Preguntemos, para lograr una respuesta honrada: ¿Está o no aislado el Vietnam, haciendo equilibrios peligrosos entre las dos potencias en pugna?
En esa pugna que hace recordar los tiempos de Artigas y los Triunviratos y sus diferencias de criterio sobre el concepto de ejércitos auxiliares y propios, etc., etc., pasaron los primeros meses de 1826.
Véase lo que entonces escribe: “Después de la rendición de Montevideo, las tropas argentinas (¿?) que ocupaban la plaza tuvieron que luchar con otro enemigo más temible que el que habían vencido: contra los malos elementos internos en pugna con el orden; contra las masas semibárbaras de la campaña en pugna con los grandes objetos de la revolución.
Y allí fue una pugna de luz, una lucha de mundos, un universo en guerra; y en los costados de su tumba, horadaban poco a poco su cauce las siete estrellas; que si no iban hacia el cielo se desbastaban con sus picos la trayectoria de las piedras.
Contemplemos a Goya, de hinojos y rezando ante un espejo, a Coll, el paladín en cuyo asalto cartesiano tuvo un sudor de nube el paso llano o a Quevedo, ese abuelo instantáneo de los dinamiteros o a Cajal, devorado por su pequeño infinito, o todavía a Teresa, mujer que muere porque no muere o a Lina Odena, en pugna en más de un punto con Teresa...
La esencia innovadora de nuestras luchas populares sustentan la solidez del gobierno, la obra progresista de la administración, su firmeza interior y exterior, sin temores de zozobra ante la pugna de las grandes potencias.
Así que desde que regrese no he tenido ningún deseo de enredarme en disputas sin importancia con cabezas huecas o gente mezquina que de causalidad, pertenecen a ciertas organizaciones, y que se van a basar en hechos engañosos que no conducen a nada, cuando tenemos problemas bien complejos que estamos tratando de resolver. Así que no vine a hablar acerca de ninguno de estos movimientos que están en pugna entre sí.
Alemania está desarrollando una propaganda activísima y busca por todos los medios hacer adeptos a su causa. Su campaña de expansión, como todo atropello a cualquier país, está en pugna con los sentimientos del pueblo mexicano.
No atreviéndose el virrey á ponerse en pugna abierta con el pueblo, prohibiendo el feroz entretenimiento, sie decidió á reglamentarlo; y para ello empezó por aceptar la propuesta que hizo don Juan Garial para construir un coliseo en la pla- zuela de Santa Catalina y en terreno colindante con la mura- lla.
Pero la verdad es que, vencidas las dificultades de la iniciación que hubo que afrontar hace un año, y a pesar de la pugna para abrir los mercados, donde el contrincante tenía las posiciones tomadas, nuestra actual explotación petrolera no necesita de grandes inversiones para mantenerse, ha permitido ya nuevas perforaciones, construcción de oleoductos, ampliación y mejoramiento de refinerías y aun se registra ya en ella un aumento de la producción.
Por eso pugna por tomarlo e imponer, en su momento, nuevas formas de concepción del mundo y de la vida y nuevas superestructuras.
Entré a las aulas de los colegios y vi a la ciencia en amistad con los errores y los prejuicios; a seres jóvenes, inteligentes, en
pugna recia por adquirir certificados de explotadores, y vi en los libros derecho inicuo que da derecho para violar todo derecho.
Práxedis G. Guerrero