Reevaluando Un Documento Del Comercio Lu
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Reevaluando Un Documento Del Comercio Lu
Amphorae ex Hispania:
paisajes de producción
y consumo
Ramon Járrega y Piero Berni (editores)
Monografías Ex Officina Hispana iii
Amphorae ex Hispania:
paisajes de producción
y consumo
Ramon Járrega y Piero Berni (editores)
Esta obra reúne las ponencias y comunicaciones presentadas en el III Congreso de la SECAH, celebrado en Tarra-
gona entre el 10 y el 13 de diciembre de 2014.
Edición ICAC – SECAH, con la aportación económica del Ministerio de Economía y Competitividad (proyecto
I+D “Amphorae ex Hispania: paisajes de producción y consumo” HAR2001-28244; http://amphorae.icac.cat) y la
colaboración de Universitat Rovira i Virgili y del Museu Nacional Arqueològic de Tarragona. Esta publicación también
ha sido posible gracias al apoyo económico de la UNED.
Durante los nueve primeros meses de publicación, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pú-
blica o transformación de esta obra sólo se puede hacer con la autorización de sus titulares, con las excepciones previstas
por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita reproducir
fragmentos de esta obra.
A partir del décimo mes de publicación, este libro está sujeto –si no se indica lo contrario en el texto, en las fotogra-
fías o en otros ilustraciones– a una licencia Reconocimiento-No comercial-Sin obra derivada 3.0 de Creative Commons
(el texto completo se puede consultar en http://creativecommons.org/licences/by-nc-nd/3.0/es/deed). Se autoriza así al
público en general a reproducir, distribuir y comunicar la obra siempre y cuando se reconozca la autoría y las entidades
que la publican y no se haga un uso comercial, ni lucrativo, ni ninguna obra derivada.
ISBN: 978-84-942034-6-6
Índice
Prólogo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
Carlos Fabião
HISPANIA
Correctores estadísticos para la cuantificación anfórica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
Jaime Molina Vidal, Daniel Mateo Corredor
Aspectos transversales de lógica económica, productiva y comercial aplicada al
envasado, la expedición, el transporte y la distribución de ánforas vinarias del nordeste
peninsular (siglos i a. C. - i d. C.). Algunas reflexiones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 34
Antoni Martín i Oliveras
La Tarraconense 1, un ánfora ovoide de época triunviral . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55
Ramón Járrega Domínguez
Las ánforas de los niveles augusteos de las termas de la ciudad romana de Empúries. . . . . 66
Joaquim Tremoleda, Pere Castanyer, Marta Santos
Las ánforas de base plana producidas en el taller de Ermedàs (Cornellà del Terri, Pla
de l’Estany). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 83
Joaquim Tremoleda, Pere Castanyer, Josefina Simon
Una posible figlina amphoralis en Can Jordà (Santa Susanna, El Maresme, Catalunya). . . . 101
Ramon Coll Monteagudo
Primeros resultados del estudio del taller anfórico de la Gran Via - Can Ferrerons
(Premià de Mar, Barcelona). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 120
Ramon Coll Monteagudo, Marta Prevosti Monclús, Jordi Bagà Pascual
Las ánforas vinarias de la Layetania. Dinámicas de producción y difusión comercial
en el siglo i a. C. y i d. C. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 139
Verònica Martínez Ferreras
El paisaje social de la producción vitivinícola layetana: la génesis de un modelo de
éxito . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 154
Oriol Olesti Vila
Las ánforas de Tarraco de los siglos ii y i a. C. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 163
Moisés Díaz García
Marcas sobre ánforas republicanas en la ciudad de Tarraco. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 184
Moisés Díaz García
Las ánforas tipo Dressel 2 y Dressel 2-4 evolucionadas del alfar del Vila-sec (Alcover,
Tarragona). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 199
Josep Francesc Roig Pérez
Las importaciones anfóricas de la ciudad de Dertosa en época tardoantigua
(siglos iv-vi d. C.). Una mirada al registro funerario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 213
Sergi Navarro Just
Las ánforas de la calle Reconquista (Zaragoza) frente a las inundaciones de la Huerva. . . . . 225
César Carreras Monfort, Francisco A. Escudero, M.ª Pilar Galve
Una panorámica del consumo y producción de ánforas en Caesar Augusta hacia
el 50-60 d. C. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 241
Antonio Hernández Pardos
La presencia de producción anfórica en un hábitat periurbano en Tricio . . . . . . . . . . . . . . . . 255
Pilar Sáenz Preciado, Begoña Serrano Arnáez
Ánforas romanas de la Meseta sur a partir del estudio de Consabura y su territorio . . . . . . 162
Juan Francisco Palencia García, Diego Rodríguez López-Cano
La Tardoantigüedad en Toledo reflejada en las ánforas recuperadas en la calle
Cuesta de los Portugueses. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 274
Rafael Caballero García, Elena I. Sánchez Peláez
Nuevos datos sobre la producción de ánforas Dressel 23 en el valle del Genil . . . . . . . . . . . 334
Oriane Bourgeon
GALLIA
Les recherches sur les amphores en Gaule depuis le xixe s.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 479
Fanette Laubenheimer
Les amphores de l’épave du Titan: typologie, origine et contenu des Dressel 12A
et des conteneurs du type «Titan» . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 491
Kevin Quillon, Claudio Capelli
ITALIA ET SARDINIA
Olive oil production in Istria in the Roman period . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 498
Tamás Bezeczky
Anfore di morfologia betica con iscrizioni dipinte dalla regio VIII Aemilia . . . . . . . . . . . . . . . 557
Manuela Mongardi
AFRICA ET MAURITANIA
PROTOHISTORIA
Tras diversas intervenciones submarinas y trabajos años 1985-1986 (Galván y Martínez, 1992, 173;
previos, se reanudaron en el año 2013 las investi- Martínez y León, 1993, 256-258) y 1991-1992 pro-
gaciones para avanzar en los estudios del conjunto baron arqueológicamente que el fondeadero Racó
arqueológico de Grum de Sal4. Se presentan en esta de Grum de Sal estuvo en funcionamiento como
contribución una reseña y discusión historiográfica tal al menos desde la Antigüedad hasta la alta Edad
del estado del conocimiento y los avances realizados Media (Martínez y León, 1993, 261-265). Ya en el
en el estudio sobre ese pecio de época romana, ha- primer informe sobre los trabajos arqueológicos rea-
llado en el fondeadero del mismo nombre situado lizados en el pecio de Grum de Sal, los excavadores
al sureste de la isla Conillera, un islote situado en la constataron la presencia de un material diverso, en-
entrada de la bahía de Sant Antoni en la costa oeste tre otros una ancla moderna –hoy en día extraída de
de Eivissa/Ibiza. Hasta el momento, parece tratarse forma no controlada–, y ánforas de diversos tipos
de un pecio con un cargamento homogéneo forma- (Vilar-Sancho y Mañá, 1964, 178-180, 188), que
do por ánforas tipo Dressel 14 de origen lusitano, hicieron pensar en un fondeadero/refugio para la
cuyo estudio puede aportar aspectos nuevos sobre el navegación. Este se halla en la costa sureste de la isla
comercio a larga distancia de productos lusitanos en Conillera; un islote que cierra al oeste la entrada a la
época romana. bahía de San Antonio (costa oeste de la isla de Ibiza,
Las labores de prospección realizadas bajo la di- Islas Baleares) protegiendo de los vientos del norte y
rección de Belén Martínez y Virginia Galván en los noroeste (fig. 1). Cabe mencionar en este contexto
el ancla de época bizantina documentada no lejos de
la ensenada y publicada recientemente por uno de
los autores (Hermanns, 2013).
1. Deutsches Archäologisches Institut, Abt. Madrid.
El pecio romano de Grum de Sal, también cono-
2. CIDEHUS - Universidad de Évora, FCT.
cido en la bibliografía arqueológica como Conillera
3. UNIARQ - Universidad de Lisboa, FCT.
4. Agradecemos al Instituto Arqueológico Alemán la fi- (Parker, 1992, 153, n.° 334), fue uno de los prime-
nanciación de este estudio preliminar, así como la dispo- ros pecios estudiados con metodología arqueológica
sición del personal procedente de diversos departamen- en aguas nacionales de España (Mederos y Escriba-
tos y eficazmente reunidos para realizar la intervención no, 2006, 369). El pecio fue identificado por Benito
de octubre del 2013. Asimismo, agradecemos tanto a la Vilar Sancho en 1960 y excavado por él mismo en
Conselleria d’Educació, Cultura i Patrimoni del Consell 1962 y 1963 en colaboración con el Museo Arqueo-
Insular d’Eivissa como a la Conselleria de Medi Ambient lógico de Ibiza y Formentera (J. M. Mañá de Án-
del Govern Balear el esfuerzo, no solo administrativo, gulo). En el momento de su hallazgo ya presentaba
para echar a andar de nuevo un proyecto embarrancado claras evidencias de haber sufrido intervenciones an-
desde hacía tanto tiempo. Finalmente, mi agradecimien-
teriores, ya fueran programadas (véase Falcon-Baker,
to al Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS)
1964; Vilar-Sancho y Mañá, 1964, 177) o –y sobre
de la Guardia Civil, división de Ibiza, por el apoyo logís-
tico y personal prestado. Otras instituciones involucradas todo– clandestinas.
en el proyecto a quienes van dirigidos los agradecimientos La investigación ha revelado que se trataba de un
son la Comandancia de Marina de Ibiza, el Museu Ar- mercante de época romana (segunda mitad del siglo
queològic d’Eivissa i Formentera y el ARQUA, Museo i/ primera del ii d. C.) de alrededor de 25 metros de
Nacional de Arqueología Subacuática en Cartagena. eslora y ha dado a conocer restos del casco, parte del
Figura 1. Ensenada de Racó de Grum de Sal (isla de Conillera) vista desde el este (foto: DAI Madrid, M. H. Hermanns).
Hasta el momento este yacimiento arqueológico por ejemplo, en los informes preliminares de 1964
es el único en las aguas de las Pitiusas que presen- ya se habla tanto de trozos de madera sueltos como
ta restos conservados del casco de la embarcación. también de un complejo ensamblaje conservado
Las intervenciones que siguieron a las iniciales en (Vilar-Sancho y Mañá, 1964, 182, 184, 186). En los
1962 y 1963 se centraron en la documentación y el informes siguientes, algunas piezas de la arquitectu-
estudio de los restos del casco del barco (Galván y ra naval, como la sobrequilla o el forro interno, ya
Martínez, 1992, 173; Martínez y León, 1993, 267- no se mencionan al no poderse verificar o documen-
272), trabajos que corrieron a cargo de Carlos León tarse: el contexto está expuesto a cambios, como se
Amores. refleja en el plano planimétrico (fig. 2), donde, sobre
El interés por volver sobre el lugar era alto y los el plano general de la intervención de 1992 (cf. el
objetivos diversos: realizar una intervención de com- detalle publicado con escala errónea en Martínez y
probación del estado de conservación del contexto León, 1993, 271, fig. 7.2), cedido amablemente por
tanto para valorar una intervención de estudio como Carlos León Amores, se percibe la dislocación de
para evaluar los pasos adecuados para una conser- ciertas piezas como también la falta de otras.
vación in situ, según lo recomienda la Convención Se trata de la zona del casco del barco, cuyo forro
para la Salvaguardia del Patrimonio Sumergido de la exterior está compuesto por una serie de tracas de
UNESCO (París, 2001); también interesaba el estu- unos 5 cm de espesor, unidas a tope por medio de
dio de los parámetros de crecimiento de la posidonia lengüetas y mortajas practicadas en el canto y ase-
oceánica, con el fin de recuperar la pradera y así ave- guradas por clavijas de madera, en parte afacetadas.
riguar la relación de esta con el contexto arqueoló- Como elementos transversales, se documentaron
gico. Enmarcado dentro de los renovados trabajos una serie de varengas y ligazones que determinan el
para el inventario de los yacimientos arqueológicos trazado de las cuadernas, con una sección aproxi-
y paleontológicos del litoral de Ibiza, se realizaron mada de unos 15 x 20 cm. El ensamblaje del forro
desde el año 2006 diversas inmersiones para un pri- con las cuadernas está hecho por medio de cabillas
mer seguimiento del estado de conservación. A raíz de madera afacetadas y clavos metálicos de bronce
de las observaciones se decidió retomar las investi- o hierro, estos últimos muy concrecionados (Mar-
gaciones en octubre de 2013 bajo la dirección de tínez y León, 1993, 270-271). Llaman la atención
uno de los signatarios (M. H. H.). Al mismo tiempo dos clavos grandes de una aleación de cobre y estaño
se inició un proyecto de identificación, recopilación (latón), de los cuales por el momento se desconoce
y futuro muestreo del material arqueológico, tanto la exacta contextualización arqueológica. Mientras
anfórico para el estudio del cargamento como ligna- que el uso de latón para la fabricación de vasija de
rio para el estudio de la construcción naval. Además mesa está bien documentado en época romana (véa-
de un objetivo en el campo de la biología marina, se Riederer, 2002), el uso de esta aleación para la
concretamente en el de la relación que hay entre la fabricación de piezas utilizadas en la construcción
pradera de posidonia oceanica, su crecimiento y la naval no lo está tanto. En general se hace mención
formación del yacimiento arqueológico, aspecto en a clavos de bronce o de cobre, tanto en los informes
el que por razones de espacio no profundizaremos, individuales sobre naufragios antiguos como en los
la campaña tenía como objetivo principal revisar in manuales para la construcción naval moderna (Mc-
situ las planimetrías publicadas, documentar el es- Carthy, 1996). Podría muy bien tratarse de piezas
tado de conservación y realizar un muestreo para sin conexión con la embarcación romana en cues-
análisis dendrocronológico. Desde entonces, en el tión y formar parte de los objetos perdidos en la en-
periodo transcurrido la labor consistió en recons- senada – es un aspecto a profundizar en un futuro.
truir el contexto arqueológico, es decir, averiguar el Además, entre los objetos metálicos se mencionan
paradero del material arqueológico y su documenta- planchas o láminas de plomo que formaban parte
ción gráfica y fotográfica. del revestimiento del casco de la embarcación.
Desde el punto de vista de la arquitectura naval,
los restos presentan una característica atípica que
LA ESTRUCTURA NAVAL consta en un refuerzo entre las cuadernas, llamados
por los excavadores en su día entremiches (Martínez
A raíz del hecho de que la zona de intervención y León, 1993, 271). Estos fueron interpretados por
haya sido siempre la misma, al igual que las estruc- los excavadores como un refuerzo instalado para
turas descritas en los informes preliminares de 1964, adaptar la nave a las condiciones de navegación at-
1965 y 1993, se puede percibir un cierto desgaste lántica (Martínez y León, 1993, 272). Sin embargo,
del contexto arqueológico y un proceso de erosión, desde la perspectiva actual no existe gran diferencia
ya sea este natural o de origen antropogénico. Así, entre la construcción de las embarcaciones para el
Figuras 2a y 2b. Restos del casco de la embarcación romana de Grum de Sal. Izquierda: planimetría de la campaña
de 1992 según C. Apestegui y C. León (gris 35 %: varengas; gris 60 %: entremiches y puntales; blanco: forro externo;
gris 15 %: piezas sueltas sin contexto de ensamblaje). Abajo: el plano de 1993 superpuesto con la parte identificada y
documentada en octubre de 2013 (en gris transparente) según D. Hosner, DAI Eurasien-Abteilung (planos vectorizados
y compuestos en 2014 por R. R. de Almeida / © DAI Madrid).
Atlántico y el Mediterráneo. Por lo tanto, también arena –a pesar de ser un lugar de fácil acceso y por
podría tratarse simplemente de una posibilidad de ello de relativamente alta frecuentación por depor-
subdivisión de la carga o para cerrar espacios entre tistas submarinos. El hallazgo se halla en posición
las cuadernas para la pasarela de la sentina; hecho inclinada dentro de la arena, por lo que algunas
para el cual, sin embargo, no se conocen paralelos en maderas de la parte oeste afloraban en superficie.
el contexto arqueológico. Otras piezas de interpre- Son estas las maderas afectadas por el Teredo nava-
tación dudosa son los diversos puntales y una pieza, lis (carcoma marina) que se veían al comienzo de
denominada A, que se halló en una parte muy de- los trabajos. El resto de la embarcación destapada
teriorada del casco de la embarcación (Martínez y presenta una ligera curvatura, por lo que se trata de
León, 1993, 271, fig. 7.2). Además, el plano aún una embarcación panzuda de (¿poco?) calado, poca
plantea preguntas referentes a la distribución de los quilla y poco puntal (cf. el pecio de Laurons o el de
clavos (partes estructurales primarias y secundarias) La Bourse/Marsella, ambos en Francia). Sin embar-
y la secuencia exacta de las varengas. go, esta supuesta reconstrucción no coincidiría con
Durante la intervención de octubre de 2013 se la información de las tres hileras de carga que hace
verificó que, contrariamente a lo esperado, las ma- Anthony J. Parker en 1992 (véase arriba).
deras del pecio se hallaban bien conservadas a unos Los resultados de la intervención en 2013 mues-
20 a 40 cm de profundidad dentro del sustrato de tran claramente que la estructura conservada es
mayor que el plano publicado por Belén Martínez extremos se enviaron al laboratorio de la Universi-
Díaz y Carlos León Amores en 1993, tal como refle- dad de Georgia para un análisis de C14, junto con
ja el plano cedido posteriormente. Merece mención el análisis por wiggle matching. La distancia entre
especial la posible identificación de la quilla y los las dos muestras es de 83 años, y el resultado cali-
posibles tablones de aparadura; detalle que todavía brado preliminar es de una edad de 90-50 a. C. (1
precisa una inspección más detallada, lo que por el sigma); por lo tanto, el barco podría ser mucho más
momento solamente permite una orientación, dada antiguo de lo que se pensaba. Aun así, todavía es
la construcción simétrica del casco de una embar- pronto para poder hacer afirmaciones, ya que esto
cación. Sigue sin explicación la colocación y la fun- podría deberse tanto a un largo periodo de servicio
ción de los presuntos puntales y la configuración de como al reciclaje de ciertas maderas para su cons-
la estructura sobre la cual yacen. trucción inicial.
Una primera aproximación a la madera utilizada
en la construcción de la embarcación, de la cual se
tomaron ocho muestras durante la intervención en LOS MATERIALES IDENTIFICADOS: EL
octubre de 2013, son los resultados de los análisis CARGAMENTO DE LA EMBARCACIÓN ROMANA
realizados en el laboratorio dendrocronológico del
Instituto Arqueológico Alemán de Berlín (Alema- A pesar de algunos datos de suma importancia,
nia). Mientras que las cuadernas presentan una es- las varias noticias publicadas no profundizan en el
tructura con anillos de crecimiento amplios –pro- estudio artefactual. Según la práctica en aquellos
bablemente se trate de una especie de pino–, las tiempos, el lote de los hallazgos arqueológicos de las
muestras de las tracas del forro de la embarcación excavaciones antiguas se dividió en lotes más peque-
presentan anillos de crecimiento estrechos. También ños y, una vez repartidos, pasaron a formar parte de
están hechas de madera de pino, concretamente de los fondos del Museu Arqueològic d’Eivissa i For-
Pinus pinaster o halepensis. A su vez, las lengüetas, de mentera y de una colección privada en Sant Antoni
las cuales se pudo muestrear también un ejemplo, de Portmany. Recientemente se ha podido localizar
están realizadas de madera de olivo (olea sp.). otro lote compuesto de cerámica, entre otros mate-
La medición cronológica de las maderas recu- riales, en los fondos del Museo Nacional de Arqueo-
peradas reveló una secuencia de poco más de 80 logía Subacuática ARQUA en Cartagena. Durante
anillos de crecimiento. La curva resultante no se la campaña del 2013 no se recuperaron hallazgos
ajusta de momento a ninguna de las curvas de re- arqueológicos. Los materiales asociados al pecio y al
ferencia consultadas. Dos muestras de los anillos fondeadero se presentan en la tabla 1.
Material diverso y de diversas épocas, predominantemente cerámico, del Raco de Grum de Sal
Tabla 1. Material arqueológico localizado procedente del Racó de Grum de Sal y del pecio Grum de Sal (en diversas
fases de estudio por los autores de esta contribución).
Uno de los aspectos menos bien estudiados es el conclusiones categóricas sobre la pertinencia crono-
del cargamento del pecio. La revisión del pecio y de lógica de este aspecto morfológico, ya para los alfares
las distintas colecciones de materiales existentes nos del Sado la lectura existente y la línea de trabajo avan-
ha permitido constatar que la mayor parte de las án- zada es que la Dressel 14 con borde de perfil triangu-
foras que se han podido recuperar se tratan en rea- lar –la Dressel 14 variante B– tiene una cronología
lidad de Dressel 14 con origen en la Lusitania, con- de producción centrada mayormente en época flavio-
cretamente y con gran probabilidad manufacturadas trajanea (Mayet y Silva, 2002, 103-105; Mayet y Sil-
en las alfarerías ubicadas en las cuencas del Tajo y/o va, 1998, 59). Se considera también que los pivotes
del Sado y destinadas a envasar productos piscícolas diferenciados, troncocónicos y huecos, que terminan
producidos en los centros salazoneros ubicados en muchas veces sin relleno de arcilla, se asocian muchas
las mismas cuencas. El número de individuos que veces a esta variante (Mayet y Silva, 1998, 59).
componen el conjunto que ahora se presenta, su En lo que se refiere a la petrografía, el segundo y
gran homogeneidad tipológica y formal, así como la definitivo aspecto que permite y confirma su iden-
coherencia a nivel petrográfico son, a nuestro enten- tificación como artículos con un origen lusitano,
der, motivos para considerar que las ánforas lusita- son debidos algunos comentarios particulares. En
nas serían el componente principal de la nave. la observación detallada que hemos podido realizar
En términos morfológicos, el conjunto anfórico recientemente ha sido posible verificar que todos los
recuperado es bastante coherente, a pesar de una ejemplares presentan determinadas características al
cierta variabilidad presente sobre todo al nivel for- nivel de la pasta que permiten encuadrarlos dentro
mal de los cuerpos, y aún con matices más eviden- de la variabilidad conocida para las producciones
tes en sus diferentes componentes de forma aislada: del gran complejo Tajo/Sado. Las cuencas del Tajo
cuello, asas, panza y pivote. Asimismo, al nivel de y del Sado comparten la formación de un mismo
los cuellos, estos se pueden presentar más o menos contexto geológico, que aporta a las pastas cerámi-
anchos, ocasionalmente más cilíndricos y en otros cas las mismas materias primas, lo que convierte su
casos más bitroncocónicos; al nivel de las asas, estas diferenciación y la respectiva atribución a una u otra
pueden presentar mayor o menor longitud y descri- zona en una tarea imposible sobre la base de la ob-
bir líneas más rectas o más curvas y sinuosas en su servación macroscópica, solo posible con el recurso
trayectoria descendiente hacia la zona de implanta- a analíticas químicas u otros medios y procesos de
ción en el hombro/cuerpo; al nivel de los cuerpos, laboratorio igualmente complejos. De ese modo, y
estos se pueden presentar más o menos cilíndricos a pesar de una aparente diversidad de pastas, acorde
y más o menos simétricos; finalmente, los pivotes con los distintos centros productores, todas mantie-
se presentan largos y cónicos, con o sin relleno de nen la misma matriz y las características petrográfi-
pelota de arcilla. Cabe destacar la gran cantidad de cas básicas, siendo únicamente posible clasificarlas y
piezas que podríamos calificar como «peor manu- adscribirlas a dos grupos petrográficos genéricos, co-
facturadas» o «casi defectuosas», con acentuadas nocidos en la bibliografía de referencia como «Grou-
asimetrías morfológicas (véase Martínez y León, pe Sado-aval/Tage» o «Grupo Tejo/Sado jusante»
1993, 265), pero cuya presencia en este pecio es (Grupo Tajo/Bajo Sado) y «Groupe Sado-amont» o
señal inequívoca de que pasaron un proceso de se- «Grupo Sado montante» (Grupo Alto Sado) (Mayet
lección que certificó su aptitud para el transporte. et al., 1996; Raposo y Viegas 2013).
Hay que destacar también que se denotan pequeñas Las ánforas del pecio de Grum de Sal presentan
diferencias volumétricas al nivel del módulo dicho pastas con tonalidades rojizas o anaranjadas, pu-
«normal», cuyas medidas oscilan entre los 90-110 diendo también presentar un color crema u ocre
cm de altura y los 28-35 cm de anchura/diámetro, claro en la superficie. Esta tiene a su vez un aspecto
y la presencia del módulo «pequeño», es decir, la poroso y granuloso, pero es compacta y de buena
presencia conjunta de la variante parva (véase fig. cocción. Ya durante las primeras intervenciones
3, pieza MAEF 5447, con 50 cm de altura y 21 cm los investigadores se habían percatado en parte de
de anchura/diámetro). ese nivel de similitud existente, pero no tanto al
Relativo a los bordes, es igualmente verificable nivel de los componentes de las arcillas, habiendo
una gran homogeneidad al nivel del diseño y desarro- destacado dos grandes grupos de pastas que des-
llo de los labios, que muestran en todos los ejempla- cribieron sumariamente como «marrón oscuro» y
res un perfil tendencialmente subtriangular (fig. 3). «rojizo» (Vilar-Sancho y Mañá, 1965, 192). Con
Si el estado del conocimiento actual existente para relación a los desgrasantes, se documenta la pre-
los alfares de la cuenca del Tajo, donde este tipo se sencia abundante de inclusiones de cuarzo muy
produce desde finales de la primera mitad del siglo i rodado, feldespato y mica, típicos de la totalidad
d. C. (Raposo et al., 1995, 340), no permite extraer de pastas de las cuencas del Tajo y del Sado (fig. 4).
Figura 3. Composición de algunas de las ánforas de tipo Dressel 14 procedentes del pecio romano de Grum de Sal
(gráficos: E. Puch, DAI Madrid).
Figura 4. Foto de algunos ejemplares y de muestras de las pastas de las ánforas romanas de tipo Dressel 14 proceden-
tes del pecio romano de Grum de Sal, hoy en el Museu Arqueològic d’Eivissa i Formentera (fotos: DAI Madrid, M.H.
Hermanns).
Teniendo a la vista un estudio de mayor desarro- tos de los Centros Productores de Época Romana»
llo y profundidad, se procedió a un muestreo preli- del Instituto Superior de Tecnología (IST) / Instituto
minar para su posterior análisis químico. Como ob- Tecnológico Nuclear (ITN) de Lisboa.
jetivo ideal planteamos la realización de un estudio
por medio de activación de neutrones (AAN), uti-
lizando el reactor portugués de investigación (RPI, UN DOCUMENTO PARA EL ESTUDIO DEL
IST/ITN, Sacavém) como fuente de neutrones. El COMERCIO LUSITANO DE ÉPOCA ALTOIMPERIAL
objetivo de este estudio es complementar el análisis
formal hecho sobre las formas cerámicas a través de El pecio de Grum de Sal nos brinda la posibili-
la caracterización química de las pastas. Asimismo, el dad de profundizar un poco más sobre los circuitos
pecio de Grum de Sal nos brinda una valiosa oportu- de exportación de los contenedores y las salazones
nidad y se convierte en un medio de primera mano lusitanos. Creemos que él mismo se puede enmarcar
para esclarecer los circuitos de distribución y consu- en un modelo de circulación específico: una nave
mo, sobre todo los de largo recorrido, de los produc- procedente de la península ibérica con una carga
tos producidos en las alfarerías lusitanas, ya sea en los principal homogénea compuesta por ánforas Dres-
alfares del grupo de la cuenca del Tajo o en los de la sel 14, que cruza el Mediterráneo en sentido oeste-
cuenca del Sado, y las relaciones comerciales entre la este en una ruta de largo alcance con destino a los
Lusitania y otras provincias del Imperio. Este análisis puertos de Roma (o tal vez al sur de Francia), que
comparativo que ahora se pretende realizar permite busca refugio en una cala de un islote frente a la
dar la continuidad y el confronto necesarios a los di- costa oeste de la Pitiusa mayor.
versos trabajos que se vienen realizando en Portugal Para el conjunto de la carga se conocen un con-
desde hace dos décadas (Dias et al., 2012; Prudêncio junto de yacimientos en el Mediterráneo occidental
et al., 2009). Desde un punto de vista puramente como parangones (fig. 5). De entre los cuales se pue-
práctico, lo que se pretende es analizar arqueomé- den distinguir diferentes modelos:
tricamente las muestras de las ánforas lusitanas del a) Cargamento mayoritario: pecios donde las
Grum de Sal y determinar su proveniencia, tanto a ánforas lusitanas son, aparentemente, la carga prin-
nivel general (cuenca productora) como a nivel par- cipal y homogénea. Parangones directos de nuestro
ticular (alfarería), si es posible. Con esta intención, y yacimiento de Grum de Sal son los de Cap Bénat 1
a través de los resultados/indicadores obtenidos, se y Punta Sardegna A.
intentarán buscar asociaciones con los alfares ya co- b) Posiblemente carga mayoritaria: pecios don-
nocidos y caracterizados recogidos en la «Base de Da- de las ánforas lusitanas son, aparentemente, la carga
Figura 5. Mapa con los yacimientos subacuáticos referidos en el texto / en las tablas. 1. Grum de Sal; 2. Cap Benat 1;
3. Punta Sardegna A; 4. Bajo de la Campana 3; 5. Escombreras 4; 6. Tiboulen-de-Maire; 7. Anse Saint-Gervais 3;
8-12. Islas de Lavezzi (La Balise des Lavezzi; Lavezzi 1, 2 y 3; Sud Lavezzi 3); 13. Puerto de Mahón; 14. Es Maressos de
Cavalleria; 15. Macchia Tonda; 16. Ventotene Sitio 1 (gráfico: S. Bombico).
mayoritaria pero no única, caso del yacimiento de y/o residual, o son objetos de uso a bordo. Casos de
Bajo de la Campana 3; Escombreras 4, Tiboulen de Maire, Anse Saint-Ger-
c) Carga secundaria y/o residual: pecios donde vais 3 y en las islas de Lavezzi (La Balise des Lavezzi,
las ánforas lusitanas son parte de la carga secundaria Lavezzi 1, 2 y 3 y Sud Lavezzi 3).
Cargamento/
Yacimiento/ pecio Cronología materiales Modelo Bibliografía
identificados
Dressel 14 lusitanas, 1
Calmes, 1973, 137-140
Cap Bénat 1 2.ª mitad del si- ánfora de Ibiza del tipo,
A Parker, 1992, 98, n.° 172
(Var, Francia) glo i d. C. - siglo ii Ramon PE 25, 1 ánfora de
Étienne y Mayet, 2002, 195, n.° 33
fondo plano
Finales del siglo Dressel 14 lusitanas, Parker, 1992, n.° 959
Punta Sardenha A
i d. C. - primeras Dressel 7-11, Dressel 20, Zucca, 2003, 177
(Maddalena, estrecho A
décadas del siglo Dressel 2-4 itálica, Porqueddu, 2013, 86-90, 114-115
de Bonifacio)
ii d. C. cerámica común Porqueddu et al., en prensa
Roldán et. al., 1995
Dressel 14 lusitanas,
Bajo de la Campana 3 Siglos i-ii d. C. B Pinedo, 1996, 68
Dressel 7-11, Dressel 20
Pinedo, 2014
Haltern 70, Dressel 8 y 9,
2.ª mitad del Beltrán IIB, Dressel 14,
Escombreras 4 C Pinedo y Alonso, 2004
siglo i d. C. Dressel 20, terra sigillata
sudgálica
Carga principal:
Dressel 20 (70%)
130-150 d. C.
Carga secundaria:
Beltrán IIA y IIB (14 %),
Un sello de
Dressel 14 (2 %)
madera con in-
Gauloise 4 (4 %)
dicación del año Ximénès y Moerman, 2006
Tiboulen-de-Maire Dressel 28 (3 %)
consular estable- C Ximénès, 2007
(Marsella) Dressel 2-4 Tarraconensis
ce el terminus Djaoui, 2011
(3 %)
post quem para
2 Forlimpopoli
el pecio en 116
1 Africana precoz
d. C. (Djaoui,
1 Dressel 7-11
2011, 625)
Terra sigillata itálica tar-
día, vidrio
Carga principal:
Dressel 20
Otros tipos a bordo: Brentchaloff y Lequément, 1978
Anse Saint-Gervais 3 Mediados del
Beltrán IIB, Dressel 14 (1), C Liou 1980; 1987
(Fos, Francia) siglo ii d. C.
Gauloise 4, ánforas inde- Liou y Gassend, 1990
terminadas, unguentaria,
terra sigillata africana A
Conforme a lo referido, son diversos los yacimien- (Museo de Sartène), solo se han rastreado dos fragmentos
tos en las islas de Lavezzi en los cuales está registrada lusitanos, una parte superior de ánfora proveniente
la presencia de ánforas del tipo Dressel 14. En la bi- de Cavalo y un pivote con la siguiente información
bliografía, estas ánforas son muchas veces asociadas a de proveniencia: «Bonifácio (¿?) – Recuperaciones de
las producciones lusitanas (Étienne y Mayet, 1993- W. Bebko 69 – Balise». Todos los ejemplares restantes
94; 2002; Fabião, 1997). Muchas de las ánforas re- pertenecen a producciones sudhispánicas no lusitanas
cuperadas en las excavaciones antiguas (años 50 a 70) (Bombico et al., 2014, 365). De esta manera, es difícil
todavía tienen paradero desconocido. Entre los materia- confirmar la efectiva presencia de ánforas Dressel 14
les existentes en los depósitos del DRASSM, en Córcega lusitanas en estos yacimientos.
Cargamento/
Yacimiento/
Cronología materiales Modelo Bibliografía
pecio
identificados
Dressel 12 o 17, Dressel
20, Lamboglia 7, Fondos
Bebko, 1971
La Balise des Lavezzi Siglo id. C. de Dressel 28 (¿?), Dressel C
14, Dressel 2-4, 1 Dressel
14 parva
Lingotes de cobre y
bronce, 5 Dressel 20, 15 Bebko, 1971
Haltern 70, 2 Dressel 28, Liou, 1990
2.ª mitad del
Lavezzi 1 4 Dressel 2-4 vinarias, 10 C Parker, 1992, 238-239, n.° 5, 84
siglo id. C.
Beltrán IIA, 32 Dressel Massy, 2013
14, 14 Dressel 7-11, 1
Pompeia VII
Dressel 17, Dressel 14,
algunas de las cuales de
2.ª mitad del pequeñas dimensiones, Bebko, 1971, 35, lám. XXIX
Lavezzi 3 C (¿?)
siglo id. C. con cerca de 60 cm de Massy, 2013, 145
altura (parva), lingotes de
cobre
Dressel 20, Dressel 14, Bebko, 1971, 36, lám. XXX
Lavezzi 4 100-150 d. C. (¿?) C (¿?)
Beltrán IIB, Pompeia VII Massy, 2013, 145-146
Liou, 1984
Carga mayoritaria de Cosi-Sciallano y Liou, 1985
Sud-Lavezzi 3 15-25 d. C. (¿?) Dressel 2-4, 1 Pascual, 1 C Parker, 1992, 415, n.° 1119
Dressel 14 Étienne y Mayet, 2002, 196, n.° 38
Massy, 2013, 138-140
Cabe remarcar, todavía, algunos casos donde la como los yacimientos de Puerto de Mahón, Es Ma-
información es muy reducida y a los cuales no es ressos de Cavalleria, Macchia Tonda y Ventotene-
posible aplicar ninguno de los modelos anteriores, Sitio 1.
Cargamento/
Tipo de
Localización Cronología materiales Bibliografía
hallazgo
identificados
De Nicolás, 1972
Hallazgos aisla-
Pto. de Mahón (Me- Étienne y Mayet, 2002, 192,
Siglo i-ii d. C. 2 Dressel 14, Beltrán IIB dos
norca), prov. incierta n.° 16.
(¿?)
Pons, 2005, 448
Dressel 20, Dressel 14,
Es Maressos de Cava- Mascaró, 1967, apud Pons,
Siglo ii d.C. Beltrán IIA, TS Clara A, Posible pecio
lleria (Menorca) 2005, 448
tesoro monetario
Gauloise 4, Dressel 14,
Macchia Tonda 2.ª mitad del Gianfrotta, 1982, 17
anforita de fondo plano Posible pecio
(Santa Severa) siglo i d. C. Parker, 1992, 248, n.° 613
Africana (¿?)
Ánforas de salazones de Aurora Ocean Exploration
pescado de la penínsu- & Education Trust 2009,
Ventotene, Sitio 1 Siglo i d. C. Pecio
la ibérica: Beltrán IIA, véase http:
Dressel 14 //www.auroratrust.com/
Tabla 4. Yacimientos/pecios con ánforas Dressel 14, cuya información es muy reducida e imprecisa.
Los pecios de Cap Bénat 1 y Punta Sardegna A, Roma. Son prueba de la plena utilización de este
parangones directos de nuestro yacimiento, ilustran itinerario, correspondiente a los trayectos 9, 8 y 7
de forma bastante clara los caminos de exportación de Pascal Arnaud (2005), los yacimientos tardoanti-
de las ánforas de salazones lusitanas durante el Alto guos de Cabrera I y Cabrera III (Bost et al., 1992).
Imperio romano. Estos contenedores transcurrían Pero, como hemos visto, entre mediados del siglo
por las grandes rutas de navegación que desde Oc- i d. C. y mediados del ii d. C., las ánforas Dressel
cidente y pasando a lo largo de la costa oriental de 14 lusitanas no han constituido siempre las cargas
Hispania se dirigían hasta las costas de la Galia, por principales y mayoritarias. Por el contrario, han cir-
ejemplo. Por otro lado, el caso de Punta Sardegna culado conjuntamente con otros productos alimen-
A, en el estrecho de Bonifacio, testimonia la travesía ticios hispánicos (béticos y tarraconenses), como: el
del fretum Gallicum con probable destino a los puer- aceite de oliva (Dressel 20 y Dressel 23), el vino y/o
tos de Roma. derivados (Dressel 2-4, Haltern 70 y Dressel 28), las
Como nos ha evidenciado el pecio de Grum de salazones (Beltrán IIB, Dressel 7-11, Dressel 14 y
Sal, es habitual la utilización del archipiélago balear Dressel 17) y, además, conjuntamente con metales
como punto de refugio y escala en las rutas hacia (lingotes de plomo y cobre).
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