Libreto Coco El Músical
Libreto Coco El Músical
Libreto Coco El Músical
Personajes:
Primer Acto.
Escena 1.
Se abre el Telón y vemos un gran altar, entre penumbras está Miguel en el centro
del escenario de espaldas al público. Conforme va avanzando la narración los
personajes van apareciendo a la izquierda y a la derecha del escenario.
Miguel: A veces siento que tengo un hechizo, por algo que sucedió antes de que yo
naciera.
Narrador 1: Hace mucho tiempo existía una familia, el papá era un gran músico. Él y
su familia bailaban, cantaban y bendecían lo que tenían. Pero también tenía un
sueño, cantar para el mundo.
Narrador 3: Puso manos a la obra y aprendió a hacer zapatos. Pudo hacer dulces,
fuegos artificiales o ropa interior para luchadores
Miguel: Y esa mujer era mi tatarabuela, mamá Imelda. Murió mucho antes de que yo
naciera pero mi familia aún cuenta su historia cada año el día de muertos. Y su hijita
es mi bisabuela, (emocionado) ¡mamá Coco!
Baja del escenario, Miguel interactúa con otros personajes del pueblo, una mujer
barriendo, músicos tocando algunos instrumentos, señor vendiendo fruta, etc. Sube
Miguel al escenario, Dante sale de adentro de un bote de basura y el escenario en
el escario ya no esta el comedor ahora vemos la plaza del pueblo donde está la
estatua de Ernesto de la Cruz.
Miguel: ¡Dante! Sentado, al suelo, da una vuelta, saluda, chócala. ¡Bien Dante! Se
que no debería de amar la música pero no es mi culpa es suya (se acerca a la
estatua) Ernesto de la Cruz! El mejor músico de todos los tiempos.
Guía turística 1: Y aquí en esta misma plaza, el jóven Ernesto de la Cruz dio sus
primeros pasos para volverse el más amado cantante en la historia de México.
Guía turística 2. Empezó como un completo Don nadie de Santa Cecilia.
Miguel: ¡Cómo yo! (La gente lo calla)
Guía turística 2: Pero cuando tocaba su música, hacía que la gente se enamorara
de él. Salía en películas, tenía una guitarra increible, ¡podía volar! (le pone una capa
de superhéroe) y escribió las mejores canciones.
Miguel: (Interrumpe) Pero mi favorita es...
Miguel: Vivió la clase de vida con la que uno sueña, hasta 1942 cuando lo aplastó
una campana gigante. Quiero ser igualito a él. A veces miro a De la Cruz y tengo la
sensación de que algo nos conecta, siento que él pudo tocar música, tal vez un día
yo también. Si no fuera por mi familia
Mientras dice este último texto van saliendo bailarines de escena, atrás vemos al
pueblo realizando acciones cotidianas. en el centro, Miguel con el Mariachi a quien
le bolea los zapatos.
Abuela: ¡Miguel!
Miguel: ¡Abuelita!
Abuela: ¿Qué estás haciendo aquí?
Antes de que Miguel responda Mamá Elena acompañado de tío y tía quienes cargan
canastas con flores. Mamá Elena se quita la chancla y amenaza con golpear a todos
se sorprenden y detienen la actividad que hacían.
Abuela: Mi nieto es un (tierna) lindo y dulce angelito, chiquito, cielito (molesta) sin
nada que ver con tu música, no lo vuelvas a molestar.
Abuela: ¡Ay! Pobrecito, ¿estás bien mijo? (lo abraza) yo te advertí que no vinieras a
esta plaza (molesta) ahora ven a casa ¡ya!
Salen de escena Abuela y los tíos, antes de salir, Miguel recoge un volante del
concurso y se lo lleva. Sale detrás de su familia. Vuelven a entrar. Regañando a
Miguel.
Sale Dante y empieza seguir a Miguel y a jalarle el cajón para bolear, mamá Elena
se molesta, lo corre y le avienta la chancla.
Todos se sorprenden
Ambos ríen
Abuela: Es día de muertos, todos se quedan aquí hoy. (Le da unas flores de
cempasúchil) Solo importa la familia. A la ofrenda ¡vámonos!
Mientras Mamá Elena habla, Miguel empieza a salir de escena sin que lo vea pero
lo descubre.
Mientras Mamá Elena está con Mamá Coco Miguel aprovecha para escapar. Miguel
baja a sala dónde se encuentra con Dante.
Miguel: Ya no me voy a esconder Dante tengo que vivir mi momento, debo tocar en
la casa del mariachi aunque me cueste la vida.
Escena 2.
Entra abuelita y detrás de ella la familia, hay niños corriendo maquillados de catrinas
y pueblo haciendo labores de decoración.
Mientras todo ocurre Miguel y Dante intentan escapar. Miguel esconde a Dante y la
guitarra debajo del altar. Entran Mamá Elena con Mamá Coco y sus padres.
Miguel: ¿Qué?
Enrique: La boleada quedó atrás hijo, ¡fabricarás zapatos! A diario, después de la
escuela.
Abuela: ¡Uy! Nuestro Miquelititito continuará la tradición familiar. ¡Y en el día de
muertos! tus ancestros se sentirán orgullosos. Harás huaraches como tu tía Victoria
y puntas de ala como tu Papá Julio.
Miguel: Pero ¿si no puedo hacer zapatos como ustedes?
Luisa: Ay Miguel, tienes a tu familia para guiarte hijo.
Enrique: Tú eres un Rivera y ¿un Rivera es?
Miguel: (desanimado) Un zapatero hasta los huesos.
Enrique: ¡Ese es mi muchacho!
Lo abrazan, sale de escena la familia pero dejan ahí a Mamá Coco. Mientras ellos
salen Dante comienza a comer uno de los platos del altar, Miguel intenta detenerlo,
con el movimiento cae la foto de Mamá Imelda al piso, se quiebra, Miguel saca la
foto y descubre la guitarra de Ernesto de la Cruz en la foto.
Abuela: (le arrebata la guitarra) ¿Quieres terminar cómo ese hombre, olvidado y
fuera de la ofrenda de su familia?
Miguel: Me da igual si me ponen en su absurda ofrenda
Miguel: ¡No!
Papá: ¡Mamá!
Abuela: Listo (se persigna) sin guitarra no hay música. (Miguel entristece y trata de
consolarlo) ya, te vas a sentir mejor después de cenar con tu familia.
Miguel: No quiero ser parte de esta familia (se va molesto)
Enrique: (trata de detenerlo) ¡Miguel, Miguel!
Escena. 3
Baja y corre por la sala, Dante lo sigue. Vuelve al escenario, hay cambio de
escenario ahora estamos en la plaza.
Miguel: (Acelerado, a mujer) Quiero tocar en la plaza. Igual que De la Cruz. ¿Tiene
lugar todavía?
Mujer: ¿Tienes un instrumento?
Miguel: No pero si me prestan una guitarra...
Mujer: Los músicos deben traer sus instrumentos. Tu busca una guitarra ¿si? y te
pongo en la lista.
Va con varios músicos que están por el lugar pero nadie le presta su guitarra.
- Lo siento muchacho
- ¡No!
- Ahora no niño
- ¡La guitarra!
- ¡No está!
- ¡Alguien robó la guitarra de De la Cruz!
- A ver ¿quién está ahí?
Catrina: ¡Oh! Que horror. Ay pequeño ¿estás bien? Ven, dejame ayudarte.
Miguel: Gracias, yo... (Descubre su apariencia ambos gritan)
Miguel: Dante, no corras, ¿qué tienes? ¡Dante! (Choca con Papá Julio) Ay perdón
señor, lo lamento.
Tía Victoria: ¡Oigan, oigan! Es mamá Imelda, no logró cruzar, se atoró en el otro
lado.
Miguel: ¿Tía Victoria?
Tía Victoria: ¡Ah! hola Miguel (asustada) ¿Miguel? no lo puedo creer, ¿qué está
pasando? Algo me dice que tienes que ver con todo esto.
Tía Rosita: Pero entonces mamá Imelda ya no vendrá aquí.
Papá Julio: Iremos por ella. ¡Vamonos!
Toma a Miguel del brazo y caminan hacia la entrada al mundo de los muertos.
Puede ser una puerta o un puente. Todos comienzan a pasar, incluido Dante, pero a
Miguel le da miedo entrar.
Miguel atraviesa, no entiende dónde está, Dante le ladra para que venga detrás de
él.
Llegan a la caseta de vigilancia. Se forman en la fila para entrar, hay varios muertos
con sus ofrendas en las manos.
Por otro lado en la salida vemos a varios muertos que están siendo registrados para
salir. Ahí está Héctor disfrazado de Frida Kahlo.
Vigilante 2: (A otros muertos) adelante, su hijo puso sus fotos en la ofrenda, pase,
su dentista ha puesto su foto.
Héctor: (fingiendo la voz) Si, si, soy yo Frida Kahlo ¿nos saltamos el escaneo?
aparezco en mil ofrendas, no quiero sobrecargar su sistema.
Vigilante 2: (irónica) Ay que pena, creo que nadie puso tu foto Frida.
Héctor: Ok cuando dije que era Frida, justo ahora, yo... lo engañé. Y en verdad
siento mucho haberlo hecho.
Vigilante 2: Sin foto en una ofrenda, no cruzas al otro lado. ¡Seguridad!
Entra seguridad y lo sacan.
Tía Rosita: Ay no, yo no sé qué haría si nadie pusiera mi foto. Vamos mijo, ya nos
toca.
Vigilante 1: Bienvenidos amigos, ¿algo que declarar?
Papá Julio: Bueno ya que lo menciona (señala a Miguel)
Vigilante 1: (Asustado) ¡Seguridad!
Entran los guardias y se llevan a Miguel. Todos salen detrás de ellos. Cambio de
escenografía.
Escena 5.
Todos se sorprenden.
Miguel: ¿Qué?
Secretaria: El día de muertos es cuando se da algo a los muertos, no se les quita a
los muertos.
Miguel: Pero yo no robé esa guitarra.
Mamá Imelda: ¿Guitarra?
Miguel: Era de mi tatara abuelo, a él le hubiera hecho feliz dármela.
Mamá Imelda: Aquí nadie habla de ese... músico. Está muerto para la familia. Pero
nada de esto explica porqué yo no crucé esta vez.
Miguel: (Saca la foto de su bolsillo y la muestra) No se si sea por este pequeño
detalle.
Mamá Imelda: ¿Quitaste mi foto de la ofrenda?
Miguel: Fue un accidente.
Mamá Imelda: (a la secretaria) Y ¿cómo lo deshacemos?
Secretaria: Bueno, al ser una falta familiar, deshacer un hechizo familiar requiere
que tu familia te bendiga. Si tu familia te bendice lo demás volverá a ser normal,
pero hazlo antes del amanecer si no... desaparecerás.
Miguel: ¿Desaparecer? pero ¿cómo?
Papá Julio: ¡Híjole Miguel! Tu dedo.
Secretaria: Pero no temas, tu familia está aquí te darán la bendición aquí y ahora
(toma una vela y se la da a Mamá Imelda) ahora mire al vivo y diga su nombre.
Mamá Imelda: Miguel
Secretaría: Justo así, ahora diga, te otorgo mi bendición (se enciende la vela) te
otorgo mi bendición para ir a casa poner mi foto en la ofrenda... ¡y no volver a tocar
música nunca!
Miguel: ¿Qué? eso no es justo, es mi vida, tu ya tuviste la tuya. (le quita la vela y
esta se apaga) Papá Julio dame tu bendición (ve a Mamá Imelda y da un paso para
atrás), ¿tía Rosita? (ve a Mamá Imelda y da un paso para atrás) ¿tía Victoria?
Mamá Imelda: No lo hagas más difícil mijo, regresas a mi manera o no regresas.
Miguel: ¿Por qué odias la música de ese modo?
Mamá Imelda: No voy a dejar que sigas la misma ruta que él.
Tía Victoria: Escucha a Mamá Imelda.
Papá Julio: Sólo quiere cuidarte muchacho.
Tía Rosita: Se razonable.
Miguel: (Saliendo) Con permiso, tengo que ir al baño un segundo, no tardo.
Todos salen.
Escena 6.
Miguel: ¡Oye! ¡Oye! ¿Tu conoces a De la Cruz? (Héctor se asusta al ver que está
vivo y antes de que pueda hablar Miguel lo calla) Si, estoy vivo y sólo puedo volver a
la tierra de los vivos si De la Cruz me bendice. ¡Él es mi tatara abuelo!
Héctor: Oye, oye oye, a ver ¿qué?, espera (se le ocurre algo) ¡Si! irás de vuelta a la
tierra de los vivos, yo te ayudo amigo y luego tu a mi, nos ayudamos el uno al otro,
pero más importante tu a mi. Soy Héctor.
Mamá Imelda: (A lo lejos) ¡Miguel!
Miguel: (Apurado) Mucho gusto.
Lo toma del brazo y ambos salen corriendo. Entra la familia muerta de Miguel.
Mamá Imelda: Ese niño hará que lo maten. Quiero a mi guía espiritual ¡Pepita!
(Silva, Pepita llega hasta donde está la familia) ¿quién trae la vela que Miguel tocó?
Papá Julio: Yo (se lo acerca a Pepita para que lo huela) lindo alebrije.
Segundo Acto.
Escena 1.
Escena 2.
Mientras está la escena anterior en una parte del escenario se acomoda Frida de
espaldas. frente a sus pinturas. Entra Dante seguido de Miguel.
Entra Héctor.
Frida sale.
Miguel: Dijiste que mi tatara abuelo vendría aquí, está del otro lado en una super
fiesta.
Héctor: Ese flojo, si es su show por qué no esté ensayando.
Miguel: Si son tan grandes amigos entonces ¿por qué no te invitó?
Héctor: Él es tu tatarabuelo ¿a ti por qué no te invitó? mira, mira no importa.
Escuché que hay una competencia de música en la plaza y el ganador se presenta
en su fiesta.
Miguel: ¡Eso es! ¿dónde consigo una guitarra?
Héctor: Conozco a alguien ven, vamos.
Escena 3.
Chicharrón desaparece.
Miguel: Dijiste que odiabas a los músicos, no dijiste que eras uno.
Héctor: Y cómo crees que conocí a tu tatarabuelo, tocábamos juntos, lo que sabe se
lo enseñé yo.
Miguel: No inventes, ¿tocabas con Ernesto De la Cruz, el mejor músico de todos los
tiempos?
Héctor: Ay por favor, no es tan bueno.
Miguel: No tienes idea de que hablas.
Escena 4.
Héctor: (Lo empuja a escena) ¡Al escenario muchacho! Primero a relajar el cuerpo,
deja ir esos nervios (sacude su cuerpo) ¡sácalo!
Miguel se acerca al micrófono con mucho temor, al ver al público da pasos para
atrás. Tarda en empezar.
Miguel respira hondo e intenta hacer un grito. Entra la canción “Un poco loco”.
Mientras está la canción por el público están Mamá Imelda y la familia de Miguel
buscándolo.
Termina la canción.
Voz en off: Su atención por favor este es un aviso de emergencia. Por favor ayuden
a encontrar a un niño vivo responde al nombre de Miguel. Hace algunas horas
escapó de su familia. Sólo quieren guiarlo de vuelta a la tierra de los vivos.
Héctor: Oye, oye, oye. Dijiste que De la Cruz era tu única familia. La única persona
que te podía regresar a casa.
Miguel: (Nervioso) Si tengo otra familia pero...
Héctor: Pudiste llevarte mi foto todo este tiempo.
Miguel: Pero odian la música. Necesito la bendición de un músico.
Héctor: (Molesto) Dijiste mentiras.
Miguel: Uy y tu nunca lo haces.
Héctor: Miguel mírame, me están olvidando. Ni siquiera sé si pasaré la noche. No
voy a perder mi oportunidad de cruzar porque tu quieres vivir una absurda “fantasía
musical”.
Miguel: No es absurda.
Héctor: (Lo toma del brazo a la fuerza) Te voy a entregar a tu familia.
Miguel: ¡Suéltame!
Héctor: Luego me lo agradecerás.
Miguel: No quieres ayudarme. Quieres salvarte a ti mismo. Toma tu fea foto (le
arroja su foto)
Héctor: ¡No, no, no!
Miguel: Alejate de mí.
Miguel: Dante déjame, no Dante ya basta, no quiere ayudarme. ¡Dante que no! ¡Ya
basta! ¡Déjame solo! No eres un guía espiritual, eres un simple pulgoso, ahora fuera
de aquí.
Dante se va triste.
Escena 5.
Cadenero: Tu invitación
Miguel: ah mire descuide, soy el tataranieto de Ernesto (posa con su guitarra)
Cadenero: Largo de aquí muchacho.
Miguel: Pero...
Cadenero: Sin invitación no entras.
Como puede Miguel logra colarse entre los invitados. Al subir al escenario ya está
la fiesta de De la Cruz. Hay mucha gente, del otro lado del escenario vemos de
espaldas a De la Cruz. Miguel intenta pasar entre la gente pero es imposible.
No logra llamar su atención entonces comienza a cantar. Entra canción “El mundo
es mi familia”. Al terminar la canción Miguel tropieza y cae, De la Cruz corre para
ayudarle a levantarse.
De la Cruz: ¿Te hiciste daño niño? (Al verlo a Miguel se le ha borrado el maquillaje
del rostro) ¡Eres tú! Tu eres el muchacho, el que proviene de la tierra de los vivos.
Miguel: Tu ¿ya sabías de mí?
De la Cruz: (Ríe) Pero si eres de lo que todo el mundo ha estado hablando. Pero ¿A
qué has venido aquí?
Miguel: Soy Miguel, (titubeante) soy tu... tu... tataranieto.
De la Cruz: ¿Yo? ¿tengo un tataranieto?
Miguel: Necesito tu bendición y así vuelvo a mi casa para ser músico igual que tu. El
resto de nuestra familia no quiere escuchar pero esperaba que tú sí.
De la Cruz: Mi muchacho, con el talento que tienes claro que te escucho.
De la Cruz: (Notando a Miguel muy pensativo) Oye, ¿qué tienes? ¿es demasiado?
Te siento abrumado.
Miguel: No, todo esto es increíble.
De la Cruz: Pero...
Miguel: Es que he pasado mi vida admirandote, tú lograste alcanzar tu sueño. Pero
¿te arrepentiste de hacerlo?, ¿elegir la música en vez de lo que tenías?
De la Cruz: Si fue duro, tener que partir de mi hogar y salir sólo al mundo.
Miguel: Abandonando a tu familia.
De la Cruz: Si, pero... yo no lo cambiaría jamás. Es inutil negar a qué has venido al
mundo. Y tu, mi tataranieto, has venido a volverte un músico. Tu y yo somos artistas
Miguel. No somos de una sola familia, ¡el mundo es nuestra familia!.
Miguel: ¿Y a dónde fueron todos?
De la Cruz: Se han ido a prepararse para mi concierto. Miguel ¿qué opinas si vienes
al show? como mi invitado de honor.
Miguel: (Ilusionado) ¿De verdad?
De la Cruz: Por su puesto muchacho.
Obscuro.
Escena 7.
Miguel: ¿Héctor?, ¿Héctor eres tú? (corre a abrazarlo)Tenías razón, debí volver a
casa cuando pude. Debí volver con mi familia. Sólo intentaban protegerme. No
querían que fuera como De la Cruz. Pero no hice caso. Les dije que daba igual si se
olvidaban de mí, que ni siquiera quería estar en su absurda ofrenda. Les dije que no
los quería.
Obscuro.
Escena 8.
Entra Mamá Imelda. Va viendo hacia atrás, del otro lado entra de la cruz y choca
con él.
Entra Héctor.
Entra Miguel.
Todos salen corriendo. Entra mamá Imelda del otro lado con la foto en la mano.
Obscuro.
Escena 9.
Entra Miguel y el resto de la familia. Miguel le entrega la vela a Mamá Imelda y ella
le da la foto de Héctor.
Mamá Imelda: Miguel te otorgo mi bendición (se enciende la vela) para ir a casa,
poner nuestras fotos y nunca más...
Miguel: (Triste) Nunca más volver a tocar música.
Mamá Imelda. Nunca más... olvides lo mucho que tu familia te ama.
Héctor: Irás a casa.
Entra De la Cruz e interrumpe. Se lleva a Miguel por el escenario.
Obscuro.
Escena 10.
Miguel: Mamá Coco, escuchame. Soy Miguel. Conocí a tu papá ¿tu papá? ¡papá!
por favor, si lo olvidas desaparecerá para siempre. Esta era su guitarra, él la tocaba
para ti. ¿Si? Aquí está (le muestra la foto de Mamá Imelda pero Coco no reacciona)
recuerda, tu papá, papá, mamá Coco mira, no lo vayas a olvidar.
Entra mamá Elena junto con toda la familia.
Mamá Elena intenta detenerlo pero Enrique la detiene. Entra canción “Recuérdame”.
En la última parte mamá Coco canta con Miguel. Mamá Elena se limpia las lágrimas.
Mamá Coco sonríe y saca de un cajón las cartas de Héctor y el pedazo que le falta
a la foto de mamá Imelda.
Mamá Coco: Conservé sus cartas y... (le entrega la foto a Miguel, Miguel completa
la fotografía) papá era músico cuando yo era una niña. Él y mamá cantaban las más
bellas canciones.
Escena 11.
Ya ha pasado un año, Toda la familia pone el altar. Mamá Elena entra con la foto de
mamá Coco y la coloca en el altar. Se hace un silencio. Miguel abraza a mamá
Elena. Entra canción “Latido de mi corazón”. Se mezclan vivos y muertos en el
banquete y fiesta del Día de muertos.
Telón.