Este documento resume las principales líneas teológicas en las cartas de Pablo. Explica que Pablo identifica el evangelio con Cristo, y que el contenido central de su predicación es Jesucristo crucificado. También describe que Pablo enseña que la justificación viene por la fe en Cristo y no por obras de la ley, y que la cruz es el corazón del evangelio paulino.
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Este documento resume las principales líneas teológicas en las cartas de Pablo. Explica que Pablo identifica el evangelio con Cristo, y que el contenido central de su predicación es Jesucristo crucificado. También describe que Pablo enseña que la justificación viene por la fe en Cristo y no por obras de la ley, y que la cruz es el corazón del evangelio paulino.
Este documento resume las principales líneas teológicas en las cartas de Pablo. Explica que Pablo identifica el evangelio con Cristo, y que el contenido central de su predicación es Jesucristo crucificado. También describe que Pablo enseña que la justificación viene por la fe en Cristo y no por obras de la ley, y que la cruz es el corazón del evangelio paulino.
Este documento resume las principales líneas teológicas en las cartas de Pablo. Explica que Pablo identifica el evangelio con Cristo, y que el contenido central de su predicación es Jesucristo crucificado. También describe que Pablo enseña que la justificación viene por la fe en Cristo y no por obras de la ley, y que la cruz es el corazón del evangelio paulino.
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LA TEOLOGA DE PABLO
Como ya lo dijimos al inicio, una de las caractersticas fundamentales de la carta es
que son circunstanciales. Por tanto, no podemos esperar que sus cartas lo digan todo, pero s que digan un poco de todo. Veremos aquellas lneas teolgicas que se perfilan en los Escritos del apstol. No basta leer o estudiar una carta para comprender una de ellas, sino que habra que hacer un esfuerzo, por revisarlas todas, especialmente aquellas llamadas proto-paulinas. No hay que buscar en las cartas paulinas una teologa sistemtica, por dos razones: primero, porque el momento histrico en que se encontraba la reflexin cristiana no la haca posible 1 ; y segundo, porque el gnero literario carta no era el ms adecuado para ello 2 . La teologa de san Pablo es una teologa en proceso de elaboracin, pues responde concretamente a preguntas concretas. 1. EVANGELIO Y CRISTOLOGA a) Evangelio y Cristo para Pablo son la misma cosa. La Buena noticia, que pablo proclam desde el inicio hasta el fin de su ministerio, es el evangelio de Dios; Porque no me envi Cristo a bautizar, sino a predicar el Evangelio (1 Cor 17). Esto aparece con constancia en sus cartas. Ese evangelio es evidentemente el evangelio de Dios (1 Tes 2,2.8.9; 2 Cor 11,7; Rm 15,16). Pues en l se manifiestan los caminos insondables de Dios (Rm 11,33).
Pero cuando Pablo habla del evangelio, parece que para el apstol hay identificacin entre evangelio, Dios y Jess (Rm 1,1-3); y en muchas ocasiones afirma evangelio de Cristo (1 Tes 3,2; 1 Cor 9,12; 2 Cor 2,12). Y aunque a veces no aparezcan juntos ambos trminos, si es claro que proclamar el evangelio es igual a anunciar a Jesucristo: Y si todava nuestro Evangelio est velado, lo est para los que se pierden, 4 para los incrdulos, cuyo entendimiento ceg el dios de este mundo para impedir que vean el resplandor del glorioso Evangelio de Cristo, que es imagen
1 En este momento histrico la reflexin teolgica comenzaba a elaborarse. 2 La carta es por naturaleza circunstancial, por tanto sera injusto pedir que sean tratados de teologa. de Dios. 5 No nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jess como Seor, y a nosotros como siervos vuestros por Jess (2 Cor 4,3-5).
Esta identificacin entre Cristo y evangelio constituy pues, un rasgo constante y prioritario de su predicacin. No es novedad, pero es bueno recordar que desde hace dos mil aos el evangelio no es otra cosa, sino anuncio de Jesucristo crucificado: Pues yo, hermanos, cuando fui a vosotros, no fui con el prestigio de la palabra o de la sabidura a anunciaros el misterio de Dios, 2 pues no quise saber entre vosotros sino a Jesucristo, y ste crucificado (1 Cor 2,1-2). No creamos que pablo procedi de tal modo slo con los corintios por los problemas que tenan, sino hay otros textos que prueban que este anuncio fue el mismo por dondequiera que pas (Gal 3,1).
Pablo aade otra palabra al trmino evangelio: misterio para describir el contenido de su anuncio. Se extiende sobre ello en Ef 2-3, donde subraya particularmente la dimensin cristolgica y eclesiolgica de ste misterio. Particularmente en el captulo 6 declara: Siempre en oracin y splica, orando en toda ocasin en el Espritu, velando juntos con perseverancia e intercediendo por todos los santos, 19 y tambin por m, para que me sea dada la palabra al abrir mi boca para dar a conocer con valenta el misterio del Evangelio, 20 del cual soy embajador entre cadenas, y pueda hablar de l valientemente como conviene (Ef 6,18-19). Cf. Col 1,27.
El carcter cristolgico del Evangelio Paulino es una constante. Por qu el apstol no contempla la Buena Nueva sin Jesucristo? Por qu la proclamacin es eminentemente Cristolgica y no Teolgica? Fil 2,9-11 nos da la respuesta; el Apstol estaba no slo seducido sino convencido del Seoro de Cristo, el cual no poda dejar pasar por alto. Por lo cual Dios le exalt y le otorg el Nombre, que est sobre todo nombre: 10 Para que al nombre de Jess toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos, 11 y toda lengua confiese que Cristo Jess es Seor para gloria de Dios Padre (Flp 2,10-11). El anuncio de Cristo y la respuesta que ese anuncio exige, demuestran que la fe en l es esencial para la salvacin, para todos sin excepcin. Adherirse a al Evangelio equivale prcticamente a creer en Cristo Jess (Rm 9,30- 10,21). Israel ha fallado por haber rechazando el Evangelio, que es lo mismo que decir haber rechazado a Cristo. Este es el drama de su pueblo, no haber aceptado el evangelio, cuyo ncleo es presentar el camino incomprendido de Jess: crucificado, muerto y resucitado para nuestra salvacin.
La muerte de Jess en la cruz, el corazn del Evangelio. Reconocer que Cristo constituye el tema primordial del Evangelio de Pablo no basta. Es preciso darnos cuenta de inmediato que el apstol no ha querido conservar ms detalles de la vida de Jess que la muerte en cruz, de la que se puede decir con certeza que constituy el corazn de su evangelio. Obviamente reconocemos que esto no se debe a un puro gusto personal del apstol por este tipo de muerte, antes bien, sabemos que la consideraba indigna de los caminos de Dios, impensable, escndalo para l y sus paisanos, y locura para los dems (1 Cor 1,18-25). Pablo atribuye esto a un misterio divino, que algo insoportable llegara a ser un lugar de conversin y salvacin. No conocemos el camino que tom a los primeros cristianos superar el escndalo de la cruz y si Pablo lo super tampoco lo sabemos, de lo que s estamos seguros es que Pablo rechaza todo discurso elegante (sobre todo si queran ganar adeptos, convencer a otros de hacerse discpulos) y proclama abiertamente que el cristianismo no es ir detrs de un hombre extraordinario que dio su vida por una causa, es decir, un mrtir admirable, sino el mismo Dios dando su vida del modo ms humillante para la salvacin de todos los hombres y mujeres del mundo. De esa cuenta pablo mano de un discurso de humildad, de simplicidad, y de pobreza. La seduccin de las palabras se va de viaje, y el apstol pone toda la carga en el acontecimiento ms dramtico de la vida de Jess. Segn lo anterior, el cristianismo, brota de la cruz de Cristo, y slo desde ah se abren horizontes de resurreccin, que en Pablo es tener nueva vida.
Este tipo de discurso no es para Pablo, slo una opcin que supla a la retrica, sino ms bien, es ella (la humildad del Seor) la que determina el mensaje mismo, pues en ella queda indicada la opcin de Dios por la pobreza. En la cruz se revela la locura de la sabidura de Dios. En la teologa de Pablo, no se huye de la cruz, se la abraza. Esto en el tiempo de pablo, era ponerse de lado de los perdedores, pues al momento haban propuestas religiosas ms atractivas. Sin embargo, el cristianismo no es una doctrina ms, no es una propuesta religiosa ms, sino un estilo de vida, que lleva a tener todo y absolutamente todo lo dems: como basura. Es la cruz la que cambia el modo de ver el mundo y de concebir los valores: En cuanto a m, Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Seor Jesucristo, por la cual el mundo es para m un crucificado y yo un crucificado para el mundo! (Gal 6,14). La muerte de Jess en cruz no puede ser anunciada, ni proclamada ms que como subversin suprema y definitiva de los valores de ste mundo. Solo una comprensin as de la cruz, coloca al cristiano en una actitud permanente de conversin. Me atrevo a pensar, que nuestra conversin no ha dado los frutos que deseamos, porque no hemos comprendido la muerte de Cristo en la cruz, en su justa dimensin.
Si Pablo no dice prcticamente nada de la vida de Jess, sino que naci de una mujer, judo bajo la Ley (Gal 4,4), del linaje de David (Rom 1,3) se debe con toda certeza a que Pablo construye toda su reflexin teolgica a partir del evento de la cruz. No es que pablo como no conociera a Jess, no supiera qu ms contar acerca de Jess, que no le haya parecido atractivo alguna otra cosa del Seor, simplemente opta por resumir la lgica de la vida en una sola expresin: hacindose semejante a los hombres (Flp 2,7). Porque se someti a todo y aprendi a obedecer. A esta dinmica de Dios llama el apstol Kenosis abajamiento anonadamiento. Hasta el extremo de la humillacin declarando en sintona con el mensaje de Jess, que justamente en ello reside la clave de la exaltacin (Flp 2,6-11). "El que quiera seguirme, que renuncie a s mismo, tome su cruz y me siga (Mc 8,34). 2. LA JUSTIFICACIN POR LA FE. Como fariseo, Pablo crea estar justificado o salvado, por su prctica detallada de la Ley. Pensaba que eran sus obras las que le hacan justo delante de Dios. Ahora descubre que slo Cristo, con su muerte, hace justo al hombre, de una manera gratuita. No se trata, pues, de merecer la salvacin sino de recibirla, adhirindose fielmente a Cristo Jess.
Este es un tema de los ms controversiales de la teologa paulina. Desde Lutero en adelante se ha discutido y se discute el tema de la justificacin. La tesis luterana clsica sostiene la centralidad de la justificacin por la fe: el cristiano es alguien a quien Dios considera justo por el hecho de que cree, es decir, se abandona por completo a su gracia.
Por su parte la Iglesia catlica interpreta la justificacin s como un don que salva, pero que de igual modo compromete al creyente de un modo activo, no para procurarse la justificacin, pues estamos de acuerdo de que Cristo en la cruz ha pagado por nuestros pecados; sin embargo el cristiano debe complementar la justicia que Cristo le imparti, con obras buenas. La carta de Santiago le es fundamental para ello. Esta doctrina aparece fundamentalmente en Romanos 1-5. 3. LA IGLESIA, CUERPO Y ESPOSA DE CRISTO. Pablo percibe la unin entre Jess y sus discpulos, entre la cabeza y el cuerpo (carta a los corintios) y se hace miembro vivo de este cuerpo. Es verdad que esta comprensin de la Iglesia genera unas implicaciones ticas concretas y para Pablo son importantes, pero sobre todo aqu importa la profundidad de la relacin entre Cristo y la Iglesia. 4. LA PNEUMATOLOGA PAULINA (EL ESPRITU SANTO). En las cartas de Pablo, se percibe una reflexin acerca del Espritu Santo, que es fundamental para la Pneumatologa cristiana: estamos en la plenitud de los tiempos, el tiempo del Espritu Santo. Para Pablo el Espritu est a la base del cristianismo en tres dimensiones que le son esenciales: Es ALGUIEN como fuente DE SANTIDAD, DE FILIACION DIVINA Y FUENTE DE COMUNION. Estamos en el tiempo del Espritu! Fuente de santidad San Pablo, en sus cartas, no se limita a ilustrar slo la dimensin dinmica y operativa del Espritu, como en Hechos, sino que analiza tambin su presencia en la vida del cristiano, cuya identidad queda marcada por l; es decir, Pablo reflexiona sobre el Espritu mostrando su influjo no solamente sobre el actuar del cristiano sino sobre su mismo ser. De hecho, dice que el Espritu de Dios habita en nosotros (Cf. Romanos 8, 9; 1 Corintios 3, 16) y que Dios ha enviado a nuestros corazones el Espritu de su Hijo (Glatas 4, 6). Fuente de filiacin divina: Pero para Pablo, el Espritu no slo nos penetra hasta en nuestras profundidades personales, nos hace ser Hijos e hijas de Dios, nos hace se ser capaces no slo de reconocer a Dios como nuestro creador, sino sobre todo de reconocerlo y de abrirnos a l como nuestro verdadero y nico Padre. En este sentido, estas palabras tienen un significado relevante: La ley del espritu que da la vida en Cristo Jess te liber de la ley del pecado y de la muerte Pues no recibisteis un espritu de esclavos para recaer en el temor; antes bien, recibisteis un espritu de hijos adoptivos que nos hace exclamar: Abb, Padre! (Rm 8, 2.15), dado que somos hijos, podemos llamar Padre a Dios. Fuente de comunin: Para Pablo toda la vida de la Iglesia tiene su fuente en ste mximo don dado a los creen por parte del resucitado. De este aspecto se desprende que el mximo criterio para interpretar los dones del Espritu es la comunin. El Espritu lo mismo que acta en la Virgen Mara para formar el cuerpo de Cristo, es el principal responsable para formar el cuerpo mstico de Cristo: La iglesia. 5. ESCATOLOGA Y VENIDA DEL SEOR La enseanza de san Pablo est angustiada por la tensin escatolgica, el apstol comprendi que la venida de Cristo tena un significado apremiante para el ahora, pero tambin el futuro. De esa cuenta el cumplimiento de las promesas realizadas en Cristo ocupa un lugar central en su predicacin. A partir esa comprensin (obviamente no inventada por el apstol) surge brillante el tema de la esperanza paulina la cual viene constantemente presentada en ntima conexin con la paciencia en la tribulacin: el bautizado es una nueva creatura para un mundo nuevo, vive en la tierra pero su destino final est en el cielo (cf. Flp 3,20).
Dentro de la escatologa se injerta el tema de la segunda venida, en la que tendr lugar la manifestacin de Cristo glorificado, algunos textos parecen sugerir una inminencia cronolgica, (la venida ser pronto, y el mismo Pablo parece esperarla en vida) aunque en otros, afirma expresamente desconocer ese tiempo y momento preciso.
Por eso, ms importante que tratar de comprender si la preocupacin del apstol sobre la parusa era de orden cronolgico, es decir, cundo? Hay que subrayar, su importancia teolgica moral, igual a decir, vivir y morir para Cristo. El que cree en Cristo debe vivir ahora en comunin con l y morir luego en l. A partir de la escatologa se construye en las cartas de pablo toda la teologa de la Esperanza. CONCLUSI N. Obviamente he tratado slo de adelantar una palabra acerca de estos temas teolgicos tan importantes en los escritos de Pablo. Cuando estudiemos las cartas, veremos cmo surgen y se desarrollan los grandes temas de la teologa paulina.