Ley 25.916 GESTION DE RESIDUOS DOMICILIARIOS
Ley 25.916 GESTION DE RESIDUOS DOMICILIARIOS
Ley 25.916 GESTION DE RESIDUOS DOMICILIARIOS
Ley 25.916
El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina reunidos en Congreso, etc. sancionan con fuerza de
Ley:
Capítulo I
Disposiciones generales
ARTICULO 1º — Las disposiciones de la presente ley establecen los presupuestos mínimos de protección
ambiental para la gestión integral de los residuos domiciliarios, sean éstos de origen residencial, urbano,
comercial, asistencial, sanitario, industrial o institucional, con excepción de aquellos que se encuentren
regulados por normas específicas.
ARTICULO 2º — Denomínese residuo domiciliario a aquellos elementos, objetos o sustancias que como
consecuencia de los procesos de consumo y desarrollo de actividades humanas, son desechados y/o
abandonados.
La gestión integral de residuos domiciliarios comprende de las siguientes etapas: generación, disposición
inicial, recolección, transferencia, transporte, tratamiento y disposición final.
b) Disposición inicial: es la acción por la cual se depositan o abandonan los residuos; es efectuada por el
generador, y debe realizarse en la forma que determinen las distintas jurisdicciones.
c) Recolección: es el conjunto de acciones que comprende el acopio y carga de los residuos en los vehículos
recolectores. La recolección podrá ser:
e) Transporte: comprende los viajes de traslado de los residuos entre los diferentes sitios comprendidos en la
gestión integral.
f) Tratamiento: comprende el conjunto de operaciones tendientes al acondicionamiento y valorización de los
residuos.
Se entiende por acondicionamiento a las operaciones realizadas a fin de adecuar los residuos para su
valorización o disposición final.
Se entiende por valorización a todo procedimiento que permita el aprovechamiento de los recursos
contenidos en los residuos, mediante el reciclaje en sus formas física, química, mecánica o biológica, y la
reutilización.
g) Disposición final: comprende al conjunto de operaciones destinadas a lograr el depósito permanente de los
residuos domiciliarios, así como de las fracciones de rechazo inevitables resultantes de los métodos de
tratamiento adoptados. Asimismo, quedan comprendidas en esta etapa las actividades propias de la clausura
y postclausura de los centros de disposición final.
a) Lograr un adecuado y racional manejo de los residuos domiciliarios mediante su gestión integral, a fin de
proteger el ambiente y la calidad de vida de la población;
c) Minimizar los impactos negativos que estos residuos puedan producir sobre el ambiente;
Capítulo II
Autoridades competentes
ARTICULO 5º — Serán autoridades competentes de la presente ley los organismos que determinen cada
una de las jurisdicciones locales.
ARTICULO 6º — Las autoridades competentes serán responsables de la gestión integral de los residuos
domiciliarios producidos en su jurisdicción, y deberán establecer las normas complementarias necesarias
para el cumplimiento efectivo de la presente ley.
ARTICULO 7º — Las autoridades competentes podrán suscribir convenios bilaterales o multilaterales, que
posibiliten la implementación de estrategias regionales para alguna o la totalidad de las etapas de la gestión
integral de los residuos domiciliarios.
Capítulo III
ARTICULO 9º — Denomínase generador, a los efectos de la presente ley, a toda persona física o jurídica
que produzca residuos en los términos del artículo 2º. El generador tiene la obligación de realizar el acopio
inicial y la disposición inicial de los residuos de acuerdo a las normas complementarias que cada jurisdicción
establezca.
ARTICULO 10. — La disposición inicial de residuos domiciliarios deberá efectuarse mediante métodos
apropiados que prevengan y minimicen los posibles impactos negativos sobre el ambiente y la calidad de
vida de la población.
ARTICULO 11. — Los generadores, en función de la calidad y cantidad de residuos, y de las condiciones en
que los generan se clasifican en:
a) Generadores individuales.
b) Generadores especiales.
Los parámetros para su determinación serán establecidos por las normas complementarias de cada
jurisdicción.
ARTICULO 12. — Denomínase generadores especiales, a los efectos de la presente ley, a aquellos
generadores que producen residuos domiciliarios en calidad, cantidad y condiciones tales que, a criterio de la
autoridad competente, requieran de la implementación de programas particulares de gestión, previamente
aprobados por la misma.
Denomínase generadores individuales, a los efectos de la presente ley, a aquellos generadores que, a
diferencia de los generadores especiales, no precisan de programas particulares de gestión.
Capítulo IV
Recolección y transporte
ARTICULO 13. — Las autoridades competentes deberán garantizar que los residuos domiciliarios sean
recolectados y transportados a los sitios habilitados mediante métodos que prevengan y minimicen los
impactos negativos sobre el ambiente y la calidad de vida de la población. Asimismo, deberán determinar la
metodología y frecuencia con que se hará la recolección, la que deberá adecuarse a la cantidad de residuos
generados y a las características ambientales y geográficas de su jurisdicción.
Capítulo V
ARTICULO 15. — Denomínase planta de tratamiento, a los fines de la presente ley, a aquellas instalaciones
que son habilitadas para tal fin por la autoridad competente, y en las cuales los residuos domiciliarios son
acondicionados y/o valorizados. El rechazo de los procesos de valorización y todo residuo domiciliario que no
haya sido valorizado, deberá tener como destino un centro de disposición final habilitado por la autoridad
competente.
ARTICULO 16. — Denomínase estación de transferencia, a los fines de la presente ley, a aquellas
instalaciones que son habilitadas para tal fin por la autoridad competente, y en las cuales los residuos
domiciliarios son almacenados transitoriamente y/o acondicionados para su transporte.
ARTICULO 17. — Denomínase centros de disposición final, a los fines de la presente ley, a aquellos lugares
especialmente acondicionados y habilitados por la autoridad competente para la disposición permanente de
los residuos.
ARTICULO 18. — Las autoridades competentes establecerán los requisitos necesarios para la habilitación de
los centros de disposición final, en función de las características de los residuos domiciliarios a disponer, de
las tecnologías a utilizar, y de las características ambientales locales. Sin perjuicio de ello, la habilitación de
estos centros requerirá de la aprobación de una Evaluación de Impacto Ambiental, que contemple la
ejecución de un Plan de Monitoreo de las principales variables ambientales durante las fases de operación,
clausura y postclausura.
ARTICULO 19. — Para la operación y clausura de las plantas de tratamiento y de las estaciones de
transferencia, y para la operación, clausura y postclausura de los centros de disposición final, las autoridades
competentes deberán autorizar métodos y tecnologías que prevengan y minimicen los posibles impactos
negativos sobre el ambiente y la calidad de vida de la población.
ARTICULO 20. — Los centros de disposición final deberán ubicarse en sitios suficientemente alejados de
áreas urbanas, de manera tal de no afectar la calidad de vida de la población; y su emplazamiento deberá
determinarse considerando la planificación territorial, el uso del suelo y la expansión urbana durante un lapso
que incluya el período de postclausura. Asimismo, no podrán establecerse dentro de áreas protegidas o sitios
que contengan elementos significativos del patrimonio natural y cultural.
ARTICULO 21. — Los centros de disposición final deberán ubicarse en sitios que no sean inundables. De no
ser ello posible, deberán diseñarse de modo tal de evitar su inundación.
Capítulo VI
Coordinación interjurisdiccional
ARTICULO 22. — El Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA) a los fines de la presente ley, y en
cumplimiento del Pacto Federal Ambiental actuará como el organismo de coordinación interjurisdiccional, en
procura de cooperar con el cumplimiento de los objetivos de la presente ley.
ARTICULO 23. — El organismo de coordinación tendrá los siguientes objetivos:
b) Acordar criterios técnicos y ambientales a emplear en las distintas etapas de la gestión integral;
Capítulo VII
Autoridad de aplicación
a) Formular políticas en materia de gestión de residuos domiciliarios, consensuadas en el seno del COFEMA.
b) Elaborar un informe anual con la información que le provean las provincias y la Ciudad de Buenos Aires, el
que deberá, como mínimo, especificar el tipo y cantidad de residuos domiciliarios que son recolectados, y
además, aquellos que son valorizados o que tengan potencial para su valorización en cada una de las
jurisdicciones.
c) Fomentar medidas que contemplen la integración de los circuitos informales de recolección de residuos.
Capítulo VIII
ARTICULO 26. — El incumplimiento de las disposiciones de la presente ley o de las reglamentaciones que
en su consecuencia se dicten, sin perjuicio de las sanciones civiles o penales que pudieran corresponder, será
sancionado con:
a) Apercibimiento.
b) Multa de diez (10) hasta doscientos (200) sueldos mínimos de la categoría básica inicial de la
Administración Pública Nacional.
c) Suspensión de la actividad de treinta (30) días hasta un (1) año, según corresponda y atendiendo a las
circunstancias del caso.
d) Cese definitivo de la actividad y clausura de las instalaciones, según corresponda y atendiendo a las
circunstancias del caso.
ARTICULO 27. — Las sanciones establecidas en el artículo anterior se aplicarán previa instrucción sumaria
que asegure el derecho de defensa, y se graduarán de acuerdo con la naturaleza de la infracción y el daño
ocasionado.
ARTICULO 28. — En caso de reincidencia, los máximos de las sanciones previstas en los incisos b) y c) del
artículo 26 podrán multiplicarse por una cifra igual a la cantidad de reincidencias aumentada en una unidad.
ARTICULO 29. — Se considerará reincidente al que, dentro del término de tres (3) años anteriores a la
fecha de comisión de la infracción, haya sido sancionado por otra infracción de idéntica o similar causa.
ARTICULO 30. — Las acciones para imponer sanciones previstas en la presente ley prescriben a
los cinco (5) años contados a partir de la fecha en que se hubiere cometido la infracción o que la
autoridad competente hubiere tomado conocimiento de la misma, la que sea más tardía.
ARTICULO 31. — Lo ingresado en concepto de multas a que se refiere el artículo 26, inciso b) serán
percibidas por las autoridades competentes, según corresponda, para conformar un fondo destinado,
exclusivamente, a la protección y restauración ambiental en cada una de las jurisdicciones.
ARTICULO 32. — Cuando el infractor fuere una persona jurídica, los que tengan a su cargo la dirección,
administración o gerencia, serán solidariamente responsables de las sanciones establecidas en el presente
capítulo.
Capítulo IX
Plazos de adecuación
Capítulo X
Disposiciones Complementarias
ARTICULO 36. — Las provincias y la Ciudad de Buenos Aires deberán brindar a la Autoridad de Aplicación la
información sobre el tipo y cantidad de residuos domiciliarios recolectados en su jurisdicción, así como
también aquellos que son valorizados o que tengan potencial para su valorización.
DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, A LOS CUATRO DIAS DEL
MES DE AGOSTO DEL AÑO DOS MIL CUATRO.
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