4A de Aceptación

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 13

Autoestima y Personas LGBTIQ+

DESCUBRE CUÁLES SON LAS 4-A DE


LA AUTOACEPTACIÓN

Psicólogo Especialista en
Diversidad Sexual
Una de las consultas más recurrentes que recibo en terapia con mis pacientes
que se identifican como LGBTIQ+, es que les gustaría tener mayor autoestima, ser
más felices y amarse más.

Esto es muy válido, pero muchas veces viene desde un argumento construido
por la sociedad que nos exige amarnos, aceptarnos y querernos al 100%.

Y qué difícil amarnos al 100%, si desde el momento en que nacemos llega-


mos a un mundo machista y heteronormado, que nos intenta encasillar en una sola
forma de vivir, dejando fuera todo aquello que somos y a quienes amamos. La sociedad
nos exige amar a nuestro género opuesto, nos exige vestirnos y actuar de cierta manera,
y nos exige conformarnos con el género que se nos asignó al nacer.

Luchar contra la corriente es difícil, sobre todo si esa corriente nos intenta ahogar
y herir constantemente.

Amarnos es el objetivo que todos deberíamos perseguir, estamos claros. Pero


muchxs de esxs pacientes que me consultan, vienen con una autoestima tan baja que
no les permite acercarse a ese objetivo. Lo ven tan lejano, tan poco lograble y tan poco
trabajable, que se terminan frustrando.

Frente a esto, caen en el clásico diálogo de “Quiero quererme más, ¡pero me


cuesta mucho! ¿¡Cómo me va a costar tanto!?” lo que lxs lleva, paradójicamente, a quer-
erse menos.

Se quieren menos porque se auto-exigen quererse más! Y esto es tan


habitual que, incluso, muchxs terapeutas también caen en esa exigencia.
Lxs pacientes llegan con ese motivo de consulta, y muchxs terapeutas se
comprometen a brindarles autoestima sin un plan ni objetivos concretos!

2.
Creen que por explorar su pasado basta, y mi experiencia me ha dicho que, si bien
es muy importante, no es lo único para poder lograr que lxs pacientes aumenten su
autoestima.

Además, otro elemento relevante es que muchas personas LGBTIQ+ se sienten


desamparadas al buscar ayuda psicológica, porque es muy habitual que lxs psicólogxs
a los que van caigan en actitudes discriminatorias y sesgadas, a pesar de sus buenas in-
tenciones. ¿Y cómo no? Es muy probable que, si eres una persona LGBTIQ+ que escapa
de la norma, te genere a veces un poco de ansiedad acceder a diversos servicios por
temor a ser discriminadx. “¿Qué me dirá el dentista cuando me vea con mis uñas
pintadas?”, “¿el doctor respetará mi nombre social?”, “¿la señora del supermercado
me mirará de abajo hacia arriba?”.

No, no es que seas “paranóicx”. No es que seas “exigente” con tus psicólogxs
o con los diversos servicios a los que accedes. Es un estado de alerta normal
que las personas LGBTIQ+ vivimos día a día. Vivimos en una sociedad que aún
no nos acepta al 100%, por lo que estar atentxs a nuestro alrededor es una
conducta inmensamente esperable.

Sin embargo, como crecimos en esa misma sociedad que el resto de las personas,
esto puede llevar a que hayamos incorporado alguno de esos sesgos en nosotrxs
mismxs.

Es por esto que en este ebook quiero que descubras cuáles son las 4-A del proceso
de autoaceptación de tu orientación sexual o identidad de género, para que así em-
pecemos juntxs a trabajar en ti. Te recomiendo que, a pesar del resultado que obtuviste
en el test, leas todas las fases para que puedas entender mejor de lo que se está
hablando :)

¡Adéntrate a este camino de superación conmigo, y trabajemos juntxs en tu tamor propio! . . .

3.
Quien Soy...
Por si no me conoces, mi nombre es Juan Cristóbal Concha, me dicen
Juancri, y soy psicólogo especialista en Diversidad Sexual. Me
considero alguien alegre, cercano y desordenado, y me
apasiona ayudar a otrxs sin esperar nada a cambio.

La razón por la cual me


dedico a ayudar a personas
LGBTIQ+, es porque en
algún momento estuve
perdido y sin saber quién ni
qué era. Como puedes ver, soy
joven (y además me veo harto
más joven que los años que en
realidad tengo), y hace unos 10 años
me di cuenta que, siendo hombre,
no me gustaban las cosas que la
sociedad espera que le gusten a los
hombres: el fútbol, las juntas entre
hombres, los autos, la mecánica,
las mujeres.

Sí, hace unos 10 años me


di cuenta que soy gay y literal-
mente me quería morir. Crecí
toda mi vida fantaseando con
una vida tradicional, que luego
el choque con mi realidad fue
tremendo. Me invadió un terror tan
tan grande, que inmediatamente
me puse a buscar información,
¡pero me di cuenta que no había
información de nada!

4.
Cómo conocer otros gays, cómo tener relaciones sexuales, cómo contarle esto a mi
entorno, etc. Recuerdo esa época con tanta confusión y desamparo que se me llega a ap-
retar la garganta. Me rodeé de amigos y familiares que me apoyaban, mientras que los que
no lo entendían terminaron fuera de mi vida, empecé a conocer gente, empecé a tener mis
primeras parejas, pero todavía me sentía solo y perdido.

Además, mis expectativas me decían que si salía del clóset iba a ser todo mucho me-
jor. Y claro, evidentemente que hubo un cambio positivo en mí, pero al saber que ahora es-
taba mostrando una “nueva” identidad, empecé a sentirme muy ansioso: no podía dormir,
comía como loco, mi cabeza no paraba de pensar a 100 por hora y estaba muy pendiente de
las reacciones y opiniones de los demás.
Hasta que dije BASTA. Y pedí ayuda. Busqué muchxs terapeutas,
que si bien tenían muy buenas intenciones, llegaban a
discriminarme sin saber que me estaban discriminando:
me preguntaban mucho sobre mi sexuali-
dad, intentaban darle una “explicación” a mi
homosexualidad, etc.

Sin embargo, al 4to intento llegué a mi terapeuta


querida, joven al igual que yo, que me pudo comprender.
No valoré sus años de experiencia, sino que valoré
que me entendiera. Gracias a esa ayuda que me brindó,
es que hoy puedo decirte a ti y a todo el mundo lo feliz y
orgulloso que me siento de ser yo mismo.

Y si yo pude, tú también puedes. Estoy seguro de eso. Y yo estaré ahí para guiar tu
camino y acompañarte en este proceso que ahora puede verse muy difícil y confuso, pero
que estoy seguro traerá muchos frutos.

No te voy a mentir: hacer esta confesión sí me genera un poco de miedo. Que qué
puedan pensar de mí, “cómo se expone así”, y tantos otros pensamientos que me invaden.
Pero lo hago por ti, para que sepas que se puede salir adelante, y me veas a mí como un igual
y como alguien que pasó por exactamente lo mismo que tú.

Comunidad ayuda a Comunidad, y por eso hoy ayudo a lxs míos

5.
Las 4-A Para el Proceso de
Autoaceptacion
En este apartado te comentaré cómo es que nosotrxs podemos empezar el pro-
ceso de amarnos, y así comenzar a solidificar nuestra autoestima.

A mí me gusta ver este proceso con 4 conceptos fundamentales que componen


lo que yo he llamado “Las 4-A para el proceso de autoaceptación”:

ARRANCARSE

ASUMIRSE

ACEPTARSE

AMARSE

6.
1A: ARRANCARSE
El arrancarse hace referencia a rehuir de eso que somos pero que no queremos ver. Si
es que hoy eres una persona que ya se identifica como LGBTIQ+, es muy probable que hubo
un tiempo de tu vida en el que negabas esta identidad: “no quiero ser esto”, “debo enterrarlo”,
“nadie se debe enterar”, “me lo llevaré a la tumba”, etc.

Esto es un proceso que las personas hacemos en general de manera inconsciente a


través del mecanismo de defensa llamado negación. Este mecanismo nos ayuda a decirnos
que podemos negar la realidad y controlarla a nuestro favor. Nos dice: “podemos enterrar esta
identidad y en algún momento se va a tener que ir”, como si nosotrxs lo pudiéramos contro-
lar. Hay algo de nosotrxs que intuye esa identidad sexual diversa, pero aún no lo queremos
reconocer y por ende la enterramos.

El arrancarse de aquello que somos es algo completa y absolutamente normal, porque


crecimos en un sistema que valora mucho más lo cis-heterosexual que lo LGBTIQ+. No ob-
stante, el arrancarnos de aquello que somos también nos aleja del amor propio, porque el
amor propio es aceptar todas y cada una de las partes de lo que somos (incluso las que no nos
gustan).

En este sentido, una persona que está en esta primera fase lucha constantemente consi-
go mismo. Se rechaza permanentemente, y busca formas para no poner la mente en sí mismx
sino en el afuera. Muchas personas en esta fase tienden a abusar del alcohol o de las drogas,
rigidizan sus conductas y expresión de género (para que “no se les note” que son LGBTIQ+), es-
tereotipan conductas de sí mismxs para “pasar como hetero-cis”, y en casos más graves, inclu-
so puede llevar al suicidio. De hecho, si estás en esta fase, es bien probable que hasta te moleste
que en este Ebook se esté usando el lenguaje inclusivo.

Es bien probable que si no estás en esta fase, en algún punto de tu vida lo estuviste. Son
pocas las personas que hoy se definen como LGBTIQ+ que al principio aceptaron su identidad
sin resquemores, porque genera miedo, culpa, vergüenza y un sinfín de otras emociones muy
incómodas. Pero, por esto mismo, si te encuentras en esta etapa, toma de referencia a las
millones de personas que alguna vez estuvieron como tú y que hoy se sienten orgullosas
de sí mismas. Es un camino lento y muy sufrido, pero te prometo que todo mejora.

7.
2A: ASUMIRSE
Ya de tanto arrancarnos, llegará un punto en el que no podremos escapar más y tendre-
mos que asumir lo que somos. Asumirse significa saber que somos una persona LGBTIQ+, pero
no necesariamente aceptarlo.

Es saber que somos eso que somos, es reconocer esa identidad, incluso en esta fase
podríamos estar saliendo del clóset con algunxs cercanxs, pero en esta fase aún no estamos
cómodxs con esta identidad.

Por ende, muchas personas podrían quedarse meses e incluso años en esta fase. Mu-
chas personas LGBTIQ+ podrían pasarse la vida entera asumidxs, pero no aceptadxs, porque el
aceptarse requiere de un proceso de apropiación de esa identidad.

Esta es la fase en la que varixs pacientes llegan a mi consulta. Llegan confundidxs, sin en-
tender muy bien por qué les pasa lo que le pasa. El diálogo con el que llegan es algo como esto:

“No sé por qué siento tanta incomodidad con ser LGBTIQ+. Ya salí del clóset hace
tiempo pero aún me cuesta mucho mostrar quién soy. Temo tomar de la mano a mi
pareja incluso con mi grupo de amigxs, ¡y todxs ellxs saben que somos pareja! Quiero
poder sentir que puedo decir orgullosamente que soy LGBTIQ+ cuando alguien me
pregunte, quiero poder disfrutar estando con mi pareja y no atentx a lo que pueden
estar pensando los demás. De verdad que quiero, pero no puedo. No sé por qué”.

Y claro, la confusión viene porque muchxs de nosotrxs pensamos que cuando sal-
iéramos del clóset todos nuestros rollos con nuestra orientación sexual o identidad de
género iban a desaparecer. ¡Y no! A veces incluso se agravan, porque ahora es asumir una
nueva identidad y mostrarla al mundo, y para algunxs eso no es nada de fácil. Por ende aquí el
trabajo es atreverse. Solo en la práctica está el cambio: seguir hablando de ti con otrxs, seguir
visibilizando quién eres, intentar demostrar tu amor en público, etc. “Pero Juancri, ¡me da mie-
do!” Claro que da miedo, y no puedes esperar a que se te quite el miedo para hacerlo, porque
eso no pasará. Tienes que hacerlo CON miedo. Deja que el miedo te movilice, no que te paral-
ice. Es la única forma.

8.
3A: ACEPTARSE
Aceptarse es el paso previo a amarse.

Para poder llegar a esta fase, el trabajo que debemos hacer es aceptarnos como la
realidad que somos.

Cuando nos aceptamos como la realidad que somos, con lo que nos gusta y lo que no
nos gusta de nosotrxs mismxs, más iremos entendiendo que podemos no gustarnos complet-
amente, por lo que paradójicamente nos iremos amando más.

Es paradójico porque voy aceptando eso que no me gusta, pero mientras más lo vaya
aceptando, más me voy queriendo, por ende más cambios positivos querré hacer para mi
vida. Porque las personas que se quieren, se cuidan, y como se cuidan, cambian eso que les
hace mal o que no les gusta :)

Por ejemplo:
Con unx paciente muy querido trabajamos lo que él siente respecto a su cuerpo. “Es-
toy muy gordo, me cargan mis rollos, me encantaría poder amarlos pero simplemente no los
puedo amar”, me decía. Pero, trabajando con él en aceptar que ese es el cuerpo que tiene, fue
como pudimos darle una vuelta a sus expectativas. Yo le dije “es que es bien probable que nun-
ca te vayan a gustar esos rollos, vivimos en un mundo gordófobico y te hicieron mucho bullying
por eso, pero yo no quiero que te limites por ellos. Yo quiero que puedas ir a la playa, sacarte
la polera y bañarte a pesar de los rollos”. Continué diciéndole:
“Cuando lo hagas, te vas a decir a ti mismo: “Ok, no me
gustan mis rollos, me siento incómodo sin polera, pero
por lo menos me la pude sacar”.

Eso ya es un tremendo logro. Eso es empezar


a aceptar que hay un cuerpo que aceptar
para poder quererlo. Y como lo acepto, lo quie-
ro, y como lo quiero trabajo en él.

Con la identidad sexual es lo mismo. Es em-


pezar a aceptar que somos LGBTIQ+ aunque
hayan cosas que sí nos gusten y otras que no nos
gusten de serlo. Y en la medida que más vayamos
aceptando esa realidad, más nos vamos tolerando,
luego respetándonos, luego queriéndonos, para finalmente,
llegar a amarnos....

9.
4A: AMARSE

En esta fase ya comenzamos a sentir orgullo de lo que somos. Ya nos gusta ser como
somos, porque nos empezamos a aceptar tal cual somos. En esta fase nos empezamos a
hablar con cariño, nos empezamos a respetar, no nos limitamos, empezamos a integrar nues-
tros aspectos positivos y negativos... y por eso nos queremos, porque nos empezamos a
reconocer como humanxs y por lo tanto ya no nos exigimos tanto.

No nos exigimos ser de determinada manera, sino que nos entregamos a lo que somos.

El aceptarse y el amarse son una bola de nieve que va creciendo cada vez más según
cuánto vamos trabajando en nosotrxs. Si yo me acepto como la realidad que soy, más autoes-
tima voy generando (más “amor propio”), y si empiezo a aumentar mi autoestima, a la vez voy
obteniendo más herramientas para aceptar más partes que no me gustan de mí.

Entonces: si me acepto como la realidad que soy, me empiezo a amar, y como me emp-
iezo a amar, más me voy aceptando, y como me voy aceptando, más me voy amando, y así...

El aceptarse nos lleva a amarnos porque nos lleva a valorar todas las dimensiones de mí,
incluso las que no me gustan. Voy a poner mi
propio ejemplo: yo amo ser homosexual, pero
no me gusta serlo cuando voy caminando
por la calle con miedo de estar de la mano
con mi novio. Ahí no me gusta ser homo-
sexual, pero lo acepto, no me culpo por
ello (porque sé que no es mi culpa). Y
cómo lo acepto, me respeto y me
quiero más, y mientras más me
atreva a decirme a mí mis-
mo que está bien darle la
mano a mi novio en la
calle, más me amaré
porque más me
atreveré.

10.
El amarnos significa amarnos con eso que sí nos gusta y con eso que no nos gusta de
nosotrxs. De hecho, ¡el amor es así! Te pongo nuevamente mi ejemplo:

- Yo amaba mi universidad, pero me desagradaban algunxs profesores.


- Yo amo a mi perro, pero no me gusta cuando no deja de ladrar si es que llega algún
invitadx a mi casa.
- Yo amo a mi mamá, pero no soporto que sea tan llevada a sus ideas.

Con nosotrxs es exactamente lo mismo. No debemos pensar que nos tiene que gustar
todo de nosotrxs porque el amor no funciona así.

Y si el amor hacia otrxs no funciona así, el amor propio tampoco.

Así lo relata un paciente que ya di de alta hace tiempo pero que recuerdo con mucho
cariño:

“Hoy no me cuesta contar mis fracasos, mis inseguridades, y eso


me permite ser quién soy, no aparentar nada. Y cómo soy, no solo al-
canza, ¡sobra! Es suficiente”.

Ignacio, 22 años

11.
Esto es solo el comienzo!
Estoy orgullosísimo de ti. Has llegado hasta este punto y no puedo dejar de agradecer
toda la confianza que has depositado en mí. Es importante que entiendas que el amor propio
es un proceso, y toma tiempo, bastante tiempo.

Por ende, no te confíes y no te detengas ahora! Empezar a entender cómo funciona


la autoestima y ver en qué fase estás de las 4-A de la autoaceptación es solo el primer paso!
Puedes empezar a trabajar en atreverte a mostrar eso que deseas mostrar, empezar a conec-
tar con tu vulnerabilidad, empezar a sanar a tu niñx interior, empezar a aceptar, reconocer y
entender tus emociones, consolidar tu identidad, y tantos otros elementos que van a ir poco
a poco ayudando a solidificar tu autoestima.

Te invito a que sigas navegando por mi página web: www.juancristobalconcha.com. En


ella estoy subiendo permanentemente nuevos cursos y talleres que sé que van a ayudarte.
Además, si quisieras algo más personalizado, en ella también puedes solicitar una consejería
(sesiones únicas), asesorías o psicoterapia conmigo (cupos limitados).

Para mí lo más importante es que hayas recibido valor. Dediqué varias horas de mi tiem-
po para crear este contenido, y ahora quiero que lo pongas en práctica. Si te has llevado algu-
na información que te haya servido, te agradecería que me envíes
un mensaje privado en Instagram a @juancristobalconcha o
que me etiquetes en tus historias y me cuentes qué te
ha parecido este contenido!

Y por supuesto, te invito a que me sigas en mis


redes sociales si es que no lo has hecho aún para que
sigamos en contacto :). Recuerda que parte de ser una
persona LGBTIQ+ es que estamos en una Comunidad,
por lo que quiero que sigamos construyendo una
comunidad amorosa entre todxs.

Te mando un tremendo abrazo!

12.
@juancristobalconcha linkedin.com/in/juancristobalconcha/ @juancristobalconcha

También podría gustarte