Mi Hija - Anonimo
Mi Hija - Anonimo
Mi Hija - Anonimo
lado del otro. Puedo ver la silueta de sus casi inexistente pechos y esa carita
hermosa, angelical, perfecta. Volteo y la miro, en cuanto siente mi mirada baja la
cara, pero puedo notar que ahora ademas de dudas, tiene miedo, sabe que algo
malo est por pasar, no sabe bien qu, pero es lista, lo sabe.
Pienso en decir algo, pero recapacito. Tengo la verga ms dura de lo que jams la
he tenido, me sudan las mano, no quisiera esperar pero, s que todo esto valdr la
pena... ya lo esta haciendo. Me volteo de nuevo hacia la computadora y resoplo con
impaciencia. El siguiente video inicia.
Es mi antigua habitacin.
Ella se da cuenta y es por eso que levanta la vista llena de curiosidad y sus ojos se
agrandan al ver entrar a su madre en cuatro patas.
La bocinas suena:
-Qu eres?-Un puta seor-De quin eres?-Suya seorSe escucha un tronido de dedos y mi antigua esposa y madre de Carolina comienza
a mamar mi pene con entusiasmo. Es una mujer muy bella para los 35 aos que
debi tener en ese video, delgada, con buen busto un poco flcida ya pero bella,
con una cara preciosa y una cabellera lacia y rubia que su hija heredo.
El video no es tan impresionante con el de la nia pero tiene un cometido. El cual
creo cumplido a los 5 minutos de verlo. Detengo el reproductor me paro, me pongo
frente a mi hija y le digo: -Ahora entiendes?La pobre, slo puede hacerse menos en su lugar y seguir mirando al piso. Tomo su
cara, la levanto y repito: -Entiendes?- Sus ojos estn llorosos y sus cara llena de
terror.
-Hija, esto va a ser difcil- le digo mientras tomo su mano y la dirijo hacia mi
bragueta -Pero creme, as deben! ser las cosas, y esto me va a doler ms a mi,
que a tiEso ltimo me hace rer por dentro. Tomo su manita y con ella abro mi pantaln,
saco mi verga erecta y la pongo frente a ella; una verga promedio, cualquiera pero
que, para sus inocentes y aterrados ojos debe parecer enorme pues abre sus
ligeramente rasgados ojos miel sin poder creer lo que pasa.
Con su mano en mi mano comienzo a masturbarme y siento como nuestros dedos
se humedecen de lubricacin, acerco mi verga a su boca y su primera reaccin es
torcer la boca y voltear la cabeza. La doy una fuerte cachetada y vuelvo dirigir mi
verga hacia ella como si nada hubiera pasado. Carolina se queda impactada y no
sabe que hacer, pero la cachetada surte efecto esta vez deja la cara fija y puedo
meter mi verga en su dulce dulce boca.
Al fin, el sueo que haba tenido durante 11 ao estaba comenzando...
Tomo su nuca como en el video y comienzo a jalarla hacia mi, no tan fuerte pero si
preparados para hoy... 1 hora de pornografa infantil. Subo el volumen mucho, sin
importarme porque esta casa esta lejos de todas las dems esta perfectamente
escogida.
Los video comienza, nias de todas edades desfilan por la pantalla y comienzan a
mamar vergas, a ser violadas por 1, 2, 5, 10 hombres, a ser penetradas sin piedad
por la pucha, por la cola, llorando, gimiendo, gritando. Ahora hay un perro
montando a una nia de 13 aos, una nene 9 mamando el pito rojo y resbaladizo
de un pastor alemn. Carolina no lo puede creer no sabe qu esta pasando, su
carita se llena de confusin y miedo mientras la obligo a ver algunas de las cosas
ms viles que se les pueden hacer a una nia. Ya no puede dejar de ver, esta
paralizada. Voy al cajn de mi bur y veo los dildos, esta vez si me doy un pequeo
chance; no tomo el pequeo como lo haba planeado, tomo uno dos veces ms
ancho y mucho ms largo; un dildo color carne, con glande y venas, algo
monstruoso para el pequeo cuerpo de mi nena.
Me pongo frente a ella y la saco del trance.
-Esto era de tu mam- Le digo agitando el dildo frente a su cara. -Ella aprendi con
esto y ahora t tienes que aprender- Camino y me siento sobre la cama. detrs de
ella.
-No me mires a mi, mira la pantalla- Le doy una nalgada y vuelvo a subir el
volumen-.
Los videos cada vez son peores, ms fuertes. Una nia es orinada por 5 hombres,
un negro mete un tubo por la vagina de una pequea de 13 aos, una nia de 6
llora mientras una verga gigantesca le penetra el culo, dos mujeres meten bolas
anales por la cola de una nia de 7 aos...
Caro mira la pantalla... comienza a obedecer. Aun faltan uno 15 minutos de videos,
su culos sigue escurriendo mi saliva... eso har que el duela un poco menos... no
importa, es su primera vez. Tomo el enorme dildo con una mano mientras abro sus
nalgas con la otra, esta a punto de voltear cuando lo meto en su ano con toda mi
fuerza. Ella se paraliza, su cuerpo se tensa, quiere gritar pero no puede, el dolor es
demasiado. Esto si no lo aguanto, tengo que masturbarme.
Comienzo a mover el dildo al mismo ritmo que mi verga. Ella vulve en si y grita.
-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH, AAAAAAAAAAH, AAAAAAAAAAAHNi siquiera puede decir palabras. Mi verga est inchada como nunca, estoy violando
a mi hija, al fin estoy violando a mi hijaaaaaa. Sigo metiendo y sacando el enorme
dildo del apretado ano de mi Carolina. La saliva ayuda a que resbale pero aun as
me cuesta trabajo ella es tan estrecha!!
-AAAAAAAAAAAH- PAAAAAAAPI- PAAAAAAAAPI ME DUELEEEEEEEEEElla grita y trata de huir mientras la sigo violando con el dildo, en la pantalla una
nia se besa con otra y se pasan el semen de 2 verga de boca a boca, y yo, me
masturbo tan rpido como me es posible... esto es demasiado, ya no puedo ms...
-Qu eres-PAPIIIII POR FAVOOOOOOR- AAAAAAH ME DULE ME DULEEEEE-QU ERES???!!!-
-AAAAAAH, MAMI QUIERO A MI MAMIIIIIApago la tele, mete el dildlo hasta el fondo de su culo y tomo con fuerza la cara de
mi hija.
-Dije, qu eres- le repito mirndola a los ojos.
-... u... una puta...- Me dice con los ojos llenos de lagrimas
Prendo la pantalla. -Qu dijiste?- Regreso a mover el dildo pero ahora ms hondo
con ms fuerza, con ms odio.
-QU DIJISTEEEEEE?- El dildo no puede estar ms adentro, su ano sangra y la
pantalla resuena con los insultos de 3 hombres que violan a una nia de 12 aos.
-SOY UNA PUUUUUUUTA, SOY UNA PUUUUUUUUTA, SOY UNA
PUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAMe corro con violencia sobre la cama, su espalda, la pantalla. Ella se desmaya. Mi
verga palpita, arde, no puedo creer lo que hice. Mi hija de 11 ao esta debajo de mi
con el culo abierto, llena de mi semen y mi saliva. Es ms de lo que pude soar
jams. Pero ya no me importa nada, no me queda nada, nada ms que mi sueo
de convertir a mi hija en mi obediente puta.
-Quieres comer?Su carita llena de miedo y con surcos de lagrimas apenas se movi tratando de
decir si.
-Dije, Quieres comer?
Bajando la mirada dijo -siEncend la pantalla, puse la laptop a un lado, y la bandeja al otro, sent a mi hijita
Carolina completamente desnuda entre mis piernas y reanude la emisin de
pornografa infantil.
-Dime Carito, qu ves?-Co cmo?-Si, qu es lo que ves en la pantalla
-Quieres comer o no? Pues te lo tienes que ganar siendo obediente. Dime, que ves
en la pantalla.
- ve veo a una nia.
Si, como es ella.
-E es delgada y y pecosa, blanca
-Se parece a ti verdad? dime ahora qu hace la nia?
-Baila-Y qu ms-Se quita la ropa-Y?
-Se toca-Por qu crees que lo haga?
-Pues lo hace porque es una puta, es la puta de sus pap, por eso es que lo
obedece.
Cambi el video.
-Ahora qu esta pasando-pa p
-Te pregunte algo putita- le dije mientras apretaba su brazo.
-E estn orinando a una nia, me respondi mi hijita con la mirada baja-Y Com le estn diciendo todos esos hombres?-Le estn diciendo puta-Ya entiendes? Las putas tiene que hacer todo lo que les dicen y ms si con putas
de su papis. Lo entiendes? T eres una puta, una ramera, eres menos que basura,
ahora eres mi propiedad pero si obedeces te puede ir muy bien, te puedo
complacer. Claro que si eres desobediente bueno, ya sabes lo que pas.
Tom su carita delgada y hermosa, sub mi mano por su sube torso y presion su
pecho, ese pecho diminuto pegado a las costillas, en donde lo nico que sobresala
era un pezoncito inflado, que deca que sus pechos estaban por empezar a crecer Qu quites ser, una puta feliz o una puta infeliz-ummm una puta feliz-Entonces dime, quien eresSu hermoso rostro se desconcierta por un momento, pero de inmediato lo entiende.
-Soy tu puta papNi en mis sueos ms loco de masturbacin hubiera podido imaginar que mi propia
hijita de 11 aos me dijera eso. Qu dijera que era una puta, MIIIII PUTA.
-Pues vamos a empezarSaqu 5 pequeos vibradores de mi cajn (esos que slo son una esfrica con un
cable) y de nuevo puse pornografa de humillacin.
-Ahora Carito, pon mucha atencin a los vdeos, porque todo lo que diga la mujeres
que son, eso eres t, y mientras juego contigo lo debes decir.
La sent de frente al televisor, me hinqu y le abr su piernitas, sus muslos
delgados y blancos que terminaban en una vagina diminuta, virgen y limpia, sin un
slo rastro de vellos. Me acerque a olerla y el hedor a jugo vaginal orina casi me
vuelven loco, ya tena la verga tan dura como la poda tener. Me alej para ver su
rostros de nuevo y sus ojos fijos en la pantalla y su boca pequeita sin expresin
me dejaron ver que su alma ya comenzaba a romperse. Perfecto.
Decid regresar a lo mo, as que clave mi cara entre esa pucha deliciosa de nia de
11 aos y comenc a comrmela como un animal , a mamarla y succionarla y
morder esos subes labios carnosos. Ella mova un poco su pelvis. An cuando una
nia odie lo que le estn haciendo, no puede evitar sentir placer cuando le lamen la
vagina eso hace que se odien a si mismas por disfrutar algo tan asqueroso por
eso me encanta.
Segu mamando la vagina diminuta de mi hija mientras ella vea como humillaba a
una mujer tras otra en la pantalla. Tom el primer vibrador y lo met en mi hija. Le
dol por que su himen segua ah, pero el vibrador era muy pequeo y logr entrar
sin mayor esfuerzo. Lo encend.
Pude ver como Carito se desconcertaba, no saba que estaba pasando, saba que
odiaba todo lo que le haca pero algo se senta bien, algo dentro de ella le estaba
vida.
Met mi verga en su boca y us su cara como la de una puta perra, ya no poda
ms, quera maltratarla mucho, pero estaba tan excitado con la imagen de mi hija
siendo humillada que me iba a correr en cualquier segundo. La jal con fuerza hacia
mi tomndola de las orejas para penetrarla lo ms salvajemente que pude y que
una cuantas embestidas me leche llen su garganta. Estaba tan atrs que no poda
ni tragarla, slo se escurra hasta su estomago (y un poco a sus pulmones pues
empez a toser). Cay de rodillas aun con los vibradores colgado de su sucia pucha
y comenz a toser mucho. Yo estaba ms que satisfecho. Saque de un golpe los
vibradores de su vagina (lo cual felizmente la lastim), dej los nuggets de pollo,
tom la laptop sal del cuarto y slo regres para llevarle, sbanas limpias, ropa
nueva y una tazn con helado.
-Esto es lo que se ganan las putas buenas- La bese en la boca y me fui.
El miedo volvi a sus ojos, la trampa haba salido a la luz. Instal la computadora,
sent a Carito en mis piernas y comenz el show.
Una nia de 6 aos habla con sus pap. El le dice que tiene un regalo para ella y de
su bolsillo saca un delgado dildo rosa.
La nia, que viste unos pants rosas, argumenta algo, dice que quizs mam llegue,
pero sus pap insiste en que no, que no est y que es hora del juego. La nena baja
sus pantalones y deja ver una exquisita pucha rosada, lisa, brillante, perfecta. La
nena se sienta en su cama y su pap comienza a mamar su vagina.
S que esto trae recuerdos del da anterior a Carito pues comienza a moverse
sobre, piensa:
Si, eso se sinti tan bien pero por qu, si lo odio acaso de verdad soy una puta
acaso as es como todas las nias deben ser tratadas pero yo non quiero pero si
no quiero por qu me gust cuando me chup me doy asco, me odio.
Y eso es lo que yo quiero, que se odie, que se de asco y que se vuelva slo un
objeto, mi objeto, mi juguete, mi esclava. Comienzo a tallar su vagina por encima
de sus calzoncitos. Muy despacio, ya lastime lo suficiente su cuerpo ayer, hoy es
momento de herir su voluntad.
El video sigue. La nia sigue siendo lamida por su padre y el frota un poco el dildo
contra su estrecha vagina. La nena dice entre gemidos:
-Yo digo detente y tu dices nunca papi Detente-Nunca-Detente-Nunca
Por eso escog este video para empezar el da. Miro de reojo la cara de mi hija y
esta anonadada, ya no sabe qu creer.
Yo siempre he amado ese video porque la nia de verdad parece ser toda una puta
deseosa de ser tocada por su padre. An as no me hago tonto, s perfectamente
que esa nia debe haber sido entrenada por mucho tiempo, engaada y
manipulada mentalmente para decir esas cosas y gemir con su dulce vocecita,
mientras es tocada por su domador, s que ella realmente no lo disfruta pero
Carolina NO.
Sigo masajeando suavemente su puchita, y le susurro al oido:
-Ya vesLamo su oreja y u cuello y respiro sobre ellos mientras ella no puede dejar de ver la
pantalla.
Ahora tiene pruebas de que las nias son unas putas y que sirven para que sus
paps las cojan. Ya no soy slo yo dicindoselo, su mundo se derrumba.
El video termina con la nia apuntando su cola hacia la cmara y metiendo el dildo
en su ano.
Ahora una pequea nia rubia de unos 5 aos mama el pito de su padre. Slo
podemos ver su carita angelical sonriendo y el pene de su padre en primer plano.
Detrs hay una computadora corriendo pornografa infantil. De nuevo Carito
corrobora que esto es comn, que las nias en todo el mundo lo hacen y que los
paps tienen el derecho de usarlas como quieran. Yo me xito cada vez ms, pero
sigo lamiendo su cuello y masajeando su cltoris despacio, vale la pena ir lento el
da de hoy.
La nena sigue sonriendo y mamando el grueso pito de su padre mientras le dice:
-Qu rico pap, gracias por darme pitoMe ro por dentro, la cabeza de mi hijita Carolina debe estar vuelta loca. Ella no
sabe que esa nia tambin fue entrenada y engaada y manipulada para decir eso.
Ella slo sabe que hay una nia dndole las gracias a su pap por algo que ella
odia y an falta lo mejor.
La pequea rubia saca la verga de su boca y dice:
-Papi, me gusta el pito del perro pero el tuyo es mejorEl video termina y corta a uno nuevo, de la misma nia rubia, pero esta vez
mamando en primer plano la verga de un perro. La rubia sigue sonriendo y
mamando, como si todo fuera un juego. La verga roja, blanca y llena de venas del
perro luce asquerosa pero la nia la mama como si fuera un dulce (su padre es mi
dolo). Carolina tiene los ojos casi desorbitado y no puede parar de ver, creo que si
no hubiera llorado tanto los da anteriores ahorita sus ojos seran cascadas.
Yo sigo lamiendo su cuello, tocando sus planos pechos y masajeando su pucha. S
que aunque no quiere, su cuerpo comienza a reaccionar. Su puchita empieza a
escurrir jugo y su piel se eriza mientras ve y piensa cosas atroces. Si sigo as, su
cuerpo ya jams sabr cuando sentir placer y cuando sentir asco y slo los sentir
cuando yo se lo ordene.
El video del pito del perro termina pronto pero de nuevo corta a uno ms de la
misma nia. Ahora ella est amarrada, desnuda y con las piernas abiertas, es
tiempo de que el perro le devuelva el favor El mismo perro de antes ahora esta
con la nariz clavada en su ingle y lamiendo su pucha, su deliciosa y delicada pucha
de nia de 5 aos. La cmara se mueve entre su vagina y su cara, y ella siempre
tiene una sonrisa de oreja a oreja (de verdad su padre era un genio de la
dominacin). El video termina y la pantalla queda en negros.
Giro a Caro y la pongo de frente a mi, no dejo de tocarla en todo el cuerpo y
mientras meto mi lengua en su boca le digo:
-Qu aprendiste?Ella sigue en shock, no sabe que decir. Le comienzo a quitar la ropa.
-Qu aprendiste? Aprendiste que si eres una puta verdad? Qu todas las nias
son una putas, una putas de mierda a la que una puede violar a placer Viste cmo
esa nia mamaba la verga de su padre y despus la del perro?
Ella tiene la carita hacia abajo, mientras yo le quito la ropa y la acaricio con todo el
morbo del mundo. Giro a su alrededor como un depredador acechando a su presa.
-Te gustara hacer eso, ser cogida por un perro? Usar un collar? Comer en el
piso? Eres mi perra sabes? yo puedo hacer lo que quiera contigo y si no he trado
a un puto pastor alemn a que te viole es porque ayer te portaste muy bien Vas a
seguir as?
De inmediato ella asiente muchas veces con la cabeza, llena de miedo.
Le quit los calzoncitos puse el baso del desayuno en el piso la jale pra que quedara
en cuclillas sobre el le dije:
-Orina-Pa pap?-Te dije que orinaras, perraElla slo me miraba confundida y con miedo.
-Quieres ser una puta obediente, o una puta violada por perros?Carito apret los ojos y gimoteando comenz a orinar el baso. Un chorro amarillo y
caliente comenz a salir de entre sus blancos, suaves y delgados muslos, sus
piernitas temblaban y poda ver perfectamente dentro de su rozaba vagina. El piso
se manch pero la mayora call dentro del baso. Carajo el plan era hacerla beber
su propia orina pero yo ya no poda ms, haba tenido demasiado auto control ese
da me arrodill, tome el baso y mineras tocaba los pechos de mi hija, beb sus
orina caliente. Creo que eso la confundi ms, ja. Pero ya no poda ms, me saqu
la verga y me la empec a jalar mientras me beba la pip de mi chiquita,
obviamente me corr y un segundo.
Tome el semen de mi mano se lo embarre en la cara a mi hija y di por terminado el
da.
El resto de la tarde se fue en ver caricaturas y complacer CUALQUIER capricho que
Carito tuviera.
-Ves hija, a las putas buenas les pasan cosas buenas-
-Bueno, ya es hora empezar el daMi hija que hasta ese momento haba estado tranquila y hasta sonriente dejo ver
una cara de preocupacin y tristeza.
-Hey preciosa, no te preocupes. Como te haz portado muy bien hoy nos vamos a
divertir y yo no te voy a hacer nada.
Su cara sigue preocupada. Y aunque le digo que no voy a hacerle nada ha
aprendido a no confiar en mi.
Traigo de otro cuarto un bolsa con un proyecto que me tom bastante tiempo. De
la bolsa saco un montn de ropa definitivamente inapropiada para cualquier nia de
menos de 18. Es imposible (o al menos para mi lo fue) encontrar una tienda que
venda este tipo de cosas en tallas para nias. As que me di a la tarea de encontrar
un sastre que se hiciera de la vista gorda por un buen precio.
Primero saco un par de medias muy transparentes, un liguero, un brasier y unos
calzoncitos blancos.
-PnteloMi hija esta confundida, pero decide obedece pues no parece haber peligro por el
momento. Mientras se cambia voy por el resto de las cosas. Un triple y una cmara
profesional. Siempre la voy a usar en automtico, pero lo que me interesa es no
perder ni el mnimo detalle.
Carito est vestida y lista para ser humillada.
Enciendo la cmara, pongo (Hit Me Baby One More Time) en mi lap top y le digo:
-BailaCarito baja la mirada y empieza a moverse de un lado a otro. Slo se balancea
sobre sus pies mientras sostiene su brazo con vergenza. Su carita angelical esta
roja por la pena, su cuerpo delicado esta tenso.
-GiraSus piernas delgadas y firmes envueltas en un par de medias blancas con encaje se
mueven y me dejan ver por un segundo, un culo redondo, carnoso, perfecto. Jams
entender por qu las nias de cualquier edad tiene siempre esas nalgas. Siempre
redondas y respingonas, es como si estuvieran listas para ser tomadas desde su
nacimiento.
Gravo y recorro todo su cuerpo con la cmara y con mis ojos. Imagino lo que hay
debajo de eso pequeos calzones. Esa puchita que ya conozco; tierna y suave. Veo
su abdomen plano y su piel apenas tostada. Sus brazos flacos y delicados...
-Qutate el brasier su torso casi recto que culmina en un par de pechos en el inicio de su desarrollo.
Dos montculos pequeitos y suaves, que coronan dos pezones rosados y
diminutos.
-MrameEl cabello lacio y casi dorado cae para dejarme ver el rostro que tanto amo. Esa
carita (an) de inocencia, esas facciones pequeas y finas. Su boquita roja y
pequea, su nariz afilada, sus ojos color miel que me miran con vergenza y con
miedo.
Aqu es donde comienza el verdadero juego.
-Carito, te dije que yo no iba a hacerte nada pero tenemos que seguir aprendiendo
verdad? as que, como haz sido una nia muy buena, te voy a dejar escoger entre
dos opciones. Uno, vienes de rodillas y mamas la verga de pap, o dos, metes unos
de los vibradores chiquitos en tu vagina.Caro se detiene confundida.
-No dije que dejes de bailarMi pequea comienza a moverse de nuevo.
-Entonces, qu va a ser
-E el el-Si?-El vibradorSonro. Saba que iba a escoger eso. Me tiene demasiado asco. Voy al cajn y saco
la primer esferita de colores. Bajo despacio los calzoncitos de Carolina y despus de
sacarlo de mi boca introduzco la esfera morad ya vibrando en la vagina recin
desvirgada de mi hija de 11 aos.
-Ok, continuemosLa cmara graba a mi princesa bailando, con sus medias y su liguero blanco
mientras un cable cuelga de su coo.
-Dime Carito, cmo se siente ese vibrador en tu vagina.
S que quisiera decirme que lo odia, que quiere irse, que ya es suficiente. Pero est
confundida, le he dicho tantas veces que es una puta, la he humillado tanto, ha
visto tantos vdeos de nias cogiendo y ese vibrador debe sentirse tan bien. Su
cabeza debe ser un lo.
-No seas tmida. se siente bien verdad? A todas las mujeres les encantan los
vibradores. Ese era uno de los favoritos de tu mamiYa tengo su atencin.
-Esta bien princesa esta bien que te guste, que sientas rico en tu puchita. Despus
de todo, no serias mi putita si no fuera as Verdad que eres mi putita?
-Si si pap-Excelente. Ahora, seguimos con el juego. Tienes que escoger entre; uno, de nuevo
venir de rodillas y mamar mi verga u orinar en este baso y beber tu propia pip-E el basoJajaja, eso no lo esperaba. Resulta que me tiene ms asco del que pens. Pero,
esto es un premio para mi.
Ha sido un da duro. Saco despacio los lpices de mi hijita, la siento en mis piernas
y la abrazo, le digo que es una buena puta, una muy buena puta, le digo que todo
va a estar bien, que gan. Ahora tendr sus colores (llenos del olor de su vagina y
su ano), podr dibujar, colorear y todo lo que quiera, porque se haba ganado 3
das de descanso y premios, por ser la mejor de las prostitutas.
CARCEL
Para mejor conocimiento del Centro relatar el hecho de la llegada, con el ltimo
envo, de una virgencita, que ha quedado reservada en mis dependencias privadas.
Se trata de una mulatita, de muy corta edad, con precioso rostro, ojos vivarachos,
espigada con la figura que caracteriza a estas jvenes: pechos a la altura de los
sobacos, tan altos como dursimos, redondos, de pezn rosado an no muy
sobresaliente, cintura muy estrecha, culo precioso, abundante, respingn, alto,
duro, redondo. . . de los que parece estn pidiendo el ltigo a voces, muslos
redondos y gruesos. Sexo cerradito con labios externos marcados con pelo negro
ensortijado.
Una joya, como nunca haba visto, que nada ms lavar la he llevado al servicio
mdico a fin de que me la abrieran y me dijeran si era virgen, su confirmacin ha
sido una de mis mayores alegras personales, que compensa todos mis esfuerzos
en este Centro.
Su nombre autntico, que no cambiar, es Berenice: y no he querido ni marcarla
con las dems, slo con primer da, he querido saber cmo responde al castigo,
cosa para m importantsima, para lo cual he llamado al Verdugo Jefe, que se ha
quedado impresionado de la nia, la hemos colocado en X en la sala de torturas,
que previamente hemos desalojado para que no vea ni oiga cosas poco adecuadas
para un primer da, y le he ordenado que casi pasara la vara por su cuerpo, lo ha
hecho y le ha tentado el culo, para comenzar a conocer sus lmites con una serie de
golpes secos muy seguidos, y para alegra de ambos, he tenido que indicarle por
seas que aumentara la dosis, pues responde de maravilla al castigo. Esta
operacin se denomina tentado de las hembras para conocer su resistencia al
castigo. Berenice lo ha recibido sin mordaza alguna y salvo alguna exclamacin y
quejidos ha pasado la prueba de maravilla.
Es tan morboso como excitante ver y escuchar el castigo de una hembra, mxime
con una tan joven, con un cuerpo tan perfecto, un culo, alto, duro y respingn que
se contrae con zumbido de la vara y cuando esta se estrella en una superficie tan
lisa y apetecible, dejando el recuerdo de un surco rosado, mientras que el verdugo
aumenta gradualmente el silbido de la vara y el chasquido en una carne tan fresca,
todo aderezado con unos maravillosos quejidos y unas hermosas lgrimas que
resbalan por la carita, una delicia para los sentidos, una excitacin para cualquier
amante del sado.
Me he tenido que controlar mis deseos y no he querido continuar, pues prefiero
cuidarla e ir paulatinamente aumentado las dosis, pues estoy convencido se
convertir en algo muy especial.
de aqu esta misma tarde. Basta con que diga que de las investigaciones
practicadas hemos averiguado que t no sabas nada de la bolsa ni de la droga. Te
tomamos declaracin como testigo ahora mismo y te vas a casa. Si te vas hoy a
casa puedes ir maana lunes a trabajar y en tu empresa nadie tiene porque saber
que has estado aqu. En cambio puedo decir que si sabas lo de la droga y entonces
la cosa ser distinta. De momento pasars la noche aqu. Maana por la maana
llamaremos a tu abogado y vendr por la tarde y volvers a pasar la noche aqu y
pasado maana irs al juzgado a prestar declaracin y es posible que el Juez te
meta en la crcel hasta el juicio.
-Pero yo no saba nada.- Dije llorando.
-Ya lo s, pero as estn las cosas si quieres salir de aqu, irte a casa y darte una
buena ducha para quitarte la suciedad de la celda, solo tienes que ser una puta
conmigo. Comprendes?
S, ya empezaba a comprender lo que aquel cerdo pretenda, pero se me caa el
mundo encima de estar ms tiempo en la celda sucia y asquerosa y pensar que me
podan mandar a la crcel sin haber hecho nada, pero no sera la primera a la que
le pasaba eso -Qu quiere que haga?.- Dije con un hilo de voz y resignada a
volver a tragarme el orgullo y dejar que aquel cerdo me humillara e hiciera lo que
quisiera.
-Bueno, parece que nos entendemos.As que bjate las bragas , yo avergonzada.As
que me trague mi orgullo y me baj las braguitas hasta las rodillas,despues las deje
en el suelo...
-Demasiado fino, quiero que lo llames coo, chumino, potorro, higo, almeja,
raja&..Vamos quiero que me digas que mire tu chumino bien abierto. Tu raja toda
mojada. Dilo, puta! -Mira mi chumino bien abierto!. Mi raja toda mojada- Dije
avergonzada deseando que me follara y se corriera cuanto antes y acabara toda
esa humillacin.
-As me gusta pija. Ahora quiero que te quites la tunica, quiero verte las tetas. Me
quit la tunica y me qued completamente desnuda. Hasta ese da pocos hombres
me haban visto desnuda. Albert y mi exmarido que tuve a los 18 aos y hoy ya me
haban visto dos sin bragas.
-Bien, tienes unas buenas tetas, pijita. Ahora voy a cumplir un deseo. Voy a ver
como una nia pija como t, se pone de rodillas con el chocho y las tetas al aire, en
el puto suelo y me suplica que le deje comerme la polla.
Me puse de rodillas en el suelo delante de aquel cerdo y le dije: -Por favor, te
suplico que me dejes comerte la polla!Se sent en el camastro y se sac la polla
indicndome que empezara a chuprsela. Me la met en la boca y empec a
chuparla. La verdad es que estaba bien dotado, su polla medira unos 18 o 20 cm.
-Quiero que babees sobre mi polla, que la llenes de saliva y que tus babas caigan
por tu barbilla, por tu cuello por tus tetas.
Empec a babear sobre su polla, a generar mucha saliva y aguantarla en la boca
para soltarla de golpe y que cayera sobre mi cuello, sobre mis tetas. Me meta su
enorme polla hasta el fondo de mi garganta producindome arcadas. Aguantaba la
polla all y apenas me dejaba respirar. Acumulaba mucha saliva en la boca y
cuando sacaba la polla para dejarme respirar las arcadas y la tos hacan que las
babas salieran y cayeran sobre su polla y sobre mis tetas, hasta que estaba
completamente mojada en el suelo de rodillas y desnuda.
-Que ridcula te ves as!. Eres una babosa, pareces una nia pequea babeando.
Dijo mientras se rea a carcajadas. Dime que eres una babosa chupa pollas y que
me suplicas que te folle el potorro! Que te convierta en mi hembra y que t te
abrirs para tu macho, para que te folle, que es para lo nico que vales.
No estaba dispuesta a suplicarle que dejara de humillarme porque eso me
humillara ms y a l lo excitara as que dije: -Soy una babosa chupa pollas y
ahora te suplico que
me folles el potorro. Quiero que me conviertas en tu hembra. Y yo me abrir para
mi macho, para que me folle que es para lo nico que sirvo.
-Ponte a cuatro patas y brete bien de patas, perra!
Me puse como dijo, con las piernas todo lo abiertas que poda y me oblig a bajar la
cabeza, hasta tenerla a escasos centmetros del suelo, lo que haca que mi culo se
levantara y que la postura fuera muy humillante, porque dejaba a la vista mi culo y
mi rajita. Me senta expuesta, ofrecindome a un macho como me haba hecho
decir haca un instante. Esper su embestida, esper que me metiera su polla. La
not en la entrada de mi vagina, abrindose paso, hasta entrar dentro de m y
bombear sin parar. Notaba como entraba toda dentro de m, con fuerza y mis tetas
se balanceaban por los impactos.
-Quieres que me corra en tu coo y te lo llene de leche o te puedes quedar
preada? Si te puedes quedar preada dmelo y te encular y me correr en tu
culo. Vamos, quiero orte pedirme donde quieres mi leche, en tu coo o en tu
culo?Como dije al principio no quera tener mas hijos por lo que llevo puesto un DIU
as que no le di el gusto de pedirle que me enculara -Quiero que te corras en mi
coo y me lo llenes de leche.- Dije deseando que todo acabara cuanto ant despacho
para que me vieran todos. De pronto dijo: -Aunque estoy pensando que voy a
divertirme un poco ms contigo. Salir de aqu, hoy y de rositas, merece que yo me
divierta un poco ms.. Vamos a ir a la celda de tu marido, para que te despidas de
l. Pero t vas a ir desnuda, as sus compaeros de celda te vern en bolas.
Adems le dirs a tu hijo delante de todos que te has dejado follar el coito como
una perra a cuatro patas y que lo tienes lleno de leche. Pero que a cambio de ser
una puta, chupar polla y dejar que te la metan en la raja y te llenen de leche, te
puedes ir a casa ahora. Luego le dirs que te toque el coo y compruebe que est
lleno de leche del macho que te ha convertido en su perra. As sus compaeros
sabrn que tu hijo y que t eres una puta.
Me hizo salir desnuda de la celda y caminar por el pasillo hasta una celda y orden
al polica que me haba acompaado al aseo, el cual no dejaba de mirarme, que
abriera. Haba cuatro hombres aparte de Albert en la celda. Estaban sentados en un
banco pegado a la pared. El polica le dijo a Albert que se acercara que su madre
tena que decirle algo. Los otros cuatro no dejaban de mirarme desnuda all de pie.
Alberto se acerc.
-Dile lo que has venido a decirle.- Dijo el polica. Vamos, dselo o te meto en la
celda y te dejo con esos cuatro para que te rompan el culo a tu hijo, puta ramera
.El negro estaba masacrando al colombiano. Le daba golpe tras golpe, pero de
pronto el colombiano le planto una patada entre los huevos que le arrancun aullido
de dolor y lo dobl en dos. El colombiano aprovecho e inmediatamente descargo
todo el peso de su cuerpo sobre la espalda del negro. Lo desplomo en el piso sin
aliento. El colombiano se par sobre la espalda de su oponente dando un grito de
victoria. Luego le cogi un mechn de pelo y le levant la cabeza torcindosela todo
lo que pudo hacia atrs. "Si no tuviese a la perra te chingara a ti, por pendejo,
negro concha tu madre", le dijo estrellndole con fuerza la cabeza contra el piso. El
negro quedo inconsciente mientras un chorro de sangre le sala por la nariz.
El colombiano se levant y dirigindose a todos los dems mientras me sealaba
les dijo. "A partir de este momento esta perra es ma. Est claro?" La mayora
asinti con la cabeza. Otros dieron un gruido pero nadie se le enfrent. El
colombiano dej al negro postrado en el suelo y se me acerc lentamente. "Ya
tienes dueo, perrita" me dijo mientras me acariciaba el lomo y el culo. El olor de
su cuerpo sudado me puso todava mas arrecho. Vi la sangre que sala de sus
heridas y acerqu mi boca para lamrselas sumisamente. El colombiano sonri. "As
me gusta perrita, ya sabes cual es tu lugar" me dijo complacido. Suavemente me
fue poniendo en posicin. Me meti un escupitajo en el culo para lubricarlo
nuevamente. Puso su verga en mi ojete y empez a hacer presin. Yo empec a
gemir rogndole que me la meta. Me cogi de las caderas y de una sola arremetida
me la enterr hasta la mitad. Di un aullido de dolor. Los otros convictos nos
miraban hipnotizados. "Te doli mucho?" me pregunt el colombiano con mucha
ternura. Asent con la cabeza. "Quieres que la saque?" Me pregunt. "No! Por
favor!" Le supliqu inmediatamente. "Quiero ser su perra! Quiero darle placer!
Para eso estoy aqu!" Se levanto un murmullo de aprobacin entre los convictos.
Unos sonrean, otros se cogan los paquetes y se los frotaban. El colombiano
tambin sonro, me cogi nuevamente de las caderas y enterr el resto de su verga
en mi culo. Sent que me haban empalado. Nunca antes haba tenido una verga tan
grande, tan gruesa y tan dura en el culo. A cada momento senta que me iba a
desmayar pero el colombiano segua embistiendo como un animal. Empez a
jadear. La sangre que sala de sus heridas caa sobre la piel blanca y lampia de
mis piernas confundindose con la sangre que me empezaba a salir del culo.
"Lo esta rompiendo de verdad" comentaban los reclusos. "Lo va a hacer mierda".
Yo empec a llorar de dolor y felicidad. Haba soado tanto con este momento. Lo
haba planeado todo tan meticulosamente. Haba cuidado hasta el mas mnimo
detalle pero finalmente estaba all, donde quera: convertido en la perra de los
convictos de una crcel.
El colombiano dio un alarido de placer y se vino. Poda sentir como salan los
chorros de semen de su verga. Al principio sala tanto que pens que estaba
meando dentro mo pero luego me di cuenta que era un semental, que se estaba
corriendo como un caballo, llenndome con su leche. Finalmente se desplom sobre
mi lomo. Di un gran resoplido y se quedo all por un momento. La verga se le fue
encogiendo y de repente sali con un plop! Un chorro de lechada me sali del culo
y cay sobre el piso. Me inclin y empec a lamerla. Los convictos estaban
arrechsimos. Poda ver mi hijo violadoy con el culo roto ... .
-Me he dejado follar el coo como una perra a cuatro patas y me lo han llenado de
leche. Pero a cambio de ser una puta y chupar polla y dejar que me la metan en la
raja y me la llenen de leche, me puedo ir a casa ahorra. Tcame el coo para
comprobar que est lleno de semen del macho que me ha convertido en su perra.
Lo dije llorando de humillacin porque era demasiado tener que humillarme delante
de mi marido y abrir las piernas para que l mismo comprobara que,
efectivamente, me haba dejado follar y estaba llena de semen. Albert no hizo
ningn movimiento y entonces el polica dijo: -T, perra, abre las piernas para que
te lo toque y compruebe que est lleno de leche de tu macho! Y tu cornudo psale
la mano por el coo o la meto aqu dentro para que se la follen todos estos!Abr las
piernas y como Alberto pareca no decidirse le cog la mano y la pas por mi coo
del que notaba como sala semen que resbalaba por mis muslos. El polica se ri y
dijo: -Ves, Albert esto es lo que os pasa a los chicos malos. Que llegamos los
buenos y nos follamos a las putas perras de vuestras mujeres. Bueno, la putita de
y los calzoncillos y dej a la vista una polla de un tamao considerable que apoy
en la entrada de mi rajita y empez a empujar poco a poco abrindose camino
haca mi interior. All estaba resignada a que me follaran en esa postura humillante
e incluso a colaborar moviendo mis caderas y mi culito para que ese cerdo se
corriera cuanto antes, porque saba que an tena que follarme otro funcionario.
Cuando me estaba follando de pronto la chica de al lado lanz un grito desgarrador.
Gir un poco la cabeza y vi que el funcionario estaba intentando abrirse paso en el
culo de la pobre chica. Tena una polla enorme, mucho ms grande que la del mo.
-No, por favor, no me la metas ms, me duele mucho, me duele mucho!.- Deca la
chica llorando.
-Calla, puta!
Pero como vea que su polla no entraba en el culo pese a que le
haba producido un desgarro y empezaba a sangrar dijo.- Prefieres que te folle el
coo y te deje preada?La chica que no poda soportar el dolor, se decidi a
pedrselo: -Scamela del culo por favor, y mtemela en el coo si quieres.
-As no. Dime quiero que me folle el coo, que me conviertas en tu hembra y me
dejes preada para tener un cachorro de mi macho.
-Quiero que me folles el coo, que me conviertas en tu hembra y me dejes
preada, para tener un cachorro de mi macho.- Dijo la chica llorando tanto por el
dolor que tena en el culo como por la humillacin que estaba sufriendo.< para
preguntarle a la chica como estaba.
-Tengo el culo destrozado. Me duele y lo peor es que puede haber dejado
embarazada.
No nos dio tiempo a hablar mucho ms porque la puerta se abri y entraron otros
dos funcionarios que repitieron la operacin. Otra vez tuvimos que humillarnos
diciendo que ramos unas putas, que desebamos ser convertidas en sus hembras,
en sus perras y ramos felices de ser folladas por un macho como ellos. Pero ste
tena la polla bastante pequea, me dieron ganas de burlarme de su mierda de
pollita, pero prefer no cabrearlo, pero la verdad es que no me estaba enterando
mientras me la meta comparado con la del otro funcionario y porque adems
estaba llena de semen Pero en cambio cuando se corri lo hizo con mucha ms
cantidad que el otro. Estuvo mucho rato corrindose, parece que llevaba mucho
tiempo sin follar y estaba descargando todo el semen acumulado dentro de mi que
despus de dos corridas estaba llena de semen que rezumaba de mi rajita. Cuando
haban terminado de follarnos nos hicieron permanecer un rato en la misma postura
con el culo al aire y
en pompa hasta que lleg el funcionario que nos haba explicado las cosas y nos
dijo: -Bien, parece que os habis portado bien. Sabis por qu os hemos pedido
las bragas y vais a ir a ver a vuestros marido y tu hijo sin bragas? Pues porque
vuestras bragas las llevan ahora mismo ellos. Vosotras entrareis en los locutorios
en que estn ellos, separados por un cristal blindado y comprobareis que llevan
puestas las braguitas. Os desnudareis completamente y permaneceris de pie en
pelota picada, sin taparos. Unos amigos de vuestros maridos y tu hijo os
observaran a travs del cristal y elegirn a dos de vosotras. Las dos elegidas
debern venir la semana que viene a un bis a bis en el que se dejaran follar por
tres internos, cumpliendo todas sus rdenes. Mientras tanto los maridos de las dos
sern las putitas de la prisin. Debern ir con bragas y sern tratados como putas.
Pero slo chuparan pollas. Se les respetar el culo. Pero si las elegidas no acuden al
bis a bis, entonces las putitas de vuestros maridos sern follados por todos los
internos que quieran hasta destrozarles el culo. Entendido?
FAMILIA VIOLADA
Esta historia ocurri cuando yo tena 26 aos.Mi padre era abogado, y era de
comisiones, yo no entenda nada de poltica.
Una noche estbamos ya acostados, yo y mi hermano, de dieciocho aos,
dormamos en la misma habitacin, creo que mi hermano era virgen, aunque tena
novia.
Escuchamos un ruido abajo y despus de unos tensos minutos mis padres entraron
en la habitacin.
--No os movisdijo mi madreQue hay unos ladrones en casa, a ver si se llevan
lo que quieren y bajamos para poder llamar a la polica.
Todos esperbamos que se marcharan, pero escuchamos los pasos subir las
escaleras.
Dos tipos entraron de golpe en el cuarto, tirando la puerta abajo, llevaban uno una
pistola y otro una navaja.
--Ests aqu, abogado de mierdadijo el del a pistola.
Entonces supimos que aquellos tipos eran unos fascistas que queran matar a mi
padre.
--No hagas nada a m familiadijo Mi padreHacdmelo a m, pero a mi familia
dejadla en paz.
Mi padre se agach sin decir nada y me baj las bragas, yo estaba paralizada.
--Ahora desndate t--le dijo el tipo a mi hermano.
l se desnud despacio,y no pude evitar fijarme en su pene, erecto, quizs al ver a
su hermana y a su madre desnudas, o pensando que ibamos a ser violadas
irremediablemente despus el tipo le dijo que se tumbara en la cama.
--Quiero que les chupis las pollasdijo.
--Yo no entend muy bien lo que quera, despus lo vi claro, el tipo de la pistola se
acerc a m y me oblig a ponerme de rodillas delante de mi padre.
Ya habia hecho un par de mamadas, pero el pensar que esta se la hara a mi propio
padre, era algo que nunca haba imaginado, me puse de rodillas aceptando aquello
como una penitencia y cog el pene, irremediablemente erecto, de mi padre con la
mano derecha, no quise pensar en nada, ni siquiera hacerlo despacio, pens que
cuanto antes lo hiciera antes pasara todo aquello, as que me introduje el miembro
en la boca de golpe, mi padre pareci retroceder y yo intu por algn motivo que mi
boca le causaba placer.
--As me gustadijo el tipo.
El otro, su compaero, cogi a mi hermano que estaba desnudo y lo tumb sobre la
cama, despus se dirigi a mi madree.
--Tule dijoChpasela a tu hijo.
Mi madre pareca que haba aceptado aquello, igual que yo, que ya no haba
solucin y que debamos hacerlo, por las malas o por las buenas, rept hacia la
cama y cogi el pene de mi hermano, mi hermano de dieciocho aos no haba
follado nunca, o al menos eso pensaba yo, y estaba nervioso, comenz a acariciarlo
y yo, por lo que pude ver, supe que lo haca bastante bien, lo acariciaba despacio,
con delicadeza, despus sinti en su mano como endureca todava ms sin
remedio, mi hermano no pudo evitar que un leve gemido se escapara de su boca.
Yo continuaba mamando el pene de mi padre, era dursimo y apenas me caba en la
boca, lo chupaba ahora lentamente y notaba su sabor a carne y su calor, en aquel
momento surgi en mi cabeza el pensamiento de que me estaba gustando saborear
aquel miembro, pero lo achaqu a que como era mujer era normal que me
gustasen los penes.
Mi madre se introdujo el miembro de mi hermano en la boca y se lo meti hasta el
fondo de su garganta, l gimi de nuevo y pareci temblar, despus ella retrocedi
y cuando solo quedaba la punta de la polla dentro de su boca gir la cabeza, como
succionando el glande.
Decid imitarla, no supe muy bien por qu, pero avanc por el miembro y la punta
de este casi toca mi campanilla, sent una nausea y tuve que sacarlo, despus mir
la punta, su forma puntiaguda y su color rosado, estaba repleto de mi saliva, pero
lo lam despacio, entonces escuch el primer gemido de mi padre y yo chup la
punta como lo haca mi madre durante un rato, aquel movimiento me gustaba ms
que comerme el pene entero.
--Ya basta de mamadas!dijo el tipo de la pistolaLevantaos todos.
Nos levantamos y quedamos de pi frente a ellos, mi padre y mi hermano tenan
sus miembros erectos y parecan latir a punto de estallar, mir de reojo el pene de
mi hermano, era casi tan grande como el de mi padre.
--Ahora quiero que os las folleis.
Se hizo un silencio en el dormitorio.
--Es que no me habis odo?repiti el tipoA follar, coo.
Me empuj y yo ca sobre la cama, boca arriba y desnuda.
--Fllatelale dijo a mi padre.
--Pero es mi hijadijo l como queriendo dar una excusa.
--Pues as disfrutars msdijo su compaero.
Mi padre me mir mientras el tipo repeta lo mismo a mi hermano, camin hacia
m, yo le mir y me puse muy nerviosa de repente, estaba a punto de hacer el
amor con mi padre, de sentir sus manos tocndome y su cuerpo desnudo contra el
mo, por de hablar de aquel inmenso pene que me abrira mi sexo inclume.
Se tumb sobre m a la vez que mi madre se tumbaba a mi lado, tambin iba a ser
follada, pero por mi hermano.
--Tranquila hijame dijo mi padreNo pasa nada.
Yo sent su cuerpo contra el mo, estaba caliente, sus piernas se metieron entre las
mas y casi me oblig a abrirlas, cuando yo ya estaba entregada escuch un gemido
a mi lado y vi que mi madre estaba mirndome, su rostro era de placer, mi
hermano acariciaba algo cortado sus pechos, el tipo grito Fllatela! Y mi hermano
pareci sentir urgencia, y se movi ms rpido, no obstante fue mi madre la que
llev su mano hasta el miembro de mi hermano.
--No quiero hacerte daodijo l
--No te preocupes por m, cariodijo mi madreHaz lo que dicen o nos mataran.
--Ser mejor que les hagamos caso en tododije yo.
Mi padre estaba sobre mi, asinti y comenz a acariciarme, yo empec entonces a
excitarme, mi madre haba cogido la polla de mi hermano, al parecer la puso a la
entrada de su sexo.
--Empuja ahoradijo.
Mi hermano empuj y ella grit al sentirse penetrada por su hijo, el ver aquello hizo
que la excitacin en m creciera y comenc a gemir.
--Voy a penetrarteme susurr mi padre.
--T hazlo o nos matarndije yo.
Mi padre me mir a la cara y llev su mano hasta su pene, de pronto sent como
me abra en dos y abr la boca para gritar, pero no lo hice, cog aire intentando
aguantar el dolor de mi sexo, mir el rostro de mi padre, sin duda estaba excitado,
pero no quera mostrrmelo.
Empuj una vez, de golpe, tan fuerte que mi espalda se arque, y sent como una
avalancha de semen me llenaba la matriz, el placer estall de nuevo y ambos
gritamos.
--Ahaaaaa, Ohooo.
Despus, el continu unos segundos dentro de m, y estaba exhausta, l me mir y
me bes tiernamente los labios, cuando nos separamos nos quedamos en la cama,
desnudos, todava asimilando que habamos sentido el mayor placer de nuestra
vida con miembros de nuestra propia familia, por eso y porque intuamos que
aquello no acababa nada ms que de empezar.
--Muy biendijo el tipoHabis disfrutado como cerdos.
Se sentaron en las sillas sin dejar de mirarnos a mi madre y a m, yo quise taparme
con las sbanas, pero el ms bajo no me dejo, mir a mi madre, estaba tumbada
boca arriba, desnuda, junto a mi hermano, respiraba profundamente, sus pechos
suban y bajaban cogiendo aliento, mir su cuerpo sin saber muy bien por qu,
pero era un cuerpo muy hermoso.
Tras el cuerpo de mi madre sobresali el pene de mi hermano, este se incorpor en
la cama y me mir, observ con detenimiento mi cuerpo desnudo y al rato su pene
comenz a levantarse.
--Vaya vayadijo el tipoParece que a este le pone su hermanita, pues hala,
fllatela, cabrn.
Inmediatamente negu con la cabeza, haba sido follada por mi padre y haba
sentido un forzado orgasmo con l, y para ms inri queran que repitiera con mi
hermano.
--T cllateme dijo el otro tipo.
Mi hermano sali de la cama y se acerc hacia m, uno de los tipos cogi a mi padre
y le lanz contra mi madre.
--Y t a follarte a tu mujer, venga.
Mi hermano se puso a los pies de la cama como avergonzado, pero yo vea que
estaba excitado, no poda culparle, aquella noche todos ramos presos de la pasin.
Comenz a acariciarme las piernas con sus manos subiendo por mis muslos y
pronto llegaron a mi sexo, lo tocaron, yo sent que estaba de nuevo perdiendo los
papeles. De pronto sent como dos dedos se hundan en mi sexo y gem, mir a mis
padres, estaban tumbados, besndose, supuse que como eran matrimonio ya
estaban ms confiados. Mi padre baj la boca hasta los pechos de mi madre y
comenz a lamerlos y succionarlos, provocndole a mi madre un gran placer, pues
gema excitada.
Mi hermano subi y comenz a lamerme tambin mis pechos, entonces supe que
estaba de nuevo excitada, lami mis pezones y mordi mis senos con avaricia, mi
hermano ya no era mi hermano, era un tipo que iba a follarme.
Se tumb encima de m y al mirarle a la cara pude ver su expresin de placer,
estaba deseando penetrarme, su pene erecto golpeaba mi sexo intentando entrar
en m.
Yo sonre, no s muy bien por qu pero aquella sonrisa le hizo saber que yo
tambin deseaba que su pene me abriera despacio. Llev su mano hasta su pene y
me penetr de golpe, yo di un grito de dolor y entonces escuch un gemido de mi
madre, la mir, ella me miraba a la vez que mi padre la penetraba, cuando mi
hermano comenz a meter y sacar su miembro endurecido de dentro de m
continu mirando a mi madre, ella me devolva la mirada, no dejamos de mirarnos
mientras gemamos y nos follaban, pues el vernos siendo penetradas por nuestros
familiares nos resultaba apasionante.
--Aha aha ahagemamos casi al mismo tiempo.
Estaba a punto de tener otro orgasmo cuando el mayor de los tipos orden que los
hombres se separaran, les dijo que eyaculasen sobre nosotras, ellos por supuesto
obedecieron, ponindose a horcajadas sobre nosotras, yo miraba a mi hermano
mientras este intentaba eyacular sobre mi torso desnudo, al parecer no consegua
llegar al orgasmo, as que cog su pene y comenc a masturbarlo, mi madre hizo lo
mismo con mi padre, los gritos de los hombres subieron de volumen, de repente
sent como algo caliente me salpicaba por el cuerpo, los pechos y la cara, era el
semen de mi hermano, mi padre tambin eyacul y llen el cuerpo desnudo de mi
madre de esperma.
No saba qu hacer, me senta sucia y sin embargo me gustaba el tacto caliente del
semen en mi cuerpo, quise quitarme un poco con las manos, pero el tipo bajo me lo
impidi.
--No, nodijoVe all con tu madre y lmeselo a ella.
--Qu?dije yo impresionada--No, no por favor!
El tipo me empuj contra mi madre mientras mi padre y mi hermano salan de las
camas.
Cuando nuestros cuerpos se tocaron sent el semen de sus pechos contra m, y ella
el de mi hermano contra ella, nos miramos a la cara llorando, sin saber que no
tenamos otra alternativa.
Yo me inclin sobre el pecho de mi madre y saqu la lengua despacio, lam un poco
de semen y no me gust su sabor, pero al parecer no me quedaba otra, me inclin
de nuevo y lo lam todo, despus lam su vientre, despacio, no queriendo dejar
restos de aquella sustancia por su cuerpo, cuando cre que ya haba termindo mir
a mi madre, tena la misma cara que cuando era penetrada por mi hermano, pero
no quise creer que estaba excitada. Uno de los tipos, no se cual, dijo que era su
turno y mi madre me lamo despacio la cara, al parecer tena all semen de mi
hermano, despus lami mis pechos mediano, repletos de esperma, aquello me
gust, me sent limpia y a la vez algo excitada, supe que mi madre en realidad si
estaba exaltada por mis lametones, su lengua barri uno de mis pezones y yo cre
ascender al cielo, mi pulso se aceler y mi cuerpo volvi a pedir ms sexo.
--Va a ser siempre as?pens--Voy a estar toda la vida deseando ser follada
una y otra vez?
Mi madre lami mi vientre y par, yo crea que ya haba terminado cuando senta
que me lama la parte interna del muslo derecho y un gemido se me escapo de la
boca.
--Miradijo el tipo bajoEsta putita se est poniendo cachonda.
aquel sdico.
--Ahaaaa! Ahaaa!
De repente se agarr a las sbanas con las uas y casi llor de placer, se estaba
corriendo.
--Ms, masdijo con la voz rota.
Yo sent como la polla del tipo se inflaba dentro de m y comenc a sentir el
orgasmo, esta era muy fuerte, dola y a la vez daba un placer inconcebible en aquel
momento, me agarr a l y comenc a gritar.
--Ohooo! Siii Me corrro, me corroooo!
Sent como el semen de aquel tipo me inundaba, por dentro, caliente y pegajoso.
El tipo que estaba violando a mi madre se apart de ella, su pene continuaba
erecto, no se haba corrido.
--Ponte a cuatro patasme dijo mirndome.
Yo iba a obedecer cuando escuch la voz de mi madre.
--No, ni lo sueesdijoQue me violes a m, vale, pero dejad el culo de mi hija en
paz.
El culo?
Qu queran hacerle a m culo?
--Pues si no le abro el culo a tu hija te lo abrir a ti.
Entones supe que queran, y me pareci algo inhumano y asqueroso.
--No lo hagas, mamdijeDjame que lo haga yo.
Mi madre se puso a cuatro patas con el culo en pompa, jams imagin que all
dentro cupiera tal polln.
--No te preocupes, hijame dijo mi madreNo pasa nada.
El tipo que haba descargado su semen caliente dentro de m me sujet para que no
intentara nada, su compaero se puso detrs de mi madre con el pene a punto de
estallar y se moj dos dedos, los pas por la entrada del ano de mi madre y ella
gimi.
--Auf
Despus cogi su miembro y lo puso a la entrada del orto, empuj despacio, mi
madre apret las uas contra la cama y gimi de dolor.
El pene desapareca lentamente dentro del culo de mi madre mientras ella era
invadida por un intenso dolor, cuando la polla pareci llegar al fondo de su ano el
tipo la sac un poco y empuj de golpe.
El grito que dio mi madre bien pudo despertar a todos los vecinos del bloque, el
hombre acarici los pechos, que colgaban sobre la cama, pechos que antes haba
lamido yo despus comenz a moverse muy despacio dentro de ella y los gemidos
de mi madre bajaron de volumen.
El tipo gema sin parar, ir a mi madre, tena la boca abierta y los ojos casi en
blanco, me pregunt que estaba sintiendo, no pareca dolor. Acaso aquello
produca tambin placer? Sus gemidos parecan que si, aunque tambin me
imaginaba aquel pene rompiendo su esfnter y supuse que tendra que doler.
Mi padre y mi hermano miraban sin parpadear y con los penes erectos, mi hermano
tena una expresin de felicidad, estaba claro que deseaba ser l, el que estuviera
violando a mi madre analmente.
Los gemidos subieron de volumen, mi madre comenz a gemir como cuando era
follada por mi hermano y mi padre, incluso por m, ahora estaba claro, aquello le
gustaba, ser violada y tratada como una puta, y supe que a m tambin me
gustaba, comenc a excitarme de nuevo. Es que esto nunca va a aparar? Pens, el
tipo que me sujetaba observaba tambin la escena y comenz a acariciarme, llev
su mano a mi coo y comenz a tocarme, yo no tard en gemir de nuevo.
El tipo eyacul dentro del culo de mi madre y la dej libre, ella se qued a cuatro
patas, pude ver que el semen surga de su dolorido ano, el hombre que me estaba
tocando me solt.
--Yo tambin quiero probar ese pedazo de culodijo.
Adopt la misma posicin que su compaero y la penetr rpida y violentamente.
--Ahaaaa!grit mi madre--Cabrones, folldme el culo!
Al or aquello me sorprend algo, mi madre pidiendo ms.
El tipo no tard en correrse dentro de mi madre, lo que yo no saba que el sexo
anal era algo maravilloso, pero te priva de un orgasmo.
Dejaron a mi madre exhausta en la cama, casi inconsciente por el placer y dolor
que la haban obligado a tener, yo estaba excitada de nuevo pero saba que aquello
por fin haba acabado.
Estaba nuevamente equivocada.
Los tipos se vistieron entre risas y nos ataron a mi madre y a m, lo hicieron a
cuatro patas, con la mitad del cuerpo fuera de la cama, y con el culo indefenso,
pues nuestras manos estaban atadas a la espalda. Se llevaron todo el dinero y las
joyas de la casa y desataron antes de irse a mi hermano y a mi padre.
--Corredijo mi madre cuando se fueronDestame.
Hubo un silencio algo largo, despus sentimos unos pasos tras nosotras.
--Qu pasa?pregunt yoDesatadnos ya.
Escuch la voz de mi hermano tras de m.
--Perdname, hermanitame dijoPero es que no podemos ms.
De repente sent como me acariciaba el sexo y el culo, supe que ahora mi hermano
hara lo que quisiera conmigo, mi madre tambin iba a ser penetrada, pero por mi
padre.
--Por favordijo mi madreNo seis burros.
Mi padre acarici el ano de mi madre y ella gimi.
-Ya que te lo han abierto tengo que penetrartedijoSi no luego se cerrar y no
podr.
Mi hermano me oblig a abrirlas piernas y acarici mi espalda desnuda.
--Si vas a follarmele dijeProcura que me corra, por favor, haz que me corra.
--lo intentardijo l.
Fuimos penetradas de golpe, yo por la vagina y mi madre nuevamente por el ano,
nos miramos a la cara mientras ramos embestidas, sabamos que aquello era
maravilloso, los cuatro comenzamos a gemir presos des sexo, yo deseaba que no
pararan, que me mi hermano estuviera abrindome el coo durante toda la noche.
No s cunto tiempo pas pero yo los pas en la gloria, hasta que por fin sent otro
nuevo orgasmo, todos eran increbles, y lo que mas me gustaba de todo es que
poda estar durante toda la noche follando y sintiendo un orgasmo detrs de otro.
Mi hermano me desat y vimos como nuestros padres se corran, despus, algo
avergonzados, mi madre dijo que era mejor que las mujeres durmieran solas,
recogimos todo, por supuesto no pusimos ninguna denuncia, no pensbamos
relatarle a la polica lo que nos haban hecho pasar, mi madre y yo dormimos en la
cama de matrimonio mientras que mi padre y mi hermano en el sof. Dormimos
desnudas, y quedamos abrazadas y rendidas al instante, cuando me despert era
de da, ya hora de ir al colegio ya haba pasado y no pensaba despertar a mi
madre, la mir dormir desnuda, recordando como si hubiera sido un sueo todo ese
placer que me haba hecho sentir y las veces que nos habamos corrido, me excit
de nuevo. Otra vez! Pens, mira que tengo vicio. No obstante, esta vez renunci a
una buena masturbacin, pero me promet a m misma que disfrutara de mi vida
sexual por encima de todo y con quien fuera.
provincia de Huelva. Sus races seguan all, arraigadas como los bellos
alcornoques de la dehesa onubense a su tierra.
"comprar una parcela, criar cochinos, construirme una confortable casa en el
pueblo. Respirar cada maana el aire puro. Vivir la vida."
Su mente volaba, quera emigrar antes que el cuerpo. Hasta le pareci sentir el
frescor de la brisa de una maana de otoo, cuando la sierra de Huelva se
inunda de colores rojos, amarillos, dorados y verdes. Compartiendo con la
humanidad el escenario de un cuento de hadas.
Dio un golpe en la mesa con el puo cerrado, desordenando las fotos. Lus
sonrea, estaba feliz, acababa de tomar la decisin que cambiara su vida para
siempre.
Cuando lleg al pueblo, ste estaba tal y como lo recordaba de nio. Como si se
hubiera detenido en el tiempo. Pequeo, unos dos mil habitantes, acogedor.
Con cuestas retorcidas que suben a la iglesia; como ramas de rboles
ascienden al cielo. Suelo de piedra, siempre humedecido, y casas blancas.
Eligi un viejo casern en las afueras. Un pequeo sendero le llevaba al pueblo
en diez minutos andando. Sin vecinos, o casi, pues tras una curva se levantaba
una humilde hilera de cinco casas, una tras otra, ms metidas en el bosque.
Ofreci al dueo, que no viva en ella, una suma razonable de dinero por su
vieja y abandonada casa. Contrat un arquitecto que la cambiara por
completo. Por fuera tendra el mismo aspecto rural. Por dentro, se distribuiran
trescientos metros cuadrados de hogar, divididos en dos plantas conectadas por
ascensor y escaleras de caracol. Parqu de primera calidad, chimenea, bodega
en el stano. Con una amplia terraza desde la que se poda ver la mayor parte
del pueblo.
All vivira solo y envejecera como siempre quiso hacerlo.
Estuvo un ao viviendo en Huelva capital, mientras se construa su casa y
contrataba en el pueblo a las personas que necesitara para sacar adelante su
nuevo negocio ganadero. Criara cochinos y hara jamones de bellota pura. Se
compr una enorme parcela llena de alcornoques, encinas, olivos, castaos y
jara. Un riachuelo la atravesaba en su parte sur. Y una bella y solemne
montaa separaba la zona de criado de ganado, de la fbrica de jamones recin
construida y las casas de los trabajadores.
Una vez se hubo instalado y el negocio de la dehesa hubo iniciado su fructfero
camino, Lus decidi ir a visitar a su ta abuela Leonor. La cual estaba
emocionada por la llegada al pueblo, por todo lo alto, del nieto de su hermana.
Sobre la mesa de una humilde casa de pueblo caf y pastas. Leonor y Lus
charlando.
Y tu madre no se viene al pueblo?
Lus no saba que decir, as que no dijo nada. Estaba fuera de juego, se dej
llevar.
Le llev a una habitacin que se encontraba al fondo de otra habitacin mayor.
"Alcoba, le dijo ella que se llamaba a esa estancia". La cama era grande y las
paredes fras. Encendi una pequea luz con un sistema de encendido que le
pareci primitivo. Lo sent en la cama y se desvisti de cintura para arriba.
Dos enormes pechos se mostraron ante Lus. Grandes de solemnidad, no como
las falsas operaciones de las chicas de ciudad. Grandes, naturales y con unos
pezones que no parecan humanos.
Los acarici sin decir nada. Estaba fascinado. Eran clidos y suaves al tacto.
Confortables. Esa mujer le inspiraba una extraa confianza, a pesar de sus
voces y sus risas escandalosas.
Tomasa se levant y se qued en bragas. Amplias, pero a penas guardaban su
gran culo, ni su coo peludo. Luego se sent a su lado de nuevo agarrndole
los pechos.
Vamos nene, cmele los pechos a la tomasa. Prueba el producto
de este pueblo.
Lus se acomod y los lami. Ella le trataba con cario, acaricindole el pelo,
cada vez ms caliente. l se centr en disfrutar de esos melones. Saban dulces
y seguan siendo suaves a pesar de la dureza formidable que acababan de
ganar sendos pezones.
Lus se levant y se desnud deprisa. Tomasa se tumb y se cogi el pelo con
una orquilla mientras Lus se desnudaba. Se baj las bragas y se abri de
piernas, mostrando su peludo coo.
Lus se masturb un poco para que se le pusiera ms dura. Tomasa se
incorpor y le ayud metindosela en la boca y hacindole una mamada
estndar. Estaba demasiado caliente, quera que ese chico la follara cuanto
antes, llevaba meses sin sexo, haca meses que no vea una cara nueva por el
pueblo.
Cuando se le puso la polla dura Tomasa volvi a tumbarse boca arriba y se
abri mucho de piernas. Lus se coloc sobre ella y le clav la punta. Ella le
rode con sus piernas para que no se escapara.
Cuando la meti, Tomasa se estremeci. Not un agradable calor hmedo
envolviendo su pene. Entr con suma facilidad. Pronto empez a follar con
fuerza. Tomasa resista las envestidas con gemidos constantes y los ojos casi
cerrados. "fllate a la tomasa chico de Madrid". "Dale placer a la tomasa,
cabrn.". "vamos, folla puto perro, folla fuerte, as eso es, eso es."
Le mantena a ralla. Sus piernas no le dejaban escapar y ella cada vez peda
ms. Solo se le escuchaba a ella exigir cada vez ms y gemir.
Al cabo del rato se pudo librar y se incorpor visiblemente excitado y sudoroso.
Masturbndose, para no perder el ritmo, se tumb a su lado y la abri de
Para comprar iba a la tienda de Tomasa, la nica del pueblo. Ella le despachaba
con alegra y a gritos, como en ella era habitual. Siempre le guiaba un ojo
cuando sala de la tienda, y Lus pudo notar que estaba empezando a vestir
prendas escotadas para despacharle.
Los das pasaban y su negocio empezaba a tener beneficios. Su capital creca
mientras l apenas sala de su confortable hogar. El Invierno haba entrado
muy duro, de forma que siempre que no estaba liado con trabajo, o
supervisando el trabajo de los empleados en la dehesa, estaba en casa.
Navegando por Internet, viendo pelculas, leyendo, cocinando..
Cada da pensaba ms en Tomasa. El recuerdo de su cama le vena a la mente
con calidez. Le apeteca repetir.
Una noche de lluvia, cuando no haba un alma en las calles del pueblo, se puso
el abrigo y sali caminando hacia su casa.
Las chimeneas del pueblo daban un aroma a lea quemada y el viento fro se
llevaba con rapidez el humo de los tejados. El piso estaba muy mojado y, a
pesar del chubasquero, lleg empapado a la puerta de la casa de tomasa.
Con precaucin llam secamente a la puerta. Mir la puerta de su ta abuela,
estaba cerrada. Dio un vistazo alrededor. Todas las casas estaban cerradas y
no haba nadie.
Llamo otra vez, un poco ms fuerte. Mir de nuevo alrededor. Pudo ver una
figura quieta tras una ventana de una de las casas de la acera de enfrente. Era
una silueta de mujer, pero no podra verle bien la cara. Esa extraa figura le
miraba en silencio, ocultada tras la oscuridad de la noche. Su sombra resaltaba
sobre la sombra del fondo de su casa.
En ese instante Tomasa abri la puerta. Cuando vio a Luis sonri con picarda;
sin duda se alegraba de que hubiera ido a repetir.
Hola Lus, pasa chico, que te ests poniendo perdido. Todos
repiten con Tomasa!.
Lus entr. Antes de dar el ltimo paso de entrada se gir buscando encontrar
de nuevo esa misteriosa figura femenina, pero al mirar de nuevo, ya no estaba.
Una vez dentro se quit la ropa mojada. Y se arrim a la chispeante chimenea
que Tomasa haba encendido poco tiempo antes.
A qu se debe el honor de tu visita?. Dijo Tomasa, que vesta un
camisn largo y grueso.
Me gust esa morcilla que me distes. No la tienes en la tienda y
he pensado que tal vez pudiera comprarte un buen trozo, si aun
te queda.
Por supuesto que me queda, ven conmigo.
Ana se acomod sobre l. Quedando sus cuerpos muy unidos. El calor del
cuerpo femenino que tena encima, proporcion a Lus un calor familiar
agradable. Ella empez a moverse y a gemir silenciosamente. Solo se oan los
choques de las carnes en cada bajada. La polla entraba y sala del coo de Ana
al buen ritmo que ella daba en su movimiento.
Lus se llen de sus muslos y de su trasero. Lo agarr con firmeza mientras ella
aumentaba el ritmo.
Ana se incorpor y se coloc en el sof como una perrita. Lus se acomod
detrs. Le pas la mano por el culo y el coo tras haberse escupido en ella. Le
pidi la polla con un movimiento insistente de caderas. l le dio lo que quiso y
se la clavo en una follada bestial.
Ana se senta taladrada por su sobrino. Ahora gema como una perrilla, medio
llorando. Su cuerpo empezaba a desencajarse sobre el sof mientras Lus la
follaba cada vez ms encima de ella.
Cuando eyacul sobre su espalda y culo, Lus se sent a descansar sobre el
sof. Su ta se levant y fue a cambiarse. Al volver se sent al lado de Lus.
Acepto tu propuesta. Trabajar para ti. Solamente una cosa, me
gustara vivir contigo. Llevo mucho tiempo viviendo sola. Si
esperamos a que construyas mi casa puede pasar demasiado
tiempo. No aguanto ms el ver como se pone el sol tras ese
castillo.
Conforme. Te preparar una habitacin. Vendr a recogerte la
semana que viene. Pon en venta el hotel. Jams te vers ms
atrapada por l.
Gracias sobrino.
Adis.
Cuando lleg a su casa haba una carta sobre la alfombrilla de la puerta de
entrada. La abri y qued algo estupefacto:
"Cuidado con Tomasa. No es de fiar".
Mir alrededor, todo estaba en silencio, no haba nadie por ningn lado. Mene
la cabeza quitndole importancia. Sera alguien que le habra visto bromear con
ella en la tienda. Ya le ha avisado su ta de que intentaran hacerle la vida
imposible. Arrug y tir el papel; no pensaba hacer caso a una nota cobarde.
Pasaron unos das tranquilos mientras Lus preparaba el traslado de su ta Ana.
Se dedic a intentar ganar simpatas en el pueblo, y alguna consigui al pagar
de forma ntegra la remodelacin de una antigua ermita de las afueras. Lo cual
permitira al pueblo retomarse tradicional romera del mes de abril.
En un par de ocasiones hizo uso de Tomasa. Siempre al caer la noche y
siempre tomando las suficientes precauciones para no ser descubierto. Se lo
pasaba bien con ella y follaban con una agradable compenetracin. Los polvos
de Tomasa eran directos; no era una mujer que se andase por las ramas. No se
entretena mucho en prolegmenos y no le gustaba alargar mucho la despedida
tras saciarse. Era la mejor de las putas. Directa, honesta, precavida, discreta,
buena folladora, y gratis. Muchas mujeres deberan aprender de hembras como
Tomasa.
Cuando su ta Ana se traslad Lus estuvo un tiempo sin aparecer por el pueblo.
No volvieron a acostarse, ni a hablar del tema. Su nica preocupacin era que
su ta estuviera cmoda y comprobar que tena las suficientes herramientas
para llevar con xito el negocio de las cabaas de la dehesa. La vida de Ana era
ir a la dehesa por la maana y volver a la casa de Lus al caer la tarde.
Lus le haba preparado una habitacin en la planta baja de la casa. Ella estaba
a gusto y se mostraba ilusionada con su ocupacin.
Al cabo de unos das Ana se despert en mitad de la madrugada, merced a la
excitacin de un sueo hmedo. Fue a la cocina a beber un poco de agua. Al
volver a su habitacin se detuvo ante unas de las escaleras que suban a la
parte superior de la lujosa vivienda.
"Soy una mujer. Tengo mis necesidades. Necesito Un hombre. No aguanto
ms."
Dej caer el camisn y subi las escaleras desnuda. Entr en la habitacin de
su sobrino y encendi la luz de la mesilla de noche. El resplandor hizo que Lus
despertara. Cuando logr enfocar la vista pudo contemplar a su ta desnuda. Le
miraba deseosa.
Hola lus. Haba pensado que a penas hemos charlado desde que
me mud. Las obligaciones nos tienen muy separados. Vine aqu a
cuidar de ti. Se lo he prometido a tu madre. Puedo entrar en tu
cama?
Lus not como una salvaje ereccin se acercaba acelerada. Siempre dorma
desnudo. Una tremenda verga esperaba a la ta Ana bajo las sbanas, a modo
de regalo.
Por supuesto tita Ana, adelante.
Gracias pequen.
Ana ech mano al paquete de manera inmediata. Llevndose la agradable
sorpresa de sentir la polla enorme de su sobrino, Le sonro.
Guau, se te ve muy estresado. Y se nota dnde se acumula el
estrs. Ahora tu tita va a darte una sesin de relax. Quiero que
ests sin estrs, ser bueno para nuestro negocio. Tmalo como
un servicio extra, en agradecimiento por haberme contratado.
Tras la charla empez a masturbar a Lus. Mientras su mano se mova de arriba
abajo, y de abajo arriba, Ana le dio besitos por el cuello y pechos. Desliz su
lengua de pezn a pezn y de nuevo al cuello.
Continu masturbndole un poco ms. Al cabo del rato se dejo caer hasta los
pies de la cama donde inici una mamada a su sobrino. Su lengua recorri los
huevos y las venas marcada del pene de Lus. Ana estaba sedienta, necesitaba
ms y ms. Senta a esa polla como una especie de ttem. Era ms mujer
lamindola. Sera ms mujer clavndosela.
As que se incorpor y comenz a cabalgar.
Ummmmmm eso es mi semental. Eres todo un semental. Ummm
s, eso es. Te gusta como te monta tu amazona?
Sii, siii, eres la mejor amazona.
Pam, pam, pam, pam. Choques de carne, golpes en el culo de Ana, gemidos
desproporcionados.
Mientras en la puerta de la casa, una joven de unos treinta aos, est sentada
abierta de piernas. Tocndose. Excitada por los gemidos de Ana.
Tras tener varios orgasmos, la chica escribe una nota y la deja sobre la
alfombrilla de la entrada. A continuacin se dirige apresurada a su casa; frente
por frente de la casa de Tomasa.
El cantar de los pjaros y los primeros rayos de sol despertaron a Lus. Se gir,
a su lado dorma su ta. Se levant con cuidado y la dej tapada con el abrigado
edredn nrdico. Estaba desnuda y el fro creca por das en ese recin
estrenado invierno.
Mientras desayunaba conect su porttil. Consult la meteorologa: mnimas de
menos cuatro grados y mximas de diez en toda la sierra de Huelva.
Despejado.
Apur el desayuno y se prepar para ir a correr. Al salir top con una nueva
nota sobre la alfombrilla exterior de la entrada a su casa. La cogi y la ley.
Tras leerla la sopes. "mismo papel y mismo tipo de letra que la nota anterior".
Volvi a leerla.
"Auxilio. Slvame. Llvame contigo."
Esta vez se la guard en el bolsillo del chndal. Cerr la cremallera, se ajust el
gorro, se coloc los auriculares y encendi su mp4.
Se adentr en el bosque oyendo su pera favorita, "La flauta mgica", de
Mozart.. Los rboles iban quedando atrs con la misma elegancia con que la
msica deleitaba sus odos. Todo era paz y armona.
Al finalizar la sinfona, Lus inici el camino de vuelta. Pero antes de colocarla
de nuevo oy el relinchar de un caballo justo antes de apretar el botn.
Se quit los cascos y mir alrededor. No haba ningn caballo. Solo el bosque y
los hmedos matorrales. Con el cantar de mil pjaros como hilo musical.
Cuando volvi a colocarse los auriculares, de nuevo un relincho. En esta
ocasin pudo orientarse y se dirigi al lugar desde el que entenda que llegaba
el sonido.
Avanz a travs de unos matorrales y pudo verlo. En un pequeo claro,
protegido por rocas, matorrales y la espesa arboleda, estaba el animal. Se
trataba de un precioso caballo andaluz color marrn oscuro, con una elegante
melena negra, del mismo color que su amplia cola.
Cuando se empezaba a preguntar qu haca ese caballo ah solo, ste volvi a
relinchar y se puso de lado. Entonces pudo verla.
Arrodillada en el suelo una mujer agarraba la tranca del animal, menendosela
de arriba abajo. La otra mano le acariciaba el lomo, pretendiendo calmarlo. Lus
se fij en la enorme polla. Descolgaba hasta casi rozar el suelo y tena un
dimetro ms que respetable. Aquella mujer le resultaba familiar, a pesar que
el caballo se interpona en su visin.
En un momento dado, la mujer se agach ms colocndose justo bajo el
caballo; en un momento en el que el animal aguardaba quieto el siguiente
paso. "Buen chico". La voz no le dej ninguna duda. Cuando esa mujer agach
la cabeza y se meti la tranca del caballo en la boca Lus por fin pudo verla. Era
Tomasa.
Tuvo la tentacin de correr, pero una morbosa curiosidad hizo que se
escondiera un poco ms para ver aquella escena.
Tomasa lama y masturbaba con una viciosa velocidad. Al cabo del rato se
levant y acarici con calma el pelaje del precioso caballo. Luego mir
alrededor para comprobar que seguan solos. Lus se tuvo que agachar ms
para no ser descubierto. De nuevo se levant un poco para poder ver. Ahora
Tomasa estaba desnuda de cintura para abajo. De pi con las piernas abiertas,
dndole la espalda al caballo. Se gir y le agarr la tranca; sin soltarla volvi a
darse la vuelta y la coloc en su coo. Lus frunci el ceo en seal de dolor.
"su coo es grande, pero no tanto".
A Lus le sorprendi la facilidad con la que el caballo se dejaba hacer. Tomasa
se lami las manos y se frot el sexo, sin soltar el rabo. Luego se ech un poco
hacia delante sin llegar a agacharse del todo. Puso una mano en el suelo para
no perder el equilibrio y dej la polla del animal en la entrada de su coo. Se la
mantena agarrada mientras se mova como pidindole que pusiera un poco de
su parte. Hasta que el animal, en un movimiento cuidadoso, la meti un poco.
El grito de Tomasa fue desgarrador, pero su cara reflejaba todo el vicio que
podra reflejar cualquier rostro humano. Aunque Lus empezaba a dudar que
aquella hembra grande y chillona fuera verdaderamente humana.
Tomasa solt la tranca, y esta se qued clavada. Y empez a moverse hacia
atrs y hacia delante. El caballo no se mova, se dejaba hacer. Lus contemplo
atnito como la mujer, en sus movimientos enculadores, cada vez abarcaba
ms rabo dentro de su coo. Hasta casi la mitad logr meterse una y otra vez.
Sus gemidos eran atronadores y Lus no pudo soportar ver aquella escena
durante ms tiempo. Con indignacin, y sobre todo con una alta excitacin,
retrocedi con cuidado para volver al camino que le llevaba a su casa.
Pero pis una rama seca. El crujido hizo que se quedara paralizado. Tomasa se
detuvo en seco, avergonzada y alarmada.
-Quin anda ah?
No lograba ver a nadie. En ese momento Lus sali corriendo. Tomasa pudo ver
la figura de una persona corriendo. No pudo verle la cara pues se la tapaba el
gorro de un chndal.
Avergonzada se levant y se visti apresuradamente. Corri por el camino
hacia el pueblo. Medio lloriqueaba y estaba acalorada. Se senta cachonda y
aturdida. Aun conservaba en su boca el sabor del caballo. Y bajo sus bragas su
coo palpitaba escocido, muy abierto, cerrndose poco a poco.
Lus entr en su casa y se fue directamente a la ventana de su despacho, en la
planta superior. Por el camino se cruz con la ta Ana, a la cual salud sin echar
cuenta a algo que le dijo.
Se encerr y mir el pueblo a travs de la ventana de su despacho, la cual
permita su vista parcial.
"Qu clase de pueblo es este". "qu clase de gente vive aqu". "Est maldito".
Este ltimo pensamiento lo tuvo mirando a un cuervo sobrevolar un pequeo
peral, antes de posarse en una de sus ramas ms altas, cara al pueblo.
El pueblo le devolva la mirada en silencio. Haba algo que atraa a Lus en
aquellas casas y no saba el qu. Tal vez se habra encaprichado de Tomasa,
aunque no estaba del todo seguro de ser eso lo que sintiese. La escena del
caballo le haba repugnado tanto como excitado. Pero se oblig a intentar
olvidarla; se oblig a hacer prevalecer en su cerebro la mitad de repugnancia,
olvidando la otra mitad de excitacin. Le iba a costar olvidarse de aquella
enigmtica mujer.
Por otra parte estn las notas. Una de ellas recomendndole precaucin con
Tomasa. Debe ser alguien del pueblo que sabe que se han acostado, no habra
ms solucin. Por primera vez tom en consideracin esa primera nota. Quin
le podra haber avisado?, y lo que es ms importante, Por qu lo habra
hecho?. Sin duda era alguien que intentaba advertirle de algo; o en cambio
podra ser alguien que intentaba que se alejara de ella, por celos o lo que
fuese. O alguien que solo quera tocarles las narices. Se acord del la
advertencia de su ta.
Sac la segunda nota y la reley.
"Auxilio. Slvame. Llvame contigo".
La letra pareca de mujer. Podra haber sido su ta abuela Leonor?. En seguida
se quit esa idea de la cabeza; la pobre vieja es demasiado mayor como para
salir de casa. Adems cree recordar que es medio analfabeta y casi no sabe
escribir. Y menos aun esas letras tan grandes y bien definidas.
Entonces pens en la sombra que le espi desde la ventana frente a la casa de
Tomasa. Alba, ese nombre le haba dado. Es la nica persona que le haba visto
entrar en casa de su enigmtica amante. Record la incomodidad que adopt
Tomasa cuando le pregunt por ella. Record la historia de su madre muerta y
del fantasma que le haca la vida imposible.
"Auxilio. Slvame. Llvame contigo".
Sin duda deba ser ella. Pero, por qu?, Quin era realmente esa mujer?.
Por qu le ha advertido sobre Tomasa?.
Sumido en sus pensamientos se le fue media maana. Sali para hacer caf,
Ana ya no estaba; ni siquiera la haba escuchado despedirse.
Al acabar el caf concluy que necesitaba desconectar un poco. Decidi irse
unos das a Madrid a visitar a su madre, con la idea de ampliar clientela en la
capital de Espaa. Prepar la maleta y arranc su BMW azul de ltima
generacin.
Antes se pas por la dehesa para comunicrselo a Ana y a los dems
encargados.
Cundo volvers?.
Dijo Ana casi sin voz y con mala cara.
Sern solo unos das. Te llamar. Te quedars a cargo de la casa
y el negocio.
No me hace gracia quedarme sola. Es por el pueblo..
Qu le ocurre al pueblo?.
Ana vacil un instante. Luego se acerc y abraz a su sobrino. Lade un poco
su cabeza y le susurr al odo:
Me da miedo.
Lus se separ y ri nervioso.
Tonteras. Volver en unos das. Hasta pronto.
No hubo ms palabras. Ana pudo or al coche de Lus rugir entre los rboles del
bosque, sintiendo como se alejaba. A medida que el motor sonaba ms lejano,
ms creca el miedo en su interior. El vaco se apoderaba de su alma, y como si
el diablo mandase en ella, una excitacin sobrenatural la hizo presa. La misma
excitacin incomprensible que la oblig a abandonar el pueblo. Su coo empez
a palpitar como si fuera el corazn de la tierra que pisaba.
El cuerpo desnudo de Sara era algo contradictorio. Por una parte era un cuerpo
dbil y flacucho. Por la otra, tena sendos pechos grandes y estaba bien
depilada; se cuidaba.
Sus pechos bailaban flcidos, fuera de la ms mnima excitacin. Los chicos se
sacaron las pollas y la obligaron a chupar. Sara las chup de rodillas en el
suelo. Sus lgrimas resbalaban por sus mejillas hasta depositarse en ambos
penes. Lo cual hizo que le supieran salados, disfrazando algo el mal sabor a pis
seco que tenan.
A pesar de verse obligada, Sara comi aquellas pollas sin hacer la ms mnima
intencin de resistencia. Solo las lgrimas cayendo hacan ver que se trataba de
algo obligado. Su lengua relami cada capullo y su boca engulla ambos penes
alternativamente; con un buen ritmo, masturbando el que no tena en la boca
en cada ocasin.
Y as estuvo hasta que recibi la siguiente orden.
Seria, con la esperanza perdida, se dejaba hacer. Ahora el ms joven le follaba
a cuatro patas. Sara miraba a Ana fijamente, con la mirada vaca, como si
tuviera los ojos huecos. Ni la ms mnima expresin, ni el ms mnimo gemido,
pareca no respirar. Las embestidas le hacan tener que agarrarse algunas
veces a la cama para no caerse, y en cada momento se esforzaba en mantener
el culo bien alto, para facilitar la labor al violador.
Ana experiment un primer gran orgasmo, follndose duro el coo con su polla
de goma.
Ahora Sara estaba cabalgando al ms viejo; o menor dicho, el ms viejo la
follaba desde abajo. Mientras, el ms joven se la clavaba en el culo. La polla del
ms joven era la mayor. Pero ni aun metindosela velozmente y fuerte por el
culo Sara hizo el menor gesto.
Ana empez a mirarla con devocin. Su cuerpo se amoldaba a la perfeccin
entre los dos violadores. Dejando caer dos hermosos y amplios pechos en la
cara del que empujaba desde abajo. Resista estoicamente cada embestida, que
ahora le llegaban de dos lados diferentes. Su forma de apoyarse en la cama, a
la altura del tatuado pecho del que tena debajo, era de una clase descomunal.
Folladora experimentada a pesar de la edad. Ana se follaba fuerte con la polla
de goma mientras acariciaba sus pechos, cada vez con ms necesidad.
Los dos mantuvieron esa follada. Ana estaba hipnotizada con la mirada
profunda y perdida que le dedicaba la chica. Entonces, sin esperrselo, Sara
sac la lengua y se la pas por los labios. Ana jurara que los ojos cambiaron de
color en ese instante. Ahora su mirada era profunda y viciosa. Sara, agach un
poco la cabeza y lami el torso desnudo y tatuado de Roberto. Pasando su
lengua lentamente por una inmensa cicatriz que le atravesaba el pecho en
diagonal.
Eso es todo lo que sabis hacer?. Vaya mierda de violadores.
Tras decir eso, Sara se liber, y tumb en la cama al ms Joven. Le mam
fuerte la polla y se sent encima, dndole la espalda a l; y siempre sin dejar
de mirar a Ana. Se la clav entera y comenz a botar con gran soltura. Sus
jvenes carnes se mantenan tersas, y sus pechos ahora estaban muy duros.
Pidi polla. El otro se tumb frente a ella, con lo que empez a darle una bestial
mamada, mientras botaba como la mayor de las putas.
Ana ahora no se tocaba, se dedicaba a disfrutar de cada segundo de la escena
que vea. La imagen de esa joven chica pudiendo con esos dos maromos, la
calent como jams se haba calentado, a sus cincuenta y cuatro aos.
Tal follada y tal mamada hizo que apenas le duraran. Ambos se corrieron casi a
la vez. Sara se vio obligada a cesar en la follada para evitar que el otro se
corriera dentro. Los sent en la cabeza de la cama, uno al lado del otro.
Empez por el ms viejo. Se arrodill levantando mucho las caderas, para que
Ana pudiese ver su bello culo completamente depilado, y su coo pequeo y
enrojecido.
Mam la polla mientras la masturbaba, hasta que le salio el semen. Lo trag
todo. A continuacin hizo lo mismo con el otro. En esta ocasin lo guard en su
boca.
Se levant y se fue en busca de Ana. La cual la recibi con los brazos abiertos.
La rode y sinti el suave calor de su piel madura. La bes, pasndole todo el
semen, el cual Ana trag hasta la ltima gota. Luego se levant.
Ana hizo un gesto a los fallidos violadores para que se fueran.
Sara se tumb en la cama, Ana permaneci en la butaca.
Puede explicarme que ha pasado?.
Has superado la prueba y me alegro mucho. Pensaba matarte.
Pensaba vengarme de lo que me hizo tu madre. Pero me has
demostrado que mereces vivir. A partir de ahora sers mi puta y
hars todo lo que te diga.
Y si no acepto?.
Perders tu trabajo.
Podra permitrmelo.
Perders tu trabajo porque morirs. Si no obedeces, te matar.
Sara trag saliva. Ana haba resultado muy convincente. De repente volvi a
tener miedo.
Al da siguiente Leonor volva a casa despus de comprar algo de pan. Justo
antes de entrar en su casa se encontr a una antigua amiga de su misma edad.
Hola Leonor, te veo muy bien. Me he encontrado a Antonio el
mecnico. Me ha dicho que tu sobrina Ana ha vuelto al pueblo.
Parece ser que vive con Lus y que trabaja para l.
El funeral fue ntimo. A la vuelta del cementerio Lus iba del brazo de su madre
caminando despacio, pues estaba solo a un paseo del pueblo. Detrs iba la ta
Ana, la cual mantena una seriedad atpica y alejada del propio luto.
No puedo creer que lo haya hecho, cmo ha podido quitarse la
vida?
Coment Lus, ya de mejor nimo. Los ltimos das haban sido agotadores. En
todo momento Lus haba colaborado con la polica para esclarecer los hechos
del hipottico suicidio. Finalmente se concluy que la anciana no quera ser un
estorbo para la familia, debido a su creciente invalidez.
Hay tantas cosas que no se entienden en la vida!.
Le respondi, mstica, su madre. La cual se haba desplazado al pueblo
nicamente para el entierro.
De verdad no quieres quedarte mama?. Es mucha paliza de
coche para hacerla en un mismo da.
De verdad hijo mo, lo mejor es que me vaya, creme. Estar en
casa para la cena si salgo ya.
La madre de Lus se despidi de su hermana, la cual solo le dio un fro beso, sin
palabras. Lus acompa a su madre al coche. Y le dio un abrazo antes de que
entrase. Cuando el abrazo concluy Lus le hizo un gesto sealndole los ojos.
Tienes los ojos enrojecidos.
Estoy bien, tengo que irme cuanto antes. Todos estamos muy
tristes. Adis, hasta pronto.
Adis mam.
Arranc a toda prisa y se fue lo ms rpido que pudo. Cuando a penas haba
avanzado un par de quilmetros por la nica carretera comarcal que llegaba al
pueblo, vio a un joven pastor que cuidaba de un pequeo rebao de ovejas,
"Hola Lus, soy mam. Esto que voy a contarte es algo que jams te tendra
que haber contado. Pero me veo en la obligacin, pues llevo das muy
preocupada por ti y mi hermanita.
Se trata del pueblo. Estoy convencida que a estas alturas ya te habrs dado
cuenta que ocurre algo anormal. Tambin estoy segura que ests acostndote
con la tita Ana. Ella se pone muy enferma en ese pueblo. Tenis que salir de all
cuanto antes.
Cuando me comentases que ibas a vivirte all, tuve que controlar el impulso de
explicarte por qu estabas en un error. Tal vez guardaba la esperanza de que el
pueblo hubiese cambiado. Pero cuando fui al entierro de mi ta Leonor, supe
que esto no era as. Sent en mis venas el fuego, al solo bajarme del coche, y
me tuve que ir para no quedar atrapada de nuevo en l.
Hace siglos que el pueblo est maldito. La herencia se ha ido transmitiendo de
generacin en generacin. Todos all son conscientes de lo que ocurre. Solo le
afecta a las mujeres, y no a todas; pero s a la mayora. Viven en una
excitacin constante. Como si el Diablo hubiera elegido nuestra pequea villa,
como sucursal para que el ser humano cometa el pecado carnal, sin censura.
Es como si la tierra fuera parte del infierno y se manifestara a travs del sexo
de las mujeres que Lucifer ha seleccionado. S que suena a ciencia ficcin, pero
es tal y como te lo cuento. Lamentablemente es as.
La sed de sexo hace que muchas mujeres acaben quitndose la vida, al no ser
capaces de saciarse jams. Habrs comprobado que la gente es reservada y a
penas sale de casa. Viven en una lujuria sin desenfreno. Constantemente hay
relaciones sexuales entre madres e hijos, abuelas y nietos, entre vecinos. Hay
hombres que tienen a sus mujeres amarradas a la cama para que no puedan
ver a otros hombres.
En ocasiones las mujeres organizan orgas clandestinas, y las llevan a cabo en
la iglesia. Te habrs fijado que la campana de la iglesia nunca llama a misa. No
hay ningn sacerdote en el pueblo. Utilizan la casa del seor para llevar a cabo
sus brutales orgas donde participan varias mujeres y decenas de hombres.
Siempre ante el altar. Como una especie de rito preparado por el diablo, y que
las gentes del pueblo llevan a cabo sin saber muy bien por qu.
Hay hombres que son felices con la situacin, pero otros viven atormentados.
Todos estn amenazados de muerte para que jams le cuenten a nadie lo que
ocurre. Por eso odian a los forasteros, no quieren que se descubra su secreto
para poder seguir actuando a sus anchas, para que el diablo pueda seguir
manejando el pueblo a su antojo.
No hay un patrn claro. Hay mujeres a las que nunca les ocurre. Mujeres a las
que les ocurre tardamente. Y mujeres que caen en el instante. Lo nico claro
es que solo son infectadas aquellas mujeres nacidas en l, o con antepasados
nacidos all.
Cuando una mujer siente el magnetismo del pueblo, se le enrojecen los ojos y
se le transforma la expresin. Mientras ms folle ms lo necesitar, hasta
acabar matndose. Las ms afortunadas se esfuerzan y logran huir del pueblo.
Muchas somos las que conseguimos huir de aquella pesadilla; entre ellas
estamos tu ta Ana y yo. Pero Ana ha vuelto y mucho me temo que ha recado
por completo.
Estoy segura de que mi ta Leonor se quit la vida por temor al diablo cuando
se refleja en Ana. Hubo un tiempo en el que Ana se dej llevar demasiado, es
dbil ante la carne y ese pueblo magnifica su frecuente apetito sexual. Se
comportaba de forma errtica y violenta. Leonor la pill con dos hombres en un
callejn oscuro, una noche de verano. A partir de ah Ana le hizo la vida
imposible. Quiso seducirla varias veces pero la vieja no se dej. El diablo, a
travs del cuerpo de Ana, jur que algn da la matara; pues a Leonor nunca le
sucedi. El miedo hizo tomar ese bote de pastillas a esa pobre mujer, no te
quepa la menor duda.
Pero mi hermana es una mujer buena, te ruego que la salves, te ruego que la
saques del pueblo. Ten en cuenta que no es ella la que se acuesta contigo, es el
diablo a travs de ella.
Para que entiendas lo duro que ha sido contarte esto, te revelar un secreto
con el que lleva viviendo nuestra familia toda la vida. Mi madre, tu abuela, no
muri de infarto como siempre hemos contado.
A sus sesenta aos, tras dcadas de enfermedad, acab yndose con veinte
hombres del pueblo hasta la vieja ermita. Se encerraron y ella empez a follar
con todos. Se llevaron dos das encerrados; hicieron con ella lo que quisieron.
La tomaron como una mrtil de la cruz que los hombres del pueblo siempre han
vivido, dejndose convencer para ir todos ellos con ella sola. La follaron y todos
se corrieron dentro. A medida que se iban recuperando iban volviendo a
follrsela. La muy desgraciada estaba feliz. Se llevo muchas horas seguidas
chupando pollas, recibiendo por todos lados y tragando semen. Acabaron
matndola. Muri de tanto follar. Su cuerpo desnudo lo clavaron en la entrada
de la ermita como trofeo de guerra. El mensaje fue claro. "Si no podemos huir
del diablo, le mandaremos a sus putas de vuelta".
Dur poco la rebelin. Se escucharon casos de hombres asesinados. En un mes
los veinte que participaron haban muerto en extraas circunstancias. Eso
Lus sinti miedo. Temi por su vida. No se vea capaz de satisfacer a las dos.
Un sexto sentido le deca que Ana le haba preparado una especie de prueba.
Ana se retir y Sara se sent en el sof del saln. Lus le ofreci algo para
beber y ella lo neg moviendo solos los ojos de lado a lado. Haba algo de
prohibido en ella. Ana regres completamente desnuda.
Levant a Lus y lo desnud. Luego se sent en el sof al lado de Sara. La fue
desnudando poco a poco. La chica se dejaba hacer. Engull sus melones y la
abri de piernas sobre el sof, para comerle el coo. La chica se retorca como
una serpiente ante la humedad de la lengua de la ta de Lus.
Vamos a la habitacin.
Lus se senta excitado. Avanzaron cada una a un lado suyo. l las agarr de los
culos. Duros y deliciosos, mientras avanzaban.
Lus empez a sentirse extraamente cmodo y con ganas de esa sesin que
iban a tener. Durante un instante sinti miedo y se mir en un espejo del
pasillo. Suspir aliviado al ver sus ojos normales.
Una vez en la cama, Sara comenz a cabalgar a Lus. Sus cuerpos se acoplaron
perfectamente y se dej llevar por la follada de aquella deliciosa chica. Su piel
era blanca y aterciopelada. Su flaqueza recorra todo el cuerpo hasta
desembocar en unos pechos grandes y dulces. Como un pequeo ro que
desemboca en una preciosa cascada.
Sinti que tocaba el cielo con las manos al dejarse llevar por los movimientos,
mientras agarraba sus pechos como si fuera lo ltimo que iba a hacer en su
vida. A su lado, Ana le animaba con comentarios dulces y cariosos a su odo.
Sara empez a cabalgar ahora ms erguida. Formando noventa grados con el
cuerpo horizontal de Lus. Ana se levant y se dej caer, sin sentarse del todo,
sobre su cara. Baj un poco ms hasta posar su coo en la boca de su sobrino.
Lus lo comi con avidez, moviendo mucho la lengua, casi sin poder respirar.
Ana se ech un poco hacia delante para dejarle respirar, quedando a la altura
de Sara, la cual no paraba de botar. Le agarr los melones y los lami
despacio. Dejando su lengua recorrerlos lentamente, sintiendo cada poro.
Lus se senta prisionero. Solo poda dejarse follar y mover la lengua. Se trag
todos los flujos que iba soltando el coo de su ta.
Se corri un rato ms tarde, mientras se follaba a su ta a cuatro patas, Sara
estaba abierta ante ella, dejndole comer su exquisito y pequeo, aunque
tragn, coo.
Se tom un respiro. Fue al bao. Al regresar, Ana y Sara seguan con la faena.
Ahora estaban acostadas de lado, con el coo en la boca de la otra. Se coman
con muchas ganas y tuvieron varios orgasmos a la vez. Siguieron besndose y
Ana estuvo amamantando un rato a Sara como si fuera un beb.
Ea ea, mi nia tiene ms tetas que mam. Pero mam le da la
teta a mi nia.
Lus las observaba sentado en una butaca situada ante la cama. Empez a
calentarse de nuevo. Regres a la cama masturbndose. Al verlo, las dos se
tumbaron boca abajo en la cama, una al lado del otro. Levantando solo el culo.
Lo movan pidiendo polla. Lus empez por la que ms le gustaba, Sara. Follaba
el culo de cada una durante unos dos minutos y luego cambiaba. As estuvo
largo rato.
Ambas se dieron la vuelta y se abrieron de piernas. Ahora hizo lo mismo con
sendos coos. Dos minutos con uno y otros dos minutos con otro. La que
estaba sin polla, se pasaba los dos minutos refregndose salvajemente con la
mano y gimiendo desproporcionadamente.
Tard muchsimo en correrse. Se senta orgulloso de su aguante. Cuando por
fin le vino les orden que lo quera distribuir entre sus caras. Las dos se
pusieron de rodillas en el suelo y juntaron sus mejillas con las bocas abiertas.
Lus comprob feliz que el rojo de sus ojos haba desaparecido y ahora eran
ellas. Ana y Sara esperaban su corrida, las de verdad. Ello le llen de morbo y
disminuy la paja. Las mujeres se empezaron a besar viendo que la cosa se
retrasaba, sacaban mucho la lengua para poderse besar bien. Lus les acarici
las mejillas y meti la polla un poco en cada boca. Cuando por fin le vino, la ta
Ana y la jovencita Sara se prepararon de nuevo juntando las mejillas y abriendo
mucho las bocas con las caras hacia arriba.
La corrida les salpic en los ojos, el pelo, la frente y la nariz. Lo poco que cay
en sus bocas lo intercambiaron con un beso largo. Se quedaron besndose en
el fro suelo. Lus les orin encima.
Para que estis calentitas.
Siguieron un rato lindose, mezcladas con el semen y el pis de Lus.
A la maana siguiente se despert en la cama junto a las dos. Estaban todos
desnudos. Se meti en la ducha, lo recordaba todo como un sueo. De repente
se acord.
" No he ido a casa de Alba!."
Los das pasaron en aparente tranquilidad. Lus segua urdiendo el plan de fuga.
Mientras tanto, intentaba portarse bien con Ana. Repitieron varias veces ms
con Sara hasta que Lus le propuso que se fuera a vivir con ellos.
"tambin salvara a esa chica".
Con Sara en casa, Ana se mostr muy interesada en ella. Se acostaban a
menudo solas y tenan largas noches de sexo entre ellas. Lus poda escucharlas
cada madrugada. Otras veces dorman los tres en la cama de Lus. Y a diario
tena sexo con las dos por separado. Vivan en un desenfreno de sexo oral,
anal, follada tradicional y orgasmos. Lus disfrutaba entusiasmado; aunque sin
olvidar que el tenerlas contentas formaba parte del plan. Aunque el peligro de
que quisieran cada vez ms y ms, le haca tener cierta prisa en acelerar la
marcha. No iba a ser nada fcil.
Tu dnde estabas?.
Mi madre me pidi que la acompaara a casa de Tomasa para
pedirle un poco de pan. A esa hora la tienda estaba cerrada y se
supona que mi padre andaba de cacera. Cuando entramos,
omos gemidos que provenan de la caseta del patio. Estaban
follando sobre una pila de jamones. Mi madre enloqueci y yo me
escond tras una amplia butaca situada en una esquina, al lado de
la puerta de entrada.
lo presenciaste todo?
S. Cuando intent huir ella me grit. Me qued paralizada en
mitad del patio. Me dijo que si no deca nada perdonara mi vida,
y que si se me ocurra abandonar el pueblo no parara hasta
matarme. Cuando me lo dijo sus ojos no eran normales. Es como
si me lo dijera una especie de diablo a travs de ella. La cre.
Durante todos estos aos ha estado viniendo a acostarse conmigo
cada vez que le ha apetecido. Se sacia conmigo y con el caballo. Y
disimula con el colirio para el resto del pueblo. Solo yo s que
est infectada. Eres la primera persona a la que se lo cuento.
Y por qu lo has hecho?
Cuando vi que te estabas viendo con ella tem que su infeccin se
disparara. Llevaba aos sin acostarse con un hombre. En las
ltimas semanas ha venido a verme ms a menudo. Cada vez me
pide ms, temo que acabe matndome. Tenemos que huir como
sea. Los dos estamos en peligro.
Ana se sent al lado de Tomasa con una respiracin muy agitada.
No te voy a engaar. No hay trabajo. Pero si eres una buena
mujer conmigo, yo te buscar algo.
Le acarici los pechos sobre el chaleco, pasando su mano por el abultado
escote.
Tienes unas tetas excesivamente grandes. Son naturales?.
S. Todo es de la Tomasa.
Nunca he visto unas as en mi vida. Las mas son pequeitas mira.
Ana se levant y se despoj del camisn; quedndose solo con unas estrechas
bragas blancas. Sus pechos pequeos quedaron al alcance de tomasa.
Me encantara que fueran como las tuyas. me dejas verlas?.
No se. encontrara trabajo?
Sin duda. Ests en tu da de suerte.
Subi por las escaleras. Imaginaba que se lo estaba montando con Sara sobre
su cama. Pero al entrar en su habitacin se le desencaj la cara y se le parti el
alma.
"Por Dios tita, quin te ha hecho esto?".
Una inmensa pena cay sobre l como la niebla sobre el bosque. Lav el
cadver con mimo y le visti. Lo maquill y lo pein. Lo enterr en mitad del
bosque.
"En este pueblo no hay culpables ni asesinos". "Los vivos han de abandonarlo".
Llor un rato la tierra removida en la que se haba convertido su ta. No tena
ganas de investigar ni denunciar. Las pocas fuerzas que le quedaban las
pensaba emplear en fugarse con Sara y Alba.
Cuando Sara lleg tras la agotadora jornada laboral, pregunt a Lus por Ana
con los ojos enrojecidos.
"Pobre desgraciada".
Ana fue a las cabaas. Un cliente quiso algo de ella. Vendr
maana.
Ummm s eh?. Pues no me ha dicho nada, la muy perra.
Cmo dices?.
Nada, nada. Cosas nuestras. Seguro que hasta maana no
vuelve. Pues estamos solos t y yo, Lus.
Lus no cen. Solo bebi vino. Sara comi con mucha hambre. Tras la cena se
desnud y busc a Lus.
Vamos cabronazo, dame caa, no aguanto ms.
Lus la foll con vigor. Sin ganas pero con intensidad. Hasta que no le
desapareci el rojo de los ojos, no se detuvo. Se oblig a eyacular tres veces
sobre su blanquecino, flaco, joven y pechugn cuerpo. Toda una bella chica si
no estuviera infectada.
Cuando acabaron de follar Lus mir el reloj. Eran las tres y media de la
madrugada.
Sara. Vstete y coge algo de equipaje. Nos espera un avin en
Sevilla a las siete de la maana. Vamos a promocionar nuestro
negocio en una feria de turismo de Florencia.
Sara puso cara de extraeza.
Ana no me ha comentado nada, y nos hemos llevado toda la
maana follando.
Dijo Alba con voz aterciopelada y dulce. Tras decirlo se meti los pechos de
Tomasa en la boca y los lami como un sediento lame una sanda en mitad del
desierto. A continuacin moj sus manos en una cuba de aceite, que tenan
sobre una mesita al lado de la cama, y lo expandi sobre los brillantes y
brillosos pechos de la cuarentona.
Lus se desnud y se uni. Guiado por una fuerza sobrenatural que tiraba de su
polla. Ms enorme que nunca. Con el capullo muy rojo.
Tomasa y Alba lo acogieron con dulzura. Le besaron y le hicieron un sexo oral
relajado y de altsima calidad, tras haberle llenado todo el pene de aceite. Se
alternaron en cabalgarle y le llenaron de aceite todo el cuerpo. Para despus
lamrselo de arriba abajo, hasta los dedos de los pies. Las dos lenguas
recorrieron traviesas todo su cuerpo y a Lus le pareci ver las estrellas en el
techo mal pintado de esa vieja habitacin.
Ahora Lus se centraba en trabajar el culo de Tomasa, la cual reciba las
embestidas posada como si fuera una inmensa perra. Alba acarici sus cuerpos
con las manos llenas de aquel aceite mgico y de rico aroma.
Alba abri un pequeo bolso y sac unos cigarrillos. Encendi uno y lo fum un
poco. Se lo dio a probar a Lus y a Tomasa. Fumaron y fumaron. Poco a poco
Lus sinti que su mente volaba. Se hicieron sexo oral los unos a los otros. Lus
intent darle otra calada pero Alba se lo impidi agarrndole la mueca y
diciendo que no con un ligero movimiento de cabeza.
Tomasa estaba tumbada boca arriba, con los ojos cerrados y sonriente. Alba
inici otra mamada a Lus, anim a Tomasa a que le acompaara. Ambas
mujeres recorrieron la polla con sus lenguas y se besaron constantemente
dejando la polla en medio. Ahora Alba se subi a cabalgar a Lus. Acarici y
lami sus hermosos pechos. Amplios y bien puestos. Tomasa miraba agachada
como el coo de Alba engulla la polla de Lus en un movimiento lento pero
continuo. Tena el cigarrillo en las manos. Le daba una calada y le lama los
testculos, dejando emanar el humo en torno al paquete y el coo de Alba, la
cual segua follando con parsimonia.
No fumes nada del cigarrillo que voy a sacar dentro de un rato.
Alba se lo susurr muy bajo a Lus. Estaba mareado y alucinaba un poco. Alba
le foll ms fuerte y le dio dos bofetadas para intentar espabilarle un poco. Se
incorpor y dej a Tomasa follar un rato.
Tomasa botaba y botaba, con sus cntaros recorriendo el cuello, el pecho y la
cara de Lus. Alba lleg con un nuevo cigarrillo y se lo dio a Tomasa. La mujer
lo cogi con ganas y le dio dos profundas caladas mientras segua movindose
sobre Lus.
Apret fuerte y sigui fumando. Mientras ms fumaba ms fuerte le follaba.
Cuando Lus empez a correrse, ella puso los ojos en blanco. Lus la agarr
fuerte por las nalgas y empuj hacia arriba clavndosela profundamente
mientras se corra dentro.
Cuando termin, Tomasa cay desplomada sobre Lus. Alba la apart. Estaba
profundamente dormida.
Vmonos, corre. Vstete!.
Qu le pasa?
Puse veneno en ese cigarrillo. Tardar en despertarse, si lo hace.
Vmonos por favor, antes que amanezca.
Mir el reloj, estaba a punto de amanecer.
Se vistieron y salieron en silencio de la casa. El coche segua en mitad de la
calle y Sara segua en el asiento de atrs, aturdida.
Arranc el coche con sumo cuidado y lo dej rodar en primera. El pueblo segua
en silencio y no haba nadie en la calle. Pareca un pueblo fantasma.
Lus y Alba aguantaban la respiracin a medida que el coche avanzaba
despacio. Sara segua despertndose muy lentamente.
Encararon la ltima calle del pueblo. Era cuesta abajo. Al fondo el bosque, con
la vieja carretera comarcal adentrndose en l como una serpiente. Dej el
coche en punto, para no hacer ruido, y lo dej rodar calle abajo.
Cuidado!.
Grit susurrando Alba. Al final de la calle se dibujaron tres figuras blancas
borrosas y difusas.
Lus puso en marcha el motor y encendi las luces para poder ver. Ante ellos
aparecieron tres mujeres jvenes. Vestidas nicamente con una bata blanca y
larga, hasta los pies. Con la cuenca de los ojos vacas, de las que brotaba un
pequeo hilo de sangre, que derramaba por sus mejillas.
Era como si estuvieran ante las guardianas del infierno.
Lus cerr con seguro todas las puertas del coche.
Ni se te ocurra bajarte.
Avanz muy lentamente. Las tres misteriosas figuras femeninas levantaron sus
manos pidiendo que se detuviesen.
Se detuvo justo antes de llegar a ellas.
Rodearon el coche, como analizndolo. Una de ellas empez a dar gritos
cuando vio a Sara. En seguida las otras dos empezaron a chillar tambin. Lus
mir por el espejo retrovisor y pudo ver a una muchedumbre que avanzaba
corriendo calle abajo. Con antorchas.
Arranca, por lo que ms quieras!. Vmonos de aqu!.
Lus aceler con fuerza dejando a las tres mujeres atrs. Cuando se adentraron
en el bosque, volvi a mirar por el espejo retrovisor. No haba nadie.
El coche segua avanzando rpido a travs de la tortuosa carretera que
atravesaba el bosque. De repente mir por el espejo retrovisor central, dndose
un susto de muerte.
Sara se haba incorporado y ahora era como una de esas tres mujeres. Sus ojos
estaban huecos y chorros de sangre salan a borbotones de ellos. Gritaba
amargamente. Intentando que Lus detuviese el coche. Alba cerr los ojos y se
tap los odos. Lus ignor en la medida de lo posible a la chica.
"El objetivo es atravesar el bosque".
Sara, o el demonio a travs de ella, aument los decibelios de sus chillidos y
empez a intentar librarse de las cuerdas que la amordazaban. La sangre no
paraba de brotar de la cuenca de sus ojos vacos, ahora lo haca a chorros,
pringando todo el coche.
Tras una pronunciada curva hacia la derecha, Lus pudo ver como la hilera de
rboles terminaba al final de una larga recta.
"Ah termina el bosque, y nuestra pesadilla."
Cerr los ojos y pis a fondo el acelerador. Sara empez a librarse de las
cuerdas, mientras sus chillidos empezaban a romper los cristales del vehculo.
El coche alcanz su objetivo.
Pasaron unas horas cuando sara sinti como un radiante sol calentaba su cara.
Abri los ojos. Pudo ver un cielo azul, limpio. No recordaba la ltima vez que
pudo ver un cielo as. El coche en el que se encontraba no tena
ventanasDnde estaba?.
Se incorpor. El coche avanzaba lentamente por una carretera bien asfaltada.
Lus lo conduca. En el asiento de copiloto dorma una mujer que no conoca.
No temas Sara. Ests en buenas manos. Todo pas. Somos libres.
La voz amable de Lus le hizo sentir felicidad.
En unas horas llegaremos a Madrid. Duerme un poco ms si lo
deseas.
Gracias.
Y de nuevo se qued dormida. Todo haba sido una pesadilla.
Cuando llegaron a Madrid Lus llev a su casa a las chicas.
A dormir, maana iniciamos una nueva vida.
VIOLACION EN EL ESTABLO
La curiosidad de sentir una lengua diferente me llevo a dejarme abusar por dos trabajadores
de la hacienda de la familia de mi amiga.
En las vacaciones pasadas mi amiga Amarilis me invito a visitar la hacienda de su familia, yo
no tena mejores planes, as que acepte su invitacin, llegamos el viernes en la tarde, nos
acomodamos en nuestras respectivas habitaciones, y decidimos descansar un rato, el calor
era insoportable, por lo que entre a darme una ducha, deje caer el agua sobre mi cuerpo por
largo rato, refrescndome y alejando el cansancio producido por el viaje, de pronto sent un
ruido en la ventana, mire hacia ella pero no haba nadie, me apresur a terminar de
baarme y envolvindome en la toalla, Sal rpidamente del bao, ya en la habitacin corr
las cortinas antes de comenzar a vestirme para bajar a cenar.
- El capataz, le encanta mirar por las ventanas, creo que se masturba mientras lo hace
- Y si saben eso por que se lo permiten?-pregunt
- Mis padres no lo saben, espa a la chica de la limpieza y a la cocinera, y por supuesto a mi
cuando estoy aqu, las chicas no se atreven a delatarlo, es el capataz, y yo, lo disfruto, me
excita pensar que se esta masturbando mientras me mira!- me dijo sin dejar de sonrer
- Amarilis!, como que te excita?- dije asombrada
- Ay amiga, eres muy reservada!, con esas tetas que te gastas y esas nalgas tan firmes, yo
me dejara ver por todos, los tendra cachondos a todos!, tienes que aprender a disfrutar, a
experimentar cosas prohibidas, no sabes de lo que te pierdes!
- Mejor sentmonos a comer, no se como es que somos amigas, tu tan liberal y yo tan
- Tan mojigata!, eso eres amiga, una mojigata!
Esa noche nos fuimos a la cama pasada las 11 de la noche, me quite el brasier y me puse
una batita corta de algodn tratando de que el calor no me sofocara, pero no poda dormir,
las palabras de Amarilis me rondaban en la cabeza, no era virgen, pero apenas haba tenido
sexo con un solo hombre, que haba sido mi novio por cinco aos y con quien no
experimente gran cosa por que me daba vergenza hacer las cosas que me peda y que
parecan de las que hacen las prostitutas, pero esa noche no se que estaba pasando
conmigo, la curiosidad de saber que tenia de especial la lengua de flash no me dejaba
dormir, di vueltas en la cama sin conciliar el sueo y decid levantarme por un vaso de agua,
baje, entre a la cocina y me serv el agua, mientras lo beba, mire por la ventana hacia el
establo y sin pensarlo, deje el vaso sobre la mesa y Sal de la casa dirigindome hacia all.
Entre al establo sin saber que estaba haciendo ah, me detuve en la mitad solo mirando m
alrededor, de pronto sent un ruido y vi a flash venir hacia m, me quede inmvil esperando
saber que hara, en un momento lo tuve cerca de mi oliendo mis pies y luego metiendo su
hocico debajo de mi batita, lo empuje retirndolo, pero el volvi a insistir, en ese momento
quise saciar mi curiosidad y me quede quieta, dejndolo oler mi coito que ya empezaba a
mojarse ante la situacin, de pronto sent la lengua de flash sobre mi bikini y sin pensarlo lo
baje hasta mis rodillas, dejando mi chochito descubierto, Flash sigui lamiendo, separ mis
piernas, pero el bikini lo dificultaba, termine de quitrmelo y me abr para flash, su lengua
era mas spera que la de un hombre, mas larga y efectivamente muy agradable lamiendo mi
coito, me excite mucho y me deje hacer, gimiendo a cada lamida de el animal, cerr mis
ojos y me entregue a sentir aquella lamida fenomenal, muy pronto alcance el orgasmo, pero
sent que flash ya no jugaba con mi coito, abr los ojos para ver a donde se haba ido y mi
sorpresa fue enorme, flash estaba junto a Juancho, el capataz y otro de los trabajadores de
la hacienda, me haban estado observando, rpidamente intente bajar mi bata para tapar mi
chochito, pero Juancho lo impidi
- no, no, no, no!, qudate como estas!- dijo en tono de orden, mi vergenza era tal que no
me atreva a hablar- no creo que a los patrones les agrade saber que la Srta. Amarilis tiene
una amiga calentona que se la deja mamar por el perro de la casa
- Ellos no tienen por que saberlo- dije en tono muy bajo y mirando al piso, no quera ver la
cara de aquellos dos hombres
- Claro que lo van a saber, ahorita mismo te voy a llevar a la casa, as como estas, con el
coo desnudo y mojado como lo tienes- me tom del brazo y me hizo caminar
- Por favor!, no lo hagas, me morira de vergenza!
- Bueno, eso podemos arreglarlo- dijo el acercndose a mi y tomando mi cara con una de
sus manos- te portas bien con nosotros y no diremos nada
- Portarme bien como?- dije mientras rogaba estar entendiendo mal
- Tu solo tienes que quedarte quietecita y nosotros cobramos nuestro silencio- no dije nada,
no me haba equivocado, esos hombres queran abusar de mi a cambio de su silencio.
Juancho bajo su mano hasta mi coito y su dedo entr en mi rajita buscando mi cltoris, me
puse helada!, senta vergenza y mucha rabia, no sabia que sera peor, si dejar que hicieran
lo que queran o negarme y que dijeran a todos lo que me vieron hacer con flash, pero
mientras pensaba que hacer ya ellos me manoseaban, el otro hombre estaba parado detrs
de mi apretando y sobando mis nalgas y ya el dedo de Juancho buscaba la entrada de mi
coito
- ahhhhh!- me quejaba mientras no aguantaba las ganas de llorar, el otro hombre se haba
agachado detrs de mi y separando mis nalgas empez a lamer mi culo, intente apartarme
de el pero lo nico que consegu fue que metiera la punta de su lengua en mi huequito- dile
que me deje, har lo que quieren, pero mi culo no entra en el trato- dije con lo que me
quedaba de dignidad
- Tu culo por que no?- pregunt sin dejar de darme en el chocho con sus dos dedos
- Esta virgen y no quiero que lo toque- dije como si estuviera en posicin de hacer tratos
- No te creo, tienes el culo virgen?, puta mentirosa!, ya vamos a ver!- me volteo
bruscamente dejando mi culo hacia el
- Que pasa?, djame!- dije intentando safarme, pero el otro hombre me hizo doblar el
cuerpo inmovilizndome a la vez y dejando mi culo en pompas
- Sultenme, sultenme!- empec a decir desesperada al sentir que Juancho separaba mis
nalgas y pona su dedo en la entrada de mi culo- ayyyyyyy!, no, no, por favor, scalo, me
duele!- Juancho haba empujado su dedo dentro de mi culo de una forma brusca, metindolo
todo de una sola vez y empezando a girarlo en mi huequito
- Que rico!, la puta de verdad tiene el culo virgen, te lo voy a desflorar perrita
- Por favor Juancho, para, scalo, me arde!- mis lagrimas empezaban a brotar, me dola
como giraba su dedo en mi culo, el otro hombre me hizo levantar sin que Juancho sacara su
dedo, y empez a tocar mis grandes tetas, pellizcando mis pezones y lamindolos a rato,
llenndolos exageradamente con su saliva, luego bajo su mano y empez a frotar mi cltoris
muy duro, senta dolor en ambos lados, Juancho empezaba a sacar y meter su dedo y el otro
pellizcaba a la vez mis pezones y mi cltoris, de pronto los dos penetraron mis agujeros con
sus dedos y comenzaron en un mete y saca casi al unsono, deje de quejarme por un
momento, nunca haba sentido aquella sensacin que estos tipos asquerosos me estaban
haciendo experimentar, pero Juancho se dio cuenta que no me resultaba desagradable y sin
ningn cuidado saco su dedo y al volver a entrar eran dos dedos en mi pobre agujeritoahhhhhh!- volv a gritar- ya por favor!, te lo suplico, para!- romp a llorar de nuevo, el otro
saco sus dedos de mi coito y aun con los dedos de Juancho en mi culo me hicieron caminar
mas adentro de el establo donde nadie pudiera orme, Juancho me hizo arrodillar,
arrodillndose conmigo sin sacar sus dedos ni dejar de moverlos bruscamente
- Ponla a mamar- le dijo a el otro, que sin hacerse rogar saco su verga delgada pero muy
larga de su pantaln y tomndome por las orejas lo introdujo en mi boca casi hacindome
vomitar, lo sent llegar a mi garganta y sin soltar mis orejas me hacia ir y venir sobre su
verga hmeda y con un fuerte olor, sent mucho asco, nunca me gusto mamar la verga de
mi novio y aquel hombre me la tenia metida hasta la garganta mientras Juancho segua
maltratando mi culo con una mano y con la otra manoseaba mis tetas- estas bien rica putica,
tienes unas tremendas tetas y que rico esta ese coo chiquitico y bien apretado, pero
tranquila que al terminar contigo te podrs meter hasta un banano, te vamos a dejar bien
abierta!- el otro segua hacindome mamar su verga hasta que su leche empez a
derramarse dentro de mi boca, cuando saco su verga, quise botar su leche, pero me dio una
bofetada para impedirlo
- No me voy a ir sin siquiera tocar ese culito perrita- deca mientras me empujaba sus dedos
con fuerza hacindome dar pequeos saltos de dolor, juancho se acerc e introdujo dos de
sus dedos tambin en mi culo, yo no paraba de llorar y de pedir que me dejaran, que
pararan, pero sent sus cuatro dedos destrozar mi culito por un rato mas, hasta que por fin
los sacaron
- Ah tienes putica, como te lo promet, te dejamos ese culo bien abierto, viste que es mas
rico con un hombre que con un perro?- yo me quede inmvil, abierta con mis agujeros
destilando leche, ellos se vistieron y salieron del establo, yo me quede un rato mas ah,
esperando que se alejaran, cuando ya no sent ningn ruido me levante, empec a buscar mi
ropa, consegu la batita, me la puse y empec a buscar mi bikini, pero no lo consegu, Sali
del establo sin el, cruce rpidamente a la casa y sub a la habitacin donde amaneci
mientras yo no paraba de llorar metida en la ducha limpiando la suciedad de esos dos
hombres, no volv a salir de la habitacin hasta la hora de regresarnos a la ciudad, con la
excusa de que tenia un terrible dolor de cabeza, de regreso le ped a Amarilis que condujera
el auto, y cuando ya salamos de la hacienda, vi tras unos rboles a el otro hombre
despidindose con una sonrisa maliciosa, agitando su mano con mi bikini en ella, nunca mas
acompae a mi amiga a la hacienda y nunca mas mi culito fue lo que era hasta ese da.
caballos y cogi de nuevo la fusta del suelo. Quise darme la vuelta, pero fue
ms rpido que yo. Con un potente brazo m cogio del pelo y me oblig a
mantener
la posicin, y con la otra, atraves mi culo con la fusta. Grit como nunca
mientras aquel duro objeto se abra paso sin ningn tipo de vacilacin. Entonces
o su voz: "!Grita, maldita puta, nadie te va a oir!". Lo dijo jadeando en mi
oido, y sent su aliento sobre mi. Me sent como la yegua blanca, penetrada,
sometida, sirviendo como objeto de placer al macho de la manada. La fusta
entraba y sala de mi mientras yo gritaba, presa de un paroxismo de dolor y
placer que casi me llevaba a perder el sentido.