6o Paso
6o Paso
6o Paso
Sexto Paso: ESTUVIMOS ENTERAMENTE DISPUESTOS A DEJAR QUE DIOS NOS LIBERASE DE TODOS ESTOS DEFECTOS DE CARCTER.
VI. Los defectos que todava no queremos dejar.
(18) Desde luego que algunos llegan a la conclusin de que ya estn
preparados para que los libren de sus defectos. Pero an estas personas, si
hacen una relacin de los menos graves de sus defectos, se vern obligadas
a admitir que prefiere quedarse con algunos de ellos. Por consiguiente,
parece claro que pocos de nosotros podemos llegar rpida o fcilmente a
estar preparados para aspirar a una perfeccin moral o espiritual; queremos
transar con solamente el grado indispensable de perfeccin que se necesite
para irla pasando. As es que la diferencia entre "muchachos" y "hombres" es
la diferencia entre luchar por obtener un objetivo limitado de nuestro ego y
luchar por obtener el objetivo perfecto que es Dios. (19) Muchos
preguntaremos en el acto: "Cmo podemos aceptar todo lo que implica el
Sexto Paso? sa sera la perfeccin". sta parece una pregunta difcil, pero
en realidad no lo es. Solamente se puede practicar a la perfeccin el Primer
Paso, en el que hicimos una admisin absoluta de que ramos impotentes
con el alcohol. Los siguientes once Pasos exponen ideales perfectos. Son
metas a las que aspiramos e instrumentos que sirven para medir nuestro
progreso. Visto bajo este aspecto, el Sexto Paso todava resulta difcil pero
de ninguna manera imposible. Lo que urge es empezar y seguir
perseverando.