El Sombrero Negro, Ancho y Feo.

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Obra de Teatro: EL SOMBRETO NEGRO, ANCHO Y FEO.

Alumna: Guido Mariana.

Instituto San Francisco de Asís.

Curso: 4 II.

Profesora: Carolina Ruiz Díaz.

Año: 2012.

El sombrero negro, ancho y feo.

La historia se lleva a cabo en la ciudad Autónoma de Buenos Aires –


Argentina , se trata de una pareja que después de haber estado varios años de
novios, llegaron a una conclusión para la relación, que es empezar a convivir ,
luego de un tiempo de estar juntos se desarrolla un conflicto de infidelidad por
parte de los dos . Esta pareja la verdad que no era buena, él, delincuente,
acababa de salir de la cárcel pero con libertad condicional, alcohólico y
drogadicto, ella nada buena tampoco, era alcohólica y con una adicción a las
drogas. En esta obra se presentan varios personajes, la pareja formada por
Laura y Mario, el primo de Mario que es gay llamado Fernando, el padrino de
alcohólicos anónimos de Mario llamado Gabriel y su mujer llamada Milagros.

EL SOMBRERO NEGRO, ANCHO Y FEO.

Personajes de la obra:

 Mario (Novio de Laura)


 Laura (Novia de Mario)
 Fernando (Primo de Mario)
 Gabriel (Padrino de Mario)
 Milagros (La mujer de Gabriel)

Escena Nº 1.

Mario. – Hola mi chica sexy, te traje flores y….y…..y…. un osito!!!.

Laura. - ¿que pasa Mario? Vos no sos de traerme esas tonterías.

Mario. - tengo una buena noticia Laurita!!.

Laura. -¿conseguiste mas droga mi amor?.

Mario. - no, no, no Laura, no tiene nada que ver con todo ese mundo de
adicción, pero la verdad que no me vendría nada mal, ahora, un poco por lo
menos.
Laura. - no Mario, dijimos que íbamos a dejar todo eso. Dale contarme que es
la noticia.

Mario. - conseguí trabajo lauuuu!!!.

Laura. - bien!! Ese es mi hombre!! Todo esto merece un festejo.

Mario va a la habitación para poder cambiarse y dentro de todo el desorden


encuentra un sombrero que no era de él.

Mario. – Lauraaaaaaaa ¿estuvo alguien acá mientras yo no estuve?.

Laura. – no Mario, solamente estuve yo.

Mario. – y me podes decir de quien carajo es este sombrero que no es mío,


que está arriba de mi propia cama en donde paso todas las noches con vos.

Laura. - ¿Qué sombrero Mario? ¿Qué sombrero?.

Mario. – este, este ridículo sombrero negro, ancho y feo sombrero, que no es
mío, que estaba arriba de mi propia cama en donde paso todas las noches con
vos.

Laura. – nose Mario, nose de quien puede ser ese sombrero, si no es tuyo y
está en nuestra cama.

Escena Nº 2.

Mario se dirige a la casa de su primo, donde allí se encontraban Fernando y su


padrino Gabriel.

Mario. – (toca la puerta y grita) ¿Fernandooo estas? Atendemeee!!!.

Fernando. – Mario ¿Qué te pasa primo?.

Gabriel. - ¿y ahora Mario? ¿Qué pasa?.

Mario. – Pueden creer que la infeliz de Laura me está engañando, me está


engañando!!.

Fernando. – pero ¿con quién primito? Si ustedes estaban muy unidos a pesar
de todos los malos tratos que tenían.

Mario. – nose, nose, encontré un sombrero negro, ancho y feo sombrero que
no es mío, que estaba arriba de mi propia cama en donde paso todas las
noches con ella.

Gabriel. – ahhh, Mario pero por un sombrero tanto lio?.

Mario. – si, por un sombrero que no es mío. ¿Y saben que es lo más raro?.
Fernando. – ¿que Marito? ¿Qué?.

Mario. – que ese sombrero negro, ancho y feo sombrero, ya lo había visto en
otro lugar!!.

Fernando. – primito eso es lo más preocupante, porque te está engañando con


alguien que ya conoces. ¿Sospechas de alguien?.

Mario. – sí, sospecho del vecino de arriba de nuestro departamento, porque


una vez los vi hablando con mucha confianza en la puerta del edificio y es el
único que conozco que se viste muy elegante el infeliz.

Gabriel. – ¿el único? ¿Y mira si no es él?.

Mario. – no, yo sé que es él, saben que voy hacer.

Fernando. – ¿qué Marito?.

Mario. – voy a agarrar mi arma, la que escondí antes de que me lleven preso y
lo voy a matar.

Fernando. – no Mario, no, te vas a ir preso otra veeeeeeeez.

Mientras Mario sin escuchar las palabras de Fernando cierra la puerta y se va.

Escena Nº 3.

En el departamento de Laura y Mario.

Laura. – ¿por qué viniste?.

Gabriel. – porque te quería ver Laurita.

Laura. – pero no podes venir así porque si nomas, me tenes que avisar tonto,
Mario encontró tu maldito sombrero en la cama.

Gabriel. – si ya lo sé, se fue como loco a la casa de Fernando y sospecha del


vecino de arriba, no de mi, él de arriba.

Laura. - ¿y cómo está el?.

Gabriel. – y si te digo que bien, te miento.

Laura. – ¿te dijo algo más?.

Gabriel. – sí, que lo iba a matar al de acá arriba.

Laura. – que tonto este Mario, no crece más, siempre pensando en violencia.
Bueno ahora ándate, porque ya veo que viene y se entera de todo.

Gabriel. – chau Laurita mi amor.


Laura.- Chau gabi chau.

Escena Nº4.

Mario vuelve a su departamento para hablar con Laura.

Laura. – ¿que viniste hacer acá?.

Mario. – a darte la posibilidad de que me digas la verdad por una buena vez.

Laura. - ¿Qué verdad Mario? ¿De qué verdad me hablas?.

Mario. – bueno Laura aunque vos no me lo digas yo se que fue el maldito infeliz
de acá arriba, y aunque hoy no lo encontré mañana lo voy a encontrar y ahí no
va a salir vivo.

Laura. – no fue nadie, ¿que vas hacer otra vez? ¿Te queres volver a la cárcel?
Córtala Mario.

Mario. – y lo seguís negando, mejor me voy a dormir a otra parte porque no


puedo seguir cerca tuyo.

Laura. – si, ANDATE! ANDATE MARIO! Yo para mañana no voy a estar más,
así que vos te podes quedar con todas estas porquerías.

Mario se va sin importarte nada, cerrando la puerta con violencia y bronca,


produciendo un gran ruido. Luego este, se dirige a la casa de Gabriel donde allí
se encontraban su padrino y la mujer Milagros.

Mario golpea la puerta y Gabriel le atiende.

Gabriel. – hola Marito, seguís mal por lo que veo, pasa, pasa.

Mario. – sí, recién fui a hablar con Laura y no me dijo la verdad todavía.

Gabriel. – y bueno Mario, así son las mujeres.

Mario. – que puedo hacer gabi? Vos que sos mi amigo, mi salvación, mi
padrino del maldito grupo de alcohólicos anónimos.

Gabriel. – Marito, yo hace mucho te dije que la dejes, que era una mala
influencia para vos, te metí en un grupo de alcohólicos anónimos y aun así te
sigue perjudicando, déjamelo a mi Marito. Quédate acá en casa, tranquilízate
un poco, ahí está Milagros, pedile cualquier cosa a ella, yo tengo que salir un
rato.

Mario. – ¿y dónde vas vos?.

Gabriel. – vos no podes saber todo Mario.


Gabriel agarra las llaves para salir y antes de cerrar la puerta le dice a Milagros
que lo atienda a Mario.

Milagros. – Marito ¿necesitas algo?.

Mario. – alguien con quien hablar.

Milagros. – me tenes a mí, ya me conto Gabriel lo que paso con Laura.

Mario. – sí, estoy muy mal.

Mario comienza a llorar y milagros lo consuela.

Milagros. – bueno Marito no llores, ¿sabes cuantas mujeres quieren a un


hombre como vos?.

Mario. – sí, seguro, una y con suerte.

Milagros. – no Marito, muchas , yo soy una por ejemplo, un hombre que me


quiera, no como tu padrino que solo me quiere para cocinarle y lavarle la ropa,
que sale de esa puerta y tiene todo un recorrido para ir a visitar a cada una de
sus mujeres.

Mario. - (la abraza) no te pongas mal, sos una mujer hermosa.

Milagros. - (lo mira fijamente a los ojos) ¿te puedo besar?.

Él sin dejarla que termine de hablar la besa.

Mario. – no, no mili, estamos mal, yo no le puedo hacer esto a mi padrino,


déjame solo por favor.

Milagros. – si Mario tenes razón, perdón, perdón.

Escena Nº5.

Al día siguiente Mario se dirige a su departamento y se encuentra con Laura.

Mario. – ¿ya te vas?.

Laura. – si ya me voy.

Mario. – Laura yo te quiero, estoy mal, te necesito.

Laura. – yo también te quiero Mario, pero así no podemos seguir.

Mario. – mírame a los ojos y decime de quién es ese sombrero.

Laura. – es de Gabriel, tu padrino, perdón Mario no fue nada importante,


perdón.

Mario. – yo también te engañe estuve con milagros anoche.


Laura.- y si empezamos de nuevo.

Mario. – ¿entonces te quedas?.

Laura. – y con vos, toda la vida.

FIN.

Mariana Guido.

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