tardo

(redireccionado de tardas)
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  • adjetivo

Sinónimos para tardo

Diccionario Manual de Sinónimos y Antónimos Vox © 2022 Larousse Editorial, S.L.
Ejemplos ?
—Pues vamos donde quisieres. —Sígueme, pues, que ya tardas. — Siguióla contento Adolfo y a una señal de la Maga, de aquella anchurosa fuente dividiéndose la taza, tornóse en un canastillo que se columpia y resbala de un claro y tranquilo río por sobre las ondas mansas; y entrándose confiados en tan vacilante barca, dejáronse ir sin recelo a los caprichos del agua.
Aquí me estoy, Señor, con la cara caída sobre el polvo, parlándote un crepúsculo entero, o todos los crepúsculos a que alcance la vida, si tardas en decirme la palabra que espero.
Marcó las once un reloj, sonaron tardas y cóncavas de las once campanadas las once pesadas notas, y al par que en la callejuela los cinco se desembozan, alumbrándola por dentro, luz a una puerta se asoma.
MUZA: No hay otro; mientras él viva, condesa, prendidos tenemos ambos en un hilo la existencia. Mi amor para ti es sin freno: te adoro, sultana bella, y si en decidirte tardas, sin ti me parto a mi tierra.
Y así, al dejar el arroyo, me determiné a seguirla y hablarla; bien que, al mirarla, torpes, tardas y remisas fueron mis voces, por que un amor mejor se explica cuando no acierta a explicarse, que en su dulce tiranía las palabras mal formadas son señal de bien sentidas.
Es separarme de ti llevarme a una muerte cierta: luz de mis ojos, el mundo sin ellos está en tinieblas: sin freno en esta pasión, te adoro, sultana bella, y si en decidirte tardas, morir sin ti será fuerza.
Todo lo cual no nos priva de ensalzar las ventajas que tienen los Cármenes de Granada sobre las estepas de Rusia, ni de empeñarnos en que usen tirillas y fraque las kabilas de Anghera, y en que dejen sus tardas yuntas por las veloces locomotoras nuestros patriarcales campesinos...
Tú eres dichoso y bienaventurado, pues que por su propia voluntad nuestra diosa santa te ha juzgado y escogido por hombre digno para su servicio; así que, pues esto así es, ¿por qué te tardas y no despachas presto?
Si yo lo que quiero es que te vengas de buena voluntá; si esto que a mí me pasa no le pasa a nadie; esto de que yo viva en un majuelo y mi paloma en un olivar, eso no lo manda un divé, y yo me voy a morir de ducas y de jachares si tú tardas mucho en venirte conmigo; porque yo no pueo vivir sino teniéndote a la mía verita, y arrullándote y queriéndote, y respirando lo que tú respiras y mirándome en las niñas de tus ojitos serranos.
¡No te entiendo! GARCÍA. ¿Es menester al fin que rompa yo el fuego? VIGO. Ya tardas. GARCÍA. Pero que luego no te vayas a ofender. VIGO.
Flor de mis vergeles, abre, »Que si tardas en abrir »Te apresuras en matarme.» -«¿Cómo te he de abrir mis puertas »Si no te conozco...?
¿No hay a salvarme poder?— Y allá desde el presbiterio, de las rejas al través, oyó una voz que decía: —Sí, te conozco, mi bien: abre; ¿qué tardas?