FORMULACIONES DE HERBICIDAS

GUILLERMO MONDRAGÓN PEDRERO

 1. INTRODUCCIÓN

Los usuarios de los plaguicidas, particularmente los herbicidas, no pueden

usar estos compuestos en su forma pura. Esto se debe a que muchos herbicidas
tienen baja solubilidad en el agua, recordando que la mayoría se aplican
mezclados en agua, con aspersoras de diferentes tipos; también su aplicación es
en muy bajas cantidades, lo que resultaría muy difícil de distribuirlos en superficies
relativamente grandes (Medina et al., 1992); otro problema es que los ingredientes
activos (Moléculas herbicidas) no se absorben en su forma pura por las hojas y
otros órganos de las plantas; y por último, muchas de estas moléculas son
inestables en el ambiente.
Por todas las razones expuestas anteriormente, para su uso práctico las
moléculas plaguicidas deben de mezclarse con sustancias diversas para que
puedan lograr su mecanismo de acción (Efecto sobre la plaga a controlar); a estas
mezclas del ingrediente activo con otras sustancias se les denomina
formulaciones, que se definen como: La forma (Líquida, sólida o gaseosa)
como está preparado un plaguicida para su uso práctico.

2. COMPONENTES DE LAS FORMULACIONES

Todas las formulaciones tienen tres componentes fundamentales:
Ingrediente activo: Es la molécula que ejerce el efecto sobre la plaga
(Herbicidas, insecticidas, fungicidas, etc). La concentración del ingrediente activo
varía mucho en una formulación, en el caso de los herbicidas puede ser desde el
10% hasta más del 90%.
Vehículo: Sustancias que ayudan a penetrar al herbicida a la planta y
mantenerlo estable, tanto en sus recipientes como en el ambiente; en el caso de
las formulaciones líquidas éstas son solventes, entonces el ingrediente activo es el
soluto.
Coadyuvantes: Son productos que se agregan a las formulaciones para
facilitar y/o mejorar la eficiencia de los ingredientes activos (Tasistro, 2000).
 3. TIPOS DE FORMULACIONES DE HERBICIDAS

3.1. Formulaciones líquidas

En este caso la presentación del producto es en forma de líquido, el
ingrediente activo se vende en una solución, en el que el solvente puede ser agua,
acetona, alcohol, xilol, etc. Otro tipo de mezcla en que se venden los ingredientes
activos es la suspensión. Además, contiene diferentes coadyuvantes, según el
tipo de formulación líquida.

3.1.1. Soluciones acuosas (S.A.) o concentrados solubles

Estas formulaciones son las más sencillas, ya que el ingrediente activo es
soluble en agua o en una sustancia que a su vez es soluble en agua, como alcohol
y acetona, entonces cuando se realiza la mezcla con agua en el tanque de la
aspersora, para su aplicación en el campo, se forma una solución, teniendo un
aspecto cristalino.
La principal ventaja de las soluciones acuosas es que al formarse una
solución en el tanque de la aspersora, no se requiere que estén siendo agitadas y
esta mezcla no va a formar precipitados.
Al contener estas formulaciones solventes hidrófilos, una desventaja es la
baja penetración a través de la superficie de la hoja, ya que ésta contiene
sustancias hidrófobas o lipófilas, como son ceras y pectinas. El problema anterior
se soluciona agregando a la formulación sustancias coadyuvantes penetrantes,
adherentes y humectantes, éstas últimas evitan la formación de gotas esféricas en
la superficie de las hojas, debido a la alta tensión superficial que tienen,
expandiendo las gotas, logrando así un mojado homogéneo de las hojas.
Otra desventaja es que las soluciones acuosas reaccionan con los iones de
calcio y magnesio de las aguas duras, ocasionando que cierta cantidad de
ingrediente activo se precipite (Figura 1), disminuyendo la dosis a aplicar; lo que
se soluciona cuidando la calidad del agua usada para la aplicación, o si esto no es
posible se puede agregar a la mezcla del tanque ablandadores de agua, como el
sulfato de amonio (Tasistro, 2000).
 Figura 1. Acción de los herbicidas con aguas duras. (Tomado de
Domínguez, 2005).

En México se venden varios herbicidas en formulación solución acuosa,

algunos son: Glifosato, 2-4, D amina, imazethapyr y paraquat.

3.1.2. Concentrados emulsionables (C.E.)

Muchos ingredientes activos no son solubles en agua, acetona o alcohol,
sino que se ha encontrado que sus solventes son sustancias hidrófobas, como el
xilol, entonces el problema se presenta cuando se realiza la mezcla en el tanque
de la aspersora para su aplicación, ya que no se mezcla el xilol con el agua; para
que se forme una mezcla estable en el tanque, se requiere que a la solución del
ingrediente activo (Soluto) y xilol (Solvente) se le agregue una sustancia
emulsificante, la cual tiene la función de dispersar las gotas de esta solución en el
agua del tanque, ya que los emulsificantes tienen un polo hidrófilo y un polo lipófilo
(Figura 2) por lo que en el tanque se forma una emulsión, donde la fase dispersa
es la solución y la fase continua es el agua; el aspecto de las emulsiones es un
líquido lechoso.
Por lo tanto los componentes básicos de una formulación concentrado
emulsionable son: Ingrediente activo, solvente y emulsificante, (Detergentes,
polisorbatos y sorbitanos).
 Figura 2. Acción de los emulsificantes en la aplicación de los concentrados
emulsionables. (Adaptado de Tissut y Séverin, 1984).

Las ventajas de los herbicidas formulados como concentrados

emulsionables son, a diferencia de las soluciones acuosas, que tienen alta
penetración a través del follaje, baja tensión superficial, y al igual que las
soluciones acuosas, no se requiere agitarlas en el tanque de la aspersora.
Como principal desventaja es que estas formulaciones son poco selectivas.
Ejemplos de herbicidas que se formulan como concentrados emulsionables
son: 2-4, D ester, fluazifop butil, propanil, metolaclor y trifluralina.

3.1.2. Suspenciones acuosas o flowables (FW).

Este tipo de formulación es relativamente nuevo, y se trata de un polvo
humectable suspendido en un líquido; la razón de inventar esta formulación es
que en el campo es más práctico aplicar líquidos que sólidos.
Entonces, los componentes de estas formulaciones son los mismos que los
polvos humectables más el líquido en el que están suspendidos.
La principal desventaja de esta formulación es que no es muy estable en el
recipiente donde se vende y se precipita rápidamente en el tanque de la
aspersora, por lo que se debe de agitar constantemente.
La atrazina, simazina, el diuron y el linuron son herbicidas que se venden
en suspensión acuosa o flowable.
 3.2. Formulaciones sólidas

Muchos herbicidas se venden en estado sólido, la principal razón de la

existencia de estas formulaciones es que no se han encontrado solventes para los
ingredientes activos.

3.2.1. Polvos solubles (PS) y cristales hidrosolubles

En el caso de los herbicidas, actualmente existen muy pocos que se venden
en México en estas formulaciones, y como su nombre lo dice al mezclarse con el
agua de la aspersora para su aplicación, se forman soluciones; por lo tanto tienen
las mismas ventajas y desventajas de las soluciones acuosas.
El imazapyr es un herbicida que se vende en nuestro país como polvo
soluble.

3.2.2. Polvos humectables (PH) o mojables

Esta es de las formulaciones más antiguas, y como se mencionó

anteriormente, en muchos ingredientes activos no se encontraron solventes para
formularlos en forma líquida.

Los componentes básicos de los polvos humectables son: el ingrediente

activo, un vehículo o transportador, que son sustancias que evitan que se
aglutinen las moléculas del ingrediente activo y facilitan su penetración a la planta,
las arcillas caolinitas son muy usadas como vehículos de ingredientes activos;
como coadyuvantes necesarios son los dispersantes, que evitan que el polvo se
precipite rápidamente en el agua, porque no permite la aglutinación de las
partículas del ingrediente activo, una sustancia que se utiliza como dispersante es
el tripolifosfato de sodio y los humectantes, cuya función es romper la tensión
superficial del agua, evitando que el polvo quede flotando en la superficie del
agua, las organosiliconas son usadas como humectantes.

Entonces la mezcla que se forma en el tanque de la aspersora al agregar

un polvo humectable es una suspensión, de aspecto turbio.
 La principal ventaja de los polvos humectables es que no reaccionan con
las aguas duras.

Los polvos humectables tienen como desventajas que hay que pesarlos en
campo, y como se dijo anteriormente es más práctico aplicar un líquido que un
sólido; otra desventaja es que se precipitan rápidamente en el tanque de la
aspersora, por lo que hay que estar agitando continuamente; al no mezclarse
fácilmente con el agua, es recomendable no agregar directamente los polvos
humectables al agua, sino hacer primero una premezcla en un recipiente, al que
se le debe agitar hasta observar que no se formen grumos, y luego vaciar ésta al
tanque con agua. Otra desventaja es que al usar arcillas como vehículos, éstas
son abrasivas, y al aplicarse frecuentemente estos polvos, desgastan las partes
metálicas de las aspersoras y ocasionan taponamientos de las tuberías de las
mismas.

Ejemplos de herbicidas formulados como polvos humectables son: Atrazina,

diuron, linuron y bromacil.

3.2.3. Gránulos dispersables en agua (GDA o DF)

Esta formulación es más reciente que los polvos humectables, se puede decir
que es una solución a los problemas que presentan los polvos, ya que el tamaño
de partícula que se maneja es mayor, evitando la inhalación o la penetración a
través de los poros de la piel al manipularlos, tienen menor tiempo de precipitación
y su dispersión en el agua es más eficiente.

Los gránulos dispersables son polvos que pasan por un proceso de

peletización; y por lo tanto también contienen como coadyuvantes indispensables
los dispersantes y humectantes.

Como desventaja se puede mencionar a que deben de pesarse en el campo.

Varios herbicidas que se formulaban como polvos humectables, actualmente se

formulan en gránulos dispersables, algunos ejemplos son: Atrazina, linuron diuron,
metsulfuron, nicosulfuron, ixosaflutole y triasulfuron.
 3.2.4. Granulados y pastillas

Estas formulaciones se aplican en seco, sin mezclarlos con el agua, el

objetivo es hacer aplicaciones dirigidas, como solamente en la zona de goteo de
los árboles frutales, o en manchones de hierba, se usan en herbicidas para
controlar malezas perennes y el ingrediente activo se libera lentamente.

Hay pocos herbicidas con estas formulaciones en México, un ejemplo es el

Picloram 10 G.

4. LITERATURA CITADA

Domínguez Valenzuela, J.A. 2010. Formulaciones de herbicidas.

Presentación en Power Point.
Medina Pitalúa, J. L.; Domínguez Valenzuela, J.A.; Mondragón Pedrero, G.
1992. Manual de prácticas: Biología y manejo de la maleza. Departamento de
Parasitología Agrícola. Universidad Autónoma Chapingo. P. 31.
Tasistro Souto, A. S. 2000. Introducción y clasificación de coadyuvantes para
agroquímicos. 1° Simposium latinoamericano de coadyuvantes para agroquímicos.
Tissut, M; Séverin, F. 1984. Plantes, herbicides et désherbage. Association
de coordination technique agricole. Paris, France. P. 163.