El catalanismo del excelentísimo señor don Manuel de Amat y Juniet se sintió como picado de víbora, y sin volverse hacia el impertinente comentador, contestó: — Para fachenda, holganza y truhanería, Andalucía.
Y en este torbellino de nombres y de ideas surgían como imágenes de un sueño mareador, revueltos en un caos los muertos y los vivos, y en larga, interminable y extraña procesión, obispos, reinas, chulos, civiles, monjas, cómicos, ladrones, misioneros, dinamiteros, clowns, poetas, jueces, músicos y pelotaris y héroes, en fin, cuantos ha hecho este año algún rumor, hundiéndose o alzándose, muriendo o imponiéndose, en cátedra, congreso, motín o institución; el sacro Monescillo, de dignidad modelo; Emilio, el Grande, el sumo y espléndido orador; el diestro Lagartijo, llamado por telégrafo; Sagasta, que de triunfos este año se atracó; cuantos con fe o fachenda de América vinieron a ver o hacer...
Henos, pues, instalados en la Armada. Añádase cierta fachenda y como ínfulas de mando... Seguramente ha notado usted lo erguido de su cabeza y el modo como hacía oscilar el bastón.
Sherlock Holmes rió para sí, y parecía presto a una observación, cuando Lestrade, ocupado durante el interrogatorio en examinar la habitación delantera, hizo acto de presencia, frotándose las manos con mucha fachenda.
Noches tristes y día alegre (Autobiografía, 1818). Vida y hechos del famoso caballero Don Catrín de la Fachenda (1832). El triste de altamirano (1822).
Luego se unió a una serie de septetos, entre ellos Septeto Cauto, liderado por Mozo 'Manuel' Borgella con quien se incorporo por primera vez en 1940, seguido por Septeto Hatuey, Septeto Fachenda y el famoso Sexteto Habanero.
Fernández de Lizardi, José Joaquín, Vida y hechos del famoso caballero Don Catrín de la Fachenda, Porrúa, México: 2013. en Internet Archive en Angelfire, consultado el 10 de diciembre de 2009.
Provincia de Colón: Es utilizado para tocar el Congo, Cumbia, Zambapalo y la Cachimba. Tierras altas del distrito de Penonomé: Se utiliza para tocar el Tambor, Cumbia y la Fachenda.
En 1770 había publicado su comedia Hacer que hacemos, comedia de carácter que retrata a un «fachenda», el perfecto atareado que nunca hace nada en realidad.
Denominado " Noticia individual de los sujetos y cosas que más chocan en esta ciudad de Buenos Aires ", afectaba a empleados del gobierno incluyendo entre esos sujetos y cosas a " Ibáñez el Majo " (Pascual Ibáñez, Sargento Mayor de la Plaza), a " lo tieso de Velasco " (Sebastián Velasco, Oidor de la Real Audiencia), a " la cara asustada de Zenzano " (José Zenzano, Escribano de Gobierno) y a " la fachenda del Contador de Exército, y las narices de su mujer " (Francisco de Cabrera, Contador también de la Real Hacienda y su consorte Josefa Ortíz).