Evaluación Nutricional 2019
Evaluación Nutricional 2019
Evaluación Nutricional 2019
Contenidos Teóricos
Evaluación Nutricional
2019
1) Objetivo General:
Que los alumnos sean capaces de seleccionar e interpretar adecuadamente los indicadores
del estado de nutrición y su interrelación a fin de integrar un diagnóstico y proponer medidas
apropiadas para prevenir o reparar daños nutricionales tanto a nivel individual como poblacional.
2) Objetivos específicos:
UNIDAD I
UNIDAD II
UNIDAD III
Aspectos que definen la metodología para la valoración antropométrica del estado nutricional
individual y /o poblacional: Índices antropométricos
(Peso/Edad, Talla/Edad, Peso/Talla, Perímetro braquial/ Edad, Pliegue Tricipital/Edad, Pliegue
Subescapular/Edad. Población de referencia. Características y criterios para su elaboración según
OMS. Poblaciones de referencia. Cuantía de DS (Puntaje Z). Criterio diagnóstico o punto de corte,
requerimientos para su elección. Clasificación o diagnóstico del Estado de Nutrición.
UNIDAD IV
UNIDAD V
Estimación del error de medición. Objetivo. Metodología. Concepto de Precisión, Exactitud y Error
Sistemático. Análisis e interpretación de los resultados obtenidos.
UNIDAD VI
UNIDAD VII
Evaluación nutricional antropométrica en niños, adolescentes y adultos por Índice de Masa Corporal
(IMC). Criterios para su utilización.
UNIDAD VIII
UNIDAD IX
UNIDAD X
Evaluación nutricional antropométrica del adulto mayor. Peso relativo por altura. IMC. Instrumentos
para valorar riesgo nutricional.
UNIDAD XII
UNIDAD XIII
UNIDAD XIV
UNIDAD XV
Evaluación bioquímica del estado de nutrición. Pruebas bioquímicas de utilidad respecto a macro y
micronutrientes. Ventajas y limitaciones de cada indicador.
UNIDAD XVI
Evaluación clínica del estado de nutrición. Identificación de los signos clínicos más importantes que
se presentan en la desnutrición. Interpretación. Utilidad. Limitaciones.
Introducción
Los instrumentos de tamizaje para la valoración del riesgo nutricional usados en la comunidad
han sido adoptados en “la práctica clínica” para valorar el estado nutricional de pacientes
hospitalizados. Esta práctica se ha incrementado debido a las altas prevalencias de malnutrición
proteico-energética en pacientes internados.
Se han desarrollado varios protocolos para valorar pacientes hospitalizados (por medio del
tamizaje). Después de dicha aplicación es necesario implementar una intervención y la evaluación
sistemática, para seguir la respuesta del paciente a la dietoterapia (5).
El tamizaje se puede realizar en el área hospitalaria para definir riesgo nutricional a fin de
priorizar la atención e implementar una terapia nutricional temprana y oportuna. En función al riesgo
se implementa un accionar para disminuirlo (con mayor aporte, con suplementación o soporte
nutricional, entre otros) (6). Se realizará el seguimiento del paciente por medio de la Valoración
Nutricional.
Si la institución presenta bajo número de camas o una relación adecuada nutricionista-
pacientes, se podría realizar directamente la Valoración Nutricional.
notifican y reportan los datos relevados de los controles de salud, por el cual, todos los datos
antropométricos son centralizados por los Sistemas de Salud Provinciales, para generar información
epidemiológica de manera sistemática, que actualmente se encuentra en proceso de análisis
metodológico a nivel central, para poder ser publicada.
Por otro lado, existen otras estrategias que proporcionan información de la situación
nutricional que permiten el seguimiento del estado de nutrición y favorecen la toma de decisiones en
términos de gestión de intervenciones alimentarias-nutricionales:
- Encuestas Nacionales de Factores de Riesgo – 2005, 2009, 2013- en las cuales se relevaron
indicadores: Ingesta Alimentaria (frutas y verduras), Conductas (agregado de sal, lectura de
rótulos, control del peso corporal) e Impacto sanitario (sobrepeso y obesidad) (7).
- Encuesta Mundial de Salud Escolar – 2007, 2012- en las mismas se relevó: Ingesta (frutas y
verduras, bebidas azucaradas, comidas rápidas), impacto sanitario (sobrepeso y obesidad) y
entorno (disponibilidad de alimentos en kioscos y cantinas escolares) (8).
Tamizaje en la población: Los estudios de tamizaje se pueden definir como acciones preventivas
en el marco de intervenciones orientadas a evitar la aparición de enfermedades específicas (9) cuyo
objetivo es captar individuos sin esperar a que demanden un servicio o atención de salud. Estos
estudios pueden ser realizados en la población total, aunque generalmente se realizan en un
subgrupo específico según los objetivos del estudio (niños menores de 5 años, escuelas, comedores
comunitarios, ancianos, etc).
La valoración se realiza con pocos parámetros, que son interpretados como predictores de
riesgo para la situación que se quiere conocer. El instrumento debe ser simple, de bajo costo y que
permita recolectar la información rápidamente en un gran número de individuos.
En este contexto, la antropometría clásica surge como la principal herramienta de tamizaje
por cumplir con estos requisitos (Ver capitulo Conceptos básicos de antropometría).
Por lo tanto, el tamizaje permite la identificación de individuos con riesgo nutricional que
requieren de un plan de acción determinado (seguimiento o valoración nutricional y tratamiento
nutricional según corresponda) (Ver Fig. 2).
Podemos mencionar a modo de ejemplo, el Programa Nacional de Sanidad Escolar
(ProSanE), que evalúa el estado de salud de niños y niñas de primero (6 años) y sexto grado (12
años) de escuelas de todo el país mediante unexamen físico integral que incluye la evaluación del
estado de salud a través de: examen clínico, control de vacunas, evaluación odontológica,
oftalmológica y fonoaudiológica. A nivel clínico, entre otras determinaciones, se lleva a cabo la
valoración antropométrica de peso y talla, determinándose el IMC. En aquellos niños que presenten
alterados algunos de los controles, será derivado al especialista, para que este continúe con
evaluaciones más exhaustivas (10).
Internación Ambulatorio
Valoración Valoración
Tamizaje
Nutricional Nutricional
Intervención
inmediata
Evaluación Sistemática
Valoración
nutricional a nivel
poblacional
Encuesta Nutricional y
Vigilancia Tamizaje
de Salud
Ej: SUMAR Ej: PROSANE
Ejemplo: ENNyS
Sin riesgo
Plan de acción Con riesgo
(No se deriva)
Derivación a
valoración nutricional
Bibliografía
1- Gibson RS. Principles of nutritional assessment. 2nd Ed. Oxford University Press, 2005.
4- Sociedad Argentina de Pediatría. Guías para la Evaluación del Crecimiento Físico. Buenos
Aires, 2013.
FELANPE, 2009
La finalidad de la Historia Clínica Nutricional es reunir datos del estado de salud del
paciente con el objeto de facilitar su asistencia. Es una herramienta de intercambio de
observaciones e informaciones, que facilita la coordinación del equipo de salud en las
actividades del cuidado del paciente.
puede detectar deficiencias anteriores a las manifestaciones clínicas. Sin embargo, hay que ser cauto
cuando se quiere inferir el diagnóstico nutricional a partir de ellos. (Ver capítulo siguiente).
En la valoración de signos clínicos se busca detectar signos de deficiencia de nutrientes en la
piel, ojos, labios, boca y encías, lengua, cabello, uñas, tejido subcutáneo, aparato músculo-
esquelético y sistema nervioso (4).
EVALUACIÓN BIOQUÍMICA
La evaluación bioquímica consiste en medir los niveles del sustrato o metabolito en sangre,
su excreción urinaria o las alteraciones en actividades enzimáticas o cambios en niveles de ciertos
metabolitos relacionados con la misma. A partir de esas mediciones y sus valores encontrados, se
puede detectar deficiencias anteriores a las manifestaciones clínicas. Sin embargo, hay que ser cauto
cuando se quiere inferir el diagnóstico nutricional a partir de ellos.
Para la valoración de la masa proteica muscular se suelen utilizar determinaciones urinarias
de metabolitos provenientes del músculo. Para tal fin, no deben ser influenciados por la dieta, ser
exclusivos de ese sector a valorar y excretarse sin modificaciones.
Para inferir masa proteica muscular se han utilizado la creatininuria de 24 hs, elíndice
creatinina/altura, creatinina /talla o creatinina/peso.
La creatina es sintetizada principalmente en el riñon a partir de la arginina, glicina y metionina.
El ácido guanidinacético formado es metilado en el hígado para constituir la creatina. La creatina se
encuentra en todos los tejidos, pero el 98% se aloja en el músculo estriado, en donde establece un
reservorio con enlaces fosfóricos ricos en energía (Creatinfosfato). Este puede desarrollar una
reacción reversible con el ADP para generar ATP, en casos que la célula sea sometida a un esfuerzo
que supere la formación de ATP por la cadena respiratoria. La creatina se convierte en creatinina,
mediante una reacción de deshidratación y se elimina por orina. La creatinina es un constituyente
habitual de la orina y ha sido utilizada como expresión de la masa muscular. Inicialmente, fue
empleada para establecer un índice de malnutrición en los niños, relacionando la excreción de
creatinina urinaria de 24 hs del sujeto con respecto a lo excretado por un niño normal de igual altura
(1). Este índice, creatinina/talla presenta una relación normal cercana a la unidad. La independencia
de la edad y del peso, permite comparar niños de diferentes zonas, con retardo del crecimiento y
estados de malnutrición, con o sin edema. Es aceptado como índice válido individual para estimar el
grado de depleción o repleción proteica en niños hospitalizados (2,3).
Sin embargo, es necesario recordar que el coeficiente normal de creatinina excretada es
mayor en el hombre que en la mujer. Esta diferencia se inicia a partir de los 12 años y se interpreta
por la estrecha relación con la masa muscular. De la misma manera, sujetos obesos presentan
coeficientes más bajos que sujetos delgados. A pesar de haberse sostenido que su excreción es
independiente de la dieta, se ha demostrado que alimentos ricos en creatina aumentan la eliminación
de creatinina urinaria, como también lo hace el ejercicio (4).
Las limitaciones de medir la creatinina en orina de 24 hs, radica en la gran variabilidad en la
excreción, que puede llegar a 32%. Esa limitación sugiere la realización de varias muestras de 24
BIBLIOGRAFÌA
5. Orgunshin,,SO and Hussain MA: Plasma thyroxine hinding prealbumin as a index of mild protein-
energy malnutrition in nigerian children. Am J Clin Nutr,33:794-1980.
INDICADORES BIOQUIMICOS
1- Generalidades
2- Papel de los distintos nutrientes en el crecimiento: Clasificación de Golden
3- Indicadores bioquímicos de aplicación en la población- OMS
1- Generalidades
La evaluación bioquímica consiste en medir los niveles del sustrato o metabolito en sangre,
su excreción urinaria, las alteraciones en actividades enzimáticas o cambios en niveles de ciertos
metabolitos relacionados con la misma. Sin embargo, hay que ser cauto cuando se quiere inferir el
diagnóstico nutricional a partir de ellos como ya se ha mencionado.
Los indicadores bioquímicos son particularmente útiles por debajo del horizonte clínico (Ver
Esquema de Leavell y Clark). A través de estos pueden identificarse deficiencias subclínicas y
monitorearse programas de prevención y/o corrección de los déficits prevalentes así como fijarse
patrones correctos de referencia para determinar recuperación (Pita Martín de Portela, 1997).
Este aspecto de aplicación de la bioquímica puede dividirse en dos áreas fundamentales (Tabla 1):
Clínicay Salud Pública.
INDIVIDUOS POBLACIONES
Los estados de deficiencia en el individuo son de dos tipos, específico y general, que pueden o no
coexistir:
Las deficiencias específicas, como las avitaminosis clásicas, dan lugar a resultados clínicos
definidos, a menudo descriptos por nombres clave, como el escorbuto, el beri-beri o el raquitismo
(Waterlow, 1996). Con mucha frecuencia los signos clínicos van acompañados o precedidos de
alteraciones bioquímicas que permiten un diagnóstico temprano de deficiencias subclínicas o
inminentes. En muchos casos de deficiencias se produce una disminución en la concentración en la
sangre o en los tejidos de un determinado elemento nutritivo. El problema del diagnóstico bioquímico
se convierte así en el desafío de establecer las líneas que separan la normalidad, la deficiencia y el
riesgo (Waterlow, 1996).
Una deficiencia general se refleja en un retraso del crecimiento o en una pérdida de peso,
generalmente sin alteraciones clínicas ni bioquímicas específicas (Waterlow, 1996).
Esta diferencia en la repercusión sobre el crecimiento permitió a Golden clasificar a los nutrientes en
dos grupos: tipo I y tipo II (Tabla2).
Tabla 2. Clasificación de los nutrientes esenciales de acuerdo con el tipo de respuesta clínica inicial
a la deficiencia
Retraso de crecimiento No Si
NUTRIENTES
B. Con depósitos en el Fe, Ca, Cu, Mn, Fl, I Sustratos oxidables (energía)
organismo
Ácido Fólico
Los nutrientes tipo I suelen tener órganos de depósito. En los estados carenciales, primero se
consumen éstos y posteriormente se reduce la concentración en los tejidos. Solamente entonces
aparecen manifestaciones clínicas, que se expresan por signos carenciales específicos, mientras
que la afectación del crecimiento es tardía y siempre secundaria al trastorno metabólico general.
Por el contrario, los nutrientes de tipo II no tienen depósitos conocidos en el organismo, y es muy
difícil identificar el déficit con las técnicas habituales de estudio, ya que durante largo tiempo se
manifiesta exclusivamente por la detención del crecimiento en longitud simulando una alteración
endocrina (Hernández- Rodríguez, 2001).
Como excepción, algunos nutrientes pertenecientes al tipo I de la clasificación de Golden dan lugar
a lesiones localizadas en el cartílago de crecimiento y como consecuencia se comportan de una
manera atípica compartiendo algunos rasgos de ambos grupos. Esto es lo que sucede con la
carencia de manganeso o de vitamina D; en el primer caso, por la reducida actividad de la enzima
uridino-galactosidil tranferasa I, necesaria para la síntesis de proteoglicanos y en el déficit de vitamina
D por el trastorno de la mineralización (Hernadez-Rodriguez, 1999).
El mecanismo mediante el cual los nutrientes tipo II actúan sobre el crecimiento no se conoce
completamente; se ha atribuido a su participación en numerosas metaloenzimas; sin embargo éstos
son componentes básicos de la estructura celular y, por consiguiente, relativamente estables
(Hernadez-Rodriguez, 1999).
Los valores de corte que se consignan en estos resúmenes son esenciales para distinguir a las
poblaciones con mayor riesgo de sufrir estas carencias y que, por ende, necesitan algún tipo de
intervención. Asimismo, son de utilidad para vigilar las tendencias de las carencias de vitaminas y
minerales y evaluar los efectos de las intervenciones, lo que, a su vez, permite cuantificar los
progresos realizados en la consecución de los objetivos internacionales de control y prevención de
dichas carencias.
Bibliografía:
Golden M. Specific Deficiencies versus Growth Failure: Type I and Type II Nutrients. Journal of
Nutritional and Environmental Medicine, 1996, Vol. 6, No. 3: Pages 301-308
Hernández Rodríguez M, Sastre Gallego A. Tratado de Nutrición. Ediciones Díaz de Santos, 1999.
Portela MLPM de, Río ME, Slobodianik NH. Aplicación de la bioquímica a la evaluación del estado
nutricional. Buenos Aires: Ed. Libreros López;1997.
Dicha sugerencia está avalada por la evidencia científica que muestra la relación entre la
desnutrición - la morbi-mortalidad y los costos asociados.
Se conoce que la desnutrición aumenta durante la estancia hospitalaria y ello responde a
múltiples factores. Por un lado, la propia patología puede influenciar a una ingesta inadecuada de
nutrientes por anorexia, dificultad para la ingesta, problemas de masticación, disfagia, mucositis o
falta de autonomía para comer. Pero también, dificultad en la digestión o en la absorción de los
alimentos, o incluso aumento de los requerimientos nutricionales, bien por estrés metabólico o por
pérdidas persistente de nutrientes. Por otro lado, determinados procesos diagnósticos pueden
contribuir al desarrollo de la desnutrición, por la indicación de ayuno para la realización de
determinadas exploraciones o procedimientos (5).
La desnutrición en el paciente hospitalizado es el resultado de la compleja interacción entre
enfermedad y nutrición. Es altamente prevalente, así como ignorada e infra-tratada. Comporta
importantes consecuencias clínicas y económicas. Clínicamente, puede contribuir a incrementar el
número y la gravedad de las complicaciones de la propia enfermedad, a debilitar la capacidad de
respuesta al tratamiento, a disminuir el grado de respuesta inmune y a incrementar, en definitiva, la
morbi-mortalidad (6). Desde el punto de vista económico, está demostrado que la desnutrición
aumenta el costo asociado a la prolongación de la estadía hospitalaria y el costo asociado al
tratamiento adicional de las complicaciones (7,8).
La prevalencia de la desnutrición en pacientes hospitalizados ha sido ampliamente
documentada en las últimas tres décadas y es de 19% hacia 80% de los pacientes, como se muestra
en la tabla I, de acuerdo con el país y el grupo de pacientes estudiados (4).
La valoración global subjetiva es una prueba de tamizaje desarrollada por Detsky et al. en
1987 en el Hospital General de Toronto. Método de valoración del riesgo nutricional usando la historia
clínica y la exploración física. Variables que utiliza: Pérdida de peso en los últimos 3 meses, ingesta
actual vs ingesta habitual, presencia síntomas (náuseas, vómitos, diarrea, anorexia), pérdida masa
grasa, muscular, ascitis; capacidad funcional o gasto energético.
Originalmente la prueba fue diseñada exclusivamente para pacientes sometidos a cirugías
gastrointestinales pero su aplicación se ha extendido a diferentes áreas de internación (12).
El cambio de peso en relación con el peso habitual es un índice muy importante. La pérdida
de peso debe ser involuntaria, es decir, no mediada por una dieta indicada.
El peso habitual representa lo “normal” para el individuo previo a la enfermedad y el peso
actual es el que presenta por “efecto de la enfermedad”.
Una pérdida de peso no intencional mayor al 10% es un indicador de mal pronóstico (12).
Bibliografía
10. Basaluzzo,J; Jorge,M; Montiel,G; Witriw,A; Pargament,G; Francioni,S; Castro,M. “Utilidad del
NomogramaHemodilucionalZNa/ZK en UTI”. MedicinaIntensiva. 2000; 17(2):48-52.
14. Stratton RJ, Green CJ, Elia M. Disease-related malnutrition: an evidence-based approach to
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15. Correia MI, Waitzberg DL. The impact of malnutrition on morbidity, mortality, length of stay and
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16. Pérez de la Cruz A, et al. Malnutrition in hospitalized patients: prevalence and economic impact.
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17. Perez R, MI. “Diagnóstico de malnutrición al pie de cama”. Review. Nutrición Clínica en
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18. Kondrup,J; et al.SPEN “Guidelines for Nutrition Screening 2002”; 2003(22) 4, Pages 415–421.
19. VGS: Valoración Subjetiva Global. Detsky. What is subjective global assessment of nutritional
status? JPEN J Parenteral Enteral Nutrition.1987,11(1):8-13.
A nivel individual, se usa la antropometría para identificar a las personas que necesitan una
consideración especial o para evaluar la respuesta de esa persona a una intervención (OMS, 1995).
Tanto en las poblaciones como en los individuos, las principales decisiones para las cuales
se usan los datos antropométricos se vinculan con los tipos de intervención que se prevén. Entre las
aplicaciones típicas figuran las decisiones sobre la necesidad o no de programas de intervención, a
quiénes deben estar dirigidos los programas y cuál será su naturaleza.
Estas aplicaciones son similares a las relacionadas con la detección de individuos; no
obstante, rara vez están tan bien establecidas las decisiones apropiadas cuando se trata de
poblaciones. La gestión de los programas y los sistemas de pronta alarma e intervención para
prevenir las hambrunas y las crisis de alimentos, para los cuales desde hace mucho tiempo se han
usado métodos de poblaciones, son probablemente excepciones a esta regla general (OMS, 1995).
1. Índices antropométricos
2. Curvas de crecimiento y tablas de referencia
3. Límite de inclusión
1. Índices antropométricos
La selección de los índices antropométricos dependerá del objetivo del estudio a realizar,
Algunos ejemplos:
1. Determinar el estado nutricional general de la población o subgrupos.
2. Identificar áreas, poblaciones o subgrupos con riesgo nutricional.
3. Caracterizar la extensión y naturaleza de los problemas nutricionales en la población o
subgrupos.
4. Identificar las posibles causas de problemas nutricionales en la población o subgrupos.
5. Diseñar programas de intervención apropiados para las poblaciones o subgrupos de
alto riesgo
6. Monitorear el progreso los programas de intervención
7. Evaluar la eficacia y efectividad de los programas
8. Seguir los progresos hacia el logro de metas a largo plazo
Los objetivos 1 a 3 pueden ser alcanzados con una encuesta nutricional que incluya todos
los métodos de valoración nutricional. Dichas encuestas, por ser de corte transversal, no pueden dar
información sobre las causas de los problemas nutricionales (objetivo 4). Así, los objetivos 4 y 6
pueden ser alcanzados con estudios de vigilancia. La valoración de las posibles causas de
problemas nutricionales es un pre-requisito cuando se implementan programas de intervención
nutricional.
En algunos casos, el objetivo puede ser identificar solo aquellos individuos con riesgo
nutricional y que requieren una intervención (objetivo 5). En estos casos se requiere de un estudio
de tamizaje que utiliza mediciones simples y de bajo costo y que reflejan tanto el estado nutricional
pasado como presente (Gibson, 2005).
La talla para la edad refleja el crecimiento lineal alcanzado para esa edad, en un momento
determinado.
Cuando la Talla para la edad se encuentra baja la OMS propone la siguiente diferenciación:
baja estatura y detención del crecimiento. La baja estatura es la definición descriptiva de la talla baja
para la edad. No indica nada acerca de la razón de que un individuo sea bajo y puede reflejar la
variación normal o un proceso patológico. La detención del crecimiento es otro término usado
comúnmente, pero implica que la baja estatura es patológica: refleja un proceso de fracaso en realizar
El P/T refleja el peso relativo alcanzado para una talla dada, describe la masa corporal total
en relación a dicha talla y permite medir situaciones pasadas. Su empleo tiene la ventaja de que no
requiere conocer la edad. Sin embargo, es importante señalar que el peso para la talla no sirve como
sustituto de la talla para la edad o el peso para la edad, ya que cada índice refleja una combinación
diferente de procesos biológicos.
Cuando el índice se encuentra bajo, la OMS propone una distinción al interpretar dicho Peso
bajo para la talla: delgadez y emaciación. La descripción adecuada del peso bajo para la talla es
delgadez, término que no implica necesariamente un proceso patológico. El término emaciación, por
el contrario, se utiliza para describir un proceso grave y reciente que ha llevado a una pérdida
considerable de peso, por lo general como consecuencia de una deficiencia alimentaria aguda y/o
una enfermedad grave. Los niños también pueden ser delgados como resultado de una deficiencia
crónica de la dieta o una enfermedad; el empleo del término emaciado es apropiado para aquellos
niños en quienes se sabe que la delgadez es causada por uno de estos procesos patológicos (2).
Los términos desnutrición aguda, desnutrición actual, desnutrición grave y desnutrición
crónica, a menudo se usan erróneamente como sinónimos de emaciación. Sin embargo, la falta de
pruebas de la presencia de emaciados en una población no implica la ausencia de problemas
nutricionales actuales: puede existir detención del crecimiento y otras deficiencias. Por otra parte, el
peso bajo para la talla no siempre tiene un comienzo reciente; puede ser el resultado de un problema
crónico en algunas comunidades (2).
El IMC para la edad es un indicador que también combina el peso corporal con la talla y la
edad del niño, pero es especialmente útil cuando se quiere clasificar sobrepeso u obesidad. La curva
de IMC para la edad y la curva de peso para la longitud/talla tienden a mostrar resultados similares,
aunque el documento enfatiza que es preferible el uso del P/T para clasificar bajo peso (2,4).
Sin embargo, en la actualidad se usa en reemplazo del Peso/Talla incluso para valorar el
riesgo de bajo peso (5).
El peso para la edad refleja la masa corporal en relación con la edad cronológica. Es influido
por la talla del niño y por su peso, y por su carácter compuesto resulta compleja su interpretación.
Cuando el Peso para la edad se encuentra bajo, la OMS propone la siguiente diferenciación:
peso bajo para describir el peso bajo para la edad, mientras que se ha usado peso insuficiente para
referirse al proceso patológico subyacente (2).
Esta metodología combina los índices Peso para la Talla y Talla para la Edad. El diagnóstico
que se obtiene con estos índices surge de la complementación de ambos índices. De esta forma, a
partir del índice P/T se identifican casos de emaciación u obesidad mientras que el índice T/E
identifica casos de retraso del crecimiento (acortados).
El índice de masa corporal refleja la masa corporal total con respecto a la talla. Es un buen
indicador para ser aplicado en estudios de tamizaje para inferir riesgo de masa grasa aumentada o
en todo caso para inferir sobrepeso u obesidad. No es un índice que pueda inferir la masa muscular.
Por ese motivo, su aplicación para inferir delgadez no se utiliza en la actualidad. Tiene la ventaja de
usar pocos parámetros (característica que se aplica al tamizaje) pero no detecta variación en los
diferentes componentes del organismo (aumento de retención hídrica o disminución o aumento de
masa muscular).
Perímetro Braquial:
En adultos: los estudios que analizan este indicador revelaron una correlación entre el punto
de corte de 24 cm para mujeres y 26 cm en los hombres con riesgo de desnutrición proteica en esta
población (12, 13).
Podemos concluir que el PB/E ha sido uno de los indicadores antropométricos más utilizados
tradicionalmente en el tamizaje de la desnutrición. Varios autores la consideran como una medida
fácil de ser tomada, rápida, económica y con menos posibilidades de error en su determinación que
otras variables antropométricas, por lo cual ha sido muy valorada y de amplia utilización, en particular
en Atención Primaria de Salud y en programas de Nutrición Comunitaria.
Sin embargo, hay que recordar que la toma del perímetro se ve influenciada por el espesor
del pliegue tricipital, el valor del radio del hueso, la masa muscular y la posible retención hídrica
presente en ese sitio.
Una manera de disminuir el error ocasionado por esas variables es calcular la circunferencia
media muscular del brazo (CMMB) de la siguiente manera:
Es decir, que la medida de la circunferencia media muscular del brazo, resulta de la diferencia
entre la circunferencia del brazo y el espesor del pliegue tricipital.
Con ese índice se intenta inferir la masa muscular del sujeto (restando el espesor del pliegue
y por lo tanto disminuyendo la incidencia de esa variable en la medida total) y se relaciona también
con la edad y el sexo. Es un índice que presenta mayor aproximación a la cantidad de masa muscular
real en ese sitio en relación al perímetro braquial.
Pliegues
Los pliegue Tricipital o Subescapular son utilizados como indicador de masa grasa total del
individuo, relacionándolos con sexo y sobre todo con la edad.
Está descripto que la distribución de la masa grasa no es homogénea, tanto en hombres como
en mujeres. El pliegue subescapular es considerado un buen estimador del exceso de masa grasa
total en las mujeres (14).
Sumatoria de 4 pliegues:
Si bien la OMS avala el IMC como buen índice de riesgo de masa grasa aumentada, varios
autores sugieren utilizar sumatoria de 4 pliegues ya que además de correlacionar perfectamente con
el exceso de adiposidad, tiene la capacidad de determinar el porcentaje de la misma, diferenciándola
por sexo.
Una vez obtenida una medida antropométrica, ésta debe ser valorada comparándose con una
población de referencia. Estas referencias se construyen a partir de la medición de un número
representativo de individuos pertenecientes a cada grupo de edad y sexo, seleccionados de una
población que viva en un entorno saludable según las recomendaciones vigentes, por ejemplo,
lactantes amamantados según las recomendaciones de la OMS.
Entre 1997 y 2003, la OMS llevó a cabo un Estudio Multicéntrico sobre el Patrón de
Crecimiento (EMPC) con el fin de determinar un nuevo conjunto de curvas destinadas a evaluar el
crecimiento y el desarrollo motor de los lactantes y niños de 0 a 5 años.
En el marco del EMPC se obtuvieron datos básicos sobre el crecimiento e información
relacionada de unos 8500 niños de distintos orígenes étnicos y entornos culturales (Brasil, Estados
Unidos de América, Ghana, India, Noruega y Omán).
Las nuevas curvas de crecimiento proporcionan una referencia internacional única que
corresponde a la mejor descripción del crecimiento fisiológico de todos los niños menores de cinco
años. También establecen la alimentación con leche materna como modelo normativo de crecimiento
y desarrollo (4).
A partir de 2007, el Ministerio de Salud de la República Argentina adaptó estas nuevas curvas
de crecimiento para el seguimiento y la atención, individual y poblacional, de los niños entre el
nacimiento y los 6 años de edad, en reemplazo de las Tablas Nacionales anteriormente avaladas por
la Sociedad Argentina de Pediatría (5).
Las tablas y curvas están disponibles en Percentilos y Puntaje Z para los índices:
Longitud/estatura para la edad (longitud para menores de 2 años y estatura para los mayores); Peso
para la edad; Peso para la longitud; Peso para la estatura; Índice de masa corporal (IMC) para la
edad; Perímetro cefálico para la edad; Perímetro braquial para la edad; Pliegue cutáneo
subescapular para la edad; Pliegue cutáneo del tríceps para la edad (4).
3. Límite de inclusión
Bibliografía:
7. De Onis et al. The WHO MulticentreGrowth Reference Study: planning, studydesign, and
methodology. FoodNutr Bull. 2004 Mar; 25(1 Suppl):S15-26.
11. Barahona de Figueroa J. El Perímetro braquial como indicador del estado nutricional frente
a los indicadores peso/edad, talla/edad, peso/talla, en pre-escolares de la consulta externa
de pediatría del hospital Nacional Zacamil.
13. Berdasco Gómez A, Romero del Sol JM Circunferencia del Brazo como evaluadora del
estado nutricional del Adulto. Revista Cubana AlimentNutr 1998;12(2):86-90.
14. Witriw AM; BasaluzzoJM; BasaluzzoG: Distribución de la grasa corporal en sujetos con
aumento severo de la reserva calórica. PrensaMédica Argentina; 1999,86:44-53.
15. Durnin, JGVA and Womersley. Body fat assessed for total body density and its estimation
from skinfold thickness: measurements on 481 men and women aged from 16-72 years.
British Journal of Nutrition 1974;32: 77-97.
17. Sociedad Argentina de Pediatría. Guías para la Evaluación del Crecimiento Físico. Buenos
Aires, 2013.
Cálculo de Puntaje Z
El puntaje Z se utiliza para describir cuánto se aleja una medición del centro de una
distribución (media o mediana).
Para su cálculo se debe diferenciar entre mediciones con distribución normal y no normal;
además de considerar cómo fueron elaboradas las tablas de referencia que se decida utilizar.
Cuando se grafican las tallas o los perímetros cefálicos de una muestra grande de niños o
niñas de una determinada edad, se obtiene una curva con distribución normal similar a la figura 1.
Observar que la mayoría de los datos están en el centro y disminuyen hacia los extremos de la curva.
Cada segmento en el eje horizontal representa el valor de 1 desvío estándar o 1 puntaje Z. En la
distribución normal, los puntajes Z -1 y 1 están a distancias equivalentes de la media pero en
direcciones opuestas. La distancia de 1 DE a la media es la mitad de la distancia entre 2 DE y la
media.
El puntaje Z de un punto observado en este tipo de distribución se calcula con la siguiente
fórmula:
Al aplicar la fórmula anterior, se puede calcular el puntaje Z para el índice talla según edad
de un niño de 4 años y 1 mes cuya talla es 99.8 cm. (Ver tabla correspondiente)
Interpretación del resultado: El puntaje Z para la talla de este niño es –0.97, entre la mediana y -1
DE.
Ejemplo:
Cálculo del puntaje Z para el índice Peso según Edad de un niño de 4 años 1 mes cuyo peso
es 20 kg.
Nota: Si el puntaje Z que se obtiene con la fórmula LMS es algún valor menor a –3 o mayor a +3 DE
se debe utilizar una versión modificada. Esto se debe a que se impuso una restricción al cálculo de
los puntajes Z que excedan el intervalo de mediciones observadas en la muestra usada para la
construcción de dichas tablas de crecimiento. Dicha versión modificada fue incluida en el software
Antro 2005 ya que incluye pasos muy complejos para ser calculados manualmente.
Bibliografía
(Disponible en internet www.who.int/childgrowth/en )
Objetivos de la estandarización
Definiciones
- Exactitud: Se refiere a la diferencia de las medidas hechas por el observador con respecto a
las realizadas por el supervisor.( que es la persona que mejor mide). La exactitud de las
mediciones se estima mediante el cálculo del error inter – observador2.
Por lo tanto, si los valores obtenidos se encuentran dentro de los límites de confiabilidad se
considerará que la precisión y/o la exactitud será satisfactoria. De lo contrario será deficiente.
Prueba de signos
Tabla 1 Valores máximos aceptables para el numerador6.
Acciones a tomar
- El supervisor analiza y discute con el observador las fallas que se detectan anotando en el
espacio observaciones las indicaciones pertinentes.
- En caso de falta de precisión, exactitud o error sistemático el supervisor revisará la aplicación
de la técnica por parte del observador y del equipo a fin de identificar la falla.
- Una vez identificados los problemas el supervisor recomienda al observador practicar la
técnica poniendo énfasis en la corrección de los mismos.
Bibliografía:
3- Martínez Pachas R, Carbajal Gómez I, Martínez Pizarro F. Stantro 1.0. Hoja de cálculo para
la evaluación de la estandarización antropométrica. Guía de referencia para el evaluador,
Lima, Perú, 2003.
5- Noel W. Solomons MD, Manolo Mazanegos MD and Ivan Mendoza MD, MSC. Uses of
anthropometry in the elderly in the field setting with notes on screening in developing
countries, Asia Pacific Journal Clinical Nutrition, 1993; vol 2, Nº 1, 15-23.
Consta de:
- Un nomograma que permite calcular el porcentaje de peso para talla.
Está formado por tres columnas; en la primera se encuentra la talla (cm), en la segunda el peso
(kg), y en la tercera (inclinada) el porcentaje de peso para talla.
- Una gráfica de incremento de peso para determinar el estado nutricional.
En el eje de la abscisa (x), se encuentra la EG, está expresada en semanas y va desde la semana
10 hasta la semana 42. Cada cuadrícula representa una semana.
Tallas extremas: La curva no incluye valores para madres cuyas tallas excedan los límites incluidos
en el nomograma. Para estos casos se deberán hacer las siguientes correcciones:
▪ Talla alta (> a 175 cm): En el nomograma se cruza la talla máxima (175 cm) con el
peso corregido del siguiente modo: se resta al Peso Actual, 0.5 kg por cada cm que
exceda del 175 cm.
• Talla baja (< a 140 cm): En el nomograma se procede a la inversa que en el caso
anterior. Al peso actual se le suma 0.5 kg por cada cm por debajo de 140cm, y ese
valor se cruza con la talla mínima.
Pesos extremos:
• Porcentaje de adecuación de P/T > 135%: En este caso se considera que la
obesidad es muy marcada y se recomendará un incremento de 7.5 a 10.5 kg.
• Porcentaje de adecuación de P/T < a 80 %: Por debajo de este valor se considera
que la mujer se encuentra muy enflaquecida y debe recomendarse una ganancia
mínima de 15 a 17 kg.
En el nomograma se traza una línea que una la talla de la madre con el porcentaje de
adecuación 120% (este porcentaje representa el límite entre la normalidad y el bajo peso en la
semana 40) y se observa el valor de peso que esta línea determina: peso deseable a término.
Si a este valor se le resta el peso actual se obtiene los kg que la madre debe aumentar hasta
finalizar el embarazo.
En los casos de mujeres con tallas extremas y que fueron diagnosticadas con bajo peso, se
procede de la misma manera, y además se debe ajustar el peso en función de la talla como se explicó
en el punto anterior.
De este modo para las mujeres con tallas mayores, se deberá unir 175 cm con el porcentaje
de adecuación 120%; al peso hallado se le deberá sumar 0.5 kg por cada cm que exceda del 175
cm, y ese será el peso deseable a término.
Y para las mujeres con tallas inferiores, unir 140 cm con 120% de adecuación, al peso hallado
se le resta 0.5 kg por cada cm por debajo de 140cm, y ese será el peso deseable a término.
Adolescentes: La curva puede subestimar los incrementos ponderales de adolescentes que
han concebido en un período de 4 años después de la menarca. En este grupo de madres jóvenes
se recomienda incrementar 1Kg adicional a los que indica la curva en peso deseable a término del
embarazo.
4. Gráficas argentinas de IMC según Edad gestacional. Calvo, López y col. Ministerio de
Salud de la Nación, 2009.
5. ENFA
Tabla 1. Nuevas recomendaciones para ganancia de peso total y durante el 2do y 3er trimestre de
embarazo a partir del IMC pregestacional
El comité aclara que dichos intervalos deberían ser utilizados como orientativos y
complementarios de la evaluación clínica, alimentaria y de actividad física. Si una mujer no entrara
en el intervalo que le corresponde según su clasificación, antes de sugerir una modificación en su
patrón de ganancia de peso, se deberán considerar otros factores como edema, crecimiento del feto,
composición corporal, etc.
En el caso de embarazos múltiples el comité propone los siguientes intervalos:
- Mujeres con peso normal deberían aumentar entre 17 y 25 kg.
- Mujeres con sobrepeso, entre 14 y 23 kg.
- Mujeres con obesidad, entre 11 y 19 kg.
En el caso de mujeres con bajo peso y embarazo múltiple no hay suficiente información como para
hacer una recomendación.
Bibliografía:
2. Mardones F., Rosso R. Desarrollo de una curva patrón de incrementos ponderales para la
embarazada. RevMéd Chile 1997;125:1437-1448.
6. IOM (Institute of Medicine). 2009. Weight Gain During Pregnancy: Reexamining the
Guidelines. Washington, DC: The National Academies Press.
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&Neonatal Medicine. 2009;22(1):36-42.
8. Calvo EB et al. Evaluación del estado nutricional de niñas, niños y embarazadas mediante
antropometría. 1ª Ed. Buenos Aires:Ministerio de Salud de la Nación, 2009.
Detección de riesgo:
Al momento de realizar la valoración de los ancianos es muy importante tener en cuenta los
cambios en la composición corporal propios del envejecimiento y los múltiples factores que
condicionan su estado nutricional. Es por esto que los cuestionarios de evaluación de riesgo o de
tamizaje en población anciana son útiles en esta población ya que contemplan no sólo aspectos
nutricionales directos, sino también datos sociales y económicos que en este grupo poblacional son
de vital importancia.
Valoración Nutricional
Valoración antropométrica
Talla: Cuando el sujeto en estudio, cumpla con los requisitos para tomar una correcta talla erecta,
se empleará de preferencia, mientras que en aquellos casos, donde por cambios posturales propios
de la edad o enfermedad asociada no pueda aplicarse esta técnica de medición, será preferible
utilizar la posición supina.
Talla en decúbito supino: El sujeto debe estar ubicado en posición supina. Se mantiene la cabeza
en plano de Frankfurt, en una línea perpendicular al plano horizontal. Las extremidades inferiores
estarán extendidas sobre la superficie y los brazos a los costados del tronco. Los pies deberán
permanecer verticales al plano de la cama. Se desliza el elemento de medición desde el vertex de la
cabeza hasta la planta de los pies.
Altura de rodilla:
Algunos autores sugieren la toma de altura de rodilla y la posterior estimación de la talla a partir de
ecuaciones que toman en cuenta la edad y el sexo. Estas fórmulas son aplicables a sujetos adultos
y a adultos de edad avanzada. Para la toma de esa medida es importante que la rodilla esté ubicada
en ángulo de 90 grados. Se mide la distancia desde la planta del pie hasta el límite superior de la
rótula.
Transversal de brazos:
Transversal de brazos: Con los brazos extendidos lateralmente en ángulo de 90 grados del cuerpo,
se mide la distancia entre el dedo mayor de una mano hasta el mismo dedo de la otra.
Peso:
Cuando no es posible la toma del peso (porque no se cuenta con cama balanza); en el caso de los
pacientes que estén internados y no se puedan parar; se puede obtener ese dato de forma indirecta
de la siguiente manera: (ya sea niños, adultos o adultos de edad avanzada):
Se tiene en cuenta la edad, sexo, raza y circunferencia media del brazo (MAC)
A partir de las variables de peso y talla en los sujetos de edad avanzada se suelen utilizar los
siguientes indicadores:
Peso relativo por altura: Se define como la relación del peso actual de un individuo respecto
a un peso de referencia, teniendo como base su altura. La población de referencia fue
construida con datos del Primer Estudio para el Examen de Salud y Nutrición (NHANES I)
para personas con una edad máxima de 84 años. Esta tabla incluye los percentilos 15, 50 y
85 de peso corporal por cada centímetro de altura por edad y sexo. La clasificación propuesta
del estado nutricional es falta de peso para valores menores al percentilo 15, peso medio que
corresponde al rango de normalidad (pc 15-85) y sobrepeso cuando el valor observado es
mayor al percentilo 85.
Perímetro Braquial: La medida del perímetro braquial es utilizada, por determinados autores, como
indicador de la masa muscular total. Se recomienda utilizar los valores propuestos por NHANES III.
Pliegue cutáneo del tríceps: Los cambios en la distribución de grasa del anciano, disminuyendo en
las extremidades y aumentando a nivel abdominal, sumado a la laxitud en el tejido adiposo a nivel
braquial hacen que la medida del pliegue del tríceps no sea representativa de la grasa corporal total.
Valoración de la ingesta
Al valorar la ingesta alimentaria en esta población hay que tener en cuenta los cambios
fisiológicos recurrentes de la edad. Es frecuente la presencia de alteraciones en el gusto y el olfato
que afectan la selección de alimentos. También hay que considerar el problema de la masticación
secundario a alteraciones en las piezas dentales. Todo ello sumado al factor emocional, social y
económico condiciona la ingesta de los mismos. No se ha demostrado que la acción exclusiva de la
edad afecte las secreciones digestivas o la absorción de nutrientes (salvo la existencia de
enfermedad concomitante). La presencia de patologías asociadas a la edad como la hipertensión,
la diabetes, la insuficiencia cardíaca etc. condicionan la ingesta en relación a la selección de
alimentos.
La presencia de modificaciones hormonales que actúan sobre el anabolismo proteico como
los andrógenos y estrógenos, entre otros, favorecen la aparición de un catabolismo proteico propio
de la edad.
Bibliografía
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Protocolo de valoración, seguimiento y actuación nutricional en un centro residencial para
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El peso corporal expresa el valor en kg. del contenido orgánico, pero no abre juicio sobre el
estado de las reservas calórico- proteicas. El contenido orgánico está representado por la sumatoria
de las masas esquelética, muscular, visceral y grasa, a la que se suma en ciertas circunstancias el
agregado de la masa residual que corresponde al agua extracelular (retención hídrica en los tejidos).
Por lo tanto, resulta poco aceptable considerar la pérdida o ganancia del peso corporal como
parámetro válido para valorar el estado de las reservas, mas aún cuando la variación de una de las
masas puede estar oculta por la modificación simultanea de otra.
De la misma manera el espesor del pliegue tricipital o subescapular y la medida de la
circunferencia braquial han sido propuestos para inferir el estado de las reservas, siendo sin duda,
de valor aplicable como tamizaje con fines poblacionales, pero sin especificidad o sensibilidad para
valorar sujetos en forma individual.
Numerosos métodos bioquímicos fueron propuestos con la intención de inferir las reservas
proteicas, tanto a nivel muscular como visceral destacándose la excreción de la creatinina urinaria y
su relación con el peso o talla y los niveles plasmáticos de proteínas de alto recambio. Sin embargo,
la gran variabilidad en la excreción de la creatinina en situaciones fisiológicas o patológicas, han
limitado su valor como método de diagnóstico.
Frente a la inexistencia de métodos accesibles y factibles surgen alternativas de valoración
como la bioimpedancia, resonancia magnética nuclear y método isotópico, entre otros. Pero estos
métodos no cumplen con los 4 requisitos exigidos para su aplicación que son: inocuidad,
reproducibilidad, accesibilidad y bajo costo operativo siendo reservado algunos de ellos con fines de
investigación.
Ejemplo de ello es la aplicación de isótopos radioactivos, como el agua tritiada, sodio y potasio
intercambiable, que permiten valorar y diferenciar un componente celular magro, dentro del cual se
encuentra la masa esquelética, visceral y muscular de otra extracelular cuya sumatoria representa la
masa libre de grasa (LBM). La medida de la masa grasa surge, en este método, por la diferencia
entre el peso corporal y el LBM. Su implementación, además de no ser inocua, resulta ser engorrosa
y de costo elevado siendo considerado “gold estandar” con fines de investigación.
El método de Fraccionamiento antropométrico - ENFA ®, es un método que reúne las 4
condiciones previamente citadas para la aplicación a la clínica y/o deporte consistente en la toma de
25 medidas de superficie que son: 7 pliegues grasos ( tricipital, bicipital, subescapular , suprailíaco,
abdominal, muslo y gemelo) 8 diámetros óseos ( humeral, muñeca, fémur, tobillo, biacromial, biilíaco,
bitrocantereo y antero-posterior de tórax) 7 perímetros musculares ( bíceps relajado, contraído,
antebrazo, muslo, gemelo, tórax y abdomen) , talla parada, talla sentada y peso.
Reseña histórica
En 1921 el físico Jindrich Magtiegka, propone el fraccionamiento del cuerpo en 4
componentes: masa esquelética, grasa, muscular y residual o masa visceral, obtenido a través de
ecuaciones y coeficientes basados en medidas de superficie para estimar el peso de los tejidos.
Diversos investigadores otorgaron relevancia a este método de fraccionamiento, hasta que en 1974
Ross, WD, y Wilson, NC, proponen utilizar el modelo “Phantom”. Este modelo unisexo está basado
en grandes muestras poblacionales seleccionadas con criterio geográfico en el mundo. Cada una de
sus medidas proporciona un valor medio y su desvío estándar que puede compararse con las
medidas observadas en el sujeto en estudio. El valor z de cada una, permite luego calcular las masas
corporales. En 1980 los resultados fueron validados a través de disecciones cadavéricas y en 1988
el Dr. Basaluzzo ha realizado su comparación con el método isotópico demostrando su buena
correlación. Surge, entonces, el método ENFA con aplicación en deportes y en la práctica clínica
disponiéndose de un método que reúne las condiciones para su aplicación tanto a la clínica como al
deporte. Este método ha sido convalidado por estudios cadavéricos (7) e isotópicos (2). Basaluzzo,
JM determina el quinto componente denominado Masa Residual y además crea el concepto de
reserva proteica y calórica para determinar el diagnóstico nutricional del sujeto. La primera se
estableció al comparar el valor de la masa muscular con la masa esquelética (considerando que en
la masa muscular se encuentra el 90% de las proteínas corporales) y la reserva calórica al relacionar
la masa grasa con la masa esquelética. Así, se logra obtener un valor de normalidad y sus desvíos
al emplear las medidas del modelo Phantom1. Fueron considerados valores patológicos moderados
o severos aquellos que se alejaron de los valores normales entre 1 y 2 DS o superiores a 2 DS.
Valora por lo tanto, las reservas tanto proteica (RP) como calórica (RC), concepto creado por
el dr. Basaluzzo a partir de la comparación de la masa muscular con el esqueleto y de la masa grasa
con el esqueleto en sujetos con bajo peso, peso normal y peso alto ( (r=0.85, r=0.84 y r=0.80 con
pvalor menor a 0.001.)) A partir de la creación de ese concepto clasifica la reserva proteica en normal
si corresponde al valor medio con respecto a la población de referencia que es el Phanton; (valor
medio: 2.43 con puntos de corte entre 2.72 a 2.15), disminuida en grado moderado cuando se
encuentre por debajo del rango de normalidad (2.14 a 1.87) y severo cuando sea menor a 1.87.
Aumentada en grado moderado cuando su valor fluctúe entre 2.72 y 3 y severo cuando sea mayor a
3. La reserva calórica se clasifica en normal (Valor medio: 1.16, con puntos de corte entre 0.85 a
1.47) disminuida en grado moderado cuando se encuentre por debajo del rango de normalidad (0.84
a 0.54) y severo cuando sea menor a 0.54. Aumentada en grado moderado cuando su valor fluctúe
entre 1.47 a 1.78 y severo cuando sea mayor a 1.78.
Los resultados demostraron que los valores considerados para el adulto no pueden ser
extrapolados a la edad infanto-juvenil, ya que la relación entre la masa muscular y la esquelética
resulta menor y va aumentando hasta los 18 años en donde alcanza los valores del adulto. Es por
1
Phanton: población de referencia que sintetiza la proporcionalidad humana. Realizado en base a la medición de 23.512
personas en todo el mundo, c/ rangos de edad comprendidos entre 6 y 69 años.
Proporciona un valor medio y su correspondiente desvío para cada una de las medidas de superficie.
ello, que el ENFA utiliza desde los 6 a los 18 años como valores normales para el cálculo de las
reservas las medidas derivadas en un estudio en niños (COGRO1), en donde se crearon los valores
de reserva proteica para cada edad y los valres de reserva calórica para cada edad y sexo. En los
niños, además de las 25 medidas, es necesario medir, perímetro de muñeca y perímetro de tobillo.
También se observó, que en sujetos con peso-talla cercanos al Phantom el método permitía
calcular el peso estructural con certeza, pero cuando esta relación se alejaba en más o en menos, el
cálculo de la masa grasa se alteraba determinando datos distorsionados. Se creó y aplicó un factor
de corrección (R) que permite ajustar a la realidad el cálculo de la masa grasa, permitiendo reducir
el error en el cálculo del peso al 2,3%.
Bibliografia
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1
Cogro: población de referencia realizada con medición de 919 niños/as de 6-18 años en Vancouver / Canadá.
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Dietistas, XI Congreso Argentino de Graduados en Nutrición, 10 de mayo de 2012.
33-Castro Citera PA; Romero I; Levy L; PalacioTejedor VS; Ferrari MA; Figueroa G; Molina S;
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hipotiroidismo en mujeres adultas”. Trabajo presentado en el XIX Congreso Argentino de Nutrición,
Mar del Plata, Argentina ,6 al 9 de noviembre de 2013.
Dudas frecuentes
Dra. Alicia M. Witriw
Técnicas de Medición
Dra. Alicia M. Witriw
Para la aplicación del método ENFA se necesitan tomar en el adulto 7 pliegues grasos
(tricipital, bicipital, subescapular, suprailíaco, abdominal, muslo y gemelo) 8 diámetros óseos
(humeral, muñeca, fémur, tobillo, biacromial, biilíaco, bitrocantereo y antero-posterior de tórax), 7
perímetros musculares (bíceps relajado, contraído, antebrazo, muslo, gemelo, tórax y abdomen), la
talla parada , sentada y el peso corporal.
Medida del peso corporal: El paciente deberá estar en ropa interior, siendo preferible pesarlo
en ayunas, luego de haber evacuado el recto y la vejiga. El sujeto permanece de pie inmóvil en el
centro de la plataforma con el peso del cuerpo distribuido entre ambos pies.
Calibración: Para Calibrar la balanza se utilizará una pesa patrón (de 5 -10kg). Se colocará la
misma sobre la plataforma de la balanza y se efectuará la lectura. En las balanzas clínicas el fiel
debe permanecer derecho y en equilibrio, en caso contrario se calibrará con un destornillador. En
las digitales se aceptará un desvío de 100 ó 200 gramos en relación a la pesa patrón y en caso de
superar dicho desvío se enviará al fabricante para su calibración.
Talla: Se tomará con el sujeto de pie, apoyado contra la pared, con los talones juntos, el mentón se
ubica recogido de manera que el borde inferior de la cavidad orbitaria se encuentre en línea horizontal
con la parte superior del trago de la oreja: Plano de Frankfurt. Se baja la superficie horizontal del
altímetro hasta el vertex y se efectúa la medición. Se utilizarán altímetros de precisión, controlados
por el operador a través de una cinta métrica).
Altura del tronco o Talla sentada: Se utilizará un banco con superficie rígida y con una altura
de 50 cm para facilitar el cálculo. El sujeto se sienta en el banco con la cabeza ubicada en plano de
Frankfurt y la región lumbo-sacra contra la superficie vertical. Se baja la superficie horizontal del
altímetro hasta el vertex y se efectúa la medición.Cuando se emplea el altímetro de la balanza, debe
tenerse en cuenta que el banco no posea una estructura que impida su colocación sobre la
plataforma. (La talla sentada se obtendrá en este caso, restando a la medida obtenida, la altura
entre la plataforma de la balanza y la superficie del banco).
Se emplea una cinta métrica inextensible marca Lufkin (MR), Stanley (MR) o similar, de 0.5 cm a
1 cm de ancho por 2 a 3 metros de largo. El sujeto debe estar parado.
Bicipital (relajado): Con el sujeto parado, se mide la distancia entre el acrómion de la escápula y el
olécranon del cúbito derecho. Se toma la medida en el punto medio entre ambos, rodeando la
circunferencia braquial con la cinta métrica.
Bicipital (contraído): Con el sujeto parado, el bíceps contraído y el antebrazo flexionado en ángulo
recto, se mide la distancia entre el acrómion de la escápula y el olécranon del cúbito derecho. Se
toma la medida en el punto medio entre ambos, rodeando la circunferencia braquial con la cinta
métrica.
Antebrazo: Con el sujeto parado, se rodea el perímetro del antebrazo proximal con la cinta métrica
1 centímetro por debajo del pliegue del codo.
Tórax: Con el sujeto parado frente al observador, se rodea el tórax con la cinta métrica a la altura de
la zona esternal media entre la 3ª y 4ª costilla. Se solicita al sujeto que realice una inspiración
profunda y luego espire totalmente el aire, siendo la medida correcta aquella correspondiente al final
de la espiración.
Abdomen: Con el sujeto parado frente al observador, se rodea el abdomen con la cinta métrica a
nivel umbilical. Cuidando que el instrumento se mantenga siempre horizontal.
Muslo: Con el sujeto parado, se toma la medición rodeando el muslo derecho con la cinta métrica, a
nivel medio entre la espina ilíaca anterosuperior y el borde superior de la rótula.
Gemelo: Con el sujeto parado, se toma la medición rodeando con la cinta métrica la pierna derecha,
a nivel del máximo perímetro de la pantorrilla.
Con el paciente de pié, se medirán los pliegues del hemicuerpo derecho, con excepción del
abdominal. Se empleará el calibre de Lange, Harpenden o Cescorf. Si bien estos calibres determinan
resultados comparables en sujetos delgados, en pacientes obesos el calibre de Harpenden origina
determinaciones menores, con el consecuente “robo” de masa grasa por su mayor potencia de cierre.
Todas las medidas se efectuarán comprimiendo el pliegue de grasa entre los dedos pulgar e índice
de la mano izquierda, tratando de separar el plano muscular mediante movimientos laterales. Con el
pliegue formado, se aplicarán las ramas del calibre por debajo de la pinza digital, efectuándose la
lectura no debiendo superar los 3 segundos, para evitar que la presión de las ramas del calibre
continúen disminuyendo la medida del pliegue por desplazamiento del contenido de agua de la piel .
Mientras se realiza la medida no debe soltarse la pinza digital de la mano izquierda. La maniobra
debe ser repetida en forma consecutiva por tres veces, tomándose el valor promedio o aquel que se
repita. Es conveniente recordar, que el mayor error en el cálculo de las masas corporales
corresponde al de la masa grasa, siendo necesario extremar las precauciones al realizarla.
Tricipital: Con el sujeto parado, se mide la distancia entre el acrómion de la escápula y el olécranon
del cúbito derecho. Se toma la medida en el punto medio, en la región posterior, formando un pliegue
en dirección al eje del hueso (vertical).
Bicipital: Con el sujeto parado, se mide la distancia entre el acrómion de la escápula y el olécranon
del cúbito derecho. Se toma la medida en el punto medio, en la región anterior, formando un pliegue
en dirección al eje del hueso (vertical).
Subescapular: Con el sujeto parado, se efectúa un pliegue diagonal a 45 grados con respecto a la
horizontal, dirigido hacia abajo y afuera sobre la punta del omóplato.
Suprailíaco: Con el sujeto parado, se efectúa el pliegue en la cara lateral del tronco por encima de
la cresta ilíaca. El pliegue será paralelo a la misma.( horizontal).
Abdominal (umbilical): Con el sujeto parado, se efectuará un pliegue vertical en el borde externo
del recto anterior del hemiabdomen izquierdo, en el cruce con un línea horizontal que pase por el
ombligo.
Muslo (anterior): Con el sujeto parado, se efectuará un pliegue en la cara anterior del muslo, paralelo
al eje del hueso, en el punto medio entre la espina iliaca anterosuperior con el borde superior de la
rótula.
Gemelo: Con el sujeto parado, se efectuará en el sentido óseo, en la zona de mayor diámetro de la
pantorilla y en su cara lateral externa.
La medición de los diámetros cortos se efectúa con un calibre Mitutoyo (MR) de 300 mm , Vernier
(MR) de 300 mm o similar, ó antropómetro corto. Es necesario que las ramas del calibre sean superior
a los 6 cm para tomar la medida del diámetro del fémur y tobillo. La toma de medidas de muñeca,
humero, fémur y tobillo se efectuarán con el sujeto sentado.
Las medidas utilizadas para el cálculo de la masa esquelética en la evaluación por el método ENFA
son: muñeca, húmero, fémur y tobillo.
Los diámetros largos se realizan con el pelvímetro externo de Collins o con el antropómetro largo.
Mientras el sujeto se encuentre parado de miden los huesos largos biilíaco y bitrocantéreo. Con el
sujeto sentado, se completa la medición del biacromial y del anteroposterior del tórax(AP). La
medición de estos 4 últimos diámetros se utiliza para el cálculo de la masa visceral.
Muñeca: Con el sujeto sentado, se mide el diámetro entre ambas apófisis estiloides del radio y del
cúbito.
Húmero (biepicondilar): Con el sujeto sentado, se le pide que eleve y flexione el miembro superior
derecho en ángulo recto hasta llevar el codo a la altura del hombro. Se aplican las ramas del calibre
sobre la epitróclea y el epicóndilo, utilizando los dedos índices de ambas manos para reconocimiento
anatómico del punto correcto a medir.
Fémur (biepicondilar): Con el sujeto sentado, pierna flexionada y apoyada en el piso, se efectúa la
medida del diámetro entre ambas prominencias óseas. Por la característica de la zona, es habitual
que el sitio anatómico de la medida se encuentre oculto por una capa de grasa que será mayor en
relación a la obesidad del sujeto. Para evitar error, se aconseja orientar las ramas del calibre con los
dedos índices de ambas manos y efectuar la medida mientras se comprime sobre la superficie ósea.
Una medida inadecuada puede determinar un diámetro mayor al real, originando error en el cálculo
del esqueleto.
Tobillo: Con el sujeto sentado, se medirá el diámetro entre ambos maléolos. ( tibia y peroneo).
Biacromial: Con el sujeto sentado, el antropometrista utiliza los dedos índices para buscar el
extremo externo de ambos acromion. Se puede realizar la medida de frente o detrás del sujeto.
Tórax (A-P): Con el sujeto sentado,el antropometrista se ubica de costado y apoya las ramas del
pelvímetro sobre la apófisis espinosa de la 3ª-4ª vértebra dorsal y la zona esternal media entre la 3ª
y 4ª costilla.
Biilíaco: Con el sujeto parado, el antropometrista se coloca por delante o por detrás del mismo. Las
ramas del pelvímetro se apoyan sobre el diámetro mayor transverso de las crestas ilíacas con ayuda
de los dedos índices.
Se efectúa solamente entre los 6-18 años, con una cinta métrica tipo Lufkin, Stanley, Cescorf o similar
tomándose el perímetro de la muñeca y el tobillo.
Perímetro de muñeca: Con la palma de la mano en posición ventral, se mide el perímetro a nivel
de la apófisis estiloides.
Introducción
La evaluación de la ingesta responde a objetivos muy diversos que se pueden dar en el marco
de encuestas alimentarias propiamente dichas donde se recolectan datos de ingesta exclusivamente,
o como parte de una investigación más amplia, por ejemplo, en las encuestas nutricionales, que
incluyen además de datos alimentarios, indicadores antropométricos, bioquímicos y/o clínicos, para
luego ser interpretados de manera conjunta.
Como en toda investigación científica pueden distinguirse tres etapas básicas en su desarrollo
(1):
1. Planificación
2. Recolección de datos
3. Análisis e interpretación de la información
1La metodología cualitativa se refiere en su más amplio sentido a la investigación que produce datos
descriptivos a partir de las propias palabras de las personas y la conducta observable. Se obtiene información
que permite describir el contexto sociocultural en el cual se mueve el individuo o el grupo en estudio. En las
ciencias de la salud, y en particular en temas relacionados con la nutrición, estas técnicas resultan
fundamentales para abordar las prácticas alimentarias desde una perspectiva integradora que permita la
descripción de los diferentes hábitos, comprendiendo que se dan como producto de la interacción de múltiples
factores propios de cada individuo o grupo, y que por lo tanto los hace racionales. EVALUACION NUTRICIONAL | UBA
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Por supuesto, antes de planificar una encuesta alimentaria será necesario justificar que la
encuesta es el mejor o el único modo de obtener la información necesaria. También será necesario
estudiar fuentes secundarias de información como censos, otras encuestas realizadas en la zona del
proyecto, etc.
1. Planificación:
La planificación de una encuesta incluye varios aspectos a considerar en su diseño:
- Conocer las prácticas alimentarias de la población bajo estudio y las razones que las
determinan.
- Conocer, para distintos grupos familiares y regionales del país, el tipo y las cantidades de
alimentos que se consumen.
- Conocer la forma y las razones que determinan la distribución intra-familiar de alimentos.
- Identificar diferencias regionales y/o familiares en la ingesta de alimentos y/o nutrientes.
Otros ejemplos de objetivos relacionados con la estimación de la ingesta de nutrientes son (3):
La realización de una encuesta en un plazo determinado exige una organización previa de los
materiales y el personal. En esta etapa se decide el número de encuestadores necesarios y los
recursos necesarios para el análisis posterior de la información recolectada. En esta instancia
también se definen los criterios de selección y contratación del personal.
e- Selección de la muestra
Una vez que se han definido los objetivos, las técnicas y procedimientos de recolección de
información, se seleccionarán los grupos y el número de personas que serán entrevistadas. Para ello
será necesario definir la población accesible y el tamaño de la muestra. Una muestra
cuidadosamente seleccionada puede proporcionar información sobre las necesidades, problemas o
características de todo el grupo.
La selección del método de muestreo dependerá de la información disponible acerca del
tamaño, distribución y localización de la población. Cuando se quieren utilizar los métodos aleatorios
simple o sistemático se requiere contar con el marco de la muestra, el cual consiste en un listado de
todos los individuos que integran la población a fin de asignarle a cada uno un número y que su
selección resulte al azar. Sin embargo, en la mayoría de los casos las poblaciones son muy
numerosas o están muy dispersas y es por ello que los métodos de muestreo por conglomerados o
estratificados resultan más convenientes.
El instrumento de recolección de datos surge como resultado de todas las decisiones tomadas
anteriormente. Es un formulario estándar impreso que tiene como objetivo asegurar la calidad de los
datos garantizando que todos los encuestadores recolecten los mismos datos siguiendo el mismo
procedimiento.
La extensión del mismo estará dada por los objetivos del estudio y las técnicas seleccionadas.
En algunos casos se puede optar por cuestionarios más breves donde todas las variables en estudio
estén categorizadas. De este modo, el cuestionario incluirá preguntas cuyas categorías de
respuestas serán estructuradas a fin de recolectar más información en menos tiempo. (Ver capítulo
siguiente para más detalles sobre el diseño)
Antes de que el cuestionario adopte su forma definitiva es necesario someterlo a una prueba
en terreno para verificar su contenido. Las preguntas deben proporcionar la información requerida y
deben ser de fácil comprensión para los encuestadores y encuestados. Este ensayo se hará con un
número reducido de encuestas. Se revisará el cuestionario sobre la base de los resultados y de las
observaciones de los encuestadores.
h- Capacitación
Esta etapa es fundamental. Para recolectar información precisa es indispensable que los
encuestadores entiendan claramente todos los procedimientos e instrucciones para trabajar en
terreno.
2. Recolección de datos
Las entrevistas completadas deben ser revisadas para confirmar que fueron completadas
correctamente, que se han hecho todas las preguntas y que las respuestas fueron anotadas
claramente.
Para compilar los resultados de las encuestas, será necesario codificar todas las respuestas
de cada uno de los cuestionarios. Este proceso se simplifica incluyendo directamente en el formulario
impreso códigos numéricos para cada una de las categorías de respuestas. Cuando se han
terminado las entrevistas estos códigos se trasladan directamente a las planillas de tabulación. De
esta forma, se podrán resumir los resultados a través de cuadros, gráficos o aplicar los métodos
estadísticos necesarios para el análisis de la información.
El informe de la encuesta contiene las interpretaciones de los resultados y las conclusiones más
importantes, información estadística y una descripción del procedimiento empleado para llevar a cabo
la encuesta.
Consideraciones finales
los objetivos propuestos y no se llegarán a las conclusiones correctas ni se podrán ofrecer soluciones
adecuadas.
De esta forma, la planificación se convierte en un mecanismo de control para evitar posibles
fuentes de error.
Conocer en profundidad el contexto socio-cultural del individuo o grupo en estudio, hacer una
correcta selección y categorización de variables, diseñar de manera cuidadosa el instrumento de
recolección de datos, hacer un ensayo previo o capacitar al personal son todos mecanismos que
permitirán reducir algunas fuentes potenciales de error.
En los apartados correspondientes a cada una de las técnicas de encuestas alimentarias se
mencionarán otras fuentes de error vinculadas directamente con cada una de las mismas.
Referencias bibliográficas
3- Gibson RS. Principles of nutritional assessment. 2nd Ed. Oxford University Press, 2005.
4- Serra Majem LI, ArancetaBartrina J. Nutrición y Salud Pública. Métodos, bases científicas y
aplicaciones. 2°ed. Masson. Barcelona, 2006.
Formulario de
OBJETIVO/S VARIABLE/S
recolección de
datos
Se debe resaltar que, tal como la metodología cuantitativa lo exige, la formulación de las
preguntas es siempre estructurada, ya que el objetivo del instrumento de recolección de datos es
justamente unificar criterios y que todos los encuestadores hagan cada pregunta de la misma
manera.
Sin embargo, la diferencia entre los tres tipos de preguntas está dada por la libertad de
respuesta que se le permite al entrevistado. Cada una de las formas tiene una finalidad concreta y
satisfacen una necesidad determinada:
Una pregunta estructurada o cerrada consta de categorías fijas que se leen o se muestran al
entrevistado, y que exigen de éste que opte por una respuesta determinada. Este tipo de pregunta
es útil cuando se conoce previamente todas las posibles respuestas. Si bien el encuestado no puede
responder en sus propios términos, se recomienda dejar siempre como última opción de categoría
“otros” y el lugar para especificar ya que siempre existe la posibilidad de que surjan respuestas
diferentes a las preestablecidas.
Una vez definidas las preguntas y sus categorías de respuesta será necesario precodificarlas
utilizando códigos numéricos.
Además de las variables que intenta medir, el diseño de un instrumento tiene que estar
adaptado a su forma de administración. Existen varias posibilidades de administración que
dependerán del objetivo del estudio, de los costos y de la logística de la implementación.
• Un cuestionario puede ser administrado por un entrevistador, utilizando como soporte un
formulario impreso o un formulario electrónico. A su vez la entrevista puede ser personal,
telefónica o utilizando otras tecnologías.
• El cuestionario también puede ser auto-administrado utilizando una versión impresa o una
versión electrónica.
En general el diseño del cuestionario presenta algunas diferencias según el caso. Las
aclaraciones del cuestionario (notas dentro del formulario dirigidas a quien lo está completando)
deberán dirigirse al entrevistador o al propio encuestado en caso de ser auto-administrado. En
cuestionarios auto-administrados solo es posible incluir preguntas cerradas y abiertas, mientras que
cuando existe entrevistador pueden incluirse además preguntas semiestructuradas.
El diseño del instrumento también depende de la población a la que va dirigida, utilizando por
ejemplo tipografía de mayor tamaño cuando un cuestionario es auto-administrado y se aplica a una
población con mayor prevalencia de dificultades de visión como en adultos de edad avanzada. Pero
de cualquier modo, en cualquier cuestionario, la tipografía debe ser clara, las notas aclaratorias
deben distinguirse fácilmente de las preguntas, el espacio de respuesta, especialmente en el caso
de preguntas abiertas debe ser el suficiente para responder.
Referencias bibliográficas
Recordatorio de 24 horas1
Generalidades
1Texto basado parcialmente en: Ferrari MA. Estimación de la ingesta por Recordatorio de 24 Horas. Diaeta
(B.Aires) 2013;31(143):21-26.
las opciones informatizadas porque reducen los tiempos de procesamiento de información, los
errores de codificación y estandarizan la recolección de los datos entre encuestadores. Sin embargo,
esto conlleva la pérdida de datos cualitativos en relación a la descripción de los alimentos y
preparaciones realizadas por el entrevistado en sus propios términos. Directamente relacionado con
este aspecto, Frankenfeld y colaboradores realizaron una comparación entre un recordatorio de dos
días no consecutivos automatizado versus cuatro días de registro. Si bien obtuvieron estimaciones
aceptables en cuanto a la ingesta de nutrientes, la principal conclusión del estudio fue la pérdida de
dicha información descriptiva de la alimentación (5).
Los métodos informatizados auto-administrados tampoco han mostrado resultados superiores
a la entrevista mediada por un encuestador, especialmente al momento de estimar los tamaños de
las porciones. En una revisión de los métodos de encuesta alimentaria, se compararon las técnicas
tradicionales con sus equivalentes informatizados. Entre sus conclusiones principales se menciona
que sólo los cuestionarios de frecuencia de consumo ofrecen resultados similares ya que el
procedimiento de recolección de datos que subyace a esta técnica no se modifica en sus versiones
informatizadas (6).
Fortalezas y limitaciones
La principal fortaleza de esta técnica se evidencia en los estudios que incluyen diseños con
muestras aleatorias, ya que permite obtener tasas de “no respuesta” bajas. Al ser de fácil
comprensión entre individuos de distintas edades, diferente nivel socio-económico o años de
escolaridad alcanzada; y sumado a que no insume tanto tiempo ni interfiere en las actividades
cotidianas de los encuestados, el porcentaje de individuos que aceptan participar del estudio es
mayor. Como ventajas adicionales se destaca que la técnica de Recordatorio de 24 Horas es de
utilidad en estudios de tipo descriptivos y, a diferencia de los Registros Alimentarios de un día, no
influye sobre los hábitos alimentarios de los individuos (1,2,7,8).
La principal limitación es que la técnica depende de la memoria, tanto para la identificación
de los alimentos consumidos como para la cuantificación de las porciones. Sin embargo,
profesionales entrenados pueden minimizar las dificultades de los entrevistados al momento de
recordar (2).
Otra desventaja es que resulta poco útil en estudios de epidemiología causal ya que éstos
requieren estimar la ingesta usual de los individuos y, como se desarrolla en el apartado
correspondiente, eso se logra con múltiples recordatorios, aumentando la complejidad del diseño
(4,7).
Se debe destacar la importancia de evaluar y controlar las posibles fuentes de error a fin de
evitar o minimizar la introducción de sesgos. Los errores pueden surgir de un diseño inapropiado del
estudio o del tipo de muestreo, así como de las bases de datos de composición química de alimentos
(1,2,9).
Considerando específicamente la técnica de Recordatorio de 24 Horas se puede resaltar que
las principales fuentes de error al estimar el consumo de alimentos son la omisión o el agregado de
alimentos, la estimación de pesos y los errores en la codificación de los alimentos o bebidas
consumidos. Estos últimos surgen principalmente de descripciones inadecuadas, ambiguas o
incompletas de los ítems registrados (1,2,10).
Los procedimientos de control que minimizan las posibles fuentes de error incluyen el
entrenamiento en las técnicas de interrogatorio y codificación, además de la supervisión y la carga
doble de datos en al menos un porcentaje de la muestra (2).
El encuestador puede introducir sesgo cuando no realiza las preguntas apropiadamente, al
registrar incorrectamente las respuestas, por omisiones intencionales, al no realizar las conversiones
necesarias para obtener las cantidades de ciertos alimentos en peso neto crudo, sesgos asociados
con el ambiente en el cual se desarrolla la entrevista y que genera distracciones, entre otros (1,2).
La capacidad de recordar por parte del entrevistado es una posible fuente de error y para
minimizarlo se sugiere el uso de técnicas de interrogatorio en pasos múltiples y el uso de preguntas
de sondeo o confirmatorias (1,2).
La estimación de los tamaños de las porciones no solo es fuente de error por parte del
entrevistado sino también del encuestador, por ello es fundamental el uso de modelos visuales de
alimentos. Probablemente, este sea el principal error que se produce en la mayoría de los métodos
de evaluación alimentaria. Los errores más evidentes se producen al estimar las porciones de
alimentos con gran volumen pero poco peso, especialmente del grupo de los vegetales (10) o al
estimar el tamaño de porciones de cortes de carnes con o sin hueso, debido a la forma irregular de
los mismos (1,2). En Argentina, existen atlas fotográficos validados que permiten minimizar este tipo
de error durante la recolección de los datos (11-13).
Obtener un listado completo de todas las comidas o alimentos y sus respectivos horarios. El listado
debe incluir todo lo consumido el día anterior desde que la persona se levanta hasta que se va a
dormir.
El objetivo de este primer paso es elaborar una guía que le permita al encuestador poder
profundizar en los pasos sucesivos sin que esto resulte en un motivo de olvido o cansancio para el
encuestado.
Ejemplo:
Evitar preguntas que condicionen las respuestas: ¿Ayer desayunó?/ ¿Qué consumió en el
desayuno?/ ¿Qué almorzó? / ¿Comió postre?
Describir de manera detallada cada uno de los alimentos y bebidas consumidos, incluyendo métodos
de cocción y marcas comerciales. Se intentará identificar cada uno de los ingredientes utilizados en
preparaciones complejas. Una vez individualizados los alimentos y bebidas se procederá a definir las
características: por ejemplo para lácteos, las preguntas que se realicen deberán tender a identificar
si se trata de un producto entero, descremado, la marca comercial, si es fortificado, etc.
El objetivo será completar el listado con información cualitativa, identificando/ especificando
características de cada alimento y bebida que una vez finalizada la recolección de los datos, me
permitirán codificar correctamente el alimento (Ver Tabla 1).
Ejemplo:
Leche fluida
entera fortif con
hierro
Azúcar
Pan blanco
Mermelada de
durazno
Manteca
13:00 Emincé
Huevo
Pan rallado
Aceite de girasol
Papa
Manteca
Pan blanco
agua
17:00 mate Amargo
bizcochos
21:00 Tarta de acelga: Comprada
Harina
Aceite
Acelga
Cebolla
Huevo
Queso rallado
Revisar para asegurarse que todos los ítems fueron registrados correctamente, incluyendo el uso de
suplementos.
El objetivo es chequear que no se produjeron olvidos u omisiones por parte del encuestado.
Paso 1: Una vez finalizada la entrevista personal, se procederá a completar la última columna de la
planilla de recolección de datos del recordatorio (Gramos en Peso Neto Crudo).
Manteca 4 rulos 20
13:00 Emincé 2B x x 200
Huevo 10
Pan rallado 30
Aceite de girasol 24
Papa 1B + 1A x 150
Manteca ½ cda sopera 15
Pan blanco 1 mignon 50
agua 2 vasos 400
17:00 mate ½ pava Amargo 500
bizcochos 5u 50
21:00 Tarta de acelga: 1 porción Comprada
Harina 30
Aceite 15
Acelga 100
Cebolla 10
Huevo 25
Queso rallado 5
Paso 2: Se procederá a totalizar los alimentos que se hayan ingerido 2 veces o más en el mismo
día y se completará la planilla resumen.
Paso 3: Se volcarán los datos de la planilla de resumen en un software o planilla diseñada a los
efectos de convertir cantidades de alimentos y bebidas en nutrientes.
A continuación se muestran parte de los resultados devueltos por el software SARA siguiendo con
el ejemplo de recordatorio desarrollado a lo largo del instructivo.
Kcal 1952,0 kcal B1 1,2 mg
Bibliografía
1- Gibson RS. Principles of nutritional assessment. 2nd Ed. Oxford University Press, 2005:41-49.
3- Serra Majem L, Aranceta J, Mataix J. Nutrición y Salud Pública. Métodos, bases científicas y
aplicaciones. 2º Edición, ElservierMasson, 2006:136-177.
5- Frankenfeld CL, Poudrier JK, Waters NM, Gillevet PM, Xu Y. Dietary intake measured from a
self-administered, online 24-hour recall system compared with 4-day diet records in an adult US
population. J AcadNutr Diet. 2012 Oct;112(10):1642-7.
6- Illner AK, Freisling H, Boeing H, Huybrechts I, Crispim SP, Slimani N. Review and evaluation of
innovative technologies for measuring diet in nutritional epidemiology. Int J Epidemiol. 2012
Aug;41(4):1187-203.
7- Hernández AG. Tratado de Nutrición: TOMO III, Nutrición humana en el Estado de Salud, 2ª Ed.
Madrid, Medica Panamericana, 2010:445-462.
9- Souverein OW, de Boer WJ, Geelen A, et al. Uncertainty in intake due to portion size estimation
in 24-hour recalls varies between food groups. J Nutr. 2011 Jul;141(7):1396-401.
10- Sammán N, Portela ML. Situación actual y perspectivas futuras de las tablas y base de datos
sobre composición de alimentos en el marco de las redes Latinfoods/Infoods. DIAETA (B.Aires)
2010;28(132):29-34.
11- Vázquez MB, Witriw AM. Modelos visuales de alimentos. Tablas de relación peso / volumen.
1997.
12- López LB, Longo EN, Carballido MP, Di Carlo P. Validación del uso de modelos fotográficos
para cuantificar el tamaño de las porciones de alimentos. Rev. chil. nutr. 2006; 33(3): 480-487.
13- Navarro A, Cristaldo PE, Diaz MP, Eynard AR. Atlas fotográfico de alimentos para cuantificar el
consumo de alimentos y nutrientes en estudios nutricionales epidemiológicos en Córdoba,
Argentina. Rev. Fac. Cienc. Méd. (Córdoba) 2000; 57(1): 67-74.
14- Garda R y col. Recetario de la Cátedra de Técnica Dietética, Escuela de Nutrición, UBA,
2011.
15- López, LB, Suárez MM. Alimentación saludable. Guía práctica para su realización. 2005:6-13.
16- Ministerio de Salud de la Nación. Dirección Nacional de Salud Materno Infantil. SARA.
Sistema de Análisis y Registro de Alimentos. Versión 1.2.22.
Registro alimentario
Registro por pesada: el propio sujeto encuestado o bien una persona que lo represente (la madre
en representación de su hijo, el responsable de una persona discapacitada, etc.) pesa los alimentos
antes de consumirlos en una balanza y anota los pesos en gramos. Una vez finalizada la comida, se
pesan todos los desperdicios y sobras y se restan a la cantidad anterior. Cuando se trata de comidas
realizadas fuera del hogar se describen minuciosamente las porciones ingeridas en cuanto a tamaño
y forma o bien utilizando medidas caseras. Si bien este es uno de los métodos considerados más
precisos cuando se cuenta con la colaboración del encuestado, tiene el inconveniente de requerir
una balanza calibrada para cada encuestado y un gran esfuerzo por parte del individuo que lo realiza,
por lo que disminuye su tasa de respuesta en grandes estudios. Por otro lado, cuando se solicita
información de varios días de ingesta, como en general es necesario para evaluar la ingesta usual,
con frecuencia el encuestado puede modificar su dieta habitual con el fin de simplificar la información
que debe proporcionar.
Una opción que puede realizarse en pacientes institucionalizados es que un observador pese los
alimentos antes del servicio y luego los desperdicios y sobras.(Serra Majem 2006)
Registro por estimación: En este caso el encuestado o la persona a cargo describe las porciones
de alimentos y bebidas en medidas caseras en lugar de pesarlas y luego el licenciado en nutrición
realiza una estimación del peso a posteriori.
En cualquiera de los casos es necesario realizar una entrevista previa (u otro tipo de contacto
previo)para explicar al encuestado el uso del formulario y preferentemente el cuestionario deberá ser
entregado con un instructivo para recordar las indicaciones brindadas personalmente. EI diseño del
formulario depende de los días que se llevará a cabo el registro, de los nutrientes en cuestión y del
estudio en particular. AI concluir el primer día de registro o como mínimo al finalizar un período, se
realizará una nueva entrevista en la que se controlará lo anotado, se aclarará la información imprecisa
y se revisará la posibilidad de que el encuestado haya olvidado anotar alimentos o bebidas.
La codificación de los alimentos, la carga de datos y el análisis se realizarán de forma similar al
recordatorio de 24 horas. Al interpretar los datos hay que tener en cuenta que es posible que existan
posibles errores porque se come menos (o más) durante del período de registro o porque se registra
de menos (o de más) lo realmente consumido.(McCrory 2002; Areco 2011)
Bibliografía:
• Areco NP, Ferreyra AE, Ginies MV, Guerra NB, Tortora D, Elorriaga N. Validez de la ingesta
energética estimadapor registro alimentario en deportistas recreacionales. Diaeta [B. Aires].
2011; 29(134): 29-40.
• Gibson RS. Principles of nutritional assessment.2nd ed. Oxford University Press.New Y or, 2005.
• IOM. Dietary Reference Intakes: Applications in Dietary Assessment. Washington, DC: National
Academy Press, 2000.
• McCrory MA, Hajduk CL, Roberts SB. Procedures for screening out inaccurate reports of dietary
energy intake. PHN. 2002 Dec;5(6A):873-82.
• Pao EM, Cypel YS. Cálculo de la Ingesta Dietética. En: Instituto Internacional de Ciencias de la
Vida. Conocimientos Actuales sobre Nutrición. 6ta ed, Organización Panamericana de la Salud.
Washington DC, 1991.
• Serra Majem LI, ArancetaBartrina J. Nutrición y Salud Pública- Métodos, bases científicas y
aplicaciones. 2°ed. Masson. Barcelona, 2006.
• Willet W. Nutritional Epidemiology. 2nd ed. Oxford University Press.New York, 2005.
Consiste en una lista cerrada de alimentos sobre la que se solicita la frecuencia (diaria,
semanal o mensual) de consumo de cada uno de ellos durante un periodo de tiempo determinado (1
mes, 6 meses, 1 año, etc. dependiendo del objetivo del estudio).
En el primer caso, debe incluirse un instructivo o bien, instrucciones a lo largo del cuestionario
para que el encuestado pueda responderlo por sí mismo sin problemas. En el caso de un cuestionario
administrado por un entrevistador, las instrucciones serán dirigidas a éste e incluidas tanto en el
cuestionario como en el manual del entrevistador y serán trabajadas en la capacitación previa. En
- La extensión del cuestionario estará condicionada por los objetivos, sin embargo los
formularios demasiado cortos son cuestionados por la poca información que brindan y en
el caso de los muy extensos resultan ser agotadores, lo que puede reflejarse en un
decreciente grado de calidad en las respuestas conforme se avanza en la lista alimentaria.
- También es aconsejable incluir una pregunta sobre suplementos nutricionales o
polivitamínicos según los nutrientes de interés en el estudio.
Por último, para comprobar que el cuestionario mide lo que verdaderamente intenta medir
(validez) y que tiene la suficiente precisión y reproducibilidad, se debe realizar el correspondiente
estudio de validación.
En los estudios de validación, para evaluar la validez, se comparan los resultados del
cuestionario de frecuencia de consumo con los resultados de otro método de estimación alimentaria
(por ejemplo registros o recordatorios) o con los resultados de biomarcadores.
Para evaluar la reproducibilidad se administra dos veces a la misma muestra el mismo
cuestionario de frecuencia de consumo y se comparan sus resultados.
Bibliografía:
-Serra Majem LI, ArancetaBartrina J. Nutrición y Salud Pública. Métodos, bases científicas y
aplicaciones. 2°ed. Masson.Barcelona, 2006.
-Gibson RS. Principles of nutritional assessment.2nd ed. Oxford University Press.New York, 2005.
-Willet W. Nutritional Epidemiology. 2nd ed. Oxford University Press.New York, 2005.
CARNES
6.1 Vacuna N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.2 Cerdo N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.3 Ave N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.4 Pescado N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.5 Vísceras N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.6 Fiambres N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.7 Embutidos N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
6.8 Otros N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
VEGETALES
7.1 Acelga N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.2 Lechuga N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.3 Tomate N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.4 Zapallito N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.5 Pepino N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.6 Ají N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.7 Chauchas N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.8 Cebolla N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.9 Remolacha N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.10 Choclo N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.11 Acelga N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
7.12 Lechuga N 1 2 3 4 5 6 7 Q 1 2 3 4
Objetivos:
1. Revisar algunos conceptos de posibles fuentes de error en la estimación de la ingesta de
alimentos y nutrientes.
2. Introducir el concepto de variabilidad en el consumo de alimentos y nutrientes y su implicancia
en la estimación de la ingesta de nutrientes.
3. Definir y caracterizar los requerimientos como distintos niveles de ingesta.
4. Analizar la interrelación entre la elección de los requerimientos a utilizar y las etapas de la
encuesta.
5. Introducir los métodos para evaluar la ingesta usual de un individuoindividual o o de un un
grupo en forma cuantitativa.
6. Describir la interpretación cualitativa cuando no sea posible realizar la interpretación
cuantitativa
Repasando:
aceptable, o en algún caso podría mentir si cree que de esa forma podría obtener algún beneficio.
También podría estar apurado o no interesado en participar y terminar rápidamente un cuestionario
respondiendo lo primero que le viene a su mente. El encuestado puede no acordarse de lo que comió,
o no poder precisar las porciones, y esto puede pasar con todos los alimentos en general o con
algunos especialmente. En algunos casos, en forma inconsciente, podría “subregistrar” en su
memoria el consumo de algunos alimentos como las golosinas o por ejemplo pensar que toma más
leche de la que en realidad toma. A veces, cuando realizamos una frecuencia de consumo, algunas
personas responden que toman leche todos los días y cuando hacemos un recordatorio de 24 horas
a la misma persona, esta no nombra la leche el día anterior.
Las posibles fuentes de error dependerán del método elegido, y como ningún método está
libre de error hay que identificar previamente estas fuentes y tratar de controlarlas.Como podemos
suponer, tomar una medición antropométrica con relativa objetividad es relativamente más sencillo
que “medir” o estimar la ingesta de alimentos, ¿qué ocurre si no tenemos en cuenta estos errores
posibles y por lo tanto no los controlamos? Sencillamente terminamos teniendo “datos” que no son
representativos de la realidad y la interpretación de la evaluación posterior será falsa. Es decir, ¿para
qué tomarnos el trabajo de estimar algo que en realidad no mide lo que estoy interesado en estimar?
Y peor aún, es que a partir de estos datos tomamos decisiones!
Existe otra posible fuente de error al estimar la ingesta de nutrientes a partir del conocimiento
de los alimentos consumidos. Las tablas de composición química son en general incompletas y en
muchos casos los alimentos incluidos no son representativos de las regiones geográficas en las que
las utilizamos. Además, en algunos casos, los métodos de análisis de nutrientes pueden no ser
compatibles entre distintas tablas.
Otro tema que puede llevarnos a una confusión en la interpretación es definir, según nuestro
objetivo, si deseamos estimar la ingesta puntual de un día dado o si nos interesa conocer la ingesta
habitual. Ambas estimaciones se realizan de distinta forma. Para evaluar si la ingesta de nutrientes
de una persona está dentro de los límites de sus necesidades, en déficit o en exceso, ¿necesitaremos
conocer la ingesta habitual de esa persona o la ingesta de un día determinado? Por ejemplo: ¿Es
necesario ingerir diariamente 1000mg de Calcio? ¿Una persona aparentemente sana está en riesgo
de déficit si un día ingiere 800mg y al siguiente 1200mg?
La respuesta en este caso dependerá del nutriente en cuestión, del estado de sus reservas, de la
capacidad de adaptación de su organismo.
En general los déficits, los desequilibrios entre las necesidades y la ingesta de un nutriente
que pueden llevar a un riesgo del estado nutricional o de efectos adversos en el estado de salud, en
personas sanas, están más relacionados con la alimentación habitual o al menos con la alimentación
de un período de tiempo más que con la alimentación de un día en particular. Sin embargo, en casos
de patologías preexistentes o estado nutricional deteriorado, un exceso o un déficit de nutrientes en
un momento puntual puede producir efectos adversos o acelerar el deterioro del estado de nutrición.
A continuación se definen algunos conceptos que tienen que ver con la estimación del
consumo de nutrientes. La variación de la alimentación es bastante compleja y dificulta esta
estimación:
a- La ingesta de un nutriente o alimento varía de un día a otro en el mismo individuo. Es decir, todos
los días no comemos lo mismo. A esta variación diaria en la ingesta de nutrientes se la denomina
variación intrasujeto. En el caso de nutrientes que se encuentran en altas concentraciones en unos
pocos alimentos la ingesta del nutriente puede variar enormemente según se hayan incorporado o
no el o los alimento/s fuente.
La variabilidad en la ingesta diaria puede ser expresada como varianza, desvío estándar (DE) o como
un coeficiente de variación(CV). En la tabla adjunta se muestra una estimación de la variación
intrasujeto proveniente de una encuesta estadounidense (CSFII 1994-1995). Para comparar la
variación diaria en la ingesta de distintos nutrientes utilice el CV*.
b- Varios factores contribuyen a la variabilidad alimentaria. Algunos de ellos son el día de la semana,
la estación del año, la etapa del ciclo menstrual en las mujeres en edad fértil.
c- Con fines epidemiológicos nos interesa conocer la ingesta usual o habitual de una persona. La
ingesta usual de un individuo puede describirse como una distribución de la ingesta diaria con una
media y una desviación estándar. La media de la ingesta diaria de ese individuo durante un extenso
periodo de tiempo puede ser considerada como la ingesta usual “real” de ese individuo. Sin embargo,
rara vez será posible medir la ingesta de un individuo por un período tan extenso y utilizaremos unos
pocos días como una muestra de las ingestas diarias. A esta información la denominaremos ingesta
observada (o referida por el individuo, etc) para diferenciarla de la ingesta real (que desconocemos).
d- La ingesta alimentaria difiere de un sujeto a otro. Esta variabilidad en la ingesta de los distintos
individuos de un grupo se denomina variación intersujeto.
Si conociéramos la ingesta habitual de un nutriente o alimento de cada una de las personas de un
grupo, para describir la ingesta del grupo podríamos calcular el promedio o la mediana de ingesta
del grupo y un desvío estándar u otra medida de la variación de las ingestas en este grupo. En este
caso, el desvío estándar, la varianza, el CV, etc, serían formas de expresar la variación intersujeto.
Los posibles objetivos, según un creciente nivel de complejidad, son los siguientes (tomado y
modificado de Gibson):
El tamaño de la muestra para caracterizar la ingesta media usual del grupo depende del grado
de precisión deseado y de la variación diaria intersujeto en la ingesta de nutrientes. Esta última
usualmente se obtiene de la literatura, pero puede ser determinada durante un estudio piloto.
Cuando el objetivo es estudiar el consumo de varios nutrientes, con igual nivel de precisión,
idealmente debería calcularse el tamaño muestral con el nutriente de mayor variación intersujeto.
La ingesta media de un nutriente puede resultar de utilidad para describir a una población, o
para evaluar si existen diferencias significativas en la ingesta media entre dos grupo o un cambio de
la ingesta media en el mismo grupo antes y después de una intervención.
Se desea realizar un estudio para estimar el consumo promedio de vitamina C en los meses de
invierno en jóvenes universitarios. Para la precisión deseada se estima un tamaño muestral
necesario de 210 jóvenes.
Distribuya la muestra según los días de la semana en los que se debería solicitar a los encuestados
un registro de 24 horas, suponiendo que todos los días estarán igualmente representados:
LUNES: ________
MARTES:________
MIÉRCOLES:_______
JUEVES:_______
VIERNES:_______
SABADO:_______
DOMINGO:______
TOTAL: 210
*El U.S. Food and NutritionBoard (IOM, 2000) recomienda que las mediciones replicadas sean
independientes y realizadas en días no consecutivos, porque lo que se consume un día con
frecuencia afecta lo que se consume el día siguiente. Sin embargo, si la información solo puede ser
recolectada en días consecutivos, debería utilizarse información de 3 días.
¿Puede la distribución de ingestas observadas (sin realizar el proceso de ajuste) ser utilizada como
una estimación de la distribución de ingestas usuales?
FIGURA 1. Estimaciones de
la distribución de las
ingestas usuales de fósforo
obtenidas de información de
un día y de la ingesta
ajustada por el método
descripto por Nusser. La
línea vertical muestra el
Requerimiento Promedio
Estimado (en inglés EAR).
Observe las áreas de las
curvas debajo del RPE.
Fuente: IOM, 2000.
Para estimar la prevalencia de inadecuación es necesario realizar un segundo paso. Sin embargo la
distribución de la ingesta usual puede utilizarse para comparar dos grupos o subgrupos de una
población o una misma población antes y después de una intervención.
______________________________________________________________________________
Con frecuencia se desea separar a los individuos de un grupo en subgrupos con diferentes
rangos de ingesta (de alimentos o nutrientes) por ejemplo, con el objetivo de relacionar la ingesta
alimentaria con el riesgo de enfermedades crónicas.
Este nivel requiere información de la ingesta durante más días que el anterior. El número de
días depende de la relación: variación intrasujeto / intersujeto en la ingesta de alimentos.
Un enfoque alternativo es utilizar un cuestionario de frecuencia de consumo semicuantitativa.
La frecuencia de consumo ha sido utilizada en investigaciones epidemiológicas para estudiar la
asociación entre ingesta y riesgo de enfermedad y en este sentido no requiere una medición absoluta
de la ingesta de nutrientes. Aunque es mucho más simple, es difícil cuantificar el error incluido en las
estimaciones.
Usted trabaja en un hospital y están diseñando un estudio transversal analítico en el que se desea estudiar si
en los hombres que consumen más fibra es menos frecuente la hipercolesterolemia.
Se estima un tamaño muestral de 440 con la precisión deseada. Se desea separar a estos 440 participantes
en cuartiles de ingesta de fibra. (Los 440 hombres se ordenarán de menor a mayor según su ingesta de fibra
y los primeros 110 constituirán el primer cuartil, los 110 siguientes el segundo cuartil y así sucesivamente.)
Luego se comparará la prevalencia de hipercolesterolemia entre los distintos cuartiles de ingesta de fibra.
El cardiólogo del equipo le pide si usted podría encargarse de realizar 1 recordatorio de 24 horas a los
pacientes y si está de acuerdo con este método.
Usted Aconseja:
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En un estudio publicado en una revista científica se plantea la hipótesis de que a mayor ingesta
habitual de magnesio menor es la tensión arterial diastólica promedio.
Para estimar la ingesta de magnesio de los participantes se realizó un recordatorio de 24 hs.
Para estimar la TAD promedio se realizó un monitoreo ambulatorio durante una semana.
Se corrigió los resultados según edad, hábito tabáquico, realización de actividad física, consumo de
sodio y de potasio.
Según los autores la TAD promedio no tuvo correlación estadísticamente significativa con el
consumo habitual de magnesio.
¿Usted cree que después de leer la metodología del artículo puede afirmar que no existe
correlación entre el consumo habitual de magnesio y la TAD promedio? Justifique
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La siguiente tabla sintetiza los métodos apropiados para medir la ingesta alimentaria según
distintos niveles de información requerida.
TABLA II: Selección de la metodología para medir la ingesta de nutrientes para alcanzar
cuatro posibles niveles de objetivos. Modificado de Gibson (2005)
*Registros y recordatorios son los métodos recomendados para estimar la ingesta usual cuando se evaluará la
adecuación de la ingesta de nutrientes comparando los resultadoscon las Ingestas Dietéticas de referencias (ver próximo
tema)
BIBLIOGRAFÍA:
• Gibson, R.S. Principles of nutritional assessment 2da ed. Oxford University Press. New York, 2005:
54-64
• IOM (Institute of Medicine). Dietary reference intakes: Applications in dietary assessment. National
Academy Press. Washington DC, 2000.
• IOM (Institute of Medicine). Dietary reference intakes for energy, carbohydrate, fiber, fat, fatty acids,
cholesterol, protein, and amino acids. National Academy Press. Washington DC, 2002.
• Murphy SP, Poos MI. Dietary Reference intakes: summary of applications in dietary assessment.
Public Health Nutrition 2002; 5: 843-849.
• NRC (National Research Council) Nutrient Adequacy: Assessment using Food Consumption Surveys.
National Academy Press, Washington DC, 1986.
• Nusser SM, Carriquiry AL, Dodd KW, Fuller WA. A semi-parametric transformation approach to
estimating usual daily intake distributions. Journal of American Statistical Association 1996; 91: 1440-
1449.
• Willet W. Nutritional Epidemiology 2da ed. Oxford University Press. New York, 2005: 33-49
REQUERIMIENTOS:
Recomendación Dietética (RD): Es el nivel promedio de ingesta diaria suficiente para alcanzar el
requerimiento del 97 al 98% de los individuos sanos de un determinado grupo biológico. Así, la RD
excede el requerimiento de casi todos los miembros del grupo.
Para nutrientes con una distribución normal de requerimientos, la RD se establece agregando 2 DE
al RPE. Para nutrientes con distribuciones de requerimientos asimétricas (como el hierro, entre las
más notablemente asimétricas), la RD se establece entre el Percentilo 97 y 98 de la distribución de
requerimientos. La RD es una “ingesta recomendada para individuos”.
Las RD se listan en las tablas 4, 5 y 6 en negrita. (“RecommendedDietaryAllowances” eninglés)
Nivel superior de Ingesta Tolerable (NS): Es el mayor nivel de ingesta diaria de un nutriente que
probablemente no posea efectos adversos para la mayoría de los individuos de una población. A
medida que la ingesta supera el NS el riesgo potencial de padecer efectos adversos aumenta.
Los NS se muestran en las tablas 7 y 8.
Aún dentro del mismo grupo de edad y sexo, el requerimiento de un nutriente varía en los
distintos individuos integrantes del grupo. Si bien existe un requerimiento individual para cada
persona, lo que nos muestran las tablas, cuando la información es suficiente son distintos puntos de
la distribución de requerimientos en los individuos de igual edad y sexo. Por esta razón, aún en los
casos en que el RPE y la RD hayan sido establecidos, no es posible conocer el requerimiento actual
exacto de un individuo.
Aplicaciones en individuos:
RPE: Se utiliza para examinar la probabilidad de que una ingesta usual de un individuo sea inadecuada
RD: Una ingesta usual individual mayor o igual a la RD tiene una baja probabilidad de inadecuación.
IA: Una ingesta usual por un individuo mayor o igual a este nivel presenta una baja probabilidad de
inadecuación (se utiliza cuando no existe suficiente evidencia para establecer una RD)
NS: Una ingesta usual por encima de este nivel puede significar para el individuo un riesgo de efectos adversos
por ingesta excesiva.
Aplicaciones en grupos:
A continuación complete la tabla, clasificando a los nutrientes según se haya definido el RPE con la
RD o solamente la IA. También complete los nutrientes que tienen establecido un nivel superior de
ingesta tolerable.
IA
RPE y RD
NS
BIBLIOGRAFÍA:
• IOM (Institute of Medicine). Dietary reference intakes: Applications in dietary assessment. National
Academy Press. Washington DC, 2000.
• Murphy SP, Poos MI. Dietary Reference intakes: summary of applications in dietary assessment.
Public Health Nutrition 2002; 5: 843-849.
2-Medir la ingesta usual de un individuo es muy difícil, debido a la variación en las ingesta de un
día a otro. Dado que el acceso a información sobre consumo alimentario habitualmente se limita a
un único o a un pequeño número de días, esta ingesta “observada” o “referida” raramente representa
la ingesta “usual” del nutriente por parte del individuo.
El método consiste en comparar las diferencias entre la ingesta individual observada promedio y
el RPE. Este método supone que:
Datos necesarios:
El puntaje z se construye:
z= D / DED
D/DED se relaciona con el nivel confianza de que la ingesta usual de ese individuo sea adecuada o
inadecuada, conociendo una ingesta media observada. A continuación, en la tabla 6-A se observa
la conclusión según distintos valores del puntaje z resultante.
Ejemplo:
En el marco de un estudio de investigación una de las participantes (mujer de 40 años) tuvo una
ingesta media de magnesio de 320mg/día, según un registro de ingesta de 3 días.
¿Su ingesta observada de 320mg/día de magnesio indica que su ingesta usual de magnesio es
adecuada?
Datos Necesarios:
El DE de la ingesta diaria de magnesio para mujeres de esta edad que según datos del CSII es de 85.9
mg/día.
Pasos para determinar si es probable que la ingesta de 320 mg/día sea adecuada para esta mujer.
Da un valor apenas menor que 1. Un valor cercano a 1 implica un 85% de probabilidad de que la conclusión
de que esta ingesta es adecuada para una mujer en esta categoría sea correcta.
Limitaciones:
Dificultades en la interpretación: Obtener un bajo nivel de confianza de que la ingesta usual sea
adecuada, podría significar tanto que la ingesta es menor a lo adecuado como que los días de
información con los que se cuenta son muy pocos como para obtener un nivel de confianza mayor.
En general los días de información necesarios suelen ser demasiados y es prácticamente imposible
llevar a cabo un estudio de este tipo.
Además, solo para propósitos prácticos, es decir solo para evaluar la necesidad de intervención:
• Una ingesta por debajo del RPE muy probablemente necesite ser aumentada (porque la
probabilidad de adecuación es del 50% o menos)
Solo si la ingesta ha sido observada por un gran número de días y está por encima de la RD , o
si las ingestas fueron observadas por menos días pero están bien por encima de las RD, se podría
tener un alto nivel de confianza de que la ingesta es adecuada.
USO de la IA
Cuando la ingesta se compara con la IA lo único que uno puede concluir es si la ingesta
supera la IA o no. Aunque una ingesta que esté significativamente por encima de la IA es con
seguridad adecuada, también es probable que una ingesta por debajo de la IA sea adecuada para
una proporción considerable de individuos. Por esto, debe tenerse una gran cautela al interpretar una
ingesta en relación a la IA.
Recuerde:
Si la ingesta usual de un individuo excede la IA→ Su dieta fue casi con seguridad adecuada para
ese nutriente
Si la ingesta usual es menor que la IA→ No puede realizarse una estimación cuantitativa de la
probabilidad de inadecuación para el nutriente.
Por desconocer la distribución de los requerimientos no puede realizarse una estimación del
riesgo de ingesta inadecuada, sino solamente evaluar si la ingesta usual partiendo de la información
de unos pocos días de ingesta observada alcanza o supera la IA. El método propuesto para
determinar si la ingesta se encuentra por encima de la IA también consiste en un simple test z, basado
en la variación intrasujeto de la ingesta diaria del nutriente de interés.
La prueba asume que la ingesta diaria para un individuo tiene una distribución que es
aproximadamente normal alrededor de la ingesta usual del individuo. Para llevar a cabo este test es
necesario el DE de la ingesta diaria y otra vez se utiliza la estimación de la variabilidad de la ingesta
de un día a otro del CSFII o de NHANES.
Nutriente Ejemplo:
AI= 500 u/día
En el marco de un estudio de investigación, en una de las participantes (mujer de 40 años)se estimó
una ingesta media observada de 560 unidades/día de, según recordatorio de 3 días.
132 Facultad de Medicina, Carrera de Nutrición, Cátedra de Evaluación Nutricional, 2016.
Página 133
Para decidir si la ingesta usual de esta mujer está por encima de la IA, se deben seguir los
siguientes pasos:
1- Aplicar la fórmula
z= ( 560 – 500 ) / (50 / 3)
z= 60 / 29
z= 2.07
2- Comparar este valor con los datos tabulados de la tabla 6-B para obtener el nivel de confianza
con el que se podría concluir que la ingesta usual de esta mujer estuvo por encima de la IA:
→ En este caso, 2.07 corresponde a un alto nivel de confianza, cercano al 98%
Se puede concluir con confianza que la ingesta del nutriente que realiza esta mujer está por encima
de la AI y por lo tanto es adecuada.
Dada una ingesta media observada la confianza con la que uno puede determinar si la ingesta
usual está por encima de la AI depende de:
1- el número de días de ingesta disponible
2- El DE de la ingesta diaria para el nutriente
Si uno puede concluir que la ingesta usual parece ser mayor a la IA con la precisión deseada,
hay una seguridad considerable de que la ingesta es adecuada. Sin embargo, si el test no resulta en
la seguridad deseada, no se puede inferir que la ingesta es inadecuada.
USO del NS
Ingesta en relación al NS
METODO PROBABILISTICO:
Combina las distribuciones de los requerimientos y de las ingestas usuales de los individuos de un
grupo para estimar la proporción de individuos en riesgo de ingestas inadecuadas. Al desconocer el
requerimiento actual de cada individuo, el procedimiento no identifica quienes son los individuos en
riesgo.
Información requerida:
• El RPE (según edad y sexo) para el nutriente de interés.
• La distribución de los requerimientos. Para la mayoría de los nutrientes, esta no es conocida
con precisión. En ausencia de esta información, se asume que la distribución de los
requerimientos es simétrica (no necesariamente normal) con un coeficiente de variación del
10% (15% para niacina) del RPE. Una excepción es la distribución de requerimientos de
hierro en mujeres en edad fértil, que es notablemente asimétrica.
• Información confiable sobre la distribución de la ingesta usual del nutriente para el grupo
evaluado. Se obtiene ajustando estadísticamente la distribución de ingestas observadas para
remover los efectos de la variabilidad intrasujeto. El ajuste produce una distribución con la
misma media pero reduce la variabilidad.
• Conocimiento acerca de la correlación esperada entre ingesta y requerimiento. Se asume que
para todos los nutrientes es baja. La única excepción es la energía.
Al presente la ausencia de estimaciones confiables del RPE para todos los nutrientes limita
la aplicación general del método para evaluar la prevalencia de inadecuación en la ingesta de todos
los nutrientes en una población.
Este método puede utilizarse para casi todos los nutrientes para los que este establecido el
RPE. Sin embargo, debido a que necesitamos muchos detalles de la distribución de requerimientos
(que no siempre están disponibles) y a que es más engorroso que el anterior, utilizamos el método
que utiliza como punto de corte el RPE (que se explica a continuación), a menos que la distribución
de los requerimientos sea asimétrica o no se cumpla otro de los requisitos necesarios para utilizarlo.
La tercera columna indica el riesgo de ingesta inadecuada del punto medio del intervalo de
percentilos correspondiente.
A cada intervalo de ingesta le corresponde una probabilidad de inadecuación. Por ejemplo
ingestas alrededor del RPE tienen una probabilidad de inadecuación de 0,5. Ingestas por encima de
la RD tienen una probabilidad de inadecuación cercana a cero.
De esta forma, en el intervalo de ingesta correspondiente al intervalo de percentilos entre 10
y 20 de la distribución de requerimientos, el punto medio es el P15. Una ingesta del valor del
Percentilo 15 de los requerimientos es suficiente para el 15 % de la población pero inadecuada para
el 85%. Por eso, dada una ingesta a este nivel la probabilidad de inadecuación es de 0,85.
En la cuarta columna se incluyó la distribución de ingestas ajustadas según los rangos de
ingesta de la columna 2. Por ejemplo, de las 1000 mujeres estudiadas 10 ingerían entre 5,46 y 6,22
mg de Hierro por día.
En la quinta columna se estima cuántas de estas mujeres tendrán ingestas inadecuadas
según la probabilidad de inadecuación de ese rango de ingesta. Para ello se multiplica la tercer
columna (Probabilidad de inadecuación) por la cuarta (Número de mujeres en ese rango de ingesta).
Así, de 10 mujeres que se encuentran en el rango de ingesta entre los percentilos 10 y 20 de la
distribución de requerimientos, “8,5” presentarían una ingesta inadecuada. (10 x 0,85). (Todavía no
redondeamos a enteros aunque estemos hablando de personas)
En la última fila, en la cuarta columna aparecerá el total de mujeres evaluadas (la suma de
los valores de las columnas anteriores). En la última columna, la sumatoria del número de mujeres
con ingesta inadecuada de cada fila producirá el total estimado de mujeres en la muestra con ingesta
inadecuada.
Esta versión más simple del método anterior no requiere información sobre la distribución exacta de
los requerimientos. Produce resultados similares al método de probabilidad.
Como en el método original, requiere que la ingesta sea ajustada para eliminar la variabilidad diaria
intrasujeto.
La prevalencia de ingesta inadecuada en el grupo se estima simplemente contando el número de
individuos por debajo del RPE.
Este método es especialmente útil cuando la actual prevalencia de ingestas inadecuadas en el grupo
es cercana al 50%. A medida que la verdadera prevalencia se acerca a cero o a 100% la performance
de este método disminuye, incluso cuando se cumplen los requisitos expuestos más arriba.
Ejemplo 1:
-El objetivo del estudio fue estimar la prevalencia de ingesta inadecuada del nutriente X en
determinado grupo biológico.
-Se asume que la distribución de requerimientos del nutriente X en este grupo biológico es
aproximadamente normal.
-Se ajustaron las ingestas para tratar de quitar el efecto de la variación intrasujeto y se
obtuvieron 80 ingestas ajustadas.
De 80 ingestas ajustadas, 20 eran menores al RPE. Tomando como punto de corte el RPE
podemos estimar que 20 personas de este grupo presentan una ingesta inadecuada del
nutriente X. (aunque no sepamos cuáles son esas 20 personas)
En la práctica, utilizamos algún programa para crear una base de datos y la frecuencia absoluta
(20) y relativa (25%) acumuladas las calcula el programa.
En el caso en que contemos con datos sobre la distribución de ingestas ajustadas por ejemplo
en percentilos, aunque no contemos con todos los datos, todavía podemos acercarnos a la
prevalencia de inadecuación. Recordemos que los percentilos se numeran según el porcentaje de la
población que deja por debajo. Así, por ejemplo, si se trata de percentilos de ingesta ajustada de un
nutriente en un grupo, el 5% del grupo habrá tenido una ingesta observada menor al Percentilo 5. En
este caso, ubicamos entre que percentilos se encuentra el RPE y estimamos la prevalencia de
inadecuación entre esos porcentajes.
Ejemplo 2:
Prevalencia de ingesta
Vitamina
445 818 354 422 557 746 996 1301 1530 2081 inadecuada > 10% pero
A (RAE)
< al 25%
Debido a que las IA fueron establecidas por diferentes métodos para distintos nutrientes, y su
relación con el requerimiento es desconocida, no puede utilizarse para determinar el porcentaje de
individuos en un grupo que presenta ingesta inadecuada.
Esta variedad de métodos para determinarlas dificulta la evaluación. Sin embargo, cuando la
IA se basa directamente en la ingesta de poblaciones aparentemente sanas, es correcto asumir que
otra población (con una distribución de ingesta similar) tendrá una baja prevalencia de ingesta
inadecuada si la ingesta media alcanza la IA o la supera.
Para nutrientes para los que la IA no está basada en la ingesta de poblaciones aparentemente
sanas, la ingesta media de un grupo que alcance o supere la IA también podría indicar una baja
prevalencia de ingesta inadecuada, pero con un menor nivel de confianza.
Cuando la ingesta media del grupo es menor que la IA la adecuación del grupo no puede
determinarse en forma cuantitativa ni cualitativa.
Ejemplo
Interpretación: se puede suponer que existe una baja prevalencia de ingesta inadecuada de fibra en
el grupo estudiado (“Asumiendo” que la IA es al menos tan alta como si estuviera basada en el
consumo medio usual de una población sana)
Conclusiones
La factibilidad de la aplicación de los métodos aquí descritos dependerá del ámbito en el que
se quiera utilizar.
REFERENCIAS:
• Gibson, R.S. Principles of nutritional assessment 2da ed. Oxford University Press. New York, 2005:
54-64
• IOM (Institute of Medicine). Dietary reference intakes: Applications in dietary assessment. National
Academy Press. Washington DC, 2000.
• IOM (Institute of Medicine). Dietary reference intakes for energy, carbohydrate, fiber, fat, fatty acids,
cholesterol, protein, and amino acids. National Academy Press. Washington DC, 2002.
• Murphy SP, Poos MI. Dietary Reference intakes: summary of applications in dietary assessment.
Public Health Nutrition 2002; 5: 843-849.
• NRC (National Research Council) Nutrient Adequacy: Assessment using Food Consumption Surveys.
National Academy Press, Washington DC, 1986.
• Nusser SM, Carriquiry AL, Dodd KW, Fuller WA. A semi-parametric transformation approach to
estimating usual daily intake distributions. Journal of American Statistical Association 1996; 91: 1440-
1449.
• Willet W. Nutritional Epidemiology 2da ed. Oxford University Press. New York, 2005: 33-49.
ANEXO 1
Brawerman J, Vinocur P, Acosta L, Larramendi M. Manual de Censo de Talla. UNICEF
Argentina, pág. 9- 17.
ANEXO 2
TABLA. 1 Estimación de la variación intra-sujeto en la ingesta de nutrientes, expresada como la Desviación
Estandar (DE) a y Coeficiente de variación (CV) para vitaminas y Minerales en Adultos de 19 años y mayores
Nutrienteb Adultos (19–50 años) Adultos, desde 51 años
Mujeres Hombres Mujeres Hombres
(n = 2,480)c (n = 2,538) (n = 2,162) (n = 2,280)
sexo se controlaron por clasificación). b La ingesta de nutrientes se refiere a alimentos, no incluye la ingesta
de los nutrientes proveniente de suplementos. c El tamaño muestral resultó inadecuado para obtener
estimaciones separadas para mujeres embarazadas o en período de lactancia. d La ingesta de Folato está
expresada en μg en lugar de equivalentes de folato dietario (DFE).
FUENTE: Datosdel Continuing Survey of Food Intakes by Individuals 1994–1996.
controlados por clasificación). bLa ingesta de nutrientes se refiere a alimentos, no incluye la ingesta de los
nutrientes proveniente de suplementos. c Folato expresado en μg en lugar de equivalentes de folato dietario
(DFE).
FUENTE: Data from Continuing Survey of Food Intakes by Individuals1994–1996.
período de lactancia.
FUENTE: Datos de Continuing Survey of Food Intakes by Individuals1994–1996.
ANEXO 3