El Proceso Inflacionario Argentino en El Largo Plazo (1810-2022)
El Proceso Inflacionario Argentino en El Largo Plazo (1810-2022)
El Proceso Inflacionario Argentino en El Largo Plazo (1810-2022)
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INTRODUCCIÓN
El Gráfico 1 brinda una primera aproximación del proceso inflacionario en Argentina a largo
plazo.
Durante la primera mitad del siglo XIX, la evolución de los precios domésticos estaba
estrechamente vinculada al mercado internacional y a las variaciones del tipo de cambio. Este
período se caracterizó por fluctuaciones de precios tanto a la baja incluso años de deflación a
excepción de algunos años particulares (25,3% en 1818, 34,3% en 1830, 19,9% en 1835), y un
extraordinario ciclo inflacionario entre 1837 y 1840, registrándose un pico del 84,6% para fines
de 1838. Cabe mencionar que en estos años tuvo lugar el bloqueo francés al Río de la Plata,
implicando un cierre efectivo al comercio de la ciudad de Buenos Aires y a los puertos fluviales
en aquel entonces, de la Confederación Argentina. Tras la finalización del bloqueo, el nivel de
precios se redujo a una tasa anual del 40,0% hacia 1841.
Durante los años 1848-1852 la economía argentina enfrenta un período recesivo acompañado con
una disminución de la variación anual del IPC en torno al 9,1% (promedio). Esta situación se
1 Siguiendo la definición de las Normas Contables Internacionales (NIC), “… El estado de hiperinflación viene indicado por las características
del entorno económico de un país, entre las cuales se incluyen, de forma no exhaustiva…” algunas características. Entre las principales que
nombra la norma, se listan: (a) la tasa de inflación acumulada en tres años sobrepasa el 100,0% (en Argentina dicha regla se eleva a 100,0% en
un año); (b) las principales variables económicas se actualizan regularmente por inflación por medio de un índice; y (c) la población prefiere
conservar su riqueza en activos no monetarios o bien en moneda extranjera.
2 Entre los cuales se pueden nombrar: los años 1810-1817, 1865-1875, 1891-1896 y 1994-2001.
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revierte hacia finales de 1853. Entre 1855 y 1857, Argentina se encontraba emergida en un nuevo
brote inflacionario, alcanzando un pico del 42,7% en 1856.
Gráfico 1. Variaciones anuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en Argentina. Período 1810 en adelante.
Fuentes: Elaboración propia en base a datos históricos recopilados por Orlando J. Ferreres & Asociados, empalmados
con información actualizada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
En el periodo comprendido entre 1861 y 1867 se pueden destacar dos subperíodos: los primeros
tres años estuvieron marcados por expectativas inflacionarias a la suba (con una tasa de inflación
anual del 9,0%), mientras que durante los años subsiguientes se registraron variaciones anuales
negativas del 15,0% (deflación) en un marco caracterizado por una apreciación del papel moneda
junto a un incremento de las tasas de intereses nominales y reales de referencia.
Entre 1868 y 1875 Argentina se integra a la economía internacional con la implementación de las
reglas del patrón oro. Dicha política fue abandonada en mayo de 1876. Los precios que durante
este período se habían mantenido prácticamente estables, se incrementaron y se registraron tasas
de inflación del 10,0% a partir de dicho año y durante los dos siguientes.
Desde 1879 a 1883, la economía argentina enfrenta una nueva deflación en los precios; período
en el cual se adoptaron políticas fiscales y monetarias contractivas sumado a que se evidenció
una apreciación del tipo de cambio a niveles previos al régimen de patrón oro. A partir del año
1884, Argentina enfrenta un nuevo ciclo inflacionario que se prolongó 13 años, con una tasa de
inflación anual promedio del 5,2%.
Por su parte, en 1899, tras la creación de la Caja de Conversión se establece un tipo de cambio
fijo (2,27 pesos papel por un peso oro), paridad que se mantendría hasta el estallido de la Primera
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Guerra Mundial en 1914. En este lapso temporal, oscilaron años de inflación baja (en promedio,
un 4,0% anual) y a su vez, años de deflación; finalizando el periodo con una tasa prácticamente
nula. Los cuatro años subsiguientes (1914-1918) se caracterizaron por una moderada aceleración
inflacionaria, cerrando 1918 con una variación anual del IPC en torno al 26,2%.
Entre 1919 y 1929, periodo donde la economía argentina retoma una senda positiva de
crecimiento tras la recuperación por el estallido de la guerra, se registraron (a excepción de 3
años) tasas de inflación negativas, que en promedio alcanzaron un -2,0% anual.
La década del 30, en sus comienzos estuvo marcada por años deflacionarios (variación anual
promedio del -3,8%) de manera concomitante a la caída registrada de los precios mundiales;
mientras que en la segunda parte (los últimos 5 años) se registraron tasas anuales positivas, en
torno al 3,6%.
Desde 1940 hacia finales de la década de los 60, tras la aceleración de la tendencia alcista de los
precios, Argentina ingresa en un nuevo ciclo inflacionario con una tasa promedio del 23,7%. En
este periodo cabe mencionar que la tasa de inflación alcanzaría su máximo histórico (hasta ese
momento) en 1959, año que podría considerarse hiperinflacionario tras evidenciarse un
incremento de precios del 113,7% anual.
Fuentes: Elaboración propia en base a datos históricos recopilados por Orlando J. Ferreres & Asociados, empalmados
con información actualizada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
La inflación continuó su ritmo creciente en los primeros años de la década del 70 (en promedio,
una tasa del 44,4% anual) y tuvo su estallido en 1975 (tras el “Rodrigazo”), registrando una
variación anual del IPC en un 182,8%. A partir de entonces, se inicia un ciclo hiperinflacionario
que se extendió por 17 años, el cual puede subdividirse en tres etapas. Desde 1975 a 1982, la
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tasa de inflación anual promedio rondaba en un 188,5%; acelerándose de manera inédita hacia
finales de 1983. Durante los dos años subsiguientes, la variación del IPC sobrepasó el 600,0%
anual.
La implementación del Plan Austral (junio de 1985) permitió una notable reducción de la tasa de
inflación, ubicándose en un 90,1% hacia fines de dicho año.
Sin embargo, la crisis económica de 1989 vuelve a desatar el crecimiento abrupto de los precios,
aunque en este caso, a niveles nunca antes registrados en el periodo bajo análisis. En este año,
el incremento del IPC alcanzó un máximo histórico del 3.079,5%.
Gráfico 3. Variaciones anuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Período 2002 en adelante.
Fuentes: Elaboración propia en base a datos históricos recopilados por Orlando J. Ferreres & Asociados, empalmados
con información actualizada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC)
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Los cuatro años subsiguientes, se observaron tasas de inflación relativamente bajas, siempre por
debajo del 15,0%, concluyendo con un promedio entre 2002 y 2006 del 13,3%.
Sin embargo, en 2007 la variación del IPC vuelve a superar el 20,0% anual, situación que se vuelve
una nueva normalidad hasta el 2013 inclusive, llevando al promedio del periodo 2007-2013 al
23,5%.
En el 2014 se produce un nuevo salto inflacionario, estimándose una tasa del 38,5% en el año. A
partir de allí, con las excepciones de 2015 y 2017, la inflación anual superó siempre el 35,0%, con
un pico del 54,0% durante 2019. Así, el promedio de inflación desde 2014 se ubicó en torno al
39,9% anual.
Durante el presente año, se acumula una inflación del 46,2% en los primeros siete meses, con una
inflación interanual del 69,2% en julio. Adicionalmente, las expectativas de inflación para los
próximos doce meses de acuerdo al relevamiento llevado adelante por el Banco Central de la
República Argentina (BCRA), muestran que esta tendencia alcista se acentuaría con mayor
intensidad, ubicándose la tasa de inflación en promedio en torno al 83,0% anual.
En este marco, considerando que se cumplen en gran medida los criterios básicos establecidos por
las NIC (citadas al inicio), es que comenzó a preocupar la posibilidad de encontrarnos en las puertas
de un nuevo proceso hiperinflacionario. Lo cierto es que los ratios, por el momento, están lejos de
los contabilizados en etapas previas de la historia argentina.
Bibliografía consultada
Ferreres, O. J. (2005). Dos siglos de economía argentina (1810-2004).Historia argentina en cifras. Fundación
Norte y Sur.
Ocampo, E., & Chacanosky, N. (2022). Sección I. Breve historia de la inflación en Argentina. En Dolarización:
Una solución para la Argentina. (págs. 35-105). Buenos Aires, Argentina: Claridad S.A.