Etapas de La Alimentación Infantil
Etapas de La Alimentación Infantil
Etapas de La Alimentación Infantil
infantil
Recién nacido y primera infancia
La alimentación del recién nacido y la primera infancia pasa por tres periodos que debemos
distinguir:
• Periodo lácteo, por ser la leche el único alimento. Desde el nacimiento hasta los 6
meses aproximadamente, en los cuales se comienza la introducción progresiva de
otros alimentos.
• Periodo de transición, o destete, donde vamos introduciendo la alimentación sólida
o bien anterior a ella, optamos por una lactancia artificial.
• Periodo de maduración digestiva. Hasta que el niño va alcanzando la madurez
inmunitaria y la introducción de los alimentos.
Cómo más adelante veremos, la lactancia materna es la más adecuada para los bebés, pero si
esta no puede realizarse, debemos considerar una lactancia artificial con fórmulas
adaptadas.
Las pautas nutricionales para esta edad vienen marcadas por las recomendaciones e
informes técnicos de la FAO/OMA, el Comité de nutrición de la Academia de Pediatría y el
Comité de Nutrición de la Sociedad Europea de Nutrición y Gastroenterología Pediatrica
ESPGAN.
Hay que conseguir una alimentación adecuada pues lo contrario conduce a trastorno
durante la niñez y afecciones en el adulto: obesidad, ateriosclerosis, hipertensión…
Alimentos
COMPARACION DE LA LECHE MATERNA CON LA LECHE DE VACA.
VENTAJAS E INCONVENIENTES
Los mamíferos de todas las especies se alimentan desde el nacimiento, hasta que su
organismo es capaz de metabolizar otros nutrientes, de leche de sus madres. En el caso del
ser humano, el alimento primero que debiera tomar es la leche materna, lo cual no se realiza
siempre, la madre o no intenta, o abandona la lactancia materna
muy pronto, bien por desconocimiento de sus beneficios, por
incorporación al mundo laboral o por incompatibilidades o
problemas de salud, entonces se requiere la utilización de leches
alternativas llamadas “formulas adaptadas”.
Al comienzo de la toma, la leche es dulce y líquida, para calmar la sed y ansia del bebé,
ésta se va volviendo densa y menos dulce a medida que el niño mama. Al principio, la
duración de las tomas es más breve, el bebé necesita estar menos tiempo mamando porque
su capacidad de succión y sus necesidades energéticas están disminuidas estos primeros
días. Más adelante el bebé va a pedir, él mismo mamar más tiempo. La duración de la toma
no debe ser superior a veinte minutos, utilizando los dos pechos, ya que todos los
requerimientos nutricionales se completan en este periodo, prolongarlo más no traerá
consigo sino problemas de grietas en el pezón de la madre.
Es importante que el recién nacido empiece a mamar cuanto antes, el reflejo de succión
tiene la máxima respuesta a los veinte-treinta minutos después del parto y este momento
debería ser aprovechado. Cuanto antes empiece a mamar, antes se producirá la secreción de
leche y el bebé recibirá tempranamente el calostro con todas sus ventajas.
Si la lactancia se retrasa, bien por haber sufrido la madre una cesárea, o por otras causas,
niños prematuros, o con otros problemas, se intentará su inicio dentro de las tres horas
siguientes al parto. Si está no es de ningún modo posible, y en niños que presenten alto
riesgo de ser alérgicos, se debe sustituir el biberón de fórmula adaptada de inicio por otra
formula hipoalergénica. Los padres deben avisar de este hecho y manifestar expresamente
que no quieren que su hijo sea alimentado con otra fórmula adaptada. Con la lactancia
materna se previenen muchas enfermedades, entre ellas las alergias a alimentos.
Tabla comparativa entre la leche materna y la leche de vaca por 100 ml.
Fomon. S; Filer. L. Milk and Formulas in: Infant Nutrition. 2nd de. Saunders. Co
FORMULAS ADAPTADAS
En la actualidad existen un buen número de fórmulas para lactantes con diferentes usos
dietéticos o terapéuticos, los cuales se ajustan a la siguiente clasificación:
• La leche de vaca nunca se introducirá antes del año. Es recomendable seguir con la
leche de continuación hasta los tres años o bien dar leche de crecimiento o leche
junior, pero no es imprescindible. La leche de vaca, cuando se introduzca deberá ser
entera, por su aporte de vitaminas liposolubles, salvo que haya recomendación
médica que indique otra cosa.
• Los cereales se introducirán alrededor de los cuatro-seis meses y nunca antes de los
cuatro, primero serán sin gluten y añadiendo 1-2 cucharaditas en cada biberón dos
veces al día. Aumentando la cantidad de harina en una proporción del 7% con
respecto a la leche. A partir de los ocho meses se puede dar mezcla de cereales,
introduciendo el gluten.
• Frutas. Se empezará a partir de los cuatro-seis meses una papilla de frutas, nunca
sustituyendo a una toma de leche, sino complementándola, para garantizar el aporte
adecuado de proteínas. Se emplean frutas jugosas como naranja, manzana, pera,
uva, ciruela.
• Las verduras se irán introduciendo a partir de los seis meses, igual que la fruta, en
puré, primero el caldo añadido al biberón de medio día, después solas en puré,
complementadas con leche y luego sustituyendo la leche por 10-15 g. de carne o
pollo, esto nunca antes de los seis meses. Se deben evitar al principio verduras con
alto contenido en nitritos, como remolacha, espinacas, nabos y zanahorias, no
introduciéndolas antes de los ocho meses y preferir al principio patatas, acelgas,
judías verdes, calabacín, etc., .para más tarde introducirle todas las demás. Se puede
añadir una cucharada de aceite de oliva al puré.
• Carnes, preferiblemente las menos grasas, empezando por el pollo y nunca antes de
los seis meses, en una cantidad de 10-15 gr. y aumentando 10-15 gr. por mes.
Posteriormente se introduce la ternera y el cordero. No conviene dar a los niños
vísceras.
• Pescados, nunca antes de los nueve meses, a partir de esta edad, pueden sustituir a
las tomas de carne. Es conveniente empezar por pescados magros.
• Huevos: nunca crudos, se comenzará por la introducción de la yema cocida sobre el
noveno mes, primero un cuarto de yema cocido añadido al puré de medio día y
aumentándolo a media al mes, para tomarlo entero hacia los doce meses, puede
sustituir a la carne, tomando dos -tres por semana.
• Legumbres: añadidas al puré de verduras a partir de los dieciocho meses, si se
mezclan con arroz, u otros cereales, sustituyen a la carne, se tomarán dos veces por
semana.
• Yogures: a partir del octavo mes, como complemento o mezclado con la papilla de
frutas.
• No es recomendable el consumo de azúcar, pues la dieta del bebé tiene un aporte
adecuado de carbohidratos.
En esta etapa el aporte de agua es fundamental, al introducir los alimentos sólidos, el aporte
hídrico debe aumentarse. Hay que ofrecerles a menudo agua, y más en situaciones de
enfermedad, fiebre, diarreas, etc.
EDAD DE INTRODUCCION DE LOS DISTINTOS ALIMENTOS EN LA
DIETA DEL LACTANTE.
Yogur
Queso blando
Cereales
Harinas sin gluten
Harinas con gluten
Carne, pescado,
huevo
Pollo
Carne
Pescado
Yema
Huevo completo
Legumbres
Mezcladas en purés
Frutas
Zumos
Papilla
Alimentación del niño de uno a tres años
Este periodo se caracteriza por ser una etapa de transición entre la fase de crecimiento muy
rápido propia del lactante y el periodo de crecimiento estable, que se extiende desde los tres
años hasta el comienzo de la pubertad.
Hay que poner especial cuidado en la conducta alimenticia del niño la cual puede estar
sujeta a determinadas aversiones y preferencias, lo que puede conducir en ocasiones a una
dieta carente de algunos nutrientes.
Los niños a estas edades son caprichosos y tiene tendencias hacia los dulces y golosinas
que a veces se le ofrecen.
La alimentación correcta a partir del año de edad se basa en el consumo de una dieta
equilibrada que asegure los tres objetivos siguientes:
Requerimientos nutricionales
Las necesidades energéticas se sitúan en torno a las 100kcal/kg/día aproximadamente
12.300-1500 kcal/día
La distribución porcentual de la energía entre los distintos principios inmediatos debe ser la
siguiente:
• Proteínas: 12-15%
• Hidratos de carbono: 50-58 %
• Grasas: 30-35%
• Desayuno: 25%
• Comida: 30 %
• Merienda; 15%
• Cena: 30 %
También deben iniciarse poco a poco, galletas yogures, quesos, jamón york, serrano, etc.
Los tarritos son adecuados para casos excepcionales y esporádicos no como alimentación
diaria y continuada.
Durante esta época de la vida las necesidades nutricionales son variables dependiendo del
desarrollo del niño (peso y talla) y el grado de actividad (unos niños son tranquilos, otros
son activos y unos pocos son hiperactivos)
A partir de los 2 años el niño hace 4 comidas al día: desayuno, comida, merienda y cena y
algunos casos puede tomar un suplemento lácteo en forma de leche con galletas antes de
acostarse.
Adquiere mucha importancia la manera de repartir los aportes calóricos de estas 4 comidas
básicas pues estos hábitos alimentarios adquiridos en los primeros años serán la guía para la
época adulta.
El niño de esta edad está preparado para digerir y absorber cualquier tipo de carne, sin
embargo deben darse con preferencia las carnes y pescado magros. Se puede sustituir la
carne por hígado uno o dos días a la semana. El huevo se administrará entero y se
recomiendan tres a la semana.
La preparación será a la plancha con poco aceite, o asadas, cortadas en finas lonchas o
trocitos. El pescado se debe servir desmenuzado y libre de espinas
Cereales
Los fritos, la pastelería en exceso, los platos con salsas complicadas, los frutos secos,
Las necesidades energéticas se sitúan en torno a las 90kca l/kg/día aproximadamente 1800
kcal/día
La distribución porcentual de la energía entre los distintos principios inmediatos debe ser la
siguiente:
• Proteínas: 10-15%
• Hidratos de carbono: 50-60 %
• Grasas: 25-35%
• Desayuno: 25%
• Comida: 30 %
• Merienda; 15%
• Cena: 30 %