Adeline Rucquoi Peregrinos Medievales
Adeline Rucquoi Peregrinos Medievales
Adeline Rucquoi Peregrinos Medievales
Adeline Rucquol
N
ADA ms conmovedor que ver a esos pobres cruzados he-
rrar sus bueyes como si fueran cabaUos, engancharlos a
un carruaje de dos ruedas encima del cual colocaban su
pobre equipaje y sus hijos pequeos. Ellos, con las manos tendidas
hacia todos los castillos, hacia todas las ciudades que divisaban en el
camino, preguntaban si no era eso la Jerusaln hacia la cual se di-
rigan (1 J.
{/ I G.';berr tK Nose"'. /l/. 2.
I"iiJ STA silueta del peregrino que lo ha
I..!!J abandonado todo. su pas. a veces su
familia o sus bienes, para encaminarse hacia
alguno de los grandes sant uarios venerados
en la Edad Media, es u na figura tan lpica
como la del caballero con su armadura o la
del pobre campesino acosado por la miseria.
Aunque la peregrinacin y e l peregrino ha-
yan sobrevivido a l Medievo. fue sta. sin em-
bargo, la poca de su mayor auge, y el cami-
nante que, descalzo, llevando a hombros su
bordn y su hatillo. se dirige por montes,
nos, valles y mares a Roma, Jerusaln o San-
tiago de Compostela, es, para nosotros. el
contemporneo de Carlomagno. de Alfonso
e l Sabio O de Ricardo Corazn de Len.
De hecho, los peregrinos tuvieron en la Edad
Media tal importancia que muy r-
pida mente se beneficiaron de un status es-
pecial. de una cierta proteccin por parte de
las y, al principio, de una
gran popularidad. Estos privilegios hicieron
que se fueran multiplicando los peregrinos a
medida que pasaban los siglos. y que este
crec imiento cuantitativo no se acompaara
siempre de una mejora cualitativa. Al final
del Medievo, el peregrino aparece en Jos do-
cumentoscomo asimilado a los .. vagos y ma-
leantes. Su suerte ha sido paralela a la de
los pobres: en su principio ... ejemplos o .. hi-
jos predilectos de Dios, se convierten fi-
nalmente en .. criminales, .. vagabundos y
..
Son extremadamente diversos los peregri-
nos que desde los primeros siglos del cris-
tianiSmo recorren las rutas y loscaminos del
mundo. No existe un .. tipo de peregrino. No
todos van al mismo santuario. No todos obe-
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a las mismas motivaciones o per-
siguen el mismo objetivo. No todos son po-
bres o ris:os, proceden del campo o de las
ciudades. etc. En cambio, se puede decir que
los peregrinos constituyen un mundo, con la
diversi ficacin y la complejidad que encubre
este trmino y en pleno acuerdo con la con-
cepcin medieval del universo .. mltiple y
desordenado de donde sale el -Orden di-
vino.
La diversidad se manifiesta en primer lugar
a nivel de las motivaciones que empujan a un
individuo a hacerse peregrino.
El primer motivo. a la vez el ms conocido y
casi .. el mot ivo por antonomasia, ser la fe,
la devocin, el deseo de vivir mejor la re-
ligin que anima a l cristiano a abandonarlo
todo para marcharse. Segn la etimologa
misma de la palabra, .. peregrinus significa
.. extranjero , y .. peregrinatio: .viaje o es-
tancia en el ext ranjero, .viaje largo. El
peregrino es, pues , el viajante, e l que cami n a
y que camina lejos. Esa primitiva con-
cepcin de la palabra. peregrino, segn e l
ideal de la Iglesia antigua y luego medieval,
es aplicable a cualquier cristiano: si Cristo
dijo .Mi reino no es de este mundo, el cris-
tiano en la tierra es un eterno extranjero, un
viajero que slo transi t a, esperando llegar
finalmente a la tierra prometida, a llJamado
.paraso. Y toda la vida humana no es ms
que un largo viaje, un exilio. Pero los cris-
tianos no se quedaron ah, s ino que intent a-
ron hacer ms visible esa. peregrinat io ...
En los l ti mos siglos de lo que est con-
venido llamar .. Edad Ant igua, o sea entre
los siglos lIT y V. tuvo lugar un import a nte
movimiento ere mtico hacia los desiertos,
El culto e Sen Mig4l ... e ct. .,toll le",.,.enel'l'le"le en Occidente; el 'Inalloter la Ed.d Madia. en lo Iglo. XIV y XV, el MonlS.lnl Mlchel
en Norl'l'l.ndl ..... un cenlto de p .... egrlnacln p.r. n io. que Kudi.n el .anluerlo en grupo. "". o meno. numero.., .
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In u nl .. ull" di 1420.
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po,ll'a, .. nlUlno l' qUI leudJo In 1211.
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los del Oriente Medio en particular. La ha-
giografa nos ha conservado ese recuerdo a
travs de las figuras de San Jernimo con su
len, de San Antonio y sus tentaciones, o de
Santa Mara Egipciaca. Movimiento ese que
conviene comparar asi mismo con la retirada
de Cristo en el desierto antes de iniciar su
vida pblica. El ideal de] ermitao persistir
a lo largo de la poca medieval a pesar de que
la religin se hiciera cada vez ms social. y
menos individual.
En Occidente, a partir del siglo VI, se aadi
a dicho movimiento un deseo misionero: el
cristiano dejaba su pueblo, su casa, su fami
lia, ya no nicamente para retirarse y medi-
tar, sino para ir a convertir a los no-
cristianos y ganar de esa forma el cielo, tanto
para s mismo como para los otros. Esa
orientacin nueva se aproxima ms al ideal
de mrtir., ya que numerosos misioneros
coman el riesgo de encontrar la muerte de
mano de los infieles . Sin embargo, si el
ideal eremtico, aunque relativamente ex-
tendido, fue siempre un ideal individualista,
las misiones se convirtieron rpidamente en
empresas colectivas: basta recordar bre-
vemente las campaas de Carlomagno con-
tra los Germanos, Bohemios o Eslavos, la
Reconquista de los reinos hispnicos, las
Cruzadas, y, ms tarde. fuera ya de la poca
medieval, la cristianizacin. de Amrica.
Asi a o Africa.
Sobrevivi. no obstante, el ideal individua-
lista del peregrino que. movido por la sola fe
y deseando adquirir mritos con vista a su
salvacin. se lanzaba a los caminos y em-
prenda su ruta hacia el santuario de su
eleccin. A partir de los siglos XII-XIII se
difundi en la mentalidad cristiana el ideal
de pobreza -ideal que no d e ~ confundirse
con la realidad de la pobreza ... -. simbo-
lizado por la frase .Nudus nudum Christum
sequere, desnudo seguir a Cristo desnudo.
En este caso. lo mejor era natura lmente de-
jarlo todo para ir a la Tierra Santa y seguir
las huellas de Cristo, pisando la tierra que l
haba pisado. El ir a Roma poda ser un sus-
titutivo valioso, ya que en esta ciudad se en-
contraban las tumbas de San Pedro y San
Pablo y viva el representante de Cristo en la
tierra.
Ese tipo de peregrinacin. a partir ya del
siglo XI, y ms precisamente del XII. dej de
ser totalmente desinteresado con la difu
sin y el auge de las indulgencias. Las prime-
ras indulgencias aparecieron con las cru-
zadas como medio para atraer a los cris-
tianos: a cambio de su participacin en la
J.'u n 11.1 p.' 0. per-..,Ino l. met. m "tuN.d . Tr u conqul.ta pOI' lo. a;'rclto. c,l.tI.no. y aun de.pu d. loU p.' di d
tOI p.,-..,inOI , Uz.ban .... ,daderOI dou,... da l. TI.rra Santa. con hOl'.rio preci.o., ... Iallal guiada .
empresa blica se les prometa una rebaja
de condena a cuenta del futuro pos t
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