Captulo uno:

Tierra
(Rokugan)
Clan Len, Toturi, fue deshonrado y se le deneg la posibilidad de cometer
seppuku, convirtindose en un ronin.

Hantei XXXIX sube al trono: ao 1123

Historia reciente
de Rokugan

Actualidad: ao 1126, el Tercer Ao del reinado del Emperador Hantei

el Trigsimo Noveno, Seor de los Cielos Celestiales, Emperador del Trono Esmeralda, Maestro del Crisantemo, Soberano de Otosan Uchi y de las
Siete Colinas.

El Golpe Escorpin

Con la intencin de apoderarse del trono del Emperador, el Campen del Clan Bayushi Shoju y su clan asaltaron Otosan Uchi al amparo de la noche, asesinaron al Emperador, amenazaron la vida de su
hijo y ocuparon la ciudad del Sol.
La Historia asegura que Shoju no esperaba que los otros clanes
fueran capaces de responder a su ataque, pero los Unicornio llegaron
antes de lo que los Escorpin haban esperado. Gracias a la astucia
de los Shinjo, Shoju fue incapaz de preparar Otosan Uchi para un
asedio, y la ciudad sufri bajo los efectos de las escaramuzas y pequeas batallas que tuvieron lugar en sus calles.
La ltima esperanza de Shoju era el Cangrejo. Hida Kisada, crtico
consabido de la lnea Hantei, marchaba hacia Otosan Uchi con intenciones poco claras. Sin embargo, cuando lleg, el Gran Oso rechaz
la oferta de Shoju acerca de una alianza y se uni al resto de los
clanes. Shoju fue muerto en un duelo con el Campen del Len,
Akodo Toturi, en la sala del trono. Mientras la ciudad era asaltada, el
joven prncipe Hantei la abandon ayudado por los Fnix. Tras su
gempukku, fue proclamado Emperador.
La ciudad fue reconquistada por una fuerza combinada de los
otros seis clanes, y en la ausencia del Prncipe Resplandeciente (a
quien los Escorpin clamaban haber asesinado) Toturi reclam el
trono. No obstante, el Emperador regres, y creyendo ver la traicin
en el comportamiento de Toturi, lo expuls de la corte junto con su
familia, y redujo la lnea Akodo a meros ronin. Los Escorpin fueron
destruidos por decreto imperial, y slo la mujer de Shoju, Kachiko, y
su servicio personal fueron perdonados para que pudieran servir al
emperador. Kachiko fue desposada por Hantei, y el resto de los Escorpin ha sido perseguido desde entonces.

Hantei XXXVIII: ao 1103

Nacimiento de Hantei Sotorii: ao 1107.

El ltimo seor de Rokugan, Hantei el trigsimo octavo, subi al trono

tras su padre. Su hijo, Sotorii, no es tan afortunado, pues aunque disfruta de
una vida colmada de placeres y lujo mientras se le prepara para convertirse
en el hombre ms poderoso de Rokugan, los enemigos de los Hantei aun
acechan entre las sombras; enemigos que provocarn su cada.

El Golpe del clan Escorpin: primavera, ao 1123

El ms importante evento en la Historia reciente en el Imperio, el Golpe

del Clan Escorpin, signific el fin de los Emperadores Hantei. La familia
imperial al completo fue asesinada por los Escorpin durante el intento
liderado por Bayushi Shoju de apoderarse del Trono Esmeralda, y aunque
Hantei Sotorii, que consigui huir durante el Golpe, y que es ahora Hantei
XXIX, gobierna, su juventud y enfermedad crnica hacen que el futuro del
Imperio penda de un hilo.
Durante el Golpe, los Escorpin tomaron el control de la Ciudad Imperial, masacraron a la familia Hantei, y exigieron el derecho a gobernar a
los otros clanes, hasta que terminaron siendo rechazados gracias a un
esfuerzo conjunto del resto de clanes. Los Escorpin fueron expulsados
de la Corte Imperial, perdieron su apellido y su posicin como clan, y sus
aliados fueron castigados con la muerte.
La noble casa de Akodo result ser sospechosa de traicin, y el apellido de la familia fue eliminado de los registros. Su daimyo y campen del

Almanaque

Captulo uno

Algo que llevaba el rostro de mi padre y lloraba las lgrimas de mi

madre ha venido a reclamarme desde las profundidades del abismo, gritndome que me uniera a ellos. Siento sus garras contra mi armadura,
cortando el cuero y el metal como si se tratase de origami. Alcanzo mi
tetsubo segn escucho sus infames carcajadas, y s que un suspiro es todo
lo que necesita para partirme en dos.
Y t te sientas en tu palacio y me adoctrinas sobre el coraje.
El ftido hedor de las Tierras Sombras me envuelve a m y a mis compaeros. Un enorme oni agarra a un par de bushi y los sacude como si se
tratase de muecas de trapo, reduciendo sus huesos a mero polvo. Oigo
sus plegarias suplicando ayuda y las ignoro, an a sabiendas de que los
condeno a un destino peor que la muerte. Mi daimyo depende de m para
escapar de este horror, o cientos de personas ms morirn como lo han
hecho mis compaeros.
Y t te paseas por tu jardn y me hablas sobre el honor.
El muro se extiende a lo largo de leguas, repleto de samurai preparados
para el asedio. Un mar de trasgos se alza ante m, aullando innumerables
maldiciones al aire. Segn comienzan a cruzar el ro, oigo que los Grulla
han lanzado otra incursin contra nuestros territorios fronterizos. A pesar de que no puedo hacer nada ms que permanecer donde estoy y asegurarme de que ningn trasgo escapa con vida para aterrorizar a los
mismos Grulla que roban nuestra tierra.
Y t, ah de pie, vestido con tus ropas de seda me explicas qu es el honor.
Sois nios que practican juegos para llenar sus vacas existencias. Meros infantes peleando por sus juguetes, pretendiendo que nada ms tiene
importancia. No sois ms que viejas murmurando en torno a la hoguera,
tratando de convenceros de que las sombras no pueden daaros.
Soy el Cangrejo, y he presenciado horrores que jams imaginarais, y he
visto la muerte de innumerables samurai, tantos que podran rellenar cientos
de campos de batalla. He constatado la mentira que se oculta entre los lmites
de este reino, y he recibido la carga de asegurarme de que vuestro sueo no se
torne pesadilla. Soy el nico protector de vuestra pattica existencia.
As que rete de m si lo deseas. Ridiculiza mi basto comportamiento,
comenzando por mi burdo lenguaje. Pero no me hables de coraje, hombrecillo. No me hables de deber u honor. No tienes ni la ms ligera idea de
lo que significa.

y ms fuerte de los ocho, gan con facilidad todas las pruebas que requeran
del poder y la resistencia, ms en aquellas en las que la clave radicaba en la
astucia y la inteligencia, fue relegado al ltimo puesto por sus ms despiertos
hermanos y hermanas. Durante la prueba final, fue el primero en caer. Ni su
tremenda fuerza poda contrarrestar la rapidez y astucia de Dama Shinjo. La
humillacin por tal derrota (y por ser tan temprana) fue ms de lo que era
capaz de soportar. Se recrimin a s mismo durante horas, maldiciendo su
torpeza e inhabilidad para conducir adecuadamente su fuerza.
Sus cavilaciones se vieron interrumpidas por la aparicin de un pequeo y anciano hombre con la cabeza afeitada, que vesta las tnicas de un
monje. Se sent enfrente de Hida, que ni se inmut ante su presencia.
Por qu ests enfadado, hijo mo?, pregunt el anciano.
Estoy enfadado porque soy dbil, y porque mi fuerza no servir para
salvarme de mi debilidad.
El anciano sonri con aire triste, y habl de nuevo. Conocer tus debilidades es una forma de ser fuerte, Primer Cangrejo. Busca la verdad en
esto, y jams volvers a ser vencido. Con tales palabras, el anciano se
inclin y se march.
Hida cavil sobre esta idea durante muchas horas antes de levantarse
finalmente y regresar junto a sus hermanos y hermanas. Con el paso de
los aos, aprendi a atemperar su fuerza con estrategia, y enfrentarse a
sus enemigos no en los trminos de estos, sino en los suyos propios.
Desarroll formas de conducir a sus enemigos a la ira ms ciega. Observ
al Len y al Dragn durante tiempo, con la intencin de aplicar su conocimiento tctico en su beneficio. Y lleg a apreciar el concepto de las
prdidas calculadas, de utilizar slo una parte de su poder para cansar y
minar la resistencia de sus adversarios.
La primera guerra contra Fu Leng le dio a Hida una oportunidad que no
poda rechazar. Donde los otros tan slo vean muerte y destruccin, Hida
vio una prueba, una manera de comprobar si sus hermanas y hermanos
eran lo suficientemente fuertes como para gobernar. Los monstruosos espritus de Fu Leng deban abrirse camino a travs de las tropas Cangrejo antes
de enfrentarse a otras unidades, y a pesar de que las fuerzas de Hida sufrieron cuantiosas bajas se aseguraron de que los Oni pagaran por cada palmo
avanzado. La leyenda afirma que Hida se enfrent al mismo Fu Leng en un
momento durante la batalla, y tras deshacerse de su guardia personal, consigui infligir heridas de gravedad al seor oscuro. Tras la batalla, de pie y
rodeado por los cadveres de miles de demonios, jur combatir contra las
Tierras Sombras hasta que el Seor Luna y Dama Sol cayesen del cielo.
Despus de or el juramento de Hida e impresionado con su habilidad
para la guerra, el Emperador le responsabiliz de la proteccin de Rokugan
frente a cualquier posible ataque. Nuestra seguridad descansa sobre tus
hombros, hermano, dijo Hantei. Puesto que slo los tuyos son lo suficientemente fuertes como para sostener tal carga. Tras reunir a sus seguidores junto a l, el Primer Cangrejo viaj hacia los lmites meridionales
del Imperio, un spero y rocoso lugar donde los Elementos eran poderosos. Al pie de la enorme montaa, Hida se detuvo y se gir hacia aquellos
que lo haban acompaado.
Aqu es donde viviremos, bram, y donde trabajaremos para asegurarnos de que Aquel que No Debe Ser Nombrado nunca pueda amenazar
al Imperio Esmeralda de nuevo.

El primer Cangrejo

El presente

Los Clanes
El Cangrejo

Cuando los hijos e hijas del Cielo cayeron sobre la Tierra, celebraron una
disputa acerca de quin debera ser el gobernante del resto. Hida, el mayor

Leyenda de los Cinco Anillos

Durante diez siglos, nada cambi. El Cangrejo perdi mucho, pero

nunca vacil en su deber. Luch sin descanso contra las Tierras Sombras,

Tierra (Rokugan)

ya se tratase de oleadas o de slo unos pocos. La Gran Muralla Kaiu fue el

crisol donde se form el ms poderoso ejrcito de todo Rokugan. Durante
mil aos, nada cambi.
Ahora, sin embargo, los cosas son diferentes. El actual daimyo, Hida
Kisada, se ha vuelto ms crtico hacia el Emperador, cree que el Hijo del
Cielo no es lo suficientemente fuerte como para liderar de manera adecuada al Imperio. Kisada conoca de sobras el poder de las Tierras Sombras, y se preguntaba si pudiera usarlo de alguna forma contra sus enemigos en Rokugan. Irnicamente, las criaturas de las Tierras Sombras a las
que se enfrentaba son las nicas que han conseguido su respeto. Se muestra
condescendiente respecto a todos aquellos que no pertenecen a su Clan,
puesto que cree que no se trata nada ms que de cachorritos gimoteantes
que se esconden detrs de l en busca de proteccin.
Cuando la Guerra de Clanes comenz a rasgar el Imperio, Kisada vio
clara su oportunidad. Si fuera Emperador, pondra orden en todo este
caos y acabara con las Tierras Sombras de una vez por todas. Pero tambin le resultaba evidente que sera incapaz de llevar a cabo sus planes si
tena que encargarse de vigilar la Muralla Kaiu; requera demasiados hombres, hombres ocupados en mantener a raya a esas espantosas criaturas.
Si deseaba hacerse con el control de Otosan Uchi, todo indicaba a que
debera abandonar su deber y permitir a los siervos de Fu Leng la entrada
en el Imperio. Los dilemas no se llevan bien con Kisada.
Mientras ponderaba todas sus posibilidades, sus pensamientos se
vieron interrumpidos por su asistente, Kuni Yori. El daimyo de la familia Kuni conoca los deseos de su seor, y crea haber encontrado un
mtodo para cumplirlos. En lugar de dejar entrar a las criaturas de las
Tierras Sombras por qu no aliarse con ellas? Su fuerza sera un tremendo apoyo en el campo de batalla, y al lanzarlos contra los enemigos de Kisada, se salvaran incontables vidas Cangrejo. Si los oni y los
trasgos de Fu Leng se hallaran bajo el mando Cangrejo, podran
reconducirse al combate, y as se evitaran daos innecesarios al Imperio. Y una vez que se cumplieran los objetivos, una vez que Kisada
fuera el Emperador, aplastara a sus aliados como los gusanos que
eran. Entonces, el Cangrejo se concentrara en las fuerzas de las Tierras Sombras y las destruira por completo.
En un principio, Kisada rechaz la idea con vehemencia, pero segn
transcurra el tiempo, comenz a captar la sabidura en las palabras de
Yori. Ya decidido, y con la ayuda de Yori, Kisada contact con los
innombrables gobernadores del reino de Fu Leng. No se opusieron a
aliarse con sus antiguos enemigos, y pronto monstruosas fuerzas marcharon bajo estandarte Cangrejo.
Y ahora, el ejrcito Cangrejo lucha para reclamar el trono del Emperador. Combaten con pasin y fervor, pues saben que su seor es
justo. Slo en Kisada puede descansar el futuro de Rokugan. Y con las
horribles bestias de las Tierras Sombras sirviendo como carne de can, la victoria es casi cierta. Muchos de los ejrcitos Cangrejo rebosan de estas criaturas, por lo que no es de extraar que los lderes de
stos se vean afectados por la Mancha de Corrupcin. La Mancha, un
mal que corrompe a los agentes de las Tierras Sombras, ha infectado
a los Cangrejo, enviando a sus guerreros al borde de la muerte... y ms
all. Se ha pagado un terrible precio: uno de los ms poderosos oni ha
recibido el nombre del hijo mayor de Kisada, atado por un pacto de
sangre para reforzar la alianza. Inspira miedo en sus enemigos, pero
aquellos Cangrejo que lo ven, se estremecen ante el cambio que ha
sobrevenido a su una vez orgullosa casa.

Almanaque

Captulo uno

La Grulla

Tres agujas; parece un cisne volando. Hizo una pausa. Nunca me

haba dado cuenta....
En los miles de copos de nieve de los miles de nevadas, no hay dos que
sean iguales. El hombrecillo ri entre dientes alegremente. No hay dos en
toda la eternidad. Y si fuera contigo adentro ahora, nunca vera ese copo
de nieve. Nunca volver a pasar. Apunt con su anciano dedo a una
astilla de hielo que caa lentamente.
Slo es un trozo de agua. Doji observ fascinada mientras el mendigo escudriaba otro copo.
Y la vida es slo un nico da, uno tras otro, hasta que pasan los aos
y te haces viejo, y entonces dices: adnde han ido todos esos das?. Ri de
nuevo. Ah! Seis agujas, como la rueda de un carro. Hizo una pausa y la
nieve cay silenciosamente ante l. Despus de un momento el mendigo
prosigui. Cmo has pasado esta maana, Seora?.
Esta maana?. La curiosa pregunta la sorprendi, y murmur: Estaba tejiendo, un nuevo quimono para mi hermano, Hantei.
Cuatro bloques y una sola aguja!.... El mendigo ri satisfecho, moviendo su pie sobre el suelo mientras apuntaba a otro copo de nieve. Despus de un momento prosigui: Recuerdas cada hilo de seda que has
tejido en el patrn del quimono de tu hermano?.
Cmo... No, por supuesto que no!.
Por qu no?.
Hay cientos de hilos en el patrn, miles de hebras en total. Cmo
puedo acordarme de todas?.
Sin embargo, supongo que recuerdas cada error que has cometido, y
las horas que has tardado en corregirlos.
Doji se sonroj. Por supuesto.
Quiz si te hubieras parado un momento a mirar cada hilo, a comprender cada hebra, nunca habras cometido esos errores, no? Igual que
no habas visto los copos de nieve, ignoras lo que hay a tu alrededor; ignoras los das de la vida, para ver slo los aos. Buf. No puedes cambiar el
paso de los aos. Pero puedes cambiar el paso de las horas, y cmo eliges
disfrutar ese tiempo mientras pasa. Ser algo que quieras recordar, o
dejars que tus das pasen como si no fueran ms que un copo de nieve?.
La dama observ al hombrecillo, su visin se volva borrosa conforme
la nieve caa ms deprisa, el viento se arremolinaba en su cabello. Eres
ms que un mendigo, hombrecillo. Una lgrima se desliz por su mejilla
y se desvaneci en la nieve, otro pedazo de hielo perdido entre millones.
Pero, eres t algo ms que otra vida entre muchas?. Su voz era suave,
pero cort el viento y la tormenta que se iniciaba como un estilete. Y cuando
mueras, sers recordada, o sers otro hilo en el tapiz, annimo e irrelevante?
La nieve se fundir, Dama Doji, y en unos pocos das se habr ido y se habr
olvidado para siempre. Quin la recordar?. Hizo una pausa, y volvi su
rostro para mirar la nieve que caa rpidamente. Quin te recordar?.
Despus de un momento, Dama Doji se arrodill junto al monje, y
juntos se sentaron al lado del camino mientras caa la nieve silenciosa,
copo a copo, sobre las llanuras que les rodeaban.

De los Ocho Kami, slo dos permanecieron en la cima de la colina

donde el primer torneo haba sido celebrado: Hantei, y su hermana Dama
Doji. La primera ciudad haba crecido sobre aquella colina, y un gran
palacio se estaba construyendo en ella: un palacio que un da sera conocido como Otosan Uchi, la ciudad del Emperador. El invierno soplaba su
arisco aliento sobre la tierra, cubrindola con hielo blanco y gruesa nieve.
Un da, Dama Doji miraba desde su ventana en las altas torres de Otosan
Uchi y mir hacia abajo, a la ciudad en construccin.
En el camino fuera del palacio, vio a un delgado mendigo sentado
fuera de las clidas casas de la ciudad. Su capa estaba rada, y su bastn
yaca a su lado junto a su escudilla de mendicante. No haba viajeros en
ese camino, slo la compaa del amargo viento y la helada nieve.
Dama Doji llam a sus guardias samurai, indicndoles que dijeran al
mendigo que entrara dentro del palacio, que se le buscara una pequea
habitacin. Pero cuando los guardias regresaron, dijeron que el mendigo
rechazaba su ofrecimiento, y que no quiso escuchar lo que le decan.
As, Dama Doji llam a sus doncellas, y les dio un cuenco de arroz y
pescado hervidos, y les indic que se lo entregaran al mendigo. Salieron al
crudo viento invernal, pero aunque el mendigo acept agradecido la comida, rechaz de nuevo el alojamiento que le ofrecan. Confundida por
su extrao comportamiento, Doji acudi de nuevo a su ventana, el hombrecillo no se haba movido. Simplemente se sentaba en el camino, aceptando calmadamente el fro da invernal a su alrededor.
Por ltimo, a pesar de los ruegos de sus doncellas, Dama Doji abandon el palacio y acudi al camino que sala de Otosan Uchi. Llevando slo
un manto tejido de gruesa lana, se par en la gruesa nieve cerca del hombrecillo. Me dijeron, dijo suavemente, que no entraras. No aceptaras
al menos este clido manto?.
Por qu debera quererlo?. La voz del mendigo era ruda, inculta,
pero no irrespetuosa.
Para que puedas vivir. El da se oscurece y la noche traer fuertes
tormentas, y nieve. Quieres congelarte y morir?.
El extrao mendigo mir a la dama, su rostro era blanco tan blanco
como la nieve que lentamente cubra el suelo. Morir?, se ri entre dientes.
Dices esa palabra con tristeza, mi Seora. Sus delgados ojos se entrecerraron
mientras coga calmadamente un trozo de pescado del clido cuenco.
No temes a la muerte?.
Mi Seora, no temo vivir. Doji mir al hombre, con una mirada confundida en sus rasgos perfectos. Mira a tu alrededor, seora. Qu ves?.
Doji mir la tierra a su alr ededor, desde los muros del palacio hasta la
nueva construccin de Otosan Uchi, hacia el ocano ondulado y las rocas
de la playa. Veo... el mundo.
Eso es todo lo que ves? No miras lo que tienes justo ante tus ojos. El
hombrecillo se ri entre dientes y Doji se sonroj enfadada. Gentil Dama
Doji, no pretendo insultarte. Dime..., baj la mano y recogi un puado
de nieve de sus pies. No ves la nieve?.
La nieve?, dijo ella. Por supuesto que veo la nieve. Hay nieve por
todas partes.
Ah, pero, realmente miras la nieve?.
Mientras Doji le miraba perpleja, apunt a un gran copo que caa ante
sus ojos, a travs de sus dedos, y aterrizaba en el suelo a sus pies. Despus de
un momento, ella dijo: Tena siete agujas que salan del mismo punto.
Y este?.

Leyenda de los Cinco Anillos

La Casa de la Grulla

Al caos y al conflicto, llevo la paz.

A los simples y burdos, les ofrezco la civilizacin.
A los sucios e incultos, les muestro la belleza.
A cada nueva generacin, les entrego un Hantei.
Sin m, Rokugan sera un oscuro y desagradable campo de batalla.
Soy la Grulla.

Tierra (Rokugan)

El presente

El clan Grulla est formado por cuatro poderosas familias, cada una en
igual posicin para determinar la poltica del clan. Tal igualdad se debe a la
completa simbiosis de las casas nobles Grulla: ninguna solapa los deberes
del resto, y todas son necesarias para mantener el poder del clan intacto.
Los Doji son la voz del clan y el corazn de su fuerza. Son la fuerza
poltica de ms peso en Rokugan. A travs de sus esfuerzos, la Grulla lidera
la sociedad, ejerce el mecenazgo de las artes y la civilizacin, y conforma
alianzas polticas con el resto de clanes de Rokugan. Los Kakita, famosos
por sus duelistas iaijutsu, son creadores de los artefactos ms bellos; sus
artesanos son los ms respetados del Imperio. Los Daidoji, por su parte,
desempean el papel del brazo armado de la Grulla, y son los encargados
de vigilar las fronteras de su territorio, adems de actuar desde las sombras,
tratando con aquello demasiado deshonroso o peligroso para el resto de las
familias. Los Asahina, los nicos shugenja del clan, pasan el tiempo meditando en paz y creando hermosos objetos de maravilloso poder.
Los Kakita descienden del primer seguidor de Dama Doji, de los
lejanos tiempos en los que ella y sus hermanos cayeron del cielo y
crearon la nacin de Rokugan. Kakita fue el primer Campen Esmeralda, el primer Campen de la Grulla, y el marido de Dama Doji. Sus hijos
eligieron seguir tanto la senda de su madre como la de su padre, y as
nacieron las dos casas. Los Daidoji provienen a su vez del quinto hijo de
Doji y Kakita, quien decidi recorrer un camino diferente y cre su
propia casa al servicio de la Grulla.
Los Asahina tuvieron su origen en un Fnix Isawa que se enamor perdidamente de una samurai-ko Grulla. Aportaron su conocimiento acerca de
la creacin de objetos mgicos, y cuando este arte se uni al de la familia
Kakita, la casa Asahina se convirti con rapidez en la ms hbil artesana de
todas las que existen en Rokugan. La historia de la Grulla es ilustre y gloriosa, y sus eventos son parte de los mitos de Rokugan. Su pasado (y su futuro)
se hallan inextricablemente vinculados al Imperio Esmeralda.
A pesar de su aparente debilidad militar, la Grulla posee una gran
experiencia en la guerra. Su constante defensa frente al Len y al Cangrejo ha hecho de la Grulla un Clan preparado y alerta en cada momento. Los
Grulla viven en palacios bellamente ornamentados, y son famosos por su
habilidad poltica. De hecho, se afirma que poseen aliados en cada casa
de Rokugan, de los que pueden requerir su ayuda en tiempo de necesidad. Son cultos, sofisticados y elegantes; hablar con ellos es asistir a la
personificacin de la gracia y el refinamiento. Un samurai Fnix, que
defendi en una ocasin a un artesano Grulla frente a los asaltos verbales
de un Cangrejo, dijo T luchas contra las Tierras Sombras para que
Rokugan pueda vivir. Los Grulla le dan a Rokugan algo por lo que vivir.
Hay un mito acerca de una grulla en el folclore rokugans, en el que se
cuenta cmo un hombre liber a uno de estos animales de la red de un
pescador. En agradecimiento, la grulla se transform en mujer. El animal lo
visit al da siguiente, ofrecindole amistad y compaa. Los dos terminaron
contrayendo matrimonio, y la mujer se dedic a realizar pinturas de gran
belleza que vendan con facilidad. Pronto la pareja fue rica y vivi con
holgura y felicidad el resto de sus das. Cuando el hombre muri, la leyenda
dice que la mujer llor al lado de su pira funeraria durante tres das. Transcurrido este tiempo, levant sus manos al sol celestial, y recuper su forma
de grulla, para nunca ser vuelta a ver. Tal dedicacin, lealtad, y belleza se
atribuyen a los grulla, y al clan que ostenta su nombre.
Es importante advertir la diferencia entre lo que la Grulla es, y lo que
quieren que pienses de ellos (la subestimacin es una poderosa herramienta).

Desde el comienzo de la Guerra de Clanes, se crea que la Grulla sera la

primera en caer. Conocidos ms por su habilidad en los duelos y su podero
poltico que por su habilidad en el campo de batalla, los asaltos por parte
del Len y el Cangrejo, le costaron la prdida de dos provincias. Quizs la
Grulla ha sido la que ha recibido el ms duro castigo por los otros clanes a
consecuencia de su gran riqueza y la influencia que poseen en la corte del
Emperador, o quizs porque han sido sus territorios los ms debilitados a
causa de la terrible plaga que asola el Imperio. Estas y otras dificultades han
situado a la Grulla en una complicada situacin, la de tener que defenderse
de los dos ejrcitos ms poderosos del Imperio: el Len y el Cangrejo. Slo
las decididas tropas Daidoji, apoyadas por sus aliados Fnix y Unicornio,
han evitado la completa destruccin del clan. Incluso su mejor maestro de
la espada, Kakita Toshimoko, ha estado a punto de morir tras el ataque de
un asesino ninja durante el asalto de la famosa Corte de Invierno Grulla.
No obstante, un mayor horror sacude territorio Doji. Un ejrcito de
criaturas de las Tierras Sombras ha comenzado a marchar sobre Rokugan,
reunindose en las provincias Cangrejo y amenazando las tierras meridionales de la Grulla. Los rumores de la plaga que se abate sobre el norte no
hacen ms que empeorar la situacin, agitando ms si cabe a los campesinos grulla. Este es un tiempo necesitado de hroes, hroes que defiendan el clan contra tales invasores, y devuelvan la paz a las prsperas
tierras de las familias Grulla.

El Dragn
Y los ejrcitos del hermano oscuro marchaban sobre el mundo entero,
matando a todo lo que se cruzaba en su camino. El primer Emperador
estaba perdido. Su hermano estaba usando una magia que l no entenda. Incluso el noble Akodo y el sabio Shiba no podan aconsejarle.
Decidi que deba enfrentarse a su hermano oscuro l solo. Akodo prohibi al Emperador hacerlo. Ese es mi deber, le dijo. Pero el Emperador
se neg y sali para enfrentarse al hermano oscuro por s mismo, sabiendo
a medias en su corazn lo que sucedera.
Pero antes de que pudiera partir, un hombre vestido con un sencillo
quimono, un sombrero ancho y un largo bastn se le acerc y se inclin
profundamente. Soy Shinsei, dijo al Emperador.
Qu tienes que darle al Emperador, hombrecillo?, pregunt Akodo.
Slo sabidura, respondi Shinsei.
Bien, entonces. Djanos ver tu sabidura, dijo Akodo y avanz hacia
adelante desenvainando su espada....
...El derrotado Akodo se frotaba el morado de su cuello mientras escuchaba las palabras del hombrecillo. Todos ellos, los Hijos del Sol y la Luna,
escuchaban tambin, pero las palabras de Shinsei iban dirigidas al Emperador Hantei.
Mientras hablaba, el Emperador y sus hermanos y hermanas hacan
preguntas. Shinsei las responda, pero muy a menudo sus respuestas slo
llevaban a ms preguntas.
El nico que estaba silencioso era el que Shinsei llamaba Togashi.
Cul era su nombre antes no lo s, y dudo que nadie ms lo sepa. Togashi
escuchaba silenciosamente, sin dar muestras de comprensin, o siquiera
de inters. Pero entonces Shinjo hizo una pregunta y cuando Shinsei respondi, Togashi se levant. Todos sus hermanos y hermanas se sorprendieron por la repentina reaccin de Togashi, pero Shinsei no. Observ
cmo Togashi le miraba y luego le vio internarse en el bosque.

Almanaque

Captulo uno

Mientras caminaba, dos hombr es le siguieron. Sus nombr es eran

Mirumoto y Agasha y eran leales a Togashi. Cuando le encontraron solo
en el bosque, l les dijo que se apartaran. Cuando le preguntaron por qu,
les dijo No me mover hasta que comprenda.
Mirumoto mir a Agasha, pues ambos estaban perplejos. Mi seor,
pregunt Mirumoto. Qu quieres decir?.
Quiero decir lo que he dicho, replic Togashi.
A pesar de sus splicas, Togashi se neg a moverse, o a comer, o a beber.
Mirumoto y Agasha intentaron traerle comida y sake, pero no se movi.
Nueve das pasaron de esta forma, con el sol saliendo y ponindose y
Togashi inmvil en el centro de un crculo de comida y bebida. Mirumoto
y Agasha suplicaron a Shinsei que hablara a Togashi, para convencerle de
comer o beber, pero Shinsei sacudi la cabeza y dijo: Cuando el estudiante est preparado, el maestro est all.
En la maana del dcimo da, Togashi apenas poda hablar. Su cuerpo
estaba muriendo y su mente estaba espesa. Su visin estaba enturbiada
con sombras, pero vio a un hombrecillo avanzar hasta el lmite del crculo
y arrodillarse a su lado. Togashi reconoci al hombrecillo, y le dijo: No
me mover hasta que comprenda.
Shinsei sonri y asinti. Yo tampoco, dijo, y pasando sobre la comida
y la bebida se sent en el crculo cerca de Togashi.
Los ojos enturbiados de Togashi se llenaron de estupor, y entonces sus
labios secos sonrieron. Asinti y un ruiseor entr tambin en el crculo,
llevando una rama de cerezo en flor consigo. Togashi comi el dulce fruto
de la rama y, juntos, l y Shinsei comieron la comida que les rodeaba.

Leyenda de los Cinco Anillos

La Casa del Dragn

El Clan Dragn es nico, puesto que desde el punto de vista rokugans,

no son realmente un clan. Todos los dems clanes pueden sealar como su
ancestro a uno de los kami (o a uno de sus seguidores), pero los samurai
Dragn no. Su fundador, Togashi, no estableci una linaje. Aquellos que llevan el nombre Togashi son miembros de una orden monstica fundada por el
propio Togashi hace mil aos. Cuando un samurai toma el nombre Togashi,
abandona su propio nombre para demostrar que nunca ms ser el hombre
que una vez fue. Ahora es un Togashi, un ise zumi, un Hombre Tatuado.
Otras dos familias, Agasha y Mirumoto, trazan su origen hasta los dos
samurai que sirvieron a Togashi hasta su muerte. Agasha fue un reputado
shugenja, uno de los primeros en advertir las conexiones entre la sabidura de Shinsei y la religin de las Siete Fortunas, y Mirumoto sirvi a
Togashi como yojimbo (guardaespaldas) y fundador del famoso estilo
Dragn de dos hojas. Los Kitsuki a su vez provienen de los Agasha.
Ocho hombres y mujeres siguieron a Shinsei hasta las Tierras Sombras, y Mirumoto fue uno de ellos. Cuando Shinsei le dijo a Hantei que
deban ser hombres y mujeres mortales quienes le siguieran, Mirumoto
fue el segundo en prestarse voluntario, slo medio paso por detrs del
Trueno Len, Matsu. Ninguno de los camaradas Dragn de Mirumoto cuestion su participacin.
Mirumoto desarroll un peculiar estilo de kenjutsu. En lugar de usar
slo la katana, el samurai Dragn empleaba tanto la katana como el
wakizashi. Tengo dos hojas en mi cinturn, por qu debera dejar descansar una?.

10

Tierra (Rokugan)

Cuando las noticias de la derrota de Fu Leng llegaron hasta Togashi,

llam a aquellos que haban elegido seguirle y march hacia las montaas
de Rokugan. No estaba interesado en la poltica ni en la vida de la corte,
tampoco en los conflictos o la guerra, solamente deseaba una vida tranquila de contemplacin. Aquellos que lo acompaaron comparta su bsqueda de la calma e introspeccin.
Los dos seguidores ms famosos de Togashi fueron el primer Agasha y
un Mirumoto de nombre Yojiro, el hijo del Trueno Dragn. En las montaas, Agasha se dedic a establecer escuelas y templos, mientras Yojiro se
ocupaba de mantener la seguridad. Los dos trabajaban codo con codo,
aprendiendo mucho sobre la senda del otro. Con el transcurso de los
aos, un intenso vnculo de amistad surgi entre el bushi y el shugenja. El
Mirumoto aconsejaba a sus bushi observar y aprender de los estudiantes
de Agasha, y ste a su vez haca lo propio con sus pupilos.
Esta prctica continu, incluso despus de la muerte de los fundadores
de las dos escuelas. Los bushi Mirumoto (a pesar de no ser capaces de
realizar magia) se hallan muy sintonizados con los Cinco Elementos, y los
shugenja Agasha conocen los principios bsicos de la tctica y estrategia.
A lo largo de mil aos, los roles de las familias se han desarrollado. La
familia Agasha es ahora responsable de la defensa y la seguridad de los
pasos montaosos pertenecientes al Clan. La familia Togashi siguen sus
propios objetivos, tan crpticos que a menudo ni los Agasha ni los Mirumoto
son capaces de explicar.

El presente

En la actualidad, el Dragn permanece distante respecto de lo que le

rodea, permitiendo que sus generales elijan el camino a seguir. Aunque el
poder del Dragn es grande, sin la gua de su Campen, van a la deriva.
Entre los Mirumoto, han surgido los dos mejores samurai de los Dragn: Mirumoto Daini y Mirumoto Hitomi. Hermano y hermana, trabajan
por su clan en multitud de formas, teniendo siempre en mente los deseos
de su campen incluso aunque persigan sus propios objetivos. Hitomi no
lidera ejrcito alguno, pero lucha su propia batalla, cazando a los Cangrejo que asesinaron a su hermano. La mueve una furia temeraria, slo disciplinada por los fuegos del odio. Los Dragn no la controlan; lucha por su
propia causa, pero jams olvidar la de su clan.

El Len
Las nubes recorran el ancho cielo azul brillante de punta a punta
empujadas por el viento. Un millar de rugidos resonaron, mezclados en
un grito de guerra. Los ejrcitos con brillantes estandartes alzaron un millar de espadas hacia los cielos, amenazando a la oscuridad a oponrseles.
Un guerrero, con los ojos brillantes, se volvi hacia una Dama. Ser
glorioso, Matsu. Mil veces haba sido dicho y mil veces ella haba respondido con un tumultuoso grito de guerra y orgullo. Akodo mir hacia abajo, observando la marcha de sus soldados sacudir la tierra. Su yelmo
emplumado ondeaba al viento mientras aferraba firmemente las riendas
de su caballo. Junto a l esperaba una mujer de ojos negros como la muerte, sus labios torcidos en una sonrisa expectante.
A la derecha!, aull Akodo desde su caballo cargando junto a sus
legiones. Flanquean a la derecha! Golpead!.
Los hombres cargaron, sus espadas lanzaban cortes sangrientos a sus
enemigos. Las aberraciones invocadas por el hermano de Akodo gritaron su
odio mientras eran arrolladas. Akodo mir hacia el sur y vio a los seguidores

de Matsu manteniendo valientemente la posicin frente a oni retorcidos,

sus manos chorreaban sangre y veneno. Matsu estaba una cabeza por encima de ellos, con una tremenda espada en su mano. Gritando, carg contra
el oni mayor. Primero a la derecha, su golpe detuvo sus garras, y luego un
corte a las patas de la bestia. Las chispas volaron mientras el no-dachi cortaba las placas de metal de la criatura, y sta ruga de dolor y furia.
Matsu.
Akodo sonri. Qu esposa habra sido! Su esgrima no tena igual, y cualquier hombre bajo su mando dara su vida por ella. La Dama de los Len.
De pronto, con un rugido, los ogros saltaron de un risco, cayendo sobre Akodo y sus hombres.
Akodo sonri mientras limpiaba la sangre de ogro de su katana. Tres valientes samurai haban muerto con valor, pero antes de morir la criatura
oscura. Akodo mir alrededor, la lluvia repiqueteaba en su yelmo. Su pony ya
no estaba, alcanzado desde abajo, y se alz rodeado por los muertos.
Hacia el Emperador!, grit, y se dirigi hacia el centro de la batalla.
Haba ido mal. Akodo vio una marea de figuras retorcidas, agitndose
sobre Rokugan como una tormenta, aplastando a los samurai que les hacan frente. Cerca del Emperador, los hombres de Kakita se cerraban como
un nudo, con las espadas cubiertas de sangre.
Matsu estaba sola, su guardia de honor haba sido destruida. Su armadura estaba rota, su rostro era una mscara de furia. Akodo carg hacia
ella, rompiendo las lneas con grandes golpes. Desde un lado, un oni carg hacia l. Akodo se retorci bajo sus garras, intentando dirigir su espada contra su pecho. Era rpido, y su golpe slo ara la superficie. La
sangre negra salpic la cara de Akodo, cegndole mientras el oni rea.
Viendo slo sombras, Akodo paraba cualquier movimiento, retrocediendo
para ganar algo de ventaja mientras se quitaba el acre lquido de los ojos.
Oy un gruido y un grito, y salt contra la sombra enorme. Su espada
encontr hueso y tendones, pero le fue arrancada de la mano. Otro momento, pero ningn golpe ms.
Akodo intent ver a travs del dolor y la sangre. De pie ante l haba
una mujer, con el cabello enmaraado y salvaje. La mirada estrechada,
ella le ofreci su espada.
Matsu!, grit Akodo, viendo que el demonio haba cado, decapitado, en el suelo. Ella lo cogi del brazo y lo arrastr hasta ponerlo en pie,
guindolo hasta un lugar a salvo. Muchas veces oy el resonar de la batalla, pero sus ojos no podan ver nada claro. Los hombres pasaban en oleadas, y oy a Matsu gritar rdenes en su nombre.
Finalmente, en la seguridad del campamento del Emperador, un sanador
atendi las heridas de Akodo. Vers de nuevo por el ojo derecho, mi seor,
pero el izquierdo..., la voz del hombre se desvaneci en la incertidumbre.
Est bien, murmur Akodo. No necesito dos ojos para encontrar a
mi enemigo. Hizo una pausa. Matsu?.
Aqu. En su voz no haba sumisin, ni reverencia. Slo el ms leve
matiz de respeto marcaba su posicin como vasalla.
Debera estar a tu lado. Su voz era spera, enronquecida por la furia
y la desesperacin. Pero no podr ser hoy. Toma el mando. Despus de
un largo momento: Tenas razn.
Nunca podremos luchar lado a lado, mi Seor. No importa lo que
ordenes, susurr Matsu. Nunca funcionar. La oy rer una vez, mientras la seda de la tienda cruja, y luego slo hubo silencio. Silencio y los
gritos del distante campo de batalla.
Nunca funcionar que luchemos lado a lado, mi Seor. Sus palabras
resonaban en la mente de Akodo. Vio acercarse al monje. El extrao hom-

11

Almanaque

Captulo uno

brecillo se llevara a Matsu a la oscuridad. Akodo inclin la cabeza

cansadamente y sus dedos acariciaron el parche que cubra su perdido ojo.
Es tiempo de que partamos, amigo mo, murmur el monje. Recordars todo lo que te he enseado?.
Akodo asinti cansadamente, y su mano cay en su costado. Hai,
Shinsei-sama. Todo ser recordado. Tienes mi palabra, lo juro.
Una pausa. Luego. Quieres hablar con ella antes de que nos vayamos?. El hombre mir la alta figura que se alzaba sobre la colina, su
cabello negro ondeaba como un estandarte en la arisca brisa invernal.
Akodo mir una vez ms, luego se dio la vuelta. No. Ella conoce lo que
hay en mi corazn. No quedan ms palabras.
Mientras el pequeo hombrecillo se alejaba, sus palabras resonaron en
la mente de Akodo. Ningn sendero es tan estrecho como para que un
hombre deba recorrerlo solo. S uno con tus hermanos, y qudate junto a
ellos. En su fuerza, encontrars la tuya.
Matsu..., murmur, pero ya se haban ido.

La Casa del Len

Cuando los Kami cayeron del cielo, el nmero de hombres y mujeres

de Rokugan era reducido. Los siete Kami buscaron entre ellos a los
mejores. Shiba escogi a los ms astutos, Hida a los ms fuertes, y as,
pero Akodo permaneci solo. No busco hombres que me sigan, dijo.
Busco hombres lo suficientemente valiosos como para que se mantengan a mi lado.
Akodo march en su busca: hombres que estuvieran dispuestos a morir
para proteger al Emperador. Por cada hombre que sobreviva al desafo
de Akodo, cientos encontraban su destino al final de su hoja.
Indignos.
Dbiles.
Cobardes.
Durante tres aos, Akodo viaj a travs de Rokugan, probando a cada
mortal que acuda ante l, aunque pocos conseguan demostrar su vala.
Lentamente, el clan Akodo fue incrementnado su nmero. Liderado por
Ikoma y Kitsu, las tropas de Akodo comenzaron a formar un ejrcito de
grandes proporciones. La rivalidad entre Akodo y Matsu es un tema recurrente en canciones y obras de teatro. Los historiadores Ikoma recitan la
historia cada ao el primer da del invierno. Desde la negativa de Matsu a
luchar con Akodo hasta el rechazo de aquella a sus propuestas de matrimonio, y finalmente su marcha junto a Shinsei, se muestra a Matsu en
solitario, sacrificando su vida en pos del futuro del clan. Akodo, por otra
parte, se muestra junto a sus hombres, entre seguidores y compaeros.
Las familias del Len derivan sus nombres de aquellos que permanecieron junto a Akodo. Las historias de los fundadores de cada familia se
conservan en los registros del Clan, y todos los Len deciden probar su
acero contra el daimyo de su familia el da de su gempukku. Para ellos es
ms que un ritual, es una celebracin del coraje en sus corazones y parte
integrante de lo que significa ser un autntico Len.
Durante mil aos, el Clan Len ha sido la mano derecha del Emperador, dedicndose a registrar las interacciones tanto polticas como militares entre los clanes. Adems su papel como el mayor ejrcito de Rokugan
le ha otorgado un enorme poder respecto al resto de clanes. Para el Len,
sus ancestros son algo ms que espritus del pasado; constituyen una gua
para sus vidas, compartiendo as sus destinos. Son ms que una leyenda,
un mito o parbola. Son ms que parte del pasado del clan; son parte del
presente y del futuro.

Leyenda de los Cinco Anillos

El presente

Actualmente, el Len se ha debilitado. Tras el Golpe del Clan Escorpin,

han perdido la familia Akodo por decreto Imperial. Su ms importante daimyo,
Akodo Toturi, ha sido sentenciado a vivir como un ronin, expulsado de su
clan. En los pocos aos que han transcurrido tras el comienzo de las Guerras de Clan, ms blasfemias e insultos se han vertido sobre el Len, aunque
siempre los han arrostrado con coraje y resolucin. Las tierras del Len se
han visto asaltadas por la plaga, y el Unicornio galopa libremente sobre sus
llanuras occidentales, mientras los ejrcitos Escorpin se ocultan al sur. Slo
la guerra de venganza de Matsu Tsuko contra la Grulla marcha segn lo
previsto, y los Doji son aplastados lentamente bajo las espadas del Len.

El Fnix
Una noche, mucho tiempo antes de que el Imperio existiese como tal,
cuando los Kami acababan de caer sobre la tierra, el Kami Shiba tuvo un
sueo; un sueo ms vvido e intenso que ningn otro que hubiese experimentado. En l, se encontraba de pie en lo alto de una gran montaa, con
un pjaro en llamas al lado. Las plumas del ave eran doradas y escarlata, y
pareca quemar el mismo tejido de la realidad. Plane sobre su cabeza antes de posarse en la rama de un rbol y fijar en l una mirada imperiosa.
Qu tipo de criatura eres?, exhal.
Soy el universo entero, respondi el pjaro.
A lo que Shiba replic: Cmo puedes ser el universo entero, cuando
resulta obvio que ests compuesto por el elemento del Fuego?.
El Fuego es mi forma, mas no la totalidad de mi ser. Sal de un huevo, de
los fluidos de la vida, por lo que es obvio que procedo del elemento del Agua.
Surco los cielos con el viento bajo las alas, as que est claro que vengo del
Aire. Muero para convertirme en cenizas y vuelvo a alzarme completo del
suelo, por lo que debo proceder del elemento de la Tierra. Y al ser todas estas
cosas, y ninguna al mismo tiempo, lo cierto es que procedo del Vaco.
Shiba eligi sus palabras cuidadosamente antes de volver a hablar.
Pero si eres el universo entero, cmo es que estoy separado de ti?.
No lo ests, eres uno y el mismo. Soy el reflejo de tu alma, del mismo
modo que t eres la manifestacin de la ma. Morimos resucitados, inmortales durante un millar de vidas. Somos el ciclo del cosmos, girando en
patrones tan antiguos como el tiempo. Moriremos en llamas slo para volver a alzarnos una y otra vez, hasta que el mismsimo cielo se derrumbe.
Somos el Fnix, el Ojo de la Eternidad.
El Kami cado se despert con las palabras del ave en los labios. Sin
pronunciar palabra, se apresur a salir de sus aposentos para dirigirse
hacia el corazn de Gisei Toshi, la Ciudad del Sacrificio, donde toc la
gran campana de reunin. Los ciudadanos se congregaron para escuchar
lo que tena que decir, e incluso los shugenja Isawa abandonaron sus
bibliotecas, pues presentan que algo monumental flotaba en el aire.
Escuchadme, pueblo mo, comenz Shiba. Llevamos demasiado tiempo separados. Separados de nosotros mismos, de nuestros intereses comunes,
y del Imperio al que servimos. Durante demasiado tiempo hemos sido Isawa
y Shiba, noble y plebeyo, estudioso y guerrero. Ese tiempo ha quedado atrs.
He visto nuestro futuro en las llamas de la destruccin y el gozo del renacimiento. A partir de este momento, se nos conocer como el clan Fnix.
Los Isawa murmuraron entre s, pues no era la primera vez que escuchaban aquellas palabras. Segn la profeca, llegara alguien para hablar
con la voz de los elementos. Sera igual que un pjaro en llamas incapaz
de morir, slo de caer y alzarse de nuevo ante el paso de los siglos. Le

12

Tierra (Rokugan)

conoceran por el nombre bajo el que vendra: Fnix, dador de vida, la

redencin en la destruccin. Y cuando el clamor popular vitore las palabras de Shiba, asintieron su consentimiento. As es como deba ser.

La Casa del Fnix

Antes del tiempo de los Kami, la sangre de la Luna cay de los cielos,
mezclndose con las lgrimas del Sol. Estas substancias, junto con la misma tierra formaron el mundo. Los hombres recorran la superficie del
mundo, y los mejores de estos eran los Isawa.
Cuando los Kami reunieron a la poblacin del mundo y los dividieron en
clanes, Isawa se adelant entre ellos, observando cuidadosamente como los
Kami luchaban entre s. Tras la coronacin del primer Hantei y la reverencia
de la sobrecogida muchedumbre ante el Prncipe de los Cielos, la cabeza de
Isawa no toc el suelo. Qu los hace ser dignos de nuestro servicio?, susurr a sus hermanos y hermanas, y todos asintieron al unsono.
Despus de esto, la familia Isawa dej la colina que sera Otosan Uchi,
y se dirigi al norte, en busca de un lugar donde formar su propia ciudad.
En las montaas septentrionales, a pesar del fro y las duras condiciones,
la ciudad prosper. Se dice que cuando los ejrcitos de Fu Leng invadieron Rokugan, los Isawa ignoraron la amenaza. El peligro que representaba la monstruosa horda pareca irrelevante para la pacfica tribu. Pronto,
no obstante, grupos de Oni y trasgos alcanzaron sus tierras, destruyendo
las aldeas y asolando el suelo que pisaban.
En el da en que la hermana pequea de Isawa fue asesinada por un Oni
errante, Shinsei y Shiba llegaron a territorio Isawa con la intencin de solicitar que su gente se uniera en la lucha por el Imperio. Tras el entierro, Isawa,
Shiba y Shinsei se reunieron. Isawa escuchaba con atencin los argumentos
de Shinsei, y para cuando la luna se alzaba en el cielo de verano, se haba
hecho un trato. Isawa acompaara a Shinsei a las Tierras Sombras, si Shiba
juraba que l y sus descendientes protegeran siempre a la ciudad. Isawa por
su parte jur fidelidad a los Shiba, pero con una condicin. No soy tu
sbdito, aclar Shiba, y no deseo que mi gente piense que los he convertido en esclavos. Si yo y mi familia te juramos lealtad, has de arrodillarte ante
m, antes de que te ofrezca mi servicio.
Para cualquier otro Kami, tal propuesta le hubiera resultado descabellada: un hijo de Amaterasu inclinndose ante un mortal? Sin embargo,
para el Shiba, el precio era muy bajo. Ceder ante Isawa le otorgara no
solamente los poderes, conocimientos y fuerza de la familia Isawa, sino
tambin un Trueno que ayudara a la salvacin del Imperio. Fue una
simple eleccin: el orgullo personal o la vida de miles de personas.
Sin dudarlo un instante, Shiba se arrodill, e Isawa le jur fidelidad. Al
sur, en los campos de Otosan Uchi, la situacin era cada vez ms complicada. Miles de hombres perecan en el campo de batalla, defendiendo los
bastiones del Imperio. Segn retrocedan ante un brutal ataque, una brillante luz recorri los cielos. Veinte shugenja acudan a su auxilio, volando desde el norte. Sus manos se movan con presteza, realizando mortales
encantamientos que hacan brotar el fuego de sus dedos. Confusos e incapaces de contrarrestar la hechicera, los Oni huyeron de la batalla en
busca de la proteccin de su Maestro.

El presente

El Clan Fnix ha sido forzado a abandonar sus provincias y expandirse

para as conseguir protegerse de las amenazas interiores del Imperio.
Durante gran parte de las Guerras de Clan, han invertido sus recursos no
en la batalla, sino en la investigacin. Han buscado la autntica razn de

las guerras que dividen el Imperio, y de todos los clanes, son los que mejor
conocen los horribles das que estn por venir. Cuando les resulta posible
prestan ayuda a sus aliados Grulla, enviando legiones que apoyen la lucha
de los Doji contra los Len. Sin embargo, salvo estas excepciones, los
samurai Fnix no se aventurado ms all de sus fronteras. Algo antiguo y
espeluznante se agita en las bibliotecas Isawa y la sabidura que una vez
fue prohibida vuelve a estar libre.

El Escorpin
Las puertas se abrieron mientras docenas de guardias se alzaban listos
para defender al Emperador y su corte. De pie en el umbral, con un humo
gris supurando de su piel, se alzaba Shosuro, tambalendose, con una
bolsa negra sobre su hombro.
Su mscara estaba retorcida, pero, an as, poco de su rostr o era visible. Sus ojos cansados recorrieron la corte y sus labios murmuraron un
nico nombre: Bayushi.
l avanz, con paso vacilante. Sus labios temblaban. Cuando la vio de
pie all, rodeada de guardias aterrorizados, corri hasta ella, apartando
las manos que queran hacerle retroceder.
Ella cay de rodillas cuando le vio, una sonrisa exhausta encontr sus
labios.
No la toques!, pidi Shiba. La corrupcin!.
Bayushi no dud. Cogi a la Trueno moribunda entre sus brazos y la
acerc a l. Se susurraron algo unos segundos, el drama del momento
ahog sus palabras. Luego, mientras la corte se aproximaba, su conversacin pudo orse.
No importa, pequea, le dijo Bayushi. Ya no importa.
La Trueno sacudi la cabeza. He vuelto... he vuelto porque tena que
decirte....
l la acall, pero ella continu. Tengo que decirte..., susurr de nuevo, sus palabras tan dbiles que se perdieron para todos excepto para el
hombre que la sostena.
Bayushi asinti. Lo comprendo. Y te perdono.
Shosuro sonri por ltima vez, luego la luz abandon sus ojos y su
cuerpo cay profundamente entre sus brazos, silencioso e inmvil.
El silencio llen la sala. El nico sonido que nos llegaba era el suave y
rtmico de la respiracin de Bayushi. Nadie se movi.
Luego, finalmente, Bayushi se alz, su mirada segua sobre el cuerpo
roto en el suelo. Habl sin que sus ojos se movieran.
Su cuerpo debe ser bendecido. Luego quemado.
Bayushi hizo una pausa, tomando aliento. Luego, prosigui. La bolsa, dijo. La bolsa contiene el mtodo que utilizaron para atar a nuestro
hermano. Ella prometi a Shinsei que nos lo traera de vuelta.
Hantei asinti. Entonces lo logr.
Deben ser custodiados, dijo Bayushi. Ese deber me pertenece.
Hantei asinti de nuevo. No tengo nada en contra.
Bayushi se volvi hacia la bolsa. La cogi en sus manos y se volvi
hacia sus seguidores. Vamos, hijos, dijo. Tenemos mucho que hacer.
De Da del Trueno de Kakita Uniko

El Escorpin escondido

De todos los clanes de Rokugan, los ms mezquinos son los Escorpin.

Casi todas las obras de teatro, canciones e historias tienen por villano a un
Escorpin. Se les muestra como mentirosos, asesinos y cobardes. Cada

13

Almanaque

Captulo uno

samurai en Rokugan conoce la verdad: un Escorpin jams podr afrontar

la mirada de un hombre honesto sin arredrarse.
Nada est ms lejos de la verdad.
Antes del Golpe Escorpin, unos dos aos antes de las Guerras de
Clan, el Clan Escorpin formaba parte de la sociedad rokuganesa. Su poder resida en los secretos, en el conocimiento de los secretos de cada
hombres y en ocultarlos o mostrarlos para uso del Emperador.
As los Len claman ser la mano derecha del Emperador, desempeando la proteccin militar del Imperio; y los Grulla la mano izquierda,
pues ocupan una posicin preeminente en la corte; los Escorpin llevan a
cabo las tareas clandestinas que necesitan desempearse en nombre del
Emperador. En un Imperio siempre existen secretos, verdades ocultas y
asesinos que han de ser descubiertos. Esta es la ocupacin principal de
los Escorpin, y la de los Bayushi en particular.
De Escorpin a Escorpin, las historias acerca del Golpe liderado por
Bayushi Shoju se han propagado con rapidez; y son bastante diferentes de
las que cuentan los otros clanes. Ellos hablan de un cortesano de nombre
Bayushi Daijin, un antiguo daimyo del clan Escorpin, un hombre sabio
hasta que se encontr con el profeta Fnix, Uikku. Tras hablar con ste,
Daijin se vio asaltado por visiones y pesadillas, hasta que finalmente se
volvi completamente loco.
Daijin se introdujo en el Laberinto Bayushi, para no ser visto nunca ms.
Sin embargo, sus escritos (pergaminos realizados con su propia sangre)
hablan de un oscuro futuro, y del retorno de un Dios perdido. Estos pergaminos, cuidadosamente conservados, fueron colocados en una cmara secreta bajo Shiro no Bayushi, y olvidados all hasta que Bayushi Shoju los
abri y ley las palabras malditas. Shoju crey que la advertencia final recogida en los escritos era cierta: De la sangre y los huesos del ltimo Hantei,
se alzar el Dios cado. La nica forma de evitar que la profeca se cumpliese consista en terminar con la lnea Hantei para siempre.
No todos los Escorpin que formaban parte del ejrcito de ese da saban
por qu luchaban. Algunos crean que la razn no era ms que el mero poder,
o la ambicin. Pero aquellos pocos que saban de las palabras de Daijin:
combatan por algo que apelaba a los propios fundamentos del bushido.
Y cuando descubrieron que Shoju no haba tenido xito en su intento
de destruir al ltimo Hantei, se escondieron y juraron vengarlo. Todas las
familias Escorpin, Shosuro, Shoji, Bayushi y Yogo, se concentraron en
este propsito: vengar a Shoju y completar lo que haba dejado a medias,
la destruccin de la lnea Hantei.

El aguijn del Escorpin

Tras el fracaso del Golpe Escorpin, las relaciones entre Clanes se volvieron ms tensas. Un joven e inexperto Emperador se sentaba en el trono,
un Emperador que haba contrado matrimonio con Dama Kachiko con el
fin de concluir la lnea Bayushi. Pero en el plazo de dos aos, comenzaron
a sucederse extraos acontecimientos. Una extraa enfermedad asol el
imperio, infectando al mismo Emperador. Al principio, la Corte sospech
del veneno, pero tras un intento de asesinato frustrado por la Dama Escorpin, Kachiko fue eliminada de la lista de sospechosos. Sin embargo, haba
sido ella quien haba planeado el asesinato, y tambin quien lo haba evitado con la intencin de alejar las sospechas que pudieran recaer sobre s
misma. Era cierto que haba envenenado al Emperador, pero tan sutilmente
y con tanta habilidad que nadie en el Imperio pudo advertirlo.
En realidad, el objetivo de Kachiko consista en eliminar al Emperador y
ha invertido todos sus esfuerzos en esta tarea, de forma meticulosa y con-

Leyenda de los Cinco Anillos

cienzuda durante los dos ltimos aos de su vida. Pero su plan se ha torcido.
El shugenja conocido como Yogo Junzo, una vez un leal miembro del clan y
guardin de los siete Pergaminos Negros, ha sido corrompido. Ha sido a
causa de Junzo que los Pergaminos Negros se han abierto. Su magia se ha
extendido por todo el Imperio, propagando la guerra y la enfermedad. El
mismo Junzo se ha vuelvo totalmente loco, y ha prestado sus servicios al
Dios Oscuro, Fu Leng, en su desesperacin por vengarse del Imperio, y de la
mujer que condujo a Shoju a su muerte. Ha abierto los Pergaminos uno por
uno, desatando su poder y apelando a su poder para destruir al Imperio que
haba asesinado a su Seor, sin importar las consecuencias.
Kachiko y el resto de los Escorpiones ocultos buscan desesperadamente al traidor, Junzo, para poner fin a su vida, pero se temen que es
demasiado tarde. No han sido los salvadores de Rokugan sino la seal de
su destruccin. Han cumplido la profeca que deseaban evitar.

El presente

Los ejrcitos Escorpin de las Guerras de Clan estn muy lejos de ser las
impresionantes fuerzas que asaltaron Otosan Uchi hace seis aos. Donde una
vez se alzaban sus legiones orgullosas y desafiantes, ahora han de buscar
formas ms sutiles de derrotar a sus enemigos. Han depositado su confianza
en el subterfugio y los secretos, liderados por el hermano de Bayushi Shoju,
Aramoro; un ninja entrenado por la escuela Bayushi. No es el general que su
hermano fue, pero esta tampoco es la guerra que Shoju libr.
El Escorpin siempre ha permanecido a la sombra del Imperio, maestros
del engao y la mentira. Ahora tan slo cuentan con estas herramientas,
puestos que sus ejrcitos han sido destruidos. En muchas ocasiones, el
engao es mucho ms mortal que el acero. Siguen los consejos recogidos
por Bayushi Tangen en su obra Mentiras, como gua para llevar a cabo sus
batallas. Cierto es que esta forma de luchar resulta deshonrosa, pero gracias
a ella se ganan guerras que otros hombres moriran luchando.

El Unicornio
Shinjo, hermosa y ligera,
Nunca estaba donde se la vea;
Su alma es el quinto viento.
El viento sopla, las fortunas se alzan y caen, pero la gente sencilla
siempre soportar su peso. Y Shinjo llev a su hermano hasta la cima de
una alta montaa, desde donde podan ver las infinitas tierras de la tierra
rota y desolada por la guerra. Enfrent a Hantei con el sur y las Tierras de
la Sombra y le dijo: Juramos proteger a la gente del mal y fallamos. Luchamos, pero la gente muri. Al final, fue la gente quien se salv a s
misma, puesto que fueron Shinsei y sus Siete Truenos quienes derrotaron a
Fu Leng, no nosotros. Y Shinjo volvi el rostro de su hermano hacia el
oeste, hacia el sol poniente. Dices que sabemos qu peligro esperamos.
Pero no supimos qu esperar cuando Fu Leng atac, ni siquiera a pesar de
que es nuestro propio hermano. Casi fuimos derrotados. Si otro peligro
apareciera, quiz desde ms all de las montaas, podra ser una nueva
amenaza, misteriosa y desconocida, de la que no sabemos nada. Quin
puede decir si nuestro imperio podra hacerle frente? Debemos descubrir
tales males antes de que lleguen a nosotros, como hicieron las retorcidas
hordas de nuestro hermano. Y debemos encontrar otros aliados, puesto
que Shinsei y sus Truenos han perecido.
Mientras su madre desapareca de la vista, Shinjo supo que pronto ella
la seguira.

14

Tierra (Rokugan)

El desierto eterno

El peor enemigo es la carencia de esperanza.

El Tao de Shinsei
El Clan Unicornio acompa a su fundador tiempo ha, a travs del
mundo, explorando nuevos territorios y regresando con noticias del mundo que rodeaba al Imperio. Tres familias siguieron a Shinjo en su gran
viaje: Otaku, Iuchi e Ide. Estos viajeros eran el Clan de Ki-Rin.
Los primeros aos de la Gran Bsqueda fueron complicados para el Clan.
Entraron en el desolado mar de dunas conocido como Arenas Ardientes,
como un grupo de exploradores y emergieron de all como un curtido grupo
de guerreros del desierto. En las Arenas Ardientes aprendieron la fuerza que
se halla en la privacin, la paz que se consigue con la agresin, y cmo la
supervivencia del clan depende de todos y cada uno de sus miembros.
Con los primeros forasteros con los que Shinjo y sus seguidores se
encontraron fueron los Ujik-hai, una cultura nmada de fieros guerreros.
Los Ujik-hai atacaron a los Ki-Rin sin provocacin, pero no eran rival para
la divina Shinjo y su hueste heroica. Esa noche, muchos de los Ujik-hai
desertaron y le rogaron a Shinjo por su proteccin; muchos de los nmadas fueron adoptados por el Clan, introduciendo sus propias costumbres.
Tras el viaje del clan Ki-Rin, Shinjo desapareci, y regres siete das
despus embarazada con el hijo del Unicornio. Shinjo orden que, a su
muerte, sus seguidores llevaran el nombre del Unicornio, la nica cosa
que haba conseguido alejarlo de ellos, y as cuando regresaron a Rokugan
despus de doscientos aos, montados en sus impresionantes caballos, lo
hicieron como el Clan Unicornio.

200 aos de adaptacin

Incluso despus de dos siglos, los Unicornio tienen un duro camino para
ser totalmente aceptados en la cultura rokuganesa. En parte es debido al
hecho de que muchos de ellos piensan que es irrelevante el serlo. Otros creen
que son los rokuganeses quienes deben hacer el esfuerzo de salvar la distancia que les separa. Otro factor (quiz ms importante) es la cantidad de conflictos que los Unicornio han debido hacer frente desde su regreso.
En doscientos aos, el nmero de batallas que los Unicornio han luchado est slo por detrs de los Len (sin contar las continuas escaramuzas de los Cangrejos con las Tierras Sombras, por supuesto). Han demostrado ser valiosos aliados para casi cualquier Clan. Rokugan reconoci
inmediatamente la ventaja de la caballera Unicornio y sus tcticas, haciendo que su apoyo fuera un factor poderoso en casi cualquier conflicto.
Y aunque su colaboracin ha resultado inestimable en multitud de
ocasiones, en los crculos sociales de la corte del Emperador, gran parte
de la elite de Rokugan se niega a reconocerlos como Clan... al menos
mientras no hay diplomticos Unicornio cerca.
Casi doscientos aos despus, las familias Unicornio han aprendido a
adoptar las costumbres y maneras de Rokugan... hasta cierto punto. Algunos Unicornio son reticentes a cambiar: Me han enseado a seguir los
pasos de mis ancestros, y cuando lo hago me llaman sucio eta!. Estos
Unicornio escupen en la cara de la tradicin de Rokugan, prefiriendo
adherirse a sus propias costumbres. Llevan pieles de animales durante el
invierno (carne impura como vestimenta?), hablan con acentos distintivos (no tienen la cortesa de hablar correctamente) y celebran las fiestas
Unicornio en vez de las celebraciones prescritas por las Fortunas de
Rokugan (y deshonran a sus antepasados!).
A pesar de doscientos aos de coexistencia, sigue habiendo cierta friccin entre los Unicornio y el resto de Rokugan.

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