Maistrito de Pueblo (Abrham Rivera Sandoval)

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Que ya te dije que no

y tus caprichos no acepto, MAISTRITO… sólo un don nadie


Aunque me dejes de hablar, Un vulgar vago de pueblo,
aunque te sientas molesto; Que va a organizar plantones,
Y aunque me hagas sentimiento Marchas, huelgas y jaleos.
no he de darte mi permiso… Un flojo que sólo quiere
Antes, té lleno de cuero. Ganar dinero y dinero
Sin importarle a los niños
Ni sentir el magisterio.
Tanto dinero gastado, Que no venera a la patria
Tanto celo, tanto empeño, Hombre ruin, politiquero,
La primaria, secundaria, Pues para él sólo es valioso
Prepa y curso propedéutico. Pasarla de mitotero.
Tanta hablada de tu parte
Con todos tus compañeros
Diciendo… que tú serías Explíqueme… licenciado
Un profesionista bueno, Dígame usted, ingeniero
Que ibas para licenciado ¿Qué va a enseñarle a los niños?
O que si no… serías médico, ¿ Cómo va a orientar al pueblo?
Contador, militar, cura, ¿Cómo va exponer su clase
Político o ingeniero. a los niños de primero,
si usted no sabe contar,
ni jugar, ni estar contento,
Y hoy que estás como chiflado ni sabe del trato amable
O loco te estás volviendo y menos contar un cuento
Me sales de babosote y sólo sabe vestirse
Con la idea de ser maestro. más o menos de… cirquero?
Tanto dinero gastado…
Tanto afán y tanto empeño
Tantas felicitaciones Muy sabihondo el hombrecito
De amigos y compañeros, Que ni quebrados, ni enteros,
Para que hoy… con gran cinismo Ni decimales, ni nada,
Tú me digas… ya no quiero ¿Sabe el señor embustero?
Llegar a ser burgués cursi Conque… ya dije que no
Si no preciado maestro. Y no me siga moliendo…
Que normal, ni que normal…
No quiero que seas maestro.
¿Qué, no te va a dar vergüenza Antes te llevo al ejido
de rebajarte tan feo? Para que seas jornalero
¿Qué no vas a sonrojarte Pa’ que el sol te dé en el lomo
de bajar a tal empleo? Y te pongas fuerte y prieto.
¿MAISTRITO?… que grande cosa,
que dignidad… que talento…
que porvenir… que importancia, ASI ME DIJO MI PADRE
que prestigio… que abolengo. Y YO QUE MUCHO LO QUIERO
BAJE LA FRENTE Y SALI
DICIENDOLE… ESTOY DE ACUERDO
MAISTRITO DE ESCUELA… un torpe YO SERE LO QUE USTED DIGA
Que nada sabe de cierto, EN VERDAD… SE LO PROMETO
Haragán, irresponsable, PERO… YA NO ESTE ENOJADO
Vago, pobre… un majadero. PUES LE HACE DAÑO… Y ME APENO.

Salí a la calle, vagué


Por las calles y los huertos,
Si quiere que sea feliz
Por el jardín, la placita, Y desea que sirva al pueblo.
Por la iglesia y el colegio… Si quiere que colabore
Miré a los peones cansados Para mejorar a México.
Sudorosos, sin aliento, Si usted quiere que mi vida
Poniendo sobre un papel La dedique a lo que quiero
Sólo la huella del dedo. Luchando por la igualdad,
Vi a las mujeres descalzas Por la ciencia y el progreso…
Cargando leña del cerro, Deje padre, que yo tenga
Y vi niños, muchos niños La profesión con que sueño.
Hurgar en los basureros. Deje que yo sea feliz
Con mis niños sin colegio.
Recogí desesperado Deje que con mi vocación
A esa gente de mi pueblo, Se torne clase y recreo,
A esas gentes sin fortuna, Que sea lección de cariño,
Sin rendición, ni consuelo. Que sea canto, que sea verso,
Los metí en mi corazón, Que pueda yo ser lucero
En mi entraña, en mi cerebro, Con la luz del alfabeto.
Les di patria en mi conciencia,
Y me confundí con ellos. Que pueda ser manantial
Allí frente a aquellos niños Que sacie la sed del pueblo.
Frente a esos niños enfermos, Déjeme sufrir… luchar,
Pensé que eran angelitos Déjeme vivir con ellos
Despreciados por el cielo. Para lograr educarlos,
Miré que no tenían alas Para construir un colegio.
Los miré casi sin cuerpo, Déjeme padre… que luche…
Angeles sin un hogar, Deme permiso le ruego
Sin virgen, sin padre nuestro. Para sembrar esperanzas,
Para apuntalar anhelos.
Y pensé… si me aferrara Deje que forme una escuela,
A ser licenciado o médico, Escuela a los cuatro vientos,
Contador, conferencista, Escuela de libertades
Sacerdote o ingeniero, Donde haya luz y contento.
¿Cómo podría despertar Deme permiso papá…
la conciencia de mi pueblo? Que yo sea un maistrito de pueblo
¿Qué les favorecería Que marque programas justos,
que yo lograra alto empleo, Que trace caminos nuevos.
Sí ni justicia, ni amor, Deje que siembre la miel
ni palabras de consuelo Deje que propicie el vuelo
podría darles y ofrecerles De esa águila que parece
para calmar su tormento?… No tener alas ni aliento
Deje que escuche mi voz
El militar, el gobierno,
entonces volví a mi hogar, El sacerdote, el artista,
todo lo tenía resuelto, El paria y el jornalero,
llamé a mi padre y le dije:
“Yo a usted mucho lo respeto…
comprendo sus sacrificios, Si ya mi hermano es doctor
Sé de sus ansias y sueños. Y el mayor ya es ingeniero,
Pero hoy… quiero que me escuche, ¿Porqué no permite usted
Por favor… sólo un momento. que yo… me torne maestro…
Sí ellos en su ingratitud
ya han formado un mundo nuevo
de explotación, de egoísmo, Y los niños macilentos,
de lujos y de dinero. Yo aquí me quedo esperando
Si de usted se han olvidado, Con orgullo verdadero,
Si ya no vienen al pueblo, Porque sé que cumplirás
Y en su situación burguesa Ser prestigiado maestro.
Gratitud y amor han muerto. Anda hijo mío… vete ya.
Si ellos saben que aquí, en casa, Que si de momento muero
Hay pobreza y hay apremio, Con orgullo gritaré:
Porque ni por caridad MI HIJO… ES MAISTRITO DE PUEBLO.
Lo atienden cuando está enfermo?…

Mi padre quedó pensando


Silencio guardó un momento…
Luego me abrazó y me dijo
Si… muchacho… te comprendo:
Vete a luchar hijo mío
Yo esperaré tu regreso,
Sabiendo que traerás cosas
Logradas con fe y empeño.
Cuando vuelvas hijo mío
Vamos a estar muy contentos
Y se llenará la casa
Con tu amor y tus pequeños.
Si aquí no me encuentras,
Sé que tendrás el consuelo
De volver a esta tu casa
De regresar a tu pueblo.
Yo sé que vendrás por verme,
Tú vendrás por este viejo
Y querrás con toda tu alma
Enseñarme el alfabeto.

Más si aquí no me encuentras


Ve a buscarme al cementerio
Y ahí sólitos los dos
Envueltos en el silencio
Me dirás de tus afanes,
De tus luchas, tus proyectos,
De tus sencillas tareas
De tu honor y de tus éxitos.
No me traigas flores, hijo,
Yo sé que no las merezco,
ni cruz, ni ceras, ni nada,
sólo quiero tu recuerdo.

ANDA HIJO MIO… vete ya .


México espera tu esfuerzo,
Te espera el hombre ignorante

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