Múgica, Fracisco. Hechos No Palabras T. I
Múgica, Fracisco. Hechos No Palabras T. I
Múgica, Fracisco. Hechos No Palabras T. I
Biblioteca de Obras
Fundamentales de la Independencia
y la Revoluci6n, editada para conmemorar
el inicio de la Independencia y el comienzo de
la Revoluci6n Mexicana, no habría sido posible
sin la colaboraci6n financiera de entidades y
dependencias de la Administraci6n Pública
Federal y la participaci6n de gobiernos
de los estados de la
República.
HECHOS,
NO PALABRAS. • •
FRANCISCO J. MUGICA
"
••
COMISION NACIONAL PARA LAS CELEBRACIONES
DEL 175 ANIVERSARIO DE LA INDEPENDENCIA NACIONAL
Y 75 ANIVERSARIO DE LA REVOLUCION MEXICANA
COMISION NACIONAL PARA LAS CELEBRACIONES
DEL 175 ANIVERSARIO DE LA INDEPENDENCIA NACIONAL
Y 75 ANIVERSARIO DE LA REVOLUCION MEXICANA:
Presidente
Lic. Miguel de la Madrid Hurtado
Presidente de los Estados U nidos Mexicanos
Vocal
Lic. Antonio Riva Palacio López
Presidente de la Gran Comisión de la H. Cámara de Senadores
Vocal
Lic. Eliseo Mendoza Berrueto
Presidente de la Gran Comisión de la H. Cámara de Diputados
Vocal
Lic. Jorge Iñárritu y Ramírez de' AguiJar
Presidente de la H. Suprema Corte de Justicia de la Nación
Secretario Ejecutivo
Lic. Manuel Bartlett Díaz
Secretario de Gobernación
Secretario Técnico
Lic. Juan Rebolledo Gout
Vocal Ejecutivo del Instituto Nacional de Estudios Históricos
de la Revolución Mexicana
L Os movimientos popula-
res que le han dado ros-
tro a México han sido
producto de las fuerzas sociales. Responden no sólo a la
existencia de problemas nacionales, sino a la voluntad de
definir una identidad; de buscar ser una nación igual en-
tre iguales y diferente, a la vez, a todas las demás.
Este año se cumplen 175 años del comienzo de la
Independencia Nacional y 75 de haberse iniciado el pro-
ceso histórico de la Revolución Mexicana. Esta coinciden-
cia de celebrar dos momentos fundamentales en la histo-
ria nacional ha motivado al gobierno de la República a
invitar, respetuosamente, a los representantes de los po-
deres Judicial y Legislativo a integrar una comisión de
carácter nacional para celebrar estos acontecimientos.
La Comisión Nacional ha propuesto que es~ cele-
braciones no se limiten a los festejos y otros actos conme-
morativos, sino que reflejen e inscriban en la conciencia
colectiva una huella de la herencia que disfrutamos, de
los valores que nos agrupan, de la enorme capacidad pa-
ra vencer obstáculos que nos caracteriza y del talento para
inventar juntos nuestro futuro.
De ahí la importancia de que el programa nacio-
nal de celebraciones incluya, de manera central, un es-
fuerzo editorial que conserve en la memoria colectiva todo
aquello que los mexicanos debemos a los movimientos
de Independencia y de Revolución. La reflexión ilustra-
da y los documentos que estos movimientos generaron
son el espejo que esta Comisión desea legar a las futuras
generaciones. En este espejo se verán ellas a sí mismas
hasta en sus raíces y cobrarán sentido y reconocerán su
responsabilidad ante las metas superiores que pueden al-
canzar sobre la firme base de los compromisos pactados
en esos pasados.
La colección de obras fundamentales de la Inde-
pendencia y de la Revolución es el inicio de este esfuerzo.
El objetivo es hacer accesibles obras básicas que, para-
dójicamente escasas, aportan memoria viva a la cultura
histórica del pueblo.
Han sido los criterios de selección el valor docu-
mental y la calidad historiográfica. Entre estas obras las
hay que compilan documentos y legajos históricos de esen-
cial relevancia para entender la lucha de emancipación.
Otras, muestran el carácter regional y faccional que ca-
racterizó en algunos momentos a nuestra Revolución, ayu-
dándonos a entender sus aportaciones al proyecto de país
que articula la Constitución Política de 1917. Consecuen-
cia de esto último es el carácter polémico de varias de ellas.
Pero todas las obras aquí presentadas muestran alguna
faceta básica de lo que somos hoy en razón de lo que fui-
mos ayer.
La "Biblioteca de Obras Fundamentales", inevi-
tablemente, sufre de ausencias notables: su papel es ser
pie de futuras adiciones. Todo ello para que el compro-
miso de los mexicanos, especialmente los jóvenes, sea más
enterado, más decidido, más visionario.
F rancisco J. Múgica nació en
Tingüindín, Michoacán, en
1884, y murió en la ciudad
de México en 1954. Desde su juventud se dedicó al perio-
dismo, y fundó varios modestos periódicos de oposición.
En 1910, en San Antonio, Texas, se puso bajo las órde-
nes de la Junta Revolucionaria que organizó las prime-
ras etapas de la revolución maderista. Después de la muer-
te de Francisco 1. Madero, Múgica se unió al constitu-
cionalismo. Tomó parte en el primer reparto agrario y
fue uno de los firmantes del Plan de Guadalupe. Dipu-
tado constituyente por Michoacán, su obra social y polí-
tica más destacada se encuentra en la Constitución de
1917. Las diferencias con el presidente Álvaro Obregón,
lo hicieron renunciar a la gubernatura de Michoacán. En
el gabinete de Lázaro Cárdenas fue secretario de Econo-
mía y de Obras Públicas. La influencia de Múgica fue
decisiva para que el gobierno de Cárdenas llevara a cabo
la expropiación petrolera.
FRANCISCO JOSE MUGICA
Hechos,
no palabras
TOMO 1
.... Prensa····
.. Parlamento· .
MEXICO
MCMXIX
Papa mi esposa !I mis hiios. On hepencia.
5
PROLOGO
** *
En nuestra América, quién sabe por qué de-
fectos morbosos de nuestra idiosincrasia, siem~
PROLOGO 7
** *
"HECHOS, NO PALABRAS," es el fruto
de un esfuerzo bien encaminado, de una volun-
tad bien firme, de una inteligencia que, compren-
diendo las grandes necesidades morales y polí-
ticas de su Patria, estima como un delito
permanecer ociosa.
Comprende tres partes bien definidas: Pren-
sa, Parlamento y Administración.
En la primera, alza el general Múgica su verbo
de combate. La incuria, la indiferencia ciudada-
na, en cuanto se relaciona con la política naci&-
nal, reciben golpes certeros. de su ariete. Es
preciso-dice el autor de "HECHOS, NO PA-
LABRAS"-que los hombres todos de la Repú-
blica tomen par;ticipación en las l'Nchas políticas
que se desaten, porque este es el único medio
de que no se vean despojados de sus derechos por
los mercaderes de la cosa pública, que, infortuna-
damente, existen a millones en estas patrias' nues-
PROLOGO
** *
Como se ve, grandes e ingentes problemas so-
ciales y políticos ayudó a resolver el autor de
este volumen. Y para ello, además de su inago-
table bUétla voluntad, de su entusiasmo revolu-
cionario y de su idealismo juvenil, estaba auxi-
liado por conocimientos pertinentes que sobre
estas cuestiones había extraído de los libros y de
la vida.
Celoso por dejar asegurados el bienestar y la
igualdad de los hombres todos del pueblo mexi-
cano, hizo lo más que le fue posible en su favor.
Socialista de 1'ectiJs principios, no a la manera
de los que practican el "bolshevikismo" brutal e
invasor, ni del que ejercen los vividores, los ex-
plotadores de Evangelio tan generoso y humano,
uno de los mejores, cuando se le comprende bien,
con que cuentan las razas que pueblan el pla-
neta; no pudo echar en olvido las miserias y las
desgracias de las clases desheredadas. Porque
él sabe que no es posible mantener la integridad
moral de una nación, cuando los diferentes ele-
mentos sociales que la componen no están re-
gitlos por idénticos y justicieros principios. Los
derechos naturales del Hombre, desde que la
Revolución Francesa alcanzó su triunfo, después
de esfuerzos inauditos hechos por los enciclope-
distas y los hombre-brazos de la inmortal con-
tienda, no pueden ser relegados al desprecio, en
PROLOGO 15
*
* *
Pero el discurso que, quizás por mis arraiga-
das doctrinas latinoamericanistas, ha llamado
más poderosamente mi atención, de los conteni-
dos en esta obra, es el que trata ae la unión de
las naciones iberas de nuestro Continente " ideal
supremo de todos nuestros pensadores, políticos,
estadistas, escritores y ~oetas contemporáneos.
-
PROLOGO 17
** *
El bosquejo-no es estudio-que he hecho, has-
ta ahora, de la brillante labor parlamentaria del
general Múgica en el Constituyente de Querétaro,
llevará al ánimo de todo hombre comprensivo el
convencimiento de que este tipo de diputado es
muy diferente del que estamos acostumbrados a
ver en nuestros Parlamemos.
Por regla general, la psicología de nuestros
diputados, los de todos los países latinoamerica-
nos, es lastimosamente desconsoladora. Obtusos
por naturaleza, o por incultura, los diputados
hispanoamericanos reducen toda su labor legis-
lativa a asistir, más o menos irregularmente, a
las sesiones; a leer periódicos insulsos, o su co-
rrespondencia particular en aquellos contados
momentos en que debían tener fija su atención en
los asuntos que son materia de ESTUDIO de la
Asamblea, cuando no a contarse chistes, o a po-
litiquear.
Alcides Arguedas, el viril escritor boliviano,
con esa sagacidad psicológica que le caracteriza.
ha hecho del diputado de SlJ patria, que no es
peor que el de nuestros otros pueblos, un retrato
intelectual y moral que merece, por venir como
de perlas, ser transcrito en estas páginas. Escribe
Arguedas: ({El diputado boliviano surge de cen-
tros absolutamente nulos para la acción, y no es
el diestro conocedor de las necesidades del país;
tampoco el estudioso erudito eu la ciencia polí-
22 PROLOGO
.. .
La tercera parte de "HECHOS, NO PALA-
BRAS," contiene el detalle, rápido, pero expre-
sivo, de la labor administrativa realizada por el
general Múgica, durante un año que fu-e Gober-
nador y Comandante M'ilitar del Estado de Ta-
basco.
Radical en sus procedimientos y progresista
en sus aspiraciones, el autor de este libro hizo, en
una época dificilísima, todavía de guerra civil,
lo que pocos gobernantes habrían alcG11zado. Es-
tableció, bajo bases sólidas, el Gobierno revolu-
cionario del Estado; pacificó éste; atendió la ins-
trucción pública; fomentó la apertura de vías
de comunicación, como el camino estratégico que
construyó entre Tenocique y Yucatán; repartió
24 PROLOGO
*
**
PUEBLO REY
Señores:
El pueblo mexicano era una manSlOn de ilo-
tas. Su fértil suelo, un cepo de tormentos. Las
entrañas de sus ricas minas, tumbas lóbregas e
ignoradas para el indio y el criollo; y su comer-
cio, un mercado judaico monopolizado por los
blondos lacayos de un monarca europeo.
Sí, señores: esta grande y soberbia raza de
que somos retoños, estaba sojuzgada. Hubo un
día en que hombres atrevidos llegaron a nuestras
costas, y, quemando sus naves, marcharon en
son bélico al interior del país desconocido que
les brindara tesoros inmensos, campos vírgenes,
tierras de promisión. Y lucharon. Hábiles gue-
n-eros, desconcertaban a las falanges indias con
68 FRANCISCO J. MUGICA
Dije.
REFLEXIONES, NO CONSEJOS
Jefes de Oficina
Ciudadanos Diputados:
Se ha defendido tan brillantemente en el libro,
en el periódico y en la tribuna, el principio de la
120 FRANCISCO J. MUGICA
Señores Diputados:
N o vengo aquí animado por los temores de un
militarismo que no existe y que espero de la dig-
nidad del pueblo mexicano, no volverá a tolerar
jamas en ninguna época de nuestra vida futura.
156 FRANCISCO J. MUGICA
Ciudadanos Diputados:
La Comisión tiene el honor de informar a
esta honorable Asamblea, por mi conducto, so-
bre los motivos que tuvo para hacer algu-
nas modificaciones que no entrañan una mo-
dificación substancial, como cree el señor Pa-
lavicini, sino que simple y sencillamente en-
trañan una rectificación en la redacción del ar-
tículo que se discute, y que seguramente por un
gran descuido, por el poco cuidado que tuvieron
los que presentaron el artículo al Primer Jefe,
resultó en contradicción completa con la expo-
sición de motivos que. del informe del Primer
J efe se aducen, precisamente en favor del ar-
tículo del proyecto.
Voy a ocuparme de esta primera parte, para
después hacer alusión a las objeciones presenta-
das por el Sr. Rivera Cabrera.
El art. 21 del proyecto del Primer Jefe dice
así: "Art. 21.-La imposición de las penas es
propia y exclusiva de la autoridad judicial. Sólo
incumbe a la autoridad administrativa el castigo
de las infracciones de los reglamentos de policía
y la persecución de los delitos por medio del Mi-
nisterio Público y de la policía judicial que estará
a la disposición de éste."
Como lo puede ver su señoría, de la redacción
misma del artículo se desprende que para perse-
guir un delito por la autoridad judicial, se puede
hacer por conducto de la autoridad administra-
tiva, y que en este caso la autoridad adminis-
PARLAMENTO 195
Señores Diputados:
Parece que la generalidad del princlplO que
entraña el artículo a debate, no tiene impugna-
ción; simple y sencillamente se ha versado so-
bre la cuestión del Banco, que se pretende esta-
blecer, así como sobre algunas dudas que han
tenido los obreros, con respecto a los derechos
de ellos mismos. En cuanto al problelllé:. sobre
la cuestión de las asociaciones de productores,
que el Sr. Palavicini ha llamado monopolios. voy
a tener el honor de manifestar a la Asamblea
los principios que la Comisión tuvo en cuenta
para dictaminar en la forma en que 10 hizo.
La cuestión del Banco, cuyo tecnicismo se aca-
ba ya de debatir ampliamente y que, además,
consta en la iniciativa presentada por el mismo
Sr. Nieto, Subsecretario de Hacienda, no será
motivo de mi palabra; me voy a ocupar simple
y sencillamente en hacer penetrar al ánimo de
la Asamblea, el resultado favorable que la ins-
titución de este Banco Unico de Emisión tendrá
para el porvenir de la nación mexicana.
Pero antes de entrar en esta materia, haré
una aclaración que contestará la interrogación
que hace el Diputado Espinosa y contestó el se-
ñor Diputado Recio. Se asentó aquí la aserción
de que se trataba de un Banco de Estado fu n-
PARLAMENTO 233
íl
"
PARLAM.ENTO 249
Señores:
Yo creo que con protestas no se combaten
las razones de justicia. El señor Diputado de
264: FRANCISCO J. MUGICA
Señores Diputados:
Es indudable que ya. habrá cansancio en vues-
tras personas, aunque estoy seguro que no lo
habrá en vuestros espíritus. El asunto que se
trajo a debate esta noche es interesante, es un
hondo problema social y de tal trascendencia,
que de permanecer irresoluto, quedaría la Patria
sumida en los más hondos desconsuelos, y la Re-
volución, señores, en el más completo despres-
tigio. Es, pues, preciso que la resolución sea
intensa, radical, completa, según hemos resuelto
los demás problemas que el pueblo entusiasta
levantó como un haz de luz, escribiéndolos en
la bandera de la Revolución y los paseó de uno
a otro extremo del territorio, y los impuso en
todas las conciencias, aun en las más retardata-
tarias. Por eso, señores, no os ofrezco ser breve
en mi exposición, creo que debo hablar mucho;
entre mis razones habrá indudablemente algunas
que no sean las más precisas y propias para lle-
var a vuestros 'cerebros una convicción que ya no
es dudosa; pero hablaré todo lo que pueda y
leeré documentos importantes que, aunque no
PARLAMENTO 273
Zamora, Mich.
¡
J
PARLAMENTO 289
"Septiembre 24 de 1912.
M. Sandoval.-Rubricado."
•••
Ciudadanos Diputados:
Este acto y las palabras del Diputado U garte
han producido en mí una emoción profunda. Yo
hubiera querido ser, en mis labores parlamen-
tarias, absolutamente extraño a los sentimientos
del corazón. Mas esto es imposible desde el mo-
mento que se ha traído al seno de esta Asamblea
una pluma que es ya histórica y se ha puesto en
mis manos como el representante, afortunado, de
aquella otra Asamblea memorable llena de re-
cuerdos y de épicas glorias que ha pasado a la
historia condensada en Libertad. (Aplausos.) En
este instante, señores Diputados, están en mi
memoria frescos, latentes, los recuerdos de aqt'e-
lla fecha imperecedera, 26 de marzo, en que de-
rrotados después de una jornada sangrienta, per-
seguidos por los soldados de la usurpación que
frente a la ciudad de Saltillo y dentro de los mu-
ros mismos de la ciudad durante dos días de
rudo combatir, se habían ensañado en nuestras
310 FRANCISCO J. MUGICA
Prólogo .......... . 5
Preasa
Luchar es vivir ....... ......... ... .... .............. ... ..... ...... 31
El desprecio a la Ley.... .... .. ........ ........... ... ........ 35
Consumatum est.......... ...... ........ ............ ......... 39
Verdades, puras verdades ....................... ............ 43
Los lugares públicos y su consagración................. 47
Pueblo Rey......... ................ ............................ 51
Clamores de una raza ......................................... 53
El Lic. Francisco León de la Barra..... ........ ........ 57
Discurso..................... ......... ........ ..................... 67
Reflexiones, no consejos........ .................. ...... ...... 79
Parlamento
El Constituyente principia sus labores................. 83
El derecho de libertad......................................... 91
La instrucción pública.......... ........................ ...... 97
La libertad de imprenta....................... , ............. 119
El derecho de asociación............................... ...... 135
El antimilitarismo................ ............................. 149
La ley del trabajo.......................... ................... 165
Integración del Poder Legislativo......... ......... ..... 185
Discusión del arto 21........................... .... . . . . . . . . . . . . 193
La unión indolatina................. ........................... 211
Contináa la discusión sobre los requisit08 para ser
diputado. .................. ..................... ....... ......... 225
El Banco único...... ...... ..................... .... ........... 231
El antia1coholismo...... ..... ............ ...... ............... 245
Los límites de Michoacán....................... .... ...... .. 259
Las huelgas.............. ......................................... 265
La cuestión religiosa.......................................... 271
La Ley Agraria... ............................................... 293
Una Pluma Histórica.......................................... 305
Este libro se terminó de imprimir
el 5 de noviembre de 1985
en los talleres de
Programas Educativos, S.A.,
Chabacano 65-A, 06850 México, D.F.
La edición consta de
3 000 ejemplares.