Principio de Presunción de Inocencia
Principio de Presunción de Inocencia
Principio de Presunción de Inocencia
Serie Amarilla
4
Oscar Uribe Bentez
*
EL PRINCIPIO DE PRESUNCIN DE INOCENCIA Y LA
PROBABLE RESPONSABILIDAD
Derechos Reservados 2007
ISSN 1870 - 7262
La reproduccin parcial o total de este libro, sin la autorizacin
previa de la Cmara de Diputados, dar lugar a las sanciones
previstas por la ley.
*
Licenciado en Derecho por la Universidad Nacional Autnoma de Mxico,
Investigador A del Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones
Parlamentarias.
5
Serie Amarilla
6
Presidente de la Cmara de Diputados
Dip. Mara Elena lvarez Bernal
Junta de Coordinacin Poltca
Presidente
Dip. Emilio Gamboa Patrn
Integrantes
Dip. Hctor Larios Crdova
Dip. Javier Gonzlez Garza
Dip. Gloria Lavara Meja
Dip. Alejandro Chanona Burguete
Dip. Ricardo Cant Garza
Dip. Miguel ngel Jimnez Godnez
Dip. Ada Marina Arviz Rivas
Secretario General
Dr. Guillermo Javier Haro Blchez
Secretario de Servicios Parlamentarios
Lic. Emilio Surez Licona
Secretario de Servicios Administratvos
Y Financieros
Lic. Rodolfo Noble San Romn
Director General del Centro de
Estudios de Derecho e
Investgaciones Parlamentarias
Dr. Alfredo Salgado Loyo
Coordinacin y Revisin Editorial
Lic. Luis Alfonso Camacho Gonzlez
Lic. Gustavo Moreno Snchez
Portada y Diseo Interior
Humberto Ayala Lpez
7
Serie Amarilla
*
EL CONTENIDO DEL TRABAJO DE INVESTIGACIN QUE SE PUBLICA, AS COMO LAS IMPRESIONES Y
GRFICAS UTILIZADAS, SON RESPONSABILIDAD DEL AUTOR, LO CUAL NO REFLEJA NECESARIAMENTE
EL CRITERIO EDITORIAL.
Comit del Centro de Estudios de Derecho e
Investgaciones Parlamentarias
Presidente
Dip. Alfredo Ros Camarena
Secretarios
Dip. Mario Eduardo Moreno lvarez
Dip. Camerino Eleazar Mrquez Madrid
Integrantes
Dip. Alberto Amaro Corona
Dip. Valentna Valia Batres Guadarrama
Dip. Omar Antonio Borboa Becerra
Dip. Felipe Borrego Estrada
Dip. Carlos Chaurand Arzate
Dip. Martha Cecilia Daz Gordillo
Dip. Jaime Espejel Lazcano
Dip. Silvano Garay Ulloa
Dip. Jos Jacques y Medina
Dip. Antonio Xavier Lpez Adame
Dip. Gustavo Macas Zambrano
Dip. Miguel ngel Monraz Ibarra
Dip. Carlos Alberto Navarro Sugich
Dip. Vctor Samuel Palma Csar
Dip. Lourdes Quiones Canales
Dip. Carlos Ren Snchez Gil
8
9
Serie Amarilla
NDICE
Pg.
CAPTULO I
EL PRINCIPIO DE PRESUNCIN DE INOCENCIA. 11
1. Bosquejo histrico. 11
2. Antecedentes nacionales. 23
3. Regulacin legal en Mxico del principio de presuncin de
inocencia.
24
a) Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos. 24
b) Convencin Americana sobre Derechos Humanos. 25
4. La Suprema Corte de Justicia de la Nacin y el principio de
presuncin de inocencia.
26
5. Conceptos acerca del principio de presuncin de inocencia. 31
a) En el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin. 31
b) En los Tratados suscritos por Mxico. 31
c) En la doctrina nacional. 32
d) En la doctrina extranjera. 32
6. Anlisis de los diversos conceptos del principio de presuncin de
inocencia a la luz de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos
Mexicanos, del Poder Judicial de la Federacin y de la doctrina
nacional y extranjera.
36
a) Es un principio. 36
a.1. En la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos. 36
a.2. En la interpretacin del Poder Judicial de la Federacin. 37
a.2.1. En el Pleno. 37
a.2.2. En la Tercera Sala. 38
a.2.3. En los Tribunales Colegiados de Circuito. 40
a.3. En la doctrina nacional. 42
a.4 en la doctrina extranjera. 44
b) Es un principio universal. 46
c) Es una garanta judicial. 46
d) Es un derecho sustantivo fundamental. 48
e) Es una garanta individual. 48
f) Es un criterio informador del ordenamiento procesal penal. 50
g) Es un derecho subjetivo pblico. 50
h) Es una garanta bsica, regla de tratamiento del imputado y de
la prueba.
51
7. Un concepto diferente del principio de presuncin de inocencia. 52
8. La presuncin en el principio de inocencia. 55
10
CAPTULO II
LA PROBABLE RESPONSABILIDAD. 65
1. Antecedentes constitucionales. 65
a) Constitucin Poltica de la Monarqua Espaola. 65
b) Constitucin Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1824. 66
c) Leyes constitucionales de 1836. 66
d) Constitucin Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1857. 67
e) Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos de 1917. 68
f) Reformas constitucionales a los artculos 16 y 19. 69
f.1. Reforma de 3 de septiembre de 1993. 69
f.2 Reforma de 8 de marzo de 1999. 69
2. Antecedentes legislativos procesales. 70
a) Anteriores a la independencia de Mxico. 70
b) Posteriores a la independencia de Mxico. 71
3. Antecedentes legislativos sustantivos posteriores a la
independencia de Mxico.
79
a) Cdigo Penal para el Distrito Federal y Territorio de la Baja
California sobre delitos del fuero comn y para toda la Repblica
sobre delitos contra la Federacin de 1871.
79
b) Cdigo Penal para el Distrito y Territorios Federales de 1929. 80
c) Cdigo Penal para el Distrito Federal y Territorios Federales en
materia de fuero comn y para toda la Repblica en materia de fuero
federal de 1931.
80
d) Texto actual de los artculos 10 y 13 del Cdigo Penal Federal. 81
4. Interpretacin del Poder Judicial de la Federacin. 81
a) En el Pleno. 81
b) En las Salas. 83
c) En los Tribunales Colegiados de Circuito. 84
5. En la doctrina nacional y extranjera. 90
a) Autores de derecho constitucional. 91
b) Autores de derecho procesal. 92
c) En las teoras de los sistemas del delito. 94
c.1 Sistema clsico o causalista. 94
c.2 Sistema neoclsico. 94
c.3 Sistema fnalista. 96
c.4 Sistema funcionalista. 97
FUENTES DE CONSULTA 101
11
Serie Amarilla
CAPTULO I
EL PRINCIPIO DE PRESUNCIN DE INOCENCIA
1. Bosquejo histrico. El prestgiado jurista italiano Luigi Ferrajoli,
asevera que el principio de presuncin de inocencia proviene del
derecho romano, basndose en tres fuentes, a saber:
a) Los escritos de Trajano: Status esse impunitum relinqui facinus
nocents, quam innocentem dammare (Ulpianus, 10 de ofcio
proconsulis, D. 48.19.5); (Es mejor dejar impune un delito, que
condenar a un inocente)
b) La mxima de Pablo (69 ad edictum): ei incumbit probato qui
dicit non qui negat. D. 22.3.2) (Le incumbe probar a quien afrma,
no a quien niega); y en
c)Los brocrdicos medievales: afrmant non negant incumbit
probato y actore non probante reus absolvitur.
1
(Le incumbe
probar a quien afrma, no a quien niega. Si el actor no prueba, el
reo debe ser absuelto).
Con objeto de comprender ms acerca de las anteriores fuentes,
consideramos oportuno mencionar lo siguiente:
Trajano fue emperador romano del ao 98 al 117 d.C.
2
, cuyo escrito
mencionado en el anterior inciso a) tene como fuente el Digesto y
llega a nosotros por el jurisconsulto Ulpiano.
Este emperador nombr a Plinio, el joven, gobernador de la
provincia de Bitnia-Ponto, quien acostumbraba pedir instrucciones
a travs de epstolas, que consttuyen tambin una fuente de
informacin en torno a Trajano. Este acervo de comunicacin se
encuentra ordenado en libros; en el identfcado con el nmero X,
se contenen las cartas 96 y 97, de Plinio y Trajano, respectvamente.
En la carta 96, Plinio le expresa a Trajano: Que no ha partcipado en
procesos contra los cristanos, por ello desconoce las actvidades y en
qu medida suelen castgarse e investgarse. Que tene duda si existe
1
Ferrajoli, Luigi, Derecho y razn. Teora del garantismo penal, sexta edicin,
editorial Trotta, Madrid, Espaa, 2004, pg. 550 y nota de pie de pgina 12 en pg. 625.
2
Ferril, Arther, La cada del Imperio Romano, editorial Edaf, S.A., Madrid, Espaa,
1998, pg. 287.
12
alguna diferencia en cuanto a la edad o no la existe entre la terna
infancia y los adultos; si se concede el perdn al arrepentmiento o si no
le sirve de nada al que ha sido cristano el haber dejado de serlo; si se
castga el nombre mismo, aunque carezca de delito o los delitos estn
implcitos en el nombre. Que ha seguido el siguiente procedimiento
a los que han trado ante l como cristanos: les pregunta si son
cristanos, si le contestan que s, les pregunta por segunda y tercera
ocasin amenazndoles con el suplicio; a los que insistan orden que
fuesen ejecutados. Que no tena duda de que, con independencia de
lo que confesasen, esa pertnacia e infexible obstnacin deba ser
castgada. Que hubo otros posedos de semejante locura que anot
que deban ser enviados a Roma, puesto que eran ciudadanos
romanos. En el desarrollo de la investgacin le fue presentado un
panfeto annimo conteniendo nombres de muchas personas, quienes
decan que no eran ni haban sido cristanos, por lo cual decidi que
fuesen puestos en libertad despus de que invocaban a los dioses. Los
cristanos afrmaban que toda su culpa o error haba sido el tener la
costumbre de reunirse un da determinado antes del amanecer y de
entonar entre s un himno en honor a Cristo, como si fuese un Dios,
y ligarse por un juramento no para tramar algn crimen, despus
se separaban y reunan para tomar alimento, normal e inofensivo;
que esto lo haban dejado de hacer despus de su edicto, en el que,
segn las instrucciones de Trajano, haba prohibido las hermandades
secretas, razn por la cual aplaz la audiencia para consultarlo.
Trajano le contest: Que haba seguido el procedimiento que
deba, en los casos en que fueron llevados ante l como cristanos.
Que no puede establecerse una regla con valor general que tenga
una forma concreta. No han de ser perseguidos; si son denunciados
y encontrados culpables, han de ser castgados, de tal manera, sin
embargo, que quien haya negado ser cristano o lo haga evidente
con hechos, o sea, suplicando a nuestros dioses, consiga el perdn
por su arrepentmiento aunque haya sido sospechoso en el pasado.
Los panfetos annimos no deben tener cabida en ninguna acusacin.
3
A este respecto, recordemos que Roma a pesar de tener a sus
dioses, era tolerante en la religin, dio libertad de culto a los cristanos,
quienes combinaron el nacionalismo y el fanatsmo: la nacin de los
judos estaba destnada a dominar el mundo y Jehov era dueo de la
3
Plinio el joven, Cartas, editorial Gredos, S.A., Madrid, Espaa, 2005, pgs. 557 a 561.
13
Serie Amarilla
mente de todos los hombres. Al distnguir el pueblo romano entre el
cristanismo y el judasmo, el gobierno del emperador Nern inici la
persecucin en contra de los cristanos que los tenan como inmorales
y canbales. Al parecer, en los dos primeros siglos despus de Cristo
no hubo un edicto general contra el cristanismo. En los siglos III y IV
al gobierno romano le interesaba ms su unidad. Posteriormente, se
toler y neutraliz, para fnalmente proscribir el paganismo y adoptar
la religin cristana impulsada por el emperador Constantno.
4
En cuanto a Pablo, en latn Iulius Paulus, jurisconsulto del siglo III d.
de C., adems de su mxima referida en el inciso b) que antecede: ei
incumbit probato qui dicit non qui negat. D. 22.3.2) (Le incumbe probar
a quien afrma, no a quien niega), tene otras, tales como Confessus
pro indicato est, qui quodammodo sua sententa damnatur, Digesto
42.1 50.1 (El confeso se tene por juzgado, el cual en cierto modo ha
declarado su sentencia). Y Confteri quis in indicio non tantum sua
voce, sed et literis et quacumque modum potest, sententa Va, 3.
(Cualquiera puede confesar en juicio no slo con la voz, sino por escrito
o de cualquier otro modo).
5
Y en lo que se refere a los brocrdicos medievales, segn el
diccionario de la lengua espaola de la Real Academia Espaola, es una
palabra en desuso que se utlizaba entre los profesores de derecho,
cuyo signifcado es sentencia, axioma legal o refrn.
En efecto, los brocardae, argumenta o notabilia, son una rama de la
literatura que responde a las necesidades de la enseanza medieval del
derecho romano, que consisten en principios resumidos de derecho, que
a veces suenan como proverbios, concisos, poderosos y rtmicos, como
trompetas del ltmo juicio, en cuyo caso se suele hablar de brocardae.
6
Con la anterior informacin adicional, se puede apreciar que
las fuentes a) y b) que nos refere Ferrajoli, segn del principio de
presuncin de inocencia, provienen del Digesto, tambin llamado
Pandectas, que consiste en una antologa de citas, tomada de unos
4
Cfr. Barrow, R. H., Los romanos, decimosexta reimpresin, editorial Fondo de
Cultura Econmica, Mxico, 1994, pgs. 180 a 191.
5
Vase frases y citas latinas en la direccin electrnica http://latn.dechile.net/?Paulo.
6
Margadant, Guillermo F., La segunda vida del derecho romano, primera edicin,
editorial Miguel ngel Porra, S.A., Mxico, 1986, pgs. 106 a 108. Nos da como
ejemplo de la brocardae la que defne la propiedad como ius fruendi, utendi, abutendi.
14
2000 libros de la inmensa literatura clsica.
7
Por tanto, dichas fuentes
y la del inciso c) que antecede, corresponden a la literatura jurdica
de prominentes jurisconsultos y no a textos legales. Pero, adems, en
las cartas de Plinio y Trajano, se advierte que este emperador orden
el castgo de quien fuera culpable de ser cristano, previa denuncia,
juicio y pruebas, aunque no hubiese cometdo algn delito, lo cual es
incompatble con el principio de presuncin de inocencia, que implica
la existencia de una ley que contempla delitos, con respecto a los
cuales se presume que todo ciudadano es inocente hasta en tanto le
sea demostrada su culpabilidad.
As tambin, se vislumbra lo cuestonable de que el principio
de presuncin de inocencia se remonta al derecho romano, por las
siguientes mximas, principios, proposiciones, reglas, opiniones,
sentencias, doctrina y brocrdicos de los jurisconsultos: Es mejor dejar
impune un delito, que condenar a un inocente. Le incumbe probar a
quien afrma, no a quien niega. Le incumbe probar a quien afrma, no
a quien niega. Si el actor no prueba, el reo debe ser absuelto.
Ciertamente, ya que se referen a la manera en que debe de actuar
el juzgador al dictar sentencia; a la obligacin probatoria de las partes
y a su consecuencia en caso de incumplimiento por parte del actor o
denunciante. Es decir, la mxima Es mejor dejar impune un delito,
que condenar a un inocente, dista de ser una proposicin jurdica,
pues ms bien es una regla tca dirigida al juzgador, de la que no se
deriva un derecho del acusado a que se presuma su inocencia, ya que
el ncleo de esta norma tca es la accin de decidir del juez, a la cual
se le pretende guiar por la impunidad del delito que por la condena
de un inocente, ms no por un derecho de presuncin de inocencia.
Y en lo tocante a la mximas Le incumbe probar a quien afrma, no a
quien niega. Si el actor no prueba, el reo debe ser absuelto, son reglas
que fueron recogidas por los textos legales para imponer la obligacin
de probar lo que se afrma, independientemente de si quien realiza la
aseveracin es el actor o el demandado o reo, cuyo incumplimiento
deriva una consecuencia jurdica solamente en detrimento del actor,
que consiste en que el demandado o reo debe ser absuelto, pues
si ste incumple con la susodicha obligacin no le genera ninguna
consecuencia jurdica adversa. En estas mximas se advierte una
regla de igualdad de carga probatoria, pero tambin consecuencias
7
Ibid., pg. 52.
15
Serie Amarilla
jurdicas diversas para quien las incumple; de lo que se colige que
las partes tenen esa misma obligacin en lo que hoy denominamos
proceso, y otros juicio, mientras que el juez tene el deber de vigilar
el cumplimiento de la misma y de aplicar la consecuencia en caso de
incumplimiento por el actor: absolver al reo.
Esta consecuencia jurdica actualmente en materia civil en
Mxico, como en la antgedad, se debe a que no se puede condenar
al demandado, tambin denominado reo en los textos legales, si no
prueba los elementos de la accin que ejercita, de lo cual no se puede
desprender que desde el inicio del proceso o juicio el demandado tenga
el derecho a que se presuma su inocencia, sino que de la actvidad
probatoria de las partes depende el deber del juez de condenar o
absolver, ms no de un derecho anterior a esa actvidad. La aludida
consecuencia jurdica de absolver al inculpado actualmente en materia
penal en nuestra legislacin, como en el derecho romano, es porque
tampoco es posible condenar a un ciudadano sin pruebas, pero no por
virtud de un supuesto derecho de presuncin de inocencia. En nuestro
caso, el Ministerio Pblico debe comprobar el cuerpo del delito y la
probable responsabilidad del inculpado para que pueda ejercitar la
accin penal, solicitando se libre orden de aprehensin, en caso de que
lo haga sin detenido; o se dicte auto de formal prisin, en el supuesto
de que remita al detenido. Si el Ministerio Pblico no cumple con tal
exigencia de ndole consttucional, la consecuencia jurdica es el del
deber del juez de negar la orden de aprehensin o el auto de formal
prisin, quien si lo incumple se actualiza para el inculpado el derecho
de impugnar ante el superior jerrquico la decisin que orden su
aprehensin o su formal prisin, o bien, impugnarla a travs del juicio
de amparo indirecto; decisin de la que se cuestonar la validez y la
efcacia del material probatorio que le sirvi de sustento, por violacin
a las reglas a los que est sujeto y a los principios de la lgica, de la
experiencia y de la ciencia, pero no por violacin a un derecho de
presuncin de inocencia. Y si se opta por el juicio de amparo indirecto,
en la demanda el quejoso tene que aducir la violacin, en forma
directa o indirecta, de algn derecho fundamental o garanta individual
prevista en la Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos,
en la que por cierto no se contempla expresamente la presuncin de
inocencia como derecho fundamental.
Una signifcatva diferencia entre el derecho romano y el actual
16
nuestro, es que en aquella gloriosa civilizacin el ciudadano no poda
ser condenado sin previo juicio, mientras que al que no lo era se le
poda condenar sin previo juicio y ejecutar la sancin ipso facto. En
el nuestro, el ciudadano o el extranjero para ser condenado debe
instrursele previo juicio con pleno goce de sus derechos de defensa,
excepto cuando este ltmo se encuentre en el supuesto previsto en el
artculo 33 consttucional. Otra gran diferencia es que en Roma exista
la insttucin de la esclavitud.
En Roma la Diosa Themis, dice Crysipo, tena tres caras: una cruel y
ciega con ojos vendados. Otra sin la faja negra, era benigna y equitatva.
Y la tercera, era una cara seria y enojada, estaba oscura por la sombra
de una espada, que la diosa llevaba siempre en sus manos. De la cara
cruel y ciega, registra la historia que en la ciudad de Frentano estaba
prohibido a los extranjeros subir en la noche a las murallas, bajo pena
capital. Un ciudadano de Capua cansado por el viaje pernoct en esa
ciudad, pero en la noche el sofocante calor lo despert y subi a la
muralla en busca de una agradable brisa que soplaba del mar; observ
que los Teanios de Abulia estaban intentando tomar de sorpresa la
ciudad, por lo que se apresur a avisar de ello. Al da siguiente, los
magistrados de Frentano le dieron las gracias al husped de Capua y el
ttulo de Salvador de la Patria, as como una gran festa, pero tambin
ese da lo procesaron y condenaron: le cortaron la cabeza, por infringir
la ley que prohiba a los extranjeros subir a la muralla. De la cara
sin venda, benigna y equitatva, refere Valerio Mximo que cuando
Dolabella era procnsul en Cilicia, presentaron ante su tribunal a una
mujer que envenen a su marido, lo cual no neg y crey justo porque
su marido dio muerte al hijo de su primer matrimonio. El procnsul por
lo delicado del asunto, lo remit al tribunal de Atenas, los aeropagitas
consideraron injusto dejar impune un asesinato, pero tambin castgar
a una culpable digna de perdn, por lo que resolvieron prorrogar el
juicio y decretaron que la acusada fuera citada para or sentencia cien
aos despus. Y en cuanto a la tercera cara, seria y enojada, refere
Frontno que M. Catn en su calidad de jefe de la fota romana, dio la
orden tres veces de dejar una playa enemiga y elev anclas, pero un
marinero se atras y pidi que lo recogieran. Catn dio la orden de
regresar y levantarlo, pero luego orden el suplicio, es decir, prefri que
sirviera de ejemplo a su ejrcito y no vctma del enemigo. Asimismo,
refere que Pisn en un momento de ira orden que llevaran al suplicio
17
Serie Amarilla
a un soldado, que haba vuelto del forrajero sin su compaero, porque
a ste le haba dado muerte al no poder presentar a su compaero, el
cual apareci cuando iba ser ejecutado el condenado. El Centurin,
encargado del suplicio, suspendi la ejecucin y llev al condenado
ante el general para demostrar su inocencia. Pisn orden llevar al
suplicio al que no se haba ejecutado, porque ya lo haba condenado;
al compaero que no haba sido muerto, por haber sido causa de la
condena de su compaero; y al Centurin que no ejecut la pena
porque no obedeci la orden de su general.
8
Sin embargo, el brillante y respetable jurista italiano Luigi Ferrajoli,
contna ensendonos que en la Edad Media el principio de presuncin
de inocencia fue invertdo por las prctcas inquisitvas, es decir, por
el principio de presuncin de culpabilidad, pues en el proceso penal
de esa poca si no haba pruebas sufcientes, pero s la sospecha o
duda de culpabilidad, estos ltmos supuestos eran equiparados a una
semi-prueba, que implicaba un juicio de semi-culpabilidad y una semi-
condena a una pena leve.
9
En la Edad Moderna, Thomas Hobbes cuestona Cmo puede
haber un delito para el que no hay sentencia y cmo puede infingirse
una pena sin una sentencia previa?. Y Pufendorf en su defnicin
de pena seal el hecho de ser irrogada post cognitonem delict.
10
El marqus de Beccaria apunt que un hombre no puede ser
llamado reo antes de la sentencia del juez, ni la sociedad puede quitarle
la pblica proteccin sino cuando est decidido que ha violado los
pactos bajo los cuales le fue concedida.
11
Respecto a la denominacin de reo, Mommsen al abordar el
procedimiento por jurados bajo la presidencia de un magistrado,
que era el procedimiento penal ordinario en la poca del principado
romano, refere que la voz accusator se refera al procedimiento
penal, a lo menos preferentemente; en cambio, no se conoca en este
mismo procedimiento palabra alguna que sirviese para designar en
general al demandado o acusado. Reus, por razn de su procedencia
etmolgica, no signifcaba ms sino la parte en el procedimiento
8
Zoltan Mehesz, Kornel, Roma corrupta, Roma perversa, primera edicin, editorial
Porra, S.A. de C.V., Mxico, 2003, pgs. 77 a 79.
9
Ferrajoli, Luigi, op. cit., pg. 550.
10
Idem.
11
Idem.
18
privado, cualquiera que fuese la forma de este y el papel que en
el mismo correspondiera desempear a cada una de las partes; en
efecto, res, de donde reus se deriva, era una palabra que se aplicaba
frecuentemente, igual que nosotros lo hacemos con la palabra cosa,
a las cosas jurdicas con especialidad. El nombre de reus dej de
usarse muy pronto con aplicacin al demandante y qued solo para
el demandado, por regla general, pero sin distnguir, a lo menos en el
uso jurdico, entre el demandado del juicio civil y el del juicio penal.
12
Efectvamente, inclusive en los principios generales de derecho
universal pervive la expresin latna in dubio pro reo, que signifca
en materia penal que en caso de duda se debe favorecer al
reo, tratndose del dictado de una sentencia, en absolverlo por
falta de pruebas sufcientes; o bien, favorecerlo en la aplicacin
de la ley ms benigna aunque sea sta en forma retroactva.
En el derecho mexicano tenemos ese resabio de designar con la
palabra reo al demandado, en el derecho procesal civil, y al inculpado,
en el derecho procesal penal y derecho penal. Por ejemplo, el artculo
81 del Cdigo Federal de Procedimientos Civiles, establece: El actor
debe probar los hechos consttutvos de su accin y el reo los de sus
excepciones. El Cdigo Federal de Procedimientos Penales y Cdigo
Penal Federal, ambos en vigor, se han depurado y cuidado en no
utlizar la palabra reo con respecto de un procesado que no ha sido
condenado por sentencia defnitva.
De cualquier forma, si entendemos el aspecto histrico de la palabra
reo, aunque an aparezca en los cdigos procesales, civiles, penales,
etc., con un sentdo cargado del prejuicio de que el demandado o el
inculpado ya fueron condenados, es absolutamente intrascendente
desde el punto de vista jurdico, porque la denominacin de reo
no anula ni merma los derechos fundamentales ni las garantas
individuales. La utlizacin actualmente del vocablo reo, genera un
conficto etmolgico y semntco, que es conveniente resolver a fn
de evitar palabras que contenen conceptos que encierran juicios
antcipados con cierto desdn desde el punto de vista semntco.
Por nuestra parte, estmamos que tambin es pertnente sealar,
que el referido marqus de Beccaria seal: La prisin es una pena que
necesariamente debe de preceder, a diferencia de cualquier otra, a la
12
Mommsen, Teodoro, Derecho Penal Romano, reimpresin, editorial Temis, Bo-
got, Colombia, 1991, pgs. 131 y 132.
19
Serie Amarilla
declaracin del delito . La ley, pues, sealar los indicios de un delito
que merezcan la custodia del reo, que lo sometan a una investgacin
y a una pena. La pblica fama, la huida, la confesin extrajudicial, la
de un compaero de delito, las amenazas y la constante enemistad
con el ofendido, el cuerpo del delito y otros indicios semejantes, son
pruebas sufcientes para proceder a la prisin de un ciudadano. Pero
estas pruebas deben ser establecidas por la ley y no por los jueces
.Un hombre acusado de un delito, encarcelado y absuelto, no debiera
llevar consigo ninguna nota de infamia. Cul es, pues, el derecho,
sino el de la fuerza, que concede poder a un juez para aplicar una
pena a un ciudadano mientras se duda si es culpable o inocente. No
es nuevo este dilema: o el delito es cierto o incierto; si es cierto, no le
corresponde otra pena que la establecida en la ley, y los tormentos son
intles en tal caso, como intl es la confesin del reo; si es incierto, no
se debe atormentar a un inocente, porque tal es segn las leyes un
hombre cuyos delitos no estn probados.
13
Cuanto ms pronta y ms cercana al delito sea la pena, ser ms
justa y ms tl. Digo ms justa, porque ahorra al reo los intles y feroces
tormentos de la incertdumbre, que creen con el vigor de la imaginacin
y con el sentmiento de la propia debilidad; ms justa, porque siendo una
pena la privacin de la libertad, no puede preceder a la sentencia, salvo
cuando la necesidad lo exija. La crcel es, pues, la simple custodia de
un ciudadano hasta que sea juzgado culpable; y siendo esta custodia
esencialmente penosa, debe durar el menor tempo posible y ser lo
menos dura posible . El rigor de la crcel debe ser slo el necesario
para impedir la fuga o para que no se oculten las pruebas de los delitos.
El proceso mismo debe terminarse en el ms breve tempo posible.
14
Beccaria en el anterior pensamiento, si bien est en desacuerdo
con la privacin de la libertad antcipada a la pena, tambin sostene
que los indicios reconocidos por la ley son pruebas sufcientes para la
prisin de un ciudadano, con lo que se impide la fuga o que se oculten
las pruebas. La crcel es la custodia de un ciudadano hasta que sea
juzgado culpable. Es decir, si no hay indicios legales no amerita la prisin
y al no darse esta no se declara culpable a ningn ciudadano. De esto
no se puede desprender que si hay indicios legales, o bien si no los
13
Beccaria Bonesana, Cesare, De los delitos y las penas, editorial Folio, Barcelona,
Espaa, 2002, pgs. 52 y 60.
14
Ibid., pg. 81.
20
hay, de cualquier forma deba considerarse a todo ciudadano inocente.
Segn Luigi Ferrajoli, qued establecida la presuncin de inocencia
por el artculo 8 de la Consttucin de Virginia, as como en los artculos
7 y 9 de la Declaracin de los Derechos del Hombre de 1789, al disponer
lo siguiente:
Artculo 8, Que nadie sea privado de su libertad, salvo por mandato
de la ley del pas o por juicio de sus iguales.
Artculo 7, Nadie puede ser acusado, arrestado o detenido, ms que
en los casos determinados y segn la forma que esta prescribe.
Artculo 9, Toda persona se presume inocente hasta que sea
declarada culpable.
15
Las anteriores prescripciones legales de la Declaracin de los
Derechos del Hombre y del Ciudadano de 26 de agosto de 1789, al
parecer no estn completas.
En efecto, pues la relatva al artculo 7 es del tenor siguiente:
Ningn hombre puede ser acusado, arrestado ni detenido, ms
que en los casos determinados por la Ley, y segn las formas prescritas
por ella. Los que solicitan, expidan, ejercitan o hacen ejecutar rdenes
arbitrarias deben ser castgados; pero todo ciudadano reclamado
o aprehendido en virtud de la Ley debe obedecer al instante: si se
resiste, se hace culpable.
16
El artculo 9 reza lo siguiente: Al presumirse que todo hombre
es inocente en tanto no haya sido declarado culpable, si se estmara
indispensable detenerle, todo rigor que no sea necesario para
asegurarse de su persona debe ser severamente reprimido por la Ley.
17
Esta precisin del contenido de los anteriores artculos, hace
la diferencia en el alcance de los mismos. Efectvamente, ya que en
el artculo 7 tambin se menciona que si el ciudadano se resiste a
obedecer el reclamo o aprehensin de su persona por virtud de la
ley, se hace culpable. Es decir, la propia Declaracin de los Derechos
del Hombre y del Ciudadano, establece un supuesto de culpabilidad
sin haber sido procesado ni sentenciado el ciudadano, el cual es una
excepcin a la presuncin de inocencia, pero adems sta no obsta
15
Ferrajoli, Luigi, opus cit., pg. 550 y nota de pie de pgina 18 en la pg. 626.
16
Jellinek, Georg, La Declaracin de los Derechos del Hombre y del Ciudadano,
segunda edicin, Universidad Nacional Autnoma de Mxico, Mxico, 2003, pg.
198.
17
Idem.
21
Serie Amarilla
para que la persona sea detenida.
El anterior supuesto de culpabilidad tene sus antecedentes en
las propuestas que realizaron diversos partcipantes para elaborar la
mencionada Declaracin, como por ejemplo las siguientes:
La del Abate Sieys, quien propuso como artculo decimonoveno
que: Cualquier ciudadano llamado o aprehendido en nombre de la ley,
debe obedecer de inmediato. Se vuelve culpable si ofrece resistencia.
18
La del Conde de Custne, que fue en los mismos trminos que la
de Sieys.
19
La de Gouges-Cartou, diputado de los seis senescalados de Quercy,
que propuso como artculo vigsimo lo siguiente: As, cualquier
ciudadano citado o aprehendido en nombre de la ley se vuelve culpable
si ofrece resistencia.
20
La de Rabaut Saint-tenne, quien en el artculo primero, ltmo
prrafo, del proyecto de la Consttucin Francesa, propuso Que todo
ciudadano, citado o aprehendido en nombre de la ley, debe obedecer
de inmediato; se vuelve culpable si ofrece resistencia.
21
La de Boislandry, que propuso en su artculo primero, numeral 24, que
Ningn hombre, ningn funcionario del poder ejecutvo, ningn cuerpo,
ningn conjunto de hombres, tenen derecho a atentar contra la libertad,
contra la propiedad, la vida del ciudadano, aun cuando sea presunto
culpable de algn crimen, si no es en virtud de una ley solemnemente
promulgada y de acuerdo con las formas que sta ha prescrito.
22
Esta ltma propuesta es de grado con relacin a las anteriores,
pues mientras las dems se referen a la culpabilidad, la de nuestra
atencin a la de presuncin de culpabilidad, pero todas ellas proponen
la privacin de libertad bajo la forma prevista en la ley, como excepcin
a la pena de prisin seguida de una sentencia condenatoria, as como
en la Consttucin de Francia de 1793.
Efectvamente, en la Consttucin de Francia del 24 de junio de
1793, se dispuso: lo siguiente:
Artculo dcimo. Nadie debe ser acusado, ni arrestado ni detenido,
18
Faur, Christine, Las declaraciones de los derechos del hombre de 1789, segunda
reimpresin, editorial Fondo de Cultura Econmica, Mxico, 1999, pgs. 93 y 199.
19
Ibid., pg. 151.
20
Ibid., pg. 191.
21
Ibid., pg. 265.
22
Ibid., pg. 270.
22
salvo en los casos determinados por la ley y siguiendo las formas que
sta ha prescrito. Cualquier ciudadano llamado o aprehendido por la
autoridad de la ley, debe obedecer de inmediato; se vuelve culpable
si ofrece resistencia. Artculo decimotercero. Cualquier hombre se
presume inocente mientras no sea declarado culpable, por lo cual, si
se juzga indispensable detenerlo, la ley deber reprimir severamente
cualquier rigor innecesario en la detencin de su persona.
23
Francesco Carrara, uno de los mximos exponentes de la Escuela
Clsica italiana del derecho criminal, al referirse a las condiciones
esenciales del juicio en general, apunta respecto a la persona del
acusador que es absolutamente necesaria para el juicio, ya que siendo
la inocencia el estado natural y la condicin ordinaria de todos los
ciudadanos, no pueden surgir dudas o pesquisas acerca de la cualidad
excepcional de culpable en alguno de ellos, si no es afrmada; y la
necesidad de tal afrmacin nos lleva a la necesidad de una persona
que afrme.
24
Entendemos que el maestro de Pisa, parte de una premisa moral
que consiste en que los ciudadanos son buenos por naturaleza, o sea,
sus acciones no tenen mcula que sea objeto de represin penal,
ya que el ciudadano es puro, excepto cuando alguna persona como
acusador afrma la culpabilidad de alguno de ellos.
Ferrajoli destaca que este principio de presuncin de inocencia fue
atacado por la Escuela Positva Italiana, al afrmar Rafaele Garofalo y
Enrico Ferri que la frmula es vaca, absurda e ilgica. Asimismo, por
Vicenzo Manzini, al considerar a la frmula como un extrao absurdo
extrado del empirismo francs y la juzg burdamente paradjica
e irracional, a partr de una cadena de petciones de principio: la
apriorstca valorizacin de los insttutos positvos de prisin preventva,
de libertad y del secreto sumarial, contradichos por la presuncin de
inocencia y el establecimiento de una insensata equiparacin entre los
indicios que justfcan la imputacin y la prueba de la culpabilidad, por
considerar que la experiencia haba demostrado que la mayor parte de
los imputados resultan culpables.
25
Despus de medio siglo de ataques al principio de presuncin de
23
Ibid., pg. 378.
24
Carrara, Francesco, Programa de Derecho Criminal, Tomo 2, volumen II, Parte
General, reimpresin inalterada, editorial Depalma, Argentina, 1977, pgs. 287 y 288.
25
Ferrajoli, Luigi, op. cit., pgs. 550 y 551.
23
Serie Amarilla
inocencia, se restableci en la Consttucin de la Repblica Italiana, en
su artculo 27, 2, en forma de presuncin de no culpabilidad.
26
El extnto jurista mexicano Guillermo Coln Snchez, seala que
Como resabio de la ideologa liberal e individualista, an existe
quien ingenuamente estme que debe prevalecer la presuncin de
inocencia a favor del supuesto sujeto actvo del delito, mientras no se
haya dictado sentencia defnitva. Esta consideracin carece de base
legal y doctrinaria, porque hasta que no se declare por el rgano
competente la culpabilidad o inocencia, no existrn ni una ni otra,
tan slo habr un procesado, un indiciado, un sospechoso o como se
le quiera llamar, pero tal presuncin no tene cabida.
27
Esta opinin
es correcta porque fue expresada antes de que el gobierno de Mxico
suscribiera y entraran en vigor varios instrumentos internacionales en
los que fgura el principio de presuncin de inocencia.
Otro jurista nacional, Ral F. Crdenas Rioseco, advierte que
el principio de presuncin de inocencia tambin se encuentra en
el antguo derecho ingls, en la Carta Magna, la que en relacin a
la libertad de las personas estableci que ningn hombre libre ser
detenido o encarcelado como no sea en virtud de un juicio legal de sus
pares o de la ley del pas.
28
Asimismo, refere que en el artculo 8 de la Consttucin de
Virginia, al establecer que nadie ser privado de su libertad,
salvo por mandato de la ley del pas o por juicio de sus iguales.
Y en el mismo sentdo, en la Consttucin de los Estados Unidos
de Norteamrica, por medio de la V Enmienda en 1791.
29
2. Antecedentes nacionales. Crdenas Rioseco y Jess Zamora-
Pierce,
30
sostenen que el antecedente se encuentra en el Decreto
Consttucional para la Libertad de la Amrica Mexicana, sancionado
en Apatzingn el 22 de octubre de 1814, en el que se estableci en el
26
Ibid., pg. 551.
27
Coln Snchez, Guillermo, Derecho Mexicano de Procedimientos Penales, cuarta
edicin, editorial Porra, Mxico, 1977, pg. 171.
28
Crdenas Rioseco, Ral F., La Presuncin de Inocencia, segunda edicin, edito-
rial Porra, Mxico, 2006, pg. 6.
29
Idem.
30
Ibid., pg. 9., y Zamora-Pierce, Jess, Garantas y Proceso Penal, cuarta edicin,
editorial Porra, Mxico, 1990, pg. 491.
24
artculo 30 el principio de presuncin de inocencia, en los siguientes
trminos: Todo ciudadano se reputa inocente, mientras no se declare
culpado. Sin embargo, este Decreto no tuvo vigencia prctca.
31
Sin embargo, es conveniente sealar que tenemos otro
antecedente que s estuvo en vigor y que soslayaron los mencionados
juristas, el relatvo al Cdigo Penal para el Distrito Federal y
Territorio de la Baja California sobre delitos del fuero comn y para
toda la Repblica sobre delitos contra la Federacin, expedido el
7 de diciembre de 1871, en cuyo artculo 8 estableci lo siguiente:
Art. 8. Todo acusado ser tenido como inocente, mientras que
no se pruebe que se comet el delito que se le imputa, y que l lo
perpetr.
32
En los posteriores proyectos y ordenamientos de rango
consttucional, incluyendo la Consttucin Poltca de los Estados
Unidos Mexicanos en vigor, no se consagr el mencionado principio
de una manera expresa, mucho menos en la legislacin secundaria,
salvo el caso del aludido Cdigo Penal.
3. Regulacin legal en Mxico del principio de presuncin de
inocencia.
Dicho principio no se encuentra consagrado expresamente en la
Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos; sin embargo,
s lo est en algunos instrumentos internacionales que el gobierno
de nuestro pas ha suscrito y por ende deberan ser de observancia
obligatoria y fuente de responsabilidad internacional para el Estado
mexicano en caso de incumplimiento. Los Tratados a los que nos
referimos son los siguientes:
a) Pacto Internacional de Derechos Civiles y Poltcos. Fue adoptado
en Nueva York el 16 de diciembre de 1966, por la Asamblea General
en su resolucin 2200 A (XXI), y entr en vigor el 23 de marzo de
1976, de conformidad con su artculo 49. El Senado de la Repblica
lo aprob el 18 de diciembre de 1980 y se public la misma en el
Diario Ofcial de la Federacin el 9 de enero de 1981. Mxico se
31
Tena Ramrez, Felipe, Leyes Fundamentales de Mxico 1808-1999,
vigesimosegunda edicin, editorial Porra, Mxico, 1999, pgs. 29 y 35.
32
Vase Dubln, Manuel, y Lozano, Jos Mara, Legislacin Mexicana o coleccin
completa de las disposiciones legislativas expedidas desde la independencia de la
repblica, imprenta del comercio, a cargo de Dubln y Lozano, hijos, tomo XI,
Mxico, 1879, pg. 598; o la copia del Cdigo, en la Biblioteca de la Cmara de
Diputados del H. Congreso de la Unin.
25
Serie Amarilla
vincul el 23 de marzo de 1981 por medio de adhesin. El 20 de
mayo de 1981, se public en el Diario Ofcial de la Federacin su
promulgacin y entr en vigor en Mxico el 23 de junio de 1981.
En este instrumento internacional el artculo 14.2 establece que
Toda persona acusada de un delito tene derecho a que se
presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad
conforme a la ley.
33
b) Convencin Americana sobre Derechos Humanos. Adoptada
en San Jos Costa Rica el 22 de noviembre de 1969. La Cmara de
Senadores la aprob el 18 de diciembre de 1980 y se public en
el Diario Ofcial de la Federacin el 9 de enero de 1981. Mxico se
vincul el 24 de marzo de 1981, por adhesin. El 7 de mayo de 1981,
se public en el Diario Ofcial de la Federacin su promulgacin.
En el artculo 8.2, relatvo a las garantas judiciales, de dicha
Convencin, se dispuso lo siguiente: Toda persona inculpada de
delito tene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se
establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda
persona tene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantas
mnimas: "
34
Como podemos observar, el gobierno de Mxico desde 1981
acept por primera vez que formara parte de la ley suprema
de toda la Unin, el principio de presuncin de inocencia, a
travs de los instrumentos internacionales mencionados, en
los que se considera un derecho civil y una garanta judicial.
El Pleno de la Suprema Corte de Justcia de la Nacin, al interpretar
el artculo 133 consttucional, estableci en la tesis aislada nmero
IX/2007, que en nuestro sistema normatvo, la que goza de mayor
jerarqua es la Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos,
le siguen los Tratados Internacionales y despus las leyes generales,
federales y locales.
35
En este sentdo, el principio de presuncin de inocencia, como derecho
civil y como garanta judicial, segn los anteriores Tratados, no tene el
33
Vase la pgina web de la Secretara de Relaciones Exteriores.
34
Idem.
35
Vase Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, Novena poca, abril
de 2007, tomo XXV, pg. 6, la tesis mencionada cuyo rubro es TRATADOS
INTERNACIONALES. SON PARTE INTEGRANTE DE LA LEY SUPREMA DE
LA UNIN Y SE UBICAN JERRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS LEYES
GENERALES, FEDERALES Y LOCALES. INTERPRETACIN DEL ARTCULO
133 CONSTITUCIONAL.
26
rango de derecho fundamental porque no est consagrado expresamente
en la Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos.
4. La Suprema Corte de Justcia de la Nacin y el principio de
presuncin de inocencia. El Pleno de la Suprema Corte de Justcia
de la Nacin, el 15 de agosto de 2002 aprob la tesis aislada
nmero P. XXXV/2002, con el rubro PRESUNCIN DE INOCENCIA.
EL PRINCIPIO RELATIVO SE CONTIENE DE MANERA IMPLCITA
EN LA CONSTITUCIN FEDERAL, en la que sostene lo siguiente:
De la interpretacin armnica y sistemtca de los artculos 14,
prrafo segundo, 16, prrafo primero, 19, prrafo primero, 21, prrafo
primero, y 102, apartado A, prrafo segundo, de la Consttucin Poltca
de los Estados Unidos Mexicanos, se desprenden, por una parte, el
principio del debido proceso legal que implica que al inculpado se le
reconozca el derecho a su libertad, y que el Estado slo podr privarlo
del mismo cuando, existendo sufcientes elementos incriminatorios,
y seguido un proceso penal en su contra en el que se respeten las
formalidades esenciales del procedimiento, las garantas de audiencia
y la de ofrecer pruebas para desvirtuar la imputacin correspondiente,
el Juez pronuncie sentencia defnitva declarndolo culpable; y por otra,
el principio acusatorio, mediante el cual corresponde al Ministerio
Pblico la funcin persecutoria de los delitos y la obligacin (carga) de
buscar y presentar las pruebas que acrediten la existencia de stos, tal
y como se desprende de lo dispuesto en el artculo 19, prrafo primero,
partcularmente cuando previene que el auto de formal prisin deber
expresar "los datos que arroje la averiguacin previa, los que deben
ser bastantes para comprobar el cuerpo del delito y hacer probable
la responsabilidad del acusado"; en el artculo 21, al disponer que
"la investgacin y persecucin de los delitos incumbe al Ministerio
Pblico"; as como en el artculo 102, al disponer que corresponde
al Ministerio Pblico de la Federacin la persecucin de todos los
delitos del orden federal, correspondindole "buscar y presentar las
pruebas que acrediten la responsabilidad de stos". En ese tenor, debe
estmarse que los principios consttucionales del debido proceso legal
y el acusatorio resguardan en forma implcita el diverso principio
de presuncin de inocencia, dando lugar a que el gobernado no est
obligado a probar la licitud de su conducta cuando se le imputa la
comisin de un delito, en tanto que el acusado no tene la carga de
27
Serie Amarilla
probar su inocencia, puesto que el sistema previsto por la Consttucin
Poltca de los Estados Unidos Mexicanos le reconoce, a priori, tal
estado, al disponer expresamente que es al Ministerio Pblico a
quien incumbe probar los elementos consttutvos del delito y de la
culpabilidad del imputado.
Amparo en revisin 1293/2000. 15 de agosto de 2002. Once votos.
Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretarios: Eduardo
Ferrer Mac Gregor Poisot y Arnulfo Moreno Flores.
El Tribunal Pleno, en su sesin pblica celebrada el quince de
agosto en curso, aprob, con el nmero XXXV/2002, la tesis aislada
que antecede; y determin que la votacin es idnea para integrar
tesis jurisprudencial. Mxico, Distrito Federal, a diecisis de agosto de
dos mil dos.
36
La anterior tesis aislada ha sido objeto de diversas crtcas, como
las siguientes:
Es incompleta, confusa y tarda. Es Incompleta porque no
consider que dicho principio ya formaba parte del derecho
positvo mexicano, por haber suscrito los tratados internacionales
relatvos a la Declaracin Universal de los Derechos Humanos, el
Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Poltcos, as como la
Convencin Americana sobre Derechos Humanos, que reconocen
tal principio y que el Pleno de la Suprema Corte ya haba establecido
jurisprudencialmente su jerarqua. Tambin es incompleta
porque no comprende lo relatvo al tratamiento del imputado,
pues la prisin preventva como medida cautelar es vlida en
trminos de los tratados internacionales y en consideracin de
la Comisin Interamericana de Derechos Humanos, en caso de
peligro de fuga, sin embargo, nuestros legisladores la han extendido
en forma desorbitada, violndose los mencionados tratados
internacionales. Asimismo, la tesis es confusa, ya que confunde
la presuncin de inocencia, el debido proceso legal y el sistema
acusatorio como similares o equivalentes. Confundir la presuncin
de inocencia con el debido proceso, es confundir la parte con
el todo, no est implcito en la Consttucin como lo sostene
la Suprema Corte de Justcia de la Nacin y no es equivalente al
36
Vase Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, Novena poca, agosto de
2002, pg. 14.
28
debido proceso legal, el cual consiste en no ser privado de la vida,
libertad o propiedad sin la garanta que supone la tramitacin de
un proceso justo que salvaguarde todas las garantas procesales
que prev la Consttucin, los derechos reconocidos en los tratados
internacionales y en leyes procesales. Uno de estos derechos o
garantas es la presuncin de inocencia que no debe confundirse
con el debido proceso legal. El principio acusatorio implica,
segn la doctrina, el derecho de defensa y el conocimiento de la
acusacin, cuyos fundamentos estn adems, en nuestro caso,
en los artculos 21-A y 102-A, as como en las fracciones relatvas
del artculo 20 Consttucional. Y adems, a la tesis mencionada la
contradice otra tesis nmero XXXVII/2002 que el Pleno de nuestro
mximo tribunal emit el mismo 15 de agosto de 2002, con la
voz ENRIQUECIMIENTO ILCITO. LA PRUEBA CIRCUNSTANCIAL
DE ILICITUD DEL INCREMENTO PATRIMONIAL QUE RECONOCE EL
ARTCULO 224 DEL CDIGO PENAL FEDERAL NO ES ATENTATORIA
DEL PRINCIPIO DE PRESUNCIN DE INOCENCIA, en la que se
refere que dicho artculo reconoce la existencia de una presuncin
de ilicitud del enriquecimiento; lo que implica aceptar que viola
el principio de presuncin de inocencia, aunque la Corte afrme
lo contrario en dichas tesis, toda vez que se invierte la carga de
la prueba, pues en lugar que corresponda al Ministerio Pblico,
le corresponde al imputado probar su inocencia. La prueba
circunstancial es un medio de prueba que resulta de la actvidad
de las partes en el proceso, pero no se incorpora a priori en la
defnicin de los delitos. Es tarda porque desde que se expidi
la Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos de 1917,
transcurrieron ms de 85 aos para que nuestro mximo tribunal
reconociera dicho principio del derecho penal liberal y garantsta.
37
Soslay la funcin que tene en la prctca judicial. A pesar de que
la Suprema Corte de Justcia de la Nacin reconoci la existencia
en nuestra Consttucin del principio de presuncin de inocencia,
como derecho fundamental, soslay la funcin que tene en la
prctca judicial, es decir, como regla de tratamiento del inculpado
durante el proceso penal e importancia en la valoracin de la
prueba. La relevancia de la tesis de nuestro mximo tribunal estriba
37
Crdenas Rioseco, Ral F., opus cit., pgs. 147 a 159.
29
Serie Amarilla
en determinar que es al Ministerio Pblico a quien le incumbe
probar la culpabilidad del acusado, el cual no est obligado a
comprobar su inocencia, pero se torna contradictoria con la tesis
que tambin emit dicho rgano consttucional, con relacin al
delito de enriquecimiento ilcito, previsto en el artculo 224 del
Cdigo Penal Federal, al sustentar que no viola dicho principio
fundamental el hecho de que exista una presuncin de ilicitud,
respecto a la adquisicin ilegal de recursos, que corresponde
desvirtuar al acusado, por tratarse de una forma indirecta de probar
uno de los elementos de la fgura tpica. No es posible considerar
legtmo establecer un tpo penal que contenga como elemento una
presuncin de ilicitud que obligue al acusado a demostrar que su
conducta no es ilegal, pues consttuye una inversin de la carga de
la prueba, lo cual denota que en Mxico el principio de presuncin
de inocencia admite excepciones, en el supuesto donde el acusado
es el nico que puede aportar datos que desvirten la acusacin
que obra en su contra. Criterio que hace persistr la presuncin de
intencionalidad delictuosa, suprimida en nuestro ordenamiento
punitvo federal con la reforma de 1984, la cual posibilita la punicin
del delito sin haber probado el dolo, al imponerse al inculpado la
carga de probar su inocencia. En efecto, ya que confunde la prueba
indiciaria con la presuncin de ilicitud.
38
Asimismo, la tesis en cuestn la contradice otra tesis aislada del
Primer Tribunal Colegiado del Octavo Circuito, identfcada con el
nmero VIII.1.27 P, en la que se sostene que en los delitos contra
la salud, en la modalidad de transportacin de marihuana, si bien
corresponde al Ministerio Pblico la carga de probar los elementos y
hechos que integran el delito imputado de transportacin de marihuana
y la probable responsabilidad del quejoso en su comisin, atento a la
vigencia del principio universal de derecho de que toda persona se
presume inocente mientras no se pruebe lo contrario. Sin embargo, al
quedar probado fehacientemente en la especie que al inculpado se le
detuvo manejando un vehculo de motor que tena un compartmiento
38
Cfr. Aguilar Lpez, Miguel ngel, Magistrado del Cuarto Tribunal Colegiado en
Materia Penal del Primer Circuito del Poder Judicial de la Federacin y Profesor de la
Divisin de Estudios de Postgrado de la Facultad de Derecho de la UNAM, en su ensayo
La presuncin de inocencia en Mxico, anlisis crtico propositivo, contenido en la
Revista Criminogenesis, editorial Impresora Apolo, Mxico, 2007, pgs. 94 y 95.
30
especial para la transportacin de cosas en forma oculta, lugar donde
se encontr determinada cantdad del estupefaciente y, por ende,
su partcipacin en dicha transportacin; as las cosas, dable es
afrmar que entonces, la carga probatoria en contrario, corresponde
al inculpado respecto de los hechos demostrados en su contra,
debiendo as acreditar que no estuvo en la posibilidad de enterarse
de la existencia de la marihuana que transportaba, como tambin la
falta de voluntariedad en la realizacin del ilcito atribuido, debiendo
demostrar todos y cada uno de los hechos que se dieron desde el
momento en que sali de su domicilio hasta el diverso momento en
que fue detenido con el enervante cuya existencia dijo desconocer. Y
al no hacerlo, el acto que se reclama resulta apegado a la legalidad, al
constatarse que el rgano acusador cumpli su obligacin probatoria,
desvirtuando el referido principio de inocencia.
39
Esta contradiccin se hace patente en varios casos, porque la
supuesta existencia de manera implcita en nuestra Consttucin del
derecho fundamental relatvo al principio de presuncin de inocencia,
as como su efectva existencia en los instrumentos internacionales
suscritos por el gobierno de Mxico, no pueden estar por encima de la
obligacin consttucional del Ministerio Pblico de comprobar el cuerpo
del delito y la probable responsabilidad, ni de la del juez de decretar la
formal prisin al tener por satsfecha la del Represente Social. Con lo
que se empieza a advertr que el surgimiento de estas contradicciones,
son precisamente porque no hay previsin expresa consttucional
ni procesal penal del mencionado principio, con lineamientos o
directrices para su operatvidad o materializacin en consonancia
con el sistema procesal penal consagrado en nuestra Consttucin.
Llama la atencin que el Primer Tribunal Colegiado del Octavo Circuito,
en la tesis parafraseada, ya en el ao de 1999 se haya pronunciado
directamente acerca del principio de presuncin de inocencia, mientras
que el Pleno de la Suprema Corte de Justcia de la Nacin en el ao de
1998 lo abord de manera indirecta, al referir que la prisin preventva
es una excepcin a las garantas de libertad y de audiencia, toda vez que,
de paso dijo, tambin lo era del principio de presuncin de inocencia.
40
39
Vase Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta,Novena poca tomo X,
noviembre de 1999, pg. 1009, la tesis aislada con el rubro PRESUNCIN DE
INOCENCIA DESVIRTUADA, LA CARGA PROBATORIA EN CONTRARIO
LE CORRESPONDE AL INCULPADO (SALUD, DELITO CONTRA LA.
TRANSPORTACIN DE MARIHUANA.
40
Vase Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, Novena poca, tomo VII,
31
Serie Amarilla
Siendo hasta el ao de 2001 en que de manera directa se pronunci
en el sentdo de que tal principio esta implcito en la Consttucin,
pese a su facultad de atraccin en los amparos en revisin, que debe
conocer por su importancia, inters y trascendencia.
5. Conceptos acerca del principio de presuncin de inocencia.
a) En el Pleno de la Suprema Corte de Justcia de la Nacin.
Es un principio contenido de manera implcita en la Consttucin
Poltca de los Estados Unidos Mexicanos, que implica que el
acusado no est obligado a probar la licitud de su conducta y
no tene la carga de probar su inocencia, ya que es al Ministerio
Pblico a quien incumbe probar los elementos del delito y de la
culpabilidad.
Segn el Pleno de la Suprema Corte de Justcia de la Nacin, en la
tesis transcrita en el numeral anterior, de la interpretacin armnica
y sistemtca de los artculos 14, prrafo segundo, 16, prrafo
primero, 19, prrafo primero, 21, prrafo primero, y 102, apartado
A, prrafo segundo, consttucionales, el principio de presuncin
de inocencia est resguardado en forma implcita en los principios
consttucionales de debido proceso legal y acusatorio, lo que da
lugar a que el gobernado no est obligado a probar la licitud de su
conducta cuando se le imputa la comisin de un delito, en tanto que
el acusado no tene la carga de probar su inocencia, puesto que el
sistema previsto por la Consttucin Poltca de los Estados Unidos
Mexicanos le reconoce, a priori, tal estado, al disponer expresamente
que es al Ministerio Pblico a quien incumbe probar los elementos
consttutvos del delito y de la culpabilidad del imputado.
b) En los Tratados suscritos por Mxico.
En el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Poltcos, segn su
artculo 14.2 es un derecho a que se presuma su inocencia mientras
no se pruebe su culpabilidad conforme a la ley.
En la Convencin Americana sobre Derechos Humanos,
segn su artculo 8.2 es una garanta judicial que consiste
en el derecho a que se presuma su inocencia mientras
marzo de 1998, pg. 28; o bien, en el ius 2007, con el nmero de registro 196,270,
la tesis con el rubro PRISIN PREVENTIVA. ES UNA EXCEPCIN A LAS
GARANTAS DE LIBERTAD Y DE AUDIENCIA PREVIA, ESTABLECIDA
CONSTITUCIONALMENTE.
32
no se establezca la culpabilidad de la persona inculpada.
c) En la doctrina nacional.
*Jorge Nader Kuri. Es un principio universal, segn el cual todo
individuo es inocente mientras no se demuestre su culpabilidad. Es
un derecho sustantvo fundamental porque deriva de la necesidad
de considerar a toda persona como inocente hasta en tanto
se demuestre su culpabilidad, como una afrmacin de que el
individuo nace libre. No est en forma expresa en la Consttucin,
pero s en los tratados internacionales sucritos por Mxico y
recientemente se ha reconocido tal principio por el Pleno de la
Suprema Corte de Justcia al resolver el amparo 1293/2000, quien
aprob la tesis jurisprudencial PRESUNCIN DE INOCENCIA.
EL PRINCIPIO RELATIVO SE CONTIENE DE MANERA IMPLCITA
EN LA CONSTITUCIN FEDERAL. Como toda garanta individual,
el principio de presuncin de inocencia, puede restringirse
solamente mediante la prisin preventva, de conformidad con la
jurisprudencia que lleva por rubro: PRISIN PREVENTIVA. ES
UNA EXCEPCIN A LAS GARANTAS DE LIBERTAD Y DE AUDIENCIA
PREVIA, ESTABLECIDA CONSTITUCIONALMENTE.
41
* Miguel ngel Aguilar Lpez. Refere este jurista que el Pleno de la
Suprema Corte de Justcia de la Nacin ha reconocido el principio
de presuncin de inocencia, como garanta individual, el cual
est implcito en la Consttucin Poltca de los Estados Unidos
Mexicanos.
42
d) En la doctrina extranjera.
*Manuel Jaen Vallejo. Es un derecho fundamental proclamado
en el artculo 24.2 de la Consttucin Espaola. No es slo un
derecho en cuya virtud una persona acusada de una infraccin
no puede ser considerada culpable hasta que as se declare en
sentencia condenatoria, siendo admisible y lcita esta condena
cuando haya mediado una actvidad probatoria que, practcada
con la observancia de las garantas procesales y libremente
valorada por los tribunales penales, pueda entenderse de cargo,
41
Nader Kuri, Jorge, DNDE EST EL PRINCIPIO DE PRESUNCIN DE
INOCENCIA?, ensayo contenido en la revista de ciencias penales Iter Criminis
nmero 12, segunda poca, editada por el Instituto Nacional de Ciencias Penales,
Mxico, 2005, pgs. 297, 301, 303 y 304. Las tesis que refere son aisladas y no
jurisprudenciales como lo afrma dicho jurista.
42
Aguilar Lpez, Miguel ngel, op. cit., pg. 93.
33
Serie Amarilla
sino que adems es un principio o criterio informador del
ordenamiento procesal penal, como lo ha recordado la sentencia
del Tribunal Consttucional 25/2003. Ello signifca que nadie puede
ser considerado como culpable antes de que se pronuncie contra
l una sentencia condenatoria.
43
Este jurista espaol en su obra Derechos fundamentales del
proceso penal, menciona interesantes sentencias del Tribunal
Consttucional de su pas, en las que se sostene que el principio de
presuncin de inocencia no solamente tene vigencia en el mbito
del proceso penal, sino que tambin es aplicable en el ordenamiento
sancionador, ya sea administratvo, penitenciario, de menores, etc.
Que la prueba ha de servir para probar la existencia del hecho punible
como la partcipacin en l del acusado. Que la libertad es la regla
general y su restriccin la excepcin, la cual tene como fnalidad
garantzar el normal desarrollo del proceso penal, principalmente
asegurar la presencia del imputado en el juicio y evitar obstrucciones
a su normal desarrollo, as como el riesgo de fuga que para motvar la
restriccin se requieren datos objetvos como la gravedad del delito
imputado y el estado de tramitacin de la causa. La necesidad de
una actvidad mnima probatoria para el debate contradictorio y en
presencia del juez. Destaca que en la Ley de Enjuiciamiento Criminal
de Espaa, el sistema de valoracin de la prueba es el de la libre
apreciacin, el cual tene dos aspectos: uno subjetvo, el cual depende
de la inmediacin en la percepcin directa por el juez en torno a la
prueba, que no es controlable en otra instancia. Y el otro objetvo, que
s es controlable y tene lmites porque vincula al juez o tribunal a las
leyes de la lgica, de la experiencia y a los conocimientos cientfcos.
Que los principios legitmantes de la prueba son: el de oralidad, que
consiste en que las pruebas deben practcarse en el juicio oral, por
lo que ha sido debatdo si ste puede ser fundamento legtmo de la
sentencia; el de inmediacin, que exige que el tribunal haya percibido
por s mismo la produccin de la prueba, con lo que no es factble
susttuir el interrogatorio de los testgos por la lectura de actas; y
el principio de contradiccin, inherente al derecho de defensa y al
principio de igualdad de armas procesales, que permite contradecir la
43
Jaen Vallejo, Manuel, DERECHOS FUNDAMENTALES DEL PROCESO
PENAL, segunda edicin, grupo editorial Ibez, Colombia, 2006, pg. 227.
34
prueba de cargo y alegar, etc.
44
*Abdn Pedradas Moreno. Es un derecho fundamental previsto
en la Consttucin Espaola, que tambin tene aplicacin en ciertos
procesos civiles y en las pruebas aportadas en ellos, segn el Tribunal
Consttucional de Espaa. Y asimismo, sostene la aplicabilidad del
principio de presuncin de inocencia al mbito de las relaciones
laborales, en general, y al despido, en partcular, con base en
aspectos doctrinales y sentencias del propio tribunal mencionado,
con lo cual realiza un novedoso e interesante estudio especial.
45
*Jos Mara Luzn Cuesta. Es un derecho subjetvo pblico,
que se ha elevado a la categora de derecho humano fundamental
que posee su efcacia en un doble plano: por una parte, opera en
las situaciones extraprocesales y consttuye el derecho a recibir la
consideracin y el trato de no autor o no partcipe en hechos de
carcter delictvo o anlogos a stos; por otro lado, el referido derecho
opera fundamentalmente en el campo procesal, con infujo decisivo
en el rgimen jurdico de la prueba.
46
*Jaime Vega Torres. Tiene tres signifcados: 1. Como garanta bsica
del proceso penal; 2. Como regla de tratamiento del imputado dentro
del proceso; y 3. Como regla relatva a la prueba. Como garanta bsica,
se deriva de dicho principio que los procesos deben contener todas
las garantas que prevn las consttuciones nacionales y los tratados
internacionales suscritos por los Estados, a efecto de que pueda
hablarse de un proceso justo, y para que exista un proceso justo, debe
tomarse en cuenta la presuncin de inocencia que, ha sido considerada
como uno de los principios cardinales del ius puniendi contemporneo
en sus facetas sustantva y formal. Como regla de tratamiento del
imputado: La prisin preventva es una medida cautelar que tene como
funcin asegurar el normal desarrollo del proceso y eventualmente al
concluir la aplicacin de la pena privatva de la libertad. Sin embargo,
en la prctca se le ha dotado de connotaciones sustantvas de
penalizacin inmediata. Como regla relatva a la prueba: La sentencia
condenatoria en materia penal que pretenda tener por acreditada
44
Ibidem, pgs. 230 a 254.
45
Pedradas Moreno, Abdn, Despido y derechos fundamentales, estudio especial de
la presuncin de inocencia, editorial Trotta, S.A., Madrid, Espaa, 1992, pgs. 231
a 378.
46
Citado por Crdenas Rioseco, Ral F., en op. cit., pg. 23.
35
Serie Amarilla
plenamente la responsabilidad del acusado de algn delito, debe
ser aportada la prueba invariablemente por el rgano acusatorio.
47
*Luigi Lucchini. Es un corolario lgico del fn racional asignado al
proceso y al mismo tempo, de la primera y fundamental garanta que
el procedimiento asegura al ciudadano: presuncin juris, hasta prueba
en contrario.
48
Los anteriores conceptos nacionales pueden ser divididos, en
legales y doctrinales. Los legales corresponden a los contenidos en
la interpretacin que hizo el Pleno de la Suprema Corte de Justcia
de la Nacin de diversos preceptos consttucionales, para de ah
inferir que el principio de presuncin de inocencia est implcito en
nuestra Consttucin, as como los contemplados en los instrumentos
internacionales, con la diferencia de que el mencionado Pleno se limit
a sealar que la carga probatoria de la acusacin recae en el Ministerio
Pblico, lo cual no tene la menor repercusin jurdica, pues en todas
las legislaciones procesales nacionales y extranjeras est consagrado
el principio de que quien afrma est obligado a probar; en cambio en
los tratados, tal principio se erige en un derecho y garanta judicial.
En cuanto a los conceptos doctrinales, concretamente los
nacionales, no existen pronunciamientos que impulsen el desarrollo
del mencionado principio, toda vez que se conforman con sealar que
se trata de un principio universal y un derecho fundamental, el cual
puede ser restringido por la prisin preventva, como toda garanta
individual. Adems, le otorgan facultades al Pleno de la Suprema
Corte de Justcia de la Nacin que no tene, al sealar que reconoci
el susodicho principio como garanta individual. Es decir, la validez, la
efcacia y la vigencia de la Consttucin Poltca de los Estados Unidos
Mexicanos, no est supeditada al reconocimiento que de su contenido
haga o no el Pleno de la Suprema Corte de Justcia.
Respecto a la doctrina extranjera, existe una gran diferencia con
la de Mxico, porque los conceptos de aquella tenen un sustento
consttucional, en el que en forma expresa est consagrado el principio
de presuncin de inocencia, pero adems, en la legislacin secundaria
est desarrollada la materia de la prueba en congruencia con dicho
principio, toda vez que estn previstos otros principios que legitman
la sentencia que llegue a pronunciarse, de los cuales algunos existen en
47
Citado por Crdenas Rioseco, Ral F., en op., cit., pgs. 24 a 26 y 115.
48
Citado por Luigi Ferrajoli, en op., cit., pg. 549.
36
nuestra legislacin procesal, como el de la inmediacin que por cierto no
se cumple, habida cuenta que el juez nunca preside las audiencias, con
lo que el principio de oralidad se pervierte. El sustento consttucional
y legal ha permitdo que el Tribunal Consttucional Espaol desarrolle
el principio de presuncin de inocencia, al grado de considerarlo como
no exclusivo del derecho procesal penal, sino de otras materias, tales
como la civil, administratva, de menores infractores, laboral, etc. Este
desarrollo confrma lo aseverado por el jurista alemn Robert Alexy,
en el sentdo de que la Consttucin ejerce un efecto radiador sobre
el sistema legal en su totalidad.
49
Lo cual ha generado vetas jurdicas
para los juristas en sus respectvos campos de especializacin, que
han comenzado a explorar y ello se refeja en la produccin de obras
que ampla la literatura jurdica. En Mxico, el principio de presuncin
de inocencia, est en ciernes en lo consttucional y doctrinal; en los
ordenamientos legales no existe.
6. Anlisis de los diversos conceptos del principio de presuncin
de inocencia a la luz de nuestra Consttucin Poltca, del Poder
Judicial de la Federacin y de la doctrina nacional y extranjera.
En los anteriores conceptos se destaca, como su expresin lo indica,
que es un principio, un principio universal, una garanta judicial, un
derecho sustantvo fundamental, una garanta individual, un criterio
informador del ordenamiento procesal penal, un derecho subjetvo
pblico y una garanta bsica, regla de tratamiento del imputado y de
la prueba.
a) Es un principio. La presuncin de inocencia es un principio.
a.1. En la Consttucin Poltca de los Estados Unidos Mexicanos.
Los artculos 14, prrafo fnal, y 105, fraccin III, prrafo segundo,
consttucionales, mencionan los principios generales del derecho
en los trminos siguientes:
Artculo 14.