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Gobierno abierto: más allá de un (único) elemento

2021, Revista Accesa

Índice Inclusión social en el derecho de acceso a la información 4 Mtra. Naldy Patricia Rodríguez / Comisionada Presidenta Editorial 4 Mtro. José Alfredo Corona Lizárraga / Comisionado Reunión del Consejo Consultivo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas del Estado de Veracruz y el Comité Académico Editorial del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales El poder de participar 6 8 Tanya Zorrilla Cuevas Cuestionar los parámetros de restricción del derecho a la información 10 Carlos Martín Gómez Marinero Gobierno Abierto: más allá de un (único) elemento 12 Georgina Rojas Flores Gobierno en Acción Revista Accesa Año 14 - Núm. 24 Enero - Octubre 2021 Pleno Mtra. Naldy Patricia Rodríguez Lagunes Comisionada Presidenta Mtro. José Alfredo Corona Lizárraga Comisionado Javier Jair Heredia Riverón Secretario Ejecutivo Alberto Arturo Santos León Secretario de Acuerdos Karla Cecilia Salinas Román Directora de Administración y Finanzas Ileana Junue Magaña Cabrera Directora de Datos Personales Irma Domínguez Hernández Directora de Capacitación y Vinculación Ciudadana Cinthya Nimbe González Arriaga Directora de Transparencia Ivonne Alejandra Reyes Alcántara Encargada de la Dirección de Archivos Jorge Arturo Gloria Carrales Titular de la Unidad de Sistemas Informáticos Iván Mauricio Peralta Amezcua Director de Comunicación Social e Imagen ACCESA. Revista del IVAI, Año 14, Número 24, EneroOctubre 2021, es una publicación semestral gratuita, editada por el Instituto Veracruzano de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales. Calle Francisco Javier Clavijero Esq. Guadalupe Victoria, Col. Centro, Codigo Postal 91000. Xalapa, Veracruz, México. Teléfono (228) 8420270. Página web www.ivai.org. mx. Reserva de derechos al uso exclusivo No. 04-2009060109584000-102. ISSN 2007-2368. Amos otorgados por el Instituto Nacional de Derecho de Autor. Certificado de Licitud de Título y de Contenido No. 14758. Otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Los datos de los artículos son responsabilidad de los autores. Las opiniones expresadas no reflejan la postura del organismo responsable de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales. 13 Dr. Mario Raúl Mijares Sánchez Gobierno abierto como política pública anticorrupción: una tarea pendiente 14 David Armando Estrada El Gobierno Abierto como una política de combate a la corrupción 15 Karla Carreón Olivares El Gobierno Abierto y su impacto positivo en la Administración Pública 16 Sergio Tonatiuh Solana Izquierdo Gobierno Abierto para la Modernización de la Administración Pública Municipal 18 Luis Ángel López La ventaja que ha representado un Gobierno Abierto en la administración pública para el desarrollo positivo y participativo de la sociedad 19 Erika Darzee Estrada García Los pescadores cibernéticos 21 Lessli Aislinn Montero Fonseca Concurso de dibujo infantil 2021 Consejo Consultivo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de Estado de Veracruz 22 24 C.P. Rosita Martínez Facundo Los nuevos paradigmas para enfrentar la recuperación postcovid: buen gobierno y buena administración 26 Federico A. Castillo Blanco Actualización del SIGEMI-SICOM IVAI, 14 años de ser pieza clave en el combate a la corrupción y malas prácticas gubernamentales Solicitudes de Acceso a la Información IVAI lanza plataforma de “Contrataciones Abiertas” Se instala en Veracruz el PlanDAI 2021 28 30 32 35 38 12 Imagen: https://www.freepik.es E l término de Gobierno Abierto (GA) no es tan contemporáneo como se podría pensar gracias a su popularización en años recientes, realmente lo que ha sucedido es que se ha dado una reapropiación de su significado (Ruvalcaba-Gómez, 2020). En la actualidad se estima que la idea de GA está fundamentada en el uso de la tecnología para empoderar a la ciudadanía, aunado a esto, que busca una mayor colaboración entre esta última y los gobiernos para resolver los temas públicos y entregarle cuentas a ésta de las decisiones gubernamentales (Cruz-Rubio, 2015). Ahora bien, distintos autores le atribuyen características esenciales y necesarias para que se hable de la existencia real de éste, por ejemplo, Petrusic, Segedinac y Konjovic (citados en Ruvalcaba-Gómez, 2020) le adjudican: 1) transparencia, 2) participación y 3) colaboración. Bautista (2015), por ejemplo, destaca la necesidad de contar con la participación de la ciudadanía. Por su parte la OCDE (citado en Cruz-Rubio, 2015) considera que son: 1) transparencia, que implica que el actuar de las autoridades gubernamentales se encuentre bajo la evaluación de la población; 2) accesibilidad, esto es, que la ciudadanía cuente con acceso, por un lado, a los servicios públicos y, por otro, a la información acerca de éstos; y 3) receptividad, es decir, que el gobierno responda a lo solicitado por sus gobernados. Pero ¿qué es el GA? Realmente su concepción continúa en construcción (Bautista, 2015), sin embargo, Ruvalcaba-Gómez (2020) señala que hay que considerar que trasciende el concepto de democracia, a saber, no es lo único que debe existir sino que también hay que sumar otros elementos como incentivos para que la población participe y, por supuesto, una acción colaborativa entre las entidades de gobierno y la sociedad civil. Antes de entender el significado de este concepto, Ruvalcaba-Gómez (2020) invita a ver más allá de una palabra e identificar sus componentes para, así, discernir no sólo sus implicaciones sino también su acepción. A esto, se debe agregar lo que señala Cruz-Rubio (2015), esto es, que antes de describir qué es el GA es vital conocer qué cuestiones no lo son, como: 1) gobierno electrónico, 2) gobernanza electrónica, 3) datos abiertos1, 4) estrategias de rendición de cuentas o transparencia, 5) eGovernment y 6) democracia electrónica. A su vez, Meijer, Curtin y Hillebrandt (2012) expresan que el GA no sólo se trata de abrir la información al público sino que refiere a una apertura dinámica o interactiva, es decir, no sólo es tener acceso a la información sino, de igual manera, su uso como insumo para involucrase en las decisiones públicas (hacer útil la información). Hay que resaltar que ello no implica que estas ideas no se encuentren relacionadas con el GA, ya que, en alguna Georgina Rojas Flores Gobierno Abierto: más allá de un (único) elemento medida, éste tiene vínculo con otros términos o algunos le conforman como parte integral pero no exclusiva, o sea, no se pueden tratar de sinónimos, pues hay que interpretarlo como algo más complejo que una sola palabra, puesto que se requieren varios componentes para su existencia. A este respecto, Ruvalcaba-Gómez (2019) acopla dentro de la noción de GA la idea de la democracia, los preceptos de la transparencia y la rendición de cuentas, con la participación de la ciudadanía, la producción de datos abiertos y el trabajo conjunto entre gobierno y población y la utilización de la tecnología para darle más poder de decisión e intervención a la población. Así, este autor lo define como: “un nuevo modelo de interacción sociopolítica” (Ruvalcaba-Gomez, 2019, p. 6). En cambio, Cruz-Rubio lo define como: “una filosofía político administrativa y como un nevo paradigma o modelo de interacción sociopolítica” (Cruz-Rubio, 2015, p. 39), aunque este académico coincide por un lado con Ruvalcaba-Gómez (2019), igualmente expone que coexiste otra noción del término y, aunque, de cierta forma, podría tener razón en ambas, el considerarle como modelo de interacción sociopolítica hace más sentido en virtud de que el GA no implica únicamente que los gobiernos cuenten con una nueva forma de administrarse, sino que traspasa la barrera y busca esa relación bilateral entre gobierno y ciudadanía, además de que persigue, precisamente, su colaboración y participación, lo cual, le daría mayor razón de ser a la democracia representativa en la que vivimos. Si bien, el GA implica el uso de nuevas tecnologías no sólo para publicar información, sino también para entablar comunicación con la gente y empoderar a la ciudadanía para su intervención en los procesos de toma de decisión, no se puede hacer equivalente tecnología a GA, empero, ciertamente, es una de sus grandes aliadas. Con ello coinciden Hevia y Durán (2017) ya que aclaran que es un peligro confundir la idea de GA exclusivamente con desarrollo tecnológico y procesos de gestión pública. La idea de GA incluye dos frentes, por un lado, saber lo que hace el gobierno (transparencia y acceso a la información pública) y, por el otro, participar en la toma de decisiones (participación ciudadana y colaboración ciudadanía-gobierno), así: “para que un gobierno sea abierto, debe proveer información útil para los ciudadanos, y trabajar en mecanismos de participación que permitan involucrarlos en diferentes procesos de decisión pública”(Cejudo, 2019, p. 146). Un poco en coincidencia con Cejudo (2019), Meijer et al. (2012) describen dentro de la noción de GA las ideas de, por una parte, ver (o tener visión), que sería tener transparencia y acceso a la información, que esté a la vista y la puedan observar y, por otra, participar (o voz), que sería participar, involucrase, colaborar y hacerse oír a la hora de la toma de decisiones. Así, no basta con transparentar al gobierno, garantizar el derecho de acceso a la información, publicar datos abiertos y permitir que la ciudadanía le exija cuentas a sus gobernantes o con el uso de nuevas tecnologías en los servicios y actos del gobierno, sino que es de suma importancia que estas herramientas tecnológicas sirvan como un medio para que la ciudadanía sea escuchada y pueda colaborar y, a su vez, que pueda: 1) darle sentido a la información que obtiene, 2) volverla 1 Aunque éstos son parte fundamental del gobierno abierto pero no se pueden traducir como sinónimos (Ruvalcaba Gómez, 2020). llá 13 útil y 3) convertirla en un insumo para su colaboración, para que su voz sea escuchada y tomada en consideración. A su vez, que dicha información y los datos abiertos puedan ser reproducidos y divulgados sin problemas (Cejudo, 2019; Cruz-Rubio, 2015; Meijer et al., 2012; Ruvalcaba Gómez, 2020). Una de las principales críticas que se ha escuchado acerca del gobierno abierto por parte de académicos y, me atrevería a decir que incluso por parte del funcionariado público, es que es una moda para legitimar a los gobiernos, generar más aceptación y mostrarse más abiertos, transparentes e innovadores, sin embargo, lo cierto es que este principio es indispensable para pensar en gobiernos democráticos (Cejudo, 2015). La realidad es que el GA como sistema de gestión y como práctica busca generar una nueva forma de relacionarse e interactuar entre el gobierno y la sociedad, que exista una relación bilateral y no unilateral en la construcción de soluciones y la toma de decisiones, así como también, en la aplicación de las políticas públicas. Pues, el GA implica un gobierno que incorpore la transparencia y la rendición de cuentas en sus reglas, en su actuar y en su formar de administrarse, que garantice e incentive el derecho de acceso a la información pública para la ciudadanía, que propicie el uso de la tecnología, pero sobre todo que permita y coadyuve al desarrollo de una participación activa de la sociedad y, sobre todo, que dé paso a la colaboración. Referencias bibliográficas Bautista, J. (2015). Gobierno Abierto en México: Promesas y vicisitudes. Revista Análisis Plural, 133-144. Cejudo, G. (2019). Diccionario de Transparencia y Acceso a la Informapue-ción Pública. INAI. en Cruz-Rubio, C. N. (2015). ¿Qué es (y que no es) gobierno abierto? Una disos decusión conceptual. Eunomía Revista en abajoCultura de la Legalidad, (8), 37-53. ón a la poHevia, F. J., y Durán, A. (2017). ¿Gobiernos abiertos en entornos analógimodelo decos? Iniciativa de Gobierno Abierto a ba-Gómeznivel municipal y estatal en México. Reambas, elvista de Gestión Pública, VI(1), 81-110. e que Meijer, A. J., Curtin, D., y Hillebrandt, M. al entre(2012). Open government: Connecting azónvision and voice. International Review of Administrative Sciences, 78(1), 10-29. hto-tps://doi.org/10.1177/0020852311429533 se Ruvalcaba Gómez, E. A. (2020). Daviatos abiertos = Open data. EUNOMÍA. o yRevista en Cultura de la Legalidad, (18), 327. https://doi.org/10.20318/eunoormaciónmia.2020.5280 ), así: Ruvalcaba-Gomez, E. A. (2019). participa-Participación Ciudadana y Gobierno Abierto: comparando percepciones , por unaentre Sociedad Civil Organizada y Goar y,bierno en el Estado de Jalisco, México. Revista Buen Gobierno, 2. https://doi. osorg/10.35247/buengob_27_02 os Ruvalcaba-Gómez, E. A. (2020). Perque la ciu-cepción del éxito sobre gobierno abierto erlaen función del género: Un análisis desde sociedad civil organizada y gobierno. RIEM, (21), 61-87. Dr. Mario Raúl Mijares Sánchez GOBIERNO EN ACCIÓN Imagen: https://www.freepik.es L a gran confusión de una gran parte de la sociedad e incluso de especialistas en la cosa pública, es la de no tener claro los asertos sobre el quehacer cotidiano, tanto del gobierno como de su administración pública, todo ello dentro de ese todo compuesto de partes que viene siendo el Estado Mexicano. Así que, para evitar tal desconcierto, primero señalaré que el gobierno es la parte visible del Estado, y su administración pública es su brazo activo. Así, pues, el responsable del Poder Ejecutivo, en los tres niveles de gobierno, es la autoridad máxima, el cual ordena y dirige su aparato administrativo, espero que con este párrafo se termine la confusión conceptual que es muy común. Ahora también, hay que aclarar que va depender de la forma de gobierno que exista, para lograr entender cuales o cómo es que se logran tomar decisiones, sin contradecir el régimen de que se trate, así como la Carta Magna y las leyes que de ella emanen. Por lo anterior, es necesario anotar que el compromiso es de quien guía, y es llevar a buen puerto a la comunidad a la cual él preside, con acciones eficientes de parte de su estructura de lo político. Es justo comentar sobre el factor humano, el cual pocas veces se toma en cuenta, cuando son los servidores públicos quienes son la base fundamental de lograr un buen gobierno. Sin duda la política es parte esencial del ser humano. Lo anterior es dentro de una reflexión teórica sobre el hombre político, zoon politicon, sobre todo de su condición y comportamiento respecto al tipo de autoridad que lo preside, así también es transcendental señalar que la política tiene la función principal del bien común. El poseer una buena autoridad con definiciones claras, lo puede llevar a una capacidad importante de corregir acciones y errores, situación que es decisiva para lograr un buen gobierno. Ninguna sociedad pude modificar sus hábitos o patrones de vida sin la mediación del gobierno, incluso si es preciso el utilizar sus aparatos ideológicos y represivos, sobre todo en sociedades todavía cerradas o tribales, como por desgracia sucede en México. Por ello, es forzoso recalcar la necesidad de la teoría y la práctica, la cual sea conjunta, con la finalidad de primero conocer las causas de los principales problemas, para así lograr mejorar la atención al pueblo, por medio de cada uno de los garantes de la administración pública. Uno de los graves problemas que enfrenta un mal gobernante, es conducirse a través de la desconfianza no sólo de su actuar, sino de todo su aparato administrativo, por tanto, se actúa bajo el principio de la suspicacia, tanto de arriba hacia abajo como, al contrario. Esto tiene como reflejo que la misma comunidad también desconfíe de sus autoridades, de ahí los aterradores controles internos y externos, así como el exceso de normas jurídicas, las que imponen en las dependencias exprofeso, en donde en las más de las ocasiones sólo sirven para limitar la acción de los servidores públicos. Es a través de una buena autoridad, como se puede obtener una buena serie de valores y acciones que logren el bienestar en todas las dependencias, en donde se respire una calidad de vida para todos los trabajadores. Lo anterior es fundamental, para cuando el poder ejecutivo, en cualquiera de los tres niveles de gobierno, decide llevar a cabo programas sociales específicos en favor de determinada parte de la sociedad, lo realizan hombres y mujeres sensibles para lograr resultados concretos. Acorde a lo anterior, es importante contar con un buen equipo de trabajo, que sean los mejores en sus áreas de responsabilidad, no puede haber funcionarios que sepan de todo, por ello es necesario la capacitación, así como lograr una buena actitud de vida ante la atención constante de sus deberes como servidor público. Sin olvidar que para ello es necesario la gobernabilidad, cuya cualidad y deber es: la de dirigir, pilotear para llevar a buen fin los trabajos cotidianos en: salud, educación, seguridad, cultura y todo lo que tenga que ver con la buena atención. Se puede asegurar que sólo será a partir de propuestas teóricas, la única manera de que los gobiernos, puedan ser capaces de remover todo aquello que pueda descomponerse, por la falta de atención, ya sea de carácter político, económico o bien social, pues las herramientas de la ciencia política tienen que aplicarse en la práctica en cualquier realidad social. Sin duda, la corrupción y la desigualdad tendrán que acometerse con severidad por parte del responsable del gobierno en acción, siempre dentro de un respeto al orden público, lo cual llevará a recuperar la credibilidad tanto del gobernante como de su aparato administrativo. Antes de concluir, es importante que las poblaciones puedan contar con políticos que tengan la visión y misión de regir a los demás hombres, y aceptar la sugerencia de Madison, uno de los hombres que participó en la Carta magna de los Estados Unidos de América, hace más de doscientos años y que afirmó que: primero hay que capacitar al gobierno para controlar a los gobernantes. Y luego obligarlos a controlarse a sí mismo. Bibliografía Mario Raúl Mijares Sánchez, Gobiernos Generadores de Riqueza (La administración pública del futuro) EUA, Palibrio, 2012, páginas 151. Mario Raúl Mijares Sánchez, Política y Administración (Regímenes parlamentario, senatorial, y presidencial; Gestión de Calidad) EUA, Palibrio, 2017, páginas 143.