RESUMEN DEL LIBRO

El respeto slido por uno mismo se funda en dos convicciones principales: soy digno de que me amen, importo y
tengo valor porque existo, y soy valioso, puedo manejarme a m mismo y manejar lo que me rodea, con eficiencia, s
que tengo algo que ofrecer a los dems.
La clave del xito de los padres es ayudar a los nios a sentirse cmodos siendo ellos, que no es engreimiento.
Para conseguir ese xito, debemos tener en cuenta que os adultos somos espejos para los nios, donde aprendern a
crear su propio yo. Cada nio se valora tal como ha sido valorado. Cuando el nio forja su autoestima, hay que tener
cuidado con los juicios que acompaan nuestras palabras, el lenguaje corporal habla siempre ms alto que las
palabras. Toda identidad positiva se articula en experiencias vitales positivas.
Los nios buscan una imagen de si mismos de capacidad y fuerza, y ajustan la conducta a su autoimagen. La forma
en que acta un nio nos muestra si se encuentra en una posicin fuerte o dbil. Si se considera incapaz en un aspecto
espera fracasar y acta sin seguridad. Debemos ensearle a actuar pensando en conseguir su meta, no en fracaso. As
actuar con seguridad y mejorar sus resultados.
Cuando los nios no logran desarrollar el respeto por s mismos, emprenden caminos distintos sobre la base de tres
posibilidades, a saber: ereccin de defensas (elaboracin de diversas cubiertas para los sentimientos de ineptitud),
sumisin (aceptacin de la ineptitud como hecho y comienzo de una vida de autoanulacin) y retraccin (retiro a un
mundo de fantasas para contrarrestar los rechazos que sufren). Las defensas se colocan en torno a las debilidades, no
de la fuerza y la aptitud. Estas mscaras se emplean para ocultar un yo sin valor. Aplastar la autoestima de los nios
les impide el crecimiento positivo; de hecho, fomenta el desarrollo distorsionado y defensivo. Estas defensas alejan a
los dems, y le dejan insatisfecha su necesidad de recibir reflejos positivos.
Si el nio no tiene una buena imagen de si mismo, ignora o rechaza los reflejos que no concuerden con esta imagen,
porque debe ser coherente consigo mismo. La baja autoestima se encuentra ligada con el planteo a uno mismo de
exigencias imposibles de cumplir. La baja autoestima rgida es el resultado de la accin de muchos factores negativos
durante mucho tiempo.
La inexperiencia, las normas, los conflictos no resueltos, nuestras necesidades insatisfechas y nuestros valores
culturales, los transformamos en expectativas. Las expectativas que tenemos sobre los nios se transforman en varas
con las que los medimos. Ellos rara vez las ponen en tela de juicio, pero dudan de su propia aptitud personal. La
confianza del nio en s mismo debe referirse a lo que l es realmente, no a las imgenes de los dems. Si el nio
siente que no cumple con lo que esperamos de l, pierde el respeto por s mismo. Deberamos basar nuestras
expectativas sobre el desarrollo del nio, la observacin alerta y la sensibilidad respecto a las presiones sufridas por
los nios. Hay que revisarlas a menudo.
Los verdaderos encuentros son atencin concentrada que el nio necesita para sentirse amado. El exceso de
atenciones materiales, la sobreproteccin, las expectativas fuera de lugar no le transmiten amor al nio. Si nos
mostramos preocupados y distantes ellos lo ven como falta de amor. Solo puede sentirse digno de que lo quieran si le
dedicamos el tiempo necesario.
La base de la seguridad es la confianza. Cualquier relacin positiva necesita honestidad. Si el nio no cuenta con
nuestra ayuda, no podr acudir a nosotros para satisfacer sus necesidades. Deben coincidir nuestras palabras y nuestro
lenguaje corporal. No debemos mostrarnos como sper personas frente al nio, somos humanos y debemos
mostrrselo.
La culpa, o juicio negativo, constituye el ncleo de los desrdenes emocionales y de la baja autoestima. La seguridad
tambin requiere que desaparezcan los juicios. Hay que reaccionar a la conducta del nio, pero omitiendo juicios.
Debe poder verse como persona independiente de sus actos.
Los nios sobreviven en la aceptacin, pero no crecen en ella. Se necesita aprecio, demostrado con respeto. No
debemos tratarlos con menos respeto por ser pequeos, debemos tenerlos en la misma consideracin que si se tratase
de un adulto. Debemos apreciar lo exclusivo del nio.
En general y sin darnos cuenta nos negamos a dejar que los nios sean dueos de sus sentimientos. Les negamos que
estn sintiendo algo o les comunicamos que esa emocin es incorrecta. En consecuencia, la seguridad psicolgica se
resiente al negar la propiedad de los sentimientos.
El respeto por los sentimientos del nio forma parte del respeto por su integridad. No debemos pedirle que renuncie a
la propiedad de sus experiencias personales internas, por eso, solo le quedar reprimirlas y fingir, porque los
sentimientos no se inclinan ante las rdenes.
Sin embargo, la conducta necesita que se la limite, debemos ofrecer libertad para sentir, no para actuar. De todas
maneras es difcil permitir a los nios alentar sentimientos que a nosotros nos ensearon como inaceptables. El nio
entiende que ser aceptado depende de que sienta igual a sus padres, y su originalidad y seguridad se ven amenazadas.

El respeto por la separacin prueba nuestro inters. Hemos de dar lugar a las diferencias sin retirar nuestra
aprobacin. La manera de ver y sentir de cada uno no es la nica, debemos respetar y aceptar que hay otros puntos de
vista sobre el mismo tema. Si uno necesita que los dems convaliden sus puntos de vista es que algo no va bien en su
autoestima. Necesita que otro crea lo mismo para convertirlo en aceptable.
Cuando un nio se enfada y le mandamos a su habitacin, nos negamos a tratar con l en ese estado, le hacemos ver
que invita al rechazo con su exhibicin de sentimientos malhumorados. Las emociones negativas intensas crean
tensiones intensas, pero nosotros negamos nuestra ayuda constructiva cuando el nio ms lo necesita. Les alejamos
de nosotros, y si no somos capaces de aceptar los sentimientos del nio, l aprender a rechazarlos. Cuando sentimos
emociones negativas, necesitamos que se nos oiga con comprensin, que el otro se ponga en nuestro lugar. No
queremos que nos digan que nuestros temores no tienen razn de ser. La comprensin es lo que nos da seguridad y
consuelo. Para ello, es necesario que el otro se muestre de forma emptica, que nos comprenda desde nuestro punto
de vista. No se trata de coincidir o no con nosotros, sino de comprender sin juicios. Empata supone no tratar de
modificar los sentimientos del nio, no intentar ver por qu siente eso. Se limita a captar todos los matices de sus
sentimientos. Es necesario para que el nio alcance el verdadero autorrespeto.
A veces tememos que las regresiones temporarias que hacen los nios detengan su crecimiento. Tratamos de forzarlos
a que no retrocedan y si se estancan no nos fijamos en el entorno sino en ellos mismos. Cada nio tiene su propio
ritmo de crecimiento y debe ser respetado. El crecimiento no es un camino recto y sin pausa, a veces volvemos a tras
para reafirmarnos, vamos adelante y atrs en el camino, es un movimiento de expansin y contraccin. Crecer es
renunciar a lo viejo. Entre seguridad y crecimiento, nos pesa ms la seguridad. La posibilidad de retroceder nos hace
ms fuertes para avanzar.
Muchas veces actuamos bajo una paradoja preocupante: tratamos los sentimientos de los nios justo como no
queremos que nos traten a nosotros. Frenamos los sentimientos de los nios. Si no nos mostramos comprensivos, si
no damos lo que anhelamos para nosotros, si les damos instrucciones de lo que deben y no deben sentir, no podrn
abrirse a nosotros en prximas ocasiones. Nos ensearon a no aceptar los sentimientos negativos, y al no expresarlos
adquieren un poder destructivo, que desaparece en cuanto somos conscientes de ellos y podemos expresarlos. Si no,
les obligamos a disminuir su autoconcepto y reprimir sus verdaderas emociones. As, esos sentimientos conspiraran
contra la salud fsica y mental. Si queremos que los nios nos muestren lo que sienten sin miedo, hemos de ser
oyentes activos y ensearles a desahogar los sentimientos negativos, para evitar los actos negativos que causara el
reprimirlos. Si no les permitimos expresarlos de forma correcta, minamos su autoestima.
La ira nos indica un sentimiento anterior. Si comprendemos que la ira es el resultado de otro sentimiento (miedo,
frustracin, celos) la podremos comprender mejor y no responder con ms ira. Si aceptamos la ira con atencin
activa, los nios nos conducen al sentimiento subyacente. Debemos preocuparnos si el nio muestra ira de forma
continuada y habitual: debe haber un problema detrs. Asegurmonos de que le brindamos encuentros seguros. Para
poder trabajar con la ira de los nios debemos saber trabajar con la nuestra propia. As descubriremos que las
pataletas no son ms que prdidas de control y de frustracin extrema, exteriorizada de forma incorrecta. De nuevo,
limitemos los actos, no los sentimientos. Hay que fijarse en los signos indirectos de la ira, que van desde el sarcasmo
a la depresin, entre otros. Si conseguimos aceptar la ira del nio, ste no usar salidas indirectas o represin.
Los celos son algo inevitable, todos hemos sentido celos alguna vez, y los seguimos sintiendo de vez en cuando.
Todo nio quiere ser el favorito en todo, frente a otra persona. Lo que esconden es un sentimiento de desventaja. Si
sufre presiones se sentir menos apto en general y se facilitan los celos. La naturaleza de la vida familiar presenta
desventajas en cualquier mbito. Pero los celos les ensean a que no pueden recibir atencin exclusiva ni gozar de
todas las ventajas. Todo nio se lleva mejor con los dems si tiene una autoestima adecuada, quien se autorrespeta es
celoso menos a menudo. Los celos se crean con favoritismos, comparaciones si usamos al nio para cubrir nuestras
necesidades y cumplir nuestras expectativas, le haremos inseguro y celoso. Si observamos un nio dependiente, con
regresiones, con demandas materiales estamos ante un nio con celos encubiertos. Debemos ayudarle a que los
exprese, para sentirse comprendido y no defraudado.
La curiosidad es innata en el nio. Aprende si es seguro aprender, pero algunos aprenden desde muy pronto a no
aprender. Cmo? Les enseamos que explorar es peligroso. Debemos apoyar sus exploraciones, debe sentirse seguro
para preguntar y descubrir. Debemos brindarle experiencias de primera mano, lenguaje amplio y correcto, problemas
y soluciones. Debemos evitarles impedimentos fsicos, insatisfaccin emocional, sentimientos reprimidos, presiones
de metas no realistas, enseanza inadecuada Un encuentro seguro le motiva para aprender, para mantener fuerte su
autoestima y su creatividad.
OPININ PERSONAL
En general todo el libro habla sobre la autoestima infantil. La seguridad en uno mismo no es una cualidad innata que
poseen algunas personas. Es una consecuencia del nivel de autoestima conseguido. De qu factores depende la
autoestima en un nio? Cmo podemos los adultos incrementar el nivel de autoestima de nuestros los nios?
La autora nos ensea a lo largo de todo el libro a formar y mantener una buena autoestima en los nios.

La seguridad en uno mismo es fruto del convencimiento de que se tiene capacidad suficiente para tratar algunas
situaciones con xito y que se puede ofrecer algo valioso a los dems. Esta seguridad es consecuencia de la
autoestima. Es lo que cada persona siente hacia s misma, la medida en que le gusta su propia persona. Tener
autoestima significa saber que eres valioso y digno de ser amado. Valioso porque eres capaz de resolver algunas
situaciones con xito y por lo tanto puedes estar a la altura de los dems, y digno de ser amado porque eres una
persona y por lo tanto tienes derecho a ser amada de manera incondicional, dicho de otro modo, sabes que tienes
personas a tu alrededor a las que realmente les importas. Se trata de que el nio se sienta valioso y querido, no del
hecho objetivo de que tenga cualidades o habilidades sobresalientes o de que haya personas que le quieran. Quizs el
aspecto ms importante de la conceptualizacin de la autoestima est en la aceptacin y la calidad del trato que se
recibe. Es decir, el valor y la aceptacin de los otros, que conforman el entorno del nio. Segn te quieren y la calidad
del trato que te dan los otros, as te "pones precio". La experiencia de xito i fracaso le permite al nio crearse una
autoimagen ms positiva o ms negativa. Las experiencias afectivas le permiten crearse una autoimagen ms o menos
objetiva que depende fundamentalmente de dnde se le ponga el listn de exigencias, de la aceptacin en su entorno i
de si se siente capacitado i apoyado para llegar. (Bases de la salud mental).
Cada nio se valora tal como ha sido valorado. Es posible que un nio con suficientes habilidades y con unos
padres que le quieren no perciba estas realidades y se sienta inseguro y poco digno de ser amado. Se puede decir que
cada reaccin de los dems aade o quita algo de lo que el nio siente sobre su vala. Y puestos a valorar, es
necesario saber que las reacciones de las personas que rodean al nio son ms importantes que la posesin o ausencia
de cualquier habilidad o defecto concreto. La autoestima se construye a partir de las propias comparaciones con los
dems y de acuerdo con las reacciones de los dems hacia l. (Los espejos)
La imagen de s mismo, que empieza a construirse durante la infancia, y el grado de complacencia que le produce
esta imagen son dos realidades que se irn modificando a lo largo de toda la vida en funcin de las nuevas
experiencias, de la propia conciencia y de las nuevas reacciones que tengan los dems.
Las reacciones de las personas que son ms importantes para el nio desde un punto de vista afectivo (padres,
familiares, profesores o amigos), son las que producen ms impacto en su autoestima. Estas personas actan como
espejos en los cuales el nio ve reflejada la imagen de s mismo y, a travs de ellas, se va conociendo y va
percibiendo el grado de aceptacin y aprecio que producen sus actuaciones y su propia persona. Es como si la imagen
que ve reflejada apareciera distorsionada por los sentimientos y expectativas de la persona-espejo. Si los sentimientos
son positivos, el nio recibir un reflejo que le gustar, con el que se sentir bien y que ayudar a aumentar su
autoestima. Si los sentimientos son negativos, el reflejo que ver ser feo, sin valor y no merecedor de cario. Ese
reflejo le causar dolor, rabia y provocar el rechazo a su propia persona y el descenso de su autoestima. (Los
espejos)
Por eso, son las personas afectivamente ms cercanas al nio, las que ms pueden influir y potenciar el crecimiento
de la autoestima. Es muy importante tener en cuenta que la percepcin que tienen los nios de las reacciones de los
adultos no se alimenta exclusivamente de las palabras que dicen. Ni mucho menos. Los nios se dan cuenta de todo y
valoran las actitudes que acompaan a las palabras, la atencin sincera, la honestidad de los sentimientos y la verdad
que esconden. La exageracin, por ejemplo, le hace sospechar que le estn engaando, que ms que un espejo es una
pelcula, y ello le hace desconfiar de los sentimientos.
Un nio est construyendo al crecer el concepto de s mismo:

Va formndose una idea de quin es, si gusta o no, si es aceptado o no.

Ir crendose unas expectativas acerca de sus posibilidades.

Se encontrar bien, consigo mismo o por el contrario a disgusto con lo que hace.

Se crear un clima, un tono emocional, una predisposicin a disfrutar con los retos de la vida; o a padecer, a
lamentarse, a ver lo negativo.

Disfrutar, retarse, contemplar la vida desde una perspectiva positiva, de trabajo, con curiosidad, con facilidad
para la empata, con aliciente, desde un punto de vista creativo, intentando superar los problemas...

Por el contrario angustiarse, ser incapaz de ver lo positivo, abrumarse ante cualquier problema, retirarse, o
ponerse una mscara.
Hay muchos padres que dicen que se desviven por sus hijos y, sin embargo, ellos tienen la impresin de no ser
queridos, tal vez porque los padres hacen cosas que son interpretadas errneamente o dejan de hacer aquello
capaz de transmitirles amor. (El verdadero encuentro)
La empata es una destreza bsica de la comunicacin interpersonal, permite un entendimiento slido entre dos
personas, es fundamental para comprender en profundidad el mensaje del otro y as establecer un dialogo. Esta

habilidad de inferir los pensamientos y sentimientos de otros, genera sentimientos de simpata, comprensin y
ternura.
Uno de los elementos clave que forma la inteligencia emocional, es la empata, la cual pertenece al dominio
interpersonal. La empata es el rasgo caracterstico de las relaciones interpersonales exitosas.
Pero, a qu nos referimos cuando hablamos de empata? La empata no es otra cosa que la habilidad para estar
conscientes de, reconocer, comprender y apreciar los sentimientos de los dems". En otras palabras, el ser empticos
es el ser capaces de leer emocionalmente a las personas. Para que el nio se sienta querido y escuchado, ha de
sentir nuestra capacidad emptica.
Es una de las partes del libro que ms me ha gustado por que no me haba dado cuenta de hasta qu punto no nos
ponemos en el lugar de los nios. Y pensndolo, es tan lgico que parece mentira que nos cueste tanto darnos cuenta,
sobre toso teniendo en cuenta que es lo que pedimos para nosotros. Mahatma Gandhi sostena lo siguiente las tres
cuartas partes de las miserias y malos entendidos en el mundo terminaran si las personas se pusieran en los zapatos
de sus adversarios y entendieran su punto de vista; (La seguridad de la empata)
En el captulo Cmo tratar los sentimientos del nio, la autora se muestra muy comprensiva y emptica, sin
embargo hay algo con lo que no estoy del todo de acuerdo. En la pgina 155-156 explica la historia de Gregorio y su
madre. Es realmente positivo dejar que agreda fsicamente a un cojn imaginando que es su madre? Creo que seria
ms positivo ensearle a mostrar sus sentimientos sin necesidad de agresividad. Reconocer lo que sentimos es til y
necesario, pero no tenemos que convertirlo en conductas que hagan sufrir a otros. Est bien sentir cualquier emocin,
pero no realizar cualquier accin: slo somos responsables de lo que hacemos.
Para el nio, aprender a manejar sus emociones es tan importante en su desarrollo individual y social, como aprender
a pensar. Necesita conocer y aceptar sus sentimientos pero no dejarse llevar por ellos. Tiene que saber eliminar la
tensin y la angustia para poder llevarse bien con sus compaeros y ocupar su mente en el conocimiento y la
creacin. Un nio preocupado o triste no tiene la misma energa para aprender que un nio tranquilo y contento.
En general los ejemplos del libro sirven para aclarar muchas de las ideas que nos expone, y para demostrar que esa
actitudes son positivas o negativas, pero pueden llegar a hacerse un poco pesadas y repetitivas. En el caso de la
empata, a mi me han servido para ver de forma clara cmo nos comportamos con los nios y cmo deberamos
comportarnos para no alejarlos de nosotros y poder ayudarles a crecer.