Lecciones Del Rico y Lázaro
Lecciones Del Rico y Lázaro
Lecciones Del Rico y Lázaro
Introducción
La certeza de la muerte provoca una pregunta:
¿Qué pasa cuando yo muero?. (Heb. 9:27; Ec. 7:2).
Contemplar la muerte nos debe hacer pensar en
nuestro destino eterno.
En Lc. 16:19-31, la enseñanza de Jesús sobre los
dos destinos, del Hombre Rico y Lázaro, nos da
una visión cierta de la vida después de la muerte.
Esta enseñanza de Jesús puede ayudarnos a
prepararnos para encontrarnos fielmente con Dios.
Después de la Muerte…¿Qué pasa?
El Rico y Lázaro (Lc 16:19-31)
Introducción
Aunque tiene la forma de una “parábola”, el relato está
basado en principios verdaderos. (Parabolle = poner una cosa al
lado de otra para comparar). Las parábolas toman situaciones reales
para ilustrar una verdad. Lo que pasó aquí, pasará a nosotros.
El Tiempo y Contexto: en el ministerio en Perea, en su 3er año
de predicación (Jn 10:40-42). El Rico y Lázaro era una ilustración
acerca de la mala mayordomía. Jesús dijo tres parábolas sobre
mayordomía (Lc 16:1-31; 17:7-10). Fue dirigida a los Fariseos,
porque eran “avaros”, y se burlaron al oír la parábola anterior
donde Jesús enfatizó el uso adecuado de las riquezas (Lc 16:14).
Enfatiza el obedecer la Palabra de Dios y el arrepentimiento.
Después de la Muerte…¿Qué pasa?
El Rico y Lázaro (Lc 16:19-31)
Introducción
La Parábola: El Rico y Lázaro.
Cierto hombre Rico v. 19
Vestía de púrpura y de lino fino
Cada día banquete con esplendidez (celebraba, en todo su esplendor).
Un “día normal”: añadía a su riqueza, “vivía bien”. Nunca notó, o quizás
ignoró a Lázaro.
Un mendigo llamado Lázaro vs. 20-21
Echado a la puerta. Debía ser llevado por otros, sólo para mendigar.
Ansiaba las migajas de la mesa del rico. Su condición física era tan
mala que ni podía echar a los perros que le lamían las llegas.
Un “día normal”: tanto más dolor, miseria, humillación. ¿Qué “migajas”
(limosna, compasión) conseguiré hoy?
Después de la Muerte…¿Qué pasa?
El Rico y Lázaro (Lc 16:19-31)
Introducción
La Parábola: El Rico y Lázaro.
Ambos hombres murieron v. 29
Imagínese la pompa y magnificencia del funeral del rico. Muchos
acompañantes, pero sólo ellos podían llevar el cuerpo. No hay ángeles
para él.
Ambos salieron de este mundo “sin nungún peso” (Ec. 5:15; 1 Tim 6:7)
No dejaron de existir. Ahora estaban en otra condición y otro lugar.
En la vida después de la muerte su condición era diferente
vs. 22-25.
¿Qué leccciones aprendemos? ¿Qué aplicaciones
podemos hacer a nosotros?.
Después de la Muerte…¿Qué pasa?
El Rico y Lázaro (Lc 16:19-31)
1. ¿Es la Riqueza Señal de Aprobación de Dios?
Algunos piensan que sí (Lc. 16:14)
Jesús confrontó a aquellos que amaban el dinero (Lc.
16:14), señalando a ellos su destino eterno (16:19-31).
Dios nos da el poder para conseguir riquezas (Deut. 8:18), pero
hay gran peligro en las riquezas (1 Tim 6:10).
Algunos hombres de Dios fueron ricos (Mt. 27:57) [por Ej. José de
Arimatea]. Pero usaron su riqueza para la gloria de Dios.
Este Rico usó sus riquézas sólo egoistamente. Solamente para
satisfarcer sus propios deseos.
Tampoco ser “pobres” es indicador de ser aprobado
por Dios.
Después de la Muerte…¿Qué Pasa?
El Rico y Lázaro (Lc 16:19-31)