•). 445
Cuarta .................... 710 23.096 5 .r¡M) l . 77."»
Quinta .................. 34. 222 24.028 6. 394 ;í . 800
Sexta .................... 22. 841 15.287 5. 220 - . ;¡‘2H
S r . P r e s id e n t e — Continúa la sesión.
La Secretaría va a dar cuenta de la forma cómo ha quedado cons
tituida la Comisión de Escrutinio y del dictamen de la misma.
S r . S e c r e t a r io (Villa Abrille) — (Leyendo) : «La Plata, 27 de
junio de 1934. Al señor Presidente de lo Honorable Asamblea Legis
lativa, doctor Raúl Díaz: Tengo el honor de dirigirme a V. E., co
municándole que la Comisión especial designada en la fecha se ha
constituido bajo la Presidencia del subscripto, eligiendo Secretario
al señor Diputado doctor Pedro A. Verde Tello, y ha resuelto pre
sentar los dictámenes adjuntos. Saluda a V. E. muy atentamente. —
Saúl A. Obregón. Pedro A. Verde Tello».
Primer dictamen de la Comisión:
Vuestra Comisión Escrutadora ha estudiado las actas y demás
documentos de la elección realizada el 25 de marzo próximo pasado,
para votar en pro o en contra de la convocatoria de la Convención
Constituyente, en la que han funcionado 3071 mesas receptoras en
los ciento diez distritos que forman la Provincia, y después de haber
formado las nóminas a que se refiere el artículo 5'- del reglamento,
os aconseja la sanción del siguiente —
372 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1 9 3 4
P R O Y E C T O DE R E S O L U C IÓ N
La Asamblea Legislativa —
RESU ELVE!
S r . P r e s id e n t e — S e v a a v o t a r en p a rtic u la r.
— Hago indicación de que se enun
S r . D ip u t a d o V e r d e T e l l o
cien los respectivos capítulos, ya que no es necesario toda la lectura.
S r . P r e s id e n t e — Si hay asentimiento, la Presidencia dará por
aprobados en particular, los capítulos que no sean observados.
— Asentimiento.
— Sin observación, se aprueban todos los capítulos
del dictamen.
V
APROBACION DEL PROYECTO DE RESOLUCION DE LA MAYORIA T)E LA COMI-
SION ENCARGADA DE VERIFICAR EL ESCRUTINIO DEL PLEBISCITO SOBRE
REFORMA DE LA CONSTITUCION. SOBRE CONVOCATORIA AL ELECTORADO
DE LA PROVINCIA PARA ELEGIR 126 CONVENCIONALES.
— Se lee:
P IC T A M E N DE L A C O M IS IÓ N
PROYECTO DE R E S O L U C IÓ N
La Asamblea Legislativa —
RESU ELVE:
P R O Y E C T O D E R E S O LU C IO N
La Asamblea Legislativa —
resuelva:
S r . P residente — En consideración.
S r . S enador O bregón — Pido la palabra.
La Comisión Escrutadora, señor Presidente, ha verificado el
escrutinio del plebiscito, y de las 3100 mesas que debieron haber
funcionado en el territorio de la Provincia funcionaron 3.099, las
cuales, de acuerdo con las operaciones que ha realizado la Comisión
han arrojado como resultado: Votos a favor de la reforma de la Cons
titución, 163.743; votos en contra, 72.479; votos en blanco, 44.376,
todos los cuales forman el total de sufragantes que asciende a 280.598,
con una pequeña diferencia sobre las cifras que se han leído por
Secretaría, de setenta sufragantes.
Ahora bien, señor Presidente, todas estas cifras la Comisión ha
estado de acuerdo en tomarlas de las cifras dadas por la Comisión
Electoral. No ha habido discrepancia en cuanto al resultado numéri
co de la elección. Pero en el seno de la Comisión se han dividido las
opiniones — y esa es la razón por la cual se presenta un despacho en
minoría — en cuanto a la interpretación de ese resultado.
Por la mayoría de la Comisión, el resultado de la elección no
admite dudas, es por la afirmativa; y las razones que tiene la Co
misión son bien sencillas. Si sobre 280.598 votos hay 163.743 por la
afirmativa, aun en el supuesto de que los votos ambiguos — que
están representados por los votos en blanco, que hay tanta razón
para suponerlos a favor como en contra — los consideráramos en
contra, tendríamos que, agregados estos votos en blanco a los votos
en contra, formarían un total de 116.855 votos, número que no al
canza al de los votos emitidos por la afirmativa.
De acuerdo con este resultado, la mayoría de la Comisión en
tiende que están cumplidos los requisitos exigidos por el artículo
217 de la Constitución de la Provincia y que esta Asamblea debe
convocar a la Convención de acuerdo con lo dispuesto por este des
pacho.
376 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 193 4
partes de los electores, con respecto al total de los inscriptos, los que
se manifestasen en favor de la reforma.
Afirmo, señor Presidente, que el pueblo de la Provincia no quie
re la reforma de la Constitución. El pueblo, el que ha votado, y
también el que no lo ha hecho, sólo está representado por 163.000
votantes que han dicho que quieren la reforma; pero 163.000 votos
con relación a 678.000, constituyen apenas el veinticinco por ciento do
los electores de la Provincia, y no es posible que nosotros sostengamos
que ese 25 por ciento es la mayoría afirmativa que exige la Consti
tución. Si la Constitución estableciese que sería indispensable tener
en cuenta el número de los votantes y no el de los electores, entonces,
desde luego, podría sostenerse que sobre 290.000 votos, los 163.000
votantes a favor del plebiscito habrían hecho expresión categórica
en sentido afirmativo por la reforma de la Constitución. Pero no es
así; los términos de la Constitución son categóricos y se refieren a
electores y no a votantes.
No es la opinión del partido socialista, únicamente, la contraria a
la reforma. Todos los diarios del país se han ocupado de este asunto
y me voy a permitir leer una parte muy breve del editorial, del día
13 de abril, del diario «La Nación», que dice: «Será un empeño va
no pretender cohonestar con argumentos especiosos el incuestionable
fracaso de la consulta que acaba de hacerse al electorado bonaerense.
Ha quedado de manifiesto la indiferencia con que la opinión pública
ha recibido una iniciativa, que si fuera acertada, habría sido aco
gida con muestras de efusión cívica. De modo que, al no encontrar
eco en la masa ciudadana el referido proyecto, sólo cabe, procediendo
juiciosamente, desistir del intento».
Hemos creído nosotros en algún momento de que, efectivamente,
el resultado del comicio haría desistir del intento de reforma a los
hombres que militan en el partido del gobierno. Desgraciadamente,
no ha sucedido así.
No ha habido, como se ha visto, eco favorable en el pueblo pa
ra la reforma constitucional y ahora, debemos agregar además, no
solamente no ha habido eco favorable, sino que la Constitución en
sus distintas disposiciones, de acuerdo al resultado obtenido, tampoco
ampara a los que propician esa reforma.
Yo me atrevo a sostener que además de otros motivos de ir.cons-
titucionalidad, ha de poderse plantear con éxito la incon3titucionali-
dad de la convocatoria para una Asamblea Constituyente únicamente
con el argumento de que, solamente 163 mil electores se han manifes
tado afirmativamente sobre un padrón de 678 mil.
¿Puede, señor Presidente, esta Asamblea decir que ha habido
voto favórable a la reforma? ¿Podemos nosotros declarar lo que no
han expresado los electores de la Provincia? ¿Podemos nosotros mo
dificar los términos y decir que el número de 163 mil, por un movi
miento mágico se convierte en mayoría con respecto a 678 mil?
Yo creo que no, señor Presidente, por eso nosotros hemos re
dactado este despacho de minoría que declara que en la provincia de
Buenos Aires, los electores que se han pronunciado en favor de la re
forma están en una minoría insignificante.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 381
dura! (¡M uy bien, muy bien! Aplausos en las bancas y en las ga
lerías).
S r. D iputado O rler — Ese es el peligro que ahora se cierne so
bre la provincia de Buenos Aires.
SR. D iputado O sorio — No, señores senadores y diputados; el
único peligro de dictadura que existe es el de la dictadura socialista,
el peligro a que se ha referido el señor Diputado Verde Tello, cuan
do manifestaba que los miembros del Partido Socialista tienen re
paros que hacer a los principios individualistas, y a los que con
sagran la propiedad privada. ¿Qué libertad, señor Presidente, pue
de existir en un pueblo, cuando se conculca su derecho de propiedad?
¿Cómo se van a emitir las ideas, cuando los hombres no pueden
expresarlas, porque no están respaldados en los conceptos de la li
bertad que se afianzan con el derecho de la propiedad privada? Ese
principio jurídico establecido en nuestras leyes y que los conserva
dores sostenemos, es precisamente el que asegura la libertad. (¡M uy
bien, muy bien! Aplausos en las bancas y en la barra).
S r . P residente — La Presidencia advierte a los concurrentes
a la barra que no les está permitida ninguna clase de manifestaciones,
ni en favor ni en contra de las expresiones que se pronuncian en el
recinto. Continúe el señor Diputado Osorio.
S r . D iputado O sorio — La opinión de los diarios es, dice el se
ñor Diputado, la opinión de la prensa toda del país, contraria a la
reforma de la Constitución de la Provincia. ¡Inexacto, totalmente
inexacto! La opinión de la prensa no se ha expresado en contra de
la reforma misma de la Constitución, sino en contra de la opor
tunidad de la reforma, con un criterio que, para nosotros, que tam
bién formamos parte de la opinión pública de la Provincia, no es ver
dadero ni justo, no lo hemos compartido ni lo compartiremos; pero
para esa opinión que la prensa ha expresado en contra de la opor
tunidad de la reforma, nos cabe también la satisfacción de decir que,
en el momento en que nos hemos dispuesto a poner en movimiento
la ley dictada por la Legislatura, esa misma prensa ha reconocido
que es buena, que es útil y que es necesaria la reforma de la Cons
titución de la Provincia. Lo remito al señor Diputado Verde Tello y
a los señores legisladores socialistas, tan propensos a traer a esta
Cámara los artículos editoriales de los diarios para debatir estos
asuntos, los remito al artículo de fondo de «La Nación», de ayer.
Ha citado a Mitre el señor Diputado. Como se ve, el señor Di
putado, para afirmar sus opiniones, ha tenido necesidad de recu
rrir a hombres como Mitre, aquella figura venerable de patricio,
aquella figura de prestigio moral suficiente como para que el señor
Diputado pueda evocarla en este momento en apoyo de una mala
causa.
La Constitución, dijo Mitre, «no es un juego de niños que pueda
variarse constantemente». «Constantemente» le llama el señor Dipu
tado, a variar la Constitución de la Provincia, que es ya un insti ci
mento que tiene más de cuarenta años de existencia. Peligro grave,
señor Presidente, señalado en todas las doctrinas de los constitucio-
nalistas del mundo, en todos los países que tienen instituciones aná
logas a las nuestras, es el de renovar frecuentemente los estatuios
384 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 193 4
Gobierno respetable y respetado, y, para que así sea, para que las
cláusulas inadaptables no tengan que ser violadas permanentemen
te por los poderes públicos que tienen la obligación de aplicarlas, es
que queremos reformar la Constitución, dentro de procedimientos
legítimos, con patriótica inspiración y en el propósito lealmente ex
presado de contribuir a soluciones que consultan e interpretan el ver
dadero sentido del bien público.
Quedarán las palabras del señor Diputado Verde Tello en el Dia
rio de Sesiones como la demostración más acabada de la forma en
que el partido socialista se opone tenazmente, y sin razón, a la ne
cesidad de la reforma sancionada por la Legislatura.
Los señores diputados socialistas conocen las expresiones de la
calle de su partido; los señores diputados conocen la voz del partido
socialista que se alza en todas partes y manifiesta estar a la espera
de la hora de la propugnación socialista para la cual necesitan el
«ambiente propicio» que les ofrece la Constitución en sus defectos,
en sus imperfecciones, en sus fallas; el ambiente propicio es aquel
por cuyos resquicios puede infiltrarse la anarquía, el desorden, ese
ambiente propicio que el partido socialista necesita para imponer su
voluntad y sus decisiones es el del descrédito de la Constitución, y
nosotros queremos aventarlo para hacerla compatible con nuestras
ideas, de paz, de progreso, de legalidad, compatible con los princi
pios filosóficos que afianzan el régimen de la libertad individual, ase
guran el orden público y garantizan los derechos de toda sociedad
organizada civilizadamente. Nada más. (Aplausos en las bancas y en
las galerías).
Sr . Senador Zamora — Pido la palabra.
Voy a pronunciar muy pocas, ya que trataré de ser lo más bre
ve posible.
Deseo dejar sentado que el Partido Socialista no es contrario a
la reforma de la Constitución. En principio deseamos la reforma, y
tal vez en mayor grado que lo desea el partido gobernante. Lo que
sostenemos nosotros es la inoportunidad de la reforma en estos mo
mentos.
Como bien lo dijo el señor Diputado Verde Tello, no consideramos
oportuna en esta emergencia la reforma de la Constitución, porque
ella encierra un peligro que no sabemos a que grado puede llegar.
De acuerdo con el texto mismo de la Constitución, la Asamblea
Constituyente es dueña de alterar, de transformar, de hacer hasta
una nueva Constitución, y no habiendo intervenido en lo principal,
en todos los preparativos de la elección de constituyentes y no inter
viniendo en la constituyente misma la mayoría de la opinión de la
Provincia. . .
Sr. D iputado Lobos — Existirá.
Sr. Senador Zamora — .. .existirá el peligro de que el partido
gobernante haga una Constitución para su uso y eso debe alarmar
tanto a los señores diputados y senadores que pertenecen al partido
gobernante como a los de la oposición.
Si el electorado hubiera emitido su voto, como lo hizo en algunos
distritos, el resultado de la elección habría sido completamente dis
tinto. Una prueba de ello se vió en Quilmes donde en sus tres cuar-
388 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1 9 3 4
reconocer que aun vencidos, hay que darles la oportunidad para que
ellos se manifiesten libremente como nosotros.
Nada más.
Sr. D iputado K aiser — Pido la palabra.
Estamos íntimamente compenetrados los hombres del gobierno
de la Provincia, los hombres del partido gobernante y los legislado
res que ocupamos estas bancas, de la responsabilidad que contrae
mos ante el pueblo de la Provincia* y ante el país al propiciar esta
reforma, y nos atreveríamos a llevarlo adelante y detendríamos el
procedimiento que nosotros mismos pusimos en movimiento cuando
el 4 de lebrero de este mismo año sancionamos la ley declarando que
considerábamos necesaria la reforma y sometiendo ese pronuncia
miento al pueblo de la Provincia. Si no tuviéramos la más absoluta
seguridad que interpretamos un anhelo general, de que esa reforma
es absolutamente necesaria y conveniente como lo acaba de recono
cer el mismo señor Senador que me ha precedido en el uso de la pa
labra, que no puede menos de confesar que los mismos representan
tes socialistas reconocen la utilidad de la reforma y que sólo se opo
nen a ella por razones de oportunidad.
Pero, señor Presidente, ¿cuándo habría de llegar esa oportuni
dad sino es en este momento, quizás único, en que pueden llenarse
los requisitos expresos de la Constitución de la Provincia? Es casi
imposible que una Legislatura pueda reunir los tres quintos de los
votos exigidos por la Constitución en cada una de sus Cámaras para
poder sancionar el pronunciamiento que, gracias al momento actual
de la política argentina, nos ha sido posible sancionar en estas dos
cámaras.
Pero nosotros no pretendemos llevar la' reforma a los puntos
que ha mencionado el señor Senador Zamora. No vamos a estudiar,
no vamos a someter a la Convención ninguna de esas reformas de las
bases fundamentales sobre que están asentadas nuestras institu
ciones políticas y sociales; vamos a mantener, como lo ha manifesta
do elocuentemente el señor Diputado Osorio, el espíritu individualis
ta y conservador de esta Constitución. Nuestra reforma es mucho
más pequeña y mucho más sencilla: es una reforma de carácter elec
toral . . .
Sr. Senador Z amora — De carácter político.
Sr. D iputado Kaiser — . . . que evite la repetición de los hechos
de la elección del 5 de abril que los diputados socialistas quieren en
rostrarnos a cada momento.
Esa elección demuestra la imprescindible necesidad, la absoluta
urgencia de hacer la reforma de la Constitución, para que sea posi
ble que el partido que tenga mayoría en el electorado pueda elegir al
Gobernador de la Provincia, porque ha sido demostrado en esa opor
tunidad que no basta tener mayoría en los comicios, sino que es ab
solutamente indispensable tener mayoría en el colegio electoral, y
que entonces la elección del Poder Ejecutivo queda al arbitrio de las
combinaciones de los colegios.
SR. Senador Zamora — ¿Me permite una in terrupción ?...
Aquí aparece un criterio contradictorio del partido gobernante.
En los concejos deliberantes se eligen intendentes por el Concejo.
Aquí se sostiene lo contrario.
390 CONVENCIÓN CONSTITUYENTE AÑO 1934
— El artículo 8* es de forma.
— Es la hora 20 y 30.
CAPITULO VI
PROYECTO, DEBATES Y SANCION DE LA LEY REGLAMENTANDO
EL FUNCIONAMIENTO DE LA CONVENCION CONSTITUYENTE
D IS C U S IO N E N G E N E R A D
PROYECTO DE LEY
FU N DAM EN TOS
DISCUSION EN PARTICULAR
— Se le e :V
— Se lee:
S r . M íg u ez — Legales o físicos.
S r . S a p o r it i — Precisamente yo decia razones de fuerza mayor
justificada.
Sr . S a l a s C h a v e s — E l p ropósito es ese.
Sr. M íg u e z — Impedidos legal o físicamente.
Sr . B a l iñ o — O cualquier otra causa.
Sr. S a l a s C h a v e s — P o r im pedim ento legal, con eso está dicho
todo.
S r . S a p o r it i —
Esto evitaría la elasticidad de la redacción.
(Villa Abrille) — El artículo quedaría redacta
S r . S e c r e t a r io
do en la siguiente form a: «Los reemplazos de loa presidentes de mesa
que estuvieren impedidos legalmente, y no pudiesen desempeñar el
cargo. . .
S r . M íg u e z — N o , señor S ecretario.
Los reemplazos de los presidentes de mesa oue estuvieren impe
didos legalmente.
Yo quería hacer notar otra cosa, porque esta es una ley que está
muy estudiada, y sino concurre el presidente de mesa, siempre se
conviene entre los partidos, para evitar que una mesa quede sin pre
sidente, la forma de proveer a ese nombramiento. Con esta redacción
de la ley resultaría que no se podría reemplazar sino estuviese le
galmente impedido.
Sería quizá mejor dejar bien sentado el concepto que la Comisión
y la Cámara tiene al respecto y dejar tal cual está el artículo, así
para todos los casos de impedimento o mala voluntad de la persona
designada presidente, se evitaría que la mesa deje de funcionar.
S r . S a p o r it i — L o que persigue el artículo es que se constitu
yan todas las mesas.
S r . M íg u e z — Por eso se ha puesto «cualquier otra causa».
S r . O b r e g ó n — Puede haber impedimentos legales o impedi
mentos físicos.
S r . M íg u e z — O por m ala voluntad de un p resid en te que d eja sin
fu n cio n a r un com icio, y es eso lo que debem os e v ita r, a cuyo e fe cto
bastará que se d ir ija un te le g ra m a a la Jun ta p ara que ésta design e
o tra persona, y com o el com icio puede fu n cio n a r desde las doce ho
ra s en adelante, no qu edará sin rea liza rse el acto electoral.
S r . P o r r in i — En ese caso hay titulares y suplentes.
S r . S a l a s C h a v e s — Resulta que a veces no concurre ninguno.
S r . M íg u e z — Aquí mismo en La Plata ha ocurrido que los par
tidos han tenido que ponerse de acuerdo, a último momento, para
designar presidente.
S r . S a l a s C h a v e s — Y en A v e lla n ed a se ha rep etid o muchas
veces e l caso y con la con fo rm id ad de los represen tan tes socialistas
y radicales siem p re se ha solucionado así.
S r . S a p o r it i — Yo hacia esta indicación porque en el artículo
2" ya se refiere a la Ley Electoral.
.SR. S a l a s C h a v e s — El caso que plantea el señor Senador Míguez
es otro, y este artículo lo contempla, por lo que opino que convendría
dejar el artículo como está, porque se ha citado el caso concreto que
no está en la ley pero sí en la práctica.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 417
— Se le e :
— Se le e :
FH OYECTO DE L E Y
— Se lee:
— Se lee:
blea que en ese caso estaba apoyada con la opinión del constitucio-
nalista americano Jameson, que avanza aun más cuando expresa que
la legislatura es «un centinela en servicio» que no puede renunciar
a la vigilancia sobre la convención y que ésta no podría tener sino
funciones expresas acordadas por la Legislatura, teoría en que coin
cide el señor diputado Osorio, como lo ha manifestado oportunamente
en esta Cámara.
El señor diputado Borrás ha olvidado decir en su exposición que
el voto de la mayoría de la Corte, fué rebatido con argumentos vale
deros de una minoría esclarecida, que sostuvo la facultad de la asam
blea en aquel caso. Pero aquí no estamos discutiendo las facultades
de la asamblea legislativa para determinadas situaciones, sino que
estamos considerando el artículo de una ley, y yo entiendo que está
dentro de las atribuciones de la Legislatura, la de dictar normas, bajo
cuyo imperio se han realizado las convenciones y las asambleas legis
lativas anteriores. Así, para la reforma de 1889, que se inició en 1882,
la Legislatura dictó una ley en la cual se acordaban facultades a la
Convención Constituyente, para juzgar como juez único sobre la va
lidez de la elección de sus miembros, con la misma facultad que esta
Legislatura puede acordarla a la asamblea, ya que en ninguna
parte de la Constitución se ha establecido que la Convención Cons
tituyente tenga atribuciones para juzgar de la elección de sus miem
bros. Y si la Constitución hubiera querido que fuera exclusivamente
la Convención Constituyente la que hiciera ese juicio, lo hubiera ex
presado en su texto, tal como lo ha hecho en el artículo 130, que
confiere al colegio electoral el juzgamiento como único juez, acerca
de la elección de sus miembros, dándole sólo a la asamblea esas fa
cultades para hacer el escrutinio de la elección.
La Legislatura, en virtud del apartado 16 del artículo 99 de la
Constitución, está autorizada para dictar todas aquellas leyes nece
sarias para el mejor desempeño de las atribuciones del Poder Eje
cutivo, y para todo asunto de interés público y general de la Pro
vincia, cuya naturaleza y objeto no corresponda privativamente a
los poderes nacionales. Vale decir que en este caso, la Legislatura,
mediante esta ley que estamos considerando, puede acordarle a la
asamblea legislativa o a la Convención Constituyente, facultades para
juzgar sobre la elección de diputados a la Convención Constituyente.
Decía, refiriéndome a la exposición un tanto extensa pero muy
interesante del señor diputado Borrás, relativa a la reforma de 1901,
que la tesis sustentada por la gran mayoría de la asamblea legisla
tiva, fué la de que la ley podía determinar expresamente las facul
tades que debían tener tanto la asamblea legislativa como la asam
blea constituyente.
S r. V erde T ello — La Corte dijo otra cosa.
Sr . B erro — Pero el señor diputado Verde Tello, que es abo
gado, sabe que la Corte no se pronuncia sino sobre el asunto some
tido a ella. Es posible que otra Corté diera otro fallo. De manera
que el argumento no es definitivo. Puede haberse equivocado aquella
Corto, como lo afirma con mucha mayor autoridad que la del dipu
tado que habla, Luis V. Varela y otros tratadistas que se han ocu
pado de ese fallo, criticándolo, porque consideran que la Corte no
puede hacer generalizaciones de esa naturaleza.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 437
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— Se lee:
— So le e :
— Pido la palabra.
S r . B o rrás
Nosotros deseamos agregar después del artículo noveno, uno
nuevo, estableciendo otra disposición que tiene, a nuestro juicio,
suma importancia. Es un hecho conocido que a raíz del último
plebiscito, el insignificante número de votantes ha provocado en
general en toda la población, reflejándose esto a través del periodismo,
un movimiento contrario a la necesidad de la reforma, dado que sólo
había votado en ese plebiscito, un 42 por ciento de los ciudadanos
inscriptos, lo que debe interpretarse como un repudio; vamos a
proponer, entonces, la inclusión de un nuevo articulo tendiente a
prestigiar la futura convención y la Constitución que de ella salga
por el número de ciudadanos concurrentes a los comicios, que como
artículo décimo diga lo siguiente: «Para que la elección de conven
cionales sea considerada válida deberá sufragar como mínimo un
50 por ciento de los ciudadanos inscriptos en el padrón?*.
Consideramos que esta disposición ha de ser necesaria por los
mismos prestigios que han de rodear a la Convención Constituyente
futura, la cual debe ser en grado máximo la resultante de la opinión
de la mayoría del pueblo.
Sr. Osorio — Nosotros no vamos a aceptar el agregado que
propone el señor Diputado, porque sería colocar en la ley un estímulo
para la acción negativa de los ciudadanos contrarios a la reforma
constitucional y a la marcha normal de las instituciones.
SR. VERDE T ello — La Legislatura está facultada para introdu
cir el nuevo artículo que propone el señor D iputado.. .
— H ablan va rios señores diputados a la vez.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 461
Ley N? 4219
ley:
R a Í'l D í a z . L u is M. B e r r o .
J. Villa A bríile, F ilip e A . Cíale.
Sec. del Senado. Sec. de la C. de D D .
L a P la ta , 5 de septiem b re «le 1 9 3 4 .
Honorable Asamblea:
Vuestra Comisión de Elecciones ha examinado las actas y regis
tros de la elección realizada en la Provincia el 19 de agosto próxi
mo pasado y los cómputos y demás documentos remitidos por la
Junta Electoral, y por las razones que dará el miembro informante,
os aconseja, de acuerdo con las atribuciones conferidas a la Asamblea
Legislativa por la Ley número 4219, la sanción del siguiente —
PROYECTO DE DECRETO
— Se le e :
Honorable Asamblea:
Vuestra Comisión de Elecciones, ha tomado en cuenta las de
nuncias formuladas en su seno y ante la Asamblea Legislativa, y os
aconseja la sanción del siguiente —
PROYECTO DE DECRETO
que los ha habido y que los hay, que han sido el instrumento a que
se ha echado mano para ganar elecciones en otro momento, que
todavía son el elenco con que se constituyen las autoridades de los
comicios, no queden impunes. Estamos en condiciones de demostrar
en la forma razonadora con que habitualmente los socialistas venimos
al debate, que ha habido delincuentes en los últimos comicios.
No nos explicamos cómo es posible que la Comisión venga con un
despacho frente al cúmulo de circunstancias anómalas que existen,
aconsejando que aprobemos la elección y diciendo que ha trabajado
con minuciosidad y detención en el estudio de las actas remitidas por
la Junta.
Evidentemente, el señor miembro informante, ha incurrido en
un exceso verbal. Se ha constituido la Comisión hace pocas horas, y
después de un par de horas viene con un despacho que nos dice el
señor Senador que es el fruto de un trabajo minucioso y detenido,
que’ ha hecho la Comisión, en forma analítica, del acto electoral. Fran
camente ha incurrido en un exceso, porque no es posible que haya
tenido ni el tiempo necesario para realizar un estudio analítico, sino
ni siquiera para ojear los padrones, actas y cantidad de papeles...
Sr. Senador Obregón— Porque nosotros hemos realizado la fis
calización a su tiempo. Hemos tenido fiscales en los comicios, cosa
que no han hecho los socialistas.
Sr. D iputado B ronzini— La Comisión no ha realizado ese tra
bajo. El señor miembro informante habla en plural, diciendo «nos
otros hemos realizado con, anterioridad la fiscalización del com ido»;
es inexacto: la Comisión no ha realizado con anterioridad ese tra
bajo; la Comisión se ha constituido hace pocos momentos. Ha habido
vuelco de padrones; ha habido, por lo tanto, presidentes de mesas
delincuentes; ha habido fraude electoral.
¿Qué objeto tiene postergar la consideración de este asunto? Si
la Comisión hubiese realizado un minimo del trabajo detenido del que
nos habló el señor Senador Obregón, se hubiese encontrado con re
sultados realmente sorprendentes, suficientes para inducirla a pro
poner ella misma la postergación, porque esa postergación y el estudio
que habríamos podido realizar durante el tiempo de que dispusiéra
mos, habría servido para establecer que muchos presidentes de mesa
han efectuado el vuelco de padrones. Tenemos aquí algunos resultados
de mesas. Podríamos ocupar el tiempo de la Honorable Asamblea
trayendo una cantidad de información abrumadora, pero me bastará
con traer el resultado de algunos distritos, para demostrar la nece
sidad de que esta Asamblea Legislativa no se apresure en el pronun
ciamiento y para establecer la necesidad de invertir un poco de tiem
po con el fin de individualizar a los delincuentes que han intervenido
en los últimos comicios.
En la ciudad de Chascomús se ha producido el siguiente caso
interesantísimo. En las 17 mesas de la ciudad, el electorado de la
misma ha podido votar sin dificultades, y en las 17 mesas sufragaron
568 ciudadanos. Los caminos de ese partido están en las peores
condiciones; el tránsito es casi imposible. No ha habido fiscalización
de los partidos opositores; funcionaron 5 mesas en la zona rural y
han sufragado 537 ciudadanos, tantos como en las 17 mesas de la
ciudad.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 479
lidez del gobierno que se constituyó con 109.303 votos, o sea menos
del 25 por ciento del electorado provincial.
El Presidente Sáenz Peña, cuyo nombre agita todavía las ma
sas populares argentinas, que ven personificado en él algo así como
el apóstol de las libertades cívicas, en su manifiesto de 1912, des
pués de sancionada la ley electoral que nos rige, decía, dirigiéndose
al pueblo del país: «Si el Gobierno Nacional está obligado a prote
ger la libertad, necesita de la razón de ser de aquel amparo, porque
así como en derecho no hay obligación sin causa, tampoco existe en
el orden político actuaciones represivas por sospecha de opinión. Sí
los partidos no se organizan ni actúan, ¿les sería dado afirmar que
faltan seguridades cuando lo omitido es el sufragio perdido en la
abstención? ¿Qué fundamento legal podría justificar mi interven
ción allí donde no hay sino un partido que ejercita derechos tan res
petables como los que me propongo garantizar a los demás? Para
que el gobierno central interviniese donde no se vota, porque no se
quiere, habría que proceder por hipótesis, vale decir reprimiendo
conjeturas e intenciones. No supongo que se me quiera encargar de
destruir o vencer a partidos determinados».
Poco habría que agregar hoy, 22 años después de pronunciadas
estas palabras para llamar a la realidad a ese partido radical,
que parece haber elegido a Sáenz Peña como procer propio. Las
palabras del mismo ciudadano, que según ellos les dió la
legislación electoral que hoy nos rige, debieran inducirlos a con
currir a las urnas a cumplir sus deberes ciudadanos y no ence
rrarse en la estéril abstención con que se pretende perturbar la
paz y tranquilidad del país. (Aplausos).
Sarmiento, refiriéndose alguna vez a los vicios de nuestra de
mocracia, decía que nuestra historia revela que se tiene más la con
ciencia del bien que paciencia y capacidad para realizarlo.
Yo, recordando esas palabras del gran pensador argentino, me
pregunto qué quieren, qué desean, a qué aspiran los radicales en los
actuales momentos de la vida cívica del país. ¿Quieren el bien gc-
j’ci’í'l? ¿Quieren que la libertad ciudadana sea respetada en los co
micios? Si es así, deben saber que ello se logra solamente mediante
la concurrencia al comicio. Mientras no lo hagan, seguirán demos
trando, como decía Sarmiento, que conocen teóricamente el bien
pero que son incapaces de practicarlo. (¡Muy bien!).
No es admisible, señor Presidente, que un partido que gobierna
al país a justo título porque acredita ser la mayoría en los comicios,
se disponga a entregar las posiciones al adversario que no se las
disputa legalmente. Los que no votan incurren en un delito previsto
y penado por la misma ley que fué sancionada en el año 1912, de
conformidad a la propaganda intensa y casi a la presión del par
tido radical. Y debemos dejar establecido que el régimen electoral
vigente es el mismo que los radicales sostenían y reclamaban en el
año 1912: voto secreto y obligatorio, descentralización del comicio,
padrón militar y amplio derecho de fiscalización para todos los par
tidas. En esas condiciones hay que aceptar como verdad indiscutible
que si hay ciudadanos que no votan, pocos o muchos, o son malos
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 495
___________ _______________ * ________________________________________
Por otra parte, las denuncias que concretan los legisladores so
cialistas, que las anuncian y comentan desde el 19 de agosto, no han
podido en ningún momento representar un número de votos sufi
cientes siquiera para anular una sola urna, y menos aún para hacer
variar en algún distrito de la Provincia, la representación que cada
partido llevará a la Asamblea Constituyente. Hay motivos, pues,
para sostener que las impugnaciones teóricas y verbales de los so
cialistas no responden sino a encubrir el ruidoso fracaso electoral
que les significa la primera elección a que concurren, después del 5
de abril de 1931, en que no cuentan absolutamente con el concurso
de los radicales. Las cifras lo van a demostrar así.
Si tomamos por base la última elección nacional realizada en la
Provincia, presidida por un gobierno radical, la de 1930, tenemos
que no obstante las fallas denunciadas con respecto al padrón provin
cial, y que poco después habían de ponerse de manifiesto en forma
indubitable, los radicales obtienen 172.000 y pico de votos, ios con
servadores 154.000, luchando en forma intensa desde la oposición
contra todos los resortes del poder, volcados para presionar al electo
rado de la Provincia, y los socialistas llegan apenas a 26.000 votos.
El 5 de abril de 1931, realizada la elección con el mismo padrón que
habian preparado los radicales para asegurar su mayoría, que ya
veían tambaleante en la Provincia después de la elección de marzo de
1930, dió un resultado de 41.000 votos socialistas, contra 187.000 de
los conservadores y doscientos y tantos mil de los radicales; pero en
noviembre de 1931, en que los radicales no van a la elección, los de
mócratas obtienen 218.000 votos y los socialistas, sobre la base de la
alianza demócrata progresista - socialista, obtienen 124.365 votos, es
decir que el Partido Demócrata Nacional mejoró su electorado en
30.000 votos, mientras que el Partido Socialista triplicó el suyo y
llegó a tener 82.000 votos más que en la elección anterior en que ha
bía obtenido apenas 41.000. Con la misma lógica que nos aplican los
señores socialistas para suponer que nuestro aumento discreto desde
el 31 de marzo hasta el 19 de agosto se debe al vuelco de los pa
drones, podríamos decirles que ellos hicieron volcar padrones en no
viembre de 1931, porque de otra manera no se explicaría tampoco
que en un período de siete meses el Partido Socialista se triplique
en la Provincia. Pero, vienen después las elecciones municipales ie
1932 y loS socialistas de 124.000 votos rebajan repentinamente a
59.000; en las elecciones de 1933 rebajan a 55.000; en las de di
putados nacionales de 1934 ascienden de nuevo a 77.000, descien
den en la elección del plebiscito a 72.000 votos, con el apoyo de esa
masa democrática radical, a la cual se dirigieron en su manifiesto, y
quedan finalmente con 37.000 votos en la última elección de conven
cionales. Se prueba así, señor Presidente, que el total de votos demó
cratas en la Provincia, se mantiene dentro de una proporción regular
que aumenta o disminuye también regularmente, sin las oscila
ciones repentinas del socialismo, según sea más o menos eficaz ia
acción de sus representantes en la oposición o en el gobierno y que
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 501
— El artículo 2? es de forma.
APENDICE
RESUM EN
Total de votos computables ................. 17.355
Cuociente electoral ............................... 1.928
Corresponde:
A l Partido Demócrata Nacional . . . . 7 Diputados Convencionales
A l P artido Socialista ......................... 2 Diputados Convencionales
Total 9
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 511
«a9
i
‘v
<
9
u
8
9
55 s40 A
a
& 5
9
Q
c O a
Partidos
u
XJ
e
GQ h s *3
*o «s ’ cj 3
sV e u
Q> u e H
3 U
o
O
CM 9 S
u 9 ü
C9
RESUM EN
Corresponde:
A l Partido Demócrata Nacional . . . . 14 Diputados Convencionales
A l P artido Socialista ......................... 3 Diputados Convencionales
Total .......................................... 17
C. AUBGHIKO.
A. C o r r e a B u s to s ,
Secreta rio.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 513
Obrera
Partido Socialista
En blanco
Totales
Concentración
Partidos
1
Baradero ................ 756 624 _ - . 65 1.455
Bartolomé Mitre 1.067 797 4 — 91 1.929
Carmen de Areco . . 1.329 15 — — 14 1.358
Colón ...................... 1.364 397 12 — 82 1.855
Exalt. de la Cruz . 889 18 — — 52 959
Gral. J. P. Uriburu 1.916 319 11 69 84 2.399
Marcelino Ugarte . . 2.517 30 :i — 14 2.564
Pergamino ............ 2.145 643 39 7 229 3.063
Ramallo .................. 904 176 — — 67 1.147
Rojas .................... 1.230 209 — — 57 1.496
San Andrés de Giles 1.887 4 — — 4 1.895
San A. de Areco . . 785 63 — — 30 878
San Nicolás .......... 1.510 586 3 — 146 2.245
San Pedro ............ 1.490 482 — — 134 2.106
Totales . . . . 19.759 4.363 72 76 1.059 25.329
RESUM EN
Total ..................................................... 16
C. A m e o h i n o .
A. Corre»» B i t i t o » ,
Secretario.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 515
Concentración Obrera
Partido Socialista
En blanco
Total
Partidos
RESUM EN
Corresponde:
A l Partido Demócrata Nacional . . . . 17 Diputados Convencionales
A l P artido Socialista ......................... 4 Diputados Convencionales
Total .......................................... 21
C. A m e g h i s o .
A. Correa Bustos,
Secretario.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 517
Concentración Obrera
Partido Socialista
Total de votos
En blanco
Partidos
RESUM EN
Corresponde:
A l Partido Demócrata Nacional . . . . 18 Diputados Convencionales
A l P artido Socialista ......................... 3 Diputados Convencionales
Total .......................................... 21
C . A MEO HI ÑO.
A. C orrea B u sto s,
Secretario.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 519
25 m •
O 3
V ; e
a i >
O
OS e 9
Partidos £>
1 'S
i S
a
! 3
o l ©
o i e*
•a j
Ph !
RESUM EN
Corresponde:
A l Partido Demócrata Nacional . . . . 14 Diputados Convencionales
A l Partido Socialista ......................... 2 Diputados Convencionales
Total .......................................... 16
C. A meghixo.
A. C o r r e a B u s to s *
Secretario.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 521
Partido Socialista
C 3
En blanco
1
Partidos '3
5
t- 75
Z o
Er>
0
O
RESUMEN
Total de votos computables ................ 27.103
Cuociente electoral .............................. 1.594
Corresponde:
Al Partido Demócrata Nacional . . . . 14 Diputados Convencionales
Al Partido Socialista ....................... 3 Diputados Convencionales
Total ....................................... 17
C. A m e u h in o .
A. Correa B u s to s ,
Secretario.
ANTECEDENTES SOBRE REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN 523
rt
*
1* m
9
p
c
Partidos ce 2 4?
‘O 0
c
Z e 75
P 1
CS
9
*2 CU
u
e
0<
RESUM EN
Total de votos computables ................. 16.197
Cuociente electoral ................................. 1.799
5Z%S0 OfOÁ
INDICE
TOMO I
i P á g in a
C A P IT U L O I
M E N C IÓ N DE LOS M EN SA JES DEL PODES E J E C U T IV O DECLAKANDO LA N E C E S ID A D
DE HE P O S M A S LA C O N S T IT U C IÓ N DE LA P S O V IN C IA DE 1889
C A P IT U L O II
P R O V E C T O S DE L E Y SOBR E R E F O R M A S A LA C O N S T I T U C I Ó N
Página
Año 1895: Proyecto de ley de los señores diputados Eduardo Sáenz,
Ernesto W eigel Muñoz, Juan Hunter, Rufino Basavilbaso, Sil-
verio López Osornio, Vicente Lobeira, Joaquín Castellanos, F er
nando Saguier, Odilón U. Núñez, Domingo F. Arguas, Ramón
Méndez, Pedro P. Belderrain ....................................................... 115
Año 1898: Mensaje del Poder Ejecutivo acompañando un proyecto
de ley declarando la necesidad de la reform a de la Constitución.
Gobernador de la Provincia, doctor Bernardo de Irigoyen . . . . 117
Año 1901: Proyecto de ley del señor Senador Ernesto W eigel Mu
ñoz, sobre la necesidad de la reform a de la C on stitu ción ........ 118
Año 1904: Proyecto de ley de los señores senadores Ernesto J.
W eigel Muñoz, José Bianco, Liborio Luna, José M. Niño, Eduar
do E. O liver, Manuel G a lla r d o ..................................................... 135
Año 1907: Decreto por el que se encarga al doctor Luis V. V arela
para que prepare un estudio referente a la reform a de la Cons
titución ............................................................................................. 139
— Proyecto de Constitución reform ada con arreglo al plan pro
puesto por el doctor Luis V . V arela ...................................... 141
Año 1928: M ensaje del Poder Ejecutivo acompañando proyecto de
ley que declara la necesidad de reform ar la Constitución. Gober
nador de la Provincia, doctor Valentín V erga ra ..................... 186
Año 1930: Proyecto de ley del señor Diputado Luis A . Gerardin
por el que se declara necesaria la reform a de la Constitución . . 187
C A P IT U L O III
PR OC ES O DE LA PROYECTADA REFORMA A LA CO N STITU C IÓ N (1902-19Q4)
HASTA EL FALLO DE LA SUPREMA CORTE DE J U S T I C I A
LA DEMANDA DE I N C O N S T I T U C I O N A L I D A D
C A P I T U L O IV
PROYECTO. DEBATES Y S A N C IÓ N DE LA LEY
QUE DECLARÓ LA N E C E S ID A D DE LA REFORM A DE LA C O N S T IT U C IÓ N (1 9 3 2 - 193 4)
Página
Proyecto de ley declarando la necesidad de la reforma de la Cons
titución. Texto del proyecto presentado en la sesión del Hono
rable Senado del 28 de octubre de 1932 .................................... 299
Discusión en general del Honorable Senado. Sesión del 23 de enero
de 1934 ..................................... 303
Discusión en particular del Honoi*able Senado. Sesión del 24 de
enero de 1934 ................................................................................. 309
Discusión en general en la Cámara de Diputadas. Sesión del 1* de
febrero de 1934 ............................................................................. 312
Discusión en particular en la Cámara de Diputados. Sesión de
febrero 2 de 1934 .......................................................................... 335
Texto definitivo de la sanción. Ley número 4209 ............................ 353
C A P IT U L O V
D ebates de la A sam blea L e g is l a t iv a que r e a l iz ó el e s c r u t in io
DEL PLEBISCITO ............................................................................... 357
S U M A R I O
C A P IT U L O VI
PROYECTO, DEBATES Y S A N C IÓ N DE LA LEY
REGLAM ENTANDO EL F U N C IO N A M IE N T O DE LA C O N V E N C IÓ N C O N S T IT U Y E N T E
C A P IT U L O V i l
Página
A sam blea L e g is l a t iv a e n q u e se a p r u e b a l a e l e c c ió n d e C o n
v e n c io n a l e s ................................................................................................................... 455
A P E N D IC E